¡Koñañachiwa, a todos! Si, sé que me tardé eones en subir este Cáp., pero con los ajetreos de la entrada a la escuela, pues ni tiempo le dejan a uno de inspirarse, ¡caray! ;D Bueno, aquí está el 5to Cáp. de mi fic. ¡¡Disfrútenlo!

Capítulo 5:

No sabía que sentimiento era más fuerte. Si la tremenda furia que sentía contra Kouga, o la desazón de sentir que Kagome ya no estaría a su lado… aunque no correspondió el beso, pero tampoco opuso resistencia, y eso bastaba para que él sacara sus propias conclusiones… "¿Por qué?"-pensaba desesperado-"¿Por qué me tienen que pasar estas cosas a mi?" Dejó de correr. Estaba casi tan al Oeste como al principio, pero no le importó, ni siquiera lo notó, pues seguía perdido en su maraña de pensamientos. Creía que el pesar lo iba a vencer… aunque su gran orgullo le impedía derrumbarse así. "Eso me pasa por indeciso" se torturaba con ese pensamiento una y otra vez. En, eso, sintió un conocido olor cerca de él. No supo identificar la reacción que le provocó, aunque en su interior pensó que ya no quería más confrontaciones. Le llamaron suavemente:

-¿Inu Yasha?

-Kikyou… creeme que en estos momentos no estoy de humor para hablar…

-Lo sé… todo me lo dice tu mirada… has sufrido…

Inu Yasha volteó hacia otro lado, con tal de que sus ojos no quedaran a la vista de ella. Simplemente quería olvidarlo todo. Ella se le acercó más.

-¿A qué viniste, Kikyou?- le preguntó él en un susurro, temeroso de que la respuesta fuera "a matarte de una buena vez". Y lo peor del caso era que, en las condiciones en que estaba, no le hubiera importado mucho.

-Sentí tu presencia, y una gran tristeza que la rodeaba… ¿Qué sucede?

Inu Yasha bajó aun más su mirada. Hablar de ello sería como darlo por un hecho, y la verdad era que no quería…. No quería…

Al ver que él no le iba a responder, ella se acercó, hasta llegar completamente a su lado. Le puso la mano en el hombro.

-Inu Yasha, no me gusta verte sufrir… y quiero evitarlo…

Inu Yasha al fin la volteó a ver. ¿Lo diría en serio?

-Ven conmigo al otro mundo, Inu Yasha. Naraku ya no importa. Ya has hecho suficiente. Solo deseo… que estés conmigo… Permanece a mi lado…- diciendo esto, Kikyou se puso frente a Inu Yasha, y lo abrazó. Inu Yasha se quedó estático por unos segundos. Después de un rato, devolvió el abrazo. Después de todo, en esos momentos, necesitaba consuelo, algo que lo alejara un poco del dolor. Y comenzó a considerar que si ir al otro mundo aliviaba la amargura que sentía en su corazón en ese momento… ¿Por qué no? Kikyou acercó sus labios a los de Inu Yasha, y los posó en los del hanyou.

"¡Tengo que alcanzarlo!" pensaba Kagome cada vez más agitada. Se paró en seco. De nuevo, la presencia de Kikyou… y la de Inu Yasha. ¡Ya estaba cerca! Pero… que estuvieran juntos no era buena señal… Echó a correr. Era comprensible después de lo de Kouga, pero no… Llegó en el peor momento: Vio como Kikyou lo abrazaba, y después lo besaba sin que el la rechazara. Pero cuando la Miko se separó ligeramente de él, Inu Yasha susurró algo… Kagome se sonrojó, y la esperanza brilló de nuevo en ella. "Inu Yasha…"

Kikyou lo empujó lejos de sí con violencia. ¿Cómo era posible…? Cuando se apartó un poco de él, el hanyou, aún con los ojos cerrados, había susurrado un nombre. Pero no el de ella. Sino el de Kagome. ¿Cómo…? ¿Después de lo que había visto… aún pensaba en ella? No, no era posible… su brillante plan, ejecutado a la perfección, ¿Fue en vano…?

-¿Por qué, Inu Yasha?- le espetó con dureza, pero dejando escapar por sus ojos, casi siempre vacíos de cualquier emoción, algo de tristeza- Sólo dime por qué… ¿Por qué no la puedes olvidar? No lo entiendo…

Inu Yasha dudó un momento, apenas un par de segundos que parecieron alargarse como siglos, vertiginosos para todos (incluso para Kagome, la cual por primera vez experimentó un sentimiento parecido al que tenía cuando cruzaba el pozo, sin estar en él). Después, clavó su mirada ámbar en la de Kikyou, pero totalmente vacía de desafío, o de enojo: simplemente estaban llenos de serena certidumbre (algo no muy común en él).

