Minutos después Quatre ve muy a lo lejos a Duo y su expresión es de felicidad pero a la vez su rostro refleja un poco de seriedad, Quatre ve como a lo lejos alguien se acerca a Duo corriendo y por completo su rostro muestra tristeza, por primera vez en la vida Quatre mostraba tal sentimiento, ni el desprecio de su padre por la vida que llevaba ni la muerte de su madre habían logrado que dicho sentimiento naciera en su corazón, a lo lejos la voz de aquella persona le llamaba a gritos; Duo voltea sorprendido al reconocer en esa persona la voz de Heero, cuando éste por fin le alcanza lo sujeta fuertemente de los hombros y después acerca el cuerpo de Duo con el suyo, Duo está desconcertado y las palabras no pueden salir de su boca

Heero. No te vayas Duo, no me dejes

Duo. Pero Heero...

Heero. Solo dime que no te irás con él, que regresarás conmigo a New York, por favor

Duo. Se terminó, lo nuestro se ha acabado Heero

Heero. ¡No, no se ha acabado porque aún nos amamos

Duo. Es verdad, te amo pero... cometimos errores que por mucho que nos amemos no podemos remendar

Heero. No digas tonterías, siempre nos hemos perdonado nuestras faltas, siempre hemos superado los obstáculos y siempre nos hemos amado con gran pasión Duo, si me dejas ahora mi vida no tiene sentido

Duo. Es hora de seguir cada quien su camino Heero, fueron tres años y jamás los olvidaré, tres años en los que te amé como no te das una idea pero a pesar de todo ya no podemos seguir juntos y lo sabes Heero

Heero. No es verdad Duo, el orgullo jamás nos conducirá a nada bueno, no me dejes

Duo. Pero Heero...

Heero. ¡Te lo suplico!

Heero se inca abrazando la cintura de Duo y recargando su cabeza en su abdomen, por segunda vez en todos los años que llevaban de conocerse Heero derramaba sus lagrimas, Duo se sorprende bastante de su reacción y responde acariciando su cabello, Heero continúa suplicando que no lo dejara y Duo no responde palabra alguna. Por minutos los dos permanecen en dicha posición hasta que Duo levanta a Heero para después abrazarlo

Duo. No puedo...

Heero. ¿Qué?

Duo. No puedo dejarte, te amo Heero

Heero. ¿Hablas en serio?

Duo. Jamás había hablado tan en serio... quiero regresar contigo a New York

Heero. Júrame que no me dejarás jamás Duo

Duo. Lo juro Heero, estaré por siempre a tu lado

Heero. Te amo

Duo. Te amo también Heero

Un beso apasionado surge en ambos como hace bastante tiempo no surgía, Quatre observaba todo a lo lejos y no tiene más opción que darse una media vuelta y subir al Barco en el que tendría que subir con Duo, dejando caer unas lágrimas por sus mejillas Quatre renuncia a lo único verdadero en toda su vida.

Heero y Duo estaban ya arriba del avión para irse a New York...

Duo. Me alegra no haberme subido a ese barco con Quatre, hubiese sido el peor error en mi vida, te amo

Heero. Gracias por ser quien eres Duo

Duo. Nunca en mi vida volveré a engañarte, lo prometo

Heero. No tienes que hacerlo, confío en ti

Duo. Un momento... hasta ahora caigo en la cuenta ¿cómo supiste que iba a tomar ese barco con Quatre?

Heero. El me lo dijo

Duo. ¿Qué, cómo, cuándo?

Heero. Apenas llegaba a New York cuando mi celular sonó, no sé como él supo el número pero al contestar me dijo que era él y que por favor no le colgara... me contó una corta historia, era la historia de su vida, como durante años el jamás se había encontrado a sí mismo y como nunca en su vida supo lo que era el amor, me dijo que eras para él al principio nada más que un capricho, alguien a quien podía tener solo por el placer de tenerte, pero después aprendió a amarte, por eso mismo me dijo que ambos iban a irse en ese barco y que por favor si yo aún te amaba no te dejara ir porque él jamás dejaría ir a una persona que lo amase tanto como me amabas tú

Duo. ¿El me ama?

