Dark Janubis no es dueña de Yugioh! Ni de ninguno de sus personajes!
Espíritu sepulcral
"ahhh...".
-Oye, ¿rees que ya este consciente?
"¿um?"
-no lo sé, ¿me crees adivina?
"¿qué?"
-Nop, ¡una adivina ciertamente sería más bonita! (Ponk) ¡ouch, oye!
-No molestes, ¡ahora hazte para atrás!
"¿Quién esta ahí?"
Yugi empezó a abrir sus ojos lentamente tratando de figurarse en donde estaba.
-Oye, ya despertó... ¿te encuentras bien Yugi?
-¿Um?-Yugi abrió mejor sus ojos y pronto puedo reconocer la imagen de la persona frente a él-¿Mina?
-Si, ¡y yo también estoy aquí!-dijo Yisho acercándose bastante, ¡pero bastante! ¡Exageradamente demasiado!
-Yisho, ¡aléjate un poco, deja que Yugi recobre el aliento!
-Pero, Mina, si esta muerto ya no tiene aliento, ¿o sí?
-¡Sabes a lo que me refiero cabeza de chorlito!
Yugi sonrió un poco al verlos pelear de nuevo, pero estaba algo sacudido por la terrible sensación que había recorrido su cuerpo hace unos minutos.
-Oigan chicos...-dijo llamando la atención de sus compañeros-…ah... ¿qué fue lo que me pasó?
De pronto ambos se pusieron serios y voltearon a verle.
-¡Lo que paso, fue que no hiciste lo que te dijimos que hicieras!-regañó Yisho.
-¿Qué?
-Discúlpalo Yugi, la verdad es que nos tenías muy preocupados...
-Lo lamento Mina-dijo dejando caer su cabeza hacia abajo-pero, ¿qué fue lo que paso?
-Lo que Yisho dijo: olvidaste tener cuidado como te advertimos-al ver que Yugi no entendía bien, procedió a explicar con mayor detalle-mira, nosotros te dijimos que solo andes por lugares conocidos y que solo fueses a lugares donde estuviesen tus amigos, ¿verdad?
-Si...
-Bueno, ahora acabas de descubrir lo que ocurre cuando no lo haces-dijo Yisho cruzándose de brazos.
-¿Eso?... ¿qué fue eso?...se sintió muy extraño, sentí como si estuviese muriendo de nuevo...-dijo temblando.
-Tranquilo, ya pasó-Mina le colocó una mano en el hombro-lo que sentiste fueron tus recuerdos.
-¿Mis recuerdos?
-Mira-dijo Yisho-Esto es así, tu alma ha sido regresada al mundo humano, pero sin un cuerpo que la lleve, bueno, digamos que es como un viajero perdido. El amor que tus amigos te tienen y los buenos recuerdos que forjaste por ciertos caminos son como un mapa para que te conduzcas por aquí...
-Pero si te sales de ellos-continuó Mina-entonces tu alma será susceptible a las fuerzas negativas de los vivos. Estas son como un imán para las almas en pena y, literalmente, eres arrastrado hacia esos seres.
-Entonces, ¿por eso me sentí impulsado hacia el bar?
-Si, por eso fue-dijo Yisho asintiendo-pero ¡ser arratrado no es lo peor!
-¿A no?
-No. Yugi cuando estuviste dentro sentiste dolor, pero al estar muerto eso no debería ocurrir. Ese dolor que sentiste fue el mismo que sentiste poco antes de morir. Cuando la gente que rodea a un alma en pena habla en burla de ellos y se ríe u ofende sus recuerdos, el alma en cuestión revive los sufrimientos que en vida tuvo que pasar, esto se presenta como un terrible frío que consume lentamente tu corazón y hiere tu mente hasta que todo el sentido se pierde.
-¿Qué?-Yugi estaba impactado.
-¿NO has oído que aquellas personas que se burlan de los espíritus son los perseguidas por ellos?-dijo Yisho-eso es porque cuando un alma en pena, léase un fantasma, es ofendido, revive un dolor desesperante, tanto que para ponerle fin descarga su ira hacia los humanos que estén cerca.
-Ya veo... ahora comprendo...-el joven sujeto sus brazos cerca de su pecho mientras pasaba un escalofrío por su cuerpo- esa sensación, fue realmente horrible.
Al verlo temblar, Mina le dio un fuerte abrazo.
-Tranquilo, ya estas a salvo-dijo mientras amablemente le frotaba la espalda y lo hacía calmarse-Yugi, todo estará bien, si te calmas y recuerdas a tus amigos, entonces te sentirás mucho mejor.
-Por el contrario, sería peligroso para ti seguir recordando el dolor.
-Lo..lo... ¿lo sería?-dijo temblando aun.
-Si-afirmó Yisho-. Escucha, si tu alma es sometida a ese sufrimiento por demasiado tiempo, solo habrán dos caminos posibles para ti, o te volverás un espíritu maligno o tu alma se hará pedazos y quedara flotando en la nada y...
-¡Qué?-Yugi se alteró más.
-¡Gracias por la ayuda Yisho!-le regañó Mina.
-OH, no...-dijo acercándose decaídamente mientras veía a Yugi temblar más fuerte-Yugi, yo...lo lamento...este...-Yisho se veía muy apenado, se acercó y abrazó a Yugi junto a Mina-discúlpame, no te preocupes, Mina y yo jamás dejaríamos que eso te pasara, recuerda que estas en buenas manos...
Luego de un rato, Yugi se logró tranquilizar e hizo un gran esfuerzo para olvidar lo que había ocurrido.
