Ataque a Privet Drive
Era un 31 de Julio muy caluroso. Luego de haber escuchado las noticias sobre el ataque, Harry había decidido ir a dar una vuelta.
Necesitaba pensar, poner en claro sus ideas, pensar sobre la profecía, la maldita profecía.
Estaba caminando tranquilamente por la calle Magnolia, cuando escuchó una gran explosión. Rápidamente saco su varita por si se trataba de mortífagos, pero no logro ver nada, así que siguió su camino aún asustado por el ruido.
Harry siguió caminando hasta que llego a un parque y se sentó a la sombra de un árbol. Se quedo pensando en todo….
Yo soy el único con el poder de matar a Voldemort, pero cual es el poder del que hablaba Dumbledore? – Pensaba Harry - Tengo un poder que Voldemort desconoce, pero que yo también desconozco. Será que Dumbledore sabe algo más y no me lo dijo? Puede ser…ya me oculto lo de la Profecía…puede ser que me este ocultando algo mas….
Harry estuvo pensando por unas horas hasta que decidió que lo mejor era volver al numero cuatro de Privet Drive. Realmente no le importaba lo que dijeran los Dursley, pero no quería que se presentara ningún miembro de la Orden en su casa y el estaba seguro de que lo vigilaban.
A paso lento y todavía pensando en algunos detalles de la profecía que no entendía se encamino hacia su casa. Pero cuando llegó vio una imagen que lo dejo en Shock.….
La marca tenebrosa estaba arriba del numero cuatro de Privet Drive. Las posibilidades de que sus familiares estuvieran con vida, eran remotas, y las posibilidades de que los mortífagos estuvieran ahí esperando por el eran enormes.
Pero Harry no se podía ir de allí. Por más de que odiara a los Dursley, no quería que les pasara nada. Y él era el único que podía hacer algo por evitarlo. Los Dursley estarían indefensos ante los magos.
Harry, saco su varita, del bolsillo de su pantalón y se preparo. Estaba por entrar a la casa, cuando una voz lo llamo. Una voz infantil…Bellatrix Lestrange, y un grupo de mortífagos estaban esperando por el….
Potter, un placer volver a verte – dijo Bellatrix
Bellatrix, como estuvo tu verano? Te divertiste con Voldemort? – dijo Harry con una voz tan fría como la del mismo Voldemort, cosa que sorprendió a los mortífagos – ahhh! Me había olvidado, o te castigó mucho? – Harry sonrió
Ya cállate Potter….todavía estas resentido por la muerte de mi querido primo, no es así pequeño Harry? – Dijo Bellatrix, mientras sonreí maliciosamente
Ahí es donde te equivocas querida Bellatrix – dijo Harry nuevamente con esa voz tan fría – Resentido no…pero me las vas a pagar. Quizás no hoy, pero voy a tener el honor de matarte…no lo dudes
Bellatrix y todos los mortífagos rieron fuertemente
Tu – Dijo Bella – Matándome a mi?
Pues no se Bella – dijo sarcásticamente – piensa lo que quieras…pero al final los hechos demostraran que tengo la razón…
Bellatrix y los mortífagos se miraron entre ellos. Nadie los amenazaba y menos a Bellatrix Lestrange. Como se le ocurría al entupido de Potter amenazar a Bellatrix? Por eso iba a pagar las consecuencias…
Si así lo quieres, prepárate para pagar las consecuencias Potter – Dijo Bellatrix riéndose – CRUCCIO!
La maldición pegó de lleno a Harry en el pecho. Harry pensó que se moría del dolor. Eran como mil cuchillos clavándose en su cuerpo. Los huesos le ardían, sentía que se le estaban rompiendo todas las costillas. Deseaba que terminara, deseaba morir y así ver a Sirius.
Los mortífagos estaban muy divertidos con la situación. Harry estaba en el piso retorciéndose del dolor, pero todavía no había gritado y Bellatrix no iba a parar hasta lograr hacer que Potter pidiera perdón y que pidiera misericordia.
Duele, verdad Harry? – Dijo Bellatrix entre risas – Pédeme misericordia y haré que pare el hechizo. Pídele perdón al Señor Oscuro y haré que todo termine.
Harry, por su parte, no pensaba pedirle misericordia a Bellatrix Lestrange. Estaba concentrando toda su energía, para no gritar. El no iba a dejar que esa asesina lo viera sufrir, por más que se estuviera muriendo del dolor. Cuando ya habían pasado un par de minutos, Harry escucho una voz que lo tranquilizo…una voz dentro de su cabeza.
Harry, aguanta, dentro de poco llegan los refuerzos, resiste, tienes que resistir – era la voz de Sirius la que le hablaba
Esa
voz logro que Harry se tranquilizara. Sabía que tenía
que resistir, pero no estaba seguro de poder hacerlo. Pero lo haría
por Sirius, por sus padres.
