Dedicado especialmente a dos buenas amigas: Lucy y Lucre… todo estará bien… ya saben a lo que me refiero.

Capitulo 6

Olvidandote

Paso el tren a toda velocidad frente a él. Espero otros segundos más hasta que se perdió de su vista. Suspiro. Aún no creía que ella se había ido, que no le había dado una última oportunidad. Sacudió su cabeza tratando de pensar que era un mal sueño, la amaba y ese amor se acrecentaba cada minuto.

-Un año… –susurro esperanzado a que pasará de prisa el tiempo. Que tonto había sido, si tan solo hubiera impedido que se subiera a ese tren, ella estaría con él.

-Ron, vamos al castillo –dijo su hermana, tomando su brazo.

-Anda, nos espera una comida deliciosa –dijo Harry, dándole unas palmadas amistosas en la espalda.

-Quiero estar solo –espetó, adelantándose a su amigo y hermana.

Harry y Ginny caminaban detrás de Ron, tratando de mantenerse un poco alejados. Los dos sabían que no era una buena idea tratar de hablarle, eso lo haría más hostil y callado.

-Solo nos falta esperar a que se reponga, no podemos hacer nada si él no quiere –dijo sintiendo pena por Ron. ¿Cómo se comportaría si estuviera en su lugar? Nunca había sufrido tanto por alguna chica, tal vez se sintió triste cuando se había desilusionado de Cho Chang, "su primer amor". Pero era una pequeñez a lado de lo que le sucedía.

-Mi hermano está pasando por algo horrible… y yo que siempre pensé que ellos dos acabarían juntos –dijo bajamente para que solo la escuchara Harry. -No es nada agradable sufrir por amor.

Definitivamente yo no me volveré a enamorar –murmuro al final para ella misma.

Harry paró de caminar.

¿Qué te pasa? –pregunto Ginny. Se dio cuenta que él la había escuchado, camino unos pasos hasta quedar frente a él. –Oh, ya se que tienes Harry y no es para que te sientas incomodo –respondió de pronto. -Fue algo que paso y listo. Así que no te preocupes por eso.

-Ginny, nunca quise herirte –se disculpo, pensando que era el estupido mas grande de la tierra por no haberse dado cuenta antes lo que ella valía.

La pelirroja suspiro, acercando su rostro al de Harry. Se ruborizo cuando vio que desde esa distancia podía distinguir a la perfección sus pecas. Sobresaltado dio un paso atrás.

- Yo sabía que no era tu "tipo" de chica. A ti siempre te han llamado la atención las chicas lindas y populares–respondio con sinceridad. Sonrió. -Y bueno, nuestro destino nunca fue el estar juntos. Así que olvida todo –dijo con simpleza. –Si lo hacemos, así podremos mantener alguna amistad.

Harry se preguntaba cuando Ginny había dejado de ser una niña tímida, que se guardaba todo. Ante él estaba una Ginny que lo había cautivado con su franqueza y deseaba conocer que nuevas sorpresas le tendría.

Entraron al castillo, Ron se les había perdido de vista.

¿Crees que le guste el regalo a Hermione? –pregunto la chica, deshaciéndose de sus guantes y gorra de frió.

-Ron lo estuvo buscando como loco todo el fin de semana. No entiendo porque Ron decidió decirle a Hermione que el regalo era de los dos –respondió, ayudando a Ginny a quitarse su abrigo. - Yo tenía pensado regalarle el nuevo libro de esa autora de Aritmonancia que tanto le gusta.

-Tal vez ella no lo hubiera aceptado –dijo acertadamente Ginny.

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Hermione no quiso voltear a la ventana, él estaría ahí deseando una respuesta. Era una cobarde. Toco sus labios, aún podía sentir sus suaves labios y en su boca guardaba su sabor a dulce de mentas. Estaba sola, era preferible que estar frente a las miradas curiosas de sus compañeros que habían visto todo. Se quito su abrigo y lo dejo a lado del regalo que le habían dado sus amigos. Lo tomo y lo comenzó abrir.