Heero. Así es Duo, y te ama de verdad

Duo. Pobre de él, jamás alguien lo ha amado en su vida

Heero. Estoy seguro que algún día será tan feliz con alguien como lo somos tu y yo

Duo. De eso podemos estar seguros ¿no es así?

Heero. Por supuesto

Duo recarga su cabeza en el hombro de Heero y así se queda durante todo el vuelo. Esa misma noche en el Barco el cual Quatre iba a bordo, él está llamando por teléfono

Wufei. Supongo que te sientes muy mal

Quatre. ¿Qué te puedo decir, lo dejé ir ¿te das cuenta?

Wufei. Y después que te costó tanto trabajo

Quatre. Yo sabía bien que él no era mío completamente, quería tener la última prueba y por eso llame al otro, Duo se decidió por mí pero bastaron unas cuentas palabras de él para que desistiera completamente

Wufei. Es la primera vez que pierdes una presa querido amigo, siempre que quieres algo logras conseguirlo a cualquier precio

Quatre. No es la primera vez, existe una persona a la cual jamás pude conseguir y es a la vez la persona a quien más deseo, aunque jamás sea para mí

Wufei. ¿Lo haces por ella verdad?

Quatre. Si, ella es muy importante para mí y por eso no puedo faltar a mi promesa

Wufei. Si eres tan importante para ella como lo es ella para ti entonces te comprenderá

Quatre. No es solo eso, sabes bien que Trowa me odia

Wufei. El no te odia, sé lo que te digo

Quatre. ¿A qué te refieres?

Wufei. Cuando regreses a Las Vegas lo sabrás

Quatre. Espero que tengas razón

Horas más tarde en ese mismo Barco, una joven se acerca sigilosamente a Quatre mientras él ve por la borda lo salvaje que esa noche estaban las olas

Dorothy. ¿Interrumpo?

Quatre. Claro que no-señorita

Dorothy. Le vi desde hace rato, usted se ve muy solitario ¿viaja solo?

Quatre. Si, viajo tristemente solo

Dorothy. Yo también viajo sola

Quatre. Debe sentirse mal

Dorothy. Para nada

Quatre. ¿Por qué una joven tan linda como usted viaja sola?

Dorothy. Me gusta viajar sola, nunca he viajado acompañada por alguien más, me gusta conocer personas por todo el mundo en mis múltiples viajes, soy una mujer de aventuras

Quatre. Comprendo, usted me recuerda a mí

Dorothy. ¿Quiere usted acompañarme, le invito a mi camarote

Quatre. Con gusto

Aquella joven guía coquetamente a Quatre hacia su camarote, abre la puerta y le invita a pasar, Quatre amablemente acepta su invitación

Dorothy. Disculpe mi torpeza, mi nombre es Dorothy Cataluña

Quatre. El mío es Quatre Raberba Winner y estoy totalmente a sus órdenes

Dorothy. Es usted muy apuesto

Quatre. Muchas gracias

Dorothy. Debe tener miles de mujeres a sus pies

Quatre. Por supuesto que no-señorita

Dorothy. ¿Hombres entonces?

Quatre. Tampoco es el caso

Dorothy. Usted a mí si me ha impresionado

Dorothy se acerca a Quatre y logra besar su oreja. Al igual que Quatre, Dorothy era una mujer que buscaba aventuras y amores pasajeros, vivía solo por el placer y para dar placer, también gozaba de lo exótico y los viajes por el mundo en busca de aventuras, su padre era un antiguo militar condecorado por todas sus hazañas en el ejército además de ser él quien ideaba la gran mayoría de las estrategias militares, pero lamentablemente él había muerto varios años atrás, y al igual que Quatre, Dorothy jamás había conocido a su madre. Dorothy se aleja un poco de Quatre y comienza a bajar lentamente el cierre del vestido color rojo que llevaba puesto esa noche, Quatre observaba fijamente a la joven mientras se despojaba lentamente de aquel vestido, la joven se acerca a Quatre y lo besa, Quatre también besa a la joven dirigiendo su mano derecha al tirante de su sostén bajándolo lentamente, Quatre consigue abrir sus ojos, observa el cabello de aquella joven y lo acaricia lentamente, entonces comienza a recordar su noche con Duo a lo que responde alejando a la joven de su cuerpo

Dorothy. ¿Qué pasa?

