Caoítulo 17

Bajó del avión sintiendo cómo el aroma a tranquilidad lo invadía lentamente...casi como un líquido introduciéndose por su garganta...Esa...la ciudad en la cual había pasado 17 años de su vida...si en algún momento aquello había tenido sabor a paz ya no lo recordaba...ya no era capaz de reconocer ese sabor por ningún lado.

El viento empujó con fuerza su abrigo silbando sutilmente entre sus oídos...materializando los pensamientos que no quería salieran a flote...

A qué has venido Shaka?...piensas hacerle honor a los viejos tiempos?...él estará más que dispuesto a acompañarte en tamaño emprendimiento...

Un impulso...sólo podía decir que algo se había apoderado de él en ese instante...Un presentimiento que enflaquecía toda resistencia invitándolo a dejarse llevar por el instinto infalible de aquel que ya ha experimentado situaciones fatídicas...

Qué otra razón podía encontrar a tal inusual mensaje...y la voz...el tono de preocupación cuando habían hablado tiempo después...

Debes venir...es importante...debes venir Shaka...

La salida del aeropuerto fue tan caótica pero rayaba la normalidad de tal manera que su costumbre le había enseñado a adecuarse a ese tipo de situaciones...dejándose arrastrar por la marea de gente que caminaba apresurada hacia la salida.

Buscó en un bolsillo el papel arrugado sobre el cual había escrito la dirección...a penas un garabato de números y letras que con gran esfuerzo se diferenciaban de las manchas de tinta que decoraban las partes no utilizadas.

Con que..se había mudado nuevamente...o mejor dicho había regresado al lugar del que había huido...

El papel terminó de consumirse entre sus dedos para luego ser arrojado con indiferencia en un tacho de basura cercano. Shaka se acercó al linde de la vereda agitando un brazo buscando la atención de algún taxi...Un hombre mayor lo saludó mientras tomaba el asiento trasero e indicaba al mismo la dirección pertinente...

Ven por favor...tengo algo muy importante que decirte...


-Qué...qué es lo que quieres...por qué enviaste el mensaje...cómo sabes mi número!

-Cálmate...si sigues hablando así no harás más que atragantarte con tus palabras...

-Imbécil...

-Haré como que no oí eso...

-No estoy diciendo nada que no merezcas que te diga...habla de una vez y déjame en paz...no estoy dispuesto a darte ni un segundo más de mi vida...

-Está bien...entiendo que te comportes así conmigo Shaka...pero de todas maneras no puedo darte demasiados detalles ahora...

-Qué propones entonces?...para qué me hiciste llamarte!

-Debes venir...es importante, debes venir Shaka...

-Que yo vaya?...estás loco!

-Tranquilízate...

Pero entonces...cuando mi brazo estuvo a punto de estirarse para colgar el tuvo...algo me detuvo...quizás ese ligero tinte en su voz...un poco quebrada...

-Ven por favor...tengo algo muy importante que decirte...

Sentí que no podría rehusarme...ni aunque deseara más que fervientemente estrellar el auricular contra la pared...sin ahorrarme en gritos e insultos hacia su persona...Tal vez sí era importante...tal vez merecía ser escuchado...

O esperaba algo más de mi visita?...que esa endemoniada familia hubiera cambiado un ápice de su conducta por mi desgracia?...

La disculpa que jamás fue entregada ni siquiera por una mera condolencia bajo la elegía fúnebre que tocaba el silencio durante las exequias de mis padres...?

Y la venganza que esta disculpa traía como un arma de doble filo...sin entregar a cambio nada más que una sonrisa retorcida...un dedo acusador...y la leyenda grabada en la frente que los acreditaba a cada uno de ellos como los autores del asesinato...

Jamás podré perdonarlos...

No había podido pegar un ojo en toda la noche, lo que facilitó su despertar a la mañana siguiente...casi impaciente porque el ciclo diario reiniciara su proceso. La necesidad de que algo ocupara su mente...algo que no fuera la inquietud de saber qué estaría haciendo Shaka en ese momento...Mantener su mente enfocada en el trabajo ayudaría pero incluso eso no podría durar el tiempo suficiente para sacarlo de su cabeza completamente...

En una habitación contigua...y ahogado por las paredes que la separaban de ella, se oyó el sonido de un despertador cuya voz chillona y estridente fue inmediatamente callada...luego silencio...y finalmente dos o tres bostezos y el leve rechinar de una cama.

Probablemente fuera Milo...o Camus?...Adivinar se había vuelto prácticamente un juego de agudeza...en el cual la clasificación de meticulosos sonidos podía marcar la diferencia...

