Despues de tanto tiempo aquí estoy de nuevo¿pensaron que se habrían librado de mi? Pues no, se que me tardé mucho , pero hasta que este fic no llegue a su fin no dejaré de escribir (se me estan pegando las costumbres de pilika y vane, jeje es broma ;P)
Debo daros las gracias pili-chan y vane-chan, aunque quizás no lo sepáis me habéis animado mucho a seguir, me alegro muchísimo de teneros como amigas -
Vane perdoname por no felicitarte en tu aniversario u.u para que me disculpes te dedico este fic. Lo siento mucho, para el proximo año te felicitaré cuando toca >.
Gracias por dejar review en el anterior cap a:
Sango683
Akiko Inihara
Kari Tsukiyono Kon
¿Cómo he podido enamorarme de alguien como tú?
Cap. 6
Tras pasar un rato más en el lago, donde reinaba una atmósfera romántica entre besos, te quieros, caricias y abrazos, los dos muchachos decidieron volver a la cabaña, entre otras cosas, para secar su ropa. Al entrar se encontraron con una escena curiosa, Kagome con una sonrisa de oreja a oreja y mirada picarona hacia la pareja, Shippo un poco decepcionado y molesto porque Kagome no le dejo ver la parte más interesante e Inuyasha mostrando múltiples caras de felicidad, por Sango, de enojo hacia Miroku, por haberla hecho sufrir, de preocupación y de confusión, por las palabras de Kagome.
Sango: -¿Alguien me puede decir que es lo que pasó aquí?
Shippo: -Pues...
Kagome tapó rápidamente la boca de Shippo para que no pudiera decir nada que los pusiera en un dilema y contestó por él.
Kagome: -Pues nada... jejeje¿y a vosotros?
Miroku: -Ya está todo solucionado.
Sango: -No me digan que lo teníais todo preparado...
Kagome: -No exactamente... pero alguien tenía que hacer algo... Juro que yo no tenía ni idea de las intenciones de Miroku...
Sango: -Pero si no sabes lo que pasó – empezaba a desconfiar.
Kagome: -Claro, claro que no tengo ni idea, sólo lo decía por si acaso había hecho algo que no fue de tu agrado, jejeje – con gotitas en la frente. – ¿Habéis cenado? Os dejamos la cena hecha.
Miroku: -Mmmm muchas gracias, tengo un hambre... – acercándose a Sango y susurrándole para que sólo lo oyera ella – aunque preferiría seguir comiendo tus labios a besos...
Sango se sonroja y lo empuja hacia donde esta la cena: -¡A comer!
Inuyasha seguía ausente, sumergido en sus pensamientos... había una cosa que no lo dejaba tranquilo. Así que decidió salir a tomar un poco el aire y observar las estrellas.
Inuyasha, antes de salir de la cabaña: -Voy a fuera un rato... Sango, me alegra que vuelvas a ser tú... – y se fue.
Sango, quedó un poco sorprendida: -Inu... yasha, gracias.
Cuando terminaron de cenar, Shippo ya se había ido a dormir junto con Kirara.
Kagome: -Oye Sango¿por qué no vamos un rato a fuera nosotras también? – en voz baja – ¿y me cuentas todo lo que pasó?
Sango: -Esto... vale – levantándose para irse con Kagome – Miroku, ahora volveremos.
Fueron paseando tranquilamente y observando las estrellas, mientras Sango narraba lo sucedido en el lago, con bastante vergüenza, pero delante de la insistencia de su amiga ¿quién podía resistirse?
Sango: -... y entonces dijo que había echado de menos mis cachetadas...
Kagome: -aja – en voz baja – así que eso fue lo que dijo...
Sango: -¿has dicho algo?
Kagome: -nada, nada, sigue...
Sango, siguió narrando los sucesos hasta que Kagome hizo un comentario que le resolvió sus dudas.
Sango: -... me lancé en el lago y luego resultó que él estaba fuera...
Kagome: -bueno si, pero una cosa¿qué te dijo antes de que te lanzaras a besarle?
Sango: -¡Cómo sabes tú eso!
Kagome: -¿eing? "metí la pata..."
Sango: -¡Kagome!
Kagome: -está bien¡lo confieso! Estuvimos un rato mirando que pasaba
Sango: -¿Cómo pudisteis...
Kagome: -¡Perdona Sango! Pero estábamos muy preocupados...
Sango un poco enojada...
Kagome: -en cuanto pasó lo del beso nos fuimos, por favor...
Sango: -¿seguro?
Kagome: -venga, dime que te dijo para que lo besaras de esa manera
Sango: -vale, mira lo que pasó fue...
Y le contó todo lo que dijo palabra por palabra y le contó un poco lo que pasó después del beso.
Kagome muy emocionada: -¿en serio sucedió todo eso?
Sango afirma, bastante emocionada también.
Kagome: -me alegro por ti Sango... y ¿qué más pasó?
Se oyeron unos pasos que se acercaban a las dos muchachas.
Desconocido: -Bueno chicas, creo que ya es hora de que pueda estar a solas con Sango.
Kagome: -Perdona Miroku pero estamos hablando de cosas de chicas...
Sango: -Bueno Kagome, de hecho no hay mucho más que contar...
Kagome miró a la pareja. Los dos se miraban intensamente, como si no hubiera nada más que la persona que tenían delante, y deseaban estar a solas.
Kagome: -Lo entiendo... voy a ver si encuentro a Inuyasha¡nos vemos!
