I D E N T I D A D – INTRODUCCIÓN

— POR: EROL

Hogwarts es sin lugar a dudas un lugar lleno de misterios y magia, lo segundo es realmente acertado pero en esta ocasión no estoy aquí para hablar de hechizos ni de maleficios si no mas bien de lo primero, el misterio que es Hogwarts, tantos pasadizos secretos, tantas historias y tantas identidades aun no descubiertas, ¿Qué pasa cuando los secretos son develados? En Hogwarts significa que los problemas se avecinan y pude comprobarlo en sexto año y los que le siguieron.

Me presentare, soy Hermione Granger o por lo menos eso creí, mi realidad era diferente a lo que yo pensaba y todo era mas distinto de lo que jamás podría llegar a imaginar, mi vida era otra a la que yo conocía debido a alguna razón el destino a veces te juega bromas unas muy pesadas como en mi caso, tener lo que ahora tengo, siendo como soy en mi futuro solo quería un buen trabajo pero eh conseguido eso y mas. Siendo sincera también perdí mucho de eso me doy cuenta ahora que ya tengo veinte años.

Hogwarts.

La mañana empezaba a aparecer cubriendo en su totalidad un enorme castillo, uno fuera de la normal donde grandes torres se levantaban y muchas criaturas mágicas le rodeaban; unicornios, hadas y elfos eran solo unos pocos de las mágicas criaturas de ese hermoso y mágico.

Con la mañana adentrándose en la penumbra de la habitaciones de los estudiantes de Hogwarts un chico ojiverde se había adelantado a la mañana debido a que no había logrado conciliar el sueño la noche anterior agobiado por un presentimiento, había pensado en muchas posibilidades como el hecho de que este sería su penúltimo año en Hogwarts y había logrado mantener cierta.

—¡Hola Harry!- saludo una niña pelirroja— ¿Hace mucho que te has levantado?

—No Ginny, no mucho ¿Y tu?

—Estoy igual que tu- dijo sonriendo.

—Harry, me habrías podido levantar ¿No crees?— decía Ron bajando las escaleras.

—Dudo mucho que me hubieras hecho caso Ron.

—Como sea, vamos a comer algo y que sea pronto porque muero de hambre.

—¿No vamos a esperar a Hermione?

La pelirroja rápidamente se sitúo a lado de Harry y lo urgió a salir rápidamente de la sala común donde estaban, argumento que Hermione podría salir por si misma de un momento a otro y soportar a un hambriento Ron no era la mejor de las ideas.

—¿Te pasa algo Ginny?- cuestiono el mago de la cicatriz de rayo.

—Nada.

La pelirroja pensaba que esta era la oportunidad de pasar tiempo a solas con Harry, si la fortuna les sonreía lo que planeado con Luna saldría bien.

—Como digas, ¿Oye pero el comedor no queda para allá?

—Vamos dar un paseo por los jardines ¿Si?

—Como quieras pero no creo que a Ron le agrade la idea

—¿Y quien piensa en Ron en estos momentos?— se preguntaba ella

A lo lejos dos siluetas se observaban por supuesto que era la pequeña Weasley junto a "El niño que vivió" pronto todo Hogwarts estaba llenándose de gente entre ellos un grupo de chicas de Ravenclaw bastante arregladas y sonrientes caminaban por los pasillos tratando de que la mirada de varios jóvenes se posaran en ellas sin obtener mucho resultado todas estas comandadas por Cho Chang quien este año saldría de Hogwarts muy segura de su popularidad gracias a que era novia del joven Potter pero por lo visto muchas miradas ya no se posaban en ella quien comenzaba hablarles a su pequeño grupo de amigas.

—Chicas creo que tendremos que esmerarnos más en nuestro arreglo ¿Saben?

—Si Cho, como siempre tienes razón.

—Claro que si por algo soy Cho Chang la más linda de Hogwarts.