Harry sintió como su cuerpo se
calentaba lentamente y de repente un aura azul brillante se formo a
su alrededor y la maldición se rompió.
Los mortífagos se quedaron helados. Era imposible romper el cruciatus y Potter lo había hecho. Los Mortífagos estaban asustados. En sus ojos se notaba el terror.
Harry, se paro, con algo de dificultad, porque a pesar de haber roto la maldición, pensaba que se le habían roto algunas costillas.
Decías algo Bellatrix ? – pregunto Harry sonriente
No es posible – Decía Bellatrix asustada – No es posible romper un cruciatus
OH mi querida Bellatrix es posible sino mírame a mi – Dijo Harry mas sonriente
Los miembros de la Orden del Fénix, habían llegado en ese momento escuchando la conversación entre Harry y Bellatrix y se habían quedado muy sorprendidos al descubrir que Harry había roto un cruciatus. Sin tener tiempo para asimilar la conversación se pusieron a luchar contra los demás mortífagos.
EXPELLIARMUS – grito Harry
PROTEGO – dijo Bellatrix – Realmente piensas que puedes vencerme Potter?
Uyyyy mira como tiemblo Bellatrix – dijo Harry irónicamente y nuevamente con la voz tan fría como Voldemort.
Tanto Mortífagos como Aurors se quedaron un minuto mirando la batalla que se estaba llevando a cabo por Bellatrix Lestrange, gran servidora de Voldemort, y Harry Potter, el niño que vivió. Estaban sorprendidos todos por la capacidad y la calma que estaba mostrando Harry.
Ya cállate Potter – grito Bellatrix
Ohhh te puse nerviosa? Perdóname – Dijo Harry – Ya acabemos con esto – MAXIMUS PROTEGO!
Una gran barrera blanca de energía se materializo alrededor de Harry, protegiéndolo de cualquier ataque. Brillo por unos momentos y luego se volvió invisible.
Nuevamente todos estaban impresionados. Ese hechizo no se aprendía hasta la escuela de Aurors, como era posible que Harry lo supiera?
Que tan grande era el poder de Harry?
Bellatrix sin duda era la más asustada. El pequeño Harry la estaba venciendo. Estaba venciendo a la más fiel servidora de Voldemort. Con todo su odio decidió probar su última arma.
AVADA KEDAVRA – Grito Bellatrix
Cuando escucho el hechizo Harry se concentro nuevamente y el aura que había aparecido durante el cruciatus volvió a aparecer. Pero esta vez era de un azul mucho más brillante.
Bellatrix Lestrange estaba conteniendo la respiración para ver si había logrado concretar lo que Lord Voldemort nunca había podido hacer.
Durante los segundos que la maldición tarda en llegar a Harry, la batalla estuvo completamente detenida. Todos querían saber que ocurriría.
Cuando la maldición llego choco contra la barrera que Harry había colocado y contra el aura que se había formado a su alrededor.
Los de la Orden volvieron a respirar cuando esto ocurrió, pero los Mortífagos estaban cada vez mas aterrados.
Te dije que ibas a pagar las consecuencias Bella – dijo Harry mirando a Bellatrix con una gran satisfacción – No seré yo hoy, pero cuando tu querido Voldemort se entere que no pudiste matarme seguro que vas a tener una linda sesión de cruciatus – termino diciendo muy calmadamente
Bellatrix palideció notablemente
Mandale mis saludos a Voldemort, y dile que espero verlo a fin de año, como siempre – dijo Harry sarcásticamente y sonrió
RETIRADA – grito Bellatrix, y al momento todos los mortífagos desaparecieron.
Al minuto que los mortífagos desaparecieron, Harry cayó de rodillas al piso. Había gastado mucha energía, y a pesar de que la maldición asesina no lo había tocado, lo había dejado muy cansado.
HARRY! – gritaron al mismo tiempo Albus Dumbledore, Lemus Lupia y Nimphadora Tonks.
Mientras ellos se acercaban a Harry, el resto de los Miembros de la Orden del Fénix entraba a la casa de los Dursley, para ver si estaban vivos o si…..les había tocado el peor de los finales.
Harry, por su parte, se había sentado en el suelo y estaba tratando de juntar energía nuevamente. Se sentía muy cansado, como si hubiera estado jugando Quidditch por dos días sin parar a dormir
Harry – dijo Remus acercándose al joven – estas bien?
No te preocupes – dijo Harry forzando una sonrisa – estoy bien, solo algo cansado
Como lograste parar el Avada? – pregunto Tonks, un poco confundida
Harry la miro y se rasco distraídamente la cabeza
No tengo ni idea – dijo mientras se levantaba
Remus lo ayudo a levantarse ya que todavía le faltaban energías y estaba algo mareado.
Como están los Dursleys? – Pregunto Harry
Lo lamento Harry, los mataron antes de que llegaras tu – respondió Dumbledore apenado….
