Prólogo

Apartamento de Leon, Nueva York

1 de Septiembre del 2004, 20:40 PM

La oscuridad cubría la Gran Manzana, como tratando de ocultar la clase de cosas horribles que pasaban a diario en aquella metrópolis, pero un policía, solo uno de aquella ciudad, conocía horrores mucho peores.

"Raccoon City" aquel nombre llegó de pronto a su mente mientras aparcaba su auto frente al apartamento: no era un coche barato, desde luego, aunque tampoco llegaba a deportivo, se parecía más bien a un coche fúnebre, pues era completamente de negro, al conducirlo, se sentía más chofer que guardaespaldas.

"¿Cuál era la razón por la que pensaba en aquella desaparecida ciudad?" Posiblemente las fechas que transcurrían, aún después de 6 años no podía olvidar aquella tragedia, algo que esperaba que no volviera a ocurrir.

Llevaba algunos meses conviviendo la mayor parte del tiempo con la familia presidencial, muy acogedora y simpática, al igual que Ashley, supieron agradecerle su exhaustiva labor, pero él no quería recompensa, sólo quería que le dijeran de una vez donde tenían a Sherry.

"Sherry" Aquel nombre sí que le daba recuerdos, pero más que de ella, era el recordar a aquella joven que le ayudó a escapar.

- "Claire" - pensó Leon, momentos antes de negar con la cabeza, tratando de hacer desaparecer aquellos recuerdos sin resultado - "¿Dónde estarás?"

Tras dejar bien seguro su coche, entró en el jardín donde sus dos dobermans lo saludaron con cariño, era irónico tener en su casa aquella clase de perros, tras lo de Raccoon, pero había conseguido apreciarlos y no compararlos con los cerberus.

- ¡Ark, Krauser! - exclamaba el agente, saludando a sus amigos, pero al pronunciar el nombre del más joven, pensamientos de tristezas nublaron por un momento su mente - "Krauser. ¿Por qué te dejaste convencer por alguien como Wesker? Solías ser un buen agente, uno de los mejores compañeros que he tenido, como Ark y Bruce eras un soldado con ideales inquebrantables... "

Aquellos pensamientos tan tristes desaparecieron al momento en que Krauser le empezó a lamer, mientras Ark lo tiraba al suelo para demostrarle también su cariño.

- ¡Ja, ja, ja. Basta, chicos, tengo que descansar. - como si entendieran lo que el agente les dijo, los perros se apartaron y se dispusieron a vigilar la zona -

Leon observó el apartamento, quizá no era muy lujoso pero tampoco le gustaba vivir como un rey, aunque los del FBI le habían mostrado al inicio una mansión, él desconfiaba de ellos, para él el Gobierno para el que trabajaba no distaba mucho de la forma de actuar de Umbrella, el chantaje, tendrían otros fines, pero los métodos eran los mismos, por ello cuando le mostraron la mansión donde pensaban dejarle, se sintió como si lo estuvieran sobornando.

Pero la familia presidencial era otra cosa, por lo menos estaba seguro de que con presidentes como el Sr. Graham, el país prosperaría, tras el rescate de Ashley, él no dudó en ofrecerle su casa, pero rechazó la oferta, no quería aprovecharse, en cuanto recuperara a Sherry se iría lejos de EEUU. No deseaba permanecer más en aquel país, que fue el mejor cliente de Umbrella.

Frente a él, cerca de la puerta de entrada, habían dos guardias de seguridad que había puesto el FBI para "protegerlo", pero sabía que lo espiaban, las razones no las conocía, pero estaba seguro de que lo vigilan. Por eso quería marcharse, estaba harto de tener que vigilarse las espaldas en su propia casa

Al pasar echó un vistazo a los guardias, ambos eran fornidos y no medían menos de dos metros de altura, sostenían cada uno una MP5 y una pistola enfundada.