—Pues mira lindura alguien ya se apresura a bajarte al galán- se mofo la mejor amiga de la chica oriental.

Chang se giro apresuradamente a donde la vista de su amiga veía y logro notar dos figuras a la distancia una pequeña de cabellera pelirroja y la otra alta y de buen cuerpo con el cabello un poco revuelto; ese tendría que ser Harry, la otra sin lugar a dudas era Ginny Weasley esa chiquilla de la cual estaba segura quería a su novio pero no se saldría con la suya o por lo menos no se la dejaría tan fácil, comenzó a dirigirse hacia ellos cuando sintió a una de sus amigas le tomaba el brazo.

— Cho por que no lo dejas, después de todo hoy lo ibas a terminar.

—Porque no me da la gana yo lo termino pero no quiero que se diga que a Cho Chang le bajaron el novio y menos una estúpida como Weasley.

—No se que es más grande Cho tu ego o tu estupidez- dijo una nueva voz.

—Hermione, no es tu problema- enfrento la chica oriental molesta por el comentario de la castaña.

—Claro que lo es, ambos son mis amigos.

—Para lo que me importa –Rápidamente la joven Ravenclaw comenzó a andar con dirección a los chicos, siendo seguida disimuladamente por una joven alta y castaña la cual varios observaban.

Mientras que esto pasaba cerca del lago la pequeña pelirroja se detuvo girándose al chico de anteojos que la miraba esperando una explicación por llevarlo tan lejos del punto inicial; el comedor, la pequeña Weasley ahora tenía la cara tan roja como su cabello y sin mas se lanzo y le dio un pequeño, apenas perceptible beso al joven frente a ella que de inmediato retrocedió al recordar que tenía novia; aunque realmente su novia no era la chica de la que el se había enamorado hace ya tiempo.

—¡Potter!

El aludido se giro a ver la voz que no era otra más que la de su novia, la oriental dio cuenta de que varios estudiantes se giraban a observar al entorno de los tres chicos ahí mientras una castaña miraba un poco más lejos esperando el momento oportuno de intervenir en caso de que hubiera un problema.

—Este es el momento de actuar como una victima esto será genial— pensaba la joven Chang mientras comenzaba hablar y unas falsas lágrimas recorrían su rostro— ¡Como has podido engañarme!

Varios murmullos empezaron sonar mientras más estudiantes veían la escena algunos mirando con malos ojos a Harry y otros más fulminando a Ginny que se había ocultado tras el joven al ver a Chang con varita en mano no era una escena muy agradable aun mas si Cho sabía mas hechizos de los que Ginny conociera.

—¡Eres un maldito traidor!— dijo alzando su voz Cho

—No en verdad Cho yo...— decía Harry tratando de apaciguarla

—¡Tu nada, no mientas mas lo eh visto todo!— decía acercándose más con ademanes bien actuados.

—Pero yo...—trataba de explicar Harry

—Nada Potter lo nuestro aquí termina has destrozado una relación tan hermosa como la nuestra ¡Miserable!- empezó a levantar su mano para darle una sonora bofetada a Harry pero el golpe no llego a dar al rostro masculino.

—¡Petrificus! – fue lo que alcanzo a decir una castaña apartando a Harry.

—Maldita Hermione se me adelanto—pensaba Cho Chang hasta que sintió la anulación del hechizo, rápidamente iba a contraatacar pero al ver unas cuantas risitas por parte de otros estudiantes decidió comenzar a caminar con destino al castillo haciendo una breve parada a lado de la castaña que no mostraba expresión alguna al escuchar la voz en susurro de Chang.

—Esta ofensa me la pagaras caro…sangre sucia.

—Sal y termina tu patética escena Cho— susurro ella mientras Harry parecía no darse cuenta de nada.

—Ya arreglaremos cuentas.

La escena que todos los estudiantes que circulaban a esa hora cerca de ahí propagaron rápidamente la nueva noticia de Hogwarts, en tanto una temerosa y llorosa Ginny seguía detrás de Harry quien hasta el momento no conseguía salir de su trance hasta que sintió como la pelirroja lo empujaba.

