Mis Prometidas

Capitulo 3: ¿Empezar una nueva vida de cero?

Ya había amanecido, los primeros rayos de sol empezaban a iluminar, la ciudad de Nerima, un chico, con expresión triste y abatida caminaba por ella, en su rostro llevaba una cinta de pelo de color amarilla, este estaba algo desorientado, buscando la salida de la ciudad, cada segundo que pasaba allí, le atormentaba el dolor, de sus recuerdos… Se sentía triste, y algo abatido…

"Ahora, después de todo esto… me siento mas liberado, Akane ya sabe toda la verdad, ahora debo empezar una nueva vida, lejos de aquí, y sanar mis viejas heridas.."

Se dijo finalmente el chico así mismo… Mientras seguía su propio camino…

Mientras en el Ucchan, los primeros rayos de sol, iluminaban levemente el cuarto, la chica que dormía en una silla, se dio cuenta, de que había hecho, lo que ella no deseaba… Y era dormirse… Sin percatarse de que tenía una manta encima, arropándola, para evitar que cogiera frió, se levanto asustada y miro a la cama, que tenia a su lado… Estaba vacía, pero estaba hecha… Ryoa había desaparecido, entonces ella se asusto, casi le salio una lagrima… Pero de repente vio una nota, encima de la cama…

"Lo siento Ukyo, perdóname… Pero necesito reflexionar durante un tiempo, te prometo y te juro: "Que no haré ninguna estupidez." Y que volveremos a vernos, cuídate amiga mía… Y dile a Akane de mi parte, que siento todo lo que ha pasado, y que le deseo lo mejor. Atte: Ryoga Hibiki."

Ukyo cerró de nuevo el papel, y lo guardo en uno de sus bolsillos… Con un ultimo pensamiento… Mientras le caía una pequeña lagrima…

"Ryoga, por favor, vuelve algún día."

Dos semanas mas tarde…

Ryoga caminaba, por las verdes praderas, de un lugar desconocido para el, pero no le importaba, ahora que ya no tenia objetivos importantes, así que ahora disfrutaba en sus viajes, recorriendo ciudades, y caminos, contemplando hermosos paisajes… Intentaba adaptarse, mientras el lo veía como un entrenamiento, para fortalecerle física y mentalmente…

"Voy a descansar un poco, además estoy en una pradera."

Y se sentó debajo de un árbol, entonces se percato de un grito de auxilio…

"SOCORRO… AYUDENME ALGUIEN."

Era la voz de un niño, Ryoga se percato de que un niño corría, y vio sorprendido como un enorme jabalí, lo perseguía encolerizado, por desgracia el niño tropezó, y debido a eso, este cayo al suelo, quedando aun a mas merced, Ryoga se dio cuenta de que si no intervenía, el jabalí mataría al niño, y sin pensarlo… Ryoga dio un salto y se interpuso entre el jabalí y el niño…

"Métete con alguien de tu tamaño."

Dijo Ryoga, mientras con un dedo, mandaba volar al jabalí, muy lejos… Ryoga se giro, para ver si el niño estaba bien… y vio que estaba en el suelo, arrodillado, temblando de pánico… Ryoga sonrió…

"Ya, ya esta, ¿estas bien?."

El niño le abrazo asustado…

"Gracias, por salvarme."

Entonces Ryoga, se dio cuenta que el niño, estaba hambriento, por que su estomago hizo un ruido extraño... Ryoga sonrió…

"¿Quieres comer algo?."

"SIII."

Minutos mas tarde…

Ryoga y el pequeño niño comían, debajo de un árbol…

"¿Y como te llamas?."

"Me llamo Shingo… ¿Y tu?"

"Ryoga."

"Ryoga, eres muy fuerte, has derrotado al jabalí con un dedo y de un golpe."

"Gracias, pero no fue para tanto, a propósito…"

"¿Qué hacías tu solo por estos lugares, son peligrosos, para que un niño vaya solo."

"Yo no tuve mas remedio que pasar por aquí, siempre he estado solo."

"¿Y tus padres?."

Shingo al oír esa pregunta, su rostro cambio, y pareció entristecerse bastante, Ryoga lo noto… Pero el niño respondió…

"Yo no tengo padres."

