Disclaimer: El mundo de Harry Potter pertenece a su creadora J. K. Rowling y los derechos comprados. Yo solo los uso por diversión y por que adoro escribir. A excepción de Samantha, la secretaria de Harry (xD olvide su nombre), Albert y Arianna (Si me perteneces Aris jejejeje).
En cursiva son recuerdos.
"entre comillas pensamientos"
Capítulo 14: Sometimes… (Momentos I)
Youtell me you're in
Lovewith me
Like you can't take
Your pretty eyes away
From me
It's not that I don't
Want to stay
But every time you
Come too close I
Move away
La gente pasaba a su lado, se acercó hacia la humeante máquina un "Todos aborden" se escuchó y giró para ver si lo encontraba ahí, sus esperanzas se esfumaron cuando no lo encontró, camino hacia las escaleras.
No creías que iba a dejar que te fueras sin antes despedirme- ella sonrió y giro hacia él. Draco la rodeo con sus brazos y recargo su cabeza en su cuello aspirando su aroma.
Te voy a extrañar-murmuró, Draco la separo un poco de él.
Aún no entiendo porque te vas Sam-le reprochó, ella miro hacia un lado un hombre indicaba que abordarán sino la dejaría.
Lo entenderás cuando regresé- y sin previo aviso unió sus labios a los de él, al principio a él le tomo por sorpresa para luego pasar a rodearla firmemente por la cintura. Samantha se separó -Cuídate Draco- el rubio asintió y sonrió tristemente, la joven subió y se despidió con un ademán.
Draco miro con sus ojos grises como la enorme máquina comenzaba andar, le separaba de lo que él quería. Quería ir con ella, pero sabía y la conocía tan bien que ir con ella sería un error, Samantha siempre guardaba algo y sus ojos reflejaban un dejo de misterio, algo que a él le gustaba.
Una lágrima resbalo por su mejilla y busco su compartimiento dando con el al final del pasillo, entró y cerro la puerta y cortinas, sus maletas ya se encontraban ahí y miró por la ventana. Todo pasaba lentamente, así como su vida lo había sido, tanto para nada, tenía miedo y a la vez se sentía tan segura, se sentía vulnerable y débil pero algo dentro de ella le hacía ser fuerte. Aunque no sabía exactamente que era eso que le hacía sentir así. Un súbito golpeteo en la puerta le hizo tomar su varita, abrió lentamente la cortina para ver a una mujer de aspecto jovial y con uniforme.
Disculpe señorita ¿Desea algo de beber o comer?-preguntó la joven.
Un café-la joven asintió y la dejó de nuevo sola en el compartimiento.
Muchas cosas pasaban por su cabeza, desde la plática con Dumbledore su cabeza ha sido un caos de teorías y de supocisiones, de secretos que no creía que se le revelarían. Exhaló y fijo sus castañas orbes en la ventana, el paisaje lentamente se iluminaba por los rayos de sol que ya comenzaban a bañar la tierra, la joven regresó con el café y le dejo unas galletas que agradeció, después cerro de nuevo el compartimiento, quería estar sola. Dio el primero sorbo a la taza, dejando que el líquido calentará su garganta.
-¿Por que no se lo dijo?-le reprochó mirándolo fijamente.
-No es el momento, lo más importante eres tú-contestó el hombre con esa mirada apacible y con su rostro calmado.
-¿YO¡NO SE QUE QUIERE DECIR¡PORQUE ESTOY AQUI¿PORQUE SU FENIX ME SIGUIO?-
-Quieres bajar y decírmelo de frente-contestó yendo directo al fénix que reposaba sobre una percha dorada. La joven le fulmino y bajó.
-Quiere ser claro-
-Me llamo Albus Dumbledore, toma asiento Samantha-indicó la silla frente a su escritorio.
-Estoy bien así, ahora por que no le dijo a Harry-
-¿Que debía decirle?-preguntó calmadamente mientras regresaba junto al escritorio y se sentaba.
-¿Como que? El contra hechizo, lo que debe hacer... -la joven iba a explotar, pero se detuvo al ser interrumpida.
-Dirás lo que tú sabes-la joven iba a protestar de nuevo pero no pudo.
-¿Que?-
-Como supiste que hacer con la señorita Granger, porque te has sentido extrañada desde hace tiempo y necesitabas venir a Londres-puntualizó, la joven le miró y sin pensarlo se sentó frente al hombre.
-Yo no lo sé-
-Ves como eres importante, pero la pregunta aquí Samantha es ¿De que lado quieres estar?-
-¡Soy auror¿Como puede pensar siquiera que voy a dudar?- el hombre le miró seriamente, algo que le intimidó un poco.
-Conocí muchos aurores que se cambiaron de lado, aquí mi pregunta es sobre ti y sobre lo que se avecina-puntualizó.
