Capítulo 19
Mamá por un Día
Hiroshi llevó a Angie a la casa, para mostrarle sus trabajos fotográficos. La pareja entró tomada de la mano y se petrificó al ver a Rin y Sesshoumaru comportándose como un par de chiquillos. Riendo y besándose. Sesshoumaru la cargó mientras le repetía cuánto la amaba.
-Mi amor, Hiroshi está aquí…
Sesshoumaru la volvió a dejar de pie y la besó en la mejilla.
-Hola…
-Mamá, papá… recuerdan a Angie…
-Claro que sí! Pero pasa, qué hacen ahí parados como estatuas?
-Están simplemente felices? O pasó algo?
-Sí! Ya no estoy en riesgo!
Hiroshi sonrió.
-Me alegra mucho, felicidades…
-No es lo mejor, mi amor… son gemelos!
-Qué!
-Sí! Estaban abrazaditos, y… los dos están perfectamente bien y saludables…
Hiroshi abrazó a Rin y la besó en la mejilla mientras la felicitaba. Angie también la felicitó.
-Voy por Hoshi…
-Porqué no me dijiste que estaba en el colegio?
-No está. Está donde Inuyasha.
Después de que Sesshoumaru se marchara, Angie y Rin se quedaron en la sala mientras Hiroshi iba por sus fotografías. No pasó mucho antes de que Sanosuke bajara las escaleras.
-Mama, me duele…
Se acomodó en su regazo mientras Rin le acariciaba la cabeza.
-Cuando lloras te duele más, verdad?
-Quiero jugar…
-No puedes…
-Aún no se cura?
-No, ahora es que tiene el callo.
-Callo?
Rin le mostró el pecho de Sanosuke, allí tenía un abultamiento, parecía una pelotita.
-Ahí es que está sanando el hueso. Pero hasta que no esté duro, no puede volver a lo normal.
-Ya veo…
Sanosuke jugaba con las manos de Rin. Angie vio la fotografía de Sanosuke con los gatos.
-Puedo?
-Sí, claro…
Tomó la foto de la mesa.
-Es preciosa… fue un fotógrafo profesional?
Rin sonrió.
-Esa la tomó Hiroshi.
-Y con esa técnica?
-Sí, todas las fotografías que ves son de Hiroshi.
Angie se puso de pie y vio las fotografías. En ese momento, Hiroshi bajó las escaleras con un álbum.
-Estoy un poco cansada. Sano, vienes conmigo?
Rin y Sanosuke subieron las escaleras dejando a Hiroshi y Angie solos. Sanosuke se acomodó entre sus brazos.
-Mama, yo quiero estar con Hiroshi…
-Mi amor, Hiroshi tiene novia, y mientras esté con ella, no querrá que estén cerca.
-Hiroshi ya no me quiere?
-Claro que te quiere, mi amor. Pero cuando esté con su novia, le gusta estar solo. Ya verás cómo es eso.
Rin y Sanosuke jugaban usando un juego de palabras y reían a carcajadas. Sesshoumaru llegó con Hoshi y sonrió al verlos riendo.
-Mi amor…
La saludó con un beso y se acomodó en su lado de la cama mientras los veía jugar, Hoshi se sumó al juego. Luego de un rato, Rin interrumpió el juego.
-Mi amor… Sh! Papi se durmió…
-Shh!
-Sí…
Rin hablaba en un susurro.
-Hay algo que tengo que decirles, mis amores… saben que papi y yo vamos a tener un bebé…
-Sí! Por eso mami está enfermita…
-Sí, pero ya no. Y ahora, en vez de un bebé, vamos a tener 2.
Los niños no entendieron.
-Los dos bebés están creciendo dentro de mi pancita. Y van a nacer el mismo día. Van a tener dos hermanitos.
-Sí!
Sanosuke la abrazó y la besó.
-Y van a ser varones?
-No lo sé, mi amor…
-Yo quiero que sean varones…
Rin rió.
-Tal vez tengas suerte…
-Mama, y tu qué quieres que sean?
-Hm! Una bebita y un bebé.
-Y si no?
-No importa. Los amo por igual.
Sanosuke se fue a su habitación diciendo que le dolía y que quería dormir. Rin se quedó con Hoshi, que aún no comprendía lo que pasaba.