"Vaya, lo siento, Shingo… No quería, no pretendía, no sabia."

"Solo que les hecho de menos."

Dijo el niño, mientras intentaba disimular su tristeza, pero no pudo y comenzó a llorar… Ryoga lo abrazo por instinto, Ryoga recordó, que el tampoco había tenido padres, que desde muy pequeño había estado solo."

"No te preocupes, Shingo… Seguro que ellos, estén donde estén, estarán orgullosos de ti."

"Les hecho mucho de menos, antes las cosas iban muy bien, papa me enseñaba muchas cosas, y mama, era como un ángel, siempre me cantaba canciones, pero cuando se fueron, todo cambio… Me encerraron en el internado, y allí las monjas, empezaron a maltratarme, no quería que saliéramos nunca al patio, casi no nos daban de comer, intente muchas veces escapar, y ahora que lo he logrado, no pienso volver… NO QUIERO VOLVER NUNCA MAS."

Ryoga observo el brazo del chico, y vio un moraton, entonces lo comprendió, el chico no le mentía, lo había pasado muy mal, le habían tratado mal, y Ryoga sintió mucha lastima, incluso sintió un escalofrió, pero miro al chico a los ojos, y con una pequeña lagrima que le caía por el rostro…

"No te preocupes, yo te prometo, que no te haré ningún daño."

"¿Sabes, Shingo… Yo también echo de menos a mis padres, ellos me querían, pero yo no pude estar con ellos, y por circunstancias me separaron de ellos, pero viví mi vida, y ahora soy un hombre libre."

"Yo quiero vivir libre, y ver todo el mundo, quiero conocerlo, hacerme muy fuerte, tan fuerte como tu."

Ryoga cerró los ojos… Y se puso a pensar en esas últimas palabras…

"Vivir libre… hacerme tan fuerte como tu."

Ryoga dudo un poco, pero al ver el rostro del niño, no pudo soportarlo… Le lleno de rabia, la idea, de que lo maltrataran, y pensó…

"(¿Cómo se atreve alguien a maltratar a un niño huérfano?)… Definitivamente el mundo es un lugar horrible, pero no te preocupes Shingo, juro que yo te daré la felicidad, que te negaron, y la que se me negó a mí, conocerás el mundo, y serás libre... Te lo prometo."

"¿Ryoga?."

"Shingo… ¿Quieres ser un hombre libre?."

"Siiii, es lo que mas deseo… Quiero aprender a ser fuerte, a defenderme solo, para vivir libre, y ayudar a todas las personas buenas del mundo, Mi papa me enseño eso."

"Tu papa debió ser una buena persona, ellos, ¿te querían?"

"Si, siempre fui feliz con ellos."

"¿Te gustaría acompañarme en mi viaje?."

"CLARO… ¿¿¿¿ME VAS A DEJAR IR CONTIGO?"

Ryoga sonrió amistosamente…

"Desde hoy, te nombro mi hermanito, hoy serás el hermanito pequeño, que nunca tuve, y siempre quise tener. Te prometo, que conmigo lo pasaremos bien, seremos libres… No te faltara de nada, y algún día, tu serás igual de fuerte que yo."

"¿EN SERIO?"

Grito el chico emocionado por la alegría, Ryoga afirmo, y el chico lo abrazo…

"Gracias hermano, Ryoga."

"Llámame Ryoga, o hermano, o como quieras, pero no me llames las dos cosas, ¿ok?."

El chico asintió con la cabeza…

"¿Pero como me llamare yo?"

"Bueno, desde hoy te llamaras Shingo Hibiki. ¿Te parece bien:"

"¿Y que pasara con las monjas, ellas me buscaran, y no pararan hasta encontrarme."

Dijo el chiquillo algo preocupado, Ryoga le sonrió…

"No les permitiré que te lleven a un lugar donde no quieras ir, y encima donde no te traten bien… Además ahora somos hermanos, a partir de hoy, siempre estaremos juntos."

"Gracias."

"Bueno, Shingo… ¿¿¿Nos vamos?."

"SIIII."

