Dark Janubis no es dueña de Yugioh! Ni de ninguno de sus personajes...
¿Quiénes son ustedes?
-¡Exacto!- se oyó una voz misteriosa de tras de él.
Yugi volteó para encontrar...
A un joven flotando en el aire y mirándolo con ojos graciosos llenos de curiosidad.
-¡Ahhhh!- fue la reacción inmediata de Yugi al ver a este chico vestido de blanco, flotando.
-¡Ahhh!- fue la reacción del muchacho
Luego...
-¡Ahhh!-gritaron ambos. Una vez se quedó sin aire, el pequeño notó nerviosamente como el otro lo miraba expectante.
-¿Qui...qui...quién eres tu?- Yugi preguntó asustado.
-¿Quién eres tu?- preguntó el muchacho.
-¡Yo pregunte primero!
-¡Y yo pregunte después!- regañó el joven.
-¡Yisho!- llamó una voz femenina.
Yugi volteó y vio como una chica flotaba hacia ellos. La chica era aparentemente de su misma edad y tenía una linda apariencia. El chico también aparentaba esa edad, pero tenía cara de despistado y poco confiable.
-Ay, no ¡ya llegó!- se quejaba el muchacho mientras retrocedía un poco al verla acercarse.
-Si ya llegué. ¡Ay! No puedo creer que me dejaras atrás y vinieras tu sólo, sabes que esta es una misión en equipo, ¡además asustas al objetivo!-apuntando a Yugi-. si no fuera porque estas muerto, ¡te mataría de nuevo!
-Oye, ¿no crees que exageras?- dijo el joven algo molesto.
-¡Aun no, pero espera!
-Ah... -Yugi trato de llamar un poco la atención del par, porque parecía que se habían olvidado que estaba ahí-disculpen…
-¿QUÉ QUIERES?- le gritó enojada la chica.
-. . . . . . –Yugi se petrificó ante semejante grito.
Al ver su rostro la joven se dio cuanta de lo que había hecho.
-Ay, mil perdones, jejeje... no era mi intención gritarte, es sólo que aquí mi compañero siempre me saca de mis casillas.
-Sí, claro...-Yugi decidió tratar de sacudirse la confusión-. disculpen, ¿ustedes quienes son?
-Ah, perdona. Permíteme presentarme, mi nombre es Mina, mucho gusto- dijo estrechándole la mano-. Y ese tonto que esta ahí, es mi compañero Yisho.
-Si... ¡Oye!... OH, bueno, no importa... ¡mucho gusto!- dijo muy animado el muchacho.
-Sí mucho gusto, yo soy...
-Sabemos quien eres- dijo Yisho.
-¿Así?
-Sí, tú eres Yugi Mutou, un joven de dieciséis años de edad y experto jugador del duelo de monstruos- dijo Mina.
-Si, además de ser el hijo único de tu familia, dueño del legendario rompecabezas del milenio y un gran amante de las hamburguesas- dijo entre risas Yisho.
-Vaya...eso si es raro-Yugi empezó a caminar alrededor de ellos mientras los observaba-...no lo entiendo...es...¿es que acaso morí y esto es el otro mundo?
-Bueno, la mera verdad es que sí y no- dijo Yisho con una sonrisa.
-¿Uh?... discúlpame, no te sigo…
-Lo que mi compañero confusamente trata de decir, es que: si estas muerto, pero no, no estas en el otro mundo. Y ese asunto es precisamente el que nos trae a nosotros aquí- dijo con una cálida sonrisa.
-aaa...umm...es que...¿acaso ustedes vienen a llevarme al otro mundo?- dijo Yugi un poco asustado.
-Pue...
-NO ¡Pero claro que no!- dijo Yisho cortando a su compañera- ¡pero si vinimos pa' lo contrario!
-para lo contrario Yisho, para, no pa', ¡aprende siquiera a hablar de la forma correcta!
-Pa' que lo voy a hacer si ya 'toy muerto, no necesito clase de caligrafía!
-¡de GRAMÁTICA pedazo de tonto!
-de lo que sea, ¡lo que importa es que no importa!
-¡Eso no es lógico!
-¡Sí lo es!
-¡NO lo es!
-Ah...disculpen...-Yugi trataba de calmarlos puesto que esto se estaba poniendo feo.
-¡QUÉ!- gritaron juntos.
-um...pues...yo me preguntaba si podrían dejar de pelear y ...- en ese instante Yugi se dio cuenta de que ambos seres estaban continuando su riña ignorando por completo su presencia- am...Oigan...-Yugi empezó a molestarse-. Chicos...Podrían!...-y llegó a su límite- ¡PUEDEN CERRAR LA BOCA POR UN INSTANTE!
