Tigresita, me alegra que te gustase, habrá más lemon en el próximo capítulo... jejeje
Buffy, deseo concedido... lo descubrirás en el próximo capítulo. Ya va comenzando un poquito de misterio y de acción.
Majin-Lu, gracias, besitos para tí también, mi fiel lectora, eres un sol de persona, siempre lees todo lo que escribo, ¡hasta en inglés! eres increible.
Camii, si que toy casada, al final me echaron el lazo, pero bueno, no me arrepiento tampoco, salvo cuando hay que hacer tareas del hogar... grrr odio eso. En esas ocasiones, hecho de menos mi época de rompecorazones... tengo una de anécdotas, como para hacer un fic (este no, por si acaso). Lo de 'era mejorable', es tambien mi frase preferida jejeje
Shadir, qué mala, a mi no me hacen falta duchas frías, cojo a mi chico por banda y lo dejo listo jajajajjajajajaaa
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Capítulo 3: Pesadillas.
Habían pasado algunas semanas desde que Goten y Bra acordaron tener esos tórridos encuentros. Ellos se comprometieron mutuamente en que su relación sería púramente 'experimental' , que no existiría entre ellos ningún tipo de compromiso o sentimientos amorosos fuera de una amistad con derecho a roce, y acordaron que podrían y en efecto saldrían con otras personas, manteniendo su secreto bien guardado. Sin embargo, estaban enganchados mutuamente a sus 'juegos', y sentían una necesidad imperante de compartir todo su tiempo libre disfrutando de ellos, de modo, que ni Goten, ni Bra, salían con nadie más, de hecho, no podrían hacerlo sin quitar tiempo a la pequeña dedicación que absorbía todo su tiempo de ocio, y ese era un 'sacrificio' que ninguno de los dos estaba dispuesto a soportar.
Era de noche, hacía apenas un par de horas que se habían despedido, y Bra no podía quitarse de la cabeza las cosas que hicieron. Una sonrisa se dibujó en su rostro, dentro de una semana cumpliría los 19 años y Goten iría a su fiesta. Automáticamente, su cerebro calculó un plan magistral, justo antes de quedarse plácidamente dormida.
En sus sueños...
Bra llevaba un vestido negro largo, pegado a su cuerpo aunque vaporoso en la parte baja y en las mangas de seda negras, despertaba de un sueño profundo, era de noche, había dormido sobre un altar de piedra. La habitación era grande y oscura, alumbrada apenas con algunas velas, pero la falta de luz no era demasiado problema para sus ojos saiyajins. Se levantó aturdida, y sedienta. Aquel lugar era definitivamente tétrico, muros de piedra, humedad, telarañas,... parecía un viejo castillo de peliculas de terror. Bra caminó silenciosamente analizando todo alrededor. Un sonido la distrajo unos segundos, sintió unos ojos que la observaban pero no parecía existir ki en aquella dirección. Bra confió en su sexto sentido a sabiendas de que ella misma poseía tecnología ocultadora de Ki.
- ¿Quién está ahi?. - Gritó mirando hacia todas direcciones con semblante fingidamente calmado.
En su espalda se escuchó un nuevo revuelo. Ella se volvió rápidamente sintiendo apenas algo frío rozándo su hombro, que la hizo estremecerse. Pero al volverse no había nada. Frunció el ceño.
- ¡Será mejor que salgas si no quieres que acabe contigo!. ¡No me gustan estos juegos!. - Gritó nuevamente enojada sin encontrar respuesta alguna.
Unos ojos brillantes relucieron en la oscuridad y ella por algún motivo sintió que debía salir de allí. Corrió por unos pasillos estrechos. Su corazón comenzó a latir potentemente, sonrió al ver una ventana de estilo gótico al final del corredor. La abrió y voló fuera. Un grito se escapó en su garganta cuando una enorme y monstruosa gárgola frenó su huida. Jadeó un instante por el terror repentino y enseguida se compuso haciendo alarde de la sangre fría que como medio saiyajin había heredado. Extendió la palma de su mano y apuntó a la gárgola amenazadoramente.
