MUCHAS GRACIAS! ESTE FIC HA SIDO EL PRIMERO QUE HE HECHO Y ME ALEGRO DE HABERLO COMPARTIDO CON USTEDES MUCHAS GRACIAS POR SU APOYO HAN SIDO VITALES PA4RA ESTA HISTORIA LAS KIERO NO LO OLVIDEN Y POR CIERTO IA EMPECE A TRABAJAR EN EL PROXIMO! YO LES HARE SABR CUANDO LO PUBLICARE.

DEDICADO CON MUCHO CARIÑO Y AGRADECIMIENTO: MARIESMAC, FABISA, SERENA TSUKINO CHIBA. 3-CiNdY-3, HIKARU DARK, FESABI, WILLNIRA.

LAS KIERO NO LO OLVIDEN Y LAS APOYO EN TODOS SUS PROYECTOS FICS!

UN BESO MUY GRANDE Y

GRACIAS!

BEXOS Y ABRAXOS

JIMENA-CHAN

CAPÍTULO XXVI

"MÍ LUZ DESPUÉS DE LA OSCURIDAD"

Afán para no separarme de ti,
por tu belleza, lucha por no quedar en dónde quieres tú,
aquí en los alfabetos, en las auroras, en los labios.
Ansia de irse dejando atrás anécdotas, vestidos, caricias,
de llegar atravesando todo lo que en ti cambia,
a lo desnudo y a lo perdurable.
Y mientras siguen dando vueltas y vueltas, entregándose,
engañándose, tus rostros, tus caprichos y tus besos,
tus delicias volubles, tus contactos rápidos con el mundo,
haber llegado yo al centro puro, inmóvil, de ti misma,
y verte cómo cambias, y lo llamas vivir,
en todo, en todo si, menos en mí, dónde te sobrevives.

-¿Kouga?- Se refirió la chica, inmediatamente esbozó una dulce sonrisa, recordando como estuvo en peligro y él no dudo en ayudarla... Se lanzó a darle tremendo abrazo que dejo a Kouga un poco fuera de cabos... pero había otra persona que estaba no fuera de sus cabos si no totalmente perdido...

-Inuyasha... él es Kouga- Le dijo volteando a ver a Inuyasha que por un momento olvido la situación que iba a comenzar entre Kagome y ellos, de repente tuvo un reflejo de quitarse su chaqueta y dársela a Kagome... no es que fuera celoso pero... bueno si lo era, y su mujer estaba con ese insinuante atuendo enfrente de quien sabe quien y además lo abrazaba... espera... ¿lo abrazaba? ¡lo abrazaba!...

-Hola Kouga-Dijo con algo de desprecio- Yo soy Inuyasha Taimaru...el prometido de Kagome- Bueno claro... ese hombre... pero su nombre no se le hacía desconocido...

-Kouga ¿quieres pasar?- Dijo Kagome notando el semblante confuso de Inuyasha, bueno ¿es que acaso olvidaba todo?...no.. .mejor dicho no le ponía atención si cuando le hablaba usaba ese tipo de atuendos...

La pareja entró seguida del chico... ya adentro a Inuyasha le costo un enorme trabajo controlarse, aunque ya había recordado ese nombre, cuando Kagome le contó lo que había sucedido también le platicó sobre aquel chico... que a pesar de echarse muchos problemas, la ayudo a escapar, talvez si el no la hubiera ayudado, habría caído en las manos de Sesshomaru entonces nunca la hubiera conocido...

Charlaron casi toda la noche, la pareja sorprendida con la confesión de Kouga, pero Inuyasha definitivamente sentía un gran alivio... la conversación de Kouga y unas cuantas cosas que el chico les dijo lo dejaron muy tranquilo...

Le ofrecieron estancia en su hogar, a lo que el chico por supuesto no se negó.

Inuyasha durmió increíblemente bien esa noche... ahora sabía que no había nada ni nadie que pudiera lastimarlos.

Se levantaron temprano los tres, desayunaron entre risas y después el asunto se puso mas serio, Kouga estaba por decirles...

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Dos figuras estrepitosamente envueltas en sábanas, reían de manera histérica... la mujer estaba con la cabeza recargada en uno de sus brazos para ver al hombre junto a ella, que parecía extrañamente sensual sin embargo... su aire era desconcertador pues parecía estar fuera de sí, y así era... ambos estaban drogados, para ella no era la primera...recordó como se hizo el tatuaje en la parte trasera de su hombro...

