Capítulo 8: Herido

1.

-DIMELO, MALDITA SEA-le gritó Potter

-Que me sueltes, estúpido animal-se defendió Snape

-Te voy a partir la cara, idiota. DIMELO AHORA!

-James... James, por Dios, suéltalo- lo trató de tranquilizar la pelirroja- De que hablas? Que hijo?

-Un hijo, Lil... NOSOTROS TENEMOS UN HIJO! DIME DONDE ESTÁ-estrelló nuevamente a Snivellus

-JAMES- Sirius fue el que abrió la puerta del despacho de un solo empellón- JAMES, DEJA A SNIVELLUS TRANQUILO. MORTÍGAFOS ATACAN UN CENTRO COMERCIAL EN LONDRES!.

James miró con odio a Snape, pero lo soltó con asco.

-No te me escapas más, idiota- le murmuró antes de tomar su varita y salir tras Sirius

-Se acabaron las clases por hoy- dijo Lily aún algo aturdida- Harry, ve a tu habitación

-Quiero ir con ustedes- dijo Harry alarmado

-No. Esto es solo para la Orden

-Pero...

-Sube a tu habitación- Lily sacó su varita y fue tras su esposo.

Por el pasillo mientras tanto corrían tres de los cuatro merodeadores, con expresión de profundo desconcierto y de rabia.

¿Qué pasó, James?

-Luego te cuento. ¿Dónde iremos?

-Nos trasladaremos en el despacho de Dumbledore- Sirius los guiaba

¿Qué pasará con Moony?

-Nada, nada... luego hablamos Prongs. Ya lo dijiste tú.

-La luna está roja-murmuró Peter obviando la conversación de los otros dos.

¿Roja?

-Como la sangre...

Dumbledore los esperaba en su despacho, con expresión seria, nada que ver con su expresión bonachona de costumbre. Miró a su derecha, donde la profesora McGonagall esperaba con una horrible bata escocesa.

-Minerva, dile a Lily que se quede y que vele por la seguridad de Harry y los demás alumnos en cuanto llegue. Nosotros nos vamos.

-Sí, Albus.

Los cuatro tocaron un cartón viejo y al momento estaban en una marea de gente que corría y gritaba destruyendo todo a su paso, y en donde saltaban haces de luz roja, verde y morado. El cielo se veía a través del techo de vidrio roto, estaba teñido de distintos colores, la gente se apretujaba, gritaba... a empujones James se mantuvo cerca de Pete, pero Sirius fue inevitablemente arrastrado lejos, por un grupo de muggles que corrían despavoridos. Lo último que vieron fue a Sirius con la mano alzada, tratando de hacerse camino a codazos.

Había aurores, muggles locos corriendo por todas partes, mortífagos, demonios, todo era un caos, pero lo peor... eran los vampiros.

-¡HELIUS-gritó James haciendo que de su varita brotara una luz muy poderosa y cegadora que hizo al vampiro que se lanzaba contra él, retroceder lastimado y con quemaduras.-Demonios- y no era una expresión- PETE, CUIDADO CON LOS DEMONIOS!

-Expelliarmus!

-Incendio!

-Impedimenta!

-Porquerías! Mierda... no me toques- le pegó un codazo a un vampiro y lo atacó con un Helius

¿Estás bien, Prongs?

-Síp... ¿tú?

-También. Será mejor que no nos separemos en este caos.!

-SIRIUS-gritó, pero su voz se perdía entre los aullidos de dolor y los gritos histéricos.

Un muggle pasó corriendo frente a ellos... un rayo morado lo desintegró al instante.

Por el otro lado de la confusión, un grupo de aurores se enfrentaban a duras penas con un enjambre de demonios...

-JAMES! PETER! –gritó Sirius abriéndose pasó entre los demonios¿Dónde mierda se metieron¡PRONGS! WORMTAIL!

-Hola, primo-sonrió una mujer que se había plantado frente a él con desenvoltura. Fue un solo segundo el que demoró en saber la identidad de la encapuchada.

-Bellatrix...- Sirius levantó la varita al reconocer los ojos grises, como los suyos, tras una máscara oscura

-Mucho tiempo...

-Desde que me hiciste caer tras el maldito velo, creo.

-Te extrañé

-Imagino cuanto, zorra- murmuró

¿Qué vocabulario es ese?

¿Qué quieres¿Matarme? No será tan fácil esta vez.

-No busco pelear contigo, primo... no hoy al menos.

¿Qué buscas entonces?

-Por aquí anda tu amigo inseparable del alma, verdad?

-No te atrevas a hacerle algo a James... o te juro que lo lamentarás- le dirigió una mirada asesina al tiempo que sujetaba más fuerte su varita.

-Pensé que era al lobo al que te follabas.

-No hables así de Moony- la apuntó peligrosamente con la varita.

-Nunca lo entendí... que te gustaba de follarte a un animal?

-AVERNO!

-CRUCIO!

Ambos lo evadieron, pero se miraron intensamente.

-Esa maldición no deberías usarla, primito. Está prohibida también. Es mala, muy mala- y rió

-No me darás clases de moral tú, Bellatrix- dijo Sirius con una intensa mirada de odio.

La mirada de los ojos platas se enfrentaron nuevamente... esta vez no necesitaron palabras para saber lo que se recriminaban mutuamente. Bellatrix habló con expresión dolida:

-Jamás te perdonaré eso, Sirius

-No le llegas ni a los talones, perra.

¿Te gusta que es salvaje¿Te gusta que te arañe y muerde cuando lo follas-rió de manera trastornada

-Ni siquiera vale la pena explicártelo. Jamás podrías entenderlo... por eso lo elegí a él.

-CRUCIO!

Sirius soltó la varita por el dolor. Un dolor horroroso que se extendía desde la punta de los pies hasta la punta del pelo. Los huesos parecían que se quebrara, los músculos desagarraban, el dolor de cabeza era insoportable... era un dolor inhumado, y escuchaba la risa de esa mujer, como enloquecida... y oía cosas que le decía pero que el dolor no le dejaba procesar..

-Disfrútalo mientras puedas... cuando mi Señor lo tenga, no te quedará nada! Es lo que les espera a los que se revelan a nuestro Señor! Y luego, mi Señor... SE PROCLAMARÁ DIOS!

-Stupefy- gritó la voz conocida de James

La mujer salió disparaba por el hechizo y cayó pesadamente al suelo, soltando su varita y terminando con el dolor de Sirius, que cayó de rodillas tratando de que sus pulmones se llenasen de aire, pero el dolor era simplemente terrible.

¡Padfoot- fue el pequeño Pete el que se acercó corriendo al animago, blandiendo su varita, con un horrible corte sobre el ojo derecho que le impedía la vista por aquel lado¿cómo estás?

-Crucio!-gritó Bellatrix

-Dementius!-atacó James

-PRONGS, CUIDADO-gritó Sirius

-Helius- los defendía Peter de los vampiros que atacaban

-Mi varita... necesito mi varita- Sirius tomó su varita desesperadamente- Aquí! Desmaius!

El hechizo no dio en el blanco y un grito de Peter alertó a Sirius y James. Sirius los protegió a él y a Peter con un Protego. James que había bajado la guardia esquivó por milímetros un poderoso Averno, lo que no le dio tiempo de contraatacar. Cuando estuvo listo, la mujer se había perdido entre la marea de gente.

2.

-James- Lily se acercó a su esposo y lo abrazó suavemente cuando los tres merodeadores se presentaron en la enfermería ese día Lunes en la madrugada.

El estado de los tres no era grave, pero francamente, sí muy lamentable. Peter tenía un corte sobre la ceja que sangraba mucho y cojeaba, Sirius tenía la camisa echa jirones, el labio inferior roto y numerosos moretones, mientras que James ostentaba varios cortes en brazos y cara y su brazo derecho sangraba y parecía que no podía moverlo.

-Estoy bien, linda. Tranquila- la besó en la frente, sin soltar su brazo derecho que parecía provocarle un terrible dolor.

¿Paddy-Remus lo miraba con ojos asustados de una cama

-Ya, ya, estoy aquí, lobito- y se sentó en la cama con una sonrisa¿cómo estás?

-Bien- pero tocó con dedos temblorosos el labio inferior de Sirius que dio un respingo, pero luego tomó la mano del licántropo y la besó amorosamente

¿Bien¿Y porque entonces esa venda en la frente- lo miró con ojos tiernos

-Ah- Remus bajó la vista- es que el lobo estaba muy nervioso anoche... creo que la Wolfbane no logró reprimir los instintos asustados del lobo y traté de esconderme, pero me golpeé. No es nada. Madame Pomfrey ya lo revisó.