—¡Te Odio!– grito Ginny con lagrimas en los ojos corriendo hacia el castillo.

—Querido Harry creo que deberías dejar de tener menos prospectos– dijo la castaña que se sentía mal por la mirada del ojiverde que parecía preguntar, ¿Me quieres decir que fue todo eso? No llego a formular su pregunta, se distrajo al sentir como Hermione le quitaba lentamente los anteojos.

—Oculus Reparo.

Las gafas fueron colocadas de nuevo en su lugar, sin quererlo Ginny más que un beso le dio un cabezazo a Harry que estropeo un poco las gafas del chico.

—¿En definitiva no viste llegar a Cho verdad?- Hermione reía por lo bajo cuando el joven entendió su bromita.

—¡Oye, no fue gracioso!

—Lo siento Harry, seguro ahora estarás muy triste por tu Cho.

—A decir verdad no mucho de hecho me preocupa más la actitud de Ginny, ¿Tú sabes que le pasa?

—No hay que ser sabio para saberlo, ella te quiere y no me refiero al cariño de una amiga.

El joven no pudo evitar sonrojarse ante las palabras de la castaña y de hecho no solo fue por el comentario si no por la cercanía de Hermione.

—Vamos Harry no es para que te pongas tan colorado tu le gustas a muchas chicas.

—¡Hasta que los encuentro! – chillo la voz de Ron.

—Pues no habrás tardado mucho en encontrarnos y dime ¿En cuanto se regó el secreto esta vez?— pregunto Herms.

—Te sorprendería, lo que me molesta es que Ginny se ah encerrado en su cuarto sin querer abrir a nadir ¡Ni a mi, su propio hermano! –Ron hablaba más en todo divertido que de un enfado de hermano mayor.

—¿Porque lo dices en ese tono Ron? – cuestionaba el ojiverde.

—Pues Harry ¡Porque ahora las chicas te perseguirán más que nunca y a mí contigo!—decía contento sin recordar que tenía novia.

—Pero han hablado de tu hermana Ron— siguió Harry.

—Ay Harry tu hace mucho que le gustas yo ya me había dado cuenta pero no pensé que se atreviera a traerte hacía el algo.

—¿Ahora resulta que no te importa tu hermana? –esta vez fue la castaña quien miro a Ron enojada.

—Claro que me importa Hermione pero tu sabes que Ginny solo tiene un gusto por Harry en cambio eh observado que se empieza a interesar por Neville, pero no se lo dejare tan fácil a Longbottom con mi hermana pequeña aunque dudo que Ginny logre que el se de cuenta con lo despistado que es, no se su manía por fijarse en despistados.

—Que poca fe a tu hermana- empezaba a regar la castaña mientras le daba un codazo por la indirecta a Harry.

—Si, si, si, ¿Vamos a comer o no? Ya solo nos queda media hora así que ¡Aprisa ambos!

Todo esto era observado por Draco que no había estado ahí precisamente por saber los romances de Harry, aunque había resultado interesante el encontronazo que el y Chang habían tenido pero aun más interesante había resultado el comentario de Cho a Hermione y el que era experto en leer los labios había entendido cada palabra, mas tarde lo comentaría con su amiga castaña, aun le era extraño decirle amiga pero lo era.

El desayuno termino en media hora como bien había señalado Ron cuando entraron al gran comedor todo quedó en silencio. Dumbledore sonreía a Harry mientras ladeaba la cabeza queriéndole decir: Solo a ti te ocurren esas cosas. Ron que vio que Harry no avanzaba fingió una repentina tos y de nuevo todo el comedor estaba en un gran barullo.

—¡Esto es genial dos horas con Slytherin y la cosa mejora en pociones!

—¡OH no!— exclamaron frustrados Herms y Harry ante lo dicho por Ron.