Quatre. Perdóneme señorita Dorothy, no puedo hacer esto

Dorothy. ¿Por qué?

Quatre. No sería justo hacerle el amor a su hermoso cuerpo mientras pienso en otra persona ¿no lo cree así señorita?

Dorothy. ¿Está usted enamorado?

Quatre. La persona con quien debí abordar éste Barco me dejó en el último momento

Dorothy. Lo lamento

Quatre. Pero otra más me espera en Las Vegas

Dorothy. Debe sentirse confundido ¿a quien ama de verdad?

Quatre. No lo sé señorita, no lo sé, pero esas dos personas están mejor sin mí, créame

Quatre se acerca a donde está el vestido de la joven y se lo da para que se vista, acto seguido sale del camarote solo despidiéndose con un adiós, él y ella no vuelven a verse más en el Barco. Quatre piensa que de no haber conocido a Duo entonces hubiese seguido siendo un hombre que solo buscaba aventuras pasajeras y que de seguir siendo así entonces sí hubiese tenido que ver con aquella joven en el camarote de aquel Barco.

En New York, Heero y Duo comenzaban una nueva vida juntos... varios meses después de haber pasado el incidente de Las Vegas, Duo había vuelto a su antiguo trabajo como científico de la NASA, mientras Heero volvía al ejército, ésta vez en el área de estrategias militares, debido a su pensión como antiguo soldado ya no podía volver al campo de batalla, Heero había desistido de su decisión de volver a Japón ya que ahora pensaba más en lo que quería Duo, por años Heero estaba acostumbrado a que las cosas siempre se hiciesen a su manera aunque Duo no estuviese de acuerdo, pero después de regresar de Las Vegas él había reflexionado y se había dado cuenta que su egoísmo tarde o temprano haría que Duo le dejase como estuvo a punto de hacerlo hacía varios meses. Aunque ahora gozaban de tener más dinero del que hubieran podido ahorrar, aún vivían en el mismo departamento en el que habían estado viviendo desde que eran novios formalmente.

De nuevo se llegaba la fecha de su Aniversario, ésta vez era el cuarto y como Heero había prometido ese año iban a visitar la hermosa isla de Hawai...

Heero. Espérame aquí, registraré el equipaje en el lobby y después comeremos algo

Duo. Está bien, te esperaré en la orilla del mar

Heero. No te alejes para que no me cueste trabajo encontrarte

Duo. No lo haré

Duo le da un rápido beso a Heero y corre hacia al agua. A Duo le encantaba el mar, podía pasarse horas viendo las olas y bañándose, la paz y la tranquilidad invadían su corazón cada vez que estaba cerca del mar. No muy lejos de ahí dos jóvenes platicaban amenamente cuando uno de ellos ve de repente a Duo él logra llamar fuertemente su atención

Traize. ¿Ya viste?

Zechs. ¿Qué cosa?

Traize. Aquel joven de allá, ¿no es lo más hermoso que jamás hayas visto?

Zechs. Se ve lindo

Traize. ¿Lindo, estas loco, ese chico está que arde

Zechs. ¿No es muy joven para alguien como tú?

Traize. Tiernitos son mejores ¿no te parece?

Zechs. Si te le quieres lanzar haz lo que quieras

Traize. No seas celoso Zechs

Zechs. No seas idiota, sabes que estoy casado

Traize. Eso no parece importarte cuando estamos en la intimidad

Zechs. No digas esas cosas aquí, no quiero que Lucrecia se entere de lo nuestro

Traize. Vamos, abandónala

Zechs. La amo

Traize. Pero la engañas conmigo

Zechs. Lo sé, soy demasiado débil

Traize. Lo que pasa es que no te puedes resistir a mis caricias

Zechs. No aquí... tu asistente está atrás de nosotros

Traize. No te preocupes por ella

Traize hace una señal a su asistente y le indica que se acerque a él

Lady Une. ¿Señor?

Traize. ¿Ve a aquel joven, quiero saber su nombre, edad, etcétera, cosas que me puedan interesar ¿comprende?