-Pero si mama ya no está enferma, como va a tener los bebés?
-Mi amor. Yo estaba enferma porque los bebés se podían ir al cielo. Pero ahora, los bebés se van a quedar aquí, y van crecer y después van a nacer,
-Y cómo caben?
-Mi pancita va a crecer mucho y ellos van a estar ahí adentro. Y cuando nazcan, vas a tener dos hermanitos menores.
-Más chiquitos que yo?
-Sí, mi amor.
Hoshi comenzó a llorar, su llanto despertó a Sesshoumaru.
-Qué pasó?
-Papa me va a dejar de querer!
Rin y Sesshoumaru cruzaron miradas un tanto desconcertados.
-Cómo está eso?
-Cuando nazcan los bebés, ya no voy a ser la más chiquita y papa no me va a querer!
-Pero Hoshi! Eso es imposible!
Rin reconoció que los celos de Hoshi serían un serio problema si los dejaba continuar.
-Hoshi!
La niña tembló al escuchar el tono de voz de Sesshoumaru.
-Hoshi, quién te dice esas cosas?
-E-es que…
-Hoshi, eres mi hija. Nunca te voy a dejar de querer.
-Pero ya no voy a ser tu princesa…
-Claro que sí. No ves que eres la única princesa? Eres la única bebita en toda la casa.
-Demo…
-Hoshi. No importa cuántos hijos tengamos. Los amamos a todos por igual. Así que tú seguirás siendo mi princesita, aunque nazca otra bebita.
Hoshi sonrió y lo abrazó.
-Papa nunca me va a dejar de querer?
-Nunca, nunca. Eres mi princesita.
Sesshoumaru la besó en la frente y continuó acostado.
-No vas a comer?
-Me duele la cabeza…
Rin lo besó en la frente.
-Hoshi, vamos a dejar a papi tranquilo…
-No… quiero a mi papa…
-Está bien, déjala conmigo.
-Que te mejores.
Rin bajó con Sanosuke. Hiroshi y Angie aún estaban en la sala y discutían sobre quién era mejor en juegos de videos. Rin sonrió al verlos.
-(Es bueno saber que el mar de hormonas está tranquilo).
-Mama…
-Dime.
-Me duele… tengo frío…
-Hace un poco de frío, te quieres poner un abrigo?
-Hai…
-Ve por él.
Rin se acercó a la pareja de adolescentes y descubrió que apostaban besos.
-Gané! Dame mi beso!
-Sí… cuando Rin-sama no nos vea…
-Mamá?
-Disculpen que los interrumpa, pero, qué tal si siguen ese juego después de la comida?
-Etto…
-A poco me dirás que te da vergüenza? Mamá…
-Pero es que…
-No te preocupes, ven. Y por cierto, dime Rin. Eso de señora me hace sentir vieja.
Rin le picó un ojo.
……………………………
Sesshoumaru apagó el despertador y se sorprendió al ver que Rin aún dormía. Se levantó y se metió al baño. Al salir, ella aún dormía. Se sentó a su lado y acariciando su rostro, la despertó.
-Mi amor… ya te cambiaste…
-Son las 7 menos 15…
-Kami! Qué tarde se me hizo!
Rin se quiso levantar, pero no pudo.
-Estás bien?
-No tengo fuerzas…
-Tú descansa, yo me encargo de todo hoy.
-Haré el desayuno…
-No harás nada.
Sesshoumaru la besó en la frente y salió de la habitación. Antes de notarlo, Rin se volvió a dormir.
Sesshoumaru levantó a Hiroshi y luego a Hoshi, mientras la bañaba, terminó bañado por segunda vez, luego levantó a Sanosuke para que se bañara y darle sus medicinas. Le cambió las sábanas y bajó a la cocina y les sirvió cereal con leche, pensó que no tenía tiempo y se sirvió lo mismo. Mientras comía, vio que ni Hoshi, ni Sanosuke comían.
-Qué pasa? Coman.
-Papa, hoy es jueves…
-Y?
-Los jueves no toca cereal.
-Ah?
-Los jueves mama hace panquecas con mermelada y huevo frito con tocineta…
-Y jugo y leche.
-(Kami! Si eso era lo que me hacía cuando nos casamos…) Pero Rin está enferma, así que se comerán eso hoy.