Dos voces se oyeron, somnolientas al principio...un poco más fuertes después...eso desvaneció sus dudas por completo...Que vivían juntos acababa de dejar de ser una mera sospecha...

-Ey Mu!despierta!Es hora de ir a trabajar dormilón!

Hacía tiempo que un grito no le parecía tan cálido...los últimos que había recibido no hacían más que traerle una y otra vez malos recuerdos...ecos que rebotaban en sus tímpanos como un boomeran que vuelve intentando buscar una salida sin éxito...

-Ya estoy despierto!

Separó las colchas lentamente de su cuerpo...casi despegándose de una piel de la cual resultaba difícil deshacerse...y se puso de pie en dirección a la puerta...Ese no era su primer día en aquella casa...pero si de días laborales se trataba...eso era un asunto pendiente...

-Qué quieres de desayunar?

-Qué van a tomar uds?

-Café y tostadas!

-Mmm...bueno lo mismo para mí!

Aún cuando gritar no era su idea de un despabilamiento tranquilo y pausado...comenzaba a creer que quizás si Milo lo hacía tan continuamente y con tal naturalidad era porque de alguna forma resultaba como una especie de catarsis...

Tenía unas cuantas cosas que gritar en mente...ideas que habían permanecido atoradas desde la partida de Shaka...preguntas sin respuesta...desconfianzas...inseguridades...ese egoísmo que en contra de su voluntad lo obligaría a dañar al rubio para que sintiera al menos un poco de su pena...

Por qué justo ahora Shaka...?...Por qué?...Por qué te vas y me dejas solo...necesito estar contigo...yo...

-Eyyy Mu...ya está el café!vienes o no?Se te va a enfriar.!

-Sí ya voy!gracias...


Shaka observó el último cigarrillo apretado en una esquina del paquete, como si el vacío ejerciera presión sobre él...recluyéndolo a una soledad eterna que él podía evitar si lo tomara entre sus dedos y acabara con su existencia consumiéndolo entre una abrasadora llama y su dulce boca...

Pero no lo haría...prefería alargar su agonía si era necesario...lo necesitaba ahora...mas lo iba a necesitar más aún después...

El auto se detuvo luego de doblar sobre una esquina...en una vereda poco poblada, cubierta de bellos y altos árboles...y un césped repleto de amargas hojas de otoño...

El aire era espeso...el viento helado...y sobre los cimientos de lo que parecía un barrio fantasma se erguía una imponente mansión...

-Aquí está bien...muchas gracias...

Shaka abrochó hasta el último botón de su saco acomodando una bufanda negra que se había puesto minutos antes de dejar su departamento...entregó el dinero al conductor demasiado absorto en la visión de la casa pálida como para prestar atención al sonido de la puerta cerrándose con fuerza...y el posterior ronronear del coche antes de alejarse de su sitio...

Unas casas más allá...

Pero no deseaba ir a verla...no tenía intenciones de poner un pie cerca nuevamente de esa casa...

-Ya estás aquí...estás justo como te recuerdo...Shaka...

Lo hubiera sorprendido de sobremanera si no supiera cómo sería tratado por aquel individuo...habían pasado más siete años desde la última vez que lo había visto y aún así tenía esa rebosante confianza que lo hacía tan inoportuno a los momentos propicios de seriedad...

-Tú siempre tan...desconsiderado...Keisuke...no has cambiado ni un solo poco...

-Jeh...quizás sea cierto...pero espero que sea nada más una simple impresión tuya...entremos por favor...no quiero que te congeles aquí afuera...

-No me vengas con esas cosas por favor...de verdad te importa lo que me suceda?...no moriré congelado...he tenido ya mejores razones para haber muerto...

-Deja esa morbosidad innecesaria para otro momento...pasa por favor...vamos a comenzar a pelear sin que te de razones para ello?

-PUES YA ME LAS HAS DADO!...NO TE ATREVAS A CUESTIONAR MI COMPORTAMIENTO CONTIGO!...Tú...tú no mereces...no mereces una sola palabra condescendiente...

-No te he convocado para que hagamos una lista de las causas por las cuales estarías dispuesto a matarme...tenemos asuntos más importantes que tratar...así que pasa por favor...

-Qué asunto puede ser tan importante...no me has dicho nada hasta ahora que haga valer mi viaje hasta aquí...y mucho menos mi entrada a tu casa...

-Natsuki...tu esposa...

Qué...qué hay con ella?