Capítulo # 6 DE CERCA (Por Sietesoles)

Los ojos como platos, no, como bandejas. La boca como una olla sopera. Sí, todo en su cara le recuerda a la vajilla caribeña que su madre tenía guardada en la sala: grande y escandalosa. Igual que su expresión. No puede creer lo que ve, normalmente reacciona con calma ante situaciones tan extrañas, pero esta vez la larga estadía de Noriko en la cabeza de Yuzo ha hecho efecto, hasta las emociones están alteradas. Se queda parado a una distancia prudente, unos minutos después de la inmovilidad trata de esconderse tras un árbol o poste que cree distinguir a su derecha. En realidad es un señor bastante alto, pero acepta el terrible error usando su confusión como excusa, corre un poco de espaldas para no dejar de ver. Es raro, su hermano casi no responde el abrazo y tiene una cara de sorpresa casi como la suya… como un espejo, pero de lejos. Encuentra un auto parqueado en posición estratégica, se oculta rápido, luego asoma los ojos, después la nariz y finalmente toda la cabeza.

"Kenta de porquería… cómo no contarme estas cosas, si soy su hermano" – en realidad no sabe por qué está tan asombrado, incluso molesto – "no lo entiendo, está más loco que papá de joven… me enferma ver a Noriko ahí, con él… pero eso sí, celoso no estoy, de eso estoy seguro" – trata de convencerse de no sentir lo insentible, Noriko ya está con su hermano.

Kenta por fin decide actuar y hacer algo con la chica que llora apoyada en él. Levanta los brazos un poco torpemente y rodea a Noriko con ellos, no sabe qué decir. Yuzo ve la escena desde su refugio, se siente más indignado sin saber por qué, igual, es la vida de su hermano y hasta él mismo tiene cosas que no le dice (una vez se prestó los guantes de Wakabayashi porque ¡Oh, pecado! olvidó los suyos), se ordena a sí mismo guardar la compostura, recoge su mochila y se va, dando una vuelta gigante a la plaza para usar la calle de emergencia hacia su casa. Noriko, muy cómoda en el pecho del guitarrista, de repente despierta al sentirse rodeada de Kenta y acordarse de que está en una vía pública, se separa bruscamente de él y lo mira extrañada.

¡Morisaki! No quiere decir que te aproveches de la situación – sabe que miente, en realidad, lo que quiere decir con eso es que se aproveche todo lo que quiera (en abrazos).

¡Ishikawa! – la mira dulcemente – sabes que no haría eso – le acaricia la cabeza un poco, la vuelve a abrazar sin importar lo que su distante amiga piense, sabe que está mal y que es lo mejor que puede hacer, su mamá usó la abrazoterapia años con ellos, en especial con Yuzo y cada gol.

Noriko se rinde y devuelve el abrazo un ratito nada más, no vaya a ser que se note. Se separan y se apoyan los dos en la banca, sin decir nada o intentar hacerlo, saben que son amigos y no hay nada por aclarar. Ella sigue sin saber qué hacer con el imbécil que tiene por padre pero se siente un millón de veces mejor… hay que saber aprovechar las cosas, especialmente si vienen de una manera tan casual. Al final deciden no decir más. Se paran, Noriko agradece en silencio, y se van.

¡Morisaki! – se escucha la voz de Noriko un poco lejos ya.

¿Qué quieres, Ishikawa!

¡Si me entero que alguien más sabe de esto juro que te mato!

¡Nos vemos mañana! – Kenta sonríe por el comentario de su amiga, realmente nunca va a cambiar.