-Flash Back-

-Tsubaki cariño- dijo el hombre en turno, como ella les llamaba-Te pague un servicio completo... aún no estoy satisfecho.-Y la chica se tumbo sobre el para volver a complacerlo carnalmente... y es que no es que ella halla buscado esa clase de vida, sin embargo no le desagradaba...esa clase de vida le daba todo lo que ella buscaba: dinero y hombres...

Al salir del motel tomo rumbo a los suburbios, en donde un amigo suyo tenía una tienda donde vendían piercings y esas cosas, además ponían tatuajes.

Y ella simplemente quería inmortalizar su vida, no por lo que trabajaba si no por lo que según ella existía en su existencia: inmortalidad.

Inmortalidad en su frialdad, en poder utilizar a la gente... a los hombres... por eso se tatuó una pluma roja como las del fénix.

-Fin flash back-

Esta tarde lo harían... lo tenían todo planeado... Salieron del lujoso lugar para subir cada uno en su automóvil, había algo extraño en Sesshomaru... mientras hacían el amor el la llamó "Rin"...

El alma tenías
tan clara y abierta,
que yo nunca pude
entrarme en tu alma.
Busqué los atajos
angostos, los pasos
altos y difíciles...

Y en sus ojos no vio la lujuria que veía cuando lo hacían era un sentimiento que ella no percibió nunca...

A tu alma se iba
por caminos anchos.
Preparé alta escala
-soñaba altos muros
guardándote el alma-,
pero el alma tuya
estaba sin guarda
de tapial ni cerca.

Era tristeza... tal vez el se imaginaba haciéndole el amor a Rin... pero regresaba y se daba cuenta de que eso no pasaría

Te busqué la puerta
estrecha del alma,
pero no tenía,
de franca que era,
entrada tu alma

Pero lo sabía... no supo amarla, ni siquiera supo donde comenzó el error, lo único que supo distinguir es que ella se había ido de su vida... dejándolo tan dolido como para perder la razón...

¿En dónde empezaba?
¿acababa, en dónde?
Me quedé por siempre
sentado en las vagas
lindes de tu alma

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La dejo con Bankotzu y entró a su consultorio sabía que el plan de Kouga funcionaría... pero tenía miedo... miedo por ella.

Pasó la mañana tranquila, de hecho desde que conoció a Inuyasha no se había sentido tan tranquila...

Cerca de las dos de la tarde vio pasar a una pequeñita con sus ojos llorosos, parecía que estaba buscando a su madre y le recordó las tantas veces que le pregunto a su padre por su madre y el simplemente le decía que estaba en un lugar hermoso al que irían cuando fueran viejos...

También recordó cuando se perdía en algún lado, bueno en realidad se apartaba dos metros de su padre y se sentía perdida en el mundo... Y su padre llegaba a abrazarla y decirle que el nunca la dejaría en un lugar olvidada como ella se lo mencionaba... su temor.

Salió para intentar consolar ala pequeña y en cuanto tuvo un pie afuera todo se volvió negro, sus pies se despegaron del piso y de pronto se encontró medio sentada en algo de cuero, según pudo sentir...

Además su olfato de repente despertó y pudo darse cuenta de que la habían cubierto con una bolsa de plástico...

-¿Creíste que te saldrías con la tuya perra?- Esa voz... Tsubaki...-Pues te diré una cosa...Inuyasha me demostró que es esplendido en la cama... no te lo dejare- E hizo un ademán para golpearla. Pero...

-No Tsubaki... de ella me encargo yo- Escucho esa voz... oh no... Sesshomaru...

El auto avanzó a gran velocidad hasta detenerse en lo que parecía ser una bodega, en un lugar que parecía bastante deshabitado, estaba casi en tuinas, la luz de la tarde dejaba ver pequeñas senderos radiantes alrededor del edificio.

Sintió como era jaloneada hacia en interior y un golpe en la cabeza...

"Ya vienen" "Listo" "tráela para que vean que no es un juego"... Esas voces...

Lo que supo después fe que la cargaron hasta la entrada y la luz la cegó... le habían quitado la bolsa...

Veía borroso... esas figuras... y su voz... ¿Inuyasha?

De pronto una ola de disparos...

Y se sintió cercada por los brazos de Sesshomaru que la sostenía frente a su cuerpo "No la tendrás" era Sesshomaru entonces se dio cuenta de las cosas... La habían raptado al salir a ver a esa pobre niña y ahora estaba ahí rodeada de pistolas y podía reconocer a Inuyasha a sus captores y a... ¿Kouga?.

