Dark Janubis no es dueña de Yugioh! Ni de ninguno de sus personajes!

Yo, en usted confío

-¡Ah!-fue lo único que Yugi dijo al caer directamente a través del techo de aquel edificio y de aterrizar duramente en el suelo. Por suerte, como estaba muerto, no sentía dolor, pero de haber estado vivo, eso debería haber dolido- ¡Rayos!... ¡Yisho podría haber tenido un poco más de tacto!- gruñó Yugi quejándose de la actitud del travieso ángel.

(Flashback)

Yugi observó la imagen que había aparecido cuando Yisho arrimó las nubes.

-¿A él?-preguntó algo sorprendido.

-Sipi...a él-dijo Yisho.

-¿Por qué a él? ...no es que tenga algún problema con el sujeto, pero, apenas y lo conozco...

-Lo sé-dijo Mina acercándose por detrás-pero, el detective Mark es el único que tiene la autoridad para evitar que esto ocurra...es decir, nadie más podría decir y ordenar que no se lleven a cabo las investigaciones necesarias si tu cuerpo ya esta en manos de los policías.

-Ya veo...pero, no lo sé...ese señor me agradó en el poco tiempo que lo conocí, pero...no sé si verme en sus sueños sea una buena idea...

-Créeme, él realmente necesita una pequeña plática contigo-aseguró Mina-. Quedó muy mal después de que moriste...ahora puedes ayudarlo si le hablas y le pides este favor de la mejor manera posible.

-Bueno...esta bien... ¡lo haré!-dijo Yugi muy entusiasta.

-Muy bien, ahora esto es muy simple, solo vas ahí abajo, te encargas de que él oiga tu petición, sales de su mente, y luego podrás ir a ver a tus amigos por un rato-Mina le sonrío a Yugi mientras caminaban.

-¿Puedo ver a mis amigos?-preguntó emocionado.

-Si, pero no puedes entrar en sus sueños, no al menos hasta que Mina y yo estemos contigo...además es preferible que tengas cuidado de por donde vas, trata de seguir rutas conocidas y solo ve a donde sepas que están tus amigos-dijo Yisho mientras se adelantaba.

-Muy bien...lo entiendo-de pronto una pregunta llenó la mente de Yugi-Oigan...pero, ¿cómo voy hasta allá abajo?

Una sonrisa aprecio en el rostro de Yisho, quien abrió sus brazos y separó las nubes dejando ver una especie de túnel de niebla que se extendía sin fin aparente. Yugi miró el túnel y sintió que los cabellos de su nuca se erizaban.

-¿Te...te...tengo que...bajar...por ahí?-dijo mirando a los dos ángeles quienes le sonreían inocentemente-¡Tienen que estar bromeando!

-Vamos Yugi, es solo una bajada de aquí hasta la tierra, además, no puedes morirte por esto-dijo Mina-. Mira, es sencillo. Te acercas, respiras profundamente y saltas-dijo dándole un suave empujón.

-De acuerdo...-Yugi se acercó al borde del agujero hacia el túnel-me acerco...res...respiro profundo...ah..m...y... ¡NO QUIERO SALTAR!-gritó asustado.

-Ay Cielos, ¿y a este le estamos confiando todo esto?-pregunto Yisho.

-Sabes que es difícil la primera vez-dijo Mina.

-¡Ya sé!-con eso Yisho se alejo un poco.

-Tengo miedo...es que es una gran caída y...-dijo Yugi, pero en eso volteó para ver a Yisho corriendo a toda velocidad hacia él-¡¿Qué RAYOS?!-gritó aterrado.

-Yisho, ¡que haces!-gritó Mina.

-¡BAJA UN MUERTITO!-gritó Yisho justo al darle un empujón a Yugi.

-¡AH!-Yugi empezó a caer por el túnel mientras veía como el ángel se mataba de la risa en el otro extremo.

(fin del Flash Back)

-Esto me lo tendrá que explicar luego-Yugi empezó a caminar hasta una puerta hecha de metal. Sobre el marco de ésta había un letrero que decía "MORGUE"-deduzco que aquí es a donde voy... ¿pero como le entro?...veamos-extendió su mano para tomar la perilla y repentinamente atravesó la puerta-Ah...supongo que debí adivinarlo, jajaja... después de tantas películas de fantasmas y de convivir con un espíritu tanto tiempo, ¡no puedo creer que no lo supiera!