-Estoy de lado de... -
-Tú madre era impredecible pero nunca dudó de lo que tenía que hacer y eso tú padre lo sabía-
-¿Conoció a mis padres?-preguntó con los ojos brillantes.
-Sí y tú madre fue la que me pidió que hiciera esto, ella sabía lo que tú destino iba a ser, lo tenía trazado-
-No creo en eso del destino-murmuró con la mirada perdida.
-Pues yo creo que sí y lo comprobaste con Harry-
-¿Con Harry?-preguntó mirando de nuevo al hombre.
-Estas aquí para saber como descubrirlo, estas aquí porque tú madre ya lo había visto... ella sabía que algún día tendría que revelarte parte de la verdad, ella quería que estuvieras preparada-
-¿Preparada?-
-La única capaz de leerlo, la única capaz de modificarlo, la heredera del... -
Samantha abrió sus ojos y sonrió con melancolía, la ironía de su vida, todo pasaba tan lento, todas esas palabras arremolinadas en su cabeza y la respuesta en Francia, lejos de la persona que le importaba mucho, aunque lo quisiera sabía que no podían estar juntos.
Que tontería-murmuró para sí mientras llevaba a su boca un pedazo de galleta.
Harry había regresado a San Mungo peor de como se había ido, había pasado la noche en la habitación de Jane y ella dormía placidamente, no le gustaba el hecho de que no recordará nada y lo angustiaba ¿Porque a ella? Se reprochó mentalmente mientras trataba de conciliar el sueño que nunca llegó, se levantó y salió de la habitación encontrando a Luna mirándole.
¿Que vas a hacer James?-
Lo mejor será llevar a Jane a un lugar seguro, mientras encuentro la solución-
Me puedo encargar de eso, mi padre tiene una cabaña, es un lugar seguro porque solo él y yo sabemos su ubicación y puedo... -
Gracias Luna-agregó el moreno mientras despeinaba sus cabellos -¿Quieres algo de tomar?-
Sí, gracias-ambos caminaron hacia la cafetería del lugar, en silencio. Harry sentía las lágrimas abultarse en sus ojos y no pudo reprimir un sollozo, la rubia lo abrazo y este correspondió.
Lo siento... -murmuró.
Tranquilo Harry, llora, no te preocupes-la joven acariciaba la espalda de Harry reconfortándolo y este se abrazaba a ella. Abrazados en el pasillo, Harry sintió que el mundo a sus pies se desmoronaba, no había esperanzas, había perdido a su amiga a la chica que amaba y repentinamente vino a su mente "Samantha".
Soy tan tonto... no sirvo para esto-
No digas tonterías Harry- la joven se separo un poco de él -Estoy segura que muy pronto estaremos riendo de esto y lo recordaremos como un mal recuerdo-
Gracias Luna-el muchacho sonrió y esta le devolvió el gesto.
Para eso soy tu amiga y para eso eres más que el amigo de Ron-Harry asintió y limpio las lágrimas que escurrían por sus mejillas -Lo mejor será trabajar en esto... -
Tienes razón-
Ese día Jane fue dada de alta y Luna había pedido a su padre permiso para llevarla a la cabaña, estaba en perfectas condiciones, todos habían decido llevarla para protegerla y Jane iba de lo más sonriente, parecía como si descubriera el mundo de nuevo, tenía vagos recuerdos que llegaba de pronto a su mente, desconcertando un poco a sus amigos, Ron esa tarde llevaba a la pequeña Melyssa y Remus iba solo con Sirius, la cabaña se escondía entre el bosque, y Harry y Remus no dudaron en poner cuanto hechizo de protección había, el único problema era... ¿Quien la iba a cuidar mientras el asistía al ministerio?.
Remus se encontraba limpiando una de las habitaciones a lado de Harry.
¿Qué te preocupa Harry?-preguntó cuando se acerco a él y este miraba por la ventana.
Remus yo se que puedo cuidar a Hermione, se lo debo... pero ahora que todo esta así no puedo dejar el ministerio-el licántropo asintió y coloco su mano sobre su hombro.
Tal vez si le pido a Belem que la cuide en el día...-
Pero ella trabaja, es el único tiempo en la que puede trabajar, es antes que te vayas al colegio-puntualizó, Remus asintió. Cuando ambos terminaron de limpiar y de asegurarse que no hubiera nada, salieron más intranquilos.
Ya limpie la habitación siguiente y Luna está preparando algo de comer-habló Ron mientras se acercaba a ambos -¿Porque esa cara?-
Es que... -Harry alborotó sus cabellos -¿Crees que Luna pueda cuidar a Hermione mientras trabajo?-Ron sonrió.
Sabes, pensé en eso y tengo la solución-
¿En serio¿Luna se va a quedar?-el pelirrojo negó.
