"Lento Sangrar"

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Se / Lu


Nada paso...

Solo el tiempo lento pronto entre tu y yo

solo acabo lo que siempre supe que nunca existió

y aunque yo no estaba sola

si me hundía en mi soledad

es por eso que de un día a otro te creí amar

que no viste mas allá de tu verdad en mi verdad

hoy te doy mi realidad y tu te escondes sin hablar

-Miren...

-¿Quién es?

-No lo sé, nunca la había visto...

Una hermosa y esbelta mujer se deslizaba con garbo y delicadeza por los pulcros pasillos del hospital San Mungo, el personal de tan respetable institución desconocía por completo la identidad de la joven que se paseaba de un lado a otro con tal seguridad...

-Disculpe...-una enfermera le dio unas palmaditas en el brazo y se aventuró a preguntar-¿Usted es una nueva empleada?

-¿No me reconoces Marie?

-No, en realidad no.

-Soy yo, Hermione...la doctora Hermione Granger...

-Pero...no puede ser ¡Dra. Granger! - exclamó sorprendida la joven enfermera - No la reconocí...bueno, nadie la reconoce...

-¿En serio? - preguntó incrédula.

-Pero si sólo cambié mi vestuario y me maquillé un poco, eso es todo...

-Pues permítame decirle que se ve muy bien.

-Muchas gracias Marie; ahora que ya hice mi ronda, quisiera pedirte que llamaras a Ginny Weasley y le dijeras que deseo verla en los cuneros, quiero hablar con ella...

-Desde luego. -dijo de forma eficaz - ah, y permítame reiterarle que se ve estupenda.

-Gracias. - dijo Hermione de forma sincera con una hermosa sonrisa.

Marie fue en busca de Ginny y como no la encontraba decidió recorrer todo el edificio, y desde luego, por dondequiera que iba esparcía la noticia de que la hermosa mujer que todos habían visto era la Dra. Granger.

Esto causó controversia, y ¿porqué no decirlo? Mucho interés por parte del personal masculino del hospital...

-Hermione.

-Draco...¿Qué haces aquí?

-Que recibimiento... - dijo de forma sarcástica.

-Lo siento, es que me sorprendí, como esta no es tu zona...

-Lo sé, pero te vi y quería comprobar que te estaba yendo bien con tu nueva imagen.

-Y vaya que me va bien, tan sólo hoy ya he concretado 3 citas... - murmuró la castaña de manera orgullosa.

El rubio frunció el ceño, pero logró aparentar - ¿Ah, sí? Sabía que esto resultaría...

-Es increíble lo que un poco de maquillaje y ropa puede lograr...

-¿Y qué me dices de esos zapatos? - dijo Draco señalando unas encantadoras zapatillas con tacón de "aguja"

Hermione hizo un gesto indescifrable con el rostro, pero finalmente sonrió y asintiendo dijo:

-Maravillosos...

-Pero aún falta mucho por hacer, tus modales, tu cabello...

-De eso hablamos luego...-dijo intentando evadir el tema.

Pero el sonido de unos pasos interrumpió su conversación...

-Herm...¿me buscabas? - preguntó Ginny al llegar con la castaña, mientras hacía una mueca con la boca al ver a Draco.

-Sí Ginny...-Hermione volteó a ver al rubio y con la mirada le pidió que se retirara.

-Con su permiso señoritas...-Draco hizo una ligera y fina reverencia y dio la vuelta. - Fue un gusto verte Ginny, espero que nos podamos reunir después...

Hermione quien seguía abstraída en su mundo "despertó" al oír al rubio decirle esto a la pelirroja, y sin saber porqué sintió unas enormes ganas de...

Que...

(Te escondes) que es lo que hay en tu cabeza ya no se

(te escondes) ya no se ni que pensar y se que

nunca entrare en tu corazón

no se si logre acercarme y me apartaste con tu muro, ya...

-Ginny¡concéntrate...! - exclamó Hermione de forma dura.

-Lo siento Herm¡digo...Dra. Granger! - corrigió al ver la fría mirada de su amiga.

-Bien, para lo que te llamé es para asignarte un nuevo sector...

-¿Cómo?

-Lo que te dije, seguirás a mi cargo, pero te asignaré un nuevo sector.

-¿Hice algo mal? - preguntó la pelirroja preocupada.