Entró en el apartamento, lo primero que vio le provocó un sobresalto, el director del FBI estaba delante de él, sentado en el sofá cama del salón, al menos seis hombres vestidos de negro rodeaban la sala, todo estaba revuelto.

- ¿Qué demonios ha pasado aquí? - preguntón Leon extrañado -

- Lamento lo sucedido, Sr. Kennedy. Su apartamento a sido atacado. - respondió el director del FBI, un hombre de mediana estatura, avanzada edad y expresión irónica, como si subliminalmente se estuviera burlando de él -

- ¿Atacada? ¿Quién fue el responsable?

- No estamos seguros, pero imaginamos que debe ser obra de ese hombre.

- "Wesker" - pensó inmediatamente - ¿Y por qué los perros no hicieron nada? - preguntó con desconfianza -

- Aún no estamos seguros, parece ser que la entrada de los que sean que hayan entrado en su apartamento, lo hicieron de forma sigilosa -

- No tiene sentido.

- Es mejor que hablemos esto con calma. Siéntese., por favor.

Uno de los hombre de negro, que parecía ser el jefe por su aspecto de rudo veterano, movió la única silla que no estaba destrozada para que Leon pudiera sentarse frente al director, luego volvió de forma inmediata a su puesto.

- Bien, ahora estoy sentado. ¿Podría explicarme más detalladamente lo que ha ocurrido?

- No hay tiempo, sabemos de buena cuenta que ciertas personas que usted conoce han sufrido atentados, por suerte sus habilidades les salvaron.

- ¿Qué personas? - preguntó Leon bastante interesado, aunque su pesimismo le hacía saber exactamente a quienes se refería -

- Los miembros de ALPHA, que tanto ayudaron a nuestro gobierno a destapar Umbrella. - decía el director, mientras Leon soltaba un suspiro de angustia, dejando caer su cabeza con las manos sobre su frente, temiendo lo que iba a escuchar - Jill Valentine, Chris Redfield, Barry Burtun, Rebecca Chambers y Carlos Olivera.

- ¡No dios! Creí que después de lo de Umbrella ellos estarían tranquilos.

- Lamento ser mensajero de malas noticias, Sr. Kennedy, créame. No hay tiempo de informarle de cada uno de los casos.

- Dice que no hay tiempo... ¿Por qué? ¿Pasa algo? - preguntó Leon bastante nervioso y preocupado por la salud de sus viejos compañeros -

- El Pentágono ha dado órdenes muy precisas al respecto de este tema, no queremos que Umbrella resurja, puede que solo sea un rumor el que Albert Wesker este implicado en esto pero es la más probable. Requerimos que contacte con sus viejos compañeros y juntos, acaben con ese terrorista.

- ¿¡Está loco? ¡Llevan 6 años presionándome para que hago lo que quieran! ¡Aún no sé nada de Sherry! ¡Prometieron que si les ayudaba a destapar las actividades de Umbrella sin que su gobierno fuera perjudicado nos dejarían en paz! - exclamaba furioso, hasta tal punto que uno de los guardias hizo ademán de querer "tranquilizarle" pero un gesto del director fue suficiente para que no lo hiciera -

- Cálmese, Sr. Kennedy. Esta ser su última misión, si acaba con la organización terrorista de Wesker, le entregaremos a la niña, y no solo eso, sino que les daremos una vida lejos de los EEUU . ¿No es eso lo que tanto ansía?

Si aquel hombre no fuera el director del FBI, posiblemente le partiría la cara, pero sí lo era, además, le convenía cumplir esa misión, y estaba seguro de que sus compañeros, sobretodo los que habían sido miembros de STARS en Raccoon City, tenían cuentas pendientes que resolver con aquel tipo.

- Trataré de convencerlos. - dijo Leon al fin -

- Me alegro. Aquí tiene el número de teléfono, están en su base en Canadá. - el anciano le entregó una hoja en blanco, pero Leon sabía como hacer que el dichoso número se mostrase - No olvide pulsar el código de seguridad para que ningún satélite pueda escuchar su conversación.

