Los pasos de Ron se volvieron inaudibles, mientras que el pelirrojo se deslizaba como una serpiente por los corredores de la escuela. Eso de las rondas de prefectos tenía sus ventajas y una de ellas era que se podía perder en su tristeza sin que nadie lo mirara extrañado.

Quería llorar, millones de cosas pasaban por su mente, lo atormentaban, era como si Peeves se hubiera metido en su cerebro y no dejara de decirle lo malo, inútil y estúpido que era. Ese día había sido el peor de su vida

Las luces se apagaron

y dos historias se juntaron en la cama

para mezclarse entre ellas

aquí no hay protagonistas

no hay mas que dos novelistas

retratando en sus espaldas

tiernas y dulces caricias

Abrió la primera puerta que encontró, esperando estar solo.

Quien anda ahí?- preguntó una voz chillona, seguida de un restriegue de nariz.

Prefectura- respondió Ron con la voz más gruesa que pudo, tratando de ver en la oscuridad.

Weasley?-

Esa voz era conocida.

Lumos- el pelirrojo trastabilló- Par.. Parkinson?

Sí, que quieres-

Pansy Parkinson estaba sentada sobre una mesa, con la espalda encorvada y el rostro alterado por las lágrimas.

Que haces aquí?- Ron era torpe cuando se trataba de una chica llorando.

Nada, quería descansar un rato... ¿Puedes apagar la luz? Me molesta los ojos- la Slytherin sonaba sutil, educada; incluso volvió su rostro con miedo no con la antipatía de todos los días.

Ron lo comprendió al instante. Estaban iguales.

-Lumos- susurró Pansy, acercando su varita al pelirrojo- me escuchast... ¿Estás bien?-

Ron negó con la cabeza, estaba cansado de decir que sí.

Pansy de puso de pié, el rostro del Gryffindor de pronto irradió una luz tierna, de niño desprotegido que la estremeció completamente.

Yo...- Weasley trató de contarle

No te preocupes, entiendo-

Gracias-

Una mano torpe golpeó el brazo de Ron, tratando de animarlo.

Y tú?- le preguntó a ella.

Yo... tuve un día horrible, una semana horrible.. un año horrible- finalizó con una sonrisa irónica.

Entiendo- ahora fue Ron quien golpeó a Pansy en el hombro, tratando de reconfortarla

Auch-

Pero demasiado fuerte.

Lo siento- el pelirrojo se acercó rápidamente a ella- perdón...- le pidió, mirándola a los ojos y pasando con suavidad su mano sobre el hombro de Pansy.

... no hay por qué...-

Estaban juntos, casi pegados. La mano de Ron continuaba pasando suavemente por el hombro de Pansy mientras que una especie de conexión magnética se estableció entre ellos

Pansy...-

Sí..?-

La muchacha levantó el rostro, encontrándose de frente con las pecas de Weasley, que se acercaban cada vez más y más y más, primero en primer plano, ahora en detalle.. hasta que ninguno de los dos vio nada.

No hacía falta tener los ojos abiertos para saber lo que ambos se estaban haciendo y pronto no hicieron falta los labios para estar juntos.

Fue el primer beso tan apasionado de Pansy y la primera vez de los dos.

así fue

que la historia comenzó

así fue

que en sus brazos se entrego

que su cuerpo estremeció

convirtiéndose ella en rosa

y el la riega con amor

Dulce como miel recién hecha y suave como algodón, una combinación deliciosa que probablemente nunca más iban a encontrar.

Abrazados y completamente desnudos, tirados en el suelo, ambos miraban el techo de la habitación sin pensar en nada, solo recordando. Los minutos que acababan de tener habían sido simplemente excelentes, reconfortantes... únicos.

De pronto, el pelirrojo habló, acababa de recordar lo de momentos antes

Pansy?-

M..?-

Por qué estabas llorando?-

Pansy se acomodó hasta tener la cabeza a la altura de la de Ron

A veces los insultos son demasiados. Nadie soporta que se ignore todo el día todos los días... yo... yo también quiero que me defiendan de vez en cuando-

Malfoy?- la rabia hacia el tipejo se hizo más fuerte en Ron.

Sí- admitió Pansy con una risita irónica.

No llores por Malfoy, es un gran imbécil-

Son dos mundos que se encuentran

una noche y nada mas

cuando llega la mañana

la sonrisa se les va

son dos historias distintas

que se mezclan sin cansar

que juntando dos novelas

se hace mas largo el final.

La mano de Parkinson acarició el cabello de Ron.

No digas eso- susurró la muchacha, con dulzura- Malfoy es importante para mí, como Granger es importante para ti-

Como...- Ron estaba desconcertado, mirando fijamente a la muchacha que de pronto le pareció la persona más maravillosa en todo el mundo. Tenía ganas de protegerla, de cuidarla, de hacerla sentir importante

Es una idiota, si es que te ha hecho esto. Pero te duele que la llame idiota, porque te gusta- Pansy depositó un dulce beso en sus labios y de golpe se puso de pié.