No, alguien viene a cuidarla-sonrió mientras caminaba hacia el comedor.
¿Quien va a venir?-preguntó Remus que había permanecido callado.
Mi hermana-Harry miró a Ron y luego a Remus.
¿Pero Ginny esta en su luna de miel?-
Bueno, verás... mi hermana no estaba en su luna de miel, de hecho ella a decidido vivir allá con su esposo, ya sabes creo que este consiguió un buen empleo y no se negó en venir-
¿Pero cuando fue eso¿Cuando le enviaste una lechuza?- preguntó impaciente el moreno.
Luna le mando ayer a pig y mi hermana respondió a mi madre, aceptando, llega hoy en la noche- cuando ambos hombres llegaron al comedor se encontraron a una Luna sonriente, jugaba con el pequeño Sirius que a su vez hacia reír a la pequeña Melyssa.
¿Donde esta Jane?-preguntó Harry al no encontrar a su amiga.
Esta afuera ¿Quieren de comer?-Harry negó.
Yo sí, y me vas acompañar ¿Verdad Remus?-
Este... -las mejillas de Remus estaban tenuemente teñidas.
Vamos Remus, Luna tiene talento para la cocina-Remus asintió.
Harry salió de la cocina, visualizo a Hermione sentada en el pasto y tocando con suavidad una flor, se acercó lentamente hacia ella.
Hola Jane-la joven le miró y dibujo una sonrisa.
Hola-musitó a la vez que regresaba su mirada hacia la flor que tenía entre sus manos. El muchacho se acercó a ella y se sentó a su lado, un suave viento movía los rizos enmarañados de su amiga y el aroma a canela le impregnaba los pulmones, se recostó en el pasto con los brazos de almohada, la muchacha absorta y maravillada por la flor, no le prestó la mínima atención a Harry, eso le entristeció pero estaba seguro que ella estaría bien hasta que encontrará la solución, estaba seguro que estaba sobre el contrahechizo... que equivocado estaba.
I wanna believe in
Everything that you say
'Cause it sounds
So good
But if you really want
Me, move slow
There's things about
Me, you just have to Know
Dos meses después...
¡Vamos Jane!- le apremió una pelirroja.
Harry escuchó la voz de la joven desde su habitación y salió para encontrar a una Hermione sonriendo y jugueteando con la pelirroja.
Lo siento James, no quisimos- pero él negó y sonrió.
Habían pasado ya dos meses, dos largos meses sin encontrar nada, nada que hiciera alusión a un hechizo tan poderoso como ese, Ginny Weasley era la menor de 6 hermanos y se había ofrecido a cuidar a Hermione en lo que él trabajaba, llevaba dos meses sin movimiento, nada raro, solo las pequeñas notas de Malfoy haciendo hincapié en algunas partes donde se rumoraba había movimientos extraños, aunque para él era extraño trabajar con Malfoy lo que más le pareció extraño fue saber que Samantha esa chica que extrañamente a Harry se le hacía conocida había dejado Londres para volver a Francia, y no había podido tener contacto con ella, como si se la hubiera tragado la tierra.
Esa misma tarde Ginny pidió salir a visitar a su hermano y cuñada y Harry se lo concedió, después de todo era responsabilidad de él cuidar de Jane, la joven se encontraba frente a la chimenea, haría el primer contacto con la antigua Hermione, entró a la habitación tomando un libro.
¿Quieres que te lea algo?-preguntó al regresar y sentarse a su lado.
Me encantaría-contestó con una sonrisa.
Sometimes I run
Sometimes I hide
Sometimes I'm scared of you
Te contaré una historia... se trata de una chica de hermosos ojos marrones, era muy inteligente y conoció a dos amigos... - la joven se recargo en sus piernas y Harry hojeo el libro que sin duda no tenía ninguna historia, inconcientemente acaricio la melena castaña de la joven y ella le miro con un brillo especial, sonrió y continuo con su relato, pero no llego hasta su tercer grado, cuando la joven dormía placidamente, se veía tan angelical, como si nada le pasara, por extraño que le pareciera, se imaginaba el mismo y Hermione así, casados y durmiendo frente al crepitar de las llamas, así era Hermione, le gustaba leer, le gustaba estar tan pendiente de él ¿Porque no se había dado cuenta antes? Pudo haber evitado todo, negó con la cabeza, mientras cargaba a la joven y se adentraba a la recamara, recostándola.
Regresa... Hermione-murmuró casi imperceptible para sus oídos y rozo sus labios con los suyos.
A la mañana siguiente Harry entró a la oficina con la misma cara de siempre, no estaba a gusto hasta conseguir curar a Hermione y lo malo de todo es que por más que investigaba algo todo le resultaba mal, se sentó en la silla y hojeo todos los pergaminos, no dudo en dejarlos aún lado cuando su secretaria entro.