- Quítate de mi camino. - Advirtió formando una bola de ki en su mano.
La gárgola rió. Bra se estremeció pero se dispuso a atacarla y le lanzó un disparo de ki. En ese instante, sintió el frío en su cuello de nuevo, y unos brazos alrededor de su cintura. Una extraña excitación, algo la paralizaba por completo quedando a merced de un aliento que se mecía en su garganta. Trató de volverse a mirar quién era el que la había atrapado y la sostenía de espaldas a él, pero sus fuerzas se desvanecieron y sus ojos se cerraban luchando en vano por permanecer abiertos, su voluntad se anulaba y su mente era invadida por susurros. Un dolor que momentaneo y luego placer... ese ser la había mordido y estaba bebiendo de ella, controlándola... susurrándole órdenes que ella no quería acatar... Bra trató de luchar interiormente por anular aquel control, la furia, el miedo, todas esas sensaciones afloraban, pero la otra mente la conocía demasiado bien, quien fuera el que estaba tratando de manipularla, conocía cada centímetro de su cerebro, sus pensamientos, miedos, penas, alegrías... Bra sintió como los brazos de extremada fuerza la abrazaban más intensamente y toda resistencia mental era aniquilada lentamente a pesar de sus gritos interiores por liberarse.
Por fin la libró del asimiento y ella se perdió en una mirada de ojos amarillos brillantes. - Si, amo... - Susurró ella en un estado hipnótico.
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- AAAAAAHHH. - Bra despertó hiperventilando. Sus ojos se abrieron y cerraron casi incrédulos cuando vió a su padre zarandeándola para despertarla. - BRA. ¿Qué te pasa?. -
- ¿Eh?. - Bra parecía estar en otro mundo aún, aturdida por la pesadilla y miraba a su padre con extrañeza.
- Estabas murmurando todo el rato no, no, no, no, y gritabas... ¿Qué estabas soñando? -
- Hmp. - Sus ojos parpadearon mirando de modo extraño a su padre.
Vegeta arqueó una ceja. - ¿Qué te pasa? No recuerdas... ¿eh? Bien, entonces... - Vegeta apuntó a la colección de DVD de Bra y los fulminó con un rayo de ki.
- Te advertí que si volvías a tener pesadillas no verías más películas de terror. El resto de la familia tenemos derecho a dormir por las noches. - Realmente se lo había advertido cuando ella tenía 10 años, pero es que él recordaba todo, nadie sabe lo mucho que se puede llegar a odiar a alguien que recuerda cada detalle tonto o negativo del pasado. Aún se había cobrado lo que pasó cuando Bra comenzó a ver películas de terror y tenía cada noche pesadillas, él tenía que arroparla después y pasar con su hija parte de la noche porque le daba miedo todo. La cosa terminó el día que la amenazó con que si volvía a tener pesadillas destruiría su colección de DVDs de terror. Y ahora, después de casi 9 años, había cumplido la amenaza... Eso si que es tener 'palabra de Rey'.
Bra de pronto se levantó de la cama ignorando su presencia y bajó las escaleras. Vegeta la miró intrigado, pero pensó que mejor se iba a la cama.
Justo cuando iba a abrir la puerta de su habitación para volver a dormir, escuchó un ruidoso... CCCCRRRAAAAAASSSSHHHHHHH PUUUUMMMM
Como un rayo bajó a ver qué era aquel estruendo, seguido de Trunks, el cual también se desveló. Bulma siguió durmiendo como un lirón sin darse cuenta de nada. Tenía un sueño tan pesado que podría caérsele la casa encima y aún seguiría durmiendo.
Encontraron a Bra en el jardín, sonriendo ante la mitad de la Cámara de gravedad que aún estaba en pie. La otra mitad era un amasijo de hierros y escombros humeantes. Padre e hijo abrieron los ojos asombrados. Vegeta comenzó a tener una vena inflada en su frente al notar que encima su hija estaba sonriendo.
