Chap 1: Verdades y Mentiras
- Oh Ron yo no voy a soportar que siempre que veas a la Profesora Delacuor te pongas tan...tan..._- Hermione comenzó a enfadarse, su rostro estaba rojo de ira al solo recordar el rostro del pelirrojo, lo miro de reojo y al ver su expresión de desfachatez no pude evitar gritar- ¡ESTÚPIDO!- extremadamente fuerte en medio del corredor, todos los alumnos giraron a mirar la pelea, los veían y murmuraban sobre la situación de celos de la pareja, comentando en voz baja, tapándose la boca al referirse a alguno de los involucrados.
- Hermi- dijo Ron acercándose con un paso sensual, tratando de encontrar el lado débil de la muchacha y así calmarla, pero Hermione se corrió al notar las intenciones del pelirrojo – Mi amor, tú sabes que te amo a ti solamente, mis ojos solo son para ti - decía Ron, tratando de acercarse a ella y poder acariciar su cara.
- OH si- respondió la castaña con ironía, cruzándose de brazos, mirándolo fijamente a los ojos, ahora mas enfadada que antes, apretando sus tan queridos libros, descargando su ira con ellos- ¡ ACASO NO VES QUE TODO EL RATO TE COQUETEA LA DESCARADA!- refunfuño la muchacha, arrugando el cejo, sin mas levanto los brazos para apuntarlo, apretando la mandíbula, y siguió restregándole en la cara lo sucedido en la clase de Defensa Contra las Artes Oscuras, sin importarle que todo el mundo se birlara de ella cuando pasaban caminando por el lado de la joven pareja, realmente Hermione había perdió los estribos, la situación la sobrepasaba, y a este nivel le importaba un rábano que todo el mundo la mirara, su cuerpo se movía con brusquedad mientras seguía atacando a Ron, y sin darse cuenta, en uno de los tantos aleteos se le cayeron todos los libros en de sus manos- ¡NO RON WEASLEY, NO LO SOPORTO!- exclamo lo bastante fuerte para que a Ron le quedara lo suficientemente claro y sin mas se dio la media vuelta, sin mirar al joven y salió corriendo. dejando todos sus libros regados por el corredor, corriendo sin mas, con los ojos llenos de lagrimas, pasando a través de la gente, empujándolos, sin mirar atrás, sin preocuparse de sus tesoros mas preciados, sus libros. El enfados y la tristeza eran mas fuertes:
- ¡Hermione!- gritó Ron sin recibir respuesta, miró hacia abajo, viendo todos los libros de su novia esparcidos por la baldosa, se quedo con la mirada fija en el suelo-
Harry miraba en silencio la escena, detrás de Ron, algo atónito por la reacción tan salvaje, por decirlo así, de Hermione solo atino a decir:
-Ve Ron ,yo recojo todo – agachándose sin esperar respuesta, ordenando los libros de su amiga.
- Vale, te debo una - sonrió Ron mirando a Harry, y salió corriendo por el pasillo, disculpándose mientras empujaba a la gente en su carrera, con una dirección clara en su cabeza, sabia perfectamente donde siempre estaba Hermione cuando estaba triste, en el Baño.
- Maldita estúpida FRANCESITA- pronunció lo ultimo bastante alterada Hermione, avanzando por el frío y húmedo piso del baño de niñas, lentamente apoyo sus manos en uno de los lavados, mirando como las pequeñas gotas reposaban en la cerámica, lentamente levanto su rostro, mirándose al espejo con todos los ojos hinchados, rojos y mas aun, negros, manchados por el maquillaje, que ya se había esparcido por toda su cara, su rostros tenia una mezcla entre rabia y pena- ¡OHH RONYY COMO SIMPGE BIEN, ERES GENIAL!- dijo imitando a la profesora de Defensa contra las Artes Oscuras, y en un ataque espontáneo de ira golpeó el espejo con tanta fuerza que el espejo se trizó con el impacto, para luego estallar sobre la mano de Hermione, incrustando pequeños trozos en su piel, provocando que la sangre comenzara a fluir a través de su piel, manchando su blusa - MIERDA!- grito la muchacha, corriendo rápidamente la mano del espejo, mirándose la herida, gruño, luego gimió de dolor, tratando de limpiarse, pero repentinamente unas lagrimas de dolor agolparon sus ojos, quitándole la visión, sin poder limpiarse, cayo al suelo, sollozando, tomando instintivamente el antebrazo de su mano herida, llena de angustia y pena, mezclada con el dolor físico, lloraba la leona, sin querer levantarse.