-En realidad si, la zona de encantamientos no es lo tuyo, no se en que pensé al ponerte allí, no quise decírtelo, pero tus errores le costaron muchas horas extra a varias personas de limpieza...

-Lo siento...

-Olvídalo, pero ahora quiero que te encargues del área de cuneros, por eso te traje aquí.

-Me encantan los niños... - dijo ella recuperando su habitual alegría.

-Me alegra, porque ahora pasarás mucho tiempo aquí...

-¿De cuánto tiempo estamos hablando?

- Unas cuantas horas más...

-Pero, yo no dispongo de ese tiempo...

-Ginny, haz terminado tus estudios y éste es tu único empleo¿qué otra ocupación puedes tener? - preguntó Hermione por demás intencionada.

-Pues Harry, como tu sabes el y yo...estamos saliendo...

-Estoy segura que él entenderá.

-Sí, pero...

-No hay peros que valgan, desde ahora trabajarás aquí, toma. - Hermione sacó una hoja de su carpeta y se la dio a Ginny - este será tu horario y tus obligaciones.

La pelirroja la ojeó.

-Creí que sería la encargada...

-Si, la encargada de la limpieza de esta zona...

-Pero Herm...digo doctora...¿Porqué?

-Ginny, lo siento, pero debes comprender que no por ser mi amiga te daré un trato especial...

-Lo entiendo, no te preocupes... - dijo ella algo deprimida.

-Empezarás el Lunes, así que avísale a Harry...

Se lo que hay detrás de ese triste y loco corazón

mascaras que..cubren y protegen todo tu dolor

y se que amaras y te amaran y nunca mas tendrás

que esconder esa ternura que te llene mucho mas

y aunque seamos nuevamente extraños tu felicidad

conmigo o sin mi me basta y esta es una canción mas..

Durante todas sus rondas Hermione no pudo quitar de su cabeza la triste imagen de Ginny.

-"¿Porqué hice eso?" - se preguntaba - "Yo pensaba darle otra oportunidad, pero el verla cerca de Draco me exaltó, jamás quise tomar ventaja de la situación..."

Siguió dándole vueltas durante todo el día.

-Doctora...Doctora Herm... - la dulce voz de una niña interrumpió sus meditaciones.

-¿Qué pasa linda?

-Me duele el estómago...

-Es normal, acaban de desembrujarte y por lo visto no has comido nada ¿cierto? - preguntó ella con una sonrisa.

La niña asintió.

-¿Qué te parece si te traigo un gran pedazo de pastel?

La niña asintió de nuevo, pero esta vez sonriendo.

-¿Crees que ese es un alimento nutritivo? - preguntó una voz a sus espaldas.

-Draco...creí que ya te habías ido...

-Pensaba acompañarte.

-¿En serio?

-Recuerda que a partir de ahora tengo ciertas responsabilidades...

-¿Responsabilidades¿Sólo eso soy?

-No, no lo digo por eso... - intentó corregir Draco.

-Doctora...¿si va a ir por mi pastel?

-Claro preciosa... - dijo ella con ternura. - En un momento vuelvo.

Hermione se dirigió a la cocina con Draco detrás de ella.

-Hermione...

-No te preocupes, te entiendo...

-No...Déjame explicarte...

-¿Has visto a Ginny? - preguntó de improvisto cambiando el tema.

-Si, me la encontré hace unos minutos.

-¿Te comentó algo?

-Si, me contó todo sobre el regaño y la nueva labor que le asignaste.

-Me siento algo mal, fui muy dura con ella...

-¿Y eso te molesta?

-No del todo, lo que me preocupa es que...lo disfrute.

Draco hizo una mueca de burla.

-Lo sabía, Hermione Jane Granger tiene un lado oscuro...

Que...

(Te escondes) que es lo que hay en tu cabeza ya no se

(te escondes) ya no se ni que pensar y se que

nunca entrare en tu corazón

no se si logre acercarme y me apartaste con tu muro

-No es cierto...

-Si lo es.

-No lo es.

-Que si lo es.

-¿Porqué pelean? - preguntó la niña preocupada al ver que los doctores regresaban discutiendo.

-Por nada nena, aquí tienes tu pastel.

-Ya no quiero.

-¿Qué?

-Tengo sueño, ya no me duele el estómago...

-Bien, entonces te contaré una historia...