Lily había ayudado a Peter a sentarse en la cama derecha adjunta a la de Remus, y James se dejó caer en la izquierda.

¿Qué fue lo que pasó-preguntó Lily al ver que ninguno hablaba

-Voldemort- suspiró James- había un grupo enorme de demonios, algunos vampiros y un grupo considerable de mortífagos. No sé de donde sacó tantos, bastantes murieron durante la última batalla había dicho Dumbledore, no?

-Sí- Sirius asintió- Dumbledore está ahora con Amelia Bones, la Ministro de Magia. La gente está asustada, y aunque han tratado de minimizar los daños, hay un centenar al menos de muggles muertos- Lily se llevó las manos a la boca- la versión oficial es un atentado terrorista, parece que está muy de moda entre muggles. –suspiró con cansancio

¿Y que hará el Ministerio-preguntó Remus

-No saben... no esperaban... nadie esperaba que Voldemort se pusiera al descubierto tan rápido... creemos que... o sea, yo creo quiere algo, necesita algo y por eso se puso al descubierto, para conseguirlo, pero pueden ser ideas mías- dijo James algo abatido- Lo cierto es que está cundiendo el pánico... Dumbledore no lo dice, pero...

-Teme que destituyan a Amelia del cargo- terminó Sirius- 'El Profeta' ya comenzó las críticas y muy fuertemente. Sería terrible que la sacaran y pusieran a un idiota como Fudge nuevamente.

¡Ustedes- la voz de Madame Pomfrey los sobresaltó¡Tiéndanse en las camas, los atenderé en un segundo- y miró a los tres animagos

Remus y Lily se rieron levemente. Los otros se tendieron y se pusieron los pijamas que la estricta mujer les ordenó, cuando estuvieron listos notaron que Remus se había vestido, y los esperaba para despedirse.

-A donde vas-preguntó Sirius, extrañado

-Es Lunes, Paddy. Tengo clases a primera hora con Slytherin de tercer grado.-sonrió- Vendré a verlos en cuando tenga tiempo. Además hoy comienza el Club de Duelo, Prongs

El mencionado simplemente gruñó y se escondió bajo las sábanas

-Quiero dormir-dijo simplemente, pero cuando Remus salió, James saltó de la cama, con para pálida

¿Qué pasa, Prongs-preguntó Peter, extrañado

-Eso- miró a Sirius, a Lily y a Pete- Snivellus se ha quedado conmigo! El muy imbecil no me lo ha dicho aún

¿Qué- Sirius lo miró como poniendo en duda su salud mental

-Donde está mi hijo- lo miró con expresión indescifrable

Se hizo un momento de silencio. Nadie dijo absolutamente nada... hasta que Sirius y Peter estallaron en carcajadas.

-JAJAJAJA...Bueno... jajaja.. a estado genial la broma Prongs, casi me la he creído...-reía Sirius

-Nah... jajaja... me duele reír, Prongs... jajajaja- Peter se encogía sobre sí, mientras reía.

-Es verdad- y los ojos avellanas de James, serios, como pocas veces habían sido vistos, hicieron que los otros dos lo miraran levemente asustados- Lo vi... en clases de Oclumancia... vi que sostenía un bebé... un bebé de Lily y mío- e hizo un gesto como si tuviese un bebé en brazos- Era pequeño y hermoso... tenía los ojitos verdes...- los ojos se le habían puesto vidriosos- y el pelito era negro, como el mío! Y se reía... se reía y movía sus manitos!

-Puede que Snivellus quisiera hacerte una broma, no-preguntó Peter, temeroso

-No- dijo Sirius seriamente- La Oclumancia remueve recuerdos de la mente, no los crea... ¿dijiste un hijo¿Un hijo...? Me parece increíble... ¿por qué no lo han recordado antes?

Lily se había puesto muy pálida y miraba de reojo la puerta. Tenía un mano en el pecho y parecía profundamente conmocionada

¿Un hijo-miró a su esposo que asintió -Harry...- dijo Lily entonces, de pronto

¿Harry que-preguntó Peter extrañado mirando para todos lados, esperando ver a Harry

-Es Harry...- Lily miró a su esposo- Lo sé... Es Harry

-No es posible- James lo miró muy serio y negó con la cabeza

Sirius miró a Lily y Peter miró con ojos grandes a James, con entendimiento. Ninguno dijo nada, en ese momento los unía algo más que las palabras

¿Por qué¿por qué crees que no es él?

¿Por qué- repitió James- Bueno, porque... no sé... es tan grande... tiene dieciséis años... –parecía que estaba enfrentándose a algo que era más grande que él. Se había agarrado la cabeza con las manos y parecía levemente asustado- y... significaría que no estuvimos cuando...

-No hubiese sido culpa suya- intervino rápidamente Padfoot

-Pero igualmente no estuvimos- gritó de pronto Prongs, tenía los ojos llenos de lágrimas¡NO ESTUVE PARA MI HIJO!

-Harry dijo que sus padres murieron salvándolo- dijo Peter, con voz aparentemente tranquila- Estuviste cuando más te necesito

-No estuve cuando dio sus primeros pasos... no estuve cuando ingresó al colegio.. no estuve cuando necesitó un amigo, no estuve cuando aprendió a montar una escoba, no estuve cuando corría peligro... no estuve cuando Voldemort, ese hijo de puta, le quería hacer daño, NO ESTUVE DURANTE DIECISÉIS AÑOS!...¿cómo podré mirarlo a la cara?

-Ni siquiera sabes si él es tu hijo –dijo Peter sensatamente

-James, amor...- Lily lo abrazó con evidente dolor en el rostro, pero también con fuerza en el espíritu- tu y yo lo sabemos. Era algo distinto, yo lo sentí... y no supe explicar que era lo que me unía ese chico... tu lo comentaste en un oportunidad y tampoco supiste que era lo que te unía, pero...- James sollozaba en el hombre de Lily- ahora lo sabemos.

Hubo un momento de silencio.

Sirius deseó de todo corazón tener a Moony a su ladoél si sabía que hacer en estas situaciones... no como él. Un hijo de James y Lily... era como un hijo suyo y se recriminaba no haber recordado... les había fallado a sus amigos... no solo a ellos, a Harry... no solo a Moony, a Prongs, a Lily... sino a Harry, a quien sería lo más parecido a un hijo que tuviese jamás...

Peter se sentía horrorosamente culpable... por él sus amigos no habían estado para su hijo... se odió con más intensidad y a Voldemort. James le había confiado lo que más puede amar un hombre... su familia, y él la había entregado... que había echo? No podía perdonárselo. No merecía perdón...

James se sentía terrible. No había estado para su hijo... Harry. Había olvidado que la vida y ese amor que había construido con Lily, habían dado frutos... jamás se lo perdonaría... jamás...No había estado. No quería creerlo. ¿Qué tipo de padre era? No quería aceptar ese dolor y esa verdad, era demasiado, no podía vivir con esa carga... por eso se rebelaba y desesperaba

Lily se sentía herida. Como mujer y como madre... no sabía como aliviar el dolor de James, y también herida porque no había reconocido a su hijo... su Harry. Ahora las imágenes volvían a una velocidad impresionante... eran tantas y tan hermosas... tan preciadas... nunca las volvería a olvidar, eran parte de ella... Harry era parte de ella, era un sueño que había tenido desde que era una niña, un sueño que se había echo realidad del contacto de su amor por James. Aceptaba ese dolor, se sometía a ese dolor y por ello lo aceptaba... esperaba que él la hiciera una mejor esposa, y por supuesto, una mejor madre.

-Recuerdan algo, chicos- preguntó la pelirroja que sostenía a un silencioso James

-Imágenes borrosas, pero creo recordar un niño- sonrió dulcemente Peter, como rememorando esa época, aunque también había amargura en su voz

-Es mi ahijado- Sirius se había tensado- Es mi ahijado...

-Sirius...- Lily miró al animago- gracias por haber estado con Harry

-No... estuve en Azkaban, lo recuerdas?... yo les fallé- Sirius tembló pero no derramó lágrimas, no quería mostrarse débil frente a los demás.

-No nos fallaste, de lo contrario, Harry no sonreiría como lo hace cuando te ve.

¿Por qué no lo reconocieron-preguntó Peter, extrañado, tratando de aliviar su propio infierno

-Creo- Sirius fue el que habló, con voz dura- que Dumbledore nos debe más explicaciones.

-Harry... me resulta...irreal- sonrió James con amargura sin soltar a su mujer

Y entonces la puerta de la enfermería se abrió y ante ellos, Mione, Ron y Harry, los miraban con una sonrisa.

-Como les...- Los ojos se Harry se abrieron asustados al ver el estado de los tres animagos‚ Que les pasó¿Están bien- traía pedazos de pastel de frambuesa.¿Qué pasó James?

