Como preludio de un fic hecatómbico XDD anuncio que los personajes de CT son propiedad de Yoichi Takahashi y Shueisha. Paola Wakabayashi es propiedad mía, o sea Tsuki. Saki y Jun Aiza son propiedad y creación legítima de Saki Hashimotoy...bueno, los personajes que no conozcan también los creé yo XDD
Por cierto, no se rayen si por ahí leen comentarios hechos de una autora a otra, y más cuando los comentarios sean respondidos por la otra XDD
Cabe recalcar que este fic es una obra (dizque XDD) escrita a partes iguales por mi amiga Saki y yo, así que no soy responsable de toda su autoría nn Y es la continuación del fic "Cuando Paola conoce a Saki".
Disfrútenlo!
Unas Locas Vacaciones de Verano
By: Tsuki y Saki
-Oye, Saki… ¿Estás segura de que es por aquí?
-Sé que es por acá, Jun. ¿O acaso no lo recuerdas?
-Recuerda que hacía AÑOS no venía a Japón.
-Lo sé.
Un par de gemelos salían de las aduanas del aeropuerto de Narita en Tokyo. Él tenía una cola de caballo castaña y rasgos ligeramente andróginos. Ella tenía una larguísima trenza y rasgos claramente femeninos, dándole una delicadeza engañosa… Pues ambos eran consumados futbolistas.
-¿Crees que vendrá a recogernos?
-No seas tonto. Confío en ella.
-Pero… Yo al menos no la conozco.
-No personalmente, pero sí la has visto en los diarios y todo eso…
-Pues sí…Pero no es lo mismo.
Sin embargo…
-¿Saki? ¿Eres tú? –preguntó la voz de un joven, bastante sorprendido. Sin embargo, la sorpresa fue para la joven.
-¿Sorimachi-kun?
-Shh… Se supone que ando de incógnito.
Sorimachi Kazuki estaba ahí, con una camiseta verde menta, jeans y gafas oscuras.
-¡Sorimachi-kun! Pensé que Paola vendría a recogernos.
-Es que… Se le presentó un inconveniente.
-Un momento… ¿Cómo es que sabes español? –preguntó Jun, incrédulo.
-¿Tu hermana no te lo contó? Soy de ascendencia argentina, aunque soy japonés. Soy Sorimachi Kazuki.
-Andrés Aiza, o mejor dicho, Aiza Jun. Encantado.
Rato después, los tres futbolistas se dirigieron al parqueadero, donde Sorimachi tenía su auto.
-Ahora sí… ¿Dónde está Paola? Se suponía que nos iba a recoger –dijo Saki.
-Bueno, dice ella que se le presentó un inconveniente.
-¿En serio? –dijo Jun, cruzándose de brazos.
-Sé sincero, Sorimachi-kun. Dime la verdad.
-Supuse que lo sabrías… A veces Paola es una floja.
Jun se veía confundido, y Saki se echó a reír.
-Lo siento, hermano… Debí explicarte. Sorimachi-kun es el mejor amigo de Paola. Ambos estudiaron en la misma secundaria… La secundaria Toho, aquí en Tokyo.
-Pero no la conociste aquí, ¿verdad?
-Jun, no seas tonto. Sabes que viví con mamá en Shizuoka. Allá conocí a Paola y a los otros.
-No me digas tonto, Saki ¬¬U.
Kazuki se echó a reír mientras conducía.
-No hay duda de que ustedes son hermanos.
-¿Cómo dices?
-Que no hay duda de que ustedes son hermanos. Se quieren mucho, y por eso pelean mucho. O al menos eso supongo.
-No solemos pelear mucho, pero a veces nos hacemos enojar entre los dos.
Kazuki se echó a reír, haciendo que Jun y Saki se echaran a reír a su vez.
-Saki tenía razón… Eres una persona muy ingeniosa, Sorimachi-kun.
-Veo… Aunque me gustaría ver ese famoso sarcasmo del que tanto me habló Saki.
-Es algo espontáneo –dijo Jun, admitiéndolo. –Sólo sale a flote cuando hay alguien presumido molestando… Es una de esas cosas que no puedes controlar a voluntad.
-¿En serio?
-No, qué va…Estoy bromeando y en realidad soy un comediante. Sí, es en serio.
-Bueno, pues acabaste de demostrar tu ingenio para dejar a la gente callada, hermano –dijo Saki, sonriendo, haciendo que Jun tragara saliva. –Eres sarcástico todo el tiempo.
-Je, sí, supongo…
-Mucho. Ya veremos qué dice Paola cuando te conozca.
Siguieron yendo por las autopistas de Tokyo, y para sorpresa de Saki…
-¿Y qué ondas con… el primo de Paola?
-No pudo venir. No le dieron vacaciones esta vez –dijo Saki, un poco extrañada ante el hecho de que Kazuki (quien al igual que Paola no soporta mucho a Genzo) preguntara por Genzo. -¿Por qué la curiosidad?
-Sólo preguntaba… Y ya sé que la curiosidad mató al…
-Pato –completó Jun automáticamente. –Donde digas 'gato,' puedes considerarte hombre muerto.