Ryoga le cogio a caballito, colgándolo en sus hombros, a Shingo, y empezaron a caminar…

"Dos cositas, ¿Cuántos años tienes, y otra preguntita… ¿Conoces las direcciones?... ¿Sabes como orientarte?"

"Pues tengo 10 años, y si, tengo buena memoria… Aprendí a diferenciar donde estaba el sur, el norte, el oeste y el este, para poder escaparme del internado."

Ryoga sonrió feliz…

"Entonces, ¿me ayudaras a orientarme?.. Que yo tengo 18 años, pero nunca supe orientarme muy bien… ¿Me enseñaras?."

"Claro, hermano."

"Bien, pues comencemos nuestra nueva aventura, los hermanos Hibiki entran en acción."

Dijo Ryoga firmemente, mientras empezó a correr animadamente, con Shingo y ambos gritaban y reían felices…

Dos días después…

En Nerima…

Todo estaba muy tranquilo, desde la marcha de Ryoga… Las cosas habían cambiado bastante, Kodachi dejo de molestar a Ranma… Y Shampoo se fue a china con su bisabuela, diciendo que volverían pronto… Que por parte de todos, les daba un poco igual…

Mousse, se instalo en el Ucchan, por un tiempo, y a cambio trabajaba allí, Akane también se había ofrecido a trabajar allí, con ella, aunque sin obtener beneficios, pero tampoco le importaba mucho… Atendían a los clientes, preparaban sus Okonomiyakis, Akane siempre los entregaba, Ukyo le prohibía el paso a la cocina, pero a poco, le enseñaba como preparar un Okonomiyaki, se divertían juntos, mientras trabajaban, Ukyo y Akane se habían hecho mas amigos que nunca… Akane iba todos los días, con la esperanza, de que Ryoga regresara a Nerima… Mientras que Ranma, se fue de entrenamiento con su padre, durante unos días…

FLASHBACK.

Al día siguiente de que ella abofeteara a Ryoga, ella corría dirección al Ucchan, no había dormido en toda la noche, y se dio cuenta, de que fue muy injusta con Ryoga, e iba a disculparse, y estaba decidida, le ofrecería una oportunidad…

Cuando llego, vio a Ukyo, la chica de los Okonomiyakis, parecía triste… Akane le pregunto por Ryoga, pero Ukyo le tiro la nota…

Akane al leerla, se entristeció…

"¿Y Ahora que harás?."

Le pregunto la chica de los Okonomiyakis…

"Trate muy mal, al pobre Ryoga… Fui una estupida, solo espero poder disculparme con el, ya le hecho demasiado daño, y no es justo."

"Al menos, te has dado cuenta, ¿Sabes, Akane… eres una mujer muy afortunada."

Akane sintió una sensación extraña al oír esas palabras…

"¿Crees que soy afortunada?."

"Todos, te desean… Todos los chicos, están locos por ti, Ranma, Ryoga… Kuno… Los compañeros de clase."

"¿Y crees que eso es bueno?."

"No lo se, pero creo que eres muy querida, y yo… me siento tan sola."

Ukyo empezó a llorar, Akane se sintió avergonzada, y la abrazo…

"Lo siento, Ukyo… Nunca he sabido pensar, en los sentimientos de los demás, solo en los míos… Y creo que por eso, he hecho mucho daño a algunas personas."

"¿Te refieres a Ryoga?"

"No, me refiero a Ranma… me refiero a ti, a Shampoo… A todos en general."

"Akane, es tu personalidad, tu no eres mala por ello."

"Pero Ukyo, yo no deseo que la gente sufra, yo le deseo lo mejor a todo el mundo."

"Me consideraba infeliz, por no tener el amor de Ranma, y de golpe y sopetón descubro, que Ryoga esta enamorado de mi, que Ranma también esta enamorado de mi, y yo soy incapaz de verlo con mis propios ojos."

"Pues Ranma, solo tiene ojos para ti… Al igual que Ryoga."

"¿Ukyo?."

"Tu amas a Ranma, pero ¿y Ryoga?... ¿También lo amas, es indudable que sientes algo por el."

Ukyo se puso muy colorada…

"¿Ryoga?."

"No se, jamás lo había pensado… El se ha portado muy bien conmigo, el me rescato en Togenkyo, me cuido el otro día, cuando me quede inconsciente, siempre se preocupaba por mi, aunque en su mente siempre estuvieras tu, en cierto modo me gusta algo de el."