Cuatro miradas sobre el trío...sobre Harry...y entonces supo que algo pasaba.

¿James¿Sirius?... ¿Peter- Harry dio tres temblorosos pasos hacia los jóvenes que los miraban¿Qué... pasa?

-Harry...- la voz de Lily fue un susurro y estaba llena de lo que parecía ser, la más profunda emoción- Harry...-repitió como si el nombre de por si demostrase todo lo que su corazón contenía¿Por qué no lo dijiste... hijo?

3.

-Hola –una voz seductora tras él. Se volteó, extrañado, pero suspiró al verle con su mirada altiva, porte fino y sonrisa burlona, pero hermosa, todo hay que decirlo.

-Buenos días Lucius- sonrió con cortesía

-Me pregunto si alguna vez me sonreirás por más que mera cortesía- caminó hacia él, pero se detuvo a pocos pasos¿Mala noche?

-Un poco, gracias- y siguió su camino, pero los pasos del aristócrata resonaban también por el pasillo

-Al parecer no fue una Luna Llena muy tranquila, verdad?

-Algo así.

-La luna llena es hermosa... pero roja es algo exótico

¿Qué sabes de los ataques de ayer- Remus lo miró con desconfianza- No me dirás que lo sabías, verdad?

-Pues... algo.-sonrió con galantería

¿Y porque no avisaste a al Orden- Remus lo miró con una mezcla de asombro y molestia- Murieron muchos muggles y también docenas de Aurors resultaron heridos.

-No hubo tiempo, eso es todo

-Es muy fácil decirlo, no?

-Ahora que lo mencionas... sí, un poco- sonrió Lucius al ver a Remus tenerse frente a una puerta¿Tu despacho?

-Sí, con tu permiso- dijo enojado y entró, pero Lucius no le dejó cerrar la puerta- No me invitas a pasar?

-Lo siento Lucius, pero tengo que recoger unas cosas y me voy.

-Ah!... es verdad... tienes clases, pero... no pasará nada si me dejas entrar- voz insinuante

-Lucius, de verdad...- trató de cerrarla, pero Lucius empujó la puerta y entró, cerrándola tras de sí¡Lucius! –lo miró con el ceño fruncido y alejándose inconscientemente de él.- No sé que pretendes con todo esto- y se volteó, algo nervioso, y comenzó a tomar las cosas sobre su escritorio.

¿No lo sabes- se había pegado a él y deslizaba las manos por su cadera- Que estrecho...

-No... no hagas eso- trató de apartarlo, pero no pudo... se sentía tan débil y cansado luego de las transformaciones, además que Malfoy era un hombre fuerte aunque no lo pareciera. Lucius apretó más el abrazo y el lobo trató de sacar su varita... sus ojos se dilataron al notar que Lucius la tenía- Suéltame!

¿Y Black- y tocó su vientre con exquisita delicadeza¿te ha dejado solito?

-Lucius, para... esto no está bien- y tomó los brazos de Lucius sin poder apartarlos

-Estás algo débil. La otra vez te soltaste con facilidad... es la luna- y lo volteó entre sus brazos, para apretarlo contra sí- Me gustas tanto, lobo

-Ja... te gusto yo o lo que te gusta es que soy un licántropo- lo miró con fiereza e hizo un violento movimiento para soltarse, pero el abrazo del otro era muy fuerte

-Dicen que son buenos amantes- y comenzó a juguetear con la nariz por el cuello de Remus¿Qué dirá Black?

-Lucius... ¿por qué lo haces, verdaderamente, por qué?

¿No lo sabes- sonrió y lo apoyó contra la pared.

Lo aprisionó como la vez anterior y con una sonrisa lo besó violentamente. Remus intentó apartar la cara, pero el rubio lo sostuvo con fuera y le obligó a abrir la boca. Era muy dulce...y suave. La lengua del rubio buscó el lugar más recóndito de la boca del otro, con frenesí. Mordió su labio inferior, con deseo, pero sin romperlo, con más cuidado de lo que otro hubiese echo en la misma situación.

-Te quiero... –le sujetó el rostro con rudeza- y te deseo.

-Me das asco. No me beses- los ojos de Remus sin embargo hablaban de temor y se veían aguados

¿Por qué no...-empezó a acariciarle frenéticamente la cara exterior de muslo, como queriendo subir la larga túnica que cubría el cuerpo del profesor, mientras que lo presionaba contra la pared, sin mucho cuidado- simplemente de dejas llevar?

-Amo... a Sirius- intentó empujarlo, pero Lucius lo agarró por la garganta y lo estampó con bestialidad contra la pared

-Bueno, pero puedes darme un poquitito de ese amor, no-rió mientras una de sus manos buscaba el cinturón del pantalón de Remus, bajo la túnica

-Suéltame- se empezó a debatir con violencia renovada- Eres un degenerado!

-Solo un poco... no seas exagerado- atacó su cuello mientras que con una mano inmovilizaba al lobo y con la otra le quitaba el cinturón, pero en su desesperación Remus golpeaba fuertemente el pecho de Lucius y soltó solo un grito de ayuda antes de que Lucius sacara la varita y simplemente dijera- Imperius!

Y entonces el licántropo temió, porque había dejado de ser un acoso. Lucius estaba dispuesto a todo...

-Que tal ahora? –se rió, antes de lamerle los labios- así me gustas. Calladito y bien quieto–sonrió y lo soltó... pero el lobo no se movió, aunque sus ojos destilaban temor

Quería gritar, golpear, patalear, morder... sin embargo estaba de pie contra la pared, inmóvil y asustado. El corazón latiéndole a mil... si tan solo Sirius... pero Sirius estaba en la enfermería. ¿James? No, no vendría...

-Eso... me gusta que seas sumiso- rió antes comenzar a besarlo con hambre otra vez y quitarle la túnica con un movimiento de varita. Y ahí estaba, con los pantalones en el suelo, sin camisa, porque no la traía bajo la túnica... tan solo unos holgados bóxer negros lo cubrían y sintió muchas vergüenza y mucho temor- Eres tan lindo... te dije que si no podía tenerte por la buenas... te obligaría- y lo estrechó para lamerle el cuello, y morderlo dejando marcas rojas. La erección del rubio frotándose con fuerza contra su muslo lo avergonzaba...

'Sirius, Sirius... tengo miedo, Sirius... ven, por favor, que alguien venga... Snape... me da igual... oh, por Dios!'- pensaba el lobito asustado

El corazón latía tan rápido y fuerte que se preguntó como era posible que nadie lo oyese además de él... la boca se le secó... la intentó abrir, para gritar, pero permanecía levemente abierta, no lo suficiente para gritar y tampoco lo suficientemente cerrada para impedirle el paso a la lengua hambrienta del aristócrata. Los músculos parecían entumecidos.

Había escuchado que el Imperius era agradable, se hacía lo que se le ordenaba sin problemas... pero era mentira, no alejaba la mente de la realidadél estaba muy conciente de lo que se hacía a su alrededor. Veía como Lucius jadeaba excitado... lo veía con su mirada lasciva y sentía temor...sentía la dureza de su opresor recorriéndolo, y sentía unas enormes ganas de vomitar... la saliva que había dejado en su cuello lo hacía estremecerse, quería quitársela, lavarse... quitarse la piel. Sentía asco de él mismo. ¿Sería porque era una criatura oscura¿Por eso el Imperius no funcionaba igual con él?

Los besos seguían por su pecho... las manos de Lucius le recorrían el trasero con deleite...incluso tuvo la osadía de tocar su entrepierna... acariciarlo... aunque fuese sobre la ropa interior... ‚ Como se atrevía, lo masajeaba como si fuese de su propiedad. Sentía tanto miedo que era casi físico. Y seguía bajando... la lengua recorría su torso... su vientre...no pudo evitar estremecerse cuando introdujo la lengua en su ombligo... las piernas le temblaban...

Lucius se enderezó y pegó sus caderas con las del licántropo. Remus era muy estrecho de caderas, pero un poco más de cintura y eso definitivamente lo enloquecía. No se parecía al cuerpo de una mujer, no... pero era delicioso, embriagante... se frotó contra él con fuerza, buscando más contacto... lo necesitaba, le provocada un placer demasiado adictivo como para pensar en dejarlo. Sin embargo, y pese a las caricias, Remus no parecía excitado en lo más mínimo. Así que se dedicó a masajearlo un poco, a ver si disfrutaba de las caricias como él... pero no reaccionaba... ¿acaso no encontraba placentera sus caricias?