- "Excepto ustedes" - pensó - ¿Podría explicarme en que consiste exactamente mi misión? -

- Es muy sencillo, deberá ir a Europa, investiguen, estoy seguro de que están acostumbrados. Pero he de pedirle un favor, mañana deberá despedirse de su trabajo como guardaespaldas de la familia presidencial... - leon carraspeó, eso era lo único que le dolía de dejar los EEUU - Pero durante media jornada debe proteger al presidente, dará una conferencia en la que trataremos de reducir el armamento biológico. Aunque no lo crea se ha vuelto más famoso que el nuclear en los últimos meses.

- Me imagino que todo tiene que ver con Umbrella.

-Así es, Sr. Kennedy, pero eso ya no tiene que ver con su persona, cumpla su misión, y olvide todo lo que ha hecho por este país. Adiós Sr. Kennedy, le echaremos de menos aunque no lo crea.

Y así, el FBI le daba las últimas órdenes, proteger a la familia presidencial durante una conferencia sobre las armas biológicas, y reunir al equipo para encontrar y destruir a la organización terrorista de Wesker. Leon suspiró, tendría que descansar mucho, pues pronto no podría hacerlo.

Universidad George Washington, Nueva York

2 de Septiembre del 2004, 14:30 PM

Para Leon no era fácil lo que tendría que decirle a Ashley, se llevaba bien con ella y su familia pero ahora debía dejarles, y no sabía como decirles, por la mañana se había portado borde con ella mientras la acompañaba a ella y al chofer, pero en aquel momento no sabía como responder ante ella.

De pronto sonó el timbre, las puertas de la universidad se abrieron dejando paso a una alocada muchedumbre deseosa de salir a divertirse, pero entre todas aquellas personas, sólo una caminaba con tristeza, llevando entre sus manos un cuaderno rosado con una nota que sobresalía de entre las hojas. La chica levantó la cabeza mostrando una cara empañada en lágrimas, al observar a Leon, cuya mirada impasible había desaparecido, la rubia joven se desmayó, al tiempo, que el agente salió corriendo y gritando.

- ¡Ashley! ¡Ashley!

Por suerte, un estudiante la pudo sostener para que no cayera al suelo, se trataba de un chico normal, con gafas, vestido de uniforme y de expresión alegre, lo único que lo resaltaba era la pelusilla que recorría el mentón.

- Tranquila, As, todo irá bien. - le dijo el estudiante a la chica, que trataba de reponerse, caminando con torpeza hasta terminar cayendo en brazos de Leon -

- ¿Qué ha ocurrido Ashley? - preguntó Leon al ver la dificultad que tenía la hija del presidente para mantenerse en pie -

- Mis... padres... mis padres han... muerto. ¡MIS PADRES HAN MUERTO! - gritó cayendo al suelo de rodillas con el rostro bañado en lágrimas -

Para Leon aquella era una noticia fácil de asumir, no podía hacer nada, se había quedado paralizado, sólo pudo observar como el estudiante trataba de animar a Ashley.

- Ya, cálmate, As.

- Basta, Lionel, agradezco tu ayuda, pero déjame sola por favor. - le dijo entre sollozos -

- Pero..

- ¡Vete! ¡vete de una vez! ¡Qué se vayan todos! - exclamó furiosa corriendo al exterior. Lionel hizo ademán de seguirla pero León se lo impidió -

- Sr. Kennedy, debe dejarme ir con ella, esta mal... - suplicó Lionel -

- Antes... quiero que me cuentes... como ocurrió todo... ¿Cómo murió la familia presidencial? ¿Dónde? ¿Cuándo? - preguntaba Leon nervioso, tratando de asimilar la información que acababa de recibir -

- ¿No lo sabe? ¡Fue en la conferencia!