Lo siento Señor Potter, pero lo buscan-
¿Quien?-preguntó tras dejar un pergamino a un lado.
Yo-dijo la voz. Un rubio entro a la oficina y Harry se levanto con la varita en alto -Suelta eso Potter-
¿Que quieres aquí Malfoy?-cuestionó.
¿Que no es obvio¿Tú cerebro no da para más?-Harry le indico a la joven que los dejara.
Creí que te habías largado ya-contesto indiferente al verlo sentar frente a él.
Pues créeme Potter, para mí sería un gusto el no tener que verte la cara y estar aquí, pero MI trabajo es importante, si el tuyo no lo es-
Ve al grano Malfoy-espetó. El platinado sonrió, saco de su túnica unos cuantos pergaminos -¿Que es eso?-
He estado "trabajando" en algunos mortífagos que se están reuniendo en el mundo muggle, siguiendo a alguien...-Harry los tomó y comenzó a hojearlos, quedo impresionado por los datos que contenían.
Eres bueno -contestó resueltamente al terminar de ver el último pergamino. Draco sonrió con ironía.
Claro que lo soy Potter, no por eso trabajo como auror-
Sabes eso es lo que yo me preguntaba cuando te vi hace dos meses con Samantha... y hablando de ella -
Ella regresó a Francia-
Lo sé, lo que no entiendo es ¿Por que?-Draco le miró, había sentido algo extraño en su estomago cuando él había mencionado su nombre tan ¿Dulcemente?
¿Qué sabes de ella Potter?-preguntó bruscamente. Harry frunció ligeramente el ceño.
Pues solo sé que vino después de haber capturado a ese hombre, después nos besamos y… -Harry se detuvo al ver la expresión del rubio.
¿Qué?- preguntó bruscamente.
¿Celoso Malfoy?- Harry sonrió de oreja a oreja.
¡Cállate!-bramó el platinado mientras se ponía en pie.
Vamos Malfoy, no quieres saber el porque de ese beso ¿no te interesa?-preguntó levantándose también. Draco le miró con el odio más puro que pudiera tener, para pasar a asesinarlo con la mirada.
Haz lo que quieras Potter-bramó.
Me ayudo a quitarme de encima a Cho Chang… últimamente ha tenido cierta manía conmigo, pero de ahí no paso nada, solo un simple beso-agregó. Draco no caminó y le pareció extraño.
-A veces quisiera que no fueras así-la joven depositó un rápido beso sobre sus labios.
-Y a veces quisiera que no fueras tan impulsiva-contestó abrazándola dulcemente por la cintura. La joven le rodeó con los brazos el cuello y le miró con una sonrisa.
-Y yo a veces desearía que confiaras en mí-
-Pero lo hago¡Confío en ti!-murmuro acercándose a ella y besándola.
¿Quieres ir a tomar algo?-preguntó para la sorpresa de Harry y de él mismo.
Vamos, conozco un café aquí- Draco asintió mientras ambos hombres salían del lugar.
But all I really want is
To hold you tight
Treat you right, be with
You day and night
Baby all I need is time
Francia…
Sus cabellos castaños se movían con el viento, miraba con intensidad desde el balcón de su departamento las luces de la ciudad, una sonrisa se posó en sus labios al divagar sobre sus recuerdos que seguían tan latentes en su memoria y sobre todo en su corazón.
¿Te vas a resfriar, entra y toma una taza de té?-
¿Por que siempre tiendes arruinar mis momentos Arianna?-preguntó a una joven de cabellos negros y profundos ojos negros. La aludida arqueó una sonrisa en sus labios y acomodó los finos lentes.
Pues porque está fresco y créeme que estar un rato en el balcón puede perjudicarte-agregó mientras servía té en una taza.
Lo extraño… -murmuró mientras se acercaba a la joven.
Es normal, han pasado ya dos meses desde que regresaste y desde que no has encontrada nada ¿Segura que estaba aquí?-pregunto tomando la taza entre sus manos y dándole un sorbo.
Samantha sonrió y asintió. Arianna era su mejor amiga, pesé que era ella dos años más grande que la joven, se había llevado muy bien con ella, la había conocido cuando los habían invitado a ella y Draco para ser tutores para los futuros aurores, ella acepto gustosa, a diferencia de Draco que a regañadientes había accedido. Había sido esa chispa al verla y al saludarla, a veces pensaba que conocer a una persona podría llevar años, pero con Arianna no, parecía conocerla de toda la vida y se llevaban tan bien, Arianna era de esas personas que hablaba con el corazón, en pocas palabras y para disgusto de la misma era demasiado franca con las palabras, ella decía y actuaba de acuerdo a lo que pensaba estaba correcto y pocas veces se había equivocado, por eso cuando llegó de Londres no dudo en mandarle una lechuza para verse.