Se sintió frustrado cuando vio que no servía... el único que se excitaba era él. Y deseó hacerle daño por eso... porque sabía que de haber sido Black las cosas hubiesen sido distintas

-Como lo hace Black-sonrió Lucius, tocando ahora sus hombros con placer y repartiendo besos húmedos en su cuello, mordió su carne cálida sin cuidado, dejando unos feos moretones- Eres muy suave... tanto que... ardo por montarte.- el corazón de Lupin parecía que se iba a salir del pecho... y no podía pedir ayuda. Era asfixiante... la desesperación comenzaba a hacer mella en él. Un milagro parecía tan absurdo en ese momento- Te gusta de frente o por detrás- y le lamió la oreja, mientras metía las manos dentro del bóxer y acariciaba sus nalgas.- Cuando te penetre... no vas a pensar en nada más que en mi- y mordía el lóbulo de su oreja mientras con sus dedos buscaba la entrada

Le quitó la ropa interior con relativa facilidad y se deleitó con la desnudez. Tan delicioso... tan harto de placer. Ahora dilatar la entrada era cosa de niños.

-Lámelos- le ordenó mostrándole los dedos- Lámelos como si fuesen los de Black.

Y como consecuencia de la maldición, Remus lo hizo. No pudo evitar soltar un gemido de placer al ver como Remus lamía los dedos. Era terriblemente sensual... la lengua envolviéndolos en saliva... la forma en que cerraba los ojos...en la que se estremecía el cuerpo, aunque fuese de temor. Y deslizó los dedos hasta el trasero del castaño, dispuesto a prepararlo para su propio placer.

Metió un dedo, y pese a la maldición, el licántropo se arqueó de dolor y se le escaparon lágrimas de los ojos dorados. Soltó un grito de dolor, que fue opacado por los labios del ex mortífago.

Quitó el dedo de la entrada, dispuesto a desnudarse él ahora, pero primero quiso ver los ojos dorados que serían suyos en unos momentos... y ese fue su error. Le alzó la cara, tomándolo por la barbilla, y entonces la sonrisa se borró.

Los ojitos dorados, húmedos y vidriosos, con gruesas lágrimas resbalando por sus mejillas rojas de vergüenza... la mirada de temor... la carita de niño asustado... el cuerpecito estremeciéndose...

Se sintió sucio.

Sucio como jamás se había sentido

A pesar de que ansiaba demasiado ese cuerpo, no podría vivir pensando que había mancillado la inocencia del licántropo de esa manera. No es que fuese virgen, lo sabía, pero... había otro tipo de inocencia en el castaño. Tomó entonces conciencia de algo que no creyó poder conocer... se dio cuenta que amaba al chico. Le amaba.

Besó dulcemente, esta vez, los labios rojos de Remus y se alejó de él, lentamente, abrumado por la decisión que iba a tomar, pero... era la única forma.

Le retiró el hechizo.

Remus se lanzó sobre su túnica y se cubrió como podía, mientras sollozaba en silencio. Demasiado asustado, no atinaba a nada más que cubrirse y llorar.

Y entonces Lucius decidió que por primera vez haría las cosas bien. Y comenzaría por Remus y Draco...

Las dos personas que más quería en el mundo.

4.

¿Hijo¿Había dicho... hijo¿Ellos habían... recordado? Aquello era... imposible y a la vez tan...

¿Mamípreguntó Harry entonces, temiendo un rechazo¿Cómo... es decir... han recordado... todo?

-Oh, Mi vida...- Lily corrió hacia él y lo estrechó muy fuerte entre sus brazos, mientras hundía su rostro en el cuello de Harry, que comenzaba a sentirse húmedo por las lágrimas- mi niño... mi amor... Harry...-nunca un abrazo se sintió mejor que ese.

Había recibido abrazos afectuosos en su vida, claro... de Ron, de Mione... de la señora Weasley, de Sirius... el de Ron había sido de amigos, al igual que el de Mione... el de Sirius había sido un abrazo paternal-fraternal, tenía una extraña, pero no por eso menos agradable, mezcla de amistad y protección... Remus jamás lo abrazó... no de esa manera que se considera abrazo... cuando fue el de la señora Weasley creyó comprender lo que era un abrazo maternal... pero a pesar de todo, nada podía compararse a la calidez de ESE abrazo que ahora su MADRE le estaba dando.

-Ma...mama- cuando devolvió el abrazo, se dio cuenta que estaba llorando.

-Harry... mi niño...- le comenzó a llenarle el rostro de besos dulces. En otro momento se hubiese avergonzado, quizás frente a otras personas, quizás si los besos hubiesen sido de otra persona, pero no ahí. Era lo más maravilloso del mundo. Su madre lo miraba con ojos verdes húmedos... su madre era una mujer tan hermosa!

-Harry- vio la silueta de su padre tras su madre y ella lo soltó- Hijo...- que bien sonaba eso, sonrió, secándose las lágrimas con la manga de la camisa. Le avergonzaba que su padre lo viera llorar, pero se sorprendió al ver que era James quien lloraba- Harry, perdóname...- y lo abrazó con miedo, como si se fuese a evaporar de un momento a otro- perdóname, hijo...

-Pero... porque?

-Por fallarte- ese abrazo era distinto a cualquiera que hubiese sentido antes... era parecido al de Sirius, pero a la vez completamente distinto- Por no haber estado para ti...- sintió la mejilla húmeda de su padre contra la propia.- por no haberte protegido... perdóname... no volveré a fallarte. Lo juro.

-Papá... no tienes que pedirme perdón- Harry miraba asombrado a su padre, pero James lo miraba con ojos tristes, pero con una sonrisa

¿Tu crees- sonrió, pero aún tenía lágrimas en los ojos- Mi niño...

Le resultaban tremendamente extrañas esas muestras de afecto, pero con una sonrisa decidió que podía acostumbrarse... siempre que no lo dijeran frente a Malfoy, porque se burlaría de él hasta morir. Ese pensamiento le hizo soltar una carcajada, pero abrazó a su padre, que lo abrazó, sin querer soltarlo.

-Harry...-volteó a ver a Sirius y a Peter, pero se concentró en el primero porque era le que había hablado- yo tampoco volveré a fallarte

No hubo necesidad de más palabras. Había entendimiento en los ojos de los dos. Sirius sonrió, aunque sus ojos parecían tristes.

-Me perdonarás, Harry-preguntó Peter sin atreverse a mirarlo

-...-esta vez Harry demoró un poco más. No olvidaba, pero también tenía presente que aquel Wormtail que tenía delante era un Merodeador, no el traidor que había vendido a sus padres- sí... aunque me cueste. Si ellos te han perdonado, entonces no hay más que hablar.

Todos se quedaron un momento en silencio, como decidiendo que se debía hacer ahora. Nadie lo sabía en realidad, pero ¿qué importaba?

No era un silencio incómodo, era uno lleno de sentimiento y de emoción. No eran necesarias las palabras, las cuales lo más seguro era que entorpecerían y no sabrían expresar lo que realmente sentía cada uno. El silencio, en cambio trasmitía perfectamente. Las miradas bastaban... las sonrisas... los ojos brillantes...

-Moony tiene que saber esto- sonrió Sirius levantándose de la cama con algo de dificultad, luego de un rato- iré a buscarlo.

-A al cama, Sirius Black- dijo Lily con el rostro rojo aún, pero con una sonrisa y con las manos en la cintura- Estás herido. Yo lo buscaré luego... seguramente está en clases...Y hablando de clases...-miró de reojo a Harry y a sus amigos, los cuales no se habían movido

El ambiente se había vuelto hogareño. Nada de lo que sucedía parecía extraño. Era lo normal... era lo lógico. Así era Lily... esa era su forma de comportarse y así era Sirius... todo era tan perfectamente lógico y 'perfecto'... concordaban... calzaban como las piezas de un puzzle.

-Es verdad, Harry- dijo Mione, hablando por fin.

-Al diablo las clases- dijo James mirando a Lily- quiero estar con mi hijo. Dumbledore lo entenderá...- y su mirada se obscureció- y tendrá que darnos algunas explicaciones.

-Sí! Aquí, Harry- Sirius le señaló los pies de su cama.

¡NO! Se sentará con su padre- dijo James mirando a su amigo ‚

-NO! Con su Padrino!

-No, con su padre!

-CON SU PADRINO >o

-CON SU PADRE >o

-El padrino es mejor que el padre!

¿Dónde escuchaste eso‚

-Es de conocimiento popular o

¿Ah, sí? ‚

-Sí. Los padres educan, los padrinos malcrían. Ven conmigo, Harry. o

Harry estalló en carcajadas y se sentó en la cama de su padre que era la más central al grupo

-No, Harry... me cambiaste ;;

-JAJAJAJAAJAJAJAJAJA- risa de Prongs antes de meterse nuevamente en su cama y mirar a Harry que sonreía algo nervioso

-No seas tan melodramático, Padfoot ‚

-Tú cállate, Pete ‚

-Mione, Ron... no se queden ahí- dijo Lily muy contenta

-Ron, Mione... ustedes pueden sentarse conmigo... ya que Harry me desprecia ..