-Yo tampoco lo sabía al principio, Kikyou… Primero pensaba que era porque ella se parecía a ti… pero después… al ver que eran totalmente diferentes… La vi a ella… a Kagome… y…- la voz del hanyou, se perdió en un susurro.

Kikyou no sabía que sentir ya. El despecho, la frustración, se mezclaban con la tristeza y la decepción…

-¿Pero por qué… por qué me olvidaste?- mantuvo el contacto visual con él, aunque le dolía- ¿Acaso tan pronto se borraron los momentos que pasamos juntos…? ¿Fue tan poco para ti…?

-Al contrario… Kikyou, tu fuiste una de las pocas personas en mi vida que me han hecho sentir querido… pero… tu siempre me insististe para que me convirtiera en un humano… en cambio…- no se atrevió a pronunciar su nombre, la llaga aún estaba muy abierta- ella… siempre me ha aceptado así como soy… y ahora me doy cuenta de que aunque te siguiera amando, ya no podría dejar este mundo…

Kikyou se quedó perpleja. No supo que parte había herido más su corazón, el que hablara de su amor en pasado, o que no deseaba acompañarla al otro mundo… Para no perder demasiado los estribos, se concentró en lo segundo:

-¿Y por qué? Si este mundo es tan ingrato… tantos luchan por la vida inmortal, y no se dan cuenta de que no importa cuanto vivan, y que tan bien se la pasen, las experiencias terminan por volverse rutinarias, y ya no hay nada especial en el mundo… ¿por qué deseas permanecer aquí, donde hay tantas enfermedades, y dolor…? ¿Por qué, Inu Yasha?

-Porque tienes toda la razón, Kikyou… pero mi intención no es vivir por siempre ni mucho menos… sino ser feliz el tiempo que me dieron los dioses… ¿porqué no sueltas el rencor de una vez? Tu alma es muy gentil, Kikyou…- la mirada de Inu Yasha se tornó tierna- y yo sé que podrás descansar en paz… vuelve feliz al otro mundo… porque yo deseo estar en este. Aquí están las personas que me quieren, están Shippo, Sango, Miroku… Kagome…

La poca paciencia de Kikyou se desvaneció en ese momento, ¿cómo era posible…?

-¿Qué acaso no te importa lo que me pase? Inu Yasha, ¡¡¡yo solo puedo ser feliz si vienes conmigo al otro mundo, entiéndelo!

También Inu Yasha endureció su expresión. Era ya hora de poner bien en claro las cosas. Había negado lo que le decía el corazón durante demasiado tiempo… ya no podía ignorarlo. Y aunque seguía muy lastimado, si lo decía en voz alta quizá se libraría un poco del tormento… se lo había guardado demasiado ya…

-¡¡Ahí está la diferencia, Kikyou! Yo amo a Kagome… ¡¡¡porque ella siempre ha puesto mi felicidad antes que la suya! Y creo que ya no es justo que ella sufra más… ni yo… ni siquiera tú…- de nuevo se suavizó su expresión- ya no podemos engañarnos, Kikyou, el tiempo ha pasado, y los dos hemos cambiado… perdóname, Kikyou… pero así debe ser- Inu Yasha bajó la vista una vez más, ya que todo lo que le había dicho le costaba mucho trabajo… pero al fin liberó su alma y corazón de aquel peso… al fin podía admitir sus verdaderos sentimientos…

Kikyou sintió muchas cosas a la vez… deseos de matarlo, a él y a esa muchacha, pero… otra parte de ella le decía que era verdad, que debía dejar todo eso atrás… esos sentimientos encontrados, más unas inauditas ganas de llorar, le inundaban el pecho… la lucha interna a la que estaba sometida, sin embargo, casi no se reflejó en su rostro, tan acostumbrado a ser hermético a su alma. ¿Tendría él razón? ¿Valdría la pena seguir en este mundo? Ella, ¿aún estaba enamorada de él, o… o solo se le había vuelto una costumbre…? ¿O un recuerdo? ¿Sólo eso…?

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Snif… bueno, esperen el capítulo 6 para ver resueltas las dudas de Kikyou (y las suyas, por consiguiente). Si me tardo un poco en subirlo, ya lo saben, es por el inicio de las clases ToT Ya no podré escribir de madrugada que mala pata… pero bueno, en verdad espero encontrar inspiración con la nueva carga de trabajo, lo más seguro es que se me agilice la mente ;D Ah, ¡Mil gracias, Lavance-chan, por tu review! Me alegra que te esté gustando, sobre todo porque ahora se invirtieron los papeles en el drama (aunque más bien, lo que no cambia es que "todos sufren") ¡En verdad espero que me sigas leyendo! Bueno, sin más que agregar, ¡me despido!

¡Cuídense! Ya saben, se portan mal y piensan peor ;) Mata ne!