Se retiró del lugar, con una sonrisa por la actitud de sus amigos.
Sango y Miroku anduvieron un poco por el bosque hasta llegar cerca del lago. La vista era preciosa, la noche iluminada por la luna y un millón de estrellas que se veían reflejadas en la superficie del lago. Se sentaron y observaron la noche. Miroku abrazaba a Sango con un brazo y se iban dando tiernos besos. Sango le contó de qué habían estado hablando ella y Kagome y también que los habían estado espiando.
Miroku: -Jajaja, esa Kagome no tiene remedio, y eso que les dije que confiaran en mí.
Sango: -Se veía tan emocionada mientras le contaba lo nuestro... ¿crees que estará bien? Lo digo por su relación con Inuyasha...
Miroku: -sshhh no te preocupes. Inuyasha quiere a Kagome, cuando salga de dudas se lo confesará y entonces Kagome será tan feliz como tu ahora.
Sango: -Estaría bien que aprovechara el tiempo en que Kagome estará en su mundo.
Miroku: -Sí, será la mejor oportunidad que tendrá, espero que vea a tiempo el error de seguir en el pasado.
Se quedaron callados pensando en esa pareja y en como podrían ayudarles.
Sango: -Que noche más hermosa...
Miroku: -No tanto como tú...
Miroku besa a Sango mientras la recuesta en el suelo quedando él encima de ella. Una mano seguía cogiendo a Sango por detrás de su cuello y la otra iba acariciando lentamente la cintura y el muslo de Sango.
A Sango todo aquello le gustaba, pero tenía miedo a que Miroku quisiera seguir hasta la unión. Ella aún no se sentía lista para aquello.
Sango: -Mi... Miroku... yo no... no se si podré...
Miroku: -¿Te molesta?
Sango: -N-no, pero...
Miroku, sonriéndole dulcemente: -Te prometo que no haremos nada que no quieras
Sango sonríe también y siguieron con sus inocentes juegos de besos y caricias.
Después de saborear intensamente los labios y boca de Sango, Miroku pasó a degustar el cuello de esta, dando pequeños mordiscos y provocando en Sango un gran placer desconocido para ella. Sango abrazó a Miroku dando caricias en su espalda, apretando su cuerpo contra el de ella, sentía esa necesidad, quizás para no permitir que nada se lo llevara de su lado. Le gustaba, esa sensación de ser querida, esas caricias que se lo demostraban, ese amor que nunca había sentido... su corazón latía fuerte, feliz.
Miroku, por su lado, disfrutaba dando esas caricias, el aroma de Sango, las reacciones de su cuerpo al contacto con sus labios, su abrazo insistente que lo hacía sentir protegido... realmente había estado con otras mujeres pero con ninguna había sentido ese sentimiento, el amor que sentían mutuo. Fue recorriendo todo el cuello con sus besos hasta llegar en la parte que la ropa cubría a Sango. Con una manos apartó un poco esas prendas, dejándole así paso hasta su pecho sin descubrirlo del todo y poder seguir besando su piel. También se aventuró, con la misma mano que aparto un poco la prenda acariciar tímidamente el pecho de Sango. Recordaba lo que le había dicho a Sango que no harían nada que ella no quisiera y hacía esfuerzos para mantener su promesa. Los dos parecían estar en un paraíso donde solo importaba la persona que tenían al lado. Aun con esa paz espiritual a Sango le empezó a venir angustia, Miroku había apartado un poco su ropa y de repente algo le imposibilitó de seguir como estaban. Se iba poniendo nerviosa, había roto su abrazo y no sabía como apartar a Miroku. Al no sentir el abrazo de Sango, Miroku se detuvo y la observó. Sango empezaba a tener un sudor frío, mantenía los ojos cerrados con una expresión de miedo. Salió de encima suyo, se sentó a su lado y la cogió en brazos. Calmó su respiración y excitación antes de hablar a Sango, con voz tranquilizadora, tenía miedo de que hubiera hecho algo que causara sufrimiento a Sango.
Miroku: -Sango, mi niña¿qué te sucede?
Sango desde que empezó a tener esa reacción había estado como inconsciente. Al escuchar la voz de Miroku salió del trance y al darse cuenta de lo sucedido, algunas lágrimas resbalaron por sus mejillas.
Sango: -P-perdona... yo...
Miroku: -Perdóname tu Sango, no me di cuenta de que te estaba forzando
Sango: -¡NO! Tu has sido muy dulce... soy yo... seguro que ahora no querrás seguir conmigo...
Miroku: -¡Eso no lo vuelvas a decir nunca¿Cómo puedes decir semejante tontería? Yo no te podría dejar nunca¿y sabes por qué?
Miroku deja de abrazar a Sango y con una mano levanta su rostro hasta ver sus ojos.
Miroku: -Porque te amo, no lo olvides nunca por favor
Sango se quedó sin palabras, aun sin poder ofrecerle lo que él desea, la amaba, se lo acababa de decir, no la dejaría sola... No sabía como reaccionar, lo quería, lo amaba tanto y algún día se lo demostraría. Besó los labios de Miroku como sello de la promesa que se hacía a ella misma.
Sango: -Gracias.
Continuará
Hasta aquí llego el cap.6 no estaba segura de dejarlo así pero al final me decidí a publicarlo. Espero que les haya gustado y por favor dejen review para saber que les pareció.
Sayonara y Besos!
Arisa