- ¿La conferencia? - preguntó extrañado mirando su reloj - faltan dos horas...

- Parece ser que fue antes, a causa de las amenazas que estaban recibiendo. Es extraño que no lo supiera, porque se ha convertido en la noticia del año, todos hablan de eso, sale en todas las noticias... - decía el estudiante, sin que Leon le prestara atención, pues acababa al recoger el cuaderno de Ashley la nota que guardaba se sobresalió y su interés en lo sucedido le llevó a leerla -

Srta. Graham, lamento informarle que su familia, la familia del presidente de los EEUU incluyéndole, ha sufrido un atentado que ha acabado con su vida .Como sabrá a través de su padre, la hora prevista para la conferencia fue trasladada a las 13:00 PM, con la intención de evitar que esto sucediera, temíamos por la integridad de su padre e incluso de usted y la Sra. Graham, a causa de las continuas amenazas que la Casa Blanca ha recibido

Aún investigamos quien provocó este atentado que acabó con tantos miembros importantes de la ONU. Pero sabemos como, armas químicas, es una ironía que sean precisamente ese tipo de armas la que impidió que se desarrollara una reunión que podría haber impedido el terrorismo biológico, nuestra teoría es que este atentado es obra de algún perturbado terrorista, que quiere extender el caos en nuestra nación, pero le prometo que este acto no quedará impune, se lo juro por mi patria.

Atte. Richard Michels, Director del FBI.

Mientras leía aquella nota, notaba el cinismo de su autor, pero la desconfianza creció más, al darse cuenta que por detrás había también unas palabras, escritas con bolígrafo, sabía bien que la tinta usada desaparecería en aproximadamente un minuto y eso le hacía sospechar.

También le doy constancia que su guardaespaldas, Leon Scott Kennedy, falleció durante el atentado, es una pérdida que nos duele al ser él uno de nuestros mejores hombres, lo echaremos de menos en el departamento.

Un gesto de furia deformó su rostro, cosa que asustó a Lionel, con todas sus fuerzas el agente corrió hacia su coche, entró de forma bestial y descuidada, y arrancó a toda velocidad mientras el estudiante cogía la nota y observaba como desaparecía.

Apartamento de Leon, Nueva York 15:15 PM

La puerta se abrió bruscamente, Leon estaba realmente furioso y no se llegó a fijar en que, en la cocina, sus "guardianes" tenían apresada a Ashley, que no pensó en un lugar mejor donde ir que el apartamento de Leon.

Uno de los tipos, de color y calvo, hizo señas para que su compañero, de aspecto asiático, atacara a Leon, quien había visto una nota en la mesa del centro del salón, mientras la leía, el asesino se acercaba sigilosamente con un cuchillo.

Sr. Scott Kennedy, he de informarle que hemos cambiado la hora de la conferencia a las 13:00 PM, por lo tanto usted ha de estar ahí para proteger a la familia Graham de un posible atentado. Le pido que hable inmediatamente con los miembros de ALPHA, es de vital importancia que detengamos estos movimientos terroristas cuanto antes. Estamos dispuesto a decirle exactamente donde está la niña después que cumpla esta última misión.

- "De modo que querían que yo fuera. Malditos cobardes"

El asesino levantó con fiereza el cuchillo pero, por muy silencioso que había sido el movimiento incluso cuando estaba a punto de rajarle, Leon escuchó un ligero ruido, sin más dio una patada giratoria que le partió la muñeca a su atacante, y antes que el arma cayese al suelo, Leon le partió el cuello de un certero golpe de kárate.

Desenfundó el arma y dio media vuelta inmediatamente al oír una pisada, sabiendo que había otro más, pero no pudo hacer nada al ver que el asesino tenía agarrada a Ashley con un a mano y le apuntaba con una Desert Eagle con la otra.