Ambos muchachos voltearon a verlo con cara de sorprendidos, pero en completo silencio.
-Gracias...ahora podría alguien ser tan amable de explicarme, ¿si no están aquí para llevarme al otro mundo entonces para qué están aquí?- dijo Yugi algo enfadado.
Los chicos se miraron el uno al otro con miradas serias y algo tristes.
-Bueno- comenzó Mina- nosotros venimos a traerte unos mensajes...
Yugi tenía entera atención a Mina, pero el que siguió hablando fue Yisho.
-Tres noticias no muy dichosas- dijo Yisho, pero lo que sorprendió a Yugi fue su total cambio de voz, de juguetón a serio- Y son...
Yugi estaba apunto de estallar de ansiedad, mientras miraba a Yisho con total expectativa...
-Son...-dijo Yisho con misterio- ¡Una buena, una mala y una peor!
Yugi casi se cae al suelo con el cambio de voz de Yisho de serio a juguetón de nuevo.
-Bueno...en ese caso podrías decirme, La Mala, la buena y por último la peor- dijo Yugi con un poco de rabia.
-¡A gusto del consumidor!...adelante Mina, dile la mala noticia-Yisho se colocó detrás de Mina y la empujó para que hablara.
-Sí, claro... bueno, la mala noticia es...la mala noticia es... que nunca podrás ir al otro mundo-dijo de forma triste.
El rostro de Yugi reflejaba confusión y angustia a la vez.
-A...a...¿qué te refieres?... ¡cómo que nunca podré ir!-preguntó algo alarmado. Ir al otro mundo no era algo que lo hiciera muy feliz, pero eventualmente podría ver a sus amigos de nuevo… ver a Yami otra vez… esto tenía que ser mentira.
-Lo que ocurre es que...
-¡Todo es culpa de la forma en que moriste!-dijo Yisho.
-Sí, exacto, gracias Yisho, ¡eres todo un genio del tacto!-dijo de forma sarcástica.
-Esperen... ¿cómo que tiene que ver el tipo de forma en que fallecí?-preguntó Yugi en un tono algo asustado.
-Pues veras...-empezó Mina- no es por el tipode muerte que tuviste, sino, más bien la forma en sí...-Mina se detuvo un instante para asegurarse que Yugi estaba entendiendo-. Lo que ocurre...es que antes de morir, tu cuerpo fue despiadadamente torturado. Ese hecho hirió tu mente, al igual que los sentimientos de desesperación y miedo que inundaron tu corazón. A causa de eso, tu alma desea que el ser que te hirió sea castigado, por ello no puede buscar el descanso eterno...y eso significa...
-Que estoy atrapado en este lugar...-dijo asustado Yugi.
-¡Y no eres el único!- dijo Yisho mientras señalaba a lo lejos.
De pronto, Yugi fue capaz de notar nueve esferas flotantes de luz.
-¿Qué son?-preguntó confundido.
-Son almas- respondió Yisho, su semblante mostraba algo de lastima por ellos.
-Son las almas de aquellos niños y jóvenes, que, al igual que tu, fueron asesinados por aquel malvado ser- Mina hablaba con rabia mientras observaba esas luces que vagaban sin sentido alguno.
Yugi no podía creer que tantas almas tuvieran tan terrible destino. Estaba experimentando una mezcla de miedo, tristeza, ira y compasión. "todos ellos están muertos..." pensaba adolorido "y muchos de ellos eran menores que yo..." sus ojos se llenaron de lágrimas "pobres niños, no tuvieron un destino justo…tantas cosas que les fueron arrebatadas… esa persona debe ser detenida" Ambos muchachos miraron a Yugi y sonrieron. Sentían mucha simpatía hacia el joven duelista.
-¿Sabes?...-dijo Mina-eres un chico especial-Yugi volteó a verla con una expresión de curiosidad-. A diferencia de esas almas de allá, la tuya no esta sedienta de venganza ni llena de odio...
-Sí, casi hasta podría jurar que no deseas que algo terrible le pase a la persona que te asesino, como si solo quisieras que se detuviera- Yisho sonreía mientras hablaba, estaba muy satisfecho con la actitud de Yugi.
-Y esa es una de las razones por las que hay una buena noticia- recobrando su energía Mina.
-¿Cuál es?- preguntó Yugi mientras se limpiaba las lágrimas.
-Yugi Mutou, ya que no has cruzado al otro mundo ¡SE TE CONSEDERÁ UNA OPORTUNIDAD PARA QUE VUELVAS A LA VIDA!-dijo con Yisho con gran animo.
-¿Qué?- Yugi no podía creerlo- ¿estas hablando en serio?
-Él habla en serio-respondió Mina-cosa que es extraño... verás, como tienes un record muy bueno se te considera un caso especial.
