La descarada

1 Capitulo

Nuestra historia…

Así es como empieza esta historia, una historia donde el amor desapareció y volvió a llegar…

La brisa estaba llegando, el viento movía todo lo que había a su alrededor, en eso unos hermosos cabellos azabaches eran movidos a su compás, una tierna sonrisa se veía en sus labios, una chica de 23 años, pero sus ojos color chocolate estaban opacos, había dejado todo su familia, su alegría, su vida en Tokio, por el dolor de ser una persona no amada, traición fue lo que la llevo a irse dejando un todo su alma y su corazón…

¡Buenos días señorita Higurashi!

Kagome: Buenos días, señor totosai, que lo trae por aquí, me imagino que a lo mismo de siempre y le dio una calida sonrisa.

Totosai: Si a lo mismo de siempre, a comprar lo del desayuno y el almuerzo, jijiji, cuanto es…

Kagome: Son 6 yenes, y muchas gracias por su compra.

Totosai: Muchas gracias a ti mientras recibía el cambio y ¿donde esta la señora kaede?.

Kagome: Oh, ella se encuentra en Tokio donde su hermana Kikio, ya que esta teniendo su hijo, que se va llamar Shippo ya que su esposo Hojo pues esta muy ocupado pero apenas pueda salir de ahí, se viene otra vez, y después se viene toda la familia para aca.

Totosai: Oh, ya veo bueno señorita higurashi, nos vemos mañana, ¿hoy cerrara nuevamente temprano?.

Kagome: ¡Si, me toca, ya que pues tengo trabajo en el bar, y no hay nadie que me supla.

Totosai: ¡Oh! ya decía yo por que la única mujer que trabaja allí es usted verdad, y vio como la muchacha asentía, bueno ahora si me voy, mi esposa debe estar que me mata, de nuevo gracias.

Kagome: no gracias por venir a comprar, y de le mis saludes a su esposa, chao

Y así vio como el anciano se iba, mientras viejos recuerdos llegaban a su memoria, desde el momento que ella había llegado, hasta el momento de vivir en la casa de al lado y kaede vivía en cima de la tienda de abarrotes, cuando la confundió con su hermana, sus dos trabajos…

Flash Back

¡Mama de verdad que lo siento, esto lo decía una chica de ojos color chocolate, ¡pero es que me tengo que ir, es lo mejor no puedo quedarme con el aquí, tengo que olvidar e irme muy lejos!.

Sr Higurashi: ¡Lo se, hija, y creo que de verdad si es lo mejor, es mejor par todos y en especial para ti.

Kagome: ¡Oh, mama, me da mucha lastima dejar a mi abuelo, a souta, a ti, a mi casa, el templo, a Tokio pero es lo mejor…

Pasajeros con destino a Kyoto, subir al vagón 202 en cinco minutos saldremos de ciudad de Tokio.

Kagome: ¡Mama, ya me tengo que ir, gracias por no decir al abuelo, a mi hermano lo que paso, mientras se daban u abrazo lagrimas recorrían por sus mejillas y la de su mama, ¡Mama, te quiero mucho, y cuando llegue y me instale te llamare, vale, mientras caminaban hasta el vagón, de nuevo gracias mama.

Sr Higurashi: No hay que, y las dos sabemos que es lo mejor, le da un beso y ve como su hija sube al vagón, minutos después ve como el tren parte y dice adiós con su mano, si no hubiera sido por ese chico kouga ella no estaría así hace dos años estaban de novios y ella lo encontró con otra chica una tal ayame en la cama, desde entonces kagome no es la misma y lo mejor es que se valla.

Así kagome partió hacia Kyoto solo su madre sabia su paradero, después de aquel viaje llego a su destino, Kyoto un pequeña ciudad pero a su vez algo desértica, sus primeros días fueron horribles vivía en una pequeña pocilga, después al buscar trabajo nadie la quería, decía que no había trabajo allí, su corazón con los chicos era seco y duro como piedra, hasta que final mente dio con la señora kaede aunque no de muy buen manera…

¡Kikio, ¡Tu que haces aquí! Y después se desmayo, la tubo que llevar adentro hasta que se recupero.

Kagome: ¡Señora, ¡señora se encuentra mejor!.

Kaede: ¡Si, pero es que usted es muy parecida a mi hermana.

Kagome: ¿Kikio?

Kaede: ¡Si, ella es muy parecida a ti y vive en Tokio con su esposo hoyo, ¡mira, le dijo mientras le mostraba una foto, si era muy parecida ella solo que tu piel era mas bien pálida y no blanca como ella, además su cabello era negro y liso, el de ella era azabache y rizado en la puntas y sus ojos eran negros y fríos y no chocolate como los de ella.

Kagome: Oh, ya veo, pero la verdad no la conozco y después de todo no somos tan parecidas.

Kaede: ¡Si, es cierto, pero perdona, a que venias, ya que no eres de esta ciudad ya que nunca te e visto.

Kagome: ¡Si, no soy de aquí además vine a buscar trabajo ya que nadie me quiere dar o dicen que todo esta copado, así que pues por eso venia.

Kaede: Oh, ya veo, pero seguro que si, necesito a alguien que me ayude a atender, además estoy algo ocupada arrendando la casa que queda al lado y no e podido arrendarla.

Kagome: ¡Que bien, dijo emocionada.

Kaede: ¿Por qué, ¿No tienes donde vivir?.

Kagome: ¡No, si tengo pero es una pocilga y queda muy lejos de aquí, pero con esto puedo quedarme a vivir al lado, pero no tengo mucho dinero.