Noriko va a su casa caminando lento y un poco más relajada que hace una hora, el abrazo le había sacado, no sabe cómo, un porcentaje bastante alto de preocupaciones … Kenta es muy buen amigo, y lo que siente por él no está tan injustificado, pero no se puede permitir un desliz como este nunca más, porque si alguien se da cuenta, su fría y calculadora reputación se irá al diablo… no quiere ser una adolescente atolondrada más, pero le cuesta mantener el papel de insensible. Otra vez a casa, otra vez a su madre. Camina mirando al frente, pero cree ver a Morisaki por una de las calles pequeñas que rodean la plaza… ¿Kenta se fue por ahí? Se detiene y trata de ver más el chico que camina… no es Kenta, el peinado es muy serio para él…

"Es Yuzo, el tímido…" – levanta los hombros en señal de desinterés, sigue caminando unos pasos – "pero… si él recién se va y yo acabo de dejar a su hermano¿habrá visto algo?" – Se mortifica todo el camino a su casa, seguro va a ser motivo de burla por meses… ojalá que el hermano de Morisaki no diga nada… Llega a su casa, gira lentamente la llave, en realidad no quiere entrar.

Ma, ya llegué…

Qué bien, hija.

Los diálogos con su madre se limitan a frases cortas y monosílabos, sigue enojada y no quiere tener que depender de ella para nada, sabe que le va a fallar. Va a la cocina, busca algo de comer, encuentra una bolsa de papas fritas un poco sospechosas, las alza y va hacia su cuarto a leer un poco. Al pasar por la sala, ve en el teléfono brillar una extraña pero conocida luz roja intermitente… se acerca, alguien ha dejado un mensaje para ellas, qué raro¿Será que llamó Kenta? Aprieta emocionada el botón para escuchar, pero una voz dolorosamente familiar resuena en la casa.

Hola Noriko, te habla tu padre. Llamé y nadie contestó, supongo que ninguna de las dos está en casa… pero bueno. Hoy llego, voy a visitar una de las escuelas, el Nankatsu, me gustaría que nos encontremos ahí para charlar… voy en una hora, puedes acompañarme en la visita o verme después, supongo que será corta. Te espero, hija, no me falles, quiero verte. Adiós.

"Pobre desgraciado… piensa que voy a ir… infeliz…" – borra el mensaje con rabia, vuelve a caminar – "pero quiero ver qué tan gordo está el idiota… ¿seguirá igual?" – empieza a tramar un plan-espía para ir sin ser vista, se muere de curiosidad. Llega a su cuarto y se bota a la cama, en la cabeza tiene un montón de ideas, pero el recuerdo del abrazo opaca a todas. Tiene que dejar de pensar. Come unas cuantas papas fritas, piensa un poco más y decide ir.

"Creo que es la escuela del hermano Morisaki ñoño… tendré que ser muchísimo más cautelosa…" – ve el reloj, alza un libro de la mesita de noche, se pone a leer y al poco rato se queda dormida, sabe que tiene un poco de tiempo para descansar. Hasta que empieza a soñar con papas fritas bailarinas, Kenta se queda dando vueltas en su cabeza…

A unas cuadras de la casa de Noriko se ve primero un gemelo furioso pasar. Minutos después pasa el par sonriendo y hablando consigo mismo, aunque con un gesto de preocupación. Su madre los ve desde el mini-vivero que tiene en el balcón que da al este¿qué hizo para tener dos hijos tan diferentes? Por fin se escucha un portazo y unos pasos apresurados.

¡Mamá ya llegué! – se escucha por toda la casa, la señora Morisaki reconoce a Yuzo porque Kenta le dice "mami" al llegar.

¿Cómo te fue ho…- otro portazo – "seguro le metieron más de dos goles en la práctica… hijo querido… no sé cómo decirte que la cerámica sería mejor para ti, tienes unas manos tan artísticas y el fútbol te las está volviendo tan… tan duras… hay que hacerte dar cuenta de esto y no sé cómo" – la pobre sufre cada vez que siente que a su hijo le fue mal.

Nobuko vuelve a sus plantas, le encanta pensar que respira oxígeno purificado en su rincón. Se escucha la puerta otra vez.

¡Mami¡Ya lleguéééééé! – canturrea un poco Kenta - ¿mi hermano llegó?

Está encerrado – dice saliendo de su ecosistema personal – creo que está un poco enojado…

Beh… cosas del fútbol… voy a molestarlo un poco.