- Bra... - Susurró helando la sangre a Trunks, quien decidió que mejor hacía una salida comedida de la escena del crimen antes de que alguien decidiera meterlo en el ajo también.
La peliazul pasó por el lado de su hermano y padre como si nada. - Papá espera. - Trunks intervino. - Mira sus ojos. - Vegeta aún rojo cogió a su hija de los hombros y escudriñó en su rostro. - MOCOSA. - Gritó alteradísimo.
Bra sintió como una descarga eléctrica y despertó de su estado sonámbulo. - AHHHHH. - Gritó al ver la cara de su padre tan cerca y tan furiosa. - PAPAAA. ¿QUIERES QUE ME DE UN INFARTO?. - Gritó con una mano en su pecho para calmar los latidos de su corazón.
Oo Trunks la miró extrañado. - Hmm, Bra... deberías mirar atrás. - Señaló poniendose serio.
- Ahhhh. - Jadeó ella viendo el estropicio. - ¿Pero... QUIEN HA HECHO ESTO?. - Gritó indignada.
Vegeta y Trunks se volcaron de espaldas y una imagen de sus piernas se vió aparecer detrás de la cara de asombro y enojo de Bra.
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Unos minutos más tarde en la cocina...
- Yo no he hecho eso. Insisto. -
- Bra, te vimos haciéndolo y hasta sonreías. - Aseguró Trunks muerto de sueño.
- QUE NO. - Gritó ella alterada.
- BRA. - Rugió el príncipe. - Lo creas o no tú provocaste ese estropicio, y tú lo vas a resolver... -
- ¿QUEEEEEEE?. -
- Lo que escuchas... - Vegeta se cruzó de brazos. - Tú repararás la cámara de gravedad, tu madre dice que ya tienes suficientes conocimientos como para hacerlo. -
- Me llevará semaaaaanaaaaaasss poder acondicionarla como estaba... -
- Pues será mejor que empieces lo antes posible... ¿no crees?. - Sonrió Vegeta.
- YO NO HICE ESOOOO, ES INJUSTOO. - Lloró Bra.
- Quizás lo hiciste sonámbula, tenías una mirada muy rara. - Afirmó Trunks.
- ¿YOOOO?. ¿Sonámbula YOOOOO?. -
Bra subió las escaleras hacia su cuarto apesadumbrada. Un nuevo grito se escuchó en toda la casa.
- AHHHHHH. - Vegeta y Trunks acudieron enseguida. - ¡MI COLECCION DE DVDsssssss! - Y miraron el destrozo.
Trunks evitó reirse, su hermana era sonámbula... luego se le puso un brillo azulado en su rostro. Era sonámbula y le daba por romper cosas... ¿y si le daba por colarse en su habitación de noche?. Mejor se fue de allí. Demasiadas emociones por hoy...
Vegeta se hizo el loco y omitió decirle que había sido él quien había destruido los DVDs.
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Al día siguiente... Por teléfono.
- Muchas gracias Gohan, de verdad. - Dijo melosamente Bulma.
- No hay problema, dile que pase por mi consulta esta tarde. Le haré algunas pruebas para determinar qué puede estar ocasionando su sonambulismo. - Respondió con su típica amabilidad.
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Unos minutos más tarde...
- NI HABLAR. ¡No pienso ir a hacerme ningún tipo de pruebas! Todos estais locos de atar... - Bra estaba rabiosa.
- Mmm, cariño... si vas a hacerte esas pruebas... yo me encargaré de reparar la Cámara de gravedad de tu padre. - Los ojos de la chica se abrieron de par en par. Ahora si que empezaba a gustarle la conversación.
- ¿De verdad?. Mamá... ¿de verdad lo harás?. - preguntó ilusionada. - ¿No será una trampa, verdad?. - La miró de reojo.