-Demo… comimos esto ayer…
-Ya hace mucho. Coman que se me hace tarde.
Los niños comieron con desgano. Finalmente, Sesshoumaru tomó su maletín.
-Papa, y la merienda?
-La qué?
-La comida del colegio.
-Er… no sé… qué les da su mamá?
-Sándwich y jugo. O galletas de las que ella hace…
Sesshoumaru entró en la cocina y no había ni jugo, ni galletas.
-No les da otra cosa?
-Sí, nos prepara obento!
-O-Obento!
Sesshoumaru no veía nada preparado. Vio una canasta con frutas y tomó una mandarina y una manzana, se las dio a Hoshi.
-Tendrás esto hoy. Sanosuke, deja que tu mamá descanse. Hoshi, vámonos.
Para cuando Sesshoumaru llegó a su oficina estaba mental y físicamente agotado. Vio una foto de Rin con los niños y sonrió mientras se preguntaba de dónde sacaba tanta energía. Muchas mañanas le daba los buenos días de una forma muy especial, seguía la misma rutina que él hizo y se pasaba el día trabajando en la oficina, un día mucho más agitado que el de él, que sólo asistía a aburridas reuniones. Al llegar a la casa y luego de ayudar a los niños con sus tareas, jugaba con ellos, preparaba la cena y le quedaban fuerzas para hacerle el amor.
Mientras revisaba unos balances, Sesshoumaru se comenzó a sentir somnoliento, así que decidió irse a la casa. Cuando llegó, Rin se daba un baño, se acostó sintiéndose como un costal de papas. Rin salió del baño y se sorprendió al verlo.
-Sessh!
-Estoy cansado!
-Mi amor…
Rin sonrió y se sentó a su lado.
-Sesshoumaru, qué pasó? No dormiste bien?
-Sí… o eso creí… cómo te sientes?
-Estoy bien. Parece que fue malestar del embarazo.
Sesshoumaru acomodó su cabeza en su regazo.
-Qué te pasó, mi amor?
-El sólo pensarlo me da dolor en todo el cuerpo…
Rin se inclinó sobre él y lo besó con ternura. Sesshoumaru le contó lo que había hecho. Rin sólo sonreía.
-Te estás burlando de mí!
-No es así! Jaja!
-Rin!
-Está bien, mi amor, es divertido. Te sientes cansado porque no estás acostumbrado…
-Pero tú haces eso todos los días.
-Sí, es verdad… pero yo soy su mamá y no me puedo rendir ante el cansancio. Verás, en tu trabajo esperan que des el 100 por ciento cada día, pero también tus hijos…
-Y yo…
-No te iba a poner entre la espada y la pared, pero sí. También mi lindo esposo espera que de el 100 por ciento de mí cuando estoy con él.
-Perdóname, preciosa…
-Por qué?
-Por no apreciar que cada día te puedas levantar y hacer tantas cosas a primera hora, que te puedas esforzar en tu trabajo y luego conmigo…
Rin sonrió.
-Eres dulce y adorable. Todo eso es parte de ser mujer. Una que otra de ser esposa, pero en esencia, es parte de mí.
Lo besó con ternura. Sesshoumaru se refugió en su regazo.
-Hazme un favor.
-Lo que quieras, mi amor.
-No me despiertes hasta mañana!
Rin rió a carcajadas. Sanosuke entró en la habitación. Y se acercó a la cama.
-Mama…
-Hola, mi amor!
Sanosuke se subió en la cama y la besó en la mejilla.
-Ya te curaste?
-Sí, me siento mejor…
-Y papa?
-Está cansado…
Sanosuke se acercó al oído de Rin.
-Mama… tengo hambre…
Rin rió a carcajadas.
-Mi amor, qué desayunaron?
-Cereal con leche.
-Sessh… quieres que te prepare desayuno también?
-Puedes?
-Claro que sí… ya te avisaré…
Rin bajó las escaleras. Después de un rato, Sanosuke lo despertó.
-Mama dice que el desayuno está listo…
-Ya?
-Sí…
Sesshoumaru sonrió. Bajaron las escaleras tomados de la mano. Al llegar a la cocina, Sesshoumaru la abrazo por la espalda, y la besó en el cuello.
-Te amo.