"Es muy lindo, por su parte…Ojala Ranma fuera, así al mitad del tiempo."

"Ranma se ha portado bien conmigo, pero no es tan galán como Ryoga, no sabe como tratar bien a las mujeres, pero en el fondo es una buena persona…"

"¿Y por que amas a Ranma, Ukyo… ¿Es por la promesa esa de la infancia?"

"No lo se, sinceramente… Ranma siempre estuvo ahí."

"Entiendo… Pero creo, que tu has aceptado, que el no te quiere."

"Si, aunque me duela, yo lo acepte."

"Ukyo, yo lo siento, para mi eres una amiga, y aunque amemos al mismo chico, no quiero que nos odiemos por ello."

"Claro que no Akane, yo seré feliz… Con la decisión que tome Ranma, mientras siga teniendo su amistad, y la tuya… Y la de Ryoga… Realmente vosotros sois mis únicos amigos, por decirlo de un modo, también mis únicos familiares."

"Y vosotros los míos."

Dijo la chica de cabellos cortos…

"Ah, en el fondo, las dos, somos un par de estupidas, quizás estemos enamoradas del hombre equivocado."

Dijo Ukyo…

"Ukyo, ¿Tu intentarías algo con Ryoga?."

"…"

"¿Lo intentarías?."

"¿Y tu?."

"La pregunta, te la hecho yo a ti, contéstame por favor."

"No lo se, posiblemente si… Si al menos, el me permitiera darle una mínima oportunidad… Ryoga es una persona, que no tiene que envidiar a Ranma… Esa rivalidad por ser el mejor, es tan estupida, Ryoga es atractivo a su manera, y Ranma lo es a la suya..."

"Yo creo que también, ahora que me he quitado la venda de mis ojos, cuando vuelva Ryoga… Dejaremos que el destino elija."

"Ju, entonces volvemos a ser rivales, ¿no?."

"Si, pero… esta vez, ambas iremos a por el hombre correcto, y al final, si Ryoga vuelve, y nos concede una oportunidad a una de las dos, ambas nos alegraremos por la otra."

"Gracias, amiga… Necesitaba oír esas palabras, estos días, Ryoga me hizo ver que no estaba tan sola, como creía, y tu me has demostrado, que te juzgue mal."

"¿Amigas?."

"Amigas."

Ambas se abrazaron, en señal de amistad…

"¿Te apetecería pasar un tiempo aquí, trabajando?."

"Claro, ¿me enseñaras a cocinar?."

"Podría intentarlo."

"La única pega, es que no podría darte beneficios."

"No importa."

"Entonces, bienvenida al Ucchan, creo que juntas, haremos una buena alianza, contra Shampoo o Kodachi, ellas pueden que intenten obligar a Ranma, y Ryoga a algo que no quieren… Y NO PODEMOS PERMITIRSELO."

"Les protegeremos:"

Dijeron ambas chicas, mientras chocaban sus manos…

Fin del FLASHBACK.

Akane, Ukyo y Mousse, atendían a los clientes, que allí comían, esa mañana, por suerte, había pocos, y podían ir relajadas… Cuando de repente, el pequeño televisor que tenían puesto, para que sus clientes, se entretuvieran… Emitía una noticia, que todo el mundo, se quedo observando…

"En directo en Okinawa… Nos encontramos en el Orfanato local, y a ocurrido un triste y desagradable suceso, un niño de 10 años ha desaparecido, sus tutores alegan que el niño pudo fugarse, pero que era poco probable, puesto que el orfanato, tiene fuertes medidas de seguridad, y un niño de esa edad, no podría hacerlo…"

En la pantalla, aparecía el entrevistador, entrevistando a una monja, esta lloraba, mientras decía…

"Su nombre es Shingo, y su cabello es castaño oscuro, sus ojos marrones, aquí les dejo una foto… Por favor, encuéntrenlo, es un chico muy querido, por todos nosotros, y si alguien lo ve, estamos dispuestos a recompensarle económicamente."