Yugi se adentro a la lúgubre habitación. "realmente no lo entiendo... ¡si ya estoy muerto no sé por qué le temo a ver otros muertos!" se dijo a sí mismo mientras caminaba por entre los estantes y las camilla en donde se colocaban los cadáveres. De pronto notó la presencia de luz en la habitación y se acercó. En otra circunstancia, quizá la idea de un policía ebrio que duerme sobre una mesa puede sonar graciosa, pero no cuando estas en medio de una morgue y la mesa en cuestión tiene un cuerpo encima.

-¿Señor Mark?-Preguntó Yugi mientras se acercaba al dormido detective- ¿um? -de pronto Yugi sintió que le recorría un escalofrío en su espalda al ver el cuerpo cubierto por la sábana sobre la mesa. Pero, le aterró más ver parte del cabello del cadáver, cosa que lo hizo tocarse su propio cabello- ¡Muy bien!... ¡esto es más que raro!...va más allá de compartir mi cuerpo con un espíritu, de un lunático espíritu maligno, ¡o locos duelistas desesperados!-dijo con un poco de pánico- ¡en mi escala de rarezas esto se lleva un CIEN!...por que si no me equivoco, creo que ése es mi cu...cu...cuer...cuerpo... –Yugi estaba muy nervioso con todo esto-. Genial, primero me secuestran, luego muero, luego me encuentro con un par de locos espíritus y ahora estoy en una morgue para hablar con un detective que se quedo dormido y ebrio en la mesa donde esta mi cadáver ¡CÓMO PODRÍA SER MÁS RARO?

Fue entonces que el detective se volteó en sus sueños. Su rostro daba hacia Yugi. Frunció el seño mientras murmuraba "Yugi Mutou"

-Muy bien, oficialmente, ¡si estuviera vivo me pegaría un tiro!-dijo tratando de relajarse-. Bueno, no importa, tengo que entrar en sus sueños y decirle...esperen... ¿cómo hago eso?... ¡YISHO Y MINA NO ME DIGERON!-Yugi se frotaba la cabeza de desesperación, esto era muy complicado- bueno, más me vale averiguarlo y pronto...

Fue entonces que se le ocurrió que quizá sería como ingresar a la habitación de su mente. Lo único que tenía que hacer era relajarse y figurarse así mismo dentro de su mente. Entonces, lo único que tendría que hacer sería, acercarse a Mark, relajarse y figurarse así mismo dentro de los sueños del detective. Bueno, parecía bastante fácil puesto de ése modo.

Yugi se acercó al durmiente detective y colocó una mano sobre su cien izquierda, Mark solo suspiro ante la fría sensación que no logró sacarlo de sus sueños. Yugi, contento de que no se despertara, cerró los ojos y se concentró lo más que pudo. De repente, sintió ser jalado hacia otra zona. Abrió los ojos y se sorprendió al ver que ya no estaba en la morgue.

-Wow...esto es confuso...-dijo Yugi admirando los alrededores del lugar en donde estaba.

El lugar era oscuro y nebuloso. Hacia frío, y se oían suaves gemidos a la distancia. De pronto...

BANG!

Se oyó el sonido de un disparo.

Yugi corrió hacia el lugar del sonido y ahí vio algo que lo tomo por sorpresa. Era el detective Mark. Tenía una pistola en sus manos y le parecía estar disparando a una sombra que se escurría de lado en lado, esquivando los disparos. De pronto pudo ver a un niño aparecer. Era un niñito pequeño, como de cinco años. Yugi lo reconocía bien. Ya lo había visto antes, o más bien le forzaron a verlo. Cuando Sombra aun tenía capturado a Yugi, el asesino se tomó la molestia de presumir a Yugi quienes habían sido sus antiguos compañeros de 'juego' y le mostró una foto de cada uno de ellos cuando ya estaban muertos. Reconoció al niño como el que el ladrón llamó "el compañero de juegos más joven que había tenido". Yugi miró con pánico cómo la sombra se acercaba al niñito mientras el detective trataba de dispararle.

-¡Niño, CORRE!-gritó el detective, pero el niño solo lo miró y no se movió. De pronto la sombra saltó sobre el niño y lo cubrió por completo, y unos segundos después la sombra y el niño desaparecieron-no... ¡NO!

Yugi quiso hacer algo, pero de pronto, la escena cambio. Un joven apareció, luego una niña y así siguieron apareciendo, y todos desaparecían de la misma forma que el pequeño lo había hecho. Yugi los reconocía a todos, nunca podría olvidar las expresiones en los rostros de esas personas en esas cruentas fotos. Y Yugi sabía que el detective los conocía muy bien también.