-Ay Padfoot- suspiró Wormtail, mientras Harry se reía

-Harry, dime todo… cuentame todo- James lo miraba con ojitos brillantes

-Eh?... ¿de que?

-DE TODO! O sea... cuando fue la primera vez que tiraste una bomba fétida.. cuantos castigos tienes a la semana... cuantas citas a la semana...cuando fue la última vez que te enviaron al despacho de Dumby por una travesura... TODO!

-Esa actitud me recuerda a Moony con sobredosis de chocolate- rió Wormtail

¿Qué tienes con Moony- gruñó Sirius

-Nada °-°

-XD

-Lily... no te rías

-XD

-Otra que no tiene remedio U.U

-Pues... nunca e tirado una bomba fétida- dijo Harry algo avergonzado- castigos?... Snape siempre me pone castigos... citas, bueno... cero... y la última vez que me enviaron al despacho de Dumbledore por una travesura fue hace mucho

-O.O- cara de James

-O.o- cara de Peter

Ô.Ô –cara de Sirius

-Que- Harry asustado por la cara de su padre y su padrino... e incluso por la de Peter.

-No te preocupes Harry- dijo James tomándolo por los hombros- aún tienes salvación, no Padfoot?

-Sí, sí, sí- asentía frenéticamente con la cabeza- nosotros te salvaremos

¿De que-Mione los miraba extraña, Lily suspiraba aparentando resignación, pero sonreía, mientras Ron se reía con puntada en el estómago

-TE CONVERTIREMOS EN UN MERODEADOR-gritó Sirius

-SÍ-gritaron James y Peter

-Cállense, están enfermos- gritó Madame Pomfrey entrando a la enfermería- Necesitan descanso

-Pero...- James estiraba las mano hacia la enfermera con actitud moribunda ;;

-Nada de peros, señor Potter

-Pero... ;;

-Usted tampoco señor Black... y usted tampoco señor Pettigrew- atajó antes de que Peter se atreviera a seguir

-HIJO! NOS VEREMOS EN POCO TIEMPO-gritaba James mientras la enfermera sacaba al trío de la enfermería

Harry suspiró y sonrió. Mione le tocó el hombre.

¿Feliz?

-Más que feliz- sonrió

-Tus padres son geniales- dijo Ron y los tres se miraron para comenzar a reír.

5.

-De esta forma, un vampiro, necesita morder tres veces a su presa para convertirla en un igual...sin embargo, la manera de extraer la sangre de las víctimas conlleva cierto placer, por lo cual, depredador y presa forman un extraño vínculo...-sonó el timbre de término de clases- Quiero que de tarea me traigan la forma de tratar un mordedura de vampiro y como matarlos... Pueden retirarse.

Toda la clase comenzó a dejar la sala hasta que quedó solo.

Se dejó caer en su escritorio, con algo de temor aún. Estaba agotado y deshecho. Era la peor clase de su vida. Había estado muy torpe... había roto un contenedor de vidrio de la sala sin darse cuenta, había roto su pluma en un descuido, había tartamudeado como nunca en su vida durante una clases y... Dios! Había sido un desastre.

Enterró la cara entre los brazos para ocultar las lágrimas. Tenía tanto miedo y dolor. Se sentía tan sucio, tan utilizado, tan poca cosa. Sentía ascos de solo pensar en el toque excitado de Lucius... se estremeció y lloró con ganas. Tenía miedo, se sentía tan indefenso... Lucius podría haber echo lo que hubiese querido con él... podría haberlo violado y... no pudiese podido hacer nada. Aún sentía como había introducido un dedo en él... como lo había echo lamerle los dedos... y recordaba la mirada lasciva.. y los jadeos que no había podido reprimir al verle desnudo... se sentía asqueado de si mismo. ¿Cómo había provocado ese deseo, demasiado desmesurado, al punto que había llegado a una cuasi-violación?

¿Remus?

Levantó la vista asustado y con torpeza se secó las lágrimas con la manga de la túnica, pero alguien lo detuvo, sujetándole fuerte la mano y Remus quiso gritar al ver los ojos plateados.

-No- lo empujó lejos, asustado- No, déjame-y comenzó a llorar de nuevo, demasiado asustado siquiera para razonar.

-Remus! Soy yo... Draco- el chico rubio se acercó a su profesor, asustado y preocupado¿Qué pasa?

-Draco...- Remus miró al rubio, con ojos húmedos. Pensó en Lucius y se estremeció. No podía decirle lo que su padre había estado a punto de hacer... no quería que Draco se marchara, tenía miedo de quedarse solo, no quería que Draco se riera de él... sabía que no lo haría, pero por otro lado... todo podía suceder luego de eso. Era un hombre lobo... un pobre lobo que habían utilizado como habían querido... hasta a él le daba risa la situación, pero una risa amarga y llena de dolor, porque eso era lo que había provocado el reciente acontecimiento.

-Porque lloras- los ojos plateados estaban llenos de furia y dolor¿quién te hizo daño? Lo mataré!

-No, no... – se secó los ojos, pero estos volvían a llenarse de lágrimas- estoy bien... no pasa nada.

-No me mientas.

-Soy un tonto, eso es lo que pasa- sonrió tímidamente

-No eres un tonto.- Draco le tomó por los brazos¿Qué fue lo que pasó?

-Nada, de verdad- pero volvía llorar, y el rubio entonces lo abrazó, mientras le acariciaba suavemente la espalda y el otro rompía en llanto con renovadas lágrimas- No es nada- hipaba, pero Draco sabía que algo pasaba... y se sentía miserable por no poder menguar la angustia del joven profesor.

¿Te peleaste con tus amigos-intentó Draco, partiendo por lo más obvio¿alguien te pegó¿alguien te hizo daño¿Acaso te humillaron durante la clase? Dime algo, Remus...

-No, no... no pasa nada. Estoy bien... creo que es la luna-mintió, pero se aferró al abrazo de Draco. Necesitaba tanto que lo abrazaran... que le dijeran que lo querían igual. Que era importante a pesar de los pesares.

¿Sabes que puedes confiar en mi, verdad- y enredó las manos en el cabello suave del licántropo

-Sí, sí...

¿Sabes que me muero si te pasa algo, verdad-preguntó Draco con ojos tristes. Sentía que se le rompía el corazón al verlo tan destrozado.

-Draco...

¿Sabes que te quiero- dijo mirando los ojos dorados con todo el amor que le profesaba

-Sí, sí... yo también te quiero...- dijo mirando los ojos plateados, tan iguales a los del hombre que amaba y al mismo tiempo, tan iguales a los de quien había convertido su vida, de la noche a la mañana, en un infierno.

¿Cómo te atreves a...- la voz estaba cargada de odio y ambos voltearon a ver a quien estaba en el umbral de la puerta- Maldito seas, Malfoy. Aléjate de él...

Sirius Black tenía los puños crispados y si las miradas hubiesen matado, ambos hubiesen caído fulminados al segundo. Les costó un momento reaccionar a los dos. Remus no calibraba muy bien lo que pasaba...

-No eres nadie para darme órdenes, Black- Draco desafió al furioso animago con la mirada, pero no soltó al licántropo. De pronto había temido que hubiese sido el mismo Black el que hubiese echo que Remus estuviese así.

-Draco...- Remus se separó del rubio, asustado por lo que podía pasar- Sirius, nosotros...

¿Nosotros- la sonrisa de Sirius fue una mueca dolorosa- No te atrevas a meterte en esto, Moony. Estoy harto de este rubiecito.

-Draco solo... solo estaba...

-Abrazándote, lo sé... muy cariñosos por lo que vi, además- lo calló Sirius, cerrando la puerta tras él.

-Estás equivocado- dijo Remus quitándose las lágrimas y deteniéndose a su lado

¿Cómo crees que me viene a mi eso-Sirius lo miró enfurecido, y deseó golpearlo desde lo más profundo de su corazón, por ser tan ingenuo, tan hermoso... porque hubiese dado el alma por él, pero parecía que después de todo...- Lo primero que veo es que te metes en los brazos de Malfoy. Y luego me pides que no tenga ataques de celos? MIERDA, MOONY! NO SOY TARADO- exclamó dolido.

-Paddy, Paddy... no es lo que crees...-trató de hacerlo entrar en razón, aunque sentía que le mismo la perdía

¿Y QUE QUIERES QUE CREA ENTONCES?