-¡Yupie! - la niña se puso feliz y de inmediato volvió a la cama.

-Había una vez...

La historia no duró demasiado; 10 minutos después de que comenzara a contarla, tanto Hermione como la pequeña cayeron rendidas.

Draco que observaba todo desde el quicio de la puerta caminó hasta el sillón donde se encontraba Hermione y la miró por unos momentos, como analizando su rostro...

-"Facciones delicadas...bellas...cejas finas, pestañas largas, nariz perfilada...labios rosados..." - se acercó y deslizó uno de sus dedos por la boca de Hermione. - "Suaves..."

-"¿Dulces?" - se preguntó.

El rubio acercó poco a poco su rostro al de Hermione y sus alientos se cruzaron...

-Mmm...¿Draco? - preguntó la chica despertando de improviso, pero aún algo adormilada.- ¿Qué haces? - dijo confundida al ver al rubio tan cerca de ella.

-Nada, es que ya es muy tarde... - dijo intentando tranquilizar su corazón que por poco se le salió del pecho al ver a que la castaña despertaba.

-Es cierto...- se levantó, vio a la niña y murmuró un tenue "Vamonos"

El camino a casa fue silencioso y un poco pesado, sobre todo para Hermione que intentaba mantener sus ojos abiertos a toda costa.

-Trabajas demasiado...

-No, no tanto...-un bostezo se escapó de sus labios.

-Si...se supone que debías salir hace 3 horas y aún así sigues deambulando por los pasillos...

-Supongo que el trabajo me distrae... - murmuró Hermione sin pensar en lo que decía.

-Deberías buscar otras "distracciones..."

-Toda la semana las tendré... - susurró sonriendo.

De pronto Draco recordó que Hermione tenía 3 citas y no pudo evitar detener el auto bruscamente frente a la casa de la castaña.

-Calma, veo que manejar este auto no es tu especialidad... - dijo recordando como la llevó Draco al trabajo días antes.

-No es el auto.

-Esta bien, no te alteres... - y sin decir más abrió la puerta.

Draco miró a Hermione y abrió y cerró la boca rápidamente como si estuviera a punto de decir algo pero se hubiera arrepentido, ella no dijo más, dio la vuelta camino hacia la entrada del edificio.

En ese instante el rubio notó como la castaña hacía lo posible para no cojear…

-¡Oye!

-¿Qué pasa? – dijo ella un tanto fastidiada

-Tus zapatos…

-¿Qué pasa?

-¿Te lastiman cierto?

-¿Cómo lo sabes?

-1: Estás cojeando y 2:noté las rozaduras que tienes en el tobillo… - dijo mostrándole como uno de sus pies estaba lacerado.

-No lo noté… - dijo ella con indiferencia.

-¡Claro que lo notaste! – gritó algo molesto, más consigo mismo que con ella - ¿Porqué no me lo dijiste?

-Pensé que no era necesario. – dijo ella encogiendo los hombros. – No son graves estas heridas.

-No, pero me lo hubieras dicho, está decidido, a partir de ahora volverás a usar calzado cómodo.

-¿Y "mi imagen"? – preguntó ella mofándose de las palabras de Draco.

-Muy graciosa Hermione, no me provoques…-dijo como amenazándola- ¿Puedes caminar hasta la entrada?

-Claro. – y acto seguido se quitó los zapatos - ¿Ves? – y así con una sonrisa y los zapatos en la mano, se dio la vuelta siguiendo su trayecto.

-¡Ah, Granger, digo Hermione… – corrigió deteniendo a la castaña de nuevo, justo a la mitad del camino hacia la puerta - cuando vayas a tus citas quiero que te cuides, no olvides que los hombres no se detienen hasta obtener lo que quieren…

-¿Lo dices por experiencia propia? – preguntó arqueando una ceja.

-Sólo hazme caso... - murmuró entre dientes.

-Si, no te preocupes... - masculló al salir del auto, no sin antes tambalearse hasta la entrada, debido al cansancio que tenía.

Ya...(te escondes)

ya me basta es suficiente y creo que

(te escondes) creo que empiezo a comprender por fin que

nunca te podré odiar ni amar

y no es que yo así lo quise pero así tiene que ser

y ahora lo se...