Rin sonrió y se dio media vuelta entre sus brazos, recibió el beso apasionado que le daba su esposo. Sanosuke rió mientras se escondía detrás de una puerta. Se separaron riendo. Después del desayuno, Rin llevó a Sanosuke a su cama y lo besó en la frente.
-Tienes sueño, verdad?
-Sí… mama?
-Dime…
-Te amo…
Rin sonrió ampliamente y lo besó de nuevo.
-Yo también te amo, mi amor…
-No me dejes solo, mama…
-Me quedaré hasta que te duermas.
Una vez que se durmió, Rin salió de la habitación. Sesshoumaru iba por ella.
-Qué tanto puede dormir?
-Pues duerme mucho por los calmantes… y como no puede jugar…
-Así que no despertará?
-No… Sessh!
Rin le sacó la mano de debajo de la blusa.
-No que estabas cansado?
-Estás bien o no?
-Sí estoy bien…
-Entonces no hay nada más que preguntar…
Rin trató de ahogar la risa mientras Sesshoumaru la levantaba en brazos y la llevaba a la habitación. Más tarde, Rin acariciaba el pelo rubio de su esposo mientras él tenía un oído pegado a su vientre. Lo besó y se abrió un camino de besos hasta los labios de Rin. Ambos rieron empapados en sudor.
-Si no estuviera embarazada, otra sería la historia…
Sesshoumaru se acomodó a su lado mientras reía.
-Te amo, preciosa, no quiero que lo olvides nunca.
-Sessh, cómo puedo olvidarlo si eres el padre de mis hijos?
Sesshoumaru la abrazó.
-Nunca me imaginé casado contigo… no de esta manera…
-Y qué manera es ésta?
-Feliz.
……………………………
-No es verdad!
Hoshi lloraba mientras se negaba a creer lo que la mujer le decía.
-Te digo que sí. Tú no eres su hija, ellos no te quieren…
-Mi mama sí me quiere! Y mi papa también!
-Tu papá? Él no es tu papá y tampoco la quiere a ella…
-No! Ellos se aman!
-ALÉJATE DE ELLA!
Hiroshi se apresuró hacia Hoshi y la abrazó. Miró a Sara con los ojos llenos de odio.
-No te le acerques! No tienes ningún derecho!
-Apoco eres su niñero? No vales nada, eres un inútil!
-Si soy tan inútil, no te me acerques otra vez. No quiero volver a verte jamás!
Sara le dio una bofetada. Hiroshi le ofreció la otra mejilla.
-Hazlo. HAZLO DE NUEVO! Y te darás cuenta de que no soy un niño! HAZLO! ENFRÉNTATE CON ALGUIEN CAPAZ DE RESPONDERTE!
-Mocoso insolente!
-HAZLO!
En ese momento sonó el celular de Sara.
-Menomaru? En la cárcel!
Hiroshi sonrió.
-De 2 a 5 años. Les dices a mis "hermanitos" que tengan una buena vida. Y a ti, no te quiero volver a ver jamás! Me escuchas? Jamás!
Hiroshi cargó a Hoshi y se la llevó de aquel lugar. Se sentó en un banco de cemento bajo la sombra de un árbol.
-Hoshi, qué te dijo esa bruja?
-Hiroshi!
Hiroshi la abrazó y le brindó consuelo.
-Con calma, cálmate… yo sé que esa mujer es mala…
-Me dijo que papa y mama no me quieren, que no son mi papa ni mi mama…
-Eso es mentira… Hoshi… es mentira… yo me acuerdo cuando tú naciste. Papá y mamá estaban muy felices de tenerte. Eres su primera niña. Y te quieren mucho porque son tus papás.
-Demo…
-Además… muchas veces es mejor tener papás de mentira que te quieren a papás de verdad que no…
-Cómo así?
-Esa vieja bruja es mi mamá de verdad. Y ya ves que no me quiere, ni yo a ella… pero Rin, es mi mamá de mentiras y me quiere mucho y yo también la quiero. Vamos a casa…
Una vez en la casa, Hoshi corrió buscando a Rin.
-MAMA!
-Hoshi! No corras en las escaleras!
-MAMAAA!
Hoshi resbaló y se cayó. Rin salió de la habitación.
-Oh, Kami! Sesshoumaru!
Rin bajó lo más rápido que pudo hasta Hoshi y la abrazó. De inmediato se manchó con la sangre que salía de su boca.
