Capítulo 8: La cárcel.

- No puedo creer que estemos llegando a casa Oliat, me siento tan feliz. -

Su compañero sonrió. Frente a la ventana de su nave, estaba la imagen de un planeta a primera vista inhóspito. El aterrizaje fue rápido y sin incidentes. Una vez en la atmósfera localizaron la entrada a una cueva y volaron allí con su 'preciada' carga.

- Bienvenidos. - Un grupo de jóvenes se les acercaron abrazándolos y sobándolos un poco. - Un Bravo por nuestros héroes que han triunfado en la misión más importante de los últimos años. - Gritó uno de ellos obteniendo una gran cantidad de ovaciones para los recién llegados.

Bra fue transportada aún inconsciente a una celda especial mientras que Vegeta fue llevado a la enfermería. Anina permaneció a su lado varias horas hasta que por fin despertó, desorientado e incapaz de recordar nada.

- ¿Dónde estoy?. - Sus ojos delataban un choque profundo interiormente.

- Estas en la base príncipal del ejército de la resistencia planetaria. Te hemos rescatado de manos del enemigo, el cual te ha practicado un barrido de memoria. Por eso no puedes recordar nada. -

- ¿Han borrado mi memoria?. - Preguntó sujetando su cabeza dolorida y confusa.

- Por desgracia sí, pero haremos lo posible para que vuelvas a recuperarla muy pronto. - La muchacha sonrió, pero su sonrisa se descoloró cuando vió el gesto rudo del guerrero.

- ¿Cuándo?. -

La pregunta le cogió de sorpresa. - Tendré que idear una medicación específica para deshacer el efecto neurológico, aunque sin una terapia de soporte, lo normal es que pequeñas porciones de recuerdos se comiencen a manifestar progresivamente. Le aseguro que me pondré a trabajar en esa medicación enseguida. -

-------------

Mientras tanto, en la celda de contención, Bra había despertado igualmente desorientada, aunque consciente de su realidad. Aquello no era Raditzsei, y definitivamente no parecía ningún lugar agradable.

- Maldita sea, tengo que salir de aquí. -

La voz de uno de sus carceleros resonó en la habitación. - Parece que despertó. -

- Si. - Contestó con el mismo desprecio.

- ¿Quiénes sois vosotros?. - Preguntó erguiéndose con orgullo frente a ellos. - ¿Qué lugar es este?.

- Estas donde deberías haber estado mucho antes, en una cárcel. -

- ¿En una cárcel?. Y eso por qué. -

- Ja. Será cínica... -

Bra estaba furiosa, sin duda la habían capturado. - ¿Quiénes sois vosotros?. ¿Qué pretendéis con esto?. -

- Somos tu peor pesadilla porque ahora vas a pagar todas las atrocidades que has cometido, tú, y tu querido sire. - Escupió con rabia contenida.

- Pagareis caro vuestro atrevimiento, mi compañero vendrá y acabará con todos vosotros. - Amenazó.

- No dudo que lo intentará. - Respondió otro de ellos. - Pero ahora mismo la balanza se inclina a nuestro favor. - Bra tomó una nota mental. Raditz estaba sano y salvo. Lo que no entendía era como había permitido que la raptasen.

- Sacadme de aquí ahora mismo. - Advirtió cada vez más furiosa.

- Ni lo sueñes, puta. -

'Puta', 'puta', 'puta'... el eco de esa palabra se repitió en sus oídos una vez tras otra haciendo que un recuerdo vago le causara un dolor terrible en el cerebro que la dobló en ese instante al suelo envuelta en un fuerte dolor.

Los carceleros se miraron el uno al otro. - Oye, qué le pasará. -

- A ver si va a pasarle algo malo en nuestra guardia y nos la vamos a cargar. -

- Ejem, Señoritaaaa, ¿se encuentra bien?. - Preguntó algo más alto uno de ellos sin encontrar más respuesta que varios alaridos de dolor por parte de ella.

- Parece que no está demasiado bien. Voy a avisar a Oliat, él sabrá qué hacer. -

---------------

- Más vale que funcione esa estúpida pomada. -

- No es sano para tí tener tanta tensión, así no la vas a recuperar. -

- No me digas lo que tengo que hacer o cómo me tengo que sentir. - Goten asió a su hermano de la solapa de la bata. - No quiero consejos. Devuelveme la vista, sólo necesito eso de tu parte. -

No queriendo causar más dolor a su hermano, Gohan asintió aplicando en sus ojos la mezcla incolora. - Deberías notar los efectos en breve. En una semana más estarás completamente restablecido. - Aseguró seriamente. Estaba preocupado, jamás había visto a su hermano en un estado tan alterado. Parecía capaz de cualquier cosa.

---------------

Oliat llegó corriendo a la celda. - Abrid las puertas. - Ordenó acercándose al cuerpo inmóvil de Bra.

Ella tenía los ojos cerrados y respiraba profundamente intentando calmarse después de la crisis que había sufrido. En cuanto sintió el tacto del médico supo que quizás tendría una oportunidad de huir. Haciendo un esfuerzo mental inmenso abrió los ojos de repente y sujetó Oliat del cuello con una llave que ella no sabía que podría hacer siquiera.

- Atrás. - Advirtió a los guardianes que la apuntaban con unas pistolas láser. - Atrás o le mataré. -

- No la obedezcáis, si tengo que morir así sea, pero no la dejéis escapar. -

- CALLATE. - Gritó ella forzando más el agarre sobre su cuello para evitar que los convenciera. No quería matarle, pero tenía que parecer peligrosa para que le permitieran seguir adelante.

- Y ahora apartaos de mi camino. - Bra avanzó sujetando a su rehén mientras que la siguieron sin dejar de apuntarla.