Si… dos largos meses en que por más que investigo no llegó a donde deseo ¿Lo estaré haciendo bien?-se sentó con desgano frente a la joven.
.Mira Sam, has estado trabajando arduamente, investigando aquí y allá, pero si te dejaron lo que sea que te hayan dejado no crees que debió ser más cercano-
¿A que te refieres?-preguntó con el ceño ligeramente fruncido.
A que tal vez lo que busques esta más cerca de lo que crees… digo he visto que vas de un lado a otro en las bibliotecas mágicas e incluso muggles, le has preguntado a varios magos, me refiero a que si tú tía o padres te dejaron algo ¿No debe estar cercano?-inquirió sonriendo levemente y sorbiendo otro trago de té.
Puede que tengas razón… como no lo vi antes-
Te diré por que… Por que has estado pensando en Draco desde que llegaste, has estado huyendo de leer las cartas que te ha enviado, pero sobre todo… -
Ya entendí, quieres dejar de ser doctora corazón y preocuparte por tu propio corazón-inquirió, la joven cerró sus orbes como la noche y soltó un prolongado suspiro.
Al menos Draco te corresponde… a mi no-murmuró.
Arianna, verás que Albert se dará cuenta de que lo quieres… no quise sonar –la joven abrió los ojos y sonrió.
No te preocupes… yo se que mi lugar no está a su lado y lo aceptó, pero por una vez en tu vida ¿Podrías seguir a tu corazón cuando te hable?-
¿Qué?-
Mira Sam, deja de jugar a que tú y Draco no pueden estar juntos porque es una completa estupidez y no me veas así-bramó la joven –Ambos se aman, lo puedo ver y muchos lo supieron, aún me pregunto porque culpaste a Draco por algo que no tuvo la culpa-la joven le miró con intensidad, Samantha solo agachó la mirada.
¿Puedes dejarme sola un momento?-suplicó con la mirada, la joven asintió.
No te quedes mucho tiempo afuera ¿Esta bien?- Samantha asintió.
Como olvidar aquel día en que su corazón sufrió dos pérdidas… como olvidar algo que día a día le escocía el alma, todo su mundo había sido derrumbado cuando se dejo llevar, cuando su tía, una madre para ella, le alentó a que siguiera sus impulsos. Caminó de nuevo hacia el balcón y ver como la ciudad perdía la luminosidad, la noche comenzaba a caer, se sentó en el piso del lugar.
Aquel día el sol brillaba con esplendor, como si los rayos del Sol le alegrarán cada paso que daba, y es que ella había conseguido lo que soñaba, aquel día se graduaría por fin de la academia de Aurores que a pocos aceptaba, y en una cena de gala les entregarían la insignia y todo lo que con ella llevaba, estaba feliz porque no solo ella lo había conseguido, su amigo y compañero también lo obtuvo.
-¡Muchas felicidades!-sonrió una mujer de piel pálida y ojos negros, cabellos rubios, abrazándola cariñosamente –Tus padres deben estar orgullosos de ti Samy-sonrió la mujer apoyándose en el sofá.
-Sin ti no lo hubiera conseguido tía-contesto con una sonrisa y besándole la mejilla.
-¿Y bien preciosa¿Vas a ir con ese amigo tuyo…¿Draco? A la fiesta-
-No, tía… me quedaré, además prefiero pasar mi velaba contigo… eres la única familia-
-¡Tonterías! Es tu noche y me sentiría mal si te quedaras con una vieja enferma como yo-
-¿Pero?-protesto la joven.
-Nada de pero, ahorita mismo le llamas a ese muchacho y le dices que pase por ti a las 9 ¿Esta bien?-la mujer le sonrió.
-¡Pero no tengo vestido¡Porque no tenía pensado ir!-exclamó la joven.
-Tengo el vestido ideal para ti, yo misma lo arregle para ti… -
-Tía no quiero dejarte… tengo un mal presentimiento-cuestionó la joven acercándose a ella e hincándose a su lado, la mujer le acarició la mejilla.
-Mira Samy, no puedo negar que últimamente me he sentido un poco mal, pero no te preocupes por mí, hoy estoy feliz de que seas por fin una auror y que luches por lo que quieres… estoy muy orgullosa de ti-Samantha le sonrió. La mujer agitó su varita y en un instante una caja de color blanco se posaba sobre sus manos. Samantha vio la caja con admiración y se sorprendió bastante al ver el contenido.
-¡Es precioso!- exclamó al ver la hermosa tela de seda color azul turquesa, con una túnica que hacia juego -¡Pero no puedo aceptarlo!-
-No seas tonta corazón, este vestido fue de tu madre… claro le hice unas pequeños arreglos –le miro y guiño un ojo –Creo que con este vestido te concibieron-
-¡Que!-la joven se sonrojó -¿No tendrá un doble objetivo¿Oh Si?-la risotada de la mujer se escuchó en la sala.