—¡OH si!— dijo Ron suspirando.

El día iba pasando con aparente calma por supuesto Harry estaba teniendo un día de todo menos normal:

1º Clase, Pociones— Snape comenzó a relatar una cómica reseña amorosa de él mientras Slytherin reía y los Gryffindor le miraban con lastima algunos también reían acompañando a la casa de serpientes.

2º Clase, Cuidado de criaturas mágicas— Otra con Slytherin van dos esta vez fue Draco quien hizo burla y comentarios sarcásticos lo raro es que de vez en cuando sonreía a Hermione cuando los decía haciendo que esta se mostrara altiva.

3º Clase, DCAO— Por suerte para él esta fue con Ravenclaw aunque tampoco mejoro mucho la cosa pues si la Ravenclaw eran inteligentes también eran muy entrometidas.

4º Clase, Transformaciones— Aquí se la llevo mas calmada aunque McGonagall de vez en cuando le miraba rabiosa, lo que era extraño aun para Harry

Las demás clases pasaron con un calma donde parecía que las manecillas del reloj jamás avanzarían, ahora estaban de nuevo en el comedor degustando la comida, o al menos eso hacia Ron porque Harry comía muy lentamente cuando vio a Hermione pararse de su lugar.

—Voy a la biblioteca, adiós.

Por una extraña razón Harry la quiso seguir y así lo hizo, efectivamente ella iba a la biblioteca cuando Pansy Parkinson junto con dos de sus amigas se acercaron como siempre tan soberbias pero Hermione no se quedaba atrás era tan soberbia y orgullosa como las serpientes así que decidió no interferir y se quedo observando tras una columna.

—Granger pero que sorpresa verte lejos de Potter- decía la serpiente ponzoñosa.

—Parkinson sigue tu camino— dijo con toda calma Hermione.

—No será que me tienes miedo Granger- decía la Slytherin destilando veneno.

—Parkinson tu lo único que puedes causar es desprecio y es Malfoy quien no los demuestra cada vez que te ignora— golpe bajo a Parkinson.

—¡Maldita sangre sucia!

—Palabras, palabras Parkinson mira tengo mejores cosas que hacer que estar tratando de que alguien con dos neuronas comprenda lo que digo— y así siguió su camino y ahora si las Slytherin siguieron su camino, cuando Harry cruzo en su camino el solo atino a sonreír y seguir su camino mientras ellas le seguían con la vista extrañadas de que el sonriera a alguien de su casa.

—Debo recordar no meterme con Hermione- pensaba Harry ahora entraba ya a la biblioteca al igual que había hecho Hermione, ella había ocupado una mesa atiborrada de libros, empezaba la lectura de un gran libro voluminoso y por lo visto no saldría de ahí en varias horas, el ya se iba pero se detuvo cuando vio a Adam Laurie un chico de Ravenclaw sentarse frente a su mejor amiga.

—Hola Hermione— decía Laurie por lo bajo.

—Hola Laurie, ¿Vienes por un trabajo?

—No en realidad hoy no nos han dejado nada de tarea.

—Es raro a nosotros tampoco.

—Pero tú nunca pierdes oportunidad para leer un libro Mione.

—Ya me conoces— decía ella sonriéndole.

—Si creo que si ¿Quien no conoce a Hermione Jane Granger? aunque habrá muchos que no lo hagan— siguió el— solo tus amigos ¿Yo soy uno no Hermione?

—Sabes que si.

—Bien entonces no te interrumpo más, tengo practica pero espero verte luego.

El chico salio siendo visto por Harry el no sabía que Hermione tuviera mas amigos o tal vez no solo eran amigos ella y Laurie pero novios no podían ser, Laurie tenía novia supuestamente no era un chico fuera de lo normal era de cabello negro, ojos azules de un cuerpo ni delgado ni gordo, un termino medio, muy poco fornido en opinión de Harry un chico de lo más normal, sin mas novedades el moreno estaba dispuesto a irse pero al ver entrar a Draco Malfoy se oculto una vez más.