- ¿Dónde están los vehículos de transporte anclados?. - Preguntó amamenazante a los guardias.

Ellos dudaron. La peliazul provocó una incisión en el hombro de su rehén para forzar una respuesta. - VAMOS. -

- A la derecha. - Gritó uno derrumbándose moralmente.

- Buen chico... nadie tiene que salir herido si os portáis bien. - Aclaró. - Sólo quiero marcharme de este agujero inmundo. -

Oliat se retorció en su agarre preguntándose cómo era posible que una mujer pudiera ser tan fuerte. Siendo honestos, también Bra se preguntaba de dónde había sacado esa fuerza de la que estaba haciendo alarde. ¿Sería otro de sus talentos olvidados que permanecen en su subconsciente?. Quién sabe. Ya le preguntaría a Raditz en cuanto se reuniera con él.

---------

- Anina. - Jadeó su nombre un muchacho que entró en la sala médica.

- ¿Qué pasa Erik? -

- Oliat. - La joven se levantó de repente. - Bra lo ha tomado como rehén. -

Vegeta se levantó de repente. Los tres corrieron a sumarse a todo un grupo de soldados que apuntaban al par con las armas láser. - Dejádme esto a mi. - Indicó Vegeta sabiendo en alguna parte de su cerebro lo que podía hacer para solventar la situación sin víctimas de por medio.

- Suéltale. - Gritó acercándose a ella.

Bra se paró donde estaba avanzando lentamente por el pasillo. - Ni hablar. ¿Me crees estúpida?. -

- Es mejor que te entregues. Si le matas acabarás muriendo con él. -

- Bien, me llevaré a uno más conmigo al otro mundo. -

Vegeta sonrió levemente detectando un giro de sus ojos hacia atrás para pulsar el botón de apertura de la puerta que daba al angar donde estaban las naves. Aprovechó ese instante para aparecer a su espalda utilizando una super velocidad que dejó a todos estupefactos y bloquearla con una llave inmovilizadora que la obligó a soltar a su rehén de inmediato. Oliat se desplomó en el suelo respirando lo más que podía con el cuello tan dañado como estaba.

Bra se revolvió en el agarre pero la fuerza de Vegeta la doblegó. El general apareció felicitando al recién llegado por su intervención y sedando a la mujer para llevarla a la celda de contención nuevamente. Cuando supo que esta era la culpable de su pérdida de memoria, el príncipe se ofreció, a hacer las veces de su carcelero, prometiéndose que pagaría por lo que le había hecho. todos convinieron en que era lo más sabio. El único con suficiente fuerza como para doblegarla sin utilizar armas era el extranjero, así que el problema estaba resuelto.

------------

- ¿Cómo es que han podido raptarla Dragún?. Responde a mi pregunta. - Raditz estaba furioso y había golpeado a quien había considerado como su mano derecha tan duramente, que necesitaría urgentemente pasar unas cuantas horas en una cámara de regeneración.

- L...lo siento ... S...sire... -

- Lleváoslo y aseguraos de que le curan las heridas adecuadamente. - Dos hombres lo portaron mirando de reojo a Raditz, con caras asustadas.

- Bra, te voy a traer de vuelta, lo juro. No permitiré que nadie te haga daño. -

------------

La peliazul despertó nuevamente en la celda. - Mierda. -

- ¿Qué se siente cuando se está del otro lado?. - Preguntó burlescamente Vegeta.

Bra reconoció la voz y se avalanzó sobre la puerta, pero los sistemas de seguridad le enviaron una descarga eléctrica que la envió hacia atrás bastante adolorida y aturdida. - Pagaréis este ultraje. -

- Aquí la única que va a pagar eres tú... - Bra le miró rabiosa. "Raditz, ven pronto a rescatarme".

------------

- "Mami, papá y yo te vamos a traer de vuelta". - La semana había pasado tan rápido que asustaba. Bura utilizó el viejo truco de su madre, aquel dispositivo ocultador de ki, para colarse en la nave nueva.

Esta vez Goten no estaba dispuesto a seguir los juegos de su hija, tenía que marcharse cuanto antes mejor. La nave despegó en solitario, sin nadie que lo despidiera, y la pequeña intrusa se acurrucó en su escondite dispuesta a salir tan sólo cuando estuvieran lo suficientemente lejos. Miles de ideas alocadas surcaban su cabeza maquinadora. Entre lo que había sonsacado a unos y a otros, y lo que había escuchado espiando a diestro y siniestro, había descubierto que su mamá estaba con tío Raditz. Que su papá estaba enojado y deseaba matarle por eso para recuperar a su mami, y que el abuelo Vegeta ya había salido a por ella pero que aún no había vuelto. Así que estaba claro. Ella tendría que convencer a su mama de que lo mejor era que volviera a casa con su papi y su abuelito. Si había alguien en el mundo que podía lograr la hazaña, esa era ella. Seguro. Iba a traer a su mamá de vuelta.

-----------------

Ladyargoss, gracias, yo también soy una vieja fan de Dragon Ball, aquí va esta continuación. Espero que te guste.

Kawaii, acabo de leer una review en la que dices que sacaste pasajes de tren, oye ¿de verdad?. Espero que el viaje sea muy agradable. Recuerda seguir mis consejos. jejeje

Rina, te adelanto que la historia va a terminar bien, pero como en todas mis historias, tien su parte de drama, que le vamos a hacer, si no no sería yo la que escribiera, jajaja

Karo, no te alarmes que ya mismo recobrará su memoria, pero entre tanto... la cosa está torcida.

Shadir, a ver que hará Goten con una niña tan entrometida. Algo de su sobrina - tía Pan tiene que tener la muchacha... ¿cómo definiríamos el parentesco entre Bura y Pan?. Mmm.