-Draco solo estaba...-Remus bajó la vista mientras los ojos se le volvían a llenar de lágrimas- yo... yo estaba triste y...¿cómo decirle lo que había pasado delante del chico?. No quería hablar de eso... recordarlo era terrible, era asqueroso.

¿Y encontraste que era bueno para que te 'consolara'?

-Idiota-gritó esta vez Draco- Tu no entiendes nada! No te atrevas a decir eso de Remus!

-Que te calles, estúpido! No entiendes nada!

-Entiendo más de lo que crees..- siseo con desprecio- No tienes derecho a hablarle asíÉl no merece ese trato! No tienes derecho! NI SIQUIERA TE LO DA EL QUE SEAN PAREJA!

Los dos se voltearon a verlo, asombrados.

¿Cómo lo sabe¿Se lo dijiste, verdad- miró a Moony con ojos desconfiados, y entonces notó algo en el cuello del licántropo. El cielo cayó echo trizas sobre su cabeza.

-NO ME LO HA DICHO, ES POR TU ACTITUD, IDIOTA- le gritó el Slytherin, sin tomar en cuenta el descubrimiento de Black- Y NO LO MERECES!

¿Y TÚ, SÍ- lo miró con ojos de odio y sacó la varita

-Paddy, no- intentó Remus

-Quítate- lo empujó con violencia y el licántropo de golpeó fuertemente la cabeza con un escritorio

-Remus-Draco había sacado la varita también

-Expelliarmus- Draco soltó la varita involuntariamente y se estrelló contra unos puestos, volcándolos. Entonces Sirius tomó a Remus por la solapa de la túnica e hizo que moviera la cabeza para ver su cuello- Muy bien Moony... no pierdes el tiempo, verdad? Pues entonces- lo miró con ojos llenos de furia- anda a meterte a la cama de este idiota para que te deje más chupones, porque no quiero saber nada más de ti.

-Sirius... Sirius...no, no es lo que crees... yo... no fue Draco...-lloraba el hombre-lobo

-O sea que hay otro? CON CUANTOS TE REVUELCAS? –y lo soltó para salir del lugar dando un portazo.

Remus se quedó echo un ovillo llorando en el suelo, y murmurando cosas sin sentido sobre besos que no quería y que él si lo amaba. Draco en tanto, se paró con dificultad de entre los escritorios y caminó con temor hacia el licántropo... las últimas palabras de Black le habían provocado un terrible presentimiento... y entonces lo vio... el cuello del hombre lobo tenía marcas... mordidas... y eran recientes...

¿Quién... quien... fue el imbecil que trató de abusar de ti-preguntó Draco con odio profundo, haciendo que el licántropo lo mirara. Sus ojos plateados estaban llenos de entendimiento... era la única forma en la que se explicaba la actitud de Remus- porque yo lo mataré por hacerte eso.

6.

El inicio del Club de Duelo fue atrasado unos días. Dumbledore había salido del castillo y James no pudo hablar con él, así que se tuvo que contentar con esperar hasta el día siguiente para poder pedir explicaciones.

La noche llegó más rápido de lo que podría haberse esperado.

-Buenas noches, Moony- sonrió James cuando el licántropo entró a su despacho compartido, pálido y con paso tembloroso¿Sabes que le pasa a Sirius? Está echo una fiera...¿qué pasa, Moony- se paró de un salto al verle¿qué sucede?

-Nada... no pasa nada- los ojos rojos e hinchados, los labios rojos, el rostro pálido y con ojeras y la voz raspada no decían precisamente lo mismo.

¿Qué te pasó- lo agarró de los hombros y el licántropo tembló

-Nada, ya te dije- se liberó del agarre casi que con temor y dejó sus cosas sobre su escritorio con movimientos lentos y torpes. Se le cayeron la mitad de las cosas y murmuró una disculpa mientras las recogía tontamente.

-Se pelearon-preguntó asustado entonces, tratando de ayudarle a recoger las cosas

-...sí...- se le llenaron los ojos de lágrimas nuevamente

¿Qué pasó?

-Nada

-Moony... ¿porque siempre tienes que ser así¿Por qué no puedes decirnos las cosas simplemente-dijo con frustración, y aunque no era la intención del animago, el licántropo se sintió herido.

Remus no dijo nada. Decirles? Decirles que Lucius casi lo había violado luego de ver como había reaccionado Sirius al ver que Draco lo abrazaba? No... temía que le gritara nuevas cosas hirientes... temía que le dijese que se lo merecía, que se lo había buscado... que quizás tendría que haberlo violado para que aprendiera... y no quería escuchar eso. Ansiaba tanto estar en los brazos de Sirius y olvidar, aunque fuese de momentos lo que había pasado...

¿Remus?

-Sí?

-Tengo una gran noticia

¿Sí- trató de sonreír, aunque no tenía muchos deseos de hacerlo

-Harry es nuestro hijo! Lily y mío- y James comenzó a saltar por toda la habitación. Remus sonrió sinceramente.-Supongo que es algo alocado, pero... si lo piensas fríamente... no sé. Es maravilloso.

-Cuanto me alegro que se hayan enterado- malas palabras

¿Enterado- James dejó de saltar de inmediato y lo miró con incredulidad. No era muy difícil adivinar lo que vendría¿Es que tu lo sabías- su rostro alegre, lo miró sombrío

-Eh- Remus se achicó asustado- Pues... sí, pero Dumbledore me prohibió contárselos porque...

¿Dumbledore?… Dumbledore te lo prohibió¡MIERDA, MOONY! PORQUE NO LO DIJISTE ANTES? ES NUESTRO HIJO, TENÍAMOS DERECHO A SABERLO! DERECHO! SABES QUE ES ESO? SOMOS LOS PADRES DEL CHICO!

-Lo sé... es simplemente que...

-TU NO TENÍAS DERECHO! NO TENÍAS DERECHO A TOMARTE ATRIBUCIONES QUE NO TE CORRESPONDÍAN!

-Yo... yo...-aguantaba las lágrimas nuevamente

-Porque siempre eres así-le recriminaba- Siempre tienes que guardarte las cosas. NO son así los amigos, Moony. Es MI hijo... YO DEBÍ HABER DECIDIDO!

-Lo sé, es solo que...

-NO ES TU HIJO- eso dolió... dolió porque lo quería como si lo fuese aunque no lo demostrase -Mierda- y se metió en su habitación dejándolo tembloroso en medio de la sala.

Nunca en su vida se había sentido tan solo. Tan miserable... es que los iba a perder a todo? Porque todos se iban, todos le daban la espalda cuando más lo necesitaba? Tan ...malo, era? Tan sucio que hasta sus amigos lo habían notado?

Temblando entró a su habitación... no quería, porque temía, pero... ¿y si Sirius lo abrazaba y le decía que todo iría bien?

Sirius estaba tendido en la cama, dándole la espalda al lugar donde él se acurrucaba, así que se quitó los zapatos y se sentó en su lugar, pensando que hacer... que decir. Sabía de sobra que Sirius no dormía... conocía demasiado bien ese cuerpo, esa respiración. Era parte de él.

-Me alegra saber que James y Lily son los padres de Harry...- silencio. Se quitó las lágrimas que se negaban a dejar de salir. Pensar que esa mañana lo había tenido todo y ahora... lo había perdido todo, desde Sirius hasta su dignidad- Paddy... yo...

-Te dije que no quiero volver a verte

Jamás pensó que esas palabras dolieran tanto. Asco, sentía asco de él mismo. Deseó la muerte... Sirius lo despreciaba... podía ver que lo habían mancillado, en el fondo lo tenía que saber y lo despreciaba por eso. Sentía náuseas...

-Te... amo-murmuró mientras lágrimas se deslizaban por su rostro

-Y yo te amé. Pero tú...- la voz de Sirius también se quebró- no quiero que sigamos durmiendo juntos. Mañana dormiremos en habitaciones separadas. Quizás fue un error... estar juntos fue un error.

¿Un error- Remus se volteó a mirar la espalda bien formada del animago. ¿Acaso Sirius estaba diciendo que lo más maravilloso que le había pasado en la vida... era un error?

-No estamos hechos para estar juntos! Míranos!... estuve en Azkaban, te dejé solo doce años... solo para morir al poco tiempo, no podíamos estar juntos... no es nuestro destino estar juntos... solo míranos. Y ahora que lo tenemos todo para seguir adelante... tu me engañas...

-Yo no te engaño!

-Y esas marcas? NO SOY IDIOTA!

-Pues te esfuerzas en demostrar lo contrario!... ¿Por qué nunca confías en mi?