-¡NO!-gruñó cuando la sombra se tragó a la novena persona. De pronto cayó de rodillas con lágrimas en sus ojos. Yugi lo miró con tristeza y estaba por acercarse cuando...

-No se preocupe señor Mark, todo esta bien-dijo el muchacho. Yugi quedó impactado al ver que era una imagen de sí mismo. Y esta imagen estaba con varias heridas por todo su cuerpo, tenía la ropa ensangrentada, estaba muy pálido, temblaba y parecía respirar con dificultad. Yugi entendió que esta era la apariencia que tenía cuando fue rescatado.

-¡No te alejes!-dijo Mark sujetando al chico-¡No permitiré que te atrapen a ti también!-con eso sujeto su arma y la apunto a la sombra que se acercaba-¡No te lo llevarás! ¿Entiendes?... ¡yo lo voy a proteger!-gritó poniéndose enfrente.

La sombra se acercó hasta él arrastrándose como una serpiente. Mark le disparó y se detuvo a varios pasos de él. La sombra se irguió y miró a Mark fijamente.

-¿Crees que me asustas?-dijo Mark, protegiendo al muchacho con su cuerpo.

-Tonto -dijo la sombra siseando como una cobra -no hay nada que puedas hacer para detenerme... ¡ése niño ya es mío!-de pronto apuntó un dedo hacia la imagen de Yugi y esta calló al suelo retorciéndose de dolor. Ante todo esto, el verdadero Yugi supo que el detective estaba sufriendo una pesadilla causada por la culpa.

-¡NO!... ¿QUÉ LE HACES?-gritó el detective tratando de ayudar al muchacho, pero sin lograrlo.

-¡Él ya era mío desde antes que tu hicieras algo!-gritó la sombra y avanzó hacia Mark, le dio un golpe y lo alejó del muchacho. Luego se abalanzó sobre él e instantes después ambos desaparecieron. Mark se sentó y no pudo retener sus lágrimas. El detective quedó allí llorando amargamente y gritando sobre lo idota e incapaz que era para ayudar a alguien.

Yugi ya no lo toleró más. Sin pensarlo dos veces, se acercó al detective que lloraba en el suelo. Luego se arrodilló y le miró con una sonrisa. El detective parecía no notar la presencia del espíritu. Yugi se acercó a Mark y, decidiendo un acercamiento más obvio, le dio un fuerte abrazó, lo cual desconcertó al detective quien recién notó la presencia del joven.

-¿Yu...YU...Yugi?-dijo confundido el detective que tenía el rostro lleno de lágrimas.

-Hola -Yugi miró al detective directamente.

-Pero...tu...tu estabas...estabas...

-¿Muerto?

-Bueno, sí...

-¡Y lo estoy!

-¿Ah?-Mark estaba ahora más que confundido, y un poco asustado-si estas mu..mu...muerto, ¿cómo es que estas aquí?

-Larga historia...pero lo que tiene que saber es que lo que acaba de ver, no era más que una ilusión de su mente, un sueño o más bien, pesadilla.

-¿Estoy soñando?... imposible...

-Claro que sí, ¿no lo recuerda?... se quedó dormido después de...bueno...um...embriagarse en la morgue-respondió con una sonrisa graciosa.

-¿En serio?-el detective se había puesto bastante sonrojado por esto-. Entonces, ¿tu también eres un sueño...verdad?

-Bueno, no-dijo causando que el detective se marearse con esta información-verá, usted se a quedado dormido al lado de...mi...mi cuerpo. Este soy yo, o al menos, mi espíritu, y vengo a decirle que cuando le hable en el hospital, mis palabras eran sinceras. Yo le aseguro, que nunca podría guardar rencor alguno en su contra, ni tampoco ninguno de los otros niños asesinados. No puede permitirse así mismo que algo como la autocompasión le haga perder de vista el objetivo principal...

-¿Qué?

-Atrapar al criminal antes de que cause más problemas. Los otros espíritus y yo confiamos plenamente en que usted y la señorita Lisa serán capaces de poner a ese malvado tras las rejas-con esto Yugi le ofreció una mano al detective para que se pusiera de pie.

-Pero, yo soy solo un fracasado-dijo rechazando la mano de Yugi.

-Si usted fuese sólo un fracasado, entonces nunca habría podido ayudarme a salir de ahí.

-Pero, fueron tus amigos quienes te hallaron, yo solo fui hasta allá-el detective se veía más deprimido.