"Ya lo han oído, señores espectadores, si alguien ve al pequeño Shingo, puede comunicar la siguiente información a la Policía de su ciudad, o al siguiente numero…"

Dijo el presentador, mientras Ukyo apagaba el televisor…

"Creo que ya he visto demasiadas penas, por hoy."

Poco después, ya era mas de mediodía, los pocos clientes, se marcharon, después de su saludable comida… Los tres chicos se quedaron solos en el Ucchan…

"Esto esta muy vació últimamente."

Dijo Ukyo…

"Y muy aburrido."

Dijo Akane…

"Ay, cuanto echo de menos a Shampoo."

Suspiro el chico pato, mientras, Akane y Ukyo lo miraron incomodas, pero fue Ukyo quien le respondió al chico…

"Mousse, dime, realmente ¿te merece la pena amar tanto a Shampoo?"

"¿Ukyo, ¿Por qué me preguntas eso, pues claro que me merece la pena."

"Pero es que no ves, que ella no te quiere, que solo es una aprovechada, que va detrás de lo que se le antoja."

Mousse pareció entristecerse, Akane intento detener la conversación, pero Ukyo siguió hablando…

"Mira, Mousse, me caes muy bien, y eres un buen tipo, pero no me gusta ver, como te arruinas la vida, por esa chica."

Akane, le puso una mano en el hombro del chico…

"Mousse, siempre he admirado, tu paciencia con Shampoo, aunque yo siempre ame a Ranma, pero jamás tendría tanta paciencia por mucho que lo amara, Ranma me insultaba, pero no lo hacia aposta, pero Shampoo te despreciaba, siempre te ha tratado mal, y tu has estado siempre ahí, con ella."

"¿Por eso ahora, queréis a Ryoga?."

"Habéis cambiado al gran Saotome, por el gran Hibki."

Ambas mujeres, se pusieron coloradas… Pero Akane fue la primera en responder…

"Moouse, ¿tu que opinas respecto a eso, eres amigo nuestro, y queremos saberlo."

"Bueno, sinceramente… Pienso que es más correcto, que améis a Ryoga, antes que a Ranma… Ranma nunca a sabido tratar a las mujeres, en cambio Ryoga, si siempre fue un galán, un tipo noble, a pesar de lo de P-Chan, pero creo que yo hubiera hecho lo mismo con Shampoo, si hubiera podido ser el caso."

Ukyo sonrió, recordando lo que le dijo a Ryoga…

"(YO MISMA LO HUBIERA HECHO CON RANMA… Si hubiese caído en Jusenkyo.)"

Akane miro confundida a Ukyo, no entendía muy bien, que significaba esa sonrisa…

"¿Sabéis que?."

Pregunto Akane, mientras miraba a Ukyo y Mousse…

"Creo, que deberíamos tomarnos, una vacaciones."

Dijo Akane…

"Es una buena idea, ahora que el Ucchan, esta de temporada baja, podemos aprovechar."

"¿Eso es una excusa barata, para ir a buscar a Ryoga?."

Pregunto Mousse… Akane se puso colorada, mientras sonreía nerviosamente… Ukyo le puso la mano en el hombro…

"Si, ¿Por qué no?."

"Ryoga es nuestro amigo, cuando le encontremos, le demostraremos, que somos sus amigas, y solo el destino decidirá, mañana mismo partiremos en su busca, preparare mi puesto de Okonomiyakis… ¿Y tu Mousse, ¿querrás venir con nosotras?."

"No, me gustaría ir a ver a mi familia, hace mucho que no les veo, y así pensare, en que debo hacer, respecto a Shampoo."

"Animo, Mousse, espero que nos volvamos a ver, dentro de unos meses."

"Si."

"Animo chicas, y tened en cuenta, los sentimientos de Ryoga, el a diferencia mía o de Ranma, es muy inocente, y tiende a deprimirse con facilidad."

"Cierto, no te preocupes, Mousse."

Dijo Akane, Ukyo asintió… Mousse finalmente se despidió de las dos mujeres, y se fue del Ucchan…

A la mañana siguiente…

Akane y Ukyo partieron en busca de su amigo, y ahora amado chico perdido, cuyo nombre, siempre flotaría en sus pensamientos… Ryoga Hibiki…

CONTINUARA…