Ron se sentó derecho, con los ojos fijos en ella, la veía vestirse. Estaba seguro de que quería que le dijera que ya no le gustaba Hermione, que lo que acababa de pasar con ella había sido lo mejor que le había pasado en su vida. Pero no podía hacerlo, la lengua se le paralizó al igual que todo el cuerpo y se limitó a mirarla, rezando para que comprenda.

Un hasta luego

un beso en la mejilla

aquí no paso nada

todo esto se termina

Adios- dijo finalmente Parkinson, arreglándose la corbata.

Pansy...-

Gracias Ron, hacía tiempo no me sentía tan querida- le dijo la muchacha, volviéndose hacia él y sonriendo.

De nada...-

La Slytherin cerró la puerta con cuidado, mirándola con cariño antes de desaparecer camino a las mazmorras.

Caminaba distraída, ensoñada, pensando que lo que le acababa de ocurrir había sido tan especial.. que jamás se lo hubiera imaginado con otra persona que no fuese Malfoy. Y sin embargo había sido sin él y tenía el presentimiento que con Ron había sido mejor

Que pasó?- preguntó Malfoy, atajándola a mitad del camino.

Nada- respondió ella, con los pies aún en movimiento.

Te perdiste casi toda la ronda!-

Pensé que querías estar solo-

Y por primera vez le gustó decir eso, porque acababa de encontrar a alguien que sí se preocupaba de ella, que la había atendido con suavidad, que la abrazaba con fuerza y la besaba con amor. Esperaba con todo su corazón que el pelirrojo se sintiera igual

unas semanas y tu mentira

se hace fuerte y cotidiana

mientras sientes que la extrañas

Ron?-

Eh?-

Me estás escuchando, has estado distraído por días-

Harry miraba preocupado a su amigo, que no había dejado de contemplar el fuego, acomodado en un sillón jugueteando con un mechón de su cabello.

No había podido dejar de pensar en Pansy en toda la semana, recordaba como la había besado y como la había abrazado y como se habían unido... no podía pedir una mejor primera vez que esa. Su mente no dejaba de traerle cada segundo de lo que había sido y en ocasiones su cuerpo parecía sentir lo que había sentido, entonces, dejaba de hacer todo lo que estaba haciendo y se limitaba a relajarse y recordar.

Días con la mirada perdida y caminando como fantasma, esperando encontrarla donde fuera, verla... sonreírle.

Me vas a decir que te pasa?- preguntó Harry, mirándolo ceñudo.

No me pasa nada- respondió Ron, lentamente.

Por primera vez tenía algo completamente suyo y no lo iba a compartir con nadie.

Era SU secreto, SU tesoro. De Pansy y suyo.

así fue

que la historia terminó

así fue

su perfume se marchó

con la fuerza del amor

y en su vientre se ha quedado

lo que para ti es pasado.

Pero nunca más se vieron, nunca más coincidieron en una habitación oscura y lo tomaron como una señal de que no debían estar juntos y que esa vez había sido una especie de regalo para consolarlos.

Día tras día, los sentimientos que los unían se hacían más débiles y sus recuerdos se borraban lentamente.

Día tras día, Ron fue recuperando su antigua alegría y Pansy, sus terribles/casi obsesivas ganas de estar con Malfoy.

Me encantaría meterle el caldero a Snape por el cu..-

Ron!- reprimió Hermione.

Que?-

Que vocabulario es ese comadreja?. Aunque.. supongo que será normal para ustedes los pobres hablar tan vulgarmente, digo, sin cultura..-

Malfoy- Harry tembló, apretando los puños.

Ron levantó el rostro casi con miedo y se encontró con que Pansy hacía lo mismo, clavando sus ojos en los suyos. En un solo segundo todo lo que habían olvidado volvió a ellos, sus estómagos empezaron a ser apaleados como bombos, Pansy empezó a sudar mientras que Ron sentía su corazón en la garganta.

¿Por qué?

Cuando por fin parecieron comprender que lo que había ocurrido esa noche no era para que ambos sean pareja, si no para ayudarlos, para que se sientan amados, protegidos y para reconciliarse con eso que llamaban vida... todo se iba abajo y nuevamente las sensaciones, el tacto, el olor, todo, todo volvió a ellos.

Él recordó que nunca le dijo que la quería y ella, que él era un verdadero hombre.

Ron, vamos- Hermione lo haló de un brazo. El pelirrojo despertó.

Parkinson, muévete- ordenó Malfoy

La muchacha asintió

Nunca más se iban a encontrar, estaba clarísimo que no debían estar juntos.