-Gracias chicos-dijo abrazándolos-Ya me siento mejor.
-¡Que bien!-dijo riendo Yisho-¡Me hubiera sentido muy mal si no te sintieras mejor!
-Yo también...dejemos este asunto de lado. De ahora en adelante, uno de nosotros siempre estará contigo, de esa forma, nuestra energía te protegerá mejor de la energía negativa humana.
-¿En serio?-al ver que ambos asentían, Yugi sonrío alegremente-genial, entonces ahora... ¿ahora puedo seguir viendo a mis amigos?-preguntó inocentemente.
-Em...bueno...este...
-¡Nop!-dijo Yisho cortando a Mina.
-¿Qué?¿...pe..pe..pero por qué no?-dijo Yugi algo decepcionado.
-Verás-Mina empujó a Yisho hacía un lado y se le acercó-en este momento necesitamos llevarte a conocer a alguien en especial. Luego tendrás el tiempo para ver a tus amigos, pero ahora es esencial que veas a esta persona.
-Oh...supongo que...tendré que hacerlo-dijo algo decaído-pero... ¿dónde esta?
-¿Dónde esta?-se dijeron los dos ángeles con unas traviesas sonrisas.
Ooo
Un viejo y desgastado letrero de metal, anunciaba a los vivos el ingreso a una zona de muertos.
"CEMENTERIO DOMINO"
Yugi estaba petrificado justo frente a la puerta de aquel lúgubre lugar. Siempre había odiado tener que ir de día, pero ¿de noche y más que eso, pasada la media noche? Ahora estaba aterrorizado.
Sus dos protectores atravesaron la entrada como si nada y empezaron a caminar hasta que Yisho notó que Yugi no los seguía.
-Um...Mina, se supone que estamos aquí por Yugi, ¿cierto?-preguntó Yisho ingenuamente.
-Sí, Yisho, ¿por qué lo preguntas?
-Bueno, porqué nuestro amigo se quedó pasmado en la entrada-dijo señalando a Yugi que no podía quitar sus ojos del letrero.
-¿Qué?...oh rayos... ¡YUGI, ENTRA DE UNA BUENA VEZ!
Al ver que no les hacían caso, Yisho se acercó a él y de un tirón lo hizo ingresar.
-Ahora, mantente cerca, ¿de acuerdo fantasmita?-dijo Yisho mientras burlescamente le daba unas palmaditas en el hombro.
El trío empezó a ingresar a la parte más profunda del cementerio. Yugi cada vez se ponía más nervioso. Cada paso le estaba costando mucho.
-Mina... ¿Es realmente necesario que estemos aquí?-dijo sujetando su túnica como un niño pequeño asustado por el coco.
-Yugi, te recuerdo que estas muerto, relativamente deberías sentirte bienvenido con todo esto-le respondió con algo de exasperación.
-Lo sé...pero el cementerio siempre me trae malos recuerdos...y me recuerda también esa extraña sensación…-dijo cerrando sus ojos y dejando salir un escalofrío.
-Tranquilo, no tienes nada que temer, estando muerto, casi nada te puede herir, al menos no nada muerto-comentó Yisho con una sonrisa de oreja a oreja.
-Pero, ¿a quién venimos a ver a este lugar?-preguntó temerosamente.
-Yugi, ¿alguna vez has oído hablar del fantasma del sepulturero?-preguntó Mina.
-¿El..el...el...fantas...fantasma del sepulturero?
(flash back)
-¿Qué, un fantasma?
-Sí, viejo. Mira, dicen que es un espíritu que ronda por el cementerio Domino por las noches-dijo Joey imitando a un fantasma-¡también dicen que atrapa a todo aquel que se atreva a traspasar el territorio del cementerio y que luego los sepulta vivos! MUAHAHAHAHA!
-¡Joey! ¡No digas esas, cosas me vas a matar de un susto!
-¡NAH! Yugi, eres muy cobarde cuando se trata de historias de fantasmas... ¡y eso que eres compañero de un espíritu de cinco mil años!
(más tarde ese día, Yami asustaría a Joey hasta desmayarse con una historia de fantasmas propia, demostrando que el joven no era tan valiente como creía xD)
(fin de flash back)
-Ahora que lo mencionas, si...si he oído hablar de él...
-Entonces sabrás que si quieres convocarlo, tienes que pararte justo bajo el árbol más viejo del cementerio y gritar tres veces, ¿no?
-¿En serio?-dijo Yugi con una sonrisa nerviosa.
-Habla en serio-dijo Mina-y adivina que árbol es este-dijo tocando un árbol que estaba sobre una colina pequeña.
-E..el...el...más...vi...viejo, ¿verdad?
-Sip...Mina, ¿lista?
-Claro Yisho.
-¿Qué...qué van a hacer?-preguntó separándose un poco de ellos.
Los dos le sonrieron y empezaron.
-¡SEPULTURERO!
Gritaron juntos. Ante esto, Yugi saltó y se escondió aterrorizado tras una lápida.
-¡SEPULTURERO!
Gritaron una segunda vez
-¡SEPULTURERO!
Gritaron por tercera vez, mientras Yugi temblaba de miedo. De pronto una suave neblina cubrió esa zona, y una luz verdosa y espeluznante brilló desde el viejo árbol. Entonces una gruesa, fría y atemorizante voz resonó.
-¿QUIÉN OSA INTERRUMPIR EL DESCANZO DEL SEPULTURERO?-gruñó la voz, asustando sin límites al pobre joven espíritu.
Ooo
R&R