-Hermione ¿Que tal? –pregunto Alan Watson desde la puerta, con su simpática sonrisa.

-Estoy abriendo el regalo de Ron y Harry –respondió Hermione, mostrándole la caja casi desenvuelta.

Se sentó a lado de la ventana, esperando a que la chica castaña terminara de abrirlo. Tenía curiosidad sobre que le había dicho Harry a su amiga Ginny. Por una parte le alegraba que ellos volvieran hacer amigos… pero por otra sentía que no se merecía el amor de la pelirroja.

¡Qué hermoso! – dijo Hermione, asombrada por el regalo. En su mano tenía una replica de una hada real, que al decir la palabra "Scarborough" movía sus alas delicadamente, dejando en el aire un aroma a flores y polvos de colores.

-Esas figuras son difíciles de conseguir. Dicen que si un chico te la da es por te considera su amor verdadero –comentó Alan, sosteniendo la hada y tocando delicadamente una de las alas doradas.

-No lo creo, porque me la dieron dos chicos –respondió, sin poder evitar soltar una risita de burla.

Él levanto los hombros, y le devolvió el hada.

¿Estás segura de quererte ir? –pregunto tan de improviso, que casi se le cae el hada de las manos.

Hermione levanto la vista, y lo miro decidida.

-Por supuesto, todo esto lo hago para el bienestar de amb… digo, para bienestar mío. Me servirá para entrar a las mejores escuelas.

Alan calladamente, la siguió viendo. Ella se sintió incomoda. ¿Por qué sentía ese nudo en la garganta? No lloraría, eso ya no estaba en sus planes. Desde ese momento tenía que cambiar y disfrutar todo lo que el futuro le preparaba. Ya no sufriría por nada ni por nadie.

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Era un bonito día de otoño. Las hojas caían de las ramas de los frondosos árboles. Observaba con aburrimiento la caída de una de esas hojas color café, la siguió hasta que finalmente toco el piso junto a otros de diferentes tonalidades que iban de colores naranjas a café claro y oscuro.

Como el tiempo podía pasar sin que uno se diera cuenta, tanto había pasado desde la última vez que la había visto. Sonrió al recordar la fiesta de graduación que se llevo en el Gran Comedor, las sonrisas orgullosas de sus padres y hermanos y la gran copa de Quiddicht que adornaba la mesa de los profesores y tenía escrito en una placa "Gryffindor campeones". Solo eso recordaba, había olvidado que hechos sucedieron años atrás…

-Sr. Weasley, lo busca el Sr. Potter –dijo la voz de su secretaria desde la puerta.

Se frotó los ojos, necesitaba dormir más.

-Hazlo pasar, por favor –respondió Ron, revisando unos papeles que tenía sobre su escritorio.

Harry entro a la oficina, con una gran sonrisa. Sus ojos verdes brillaban a través de sus lentes. Su complexión era el de un hombre delgado y su estatura había crecido unos cuantos centímetros desde que dejaron el colegio. Su túnica negra ostentaba el emblema de Aurores, al igual que el de su amigo pelirrojo. Después de tantos estudios y sacrificios se habían graduado de Aurores, el sueño de los dos.

-Sr. Weasley ¿Cómo estÿ –pregunto formalmente, sentándose en la cómoda silla. Enfrente de él dejo un periódico con el titular "Indicios de Mortifagos en Estados Unidos".

Ron lo leyó con aburrimiento.

-Deja las formalidades para otra ocasión –dijo Ron, buscando su taza de café. – ¡Esto cada día está más aburrido¡NECESITO ACCIÓN!

-Calma, amigo… por eso vine –comentó Harry. –Nos enviaran a Estados Unidos dentro de tres días.

¿Estas bromeando? –pregunto incrédulo.