- Suéltela, no tiene nada que ver. - suplicó Leon sin dejar de apuntar -

- Piense un poco más en la situación, si me dispara, hay un 50 de posibilidades que dañara a la chica, y si acertara, no me mataría con una Beretta, en cambio yo, le estoy apuntando con una Desert Eagle capaz de reventar cualquier parte del cuerpo a donde apunte, sin importar que tenga o no chalecos antibalas. Tire el arma, le prometo que será rápido e indoloro.

Leon carraspeó, él tenía razón, con lentitud bajó la pistola, pero observando bien los movimientos del asesino, por s acaso tenía oportunidad de dispararle.

- ¡Leon no! ¡No lo hagas! ¡Dispara!

- ¡Cállate mocosa! - exclamó el asesino, pero Ashley le mordió la mano y forcejaron por un corto periodo de tiempo en que el asesino bajó la guardia, momento que Leon aprovechó para volarle la cabeza -

La bala atravesó el aire a velocidad supersónica, y luego destrozó el cráneo del "guardián" de Leon, sin más, Ashley corrió a los brazos de leon que le respondió con unas palmadas en la espalda, pero un sonido parecido irrumpió enseguida en el apartamento y Leon supo que no se trataba del "eco" .

Y mucha razón tenía, se trataba del director del FBI, el Sr. Michels, acompañado de unos siete u ocho hombres fuertemente armados y vestidos con el uniforme militar de la desaparecida Umbrella.

- ¡Qué escena más enternecedora! ¡Bravo! Cómo para hacer una película en Holliwood... - exclamó con sarcasmo -

En un arranque de ira, pero con la mente en blanco Leon se lanzó a por Richard, inmediatamente se produjo entre ellos un espectacular combate marcial digno de una película de Jackie Chan, en la que al final el director del FBI obtuvo ventaja y ganó el combate, neutralizando a Leon.

Los mercenarios levantaron al agente y lo obligaron a sentarse en el sofá junto a Ashley, estaban atados y el director daba vueltas a su alrededor sin dejar de mirarlos.

- ¿Te sientes bien Leon? Con la técnica que usado sobre ti debes tener los huesos rotos... - le dijo a Leon con cinismo - Verás te contaré los titulares de mañana: "Tras el atentado contra su familia, la Srta. Ashley Graham se suicida junto a su amante en su apartamento" Ja, ja, ja. Como si lo estuviera viendo.

- No te saldrás con la tuya... ¡Agh!

- Ya lo he hecho, mi viejo amigo. Verás todo estaba calculado a la perfección, el virus A423 acabaría con todos los miembros implicados en la lucha contra la guerra biológica, incluido el presidente, salvando al tráfico de BOW que ahora gobierna el Mercado Negro internacional. A la vez le eliminaríamos a usted y a los STARS recién venidos a nuestra querida ciudad, y todo habría sido perfecto, Ashley no habrá tenido que morir.

- Usted... ¡Usted mató a mi padre! - exclamó Ashley con furia, intentando atacar a Richard sin resultado, pues estaba muy bien atada -

- Lo ha hecho Sr. Michels, ha traicionado a su país... Y todo por unos cuantos millones. - dijo entre dientes Leon, conteniéndose -

- ¿Yo? ¿Traidor, YO? ¡Ja! El Sr. Graham fue el que traicionó a esta nación, quería acabar con nuestra mayor fuente de ingresos, y no sólo eso sino que tenía otros objetivos destinados a convertir este país en una débil y vulnerable aldea. ¡Yo lo sabía todo! Pensaba reducir a 0 el presupuesto militar, y usarlo para beneficio de otros países, mientras el nuestro acabaría cayendo en decadencia. ¡Era un loco reformista que habría acabado con los EEUU! Puede que haya aceptado dinero antes, pero le aseguro que por este acto no pedí ni un centavo. ¿Y sabe por qué? ¡Porque para que esta nación siga siendo la súperpotencia que es, necesita un presidente digno!