Lady Une. Sí señor, ¿otra cosa?

Traize. Si, avíseles a la señora Noin y a la señorita Reelena que ésta noche será el evento que nos ofrecieron los Maui, que por favor no tarden

Lady Une. Como usted diga, mi señor

Traize. Mi asistente sabe lo nuestro, no te preocupes, ella no me traicionará

Zechs. Que ella sepa lo nuestro es algo que ya sé, pero me da mucha pena

Traize. Es verdad, ella fue testigo de una de nuestras escenas de pasión

Zechs. No lo hables tan a la ligera

Traize. Tu hermana parece sospecharlo

Zechs. Deberíamos terminar esta aventura

Traize. Estas loco, no podría dejar de tener tu cuerpo y creo que tú no podrías dejar de recibir mis caricias

Traize se acerca comprometedoramente a Zechs y logra meter su mano al traje de baño que él traía puesto ocasionando la excitación de Zechs al instante

Zechs. Por favor, aquí no

Traize. No sabes como tengo ganas de hacerte mío en este preciso momento

Zechs. No seas obstinado

Traize. Esta bien, pero ésta noche tienes que visitarme a mí cuarto de Hotel

Zechs. Pero le he prometido a Lucrecia que...

Traize. ¡Rompe tu promesa, te estaré esperando en mi cuarto después de la fiesta Maui

Zechs. Pero de verdad yo...

Traize coloca sus dedos en la boca de Zechs haciéndolo callar, da un beso en los labios y después se va con bastante descaro. La noche llega ya y los recién llegados bajan para dar un paseo por la playa, a lo lejos una joven camina sola y melancólica por la orilla del mar, las olas rompían en sus pies y ella disfrutaba con la brisa y el sereno de aquella noche tan hermosa y estrellada, al caminar la joven se topa con la recién llegada pareja, la cual estaba muy romántica sin notar la presencia de la joven que estaba a punto de pasarles por un lado, Duo abre curiosamente sus ojos al sentir que alguien estaba cerca, él ve a la joven e inmediatamente aleja a Heero

Reelena. No se fijen en mí, solamente pasaba por aquí

Duo. Gracias

La chica pasa por un lado a la pareja sin dar mucha importancia a los hechos, la chica sigue caminando y curiosamente voltea hacia atrás, al mismo tiempo Heero voltea y ambos cruzan miradas, la mirada de Heero era como siempre fría y seria, sin embargo la de la chica mostraba asombro, al parecer había visto en aquel joven algo especial, Heero cierra sus ojos y sin importarle la chica de nuevo se voltea hacia con Duo. Reelena era una chica muy solitaria y también parecía ser muy seria y a veces fría, tal vez su carácter al igual que su mirada parecían ser iguales a las características de Heero, la joven es la hermana menor de Zechs, una persona muy tímida y a veces con falta de carácter, él es el esposo de Lucrecia Noin, una mujer bastante fuerte y de armas tomar, ellos se habían conocido hacía varios años donde ellos trabajaban juntos, pero a pesar de ser esposos y amarse mucho Zechs engañaba a su esposa con su mejor amigo y colega Traize, ellos eran antiguos amigos y no muy recientes amantes pero también se amaban, Zechs siendo tan reservado nunca había querido admitir que amaba a Traize casi igual como amaba a su querida Lucrecia, sin embargo, Traize abiertamente en varias ocasiones había dicho a Zechs acerca de sus sentimientos y también le pedía que dejara a Lucrecia para hacer ellos una nueva vida juntos, a lo que Zechs siempre respondía negativamente. Por su parte, para Lucrecia lo más querido en el mundo siempre había sido Zechs a quien amaba con locura, pero ella desconocía totalmente lo que pasaba entre su marido y Traize, al contrario de Reelena quien siendo tan perceptiva ya sospechaba de su romance, ella por su parte nunca en la vida había amado a una persona, ella y Zechs eran huérfanos de padre y madre, Reelena se había criado en otro hogar distinto al de Zechs (aunque ellos siempre se habían conocido) porque sus verdaderos padres la habían dado en adopción a otras personas, Reelena se seguía viendo con su madre adoptiva a quien consideraba como su verdadera madre, su padre adoptivo había muerto no hace mucho y por eso Zechs la había llevado a Hawai junto con su esposa, para distraerse de la pena de haber perdido a quien quería como su padre.