-Cálmate, mi amor…
Sesshoumaru llegó con ellas y la quiso cargar, pero Hoshi no soltaba a Rin.
-Hoshi, Rin no puede cargarte…
Sesshoumaru la cargó y la llevó al baño, Rin le lavó la boca.
-Porqué tiene tanta sangre?
-Se clavó los dientes… mi amor, te he dicho cientos de veces, que no debes correr en las escaleras…
Rin le terminó de curar la herida y le controló el sangrado.
-Nos vamos a bañar. Sessh, trae ropa para ella.
-Está bien…
Sesshoumaru fue por la ropa de Hoshi y Rin le quitó el uniforme, se metieron juntas a la ducha, Rin estaba arrodillada a la altura de Hoshi, trataba de detener su llanto.
-Qué pasó, mi amor? Porqué gritabas así?
Pero Hoshi sólo lloraba y se mantenía inerte. Rin la bañó y se bañó ella misma. Al salir, parecía como si se hubiese quedado sin lágrimas. Rin la abrazaba y Sesshoumaru permanecía a su lado, cruzaron miradas sin saber qué hacer. Hiroshi entró en la habitación.
-Papá, tenemos que hablar…
-Hiroshi, qué le pasó a Hoshi?
-Sobre eso es… fue esa mujer…
-Esa mujer?
-Sí… le dijo que no la querían, que no es…
-Mami sí me quiere!
-Claro que sí, mi amor…
-Y tú quieres a mi mami…
Sesshoumaru acarició su cabeza.
-La amo… y te amo a ti también…
Rin la besó y continuó abrazando. Sintió un fuerte dolor y no lo pudo ocultar.
-Rin, estás bien?
-Sí… sólo tengo que recostarme…
Rin se acomodó en la cama con Hoshi entre sus brazos.
-Tranquila, mi amor… olvida lo que ella te dijo…
-Hiroshi no es mi nii-chan?
-Claro que sí, mi amor… Hiroshi es hijo de tu papi, como tú…
……………………………………………
Rin estaba de vuelta en la oficina, al menos unas horas. Sesshoumaru fue a su oficina.
-Rin, esto que me mandaste está… Rin?
-Sessh…
Sesshoumaru se acercó a ella y se apoyó del escritorio, permitiendo que su cabeza descansara en su regazo.
-Qué pasa, mi amor?
-Algo no está bien…
-Rin, quieres que llame a un médico?
-No, no es conmigo… hay algo aquí que no está bien…
-Kami, no me asustes así. No te preocupes por eso…
-Sesshoumaru…
-Sí?
-Crees que hago mi trabajo bien?
-Claro que sí, mi amor, sino, yo mismo te lo hubiera dicho.
Rin sonrió, se recostó del sillón mientras se acariciaba el vientre.
-Creo que simplemente estoy cansada… han sido unos meses demasiado difíciles para nosotros…
-Hablas de lo de Sanosuke…
-Sanosuke, Hiroshi, Hoshi… argh! Esa mujer sólo sabe provocarme problemas!
Sesshoumaru sonrió y se inclinó para besarla, tomó sus manos y entrelazó sus dedos.
-Alguna vez te imaginaste casada con 5 hijos?
-Casada si, 5 hijos, nunca… y tú?
-Ni una ni la otra…
Sesshoumaru la iba a besar, pero Rin desvió la mirada.
-Cómo?
-Bueno, es que cuando era un rebelde sin causa, como me decía papá… nunca pensé en casarme… en estar todos los días con la misma mujer… eso cambió cuando te conocí…
-Eres un mujeriego…
-Era, preciosa… entonces me imaginaba viviendo contigo… pero nunca casados…
-Cuándo exactamente comenzaste a imaginarnos casados?
-Cuando Hiroshi me lo preguntó.
-Sabes algo?
-Qué?
-No eres bueno ni como mujeriego. Mira que embarazar dos mujeres… rompiste récord…
-Oye! Tengo excusas…
-Sí, cuales?
-Una, fue a la mujer que amo. Y la otra, estaba tan borracho que creí que era la mujer que amo…
-Y se supone que te perdone?
-No me perdones… pero no me lo recuerdes…
Sesshoumaru buscaba sus labios, pero ella lo esquivaba.