-No, para nada. Ordenes directas –dijo, guiñando un ojo. –Iban a enviar a Alan Watson –el nombre de Alan lo enfatizo con una notoria molestia- pero desgraciadamente… para él, nos seleccionaron a nosotros porque somos de los mejores –dijo maliciosamente.

-Entonces ¿Alan se quedará aquí? –pregunto con un tonito que no le agrado a Harry.

-Si, hubieras visto su cara… me tuve que morder la lengua para no reírme.

-Mmm… y Ginny se quedará completamente sola aquí… Alan y Ginny.

¡Argh! Había olvidado a Ginny… ese idiota la buscará –dijo, encontrando la respuesta a esa sonrisa.

-Siento decirte querido amigo, que anoche salieron a cenar- comentó mordazmente.

Harry movió la mano simulando que no le importaba. Ron lo escudriño con la mirada, sabía que no podía dejar de ponerse celoso.

-Le escribiré a Hermione, para encontrarnos en New York- soltó de pronto Harry.

-Ahhh… ella –dijo sin emoción. Volviendo su atención a los papeles que antes revisaba.

¿Aún sigues molesto con ella? Le ofrecieron muchas cosas Ron, debes comprenderla.

-Tanto tiempo ha pasado… que me olvidado casi totalmente de su rostro –dándose cuenta de lo había dicho se ruborizo. –No encuentro necesario que le digas nada, yo no deseo verla.

-Ron, deberías hablar con ella –aconsejo su amigo. –Ella ha tratado de mantener contacto contigo.

-Yo no fui el que la saque de mi vida… Olvidemos ese tema –respondió con molestia.

-Bien, ya no diré nada –dijo, sabiendo de antemano que sería una batalla perdida. -Ya me imagino la cara de Audrey, cuando se enteré que te vas a ir… a solo 3 meses de la boda.

Los ojos de Ron brillaron al escuchar ese nombre. Harry esbozo una sonrisa, tenía mucho tiempo que no veía a su amigo así. Se alegraba por él.

¡Audrey es fabulosa! Anoche pasamos una velada romántica… no entrare en detalles, pero fue una de las mejores.

Se le vino a la mente su joven novia de pelo rubio y ojos azules. Su esbelta figura siempre vestida con las mejores ropas.

-Siempre le agradeceré a Fleur que me haya presentado a su prima dijo, ensimismado en la fotografía que tenía en su escritorio.

-Lo que no entiendo es como una belleza como ella… te hiciera caso.- dijo Harry, sacándolo del trance. -Entiendo que ella pudo atraerte con su herencia veela… pero tu…

¡Potter! Me tienes envidia, porque yo si he podido formalizar una relación –respondió simulando enojo.

-Ni loco me caso tan joven, tengo tanto conocer –dijo en un suspiro.

¿Países¿Mujeres? Ya conociste lo suficiente… si tú quisieras formalizar algo mas serio, Ginny… -dijo, sacando su tema favorito: La futura relación de Ginny y Harry que todos esperaban.

¿Ginny? Amigo, no me hagas reír. Ni si quiera acepta que salgamos a salir.

De pronto se abrió la puerta, dejando ver a la menor de los Weasley. Luciendo su uniforme de trabajo, que constaba de una túnica color azul oscuro. Que Harry pensaba que el quedaba a la perfección.

¡No quiero salir contigo! –gritó Ginny tajante.

¡Tu te lo pierdes!–escucharon decir una voz masculina.

Ella se quedo unos segundos parada junto a la puerta, viendo alejase al dueño de la voz.

-Saldría con él, si el muy idiota no estuviera casado –murmuro entre dientes.

Su hermano y Harry las veían con curiosidad, ansiosos de saber quien era.

-Era Draco Malfoy –respondió, como si dijera que estaba lloviendo. (N/a: Disculpa Angie, es lo único que pondré de Draco... sabes mis razones). Tomo la taza de café que su hermano tenía en sus manos y le dio un sorbo.