-¿Acaso también te gustan los gatos?
-Me gustan, aunque no tanto como a mi hermana…
Y cuando menos se lo esperan…
-¡Nanananaaaaa…!
-¿Qué acaso ese no es…?
-¿Ta-kun? Sí. Lo traje en su jaula de viaje, pero como no lo soporta, dejé su jaula con el equipaje y el muy pillo se metió en mi mochila.
-Bueno… Supongo que ciertas cosas nunca cambian.
-Así es –y se echaron a reír otra vez, hasta que llegaron a un bloque de apartamentos…
-Llegamos –dijo Kazuki estacionando su automóvil
-¿Aquí es donde vive Paola? –preguntó Jun bajando del coche
-Nop, aquí vivo yo –aclaró Kazuki- Pero es una parada obligada ¿vamos?
Los Aiza asintieron y siguieron al muchacho hasta el quinto piso de aquél lugar. Caminaron por el pasillo hasta detenerse en la puerta 5-J. Sorimachi sacó unas llaves de su bolsillo y abrió, luego los invitó a pasar. Si bien el lugar no era extraordinariamente grande, sí se notaba ser hogar de una familia de recursos.
-¡¡Quién! –se escuchó gritar desde el salón de estar
-Je, pasen –les pidió Kazuki apenado por el grito, ofreciéndoles asiento en su living- Ahora vengo
El japonés desapareció dejando a ambos gemelos viendo con curiosidad aquél lugar. Rato después volvió a entrar acompañado de una muchacha ya conocida para Saki, aunque en esta ocasión llevaba reflejos rojos en el cabello y tenía puestos unos zapatones (chancletas) acolchados con forma de balón de fútbol.
-¡¡Saki! –exclamó contenta abrazando a su amiga que se había puesto de pie- ¡Qué gusto verte otra vez!
-¡Paola! ¡cómo has estado! –dijo Saki también emocionada
-¿Ella es...? –quiso preguntar Jun intrigado
-Ahá, ella es Wakabayashi Paola –presentó Kazuki sonriendo- Perdona si te asustó
-Ya te oí –refunfuñó su amiga- Tú debes ser Andresito, o sea, tú eres Jun ¿no?
-¿Andresito? Jajaja –se burló Saki ante el denominativo, poniendo a su hermano más colorado de lo que ya estaba
-Mucho gusto –contestó Jun educadamente extendiendo una mano- Soy Jun Aiza
-El gusto es mío. Pero vaya que son parecidos –notó Paola mirando a los hermanos alternativamente
-No entiendo algo –analizó Saki viendo la pinta de Paola- ¿Qué haces tú en casa de Sorimachi-kun?
-¡Floja! –exclamó Kazuki fingiendo toser
-Verás –explicó su amiga viendo a su mejor amigo de reojo- Vine de mi casa hasta aquí y no llegué más allá
-¿Eh?
-Me dio flojera tener que ir hasta el aeropuerto, lo siento –admitió Paola apenada- Pero como éste hombre sin oficio ni beneficio estaba viendo una película comiéndose unas papitas fritas, decidí reemplazarlo
-¿Decidiste? –inquirió Jun incrédulo- ¿Así como así?
-Ya conocerás a Paola –advirtió su hermana consolándolo con unas palmaditas en la espalda
-Pero por favor tomen asiento –les pidió Kazuki- Enseguida vuelvo
-¿Y cómo está tu mamá? –le preguntó Paola sentándose también
-Muy bien gracias –contestó Saki sonriente
-¿Y...?
Pero su pregunta estaba de sobra, porque la razón de aquella volvió a salir de la mochila de la colombiana para saludarla como correspondía.
-¡Naanaaaaaaa! –saludó Ta-kun acercándose a Paola, quien lo tomó y lo acarició con cariño
-¡Ta-kun, bello hermoso! –exclamó la germano japonesa enternecida
-Cuando nos fuimos Ta-kun se pasó melancólico una semana entera echado sobre tu fotografía –contó Saki divertida
-No lo culpo –murmuró Jun pensativo, mientras su hermana lo miraba sorprendida
-Cuando ustedes se fueron pensé en comprarme un gato –confesó Paola- Pero al perro de Ken no le agradan, incluso menos que a John, entonces deseché la idea
-¿Ken? ¿cómo está él? –preguntó Saki, recordando entonces al portero japonés
-Muy bien, felizmente
-No sabía que tenía una mascota
-Así es, en realidad ya lo tenía –contó su amiga- Y como el muy desconsiderado le puso de nombre "Anónimo", creí que un nuevo nombre le vendría mejor
-¿Tú escogiste un nombre? –indagó Saki desconfiada
-No me pongas esa cara. Aunque no negaré que quise ponerle Genzo, pero el pobre animal podía enfermarse –bromeó Paola- Entonces le puse Kaiser XD
-¿Qué? –preguntaron ambos Aiza a punto de reír
-Kaiser, qué tiene de malo, muchos perros se llaman así
-Mejor hubiera estado Karl –se burló Saki maliciosa
-Es igual...