En la orilla de la playa...

Heero. ¿Ya tienes hambre?

Duo. Hambre de ti

Heero. ¿Aquí?

Duo. Y ahora

Heero. Ya alguien pasó mientras nos besábamos, que bochorno que pasen y nos vean teniendo sexo en la playa

Duo. No hablaba en serio, vayamos a cenar

Heero. Como digas

Heero y Duo se agarran de la mano y van a uno de los muchos restaurantes que estaban en la playa, se sientan y el mesero inmediatamente les da la carta del menú, minutos después Traize, Zechs, Lucrecia, Reelena y la asistente de Traize llegan a cenar al mismo restaurante que la joven pareja había escogido para cenar aquella noche, al ver Reelena a Heero su rostro refleja una gran alegría, Heero había causado en ella una gran impresión, y a la vez Duo causaba una gran impresión y admiración por su belleza a Traize, Zechs se da cuenta que el chico trenzado esta sentado en la otra mesa del restaurante y también se percata de la mirada de Traize al joven molestándose mucho ya que sentía celos que Traize mirase de esa forma al chico trenzado.

Lucrecia. Reelena, ¿me acompañas al tocador de damas?

Reelena. Claro que sí

Reelena se levanta de su asiento siguiendo a Lucrecia pero antes de irse voltea a ver a Traize lanzándole una mirada fría y de rencor ya que ella sabía lo que ellos hacían en ausencia de Noin. Para Reelena, Traize no era de su mucho agrado, casi desde que ellos eran amantes ella los había descubierto; para Reelena, Noin era más que una amiga como una hermana y la quería mucho, por eso odiaba a Traize y no podía verle, pero a Traize le caía muy bien Reelena y desde niña la cuidaba como si también fuera su hermana, él estaba profundamente enamorado de Zechs desde hacía varios años y por eso Noin no era de su agrado, por otro lado, Lady Une, asistente de Traize, parecía sentir algo muy especial por él pero jamás había sido capaz de confesárselo, además que era su jefe ella sabía muy bien que él jamás correspondería a sus sentimientos.

Zechs. La fiesta de los Maui fue muy interesante

Traize. Si... ¿ya sabes como ingeniártelas para ir ésta noche a mi cuarto?

Zechs. Traize, por favor, entiéndeme

Traize. Entiéndeme tú a mí, sabes que me duele verte con ella

Zechs. Es la mujer que amo y la que elegí como mi esposa

Traize. Nunca has pensado en mí

Zechs. ¿Qué dices, pero sí yo siempre pienso en ti

Traize. Divórciate

Zechs. No me pidas eso, no la puedo dejar porque la amo

Traize. Pero...

Traize guarda silencio al ver que Noin se aproxima junto con Reelena quienes vienen del baño, segundos después el mesero se acerca a pedirles la orden y todos ordenan. En la otra mesa Heero y Duo disfrutaban de una deliciosa cena...

Duo. Mira Heero, la chica de hace rato está en aquella mesa

Heero. Oh, es verdad

Duo. ¿No te parece que es un poco extraña?

Heero. ¿Un poco?

Duo. Parece que la chica no fue de tu agrado

Heero. Me miro de una forma que no me agradó

Duo. Para mí que le gustas, me pondré celoso

Heero. Si así fuera ella no me interesa para nada, me recuerda a alguien

Duo. ¿A quién Heero?

Heero. A Trowa ¿lo recuerdas?

Duo. Hace varios meses que no hablábamos al respecto de esas personas

Heero. Es verdad

Duo. ¿En que te lo recuerda?

Heero. No lo sé, la forma en que me miró me recuerda cuando él...