-Necesitaba cafeína –dijo Ginny, saludando con un beso en la mejilla

a su hermano.

¿Qué quiere ese imbecil contigo? –pregunto él.

-Ya es la tercera vez que me invita a salir… a veces he estado tentada a decirle que si –dijo con una sonrisita, recordando lo atractivo que era el rubio.

¡Es Draco Malfoy¿No recuerdas todas las cosas que nos hizo en le colegio? –pregunto subiendo la voz Ron.

-Las cosas del pasado hay que dejarlas en el pasado, hermanito –respondió molesta, sentándose en la orilla del escritorio.-Además, Draco es un hombre muy apuesto…

-Pero "hermanita" él esta casado -replicó.

-Pobre, a veces siento lastima de él –dijo Harry temblando ligeramente. –Casarse con Parkinson, debe de ser el peor castigo del mundo.

-Por eso no salgo con él, es un gran impedimento… no me atraen los hombres comprometidos, son una perdida de tiempo.

-Ahora regreso, voy a dejar unos papeles a la oficina de Norton.

Se quedaron solos Harry y Ginny. Harry se rasco su cabeza nerviosamente, mientras observaba como Ginny perdía su vista en la ventana.

Ella jugaba con uno de sus largos rizos rojos, se comenzó a desesperar ante este molestoso silencio.

¿Estás enojado conmigo? –pregunto, fijando sus ojos castaños en Harry.

-Me enteré que saliste anoche con Watson –dijo, acercando sigilosamente. –Te estuve esperando durante una hora en el restaurante.

Rió fuertemente, divertida ante la expresión celosa de él.

¿Crees que nuevamente iría después de que TRES veces me esperándote por horas? Puedo parecerte que soy la misma chica que conociste en Hogwarts, pero he cambiado.

-Has cambiado demasiado ¿Qué te sucedió? –pregunto tomando su mentón con delicadeza.

De inmediato Ginny se separo, con semblante serio.

-No, Harry. La verdad, es que yo deje de sentir algo por ti desde que tenía 15 años.

-Harry es hora de irnos –dijo Ron entrando de improvisto. ¿Las pasa algo?

-Ron no llegues tarde a la casa, dijo mamá que quería hablar contigo –dijo cortante Ginny saliendo rápidamente.

¿Que le hiciste? –pregunto Ron con burla.

Harry solo atino a sonreír.

&&&&&&&&&&&

Su trabajo se incrementaba como avanzaba el día, quien iba a pensar que ella, una de las mejores estudiantes y con prometedora carrera en el mundo mágico, había escogido estudiar leyes. Ese trabajo no se parecía absolutamente en nada en lo tiempo atrás deseaba estudiar.

El escritorio estaba repleto de papeles que tenía que leer. El nuevo caso estaba siendo difícil, como salvar a su cliente si había pruebas contundentes de que era culpable.

Suspiro con desgana.

¡Granger, te pedí que me entregaras a la corte esos papeles antes de las 2 de la tarde! –gritó su jefe desde la puerta.

-Lo había olvidado, los haré llegar cuanto antes –dijo, levantando la mirada hacia su joven jefe.

Su jefe de nombre Liam Framer la vio con desesperación, pero al instante le sonrió.

¿Te preocupa algo? –pregunto, cerrando la puerta tras de si.

-No, solo que tengo mucho trabajo –respondió con cansancio, levantándose para caminar un poco.

La tomo de la mano y la atrajo hacia él.

¿Iremos a cenar? –pregunto anhelante.

Ella se alejo, aunque trataba ser amable con él y demostrarle algo más que compañerismo, no podía.

-No, tengo demasiado trabajo –respondió con la misma respuesta de siempre.

-Te la pasare por hoy, pero se que pronto me dirás que si.

