La sombra del pasado

Capitulo 4. Malas noticias..

La luz se filtraba por el ventanal, aun se respiraba la fresca humedad que había causado la lluvia de ayer, no hace mucho el cielo logro recuperar su color azul desapareciendo las nubes que lo opacaban, solo alguna que otra nube había logrado escapar de esa limpieza y que de vez en cuando ocultaban al caprichoso sol.

Se levantó sobresaltado, algo que había soñado no había sido de su agrado, apenas se hubo levantado cuando tuvo que recostarse nuevamente, el abdomen le dolía y un vendaje en ese sitio le advertía que una herida de consideración se ocultaba sobre la tela de algodón, su hombro también le causaba molestia, era mejor no intentar moverlo para no sentir dolor, se sorprendió al verse en su habitación, pero luego recordó como había llegado a su casa para después desplomarse en la entrada, de seguro Fausto le había tratado las heridas.

Se calmó, no tenia razón para seguir alarmado, al menos no por el momento, al examinar todo a su alrededor pudo ver a la chica de cabello rubio dormida no muy lejos de su futon, al parecer había cuidado de su sueño toda la noche.

Se incorporo con cautela, se agachó frente a ella y le besó la frente, besarle en los labios tal vez la hubiese despertado, después de hacer esto, se levantó y se dirigió a su armario para luego correr la puerta. Tenia que bañarse y ponerse ropa limpia, pero al levantar el brazo un fuerte dolor se apodero de su hombro lastimado, gracias al brusco movimiento a causa del intento de regresar a su brazo a su anterior posición vertical, empujó un frasco de lo que parecía una loción al suelo.

El cristal se transformó en miles de piezas y el liquido se esparció por todo el suelo, el sonido producido por todo ese espectáculo hizo que Anna se despertara de inmediato, en un principio asustada se levantó y miro con enfado al castaño, él sin siquiera voltear a verla tan solo sintió su mirada, lentamente se volteo hacia ella, había sido descubierto.

- Buenos dias Anna- saludó con voz temblorosa y tratando de dibujar una sonrisa en su rostro.

- Que haces levantado?- preguntó apretando los puños- Fausto dijo que no debías levantarte hasta después de dos dias- le regañó jalándolo hacia el futon, pero Yoh opuso resistencia- piensas desobedecerme?

- Anna, estoy bien- intentó convencerla su prometido con una mirada suplicante, Anna aun tenia agarrado el brazo de Yoh con su mano.

- Te estoy dando oportunidad de descansar por unos dias, y tu la desaprovechas?- se le quedó mirando a los ojos, por un momento pensó que estaba delirando, ese chico siempre prefería descansar en cama cuando sufría algún accidente, pero ahora...realmente deseaba estar con los demás- esta bien, pero aun lastimado el entrenamiento seguirá en pie- el castaño ya esperaba esas palabras y aun así no le importaron.

Un plato vació fue dejado encima de la mesa, era la primera en terminar su desayuno, se tomó el ultimo sorbo de bebida y muy contenta se levantó de su lugar en la mesa.

- Estuvo delicioso- dijo Misato satisfecha- Manta cocinas muy bien.

- Muchas gracias- contestó el chico- Anna me obligó a que cocinara con esta sazón, exige más en la cocina que en el entrenamiento, Yoh cocina aun mejor, es al que mas presiona.

- Si no tienes nada que hacer ve a calentar antes de la practica, te espera un día largo, tienes que acoplarte a nuestro ritmo- le dijo Ren con una actitud sumamente seria- no quiero que después andes toda cansada y acalambrada

- Esta bien- dijo Misato sin importarle el gélido tono del chino- Izumi, te espero afuera.

- Si- le contesto su amiga con la boca llena de comida.

- No te importa que no tengas equipo y Misato si?- le preguntó el ainu ya cuando Misato se hubo marchado.

- En realidad no/ contesto con toda seguridad- ella era la mas interesada en participar en el torneo de shamanes, y yo tan solo quería ayudarla, desde un principio sabíamos que la prioridad era que ella tuviera equipo.

- No te interesa participar ni un poco?- volvió a preguntar escéptico de las palabras de la chica.

- A mi no me agrada participar en las peleas de este tipo, creo que nuestros espíritus compañeros no están para ser usados en ese tipo de eventos, sino para enseñarnos cosas que para nosotros no son desconocidas.

- Que lastima, y yo que quería sacar a Ren y meterte a ti al equipo.