Ron llegó un poco acalorado, por el tremendo esfuerzo que tuvo que hacer por pasar entremedio de la gran masa de alumnos que le impedían seguir su camino, jadeando, se apoyo en el umbral de la puerta del baño, tratando de recuperar el aire descanso un rato, y lentamente comenzó a caminar, afinando su audición, escuchando pequeño gemidos, avanzó mas rápido, ya preocupado, miro por todos lados, y dentro de la oscuridad, vio una masa negra en el suelo, se acercó con rapidez, y pudo notar que la joven tenia la cabeza gacha, escondida por su gran masa de cabello, estaba debajo del lavamanos, llena de trozos de vidrio, que brillaban con la luz de la luna, y sus manos manchadas, cubiertas de algo negro que no podía distinguir, pero si intuir, su cuerpo temblaba, mientras los sollozos cada vez eran mas débiles. Pensando que podía haber cometido cualquier locura se acerco corriendo, asustado:
- ¡HERMIONE!- acercándose, se agacho rápido, y con algo de brusquedad tomo la mano ensangrentada de Hermione, trato de hacer presión para parar la sangre que no dejaba de salir - Mi amor ¿Que te pasó? -
- Nada, shifff...nada- respondió con una voz adolorida, dejando aflorar mas lágrimas, bañando su rostro, busco el cuerpo de su novio y se acurruco en él.
- Hermione- susurró Ron besándole la cabeza, acariciándola, aferrándola fuerte a su cuerpo, apretando sus manos con las de ella, alejando en algo los trozos de vidrios para evitar mas cortes, con preocupación miro a la joven que estaba escondida en su pecho. De a poco, la tomo y la levanto con sumo cuidado, apoyándola en su cuerpo - vamos a la enfermería, necesitas que te curen.
- No! – exclamó con fuerza Hermione, con cuidado tomo su mano, alejándose de él, camino hacia el lavamanos abriendo la llave, dejando que el agua corriera, con decisión puso su mano debajo del chorro, sintió el frío como pasaba sobre la herida, provocando algo de dolor, con valentía, con su otra mano, quito los trozos de vidrio, escondiendo las muecas de dolor, mientras las sangre se alejaba de su mano y se iba junto con el agua por las cañerías.
Tomando su capa se seco su mano, sacando luego su varita – Véndate!- exclamo con su varita apuntando la llaga que tenia en la palma de la mano, de la cual salieron unas delgadas vendas que se le enrollaron en la mano, apretándose en la herida, dejando que la sangre no siguiera fluyendo:
- Hermione eso no creo que sea suficiente- refuto el pelirrojo, acercándose hacia su novia, pero se detuvo al seco luego de ver una sola mirada de ella, prefirió no seguir hablando de la herida, ya que los ojos de ella estaban aun furiosos. Sin mas prefirió tocar el tema que había causado toda esta discusión, la furia de Hermione y lo mas importante, la explosión de furia de la castaña y por ende esa horrible herida en su mano- Mi amor, a mi no me importa esa franchuta, me da lo mismo, tú lo sabes, no se por que te pones así, si estamos juntos, yo no he hecho nada y lo sabes- un poco nervioso con la ultima frase, ya que Hermione estaba realmente molesta, como nunca antes la había visto, se acerco lentamente a ella y le tomo la cintura con uno de sus brazos, con firmeza, mientras que con el otro le sacaba los molestos cabellos que estorbaban en su rostro, mostrando un rostro afligido, pero también serio, que al mirar su rostro comenzaba a transformarse. Ambos se miraron profundamente, dándole la oportunidad a Ron de acercarse mas y mas a ella, mirando a cada momento sus gruesos labios, y sin decir nada mas le dio uno de esos cálidos besos, lentos, recorriendo cada parte de esos ojos labios, que aprisionaban los suyos, besos calmados pero placenteros- Sabes, que eres tú la que me importa, nadie mas.