Él salio de la oficina, dejándola sola. ¿Hacia cuanto que no salía con alguien? Ya era hora de darse un tiempo para ella sola y no pasársela escondida entre multitud de libros y papeles. "Por Merlín, Hermione deja de estudiar y ven a divertirte con nosotros", escucho en su mente y junto a esa voz ronca vino la imagen de de un chico pelirrojo de unos 17 años.

-Ya es hora de que te olvide completamente –sentenció Hermione, mordió su labio inferior. Tomo el teléfono y marco un número telefónico. ¿Liam? Hola, este… ¿A que hora pasas por mi?

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Llegaba a su casa después de la segunda salida a cenar con Liam, y se la había pasado mejor de lo que se había imaginado. Era atento y amable con ella, dándose cuenta que no fue mala idea haberle dicho que si. Dejo las flores sobre una mesa, y se cambio de ropa. Se acostó en su cama, tratando de dormir tranquilamente. Tenía un presentimiento de que algo sucedería pronto que no la dejaba dormir. Pero en el instante que toco la almohada no supo más de sus pensamientos.

Toc, toc

-Mmmm…

Toc, toc

Abrió con pesadez sus ojos, fijándose en la hora en su reloj electrónico. Marcaban las 5:30 de la mañana.

¿Quién tocará a esta hora? –gruño, cubriéndose con su bata de dormir, trato de acomodar un poco su desaliñado pelo castaño.

Toc, toc

¡Ya voy! –grito molesta.

-Abre ya, Hermy –dijeron desde el otro lado de la puerta.

-No es posible –murmuro.

La abrió enseguida, reconociendo la voz.

¡Harry! –exclamó emocionada, abrazándolo. –No puedo creer que estás aquí… Ron –dijo de pronto.

Frente a ella estaba a la persona que menos se imaginaba que volvería a ver. Se quedo paralizada sin saber que hacer ó decir. Al parecer a Ron no le había agrado mucho la idea de estar ahí, porque su cara no mostraba ningún entusiasmo.

Continuara.

¡DEJEN REVIEWS!

Arwen chan

Miembro de la Orden 3A

Chicas, espero que les haya agradado el capitulo… ya comencé a trabajar en el próximo… Ahh… pero que poquitos reviews me llegaron � no sean malas chicas y envíen más, así me animaran a escribir más rápido (ejem… creo que me escucha un poco chantajista). (Lucy… ¿y mi review?).

Yamilie: Amiga cibernética jeje, yo también deseo que me arreglen la estupida maquina, pero la muy desgraciada no quiere… definitivamente creo que es el modem. Otra que se siente apenada por Ronnie, jaja… si vieras que disfruto hacerlo sufrir. Siempre hago sufrir a las protagonistas y ahora le toca a los hombres sufrir ¡muaj, muaj! Besos , escríbeme, que quiero saber de ti.

Lucre: Muchísimas gracias por tus lindos reviews . No entiendo porque te gusta mucho esta historia jaja, pero bueno, tu tenias ganas de un Hm &R jeje. Besitos…

Lira Garbo: Hola mi niña, hace mucho que no te veo… espero que estés bien, y gracias por seguir todavía mis fics… Besos.

Sarah-Keyko: Gracias por seguir mi historia, espero que te guste y que te deje más intrigada jeje. Bss.

Jessi Weasley: Gracias por el review… y bueno, las respuestas a tus preguntas son: Están en 7to grado y Hermione se va a Estados Unidos (exactamente a la famosa ciudad de brujas "Salem"). Tratare de actualizar mas pronto, pero se me ha hecho imposible... mil disculpas. ¿Cuál es el Plan 1.5?

Ophelia Dakker: Una chica nueva, súper... gracias por el review. No creo que deban sentir pena por Ron, recuerda que fue muy tonto con la pobre de Hermione. Saludillos…

Tabatas: Amiga, hace tiempo que no podemos conversar largamente (y tranquilamente), pero aun sigo sin internet… Jeje¿Pensabas que los dejaría juntos tan pronto? Pero ya verás lo que viene… tal vez te guste… un beso.