- Eso no es nada gracioso Horo Horo- le dijo Ren con un notorio enfado- para empezar el equipo es mío.

- Entonces me salgo y hago equipo con ellas- una nueva pelea entre el peculiar par comenzaba.

- Se ve que están muy animados- esa voz los hizo callar, todas las miradas se posaron en el chico que recién había llegado/ que recibimiento tan......silencioso- dijo Yoh, su brazo lo tenia doblado y sostenido con un cabestrillo para así no mover su hombro.

- Ya te sientes mejor- le pregunto Manta con cierto aire de preocupación.

- No es nada serio- dice Yoh acercando el platón con arroz para servirse.

- Se puede saber quien te dio esa paliza?- le preguntó Ren frente a él.

- Dos chicas, ambas shamanes- dice Yoh mientras se servia arroz en un plato- eran fuertes.

- Debí de estar con usted- el samurai estaba avergonzado por no poder ayudar a su amo cuando lo necesitaba.

- . No fue tu culpa Amidamaru, cayeron de sorpresa.

- y sabes por que lo hicieron? Pregunta Horo Horo.

- Pues........- Yoh no quería preocupar a sus amigos con unas cuantas palabras dichas por unas extrañas.

- Es natural que otros equipos intenten atacar a la persona que esta mas cerca de ser el shaman king- contesto Manta por Yoh.

- Tal vez esa sea la razón-Yoh esbozo una de sus típicas risillas después de decir esas palabras.

- Deberías descansar- le dice Izumi- no te vez muy sano.

- Yo soy la que decido eso- Ana iba entrando al lugar- y aunque no pueda hacer su entrenamiento tiene que supervisar a Manta en el propio.

- Dentro de unos dias nos iremos a Norteamérica- mencionó Manta, aun no terminaba las 100 sentadillas que le había puesto Anna para ese día.

- estas emocionado?- le preguntó Yoh que tan solo lo observaba, era cierto que ya se estaba recuperando desde hacia unos dias después del atentado, pero aun no quería incorporarse a lo normal, pudo darse cuenta desde dos dias antes que Anna estaba de acuerdo pues ningún espíritu lo estaba vigilando.

- No- dijo deteniéndose y cayendo pesadamente en el suelo- me preocupa que otros equipos intenten lastimarte, en este momento eres vulnerable y si no te recuperas antes del torneo, es posible que te hieran de gravedad.

- Eso no sucederá- rió alegremente Yoh- por que se que tengo amigos que me apoyan y que son capaces de muchas cosas por protegerme- Manta no pudo evitar sonrojarse por esas palabras, no pensaba que supiera lo que el y los demás habían hecho cuando Hao había extraído su alma.

Para olvidar esa situación y disimular el sonrojo, comenzó nuevamente su anterior ejercicio, tan solo le faltaban diez mas.

Yoh lo miró por un instante, era agradable tener a ese pequeño como un shaman más entre sus amigos, mas después recordó lo sucedido hace unos dias, dejó de mirar a su amigo para dirigir ahora su mirada al suelo. Tenia que decirles a sus amigos que Hao esta vivo?, no, aun no lo sabia, pero lo habían mencionado, eso significaba que no había derrotado la ultima vez, si eso era verdad, por que espera tanto tiempo para volver a aparecer?

Termino de hacer el ejercicio y volteó hacia el castaño, lo noto demasiado pensativo y serio, Yoh estaba serio?, eso le pareció demasiado extraño, algo le estaba preocupando.

- Te sientes bien?- le preguntó acercándose a él, Yoh levantó la vista inmediatamente.

- Que?- no había escuchado las palabras de Manta.

- Pregunte que si estabas bien- le repitió Manta.

- Jejeje, si, estoy bien- dijo Yoh- tan solo pensaba.

- No creí que te gustara hacerlo tan seguido- bromeó Manta- en el desayuno también estabas algo serio de momento- rió moderadamente, pero al ver que Yoh no lo hacia mejor calló- perdona, te ofendí?

- No, no fue eso, solo que, Hao esta vivo- lo soltó de golpe, era lógico que Manta se quedara helado, no era precisamente lo que pensaba escuchar, ni de Yoh ni de otra persona, Yoh al ver su silencio siguió hablando- esas shamanes son unas de sus seguidores, vinieron a probarme y me dijeron que Hao nos vería en Norteamérica- sintió como la presión le había bajado, y no precisamente por el desgaste físico después de las sentadillas.

Fin del capitulo

By Linz Hidaka.