- Seguro- dijo Hermione entre las pequeños lapsos en que el pelirrojo soltaba su boca. Lentamente apoyo sus brazos en el cuello de Ron, que se acomodo entre los delgados brazos de su novia - Creo que si, que dices la verdad- sonrío ella, mientras no despegaba sus grandes ojos cafés de la boca delgada y rosada de Ron, entre abriendo su propia boca, y apretando a Ron con sus brazos, se acercó lentamente, rozando lentamente los labios de su pareja, insinuando, viendo como el joven se exaltaba cuando ella comenzaba a jugar así, y se alejaba para provocarlo mas aun, hasta que sin mas comenzó a besarlo sin detenerse.
El comenzó a tomar el ritmo que el comenzó a ejercer en el juego que su castaña había comenzado, sin tener la paciencia que ella mostraba siempre, la castaña lo atraía mas hacia su cuerpo, pegándose a Ron, rozándolo, mientras el susodicho, con apremio, enrollo fuertemente sus brazos por la delgada cintura de su novia, sin para de besarla, explorando por toda su boca, tocando cada rincón y profundizando cada vez mas el beso, sintiendo que ella comenzaba a jugar con los pequeños pelitos que quedaban entre la nuca y el cuello de él, tirándolos con energía. Así comenzaron a acalorarse, olvidando que estaban en un baño público, ambos jadeaban, gemían, y sudaban debajo de sus capas, mientras se besaban Hermione coloco sus antebrazos con sumo cuidado sobre el pecho de él, y comenzó a caminar, empujando a Ron hacia atrás, retrocediendo, llegando así a la pared, donde ella lo soltó, mirándolo, con una mueca hacia al lado en su rostro, que ya no era angelical, apoyándose en el cuerpo de Ron y luego volvió a él. Ron con sus manos deseosas, miraba el cuelo de Hermione, rápidamente saco la capa de la muchacha, que cayo sin mas, y sonriendo miraba los primeros botones desabrochados de la blusa de la castaña, su vista la siguió recorriendo, y con ansiedad se adentro por la blusa de Hermione sintiendo su suave piel debajo de sus dedos, con suavidad los deslizo por su estomago, apenas tocando, ella al sentir el contacto, no pudo evitar estremecerse, curvando un poco su espalda, volviendo a recomponerse, lo miro desafiante y con sus manos, heridas y dolorosas, comenzó a apartar la capa de Ron, sin importar manchar la ropa del joven o empeorar su situación:
- Hermione- dijo Ron deteniéndole la mano en seco- ¿Estas segura?
- Si- dijo esta sin titubear, besándole la boca apasionadamente
- Es tu 1° vez amor- dijo Ron tomándola por la barbilla, mirándola con esos dulces ojos-
- Mi...mi...mi primera vez- dijo tartamudeando, algo choqueada por la pregunta, recordando algo que no quería recordar, con rapidez y tratando de disimular, volvió su mirada a Ron- Claro, mi primera vez...claro...si te quiero hacer mío- alejando sus ojos de los de Ron, volvió a su tarea, y le saco la capa sin dudarlo un segundo, mientras Ron rápidamente le desabotonaba la falda, que cayo al suelo. Abrazados, desesperador, ambos perdieron el equilibrio, enredados entre sus ropas, cayeron uno sobre el otro en el piso, , mirándose de manera intensa, ambos comenzaron a acariciarse desesperadamente, recorriéndose sin ningún tipo de cuidado, desenfrenados, de manera salvaje hicieron el amor, gozando de cada contacto, de cada caricia.
Hermione lentamente comenzaba a vestirse, tomando su ropa, y poniéndosela con sumo cuidado, tratando de ser lo mas prolija posible, cuando sintió una manos en sus costados que la dieron vuelta, dejándola al frente de un desordenado muchacho, delgado, semi desnudo que la miraba con deseo:
-Hermione- dijo mirándola a los ojos muy emocionado, mientras le tomaba la mano sana- En realidad fue muy difícil esperar, sin saber a quien le iba a dar esto tan preciado- le tomo la cara, buscando que lo mirara directamente- pero ahora no me arrepiento, sino que me siento totalmente satisfecho de a verme abstenido, y tú amor, has sido la justificación para esperar todo este tiempo, y aguantar esas ganas infernarles de intimar con alguien- suspiró, y luego con un rostro iluminado de felicidad, acerco el rostro de Hermione al suyo y deposito un suave beso sobre los labios de la castaña.