El rubio llegó a su departamento con no menos cansancio del que tenía Hermione, se recostó en la cama mirando al techo; se quedó así unos minutos, pensando en la castaña, recordando el momento en que estuvo a punto de besarla.

-¿Qué me esta pasando? - se preguntó revolviendo sus cabellos con impaciencia.

Omitió decirle a Hermione que durante su encuentro con Ginny habían acordado una cita para arreglar sus asuntos pendientes.

-"¿Porqué no se lo dije, no es como si ella y yo tuviéramos una relación verdadera o algo así..."

Luego recordó el tambaleo de la castaña al dirigirse a su casa.

-¿Habrá llegado bien? - se preguntó con más preocupación de la que un Malfoy podía permitirse.

Su subconsciente le dijo que se calmara, pero algo en él le evitaba relajarse, así que se levantó de pronto, tomo su saco y todas las llaves que tenía a la mano, y se fue lo más rápido posible...

Al mismo tiempo en el departamento de Hermione:

-Al fin en casa...

Miro a su alrededor y se sintió un poco deprimida al ver la soledad en la que se encontraba, meses antes la recibía al menos su gato, pero había decidido dejarlo en casa de sus padres, pues siendo medímaga tener un gato mascota podía interferir en sus pociones y hechizos (N/A: Ya saben, por lo de los pelos de gato...), así que ahora se sentía más sola que nunca.

El cansancio seguía presente, pero antes que nada necesitaba un relajante baño para poder dormir tranquila, abrió la llave, le puso hierbas aromáticas y se desnudó...

Una vez en la tina se dedicó por completo a sus meditaciones y preocupaciones, pero estas pronto desaparecieron al paso de los minutos, prendió el radio, pero como ninguna melodía la convenció, lo apagó y empezó a canturrear la letra de una que ella apenas escuchó días antes...

Draco abrió la puerta con suma delicadeza con la copia que Hermione le había dado, pensaba que encontraría a la castaña profundamente dormida, pero se llevó una gran sorpresa al encontrarse con una melodiosa voz cantando...

¡Grita, grita fuerte

que me quieres!

que se pierda dentro de mi voz

siente para siempre

tu me tienes

y contigo llevas mi pasión ...

De alguna forma esa canción movió algo en Draco, el oír a Hermione cantar, y peor aún el verla saliendo sólo con una toalla cubriendo su cuerpo, y con su melena cayendo sobre su espalda, como una cascada..., y ella cantando, aún sin darse cuenta de su presencia...

Si me quieres amar ven acá y dime la verdad

y mírame, solo ámame

cada día me invita la vida a enamorarme más

a rescatar mi sed de amar

si te vas no podrás nunca más encontrarme y ya verás

me extrañaras y volverás

cada vez en tu piel siento que necesitas más y más

acércate y atrévete ...

Esa embriagante canción, esa melodía que lo incitaba, que parecía decirle justo lo que debía hacer...

Hermione levantó la vista como por instinto...

-¡Draco¿qué haces aquí! - gritó intentando cubrirse más al verlo.

Sin dar explicaciones, sin siquiera pensarlo, el rubio se acercó, la miró penetrantemente, la tomó por los suaves y desnudos hombros, con un dejo de brusquedad la atrajo hacia sí, y sin darle tiempo a reaccionar unió, mejor dicho fusionó sus labios con los de ella...

Continuará . . .


NOTAS DE LA AUTORA:

¡Hola preciosos y preciosas! Jajaja¿cómo me oí¿qué les pareció el capítulo? Espero que les haya gustado, tenía mis dudas, pero creo que es tiempo que la relación se profundice un poco más (Ojo: Sólo un poco, aún no quiero apresurarme demasiado), por cierto, les quiero agradecer muchísimo por la paciencia que tienen, se que una vez por semana les parece poco, pero piénsenlo así: Hay autores que actualizan 1 vez al mes, quizá hasta menos, así que veanlo por el lado amable ¿sí? ;D

Por otro lado, me alegro mucho por recibir sus preciosísimos REVIEWS ¡Soy feliz, y finalmente he decidido que para complacer a todos, y no romper las reglas, contestaré los REVIEWS en la siguiente página:

http / mx. geocities. com / aime (guión bajo)cristel / Reviews . html

Sólo quítenle los espacios

Espero que les parezca bien la solución ;D

Atte. Aimé

P.D.

¡Espero sus comentarios:D

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