-Bueno Sam, eso dependerá de ti, pero si quieres un consejo, déjate llevar-la joven más roja que de costumbre balbuceo un "gracias" y corrió hacia su cuarto a arreglarse. Tomó el auricular mágico y dígito unos números.
-¿Si?-se escuchó una voz masculina.
-¿Nunca esperas a que suene?-preguntó.
-Bueno es que no quiero hacer esperar ¿Qué sucede?-
-¿Aún sigue en pie ir a la fiesta?-
-¿Quieres ir a la fiesta? Pensé que te quedarías… -
-¿Si ó no?-cuestionó.
-¿A que hora pasó por ti?-la joven sonrió.
-A las 8:45 ¿Esta bien esa hora?-
-Perfecto-
Cortó la comunicación y miró su reloj "6:30" tenía tiempo.
I don't wanna be
So shy
Every time that I'm
Alone I wonder why
Hope that you will wait
For me
You'll see that you're
The only one for me
Samantha dejó sus cabellos castaños y lacios cayendo sobre su espalda, el vestido acentuaba su figura delgada, llevaba un ligero maquillaje y los zapatos eran preciosos.
-¡Sam¡Draco está aquí!-exclamó su tía desde la sala.
Su cuerpo tembló ligeramente a causa de los nervios¿Estaría bonita para él? Tal vez y seguía viéndola como una amiga, como su compañera ¡Por que piensas en eso! Solo diviértete, se cuestionó mientras bajaba las escaleras. Y se detenía frente a la puerta de la sala…
"¿Esta bien señora?"
"O sí Draco… cuida de Samy"
"Lo haré señora"
"La dejo en tus manos, es algo testaruda, pero estoy segura que te quiere mucho ¿Promete nunca alejarte de ella, aunque ella te lo pida?-
Sus ojos se desorbitaron tanto y su mano amortiguo una exclamación.
"Se lo prometo"
Algo se removió en su estomago, porque parecía que sus piernas estaban ancladas, la puerta se abrió dejando ver a Diane.
-Vamos linda, no hagas esperar al galán-le guiño un ojo y Sam asintió con las mejillas encendidas, entró lentamente viendo a Draco de espalda, lucia un traje negro, sus cabellos rubios se encontraba peinados, en pocas palabras se vea precioso, encantador ¿Cuál era ese adjetivo? Sonrió.
-Te ves hermosa- murmuró al acercarse a ella y extenderle una rosa.
-Gracias… tú te ves bien- sonrió y Draco frunció el ceño.
-Gracias… ¿nos vamos?-ella asintió.
El lugar estaba repleto de personas, algunos aurores, otros compañeros que al igual que ellos había pasado pero para diferentes puestos, habían conversado con muchos de los maestros, que en su mayoría los felicitaba por su desempeño y compañerismo, y otros tanto que les explicaban lo que tendría que pasar, buscar mortífagos no era la platica que ella quería escuchar, así que Draco notando eso, se acercó a ella, una hermosa canción parecía sonar.
-¿Quieres bailar?-preguntó acercándose a su oído, ella asintió sintiendo una descarga recorrer su cuerpo.
"It's amazing how you, can speak right to
my heart. Without saying a word, you can light up the dark. Try
as I may, I could never explain, what I hear when
you don't say a thing"
Es asombroso como, le sabes hablar a mi corazón. Sin decir una palabra, puedes iluminar la oscuridad. Por mucho que lo intente, nunca podría explicar, lo que oigo cuando, no dices nada.
La música comenzó lentamente y la pista fue llenada rápidamente de parejas que se abrazaban. Draco la atrajo mas hacia el en un rápido movimiento, lentamente fueron moviéndose al compás de los demás, ella no dudo en recargar su cabeza sobre su pecho y abrazarlo, Draco le rodeo la cintura y recargo su cabeza en su hombro, dio un corto beso que hizo que la joven se estremeciera.
"The smile on your face, lets me know that you need me. There's a truth in your eyes, saying you'll never leave me. The touch of your hand, says you'll catch me, when ever I fall. You say it best, when you say nothing at all."
La
sonrisa de tu cara, me dice que me necesitas. La sinceridad en tus ojos, dice
que nunca me dejarás. El toque de tu mano, me dice que me agarrarás
siempre que me caiga. Dices lo mejor, cuando no dices nada.
-Eres muy bueno bailando-murmuró.
-Tengo una excelente pareja-inquirió mientras se separaban para verse a los ojos.
Ella le sonrió con calidez, con ternura y con aquello que nunca pensó sentir y pudo ver en aquella gris mirada, algo que siempre había estado ahí, algo más fuerte que la simple palabra cariño… el tiempo se detuvo para ellos dos, parecía que flotaban sobre una nube y que solo ellos dos existían en ese instante.