Duo. Ya entiendo, mejor no hablemos de eso

Heero. Perdón

Duo. Mejor pidamos la cuenta

Heero. Toma, paga la cuenta, me iré a dormir, si te quieres quedar por favor quédate

Duo. Me gustaría caminar un rato más en la playa

Heero. Está bien, te espero arriba, lo más seguro es que me encuentres dormido

Duo. Buenas noches mi amor

Heero. Buenas noches cariño

Con un tierno beso la pareja se despide, Heero se va a la habitación de ambos y Duo se queda a tomar un poco de café. A Heero los recuerdos de su anterior aniversario de vez en cuando lo atormentaban, el hecho de casi perder a Duo a causa de Quatre. En la otra mesa, terminan de cenar Reelena y los demás; Lucrecia y Zechs deciden retirarse a su cuarto, mientras Reelena y Traize se quedan con la asistente de él.

Traize. Reelena ¿qué me cuentas?

Reelena. Deja en paz a mi hermano

Traize. Vaya, no me refería a ese tipo de conversación

Reelena. De verdad señor Traize, deje a mi hermano, él está casado con Lucrecia

Traize. Yo jamás le he puesto una pistola ni le he obligado a tener una intimidad conmigo

Reelena. Conoce muy bien a mi hermano, difícilmente él dice que no

Traize. Mira Reelena, no me interesa tu opinión, tu hermano es muy preciado para mí y no voy a dejarlo en paz solo porque tú me lo hayas pedido

Reelena. ¿Esas tenemos señor?

Traize. Esas tenemos señorita

Reelena. Lo dejo en paz, que pase buenas noches

Traize. Antes de irte... Reelena, yo te aprecio mucho, me gustaría que pudieses entender y que no me odies

Reelena. ¿No odiarlo y entenderlo, creo que el único aquí que no ha entendido que mi hermano es lo único que tengo y lo que más me importa como para verlo sufrir, es usted

Las palabras de Reelena habían sido determinantes y rudas, Traize sabía y conocía muy bien el carácter de Reelena y sabía de antemano que ella jamás permitiría la relación de él y su hermano, sobre todo porque Reelena era fiel y ferviente amiga de Noin. Desde que Zechs había conocido a Lucrecia, ella y Reelena habían entablado una amistad muy profunda, para Reelena Lucrecia era como su hermana, Lucrecia también consideraba a Reelena como su hermana menor.

Al quedarse solo con su asistente, Traize decide levantarse de su asiento e ir a la mesa donde Duo se encontraba, al verlo Duo se sorprende y a la vez intriga

Traize. Buenas noches

Duo. Buenas noches joven

Traize. ¿Estas solo?

Duo. Aquí en la mesa sí, pero he venido a Hawai con mi novio

Traize. Con compromiso ¿eh?

Duo. Así es, por favor retírese

Sin ánimo de hacer caso a la petición de Duo, Traize se inca y agarra una de las manos de Duo y se permite besarla tentadoramente, los labios de Traize eran bastante cálidos y una sensación agradable hace enchinar la piel de Duo, rápidamente Duo jala su mano y se levanta de la silla

Duo. Ay, no otra vez

Traize. ¿Otra vez?

Duo. No tengo porque darle explicaciones, solo quiero que me deje en paz

Traize. Me gustas mucho, desde que té vi en la playa me ha cautivado tú belleza

Duo. Hágame un favor y hágaselo a usted, déjeme en paz y evítese problemas

Traize. No comprendo

Duo. Solamente déjeme tranquilo, es todo

Duo saca de su bolsillo el dinero que Heero le ha dado para pagar la cuenta y lo avienta a la mesa, Traize sonríe y se queda pensando que aquel chico tiene mucho carácter mientras le ve retirarse altaneramente. Duo se va pensando en que no quiere repetir la situación que vivió en Las Vegas con Quatre, pero a la vez se va pensando en aquel joven y su ímpetu para atreverse a besarle la mano frente a toda la gente que ese día llenaba el Restaurante, Traize había causado una impresión en Duo que él no quería aceptar, por mucho que se lo negara a sí mismo él creía que ese joven era muy guapo y que poseía una gran personalidad.

Continuará…

Gracias a T-chan, Mitsuki y a Forfirith por sus comentarios en el capítulo anterior, espero que éste capítulo también les haya gustado y que me sigan dejando sus reviews, muchas gracias de nuevo y nos estamos leyendo, bye