-¿Uh?
-Lo que pasa es que al haber sido varias veces parte esencial en el desarrollo de numerosos rescates de personas, lugares e incluso el mundo, eres muy especial para el plano de los vivos; eso sin mencionar que varias personas desean que regreses.
-¿uh?
-En conclusión lo que aquí mi amiga dice es que se hace una excepción contigo por haber sido bueno en tu vida- dijo Yisho poniéndolo de forma concisa.
-Entonces... ¿eso quiere decir que podré volver a la vida?
-Si, pero detén tu motor, porque existe una condición para concederte ése regalo- respondió Yisho.
-¿Qué es?
-Pues...lo que debes de hacer es lo siguiente... ¡Se te asigna la misión de detener al asesino, tanto tuyo como de estos niños!
-¿Qué?- ¿estaba oyendo bien? ¿Querían que capture a la persona que lo secuestró, torturó y acabó con su vida? debía de ser broma…
-No es broma-afirmo la te ha de dar la autorización de que vuelvas en espíritu al mundo humano, donde existirás como un ser de plano medio, a.k.a. fantasma, y con esos poderes tu debes de lograr que tus amigos logren atrapar al criminal y de esa manera, todas aquellas almas oprimidas podrán descansar en paz!-dijo Mina.
-Pero... en serio creen que yo puedo hacer algo así, sin afán de bajar los ánimos, pero, algo que me di cuenta al ser asesinado es que soy particularmente tonto para hacer las cosas...-dijo de forma deprimida- vamos… ni siquiera pude salir de casa sin terminar perdido y secuestrado… además… todo el tiempo me la pasé rogando que alguien me ayudara… soy patético…
-Oye no ¡Tú no eres patético!-gritó Yisho con algo de rabia- Si lo dices por esa estúpida discusión que tuviste con tus amiguitos... ¡PUES NO ES CIERTO!
Yugi estaba totalmente sorprendido por la reacción del muchacho- ¿Pe...Pero cómo sabes eso?
-Yugi, te hemos estado observando desde hace tiempo y sabemos que lo que te mando a escapar y caer en las manos de ese sujeto fue que te sentiste abrumado por las palabras de tus amigos-respondió Mina.
-¿Por qué me han estado observando?
-Porque se nos comunicó que tú estarías en problemas, por ello se nos pidió informar tu situación-mencionó Yisho-empezamos más o menos cuando completaste el rompecabezas y ¡chico! Te diré que no lo haz hecho muy sencillo, te metes en más líos que conejo en carrera de galgos, y te digo, ¡he visto correr a esos conejos!
-¡Yisho!-le gruñó su compañera mientras el solo se cruzaba los brazos recordando esas carreras.
-¿acaso son ángeles de la guarda?- preguntó Yugi, algo confundido. No era algo de lo que se hablara muy seguido, pero pensó que encajaba con el hecho de estar muerto y todo eso.
-Bueno...en efecto somos ángeles...pero, no somos de la guarda...al menos no exactamente...
-¿Entonces?
-Bueno somos como... guardias, pero no nos especificamos en un alma específica...
El rostro de Yugi mostraba claramente que quería más que solo esa explicación.
-Ella quiere decir que nosotros nos encargamos de cuidar las almas que lo necesiten...no nos quedamos con un solo sujeto durante toda su vida-dijo Yisho con gran naturalidad-somos… mm… como digamos… Guardianes VIP, nos encargamos de almas que pasan por cosas de alto riesgo espiritual.
-Y yo encajo en esa descripción porque…
-¡OH! Vamos, debes estar bromeando ¿cierto? Eres el chico que armó el rompecabezas del milenio y al hacerlo, despertaste en su interior el alma de un faraón que se volvió la otra mitad faltante de tu alma y desde entonces haz combatido poderes del temible reino de las sombras, que habían sido sellados hace más de tres mil años. En el proceso, tu abuelo perdió su alma, luchaste contra un lector de mentes para recuperarla, sobreviviste a un loco juego virtual, descubriste el camino para recuperar el pasado del faraón. Casi te asesina tu mejor amigo, recobraste la mente de un cuidador de tumbas y ganaste las cartas de dioses egipcios. Eso sin mencionar que en determinado momento, el mismo faraón que luchaste por proteger, ¡metió la pata y terminaste sacrificando tu propia alma! Si eso no te hace merecedor del título de "alma en alto riesgo espiritual" dime ¿tú que consideras lo haría?-la chica respiraba agitadamente luego de haber dado toda la lista. Yugi la miraba con algo de pena… estaba un tanto avergonzado…
-A...ahora entiendo...
-Y como tu alma sufrió un repentino cambio...entonces nos encomendaron cuidarte-dijo Mina una vez recobró el aliento.