-Vamos, preciosa… eres la única mujer en mi vida…
-Más te vale, por que sino…
-Sí, mi comandante!
-En ese caso, te comando que me beses…
Ambos rieron y se besaron. Dejó de ser un juego y se convirtió en un beso apasionado. Al recordar dónde estaban, se separaron sonriendo. Sesshoumaru acarició sus mejillas.
-Vamos a comer?
-Hm… sí, tus bebés no me dejan en paz…
-Ahora son sólo míos?
Rin sonrió acariciando su vientre. Se fueron a un restaurante cercano de la oficina, almorzaron entre besos y caricias. Sesshoumaru le dio un poco de su postre.
-Hm! Delicioso!
Sesshoumaru sonrió.
-Más que yo?
-No hay nada más delicioso que tú, mi amor…
…………………………………………
Eran cerca de las 7 de la noche. Sesshoumaru fue a la oficina de Rin.
-Juraba que estabas en casa. Rin!
-Qué?
-Rin, estás abusando!
-Pero mi amor…
-Rin… camina…
Sesshoumaru le apagó la computadora y le cerró las carpetas.
-Estás abusando.
Rin sonrió y se puso de pie, lo besó con ternura. Sesshoumaru viró los ojos mientras la rodeaba con sus brazos.
-No trates de comprarme, que estoy molesto contigo.
-Pero mi amor…
Sesshoumaru trató de no sonreír, pero no pudo.
-Me encanta cuando me cuidas! Me siento tan… querida, protegida…
-Claro que te quiero, preciosa… qué tal si vamos a la casa y te sigo cuidando allá?
-Hm! De verdad me vas a cuidar?
-Claro que sí… compramos pizza y salsa extra…
Rin estalló en carcajadas. Sabía bien que Sanosuke y Hoshi, comían tanto que se quedaban dormidos en poco tiempo.
-Eres malo…
-Yo? Pero si los adoro… excepto cuando no me dejan cuidarte…
Rin sonrió.
-Vamos, me quiero dar un baño… me duele la espalda…
-Quieres un masaje?
-De verdad?
Sesshoumaru asintió y Rin lo besó. Al llegar a la casa, Sanosuke y Hoshi corrieron hacia Rin.
-Mama!
-Mama!
Rin se sentó en el sillón y los niños la abrazaron y la llenaron de besos.
-Llegó la cena!
-Sí!
Sesshoumaru dejó la caja de pizza sobre la mesa y Sanosuke y Hoshi se subieron en sus sillas, trataron de abrir la caja.
-Así que sólo quieren a su mamá… y yo, qué soy? Hígado picado?
Rin lo abrazó por la cintura y sonrió.
-No te pongas así, mi amor…
Rin lo besó.
-Denle un besito a su papá…
-No, no porque les digas…
Después de la cena. Sesshoumaru estaba sentado frente al televisor. Los niños fueron hasta él, lo abrazaron y lo besaron, cada uno en una mejilla.
-Te quiero, papi…
-Si, te quiero, papi…
Rin sonreía desde una esquina mientras los veía. Sesshoumaru sonrió y los abrazó. Con el tiempo, los niños se quedaron dormidos y Sesshoumaru los llevó a sus camas. Al salir de la habitación de Hoshi, fue a la suya, donde Rin se estaba desvistiendo y la abrazó.
-Gracias, preciosa…
-Por?
-No te hagas, sé que los enviaste.
-A quién y a qué?
-A Sanosuke y a Hoshi…
Rin sonrió.
-Los vi, mi amor, pero yo no los mandé.
-Rin…
-Lo hicieron solitos, mi amor. Te lo juro…
Sesshoumaru la besó apasionadamente mientras se deshacía de la poca vestimenta que le quedaba.
……………………………
(Obento es un servicio de comida, generalmente tiene arroz, ensalada, también puede tener sushi, sashimi u onigiri)
………………………………
Qué les pareció? Jeje
210! Yippei! Espero al menos 100 mas, ah? ;P
Bueno espero que les guste. Por cierto ahora sí que soy oficialmente una maromera de primera, vamos a ver si sobrevivo entre clases a las 9pm y aún asi logro escribir…X(
Besitos, Gracias a todas y este cap va dedicado a toodas que lo leyeron. Jeje
Mizuho