—¿Otra vez con ese Laurie?

—No es algo que te importe Draco además no se me ah olvidado todo lo que le has hecho hoy a Harry.

—No es para tanto pero me sorprende que aun lo defiendas después de lo que Chang te ah dicho.

—¿Me has estado vigilando?- decía ella alzando una ceja.

—Sabes que te aprecio como mi amiga además yo solo andaba por ahí, venía a saludarte pero viendo tu animo mejor me voy con mi cita del día, ¡Adiós!

Ahora si Harry no entendía nada pero solo alguien le podía responder su duda…

—Me quieres contar, ¿Que haces con Malfoy de amiga?— pregunto Harry saliendo de donde había estado oculto, asustando a Hermione y llamando la atención de la gata blanca que vigilaba a Hermione desde lo alto de una ventana.

Ginny estaba desconsolada sabía que Harry era despistado pero esto había sido ¡El colmo con Potter! Eso mismo le trataba de explicar su amiga y novia de su hermano Luna Lovegood quien se había pasado ya varias horas consolando a Ginny y dejando a su novio fuera de la habitación pero Ginny parecía no querer calmarse.

—Ginny no ah sido para tanto además todos conocemos a Harry.

—¡Lo peor fue cuando llego Cho!

—Bueno también todos ya conocemos a Cho.

—¡Peor aun ahí estaba Malfoy!

—Bueno ya sabes que Malfoy siempre ah envidiado a Harry además había muchos estudiantes Gin de no ser por Hermione…

—¡Es verdad!— decía levantándose de la cama en que había estado llorando— sabes cuando me iba creí que Cho le decía algo y parecía molesta tu crees que Cho… ¿Quiera hacer algo?

—Probablemente pero tu cuentas conmigo ¿O no?

—Si, gracias Luna ahora solo espero que mis hermanos no me pregunten nada.

—¡Tu hermano!— decía Luna corriendo cuando por fin llego a la cita con Ron— Ron ¡Hola!— decía con una sonrisa nerviosa.

—Mju— decía volteándose el pelirrojo digno.

—¿Te enojaste?— decía en tono de niña buena.

—¡Y todavía me lo preguntas!— decía girándose a Luna que se apresuro a plantarle un beso.

—¿Aun estas enojado?— decía sonriendo.

—No siempre te va a funcionar Luna.

Y así ambos novios empezaron con sus dulces besos como siempre desde que se había formado la pareja a principio de año, en un inicio Ron se había resistido pero Luna había logrado cautivarlo, los enamorados se distrajeron cuando unos gritos se empezaron a escuchar detrás de ellos.

—¡Hermione ven acá!-gritaba Harry

—¡No si me sigues hablando de esa manera!

—¡Te estoy hablando bien! -gritaba enojado.

—¡No es verdad!

Para ese tiempo ya varias miradas seguían a ambos Gryffindor, Hermione tuvo que parar su marcha porque Snape se paro frente a Harry y a ella por la mirada del maestro parecía que no iba muy contento que digamos, los alumnos se estremecieron ante la mirada envenenada del profesor de pociones que al parecer no había comenzado bien el día y este sería solo el primer problema de varios.

—Potter y Granger- decía con asco— ¿Qué creen que hacen gritando por los pasillos?

—Nada— contestaron ambos.

—Ambos a mi oficina ¡Ahora!

Ambos se dirigieron al lugar indicado por Snape mientras Harry miraba molesto a Hermione y ella solo miraba la oficina del profesor de pociones donde ambos estaban castigados hasta que por fin Hermione se canso de las miradas.

—¡Quieres parar Harry!

—Explícame de esa amistad tuya y parare.

—Bien -respondió ella mirando hacia un raro cuadro—lo haré.

CONTINUARA…

Que hablen de uno es espantoso.

Pero hay algo peor: que no hablen.

Oscar Wilde