Sube las gradas de tres en tres, como siempre, y corre hasta el cuarto de su hermano, haciendo bulla para alertarlo. Abre la puerta, extrañamente su hermano no responde esta vez a su escándalo con un almohadazo o algo, lo encuentra sentado en su cama, pensativo.

Yuzín¿qué haces?

Estoy tejiendo, Kenta – responde sarcásticamente.

Te traigo más lana entonces, se acerca el invierno – Kenta se acerca para molestarlo, Yuzo no se mueve. Se sienta a su lado y no obtiene respuesta alguna. Moja su dedo con la punta de su lengua y lo mete en la oreja de Yuzo, sólo consigue ganar una mirada furibunda.

Ya… ¿qué pasa Yuzo? Nunca te pones así conmigo.

Tal vez si… si supieras… no, nada, mejor dejame solo, no quiero pelear contigo.

Kenta entiende que su hermano está muy enojado, mejor darle su espacio y volver después, total, Yuzo no se puede escapar de él, viven en la misma casa. Se para, va hacia la puerta y va a tocar guitarra, para descansar.

Riiiiiiiiiiiiiing…

Nadie se mueve en la casa Morisaki.

Riiiiiiiiiiiiiing…

¡Contesten el teléfono! – Nobuko está haciendo un intento de RCP botánico a una planta que encontró seca en un rincón - ¡estoy muy ocupada ahora!

Riiiiiiiiiiiiiing…

¡YUZOOOOOO! Estás más cerca del teléfono! – Kenta le grita desde su cama.

¡No voy a contestar!

Riiiiiiiiiiiiiing…

Kenta deja su cama muy enojado, a veces Yuzo se pasa de flojo… corre hasta el teléfono, contesta y se enoja más, porque es para su hermano.

¿Ves Yuzo¡Te dije que contestaras, es para ti!

Yuzo baja corriendo, rara vez lo llaman, seguro es algo urgente con el equipo. Su hermano le mira con cara de "¿veeeeeeees? Te diiiiije…" al entregarle el teléfono.

Creo que es tu amigo en drogas…

¡Te va a escuchar! – pone el auricular cerca con toda la vergüenza del mundo…

¿Hola¿Morisaki?

Capitán… hola…

¿Quién es tu amigo en drogas?

Nadie especial… dime¿pasó algo?

Sí, tenemos que reunirnos en una hora, porque los de la Federación van a ir a mostrar la escuela a un dirigente que recién llegó, así que tenemos que estar ahí, como (súper) campeones…

Bueno, Capitán, nos vemos en una hora.

Lleva tu uniforme, tal vez quieran vernos jugar o algo así…

Está bien, creo que tengo uno limpio por ahí. Nos vemos en un rato.

Nos vemos.

Tsubasa y Yuzo cuelgan, cada uno corre a ver qué se va a poner y a calmar un poco los nervios, seguramente este dirigente era especial, para que le hicieran bienvenidas de este tipo…

En otra casa, desordenada y poco prolija, la chica del pelo rojo despierta de golpe una hora después de ir a dormir, tiene en la panza las mismas mariposas que el hermano de su Morisaki tiene ahora, justo cuando el entrenador le dijo que fuera a parar unos tiros de Tsubasa para demostrar el nivel del equipo al dirigente recién llegado. Noriko empieza a vestirse, involuntariamente quiere verse arreglada y bonita, como para que alguien se arrepienta de haberse perdido tantos años de su vida. Se sienta en un intento de tocador que tiene en su cuarto¿y si lo ve y se parece a él? Sale después de arreglarse, trata de exagerar con el look oscuro y metalero que tiene para que su papá reniegue un poco, para que hasta le remuerda un poquito la conciencia al ver que su hijita no es como todas. Pone un toque de guindo oscuro en sus labios, se pone una manilla de cuero con púas y se va. Sale de su casa y avanza despacio, tiene que adivinar dónde es la escuela esa, nunca fue por ahí… le dan ganas de llamar a Morisaki con tan buena excusa, pero cree que es suficiente por un día, se hace un nudo mental en los dedos y se comienza a caminar.