-¿Quieres ir a otro lugar?-preguntó el joven viéndola fijamente.
-Si –
Abrió los ojos castaños al sentir la mirada de "alguien".
¿Si?-preguntó al ver los ojos negros de su amiga.
¿No mencione que no te quedarás mucho tiempo fuera? –La joven se acercó a ella y toco su brazo -¡Dios mío! Estas helada, anda, entra para recuperar calor-Samantha se levanto con desgano.
¿Sabes? Acabas de interrumpir unos de mis recuerdos… -
¿íntimos?-sonrió con picardía.
¡ARIANNA!- exclamó la joven con un color escarlata sobre sus mejillas.
Lo siento… es solo que parecía que estabas sonriendo mucho¿Recordándolo?- la castaña le miró y arqueó una ceja.
Recordando el día de la graduación-soltó con un suspiró.
¡En serio! Entonces si son íntimos… sabes deberías de descansar y comer un poco… no me iré tranquila si te quedas así-la joven negó.
No tengo hambre, solo descansaré un poco, vete tranquila y me saludas a Albert- sonrió al ver la cara de su amiga.
-Celle-ci bien –la joven tomó la túnica del sofá y se la puso – Ne doutez pas en me chercher pour toute chose-
-D'accord- contesto mientras despedía a la joven y cerraba la puerta.
Dejó escapar un largo suspiro y cerró los ojos recargándose en la puerta.
¿Qué estas haciendo Draco?-preguntó al vacío mientras dos lágrimas marcaban un recorrido. "Je t'étonne beaucoup" sonrió mientras pasaba un dedo sobre sus labios.
Londres…
Draco miró la mansión, la noche ya había caído y una triste sonrisa asomaba por sus labios. La platica con Ha… Potter había sido reconfortante, él no tenía con quien hablar y la única persona se encontraba a una distancia considerable, pero le había hecho bien, no supo porque invitó a Potter a tomar un café, un café que se volvió una jarra, una tarde platicando con la persona que más hubiese odiado en su infancia.
Si le hubiesen dicho a la edad de 16 años que terminaría con Harry Potter sentado en un café y hablando de su vida como auror, hubiese reído a carcajadas, mandado maldiciones a los que hubiesen levantado terrible blasfemia… y sin embargo se sentía bien, se sentía de manera extraña y no es que con Potter hubiese lazos de amistad, pero hablar con él que estaba igual o peor que el mismo, por que las mujeres que amaban estaban en contra de esos sentimientos, al menos Samantha se negaría a aceptar que siente algo más por ser su amigo y compañero y está casi seguro que Granger esta enamorada de Harry.
Esbozó una media sonrisa mientras entra por el umbral de su casa, la casa está en penumbras, casi puede escuchar sus pasos y los ruidos de la casa al crujir, se siente completamente solo y a la vez bien. ¿Por qué entonces siente una angustia que le quema el pecho¿Cómo si la joven que quiere estuviera en peligro? El tenía que cumplir la promesa de cuidarla, lo había hecho aquel día.
Regresa pronto Sam… -murmuró mientras se acercaba a la sala y prendía la chimenea. Se sobresaltó al ver un rostro pálido y cabellos negros, que le sonreía.
Buenas noches Draco-saludó con una sonrisa en los labios.
¿Qué quieres aquí?-preguntó con brusquedad tocando su varita.
Creo que me debes una disculpa y un compromiso-sonrió más, mientras se ponía en pie, dejando ver un hermoso vestido negro que marcaba su figura, los cabellos negros caían en cascada sobre sus hombros.
-Je ne te dois rien –respondió con desprecio, mientras se acercaba a tomar una copa de vino.
Me gusta tú Francés, pero creo que debes saber Malfoy que si no cumples con el contrato perderás todos tus bienes, hasta la hermosa mansión… y créeme le hace falta arreglos-la joven se detuvo frente a él y saco un pergamino.
¿Qui est cela? –preguntó al tomar el pergamino.
Tú sentencia… tienes una semana para responder, sino perderás todo-la joven le miro y dio media vuelta.
La joven salió y Draco abrió el documento, la copa cayó al piso rompiendo el silencio de la habitación, sus ojos grises leían cada palabra… no podía ser cierto.
"Matrimonio arreglado"
"Yo Lucius Malfoy doy fe y autorización para que mi hijo Draco Malfoy desposé a la señorita Pansy Parkinson en caso de que la señorita no se casé, deberá ceder una parte de la herencia Parkinson, en caso contrario será mi hijo el que de todos sus bienes en pago a su rechazó"
Draco acarició la firma de su padre y la del señor Parkinson, sintió un nudo tremendo en el estomago. Era imposible ¿Por qué su padre no le habría dicho eso?