- ¿Como usted? - preguntó Leon con ironía -

- Veo que sigue pillando las cosas al vuelo, Krauser tenía razón sobre usted, es demasiado bueno en su trabajo como para que le dejamos vivir, es una pena que no haya muerto en España como habíamos planeado.

Aquellas palabras, hicieron que Loen empezara a atar cabos, seguramente había sido ese cabrón el culpable de que un buen soldado como Krauser acabara en manos de alguien como Wesker. Pero esas averiguaciones le llevaban a una pregunta.

- ¿Dónde está Sherry?- preguntó con rabia -

- ¿Sherry? La tienen mis jefes, es algo que supe hace 20 años, para ser presidente no basta con ser el favorito del público, se necesita tener el apoyo de grandes corporaciones, y yo lo tengo. Sólo le daré una pista, la chica se encuentra cautiva en Europa. ¿Pero dónde? Ja, ja, ja. Nunca lo sabrá. Adiós Sr. Scott Kennedy, temo que después de haber dado la noticia de su muerte no puedo permitir que siga con vida.

Richard apuntó a Leon con una pistola con silenciador, pero justo cuando iba a apretar el gatillo, Krauser, el doberman de leon, se lanzó sobre él, rápidamente el agente sacó una navaja que guardaba siempre en el pantalón y se liberó de las cuerdas, entes de que nadie se percatara de su liberación, liberó también a Ashley y le dijo que se escondiera de inmediato.

De inmediato, los mercenarios se preocuparon de eliminar a krauser, a leon le dolió cada sollozo de su fiel perro, pero no vaciló en coger su Beretta y volarles la cabeza sistemáticamente a cada uno de aquellos asesinos, lamentablemente fue neutralizado por un cobarde que lo curio por la espalda, además que otros dos lo apuntaban en la cabeza con sus rifles a la cabeza, uno de ellos se acercó al director del FBI quien miraba la profunda herida que cubría su brazo con terror.

- No... No puede ser... El Virus-T no debería haberle hecho efecto hasta pasadas tres horas, y sólo hace diez minuto que se lo administramos. - decía asustado, sorprendiendo a leon, quien había observado que su fiel doberman era desde el ataque un cerberus - "Eso quiere decir qué... " - pensó aún más aterrorizado al ver como el mercenario le apunaba sin vacilar con el rifle - ¡No! ¡Espera no! - pero el asesino no escucho sus gritos, gastó todo el cargador en el cuerpo de Richard, para luego decapitarlo con un cuchillo de supervivencia -

La escena no había sido digerida aún por el agente, cuando un policía uniformado entró al apartamento aún más bruscamente que leon, y disparó a quemarropa contra el mercenario que apuntaba a Leon, éste sin esperar un segundo, le dio un codazo al que le apresaba en el estómago para luego partirle el cuello, el último que quedaba, trató de disparar pero no tenía balas, entonces una voz desde la puerta, surgió.

- Es un delito muy grave atentar contra la vida del director del FBI. - el mercenario dio media vuelta para observar a Barry Burtun, el fornido ex-miembro de los STARS de Raccoon City, quien iba armado nada menos que con una ametralladora gatling - ¿Sabes con que se paga? - preguntó con seriedad mientras el mercenario trataba de escapar, la voz de Barry y el tiempo empezaron a ir a cámara lenta para él - Se paga... Con la muerte. - una incesante lluvia de balas destrozaron por completo el cuerpo del asesino -

Ashley salió de su escondite para observar como Leon le daba la mano al policía, dando a entender que eran amigos.