Kaede: ¡No importa, ahí vemos como lo arreglamos además esta amueblada, así la vida le dio una segunda madre, en seguida llamo a su a madre diciéndole que la suerte se le estaba volteando y con emoción empezó a trabajar, después de un mes un muchacho le dijo que la necesitaba a ella como barman, su nombre era Miroku y era el dueño del lugar, el era su mejor amigo desde que llego a trabar ahí, era un poco pervertido pero no dejaba de ser el amigo que ella necesitaba, además así mismo kagome empezó a trabajar ahí, eso si bajo el cuidado de miroku y además los chicos en el bar la querían como un amiga, además…ella bueno… no tenia un genio muy suave que digamos.

End Flash Back

Kagome: Fueron bueno y malos aquellos tiempos…decía esto mientras atendía otra gente y cerraba aquel lugar, para dirigirse hacia el otro

Mientras tanto en la carretera…

La brisa de la noche entraba por la ventana de un BMW plateado igual que el cabello del conductor, un chico de 25 años, sus ojos se podían medio ver atra vez de sus lentes oscuros, sus ojos dorados casi como miel, su piel tostada, pero si su semblante era triste y cansado…

Flash Black

Había un chico alegre, esperando en un parque a su amadísima novia, mientras el esperaba recordaba como era que se habían encontrado y enamorado era un caluroso tarde de verano cuando el tropezó con un chica su cabello rojo, sus ojos verdes, su nombre ayame, empezaron a amarse como no si n hubiera mañana, pero después de 1 año y medio el la empezó a notar muy rara.

Ayame: Discúlpame mi amor, pero es que tengo que ir con mi mama tu me entiendes cosas de chicas, y no pongas esa cara, ¿Inuyasha?.

Inuyasha: (Algo enfadado), pero es que siempre que intentamos salir estas ocupada, y yo siempre estoy solo, además solo estamos saliendo los domingos y eso es mucho pedir.

Ayame: (Algo molesta), la verdad si, tu sabes que mi mama anda con novio nuevo y el siempre nos esta sacando, de la ciudad, no es culpa mia.

Inuyasha: (Con resignación), esta bien ayame, perdóname si, es solo que tu ya casi no tienes tiempo conmigo y me pone triste.

Ayame: (Tan bien con cara de resignación) Tranquilo mi amor nada nos va separar, mientras le daba un beso y se iba. Y se empezó a esfumar el recuerdo, es así como el la había visto el amor hacia su novia y no podía aguantar mas, hoy le pediría matrimonio.

Inuyasha: Espero que diga que si

Ayame: (Algo agitada), lo siento si me tarde, la verdad estaba algo ocupada casi no salgo.

Inuyasha: No importa mi amor, dándole un gran beso, esperando que ayame le respondiera pero no lo hizo, ¿pasa algo amor?.

Ayame: (Seria), ¡la verdad si, de verdad que no te puedo seguir engañando, (inu tenia los ojos idos), e saque yo ya no te amo, te deje de amar hace mucho tiempo, inuyasha de verdad que lo siento es una lastima, bueno ahora me tengo que ir mi mama me esta esperando espero que no hay ningún resentimiento, adiós y así se fue.

Inuyasha: ¿Por qué, ayame, ¿Por qué, amor mió, si yo te amaba, y así de su rostro cayeron dos gotas de agua perdiéndose en la hierba y botando en el lago la cajita donde estaba esa joya que había comprado con tanto amor.

Así pasaron los meses, el ocupado en su empresa, apoyado por su hermano mayor Sesshumaru el cual estaba feliz mente casado con su esposa Rin, y su tierno y lindo sobrinito yuca, también por su única y mejor amiga sango, que también era su asistente en la empresa shikon, pero el ya se había cansado su corazón no aguantaba mas dolía y mucho no había curado y lo mejor era irse.

Inuyasha: ¡Sango, me voy a ir por un tiempo, la verdad lo he pensado mucho, y es mejor que me valla lejos, solo tu estarás al tanto de todo, llevo otro celular, me marcas ahí por si pasa algo en la empresa, dile a mi hermano que tuve que viajar para hacer unos negocios.

Sango: ¡De verdad que lo siento amigo, es muy duro lo que ella te hizo y si también creo que eso te va hacer bien, muy bien, el irte y dejar que tu corazón se sane, le decía esto mientras le daba un abrazo.

Inuyasha: ¡Muchas gracias sango por todo, te veo preocupada ¿pasa algo?.

Sango: ¡No, no pasa nada.

Inuyasha: ¡Sango, no me mientas nosotros nos conocemos hace mucho tiempo y te conozco cuando algo te inquieta.

Sango: ¡Esta bien, te lo voy a decir pero te va doler mas, mirando como inu tenia cara de sorpresa, ¡tu sabes que nunca me gusto ayame, el le dio una afirmación con la cabeza, pues me alegre mucho cuando terminaron, pero…tomo mas aire después descubrí que ella te estaba engañando hace mucho tiempo, hace mas o menos seis meses atrás, inu tenia cara de asombro y luego de tristeza, y pues eso supo no se mas y supe el nombre de el, se llama kouga.

Inuyasha: (Con dolor es sus ojos y en su corazón), la verdad si lo había sentido pero pensé que era cosa mia, bueno en fin me voy o se me hace muy tarde, de todos modos muchas gracias, y de nuevo se abrazaron y el partio hacia su destino…

Fin Flash Back

¡Maldita Zorra, gritaba a los cuatro vientos…Maldita…el amor ya no existe para mi…

En eso iba llegando a una ciudad, el nombre, Kyoto, se instalaría en un hotel y luego iría beber algo, así que se dirijo a uno de los mejores hoteles aparto el penthouse, y luego tomo sus llaves y condujo a un bar al que estaba mas cerca de allí, bajo de su auto y entro se sentó y la vio…

Continuar…