-Sírvanse –ofreció Kazuki alcanzándoles unos vasos de refresco
-Gracias –dijeron los gemelos al unísono
-¿Entonces? ¿preparados para disfrutar de unas vacaciones con todos nosotros? –les preguntó el muchacho sentándose junto a Paola, que se arrimó a él, apoyándose en su amigo
-Eh... –dudó Jun confundido
-¿Por qué pones esa cara? –le dijo su hermana- Te dije que Paola nos había invitado a un viaje ¿no?
-Sí, pero ¿a quiénes te referías con "todos nosotros"? –le preguntó Jun a Sorimachi
-A mis amigos, Paola y yo –respondió Kazuki sonriendo- Iremos a Yokohama, como Ken está de vacaciones... –agregó irónico
-¡Chismoso! –lo recriminó Paola sonrojada
-Con que Ken está libre –murmuró Saki divertida
Paola iba a alegar algo, pero el sonido del timbre la interrumpió, por lo que ella se ofreció a ir a abrir. Cuando regresó lo hizo montada en la espalda de un muchacho alto de cabello oscuro corto y ojos también oscuros, acompañado de otro chico un poco moreno y de cabello también corto y oscuro.
-Hola –saludaron ambos muchachos
-¿Los recuerdas? –inquirió Paola sin bajarse de uno de ellos- Son Matsuki Yutaka y Shimano Tadashi
-Mucho gusto –respondió Jun con una leve reverencia- Soy Aiza Jun
-Ustedes...¡claro que los recuerdo! –exclamó Saki sonriendo
-Gusto en verte nuevamente Saki-chan –le dijo Matsuki sonriendo
-¿Aun tocas y cantas tan bien? –preguntó Shimano sonriendo
-Je, gracias –dijo la colombiana apenada
El timbre volvió a sonar.
-¡Matsuki, llévame! –pidió Paola meneándose para que su amigo se moviera
-Ya, que no soy un burro –refunfuñó Matsuki llevándola hacia la puerta
Cuando volvieron cerca de media docena de muchachos estaban con ellos. Esta vez Paola volvió en la espalda de un chico bastante serio, moreno y de ojos rasgados.
-Chicos Aiza, tengo el placer de presentarles a Furuta Kiyoshi, Takashima Tsuneo, Hideto Koike, Kawabe Katsuharu, Matías Dugatkin y Darío Penagos –presentó Paola- Imai no vino porque él y Naoko no pudieron, pero esperan alcanzarnos en Yokohama
-Mucho gusto –saludaron ambos hermanos educadamente, reparando en los dos últimos, que se acercaron luego de dedicarles un gesto con la cabeza, a saludar a Kazuki dándole un beso en la mejilla OO
-Ahora que recuerdo –murmuró Saki mientras los demás tomaban asiento- Matías es argentino y Darío es uruguayo
-Con razón el saludo –vaciló Jun algo asustado
-¡Oh, vamos! Sabes que por allá hasta los hombres se saludan así
-Ahá, ¡pero qué te parece ver algo así en Japón!
-¿Sos colombiano? –preguntó Matías con el típico acento argentino (ahhhhhhh...)
-Eh...sí, lo soy –respondió Jun confundido de charlar con alguien en español
-También juega fútbol –contó Saki orgullosa
-Entonces tendremos que jugar un día –ofreció el argentino cordialmente, mientras el uruguayo los miraba con indiferencia
-¿Tienen listas sus cosas? –preguntó Paola seriamente, de vuelta en tierra firme
-Todo está en los automóviles –contó Takashima, que se veía como el más responsable del grupo
-¿Entonces a qué hora nos vamos? –preguntó Shimano impaciente
-Tsubaki aun no llega –notó Kazuki avergonzado
-¡Por la marta! –exclamó Koike fastidiado- Si sabía que la cosa era con novias...
-Qué esperabas, cuando se enteró que me iba de viaje ofreció acompañarme, cómo le decía que no
-Fácil –aclaró Darío aburrido- "Voy SOLO"
-Ya ni modo, ya ni modo –murmuró Paola resignada- Ahora ya saben que Tsubaki irá con nosotros
-No lo dices muy contenta –reclamó Kazuki
-¿Qué esperabas? Aun no olvido que ella y sus amiguitas estuvieron fastidiándolos en el viaje de curso a Okinawa
-¿A nosotros? Será a Ken, Kojiro y Kazuki –se burló Matsuki
-¿De qué hablan, eh? –preguntó Jun por lo bajo
-Largo de contar –suspiró su hermana divertida- Pero en el viaje te pongo al día
----------------------------
"Por la marta" frase inventada por mi amigo Ray, para evitar pronunciar palabras soeces XDD
Gracias a Saki por crear los apellidos de Matías y Darío nn Que por cierto también los creé yo XDD
Como notarán todo lo que está en cursiva (espero que así se vea) es porque está hablado en español u otro idioma. Recuerden que Saki y Jun son colombianos nn