No supo en que momento Inuyasha se abalanzó hacia ella y los sintió forcejear como si estuvieran halando un pedazo de cuero... era demasiada la fuerza que ambos aplicaban a sus brazos y la obligaron a gemir, asustado de que pudiera estar lastimada, Inuyasha aflojó un poco el agarre y justo en ese momento Sesshomaru aprovecho para darle un golpe con su revolver justo en el ojo izquierdo, haciéndolo caer.

-¿Creíste que escaparías de mí maldita, firmaras esos papeles no importa que tenga que cortarte la mano para que eso pase- y ante esas palabras Kagome se estremeció- Además tu y yo tenemos un asunto pendiente en mí cama- Terminó de decirle en un tono bajo como de complicidad amarga... pero Inuyasha lo escuchó.

-No maldito... ¡tu no la vas a volver a tocar nunca!- Diciendo esto se abalanzo sobre él, ambos forcejearon, para Kagome todo esto paso muy rápido... la visto de pronto se fijo en la otra pareja forcejeando, pero ya había un visible sometimiento: Kouga tenía agarrada de muñecas a Tsubaki y no le costo mucho tiempo esposarla...¿esposas?... Pero un disparo la saco de sus pensamientos...

¿Disparo?...

Dos cuerpos en el piso, uno encima de otro...

Inuyasha... ¡Inuyasha!

Fue un solo disparo...sólo uno de ellos está herido...

Se4sshomaru se levanta entonces...

-¡Inuyasha!- Se acerca a él e intenta moverlo pero para su sorpresa él le sonríe... le sonríe... y no puede más sus emociones están al limite...todo se oscurece la última imagen que ve es la de Kouga golpeando a Sesshomaru...

3 años después...

Cuando tú me elegiste
-el amor eligió-
salí del gran anónimo
de todos, de la nada.
Hasta entonces
nunca era yo más alto
que las sierras del mundo

Se encontraba un hombre muy alto, extremadamente guapo y con una sonrisa muy dulce... mirando una cuna con una pequeña de no mas de seis meses...

Nunca bajé más hondo
de las profundidades
máximas señaladas
en las cartas marinas.
Y mi alegría estaba
triste, como lo están
esos relojes chicos,
sin brazo en que ceñirse
y sin cuerda, parados.

Inspeccionaba cada parte de su rostro y después lo acariciaba con sus dedos de manera muy delicada... pensando que tal vez podría romperla...no sabía nada de bebes. Inmediatamente notó el evidente parecido a su madre así que decidió salir al balcón de esa casa para ver a su flamante esposa...mirando el atardecer como tantas veces...

Pero al decirme: "tú"
a mí, sí, a mí, entre todos-,
más alto ya que estrellas
o corales estuve.
Y mi gozo
se echó a rodar, prendido
a tu ser, en tu pulso.
Posesión tú me dabas
de mí, al dárteme tú.

La mujer lo ve salir con su bastón... después de esa horrible tarde agradeció con su alma el hecho de que su ahora marido tenga vida... y le ayudara a procrear otra... "Kagome" la llama el hombre... se oye tan dulce en sus labios...

Viví, vivo. ¿Hasta cuándo?
Sé que te volverás
atrás. Cuando te vayas
retornaré a ese sordo
mundo, sin diferencias,
del gramo, de la gota,
en el agua, en el peso.

"Inuyasha" Sólo ella puede hacer sonar su nombre tan bien... Por un tiempo se sintió culpable por la muerte de Sesshomaru, pero el se quito la vida al perder la razón en esa cárcel y Tsubaki... ella tiene lo que merece en la cárcel para mujeres... Después recordó a Kouga... un policía encubierto, sabiendo las intenciones del padre de Sesshomaru... no delato a Kagome, sólo quería comprobar que el Tsubaki era la supuesta "novia" del padre de Kagome y que ella y sesshomaru habían planeado todo para matarlo... y no sólo comprobó eso si no que les dio su merecido...

Uno más seré yo
al tenerte de menos.
Y perderé mi nombre,
mi edad, mis señas, todo
perdido en mí, de mí.
Vuelto al osario inmenso
de los que no se han muerto
y ya no tienen nada
que morirse en la vida.

Y ahí estaba la pareja... el la abrazaba por la espalda y veían desde el balcón como sus vidas seguían adelante... juntos como siempre lo desearon con una pequeña que los volvía locos... y es que era cierto ambos sufrieron, pero lo que ahora vivían podía compensar lo que les paso y mucho más... por que siempre hay una luz después de la oscuridad

FIN.

TODOS LOS POEMAS DE ESTE CAPÍYULO PERTENECEN AL POETA PEDRO SALINAS.