Bulma rió divertida. - No, cariño, jajajaja, de verdad... sólo tendrás que prometerme que irás a ver a Gohan y que le harás caso en todo lo que te diga. ¿Trato?. -
- Hmmm. Trato... - Justo ir al médico, la cosa que ella más odiaba, hasta se planteó la opción B, que era negarse a ir a la revisión y reparar ella misma la cámara de gravedad con tal de librarse de ello. Pero si hacía eso dejaría de ver a Goten y eso sería dramático. Un momento... ¿desde cuando comenzó a parecerle dramático el hecho de no ver a Goten o cualquier otro chico?. - "Es sólo porque tengo en mente algunas cositas que hacerle...". - Se contestó mentalmente con una sonrisa pícara, alivianando su conciencia del miedo irracional a enamorarse. - "De todos modos, es mejor que salga con algún otro muchacho. No puedo estancarme sólo con Goten, podría acabar por... ". - Bra sacudió su cabeza para evitar terminar su frase... "enamorarme" era una palabra prohibida que Bra no permitiría que existiera en sus neuronas. - "Esta noche saldré con Marcos. Decidido." -
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Esa tarde... en la consulta de Gohan...
Bra estaba tumbada en una camilla bastante nerviosa. Definitivamente odiaba los hospitales, odiaba a los médicos, odiaba las pruebas y los chequeos, le resultaba horrible el olor de los centros sanitarios, tan rancio y tan penetrante. Aborrecía cada centímetro de aquel lugar tan antiséptico... Gohan le miró sonriendo.
- Relájate, estás un poco tensa... jajaja. - Con su pose de mano atrás herencia paterna.
- No, en absoluto... - Fingió Bra mirando para otro lado.
- En ese caso... ¿podrías dejar de retorcer el hierro de la camilla?. - Pidió Gohan un poco avergonzado.
Bra se sonrojó y rió tontamente al darse cuenta.
De pronto Goten interrumpió en la consulta. - Eh, herma... ¿Bra?. -
- Goten... te he dicho mil veces que no debes entrar en la consulta sin avisar primero... ¿es que no sabes llamar a las puertas?. - Pidió avergonzado nuevamente con una mano en su rostro.
Bra maldició mentalmente que Goten la encontrase justamente en aquella situación. - ¿Qué haces aquí?. - Preguntó suavemente a la peliazul ignorando por completo a su hermano. - ¿Estás enferma o algo?. - Su cara denotaba preocupación.
- Por supuesto que no. - Rió ella. - Es sólo una estúpida revisión. -
- Ejem... - Tosió Gohan. - Goten... ¿podrías dejar de interrumpirnos y decirme qué quieres?. -
Goten parpadeó un segundo. - Se me ha olvidado. - rió mirando de reojo a Bra. Realmente verla en aquella camilla le había producido tal turbación, que había olvidado por completo lo que venía a hacer allí.
- Oye Gohan, ¿qué le pasa a Bra?. - Susurró a su hermano, que lo había acompañado a la puerta con una gota de sudor en la frente, procurando que ella no le escuchase.
Gohan se sorprendió por la pregunta. - Sólo le voy a hacer algunas pruebas... no se qué le pasa hasta no tener los resultados... - susurró, y luego se sintió algo estúpido al comprobar la mirada clavada de Bra en ellos dos, con una expresión algo, 'muy mucho' contrariada. - Ejem. Puedes marcharte ¿por favor?. - Goten la miró con una expresión extraña, su cuerpo casi reaccionó para ir hacia ella y abrazarla, pero los ojos de Bra se abrieron de par en par al notar su mirada y él reaccionó.
- Hasta luego Bra. - Seriamente, se dió la vuelta y se marchó de la sala, aún a tiempo de escuchar lo que su hermano decía.
- Bueno, Bra, te voy realizar un encefalograma y... - O.O
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Unos minutos después...
- "¿Qué le pasará?. ¿Estará enferma?. Un encefalograma... eso suena a algo gordo... Ahhssss. Y encima Gohan no me quiso contar nada al respecto...". - Goten se mortificaba y daba vueltas alrededor de su salon bastante nervioso pensando en que algo malo le pasaba a Bra.
Otros minutos después... por teléfono, después de una conversación de 15 minutos y de decir muchas estupideces para dar algunos rodeos...