Hermione se sintió feliz, aunque su cabeza recordó algo que en ese preciso momento no hubiera querido acordarse, que en realidad le hubiera gustado borrar de cualquier rincón de su cabeza, mirando a Ron con un gesto de angustia y culpa- No, no Hermione no pienses eso- se reclamó mentalmente a si misma, pero luego los recuerdos volvieron a tomar su mente, haciendo mas gráficos, aunque eran totalmente distinto al anterior, aunque tenían directa relación, sintió un cargo de consciencia enorme, mas al ver como Ron la miraba, ansioso, esperando una respuesta a sus palabras, así que tratando de formar alguna frases que sonaran bonitas y libre de ese sentimiento de culpa que no iba relacionado a lo que habían vivido hace unos minutos atrás. le habló:
- Mi ron, me siento loca por ti, me traes de cabeza, supongo que lo sabes, todo esto me hizo darme cuenta que me diste la mayor felicidad de este mundo, y tú no me pedías nada, no querías nada, solo a mí- y le dedico una sonrisa falsa, la mejor que pudo interpretar, no era que no se sintiera emocionada por lo que había sucedido, lo estaba, pero no como la emoción que se suponía que debía sentir al "supuestamente" entregarse por primera vez a alguien, y no cualquiera que sino su novio, el que siempre había deseado.
Volvió su mirada a Ron, tratando de alejar sus pensamientos, y noto que él estaba sonriendo de oreja a oreja, satisfecho con la respuesta que le estaba dando, creyéndose todo.
Luego de pasar un rato abrasados, mirándose, analizándose, conversando un poco, Ron salió muy feliz después del acto que habían vivido, totalmente en las nubes, sin preocuparse de la extraña actitud de su novia de ni querer acompañarlo a la cena, su momento era de tal clímax y placer que no se percato de nada, y solo se fue, dándole un beso a Hermione en los labios, mientras desaparecía de su vista, silbando.
Hermione se quedo parada, sola, en medio de un baño vacío, que había sido testigo de aquella entrega, los sentimientos estaban tan revueltos en su cabeza y en su corazón, que en vez de sentir felicidad, solo sentía una sensación de ahogo, no podía evitar ver que todo lo que había pasado había sido solo mentira, una cruel mentira.
Avanzó hacia el lavamanos y mojo su cara, buscando algún escape momentáneo, pero su naturaleza culposa y obsesiva daba una cruel pelea, boicoteándola, haciéndola recordar ese día nefasto en su vida, no podía mentirse a ella misma, a Ron si, pero a ella no, después de aquel episodio, podía ver un antes y un después. Caminaba en círculos, escuchando sus propios pasos, pensando, maquinando, mientras jugaba con los botones de su blusa, de un lado hacia otro, muchas veces. Las imágenes eran como una película que pasaba en sus ojos, maldito día, con rabia paro en seco y se miró al espejo, buscando respuestas en su rostro reflejado en el cristal.
Miro en el fondo del cristal al escuchar acercarse unos lentos pero claros pasos, y pudo ver como una silueta comenzaba a asomarse y tomar forma en el espejo, justo detrás suyo:
- Creo Hermione que tienes grabes problemas de memoria, o acaso ¿No recuerdas aquella noche alocada que vivimos hace un tiempo? ¿Eso no cuenta como tu primera vez, querida?- se escucho una voz proveniente del fondo del baño, extremadamente familiar, tan fría como siempre, tan mecánica, con ese típico tono de ironía y sarcasmo que lo caracterizaban. Los pasos se escuchaban cada vez mas cerca, Hermione mantenía la vista fija en el espejo, esperando verlo, sabia quien era, no necesitaba mirarlo, pero estaba estática, sintió un escalofrío, solo pudo cerrar los ojos cuando vio claramente su rostro reflejado detrás de ella, agacho la cabeza, angustiada.
Toda su piel se erizo al sentir como unos fuertes brazos la tomaban por la cintura, y la empujaban hacia atrás, quedando pegada en un cuerpo que conocía desde antes y en su totalidad. Una tibia humedad comenzó a esparcirse en su oreja, unos labios antes probados, la recorrían, susurrando algo a su oído:
- ¿Y yo amor donde quedo?-