-Y gracias a Dios que nunca lo hice! Nunca mereciste confianza- no se atrevía a mirarlo. Si lo hacía lo abrazaría y no lo dejaría ir.- Si no hubiese sido Pete... hubieses sido tú...

Vaya, que bien me conoce que sabe perfectamente como herirme, pensó el hombre-lobo.

-Porque...

-Fue Lucius... sé que fue él quien te hizo esas marcas

-Paddy...- Remus escondió el rostro entre las manos, llorando y temblando- no sabes...¿por qué me haces esto?

-Yo? Tú te metiste con ese rubio oxigenado! Te gustó que te follara- las lágrimas también se le escapaban de los ojos¡DIMELO!

Sirius se sentó al oír que daban un portazo. Remus se había ido. Se odió por ello, pero debía... no podía seguir así. Él amaba a Remus, pero... no podía aguantar eso. Sentía que se le destrozaba el alma, pero... lloró con rabia, porque no podía evitar lo inevitable.

7.

¿Qué pasó-preguntó Lily, desde la cama, con una revista muggle entre las manos, al ver entrar a su esposo muy enojado

-Remus... –gruñó, pero luego la miró con ojos dolidos‚ él lo sabía!

¿Qué-preguntó la mujer sin entender. Era raro que James y Remus estuviesen peleados... nunca se peleaban, James sentía un enorme sentido de protección con Moony, como si fuese un hermano menor...

-Que Harry era nuestro hijo... y no lo dijo-gritó con rabia y dejándose caer sobre la cama

-Mmm...- Lily miró a su esposo, pensativa. Un lado de ella no podía creerlo de su mejor amigo, pero otro analizaba rápidamente. No podía juzgarlo tan a la ligera. Remus no lo hubiese echo.¿y que dijo?

-Dijo que Dumbledore le había prohibido decirlo.-bufó James revolviéndose el cabello.

¿Dumbledore, eh?

-Sí

¿Y que le dijiste- inquirió la mujer, sentándose en la cama

-No sé... no lo recuerdo. –golpeó un almohadón que había cerca, con furia- Me dio mucha rabia.

¿Y Remus¿Dónde estÿ

-No sé... creo que está afuera...-gruñó, revolviéndose el pelo –quizás fue con Sirius. Pero están peleados.

¿Sirius y Remus- la mujer lo miró asombrada

-Sí

¿Entonces porque crees que están juntos?

-No sé... siempre lo están.-se alzó de hombros, al parecer, más tranquilo

Lily se quedó unos momentos pensativa, pero luego se puso de pie y se colocó una bata encima del pijama. James la miró sin entender

-A donde vas?

-A ver a Remus- respondió tranquilamente

-Para que?

-Para preguntarle porque no lo dijo y saber como estÿ

-Estar? De que hablas?

-Está peleado con Sirius y contigo... debe sentirse mal. Sabes que los adora y los días posteriores a la luna llena anda muy sensible.

James miró a su esposa y se preguntó como era posible que siempre lo supiese todo de una u otra manera. Quizás era la intuición femenina... algunas veces Remus parecía tener algo así, aunque él le había explicado que se debía a su parte animal y que era instinto... aún asíél creía que era un tipo de 'intuición femenina', muy particular. Sin embargo, ahí volvía a la pregunta. ¿Por qué su esposa sabía mejor que él lo que le sucedía a sus amigos? Era verdad que Remus era el mejor amigo de su esposa, pero ¡el había convivido con el licántropo por años durante su permanencia en Hogwarts!

Se sintió avergonzado de él mismo. Quizás había actuado impulsivamente y había culpado a Moony de lo que no era culpable, o quizás le había adjudicado más responsabilidad de la que tenía.

-Espera- dijo parándose

¿Qué pasa, James-sonrió la pelirroja

-Iré yo. Le debo una disculpa- suspiró- Es con Dumbledore con quien debo enojarme

-Como digas, cariño- y lo besó en los labios con dulzura- Me alegro que así lo creas

-Me perdonas?

-Porque?

-Por ser tan idiota?

-Yo te amo... ni siquiera tienes que preguntarlo. Es Remus el que tiene que perdonarte

-Vuelvo en un rato.

-Esperaré.

8.

-Acuéstate- dijo Draco mirándolo apenado, ofreciéndole su cama

-No, no... solo... solo...

-Que te acuestes. Comienza a hacer frío.- miró como las lágrimas seguían corriendo por sus mejillas, y los ojos tan amados habían perdido parte de su brillo

-Pero...

-La cama es grande. Yo dormiré aquí y tú... ací señaló el otro extremo.

-Me perdonas?

-Por que?

-Siempre molesto...-hipó- a ti... a Sirius... a James. Siempre molesto. Hago todo mal.

-Acuéstate- le aconsejó el rubio y lo ayudó a meterse a la cama, y luego lo arropó¿Estás bien?

-Sí... no quiero molestar

-No me molestas. Iré a ponerme mi pijama y vuelvo.

-Sí, sí... gracias. No quiero molestar.

Draco se metió a baño donde se dio una ducha rápida, se puso el pijama y algo de perfume (hay que estar rico para el lobito. jejeje © y mientras se lavaba los dientes pensó en quien podría haber intentado hacerle algo así a Remus.

No había querido decir nada entre sollozos y apenas había dejado que lo abrazara. Se prometió cuidarlo, pero él había tenido que ir a clases y Remus a las suyas. McGonagall lo había castigado por no estar atento en clases y había tenido que quedarse en la biblioteca hasta tarde haciendo un maldito ensayo sobre Transformaciones, que al fin y al cabo terminó agradeciendo, porque cuando volvía a su sala Común se encontró con el licántropo echo un ovillo en el suelo, temblando de frío y llorando (como estaba seguro que se había pasado todo el día).

No quiso decir que había pasado, pero lo miraba con ojos suplicantes, así que Draco lo metió a la Sala Común y lo llevó a su habitación, que aparte de él, estaba desocupada. Las camas de Goyle y Crabbe habían sido retiradas y la de Zabini... bueno... estaba bien, pero Zabini parecía haber tenido una incursión nocturna con alguna chica (de esas de las que no volvía ni por la mañana) y había dejado las cortinas corridas, lo que Draco agradeció porque permitió que Remus durmiera en su cama, al creer la otra ocupada.

Le había ofrecido el baño, y el profesor se había quedado una hora adentro, dentro de la ducha, como ido, y había salido con el cuerpo rojo, como si se lo hubiese restregado mucho, hasta hacerse heridas. Draco estaba muy preocupado... y no sabía a quien acudir... si hubiese sido otra persona hubiese ido con Remus... pero era Remus el que necesitaba ayuda... quizás su padre... no, que va... no podía pedirle ayuda a él.

¿Estás mejor- se metió en su cama, sin quitar la vista del bultito que temblaba de vez en cuando a su lado.

-Sí... sí... mejor

¿Quieres hablar- vaya... quien lo hubiese pensado de él?

-No... no me hagas hablarlo... no quiero- dijo escondiendo la cara en la almohada

-Está bien.

Se acercó más él con claras intenciones de abrazarlo, pero...

-No! No me toques... por favor-lo miró con ojos suplicantes

-Bien... pensé que te haría sentir mejor.

-Gracias, Draco... eres genial. Te quiero mucho.

-Yo también- y besó su cabello miel, para darle la espalda y dormir¿Cualquier cosa me despiertas, eh?

-Gracias... gracias... estoy bien.- pero el sollozo lo delató- estoy bien- repitió y Draco decidió que lo mejor sería no insistir.

9.

¿Y Remus- preguntó a Sirius, que no se volteaba a verlo, tendido en la cama, como si no tuviese ganas de hacer nada más en la vida que quedarse ahí para siempre... y sus pensamientos no estaban muy alejados de la realidad

-No sé.-murmuró, como ido

-Vamos... ¿dónde est No se han reconciliado aún- dijo James extrañado- siempre se reconcilian al segundo...

-No esta vez, Prongs

¿Qué hizo? O más bien... ¿qué hiciste- dijo James con una sonrisa, tratando de infundirle ánimo a su mejor amigo.

-Esta vez fue él.

¿Moony¿Nuestro Moony que no rompe un plato- James sonrió, nervioso¿qué pasó, Padfoot?

-Me engañaba

¿MOONY? O.O

-Sí... tenía marcas en el cuello, y no se las hice yo, estoy seguro... y lo encontré con Malfoy abrazándose

¿LUCIUS MALFOY? O.O

-No... con Draco

-Ah- James suspiró aliviado- pero es un chiquillo. Remus puede ser su amor platónico. Todos tenemos nuestro amor platónico...