El Morisaki arquero salta como nunca en su territorio, atajando a su amigo, a su compañero y cómplice, tiene que lucir esta vez, tiene que justificar su lugar en el juego, tiene que resaltar como buen jugador y posible prospecto a un equipo en el futuro, porque sí, esto quiere hacer toda su vida, dedicarse al fútbol y sus encantos. El Dirigente nuevo mira moviendo la cabeza, como asintiendo. Se nota que es un dirigente importante en la Federación porque no es sólo un señor de terno se desvive por tratarlo bien… todos escuchan lo que dice, lo apoyan, lo miran con gesto serio y le ofrecen refrescos y alguno que otro aperitivo típico de la zona, no vaya a ser que se vaya de la ciudad sin probar la comida típica. Tsubasa y los demás dan su mejor esfuerzo, ahora no hay compañeros, son jugadores que compiten por la mejor opinión acerca de ellos, esto hace más difícil la cosa a Yuzo, pero da lo mejor de sí.

Noriko camina lento, como para compensar lo rápido que siente latir su corazón. Tiene que adivinar para llegar, porque su orgullo le impidió llamar al chico que le gusta para pedir la dirección del colegio de su hermano, ojalá que no estén, no quiere que el espectáculo que se avecina sea muy público. Escucha gritos, golpes, pitazos.

"Mierda… están jugando… mejor espero un rato".

Camina un poco más, hasta encontrar la dirección, pregunta dónde están los visitantes, le dan una breve y confusa explicación del lugar donde puede buscarlos, tiene que pasar por un patio cercado con una malla para que la gente no reciba pelotazos con mala dirección en las prácticas. En un momento de distracción Morisaki empieza a pensar en el posible parentesco de este tipo "importante" con la casi novia de su hermano (casi porque no es oficial, Kenta no le contó c nadie).

"Ishikawa… Ishikawa…" – el arquero recuerda a su hermano decir su nombre la vez que la vio - "Noriko Ishikawa… por ahí ni se conocen…"

La práctica se pone un poco más lenta, Yuzo pone atención y nota que no sólo uno de sus compañeros voltean a ver a alguien que pasa por el corredor enrejado del costado… una tipa muy rara como para la escuela.

"Estos metaleros se multiplican… habría que poner otra moda, el negro y el rojo del pelo son ridículos " – Yuzo hace un gesto burlón y vuelve a poner atención al juego, como casi todos los que estaban viendo.

¡Chicos! – grita el entrenador - ¡Descansen un poco!

Todos paran de jugar y van a tomar el agua que les ofrecen las asistentes. Sanae mira coquetamente a Tsubasa, que claro, ni se da por aludido, tiene que pensar en las tácticas que va a usar en el segundo tiempo. Yuzo vuelve a ver hacia los dirigentes, la persona extravagante se acercó a ellos, no puede ver bien quién es porque están un poco lejos y porque el maquillaje de la chica le tapa cualquier rasgo natural y original en su cara. Los ojos le vuelven a creces como platos otra vez, va a necesitar algún tipo de cirugía reconstructiva por tantas emociones juntas. La chica se acerca al dirigente con paso decidido y furioso… el dirigente la ve un rato, se lleva la mano a la boca, como para tapar su sorpresa y se abalanza a ella con un abrazo casi asfixiante. Yuzo se acerca a ver la escena… las cosas comienzan a tener sentido para él, no escucha a Ryo que le llama para seguir jugando. Vuelve a tener cara de vajilla de caribe, ahora escucha la voz de Noriko decir al dirigente "Papá".


RCP.- Reanimación Cardio – Pulmonar.

Bueno, hola a todos los que siguen leyendo a este fic. Primero quiero pedir disculpas por la tardanza, pero con el estudio las cosas se retrasan un poquito y aparecen fallutis como yo. Espero que les guste este capítulo, y acuérdense de hacernos llegar sus comentarios. Como siempre, gracias a mi amiga Yun por la paciencia. Un saludo a todos.

Adriana.