Medidas extremas-sonrió mientras arrugaba el pergamino y lo tiraba al fuego –Yo también estoy listo padre… yo también.
Continuara…
Notas del autor:
Mil disculpas, estaba atravesando una etapa en mi vida de no querer volver a escribir, el capítulo 14 ya la mayor parte estaba escrito a decir verdad las primeras 7 hojas ya las tenía, pero me había enredado un poco, pero por fin termine. Espero les guste… por ahí eh adelantado muchas cosas a mis a llegados D sobre cosas que se iba a aclarar, lamento informar que no lo verán hasta el capítulo 16, porque es cuando las cosas comienzan a resolverse.
El capítulo 15 se llama "Darkness" o en su traducción "Oscuridad" tengo las bases del capítulo, pero no lo he empezado, lo comenzará el lunes si Dios quiere para terminarlo más tardar para julio, es que la próxima semana se casa mi hermano y no se si tenga mucha chance de sentarme en el pc y escribir. Solo puedo adelantar que el capítulo 15 es el más oscuro y en el que más de una me va a odiar y querer matar (xDD).
Bueno la canción del inicio es la de Sometimes de la cantante Britney Spears (¬¬ lo sé, no soy fan pero la canción en sí me gusto mucho para tenerla de fondo) y la que esta en negritas es la de When you say nothing at all "Cuando no dices nada" del cantante Ronan Keating (¬).
Muchas gracias por leerme y por dejarme reviews. Que serán contestados del último al primero.
Kuruma Chidori: Hola preciosa me alegra que ya estés de nuevo por acá y que te hayas leído los 12 capítulos de la historia, me agrado la idea del dibujo sobre Samantha y Draco (0), yo te admiro y te quiero mucho porque eres una gran escritora D. Gracias por dejarme todos esos reviews. Te quiere tu Oka Aio.
Mi Sis: Ah ¡ tú alegraste mis días cuando volviste de nuevo : Aio abraza a Belem fuertemente : prepárate porque sales en los siguientes capítulos D y sabes a que me refiero, prometo no lastimarlo mucho (R: ¬¬ mas te vale) pero de que Darkness es mí capítulo favorito, muchas gracias por leer la historia, porque cuando la hice la hice pensando en ti, en pocas palabras esta historia es toda tuya D. Te quiero mucho hermanita del alma.
Dojiz: Primero muchas gracias por dejar review, ya me leía tu historia D y me gusto mucho aunque a veces como que me revolví un poco, pero ya te tengo en mis historias favoritas (u.u no he podido leer el capítulo nuevo, pero espero tener tiempo) y estaré pendiente de tus actualizaciones, sobre la historia, volví a demorar pero fueron por causas mayores, pero trataré de seguir la historia.
Ana María: Para mi es un honor tenerte como lectora y que te guste mi historia (habiendo tantas HHr que están mejores que esta) pero te agradezco que me leas, haber deja te aclaro algo, Sí, Cho es traidora y Pansy es mortífaga, eso lo sabrás exactamente en el capítulo siguiente, y a quien le informan también, habrá una pista que será demasiado notoria de "quien es él" así que espero D leerte en el siguiente capítulo. Muchas gracias por el review. Lo olvide lo de Jane y James lo sabremos en el capítulo 17.
Monik: Mujer no tengo nada que perdonar, sino agradecer que te tomes el tiempo para dejarme un review, en verdad me alegra que te guste mucho mi historia porque a mi me encanta leer las tuyas, Oo ¿Qué te paso en la mano? Espero no fuera nada grave y pues mucha suerte en la recta final D cuando hablamos por el MSN. Cuídate mucho y actualiza (jeje).
Paz: ¡Preciosa! Me postro a tus pies (Oo se nota que no he visto el Rey León xDD). Primero gracias por el review, segundo no te preocupes que espero solucionar eso de los nombres en el capítulo 17, que ya hay reconciliación en el capítulo 18 D. Espero te guste este, que a mi en lo personal Oo me gusto escribirlo.
Arianna: Jeje, primero Gracias. Ahora al review, haber pues si tienes razón con eso del lenguaje corporal ¿Qué te pareció Arianna? Y ese francés… que no me habías dicho que hablabas n-n. Gracias amiga por estar ahí con tus ánimos y palabras y te lo agradezco con esta pequeña participación en mi historia. Que más, bueno pues espero tu review y espero te guste. Ah por cierto, deberías hacerte una cuenta en ff para subir eso lemmon 3 que escribiste.
Atte. Aiosami termina 04 Junio de 2005 a las 10.30 p.m.
Las palabras en cursiva no se si estén bien traducidas ¬¬ pero mi traductor así las marco. Pondré la traducción de cómo aparecieron.
Esta bien.
No dejes de buscarme si me necesitas.
De acuerdo.
Te extraño mucho.
Yo no te debo nada.
¿Qué es eso?