¡Y LAS MARCAS¿CÓMO CREES QUE ME SIENTO YO? –se volteó, tenía los ojos rojos y los surcos de lágrimas aún húmedos

¡Calma, calma...! calma... bien...¿Y que explicación dio- intentó James a la defensiva

-Estaba muy enojado... no lo dejé hablar- Sirius se dejo caer en la cama otra vez

-Espero que no le hayas dicho algo muy ofensivo. Lily amablemente me recordó que está en sus días S- suspiró antes de desordenarse el cabello, preocupado

¿S- lo miró extrañado

-Sensibles. Pos-luna llena, recuerdas?

-Demonios-se golpeó la cabeza con la mano y se revolvió el pelo, enmarañándolo más

¿Fuiste-hiriente- lo miró con temor a la respuesta

-Más de lo que podrías imaginar- escondió el rostro entre las manos

-Eres un saco de estupidez sin límite, Sirius- lo retó James, obviando su propia conducta. Le avergonzaba pensar en ella... y por eso se descargaba en Sirius, aunque no fuese concientemente

-Lo sé, lo sé... que hago- lo miró suplicante

-Pues encontrarlo primero

-Es que... lo eché de la habitación- hundió nuevamente la cara entre las manos

¿QUÉ? O.O

-Estaba muy enojado y dolido

-Demonios¿y donde estará ahora?

-No sé... ¿y el Mapa?

-No lo tenemos, recuerdas?

-Es cierto.

-Le diré a Lily... ella siempre sabe donde buscar. Y Wormtail también ayudará bastante-hablaba mientras salía de la habitación

-Prongs- lo detuvo Sirius con voz desgastada quizás por mucho llorar

-Dime?

-Gracias... soy un estúpido.

-Sí, lo eres, pero yo también lo soy. Gracias a Dios que tenemos a Moony y a Lily a nuestro lado respectivamente. Y no te preocupes... para eso son los amigos.- y le sonrió alegremente- Ya verás que todo sale bien.

10.

Cuando abrió los ojos, se desconcertó un poco al sentir algo apoyado en su espalda. Así que con algo de temor y algo de curiosidad, se volteó con lentitud para encontrar una mata de cabello color miel, y el resto del cuerpo del licántropo cubierto con las sábanas. Lo estuvo observando un instante antes de decidirse...así, corrió un poco las sábanas con cuidado para observar el rostro del profesor dormir... aunque parecía más tranquilo, tenía un gesto de dolor y parecía haber llorado en sueños.

Alargó la mano con gesto inseguro.

No estaba muy seguro si correspondía, si debía... el licántropo amaba al animago aunque hubiesen terminado... pero, que más daba ya?... era libre y podía hacerlo... aún así algo le removía la conciencia. ¿y si lo alejaba por un estupidez? No quería... quería tenerlo a su lado... ver esa sonrisa que parecía un coro de ángeles... lo necesitaba para vivir en paz. Jamás se había sentido así con alguien...

Acarició con suavidad la mejilla húmeda y tocó con cuidado el cabello sedoso.

¿Por qué el animago había sido tan estúpido? No había visto dolor en los ojos dorados? No había visto lo que era tan obvio?... vaya estúpido había resultado ser Black! Pero... ¿por qué Remus no le dijo¿Había sido porque había estado presente él¿O había algo más?... Que pelea más estúpida! Pero a él le servía... Él consolaría al mago pálido.

Con sumo cuidado se inclinó sobre el licántropo y lo besó en los labios con delicadeza. Quería hacer las cosas bien con él...

Los labios del licántropo eran suaves, cremosos, algo fríos, pero agradables... y sabían a gloria. Fue un beso torpe, pero fue su primer beso... y nunca se arrepentiría de que hubiese sido con ese hombre.

Cuando se separó, se sonrojó intensamente...

¿Por qué... hiciste eso, Draco?

Los ojos dorados estaban abiertos y mirándolo asombrados.

CONTINUARÁ...

HOLA! mucho tiempo no? .. lo siento mucho, de verdad, pero entre la falta de inspiración y que el computador andaba mal, pues no podía escribir. ¿Que más decir? Bueno, que ando algo deprimida así que tenganme paciencia y perdonen el capítulo algo depresivo. (pobre Moony ;; ¿como soy capaz de tratarlo así?). Como siempre espero sus comentarios. Ojalá que sean positivos y contructivos. jejejeje

LorenaPotterB: OLA! Me alegro mucho por tu review! Lo de la relación Remus y Sirius... pues, lo siento mucho, pero esa pareja me encanta. jijijiji. Puede que tengas razón de todos modos (Tomoe pensativa) Veré si en otro fic sigo tu consejo. Gracias de todos modos por él. Muchas gracias pro tu comentario. Cuidate.

Paula Yemeroly: OLA WAPÍSIMA! Estoy muy, muy feliz por tu review. Me alegro mucho que hayas acogido bien mi contestación . No tienes msn? Lo digo porque me dijiste que te escribiera cuando quiera y no que te agregara, entonces me quedé con la duda. Bueno... Remus es algo ingenuo, pero en este capitulo ya queda claro para Remus. jejeje. Y tengo pensado algo para esos dos... aunque ahí está por verse. ¿Verdad que sonó egoísta Harry? XD Pero si lo pensamos bien, Harry siempre ha puesto muy alto a Sirius y a James, no así a Remus y creo que tomando la personalidad del Harry de los libros de Rowling, no es tan alocado. XD. Sevy? a mi también me da pena y Pete se gana mi cariño de a poquito, pero nada es definitivo aún. Pues... la escena en la que James ve lo que no debe... XDDD no pude resistirlo, la imaginé y no podía sacarme la de la cabaza... además, dada la personalidad de James, por fastidiar... cualquier cosa. XD (que lindo es el bambito) Sirius libre y lleno de energía quiere recuperar el tiempo, pero la situación no se lo permite. Bueno, nuevamente gracias por tu review. Nos estamso conociendo más, eh? XDD Eres un chica muy simpática. Ojalá que si tengas msn para uqe hablemso más fluído. XDD. Besos y muchos cariños.

ArashiK: OLA NIÑA! bueno, nosotras ya nos conocemos, eh? XDD A mi también me hubiese encantado que Sirius hubiese sido declarado absuelto en los libros ... ¿Confías en mi para que Remus no sufra mucho? Ups... no confies tanto, tan solo mira este capítulo ;;. Me encanta la relación que tiene Draco con Remus !. XD bueno, un besote grande, que estés bien.

LadyDi: Ola! NO me retes tanto, chiquilla. XDD si, ya era hora que supieran, peor no podía ser tan, tan, tan, rápido, o sí? jejeje. Draco realmente quiere al lobito. ¿Lucius? Pues... Lucius quiere a Remus, ahora lo verás, pero su caracter es así... y descubirremos una faceta nueva del rubio. Espero que agrade. XD SIENTO MUCHO LA TARDANZA! ;;. Muchos cariños. Bye

Diabolik: Ola! sip, ya se han enterado. Al fin. ¿Porque todos me dicen lo mismo? XDD Muchas gracias por tu review

NeLi BlAcK: Ola niña! Muchas gracias, de verdad. Ojalá que con este fic te guste más la pareja Remus/Sirius. XD Muchos besos. Cuidate.

Su: Ola! XDDD buuuuuuuuu... yo querer ese review enorme! XDD pero pudes manndármelo ahora no? XDD no, si es mucho pedir, me conformo con uno chiquitito. Muchas graicas, eh? Muchos besos.

Ivita Black: Ola! Muchas gracias!Espero seguir recibiendo tus reviews. . Besos.

Florchi: SIS LINDA! XDD ¿Quieres autógrafo? O.O Loka! para que quieres un autógrafo mío? XD. ¿Draco? Puede ser muy lindo, no? Me encanta la ree con Remus (I love Moony Tomoe babea) Oye, niña! como que los niños lo vieron besándose con Sirius? No! lee bien, ellos llegaron despues, cuando ellor llegaron, Remus hablaba con Dumby. jejeje Remus no toma clases de Oclumancia todavía... porque se le ha pasado por alto a Dumby. La muerte de los Potter es de conocimiento general que fue por un Avada Kedabra, peor el de Moony, no. Peter volvió enterito y bueno. XDD o sea, con su manito de carne y hueso, jejeje.A Mione... aún no sé si le guste Harry, yo creo que sí, pero no sé. Depende de ella no? XDDD ¿QUE ME VAS HA HACER UN CLUB DE FANS? O.O... .-. sis? no estarás mal de la cabeza? XD. Bueno, muy largo, así que tengo que terminar. UN BESOTE ENORME. TKMKM. Bye. Hablamos por msn. XDDD

Y terminado las constestaciones, todos felices. XDD

Muchas gracias por leer mi fic. Espero que les siga gustando.