"mmmm.." - gimió, mordiendo suavemente el cuello de Dominic.
Se apoyó como pudo en la pared contraria ; pues se encontraban en un espacio algo estrecho y escondido, en una esquina de la cocina.
Arqueó su cuerpo hacia delante, haciendo el abrazo más intenso, y posó sus manos sobre su trasero, agarrándolo con fuerza, mientras lo empujaba hacia ella.
Estaba tan caliente...
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Empezo a moverse con fuerza aferrandose a su cintura, su cuerpo temblaba levemente por el placer que empezaba a inundar sus sentidos, empezo a gemir, se mordio de nuevo el brazo para no ser demasiado ruidoso, pero el placer era mas fuerte de lo que habia imaginado.
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"No te muerdas, tonto... muerdeme a mí..." - dijo, gimiendo, y besándole suavbemente, siguiendo el movimiento del chico.
"Mmm... qué bien lo haces..." - ruborizada, levantó una pierna, para apoyarla contra la pared donde Dominic estaba afianzado, para que la pudiese penetrar con más fuerza.
En su vientre, la sensación placentera de cosquillitas subiendo y bajando por su piel erizada se intensificaba cada vez más ; sentía el impulso de gritar, pero unió sus labios a los del joven, que, sudando, seguía su ritmo...
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Se aferro con fuerza a la pared embistiendo, deslizo una mano a su trasero al igual que ella para poder seguir mejor, gimiendo, estremeciendose, por suerte, los labios de ella acallaban el sonido, su cuerpo temblaba levemente por la sensacion que le recorria, tenia la impresion de que se desplomaria, no podia parar, no podia decaer, continuo aferrandose mas a ella.
"s..sois maravillosa.."
jadeo.
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Sonrió al oír sus palabras ; era un chico tan amable...
Perlas de sudor resbalaban por sus mejillas y sus labios, y se mezclaban con el sabor dulce del muchacho, al que besaba frenéticamente, para acallara los jadeos del que ya era todo un hombre - no cabía duda - y sus propios gemidos.
"ahh, Ahhh!..." - escapan gemidos burbujeantes de su boca, sintiendo cómo el ímpetu del joven la rompía por dentro.
"Mmmm.. me.. me vas a destrozar!..." - rugió, con los sentidos a flor de piel.
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