- Ah, ohh, ahh, por cierto... ¿adivina, hoy vi a tu hermana... - Afirmó Goten ocultando su nerviosismo.
- Si, últimamente está en todas partes... jajjaja. - Rió Trunks. - Oye, y qué, ya no me cuentas nunca nada acerca de tus ligues... -
- Ehmm, yo... ¿sabes? estaba en la consulta de Gohan haciéndose unas pruebas raras... - Siguió preguntando evitando el giro de conversación que había dado Trunks.
- ¿Quién?. -
Goten comenzaba a perder la paciencia. - Tu hermana. -
- Ah, ya... genial... Oye, vamos cuéntame... alguien me ha dicho que... -
- ¿Cómo que genial?. ¿Es que no te interesa la salud de tu propia hermana?. - Gritó indignado.
- Jajaja, Goten, cálmate... - Rió Trunks algo asombrado. - A mi hermana no le pasa nada malo... jajaja. -
- La gente no va al médico por gusto... - siguió enojado.
- Un pajarito me ha contado que llevas varias semanas siendo todo un angelito... - Trunks volvió a cambiar la conversación con un tono algo pillo.
- ¿Qué?. - O.O
- Si, si... alguien me contó que te vas del trabajo a tu casa... y de tu casa al trabajo y que ya no frecuentas tus 'lugares'... ¿es verdad eso?. ¿Acaso alguna ha logrado cazar al gran conquistador?. -
- Ehhh, Trunks, ah, oh, eh, ohhh, parece que me están llamando por la otra línea, nos vemos... -
Goten colgó el teléfono rápidamente. ¿Qué estaba haciendo?. Era una locura... Él era capaz de esperar una hora más y llamar a Bra para preguntarle directamente. No es como si se fuera a morir, ¿no?. Los encefalogramas se hacen a la gente diariamente... ¿no?... Ayysssss - Bra... -
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Algunas horas más tarde... por teléfono...
- Por fín coges el teléfono. - Goten sonaba molesto.
Bra arqueó una ceja. - ¿Qué rayos te pasa?. -
- Eh.. oh.. "¿Qué me pasa?" Bra... ¿estás enferma?. -
- Ya te dije que noooo... - Contestó ella con fastidio. - Son sólo unas pruebas idiotas, sólo eso, mi madre se empeñó en que me las hiciera. -
- Ya... claro... - Por alguna razón Goten no se terminaba de creer el asunto. Aquellas no eran pruebas rutinarias... Pero ya averiguaría, le iba a sonsacar la información de un modo muy sexy e irresistible. - ¿A qué hora nos veremos esta noche?. - Ronroneó como un gatito.
- Eh... oh... "¿Qué me pasa?" Goten... Lo siento pero esta noche tengo una cita con un amigo... -
- ¿QUEEEEE?. ¿QUÉ AMIGO?. - Gritó celoso.
- GOTEN, eso no es de tu incumbencia. Tenemos un trato y espero que lo respetemos. - Ahora ella estaba indignada.
- Bien... como quieras... -
- Bien... adios. - Bra colgó el teléfono.
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Esa noche... en un restaurante... Bra iba a compañada por un joven de cabellos negros y ojos oscuros, pelo largo y cuerpo atlético. Marcos. Todo un bombóm de hombre. Y adivinen... ¿quién estaba acechando en unos matorrales justo en la puerta del restaurante?
GOTEN.
El próximo capítulo contendrá mucho humor y un buen lemon.
¿Que serán esos extraños sueños?. ¿Bra se ha vuelto de verdad sonámbula?. ¿Alguien se apiadará de Goten y le dirá que Bra no se va a morir ni nada por el estilo?. ¿Quién es el pajarito que informa a Trunks de la vida amorosa de su amigo?. ¿Descubrirá Trunks el pequeño secreto de su hermana?. ¿Qué piensa Vegeta del supuesto sonambulismo de su hija?. ¿Qué pasará durante la cena?. Esperen al próximo capítulo de... Susurros del alma.