-Mis amigos hallaron eso, pero fueron usted y su compañera los que me sacaron de allí. De no haber estado ustedes, es probable que hubiese muerto en las manos de ese malvado. Ahora, si lo que realmente quiere hacer es sentirse mejor, entonces no pierda su tiempo en embriagarse. Investigue más, y es posible que la próxima víctima sea la última, ¡puede que le salven la vida!-volvió a ofrecer su mano.

-... ¡Tienes Razón!...sentarme y apenarme por los tristes sucesos que ocurrieron no va a regresar a la vida a nadie, pero, si sigo adelante puedo ayudar a salvar otras vidas-con eso, tomó la mano de Yugi y se puso de pie-muchas gracias... no sé cómo agradecerte el que me ayudaras a salir de esa pesadilla pequeño...

-Creo que a mí se me ocurre algo-dijo sonriendo.

-¿Um?...entonces dilo, mientras este a mi alcance lo haré.

-Desearía que ningún daño le ocurriese a mi cuerpo, me refiero, ya fue bastante malo ser cortado por un asesino para que ahora los policías también lo hagan.

-Ya veo...pero creo que eso se puede solucionar si sólo se toman muestras de sangre...creo que sí puedo evitarlo. Y lo haré porque deseo de todo corazón el permitirte sonreír así-dijo revolviendo el cabello de Yugi.

-Jaja...gracias...A sí. Una recomendación. Debería tomarse un café fuerte e irse a casa a descansar. A nadie ayuda un detective enfermo-dijo dando un empujón al detective hacia un extraño agujero negro por el cual cayó gritando por la sorpresa. Luego, Yugi saltó tras de él.

Unos momentos después Yugi estaba otra vez fuera de la mente del policía y en la morgue.

-Wow, eso fue extraño, pero divertido-se dijo así mismo.

De pronto, sintió que alguien se acercaba y Yugi reconoció rápidamente el agradable rostro de la detective Lisa, quien tenía una cara de preocupación mientras miraba a su dormido compañero. Yugi se le acercó y pudo notar que se veía cansada. Obviamente, había estado esperando por Mark. La mujer suspiró en resignación volteando para irse, pero se detuvo al oír un leve gruñido.

De pronto, el detective empezó a moverse y a despertar. Yugi sonrío al ver a Lisa más aliviada.

Mark se sentó repentinamente, tambaleándose un poco.

-¿Um? ¿Lisa?... ¿qué hora es?-dijo con tono adormilado.

-Son la una Mark. ¿Cómo te sientes?

-Cansado...tuve el sueño más extraño...

-¿Que soñaste?-preguntó ella tratando de mantener la actitud positiva con la que, aparentemente, su compañero había despertado.

-Estaba perdiendo a todos los niños ante ésa sombra. Hasta que llegamos al último. Pero no pude defenderlo...caí al suelo, derrotado, cuando...

-¿Cuando qué?-preguntó Lisa con mucha curiosidad.

-Cuando de repente sentí que alguien me abrazaba. Abrí mis ojos y lo vi. Vi a Yugi ahí. Vestido en las ropas con las que lo encontramos, pero no tenía sangre ni estaba rota. El se veía preocupado por mí...-Yugi escuchaba este compartir parado entre los dos detectives sin ser notado, una sonrisa en su rostro al oír que lo mencionaban-me dijo que no tenía que creer que ellos estaban molestos conmigo, dijo que confiaban en mí y que confiaban en nosotros para que atrapemos a ése mal nacido antes de que destruya más vidas.

-Wow, suena como todo un sueño...Pero realmente creo que eso sería verdad.

-Si... yo también… Oye, Lisa, ¿crees que podrías darme un café y llevarme a casa?...realmente no creo poder llegar sólo...

-Creí que no querrías ir a casa-dijo sorprendida y feliz a la vez.

-No quería, pero Yugi dijo que sería mejor que lo hiciese (bostezo), después de todo, un detective enfermo no ayuda a nadie-con eso Mark empezó a salir de la morgue lentamente.

Lisa lo miró sorprendida. Luego volteo rápidamente hacia donde estaba el cuerpo sobre la mesa y con una mirada, mezcla de tristeza, ternura y agradecimiento, le sonrió.

-No sé lo que pasa...pero te agradezco que le devolvieras parte de su vida -dijo antes de seguir a su agotado compañero.

Y sin que ninguno lo supiera, Yugi los observaba con su propia sonrisa de satisfacción.

-Misión cumplida-se dijo así mismo mientras se disponía a retirarse de la morgue, feliz de haber ayudado.

Ooo

R&R