- ¡Kevin! ¡Cuánto tiempo! - exclamó con alegría Leon -

- Desde luego, Kevin Ryman siempre está para ayudar. - dijo con su tono humorístico de siempre -

- ¿Kevin Ryman? ¡Bah! ¡Si Chris y yo fiemos los que más hicimos! - apuntó Barry -

- También me alegro de verte a ti, Barry. - le dijo Leon al grandullón, estrechándole la mano -

- ¡Así que esta monada de chica es la hija del fallecido presidente de los EEUU! - exclamó Kevin, causando que Ashley se molestara un poco -

- ¡Déjense de festejos y larguémonos de aquí! - ordenó Barry, orden que todos acataron de inmediato -

Al salir, Leon contempló doce cadáveres, también uniformados como soldados de Umbrella, sobre un sedán negro estaba Chris, recargando la escopeta.

- Tras los atentados investigamos y supimos que habían sido obre de agentes del FBI, por eso te fuimos a buscar. - le contó Kevin -

- No debieron hacerlo - espetó Leon - Eso es precisamente lo que querían, que os atrajese a una trampa, por eso me contaron lo de la misión.

- ¿Cuál misión? - preguntó Kevin intrigado -

- Me dijeron que Wesker estaba implicado en los atentados y que debía reunirlos e ir a Europa para detenerle. Ahora sé que sólo querían que los trajese a una trampa para eliminarlos y acabar con la gente capaz de impedir sus negocios.

- Te equivocas leon, no se trata de Leon. La información que te dio el viejo ese no es tan falsa. - corrigió Barry, causando sorpresa en Leon y Ashley - Estoy seguro que su jefe era Wesker, y que él es el que tiene a Sherry.

- ¿Wesker? La verdad es que si me lo hubieras dicho antes, no te hubiera creído, pues me imaginaba que pese a los métodos que utilizaban, los fines de esta nación no eran los mismos que los de Umbrella, pero tras lo que dijo Richard sobre krauser... Empiezo a sospechar que todo lo del secuestro era una tapadera, para conseguir ellos el control sobre las plagas. - dedujo Leon -

- Nos tienes que contar todo, pero antes, debemos poner a la cría a salvo. - apuntó Barry -

- ¡No soy una niña! ¡Tengo 20 años! - gritó Ashley -

- Lo sabemos preciosa, lo sabemos...

Todos se callaron una vez cerca del coche, Chris seguía igual que siempre, fuerte y a la vez teniendo aquella mirada simpática que agradaba a todos, una mirada que Barry ya no podía imitar tras la muerte de sus esposa..

- ¿De qué hablaban? - preguntó Chris intrigado -

- Es largo de contar... - dijo Kevin -

- Debemos poner a Ashley a salvo - puntualizó Leon -

- ¡No quiero quedarme esperando mientras ustedes se enfrentan a los asesinos de MI padre! - exclamó Ashley con rabia, pero Leon le sujetó la cabeza y le dirigió una mirada seria, una mirada que nunca le había visto -

- Escúchame Ashley, tú debes quedarte, no tienes nada que ver en esto, sólo Richard michels sabía que me habías visto. De todos modos Kevin te cuidará, te dejaremos con el en su apartamento.

- En su... apartamento. - repitió Ashley pálida, como asimilando lo que le decía Leon -

- ¡Vaya! Je, je, je. No es que no me agrade cuidar a esta.. belleza... - decía Kevin observándola con ojos pícaros - pero me sería más divertido ayudarles.

- ¿¡Vas a dejarme con ese pervertido? - gritó Ashley amargada -

Kevin sólo sonrió ante el comentario de Ashley, leon simplemente entró en el coche junto con Chris , que ya había arrancado el coche. Pero antes de que Ashley, se subiera con ellos, Barry le dijo algo que el policía también oyó.

- No te preocupes pequeña, Ryman no te hará nada, porque si lo hace... - en aquel momento barry miró sobriamente a Kevin, que sonría de forma estúpida junto al coche - Le arranco las piernas.

Pese a que a Ashley no le agradaba que la llamaran "pequeña", las palabras de barry le recordaron a su padre cuando ella venía acompañada, y pese a que eran sólo amigos, su padre les hablaba, cosa que llegaba a divertirle, esos recuerdos la hicieron sonreír.