-Supongo… que me da gusto saber que puedo contar con su ayuda... aunque debo decir que Yisho no me da mucha confianza- lo ultimo se lo susurró a Mina.
-Créeme...te entiendo-respondió Mina susurrando.
-Oigan...que dicen... ¡secretos en reunión no es buena educación!
-Mira quien habla... el señor '¡yo puedo solo y no necesito a Mina!'
-Oigan chicos no se peleen, se supone que no están aquí para pelearse-dijo Yugi mientras los separaba.
-Bueno...en eso tienes razón-respondió Yisho.
-Y dinos…¿Aceptarás la misión que se te ofrece?-preguntó Mina
-o prefieres quedarte aquí...recuerda que nadie te culpará si prefieres estar aquí en lugar de regresar y volverte a encontrar con tu asesino...-aclaró Yisho
Yugi no lo pensó dos veces.
-¡Si!-respondió.
-Y recuerda que... ¿Qué?... ¿dijiste que sí? ¿Así como así?...¿tan rápido?-Mina y Yisho quedaron sorprendidos
-Claro...es decir...si logro hacer esto bien todas las almas de los asesinados estarán libres, ¿cierto?
-Pues sí...-respondieron ambos.
-Entonces todos podrán cruzar al otro mundo y descansar en paz, ¿cierto?
-Otra vez, es cierto...-respondieron.
-Entonces, si para que eso suceda tengo que regresar... ¡pues entonces bien vale la pena el intento!...además, si logro ver a mis amigos otra vez, aunque ellos no me vean... ¡el esfuerzo vale dos veces más!-dijo muy entusiasmado.
-¡Genial!...eso quiere decir que ya tenemos el alma indicada para este caso... ¿no es genial Mina?
-Completamente...!es fabuloso que aceptes!
Los tres muchachos empezaron a reír y saltar de emoción, hasta que una duda apareció en la mente de Yugi...
-Oye...pero Yisho dijo que tenían una noticia buena, otra mal y una peor... ¿entonces cual es la que es peor?
Ambos ángeles dejaron de saltar y sus rostros reflejaban algo de nerviosismo.
-¿Chicos, cuál es la peor noticia?-dijo con algo de mal humor. Algo le decía que no le iba a gustar mucho.
-Pues...em...jeje...la peor es...este...es...dile tu Yisho-dijo Mina empujando a Yisho.
-Pues...la verdad es que...tú tienes que ayudar a atrapar a ese sujeto...
-si... ¿y?- dijo Yugi perdiendo la paciencia-sin rodeos por favor.
-Pero lo que aun no sabes es que... no solo lo tienes que hacer...sino que tienes que hacerlo... ¡en menos de siete días!
-¿QUÉ?-Yugi quedó boquiabierto. Tendría que hacer que sus amigos capturaran a ese asesino antes de siete días- pero, ¿por qué?
-Es que si no lo haces en siete días no podrás volver a la vida-dijo Yisho.
-¿Por qué?-reiteró el muchacho aun conmocionado.
-Escucha Yugi, lo que ocurre, es que... existe un proceso natural en toda materia orgánica que de seguro conoces como descomposición, ¿verdad?-preguntó Mina.
-Quieres decir que si no lo hago en ese tiempo mi cuerpo estaría...mm...pues...bueno tú sabes...
-Exacto...y la única razón por la que se te pudo dar tanto tiempo es que tu cuerpo ha sido llevado a la morgue de la policía para investigación...por ello y porque hemos usado nuestras influencias, tu cuerpo se mantendrá en estado natural al menos por siete días, ¡por ello es esencial que lo logres en ese parámetro de tiempo!
-Entonces sólo tengo siete días antes de que mi cuerpo sea inservible y ¿me tenga que quedar así para siempre?
-Lamentablemente sí-contesto Mina.
-Son siete días o, viejo, estas podrido-comentó Yisho causando que los demás lo miraran con rabia-lo siento.
Yugi solo suspiró. "¿Por qué rayos me pasan estas cosas?" pensó para sí.
-Parece poco tiempo...-comentó-pero aun así...si no tomo esta oportunidad nunca veré de nuevo a mis amigos, ni podré ayudar a esas nueve almas...Aún con esa condición ¡Acepto el reto!
Los dos espíritus chocaron sus manos sonriendo, parece que habían apostado por el alma correcta.
-Bien dicho, ¡entonces ahora sólo tenemos que explicarte lo que significa ser un fantasma!-dijo emocionado Yisho.
Yugi quedo expectante a lo que Yisho diría. No importaba cuales fueran las condiciones, él las tomaría para poder volver a ver a sus amigos y poder ayudar a las almas de los otros niños.
Ooo
R&R