Pero como si hubiera alguien que no quería que las cosas no acabaran tan bien, del apartamento surgió Richard Michel, sin cabeza y convertido en zombie, la sorpresa fue tal, que todos se metieron de inmediato en el coche y salieron a toda leche, no por miedo a aquel muerto viviente, sino a los coche del FBI que vendrían a investigarlo todo, pero cuando se alejaban, pudieron ver como el apartamento de Leon volaba por los aires.

- "De modo que Wesker tenía preparado todo para que Richard y los mercenarios murieran también. Supongo que no le convenía una persona tan "patriótica" . Bueno, al menos eso nos libra un poco de él, si piensa que estamos muertos no será más fácil cogerle. " - fue lo que pensó Leon -

Justo en aquel memento vio a Ark, su otro perro herido, una sensación de nostalgia se apoderó de él, pero Kevin uso su mano en su hombro y le dijo unas palabras que lo tranquilizaron.

- No te preocupes, a éste le dimos el antivirus a tiempo.

Miami, EEUU 18:50 PM

Habían pasado casi 4 horas desde lo ocurrido en el apartamento, Leon conducía algo apurado pro as calles de Miami en busca de algo en especial.

Lo primero que hicieron fue dejar a Ashley y a Ark en el apartamento de Kevin, donde vivían los Ocho Supervivientes de Raccoon City, además de él, los STARS y... Claire. En aquella casa tenían de todo y era un refugio seguro pues eran agentes más encubiertos que los STARS, nadie, ni el Gobierno sabía de ellos, que fueron de gran ayuda en su dura lucha contra Umbrella.

Una vez asegurada Ashley, Barry y Chris le informaron de la situación, los miembros de ALPHA, se habían refugiado en Miami tras los atentados, aunque el FBI les propuso una granja en kansas, sabían de buena cuenta que cuando aceptaron y no fueron tras descubrir quien estaba detrás de los ataques, aquella granja estalló.

Pero Chris le pidió un favor en forma de carta, que aún no había leído, le dijo que no era prudente ir todos juntos y que le hiciera el favor, si todo salía bien se verían en el puerto a las 20:30. León frenó un momento, pues el semáforo estaba en rojo, y se dispuso a leer la nota.

Leon, ya sabes que no es bueno que estemos todos juntos en ningún momento, ahora que sabemos que el FBI nos busca por órdenes de Wesker, sabemos que podrían atraparnos en cualquier momento, y es mejor que no nos cojan a todos de un golpe, aunque confío en que todavía no sepan donde estamos, hablamos del FBI y es mejor no tentar a la suerte.

Con el motivo de esta separación te pido que busques a Claire en la dirección de abajo, llevo dos años sin saber de ella y estoy preocupado, aunque no me gustaría llevarla a más líos, creo que estaría más segura con nosotros que en este país, la suerte está de nuestro lado, hace unos días me informó LJ que vive en Miami, contáctala y trata de convencerla para que se vaya contigo, es mejor que los de ALPHA no pisemos de nuevo este país, incluso he hablado con los OSRC de esto, ojalá que lo piensen.

Arlington Road, 1123, Miami, USA

Una vez el semáforo se puso en verde, Leon fue a toda la velocidad que le permitían las señales de tráfico, pu0es no quería alertar a las autoridades, y enseguida llegó a aquel lugar, de inmediato convirtió la carta en una bola de papel que posteriormente se tragó, la digestión se ocuparía de que esa información desapareciera, un truco que aprendió en su entrenamiento.

Aparcó el coche con suavidad, bajó vestido de civil pero armado, observó la casa, que tenía más pinta de campo que de ciudad, a paso lento fue acercándose a la casa, recordando cada uno de los momentos que vivió junto a Claire en raccoon City, su brusca despedida fue el último recuerdo que pasó por su mente antes de abrir la puerta...