Hola, volvi despues de una largas esperas de inspiracion... pero bueno... este capi es un poquito mascorto que los demas pero aun creo que les va a gustar asi que ahora... a leer...
Capítulo 5: La búsqueda
Al llegar a la entrada vieron subir a Hermione subir las escaleras como un rayo mientras Ginny baja a ver que había sido todo ese ruido y veía pasar a una desconsolada Hermione escaleras arriba.
- ¿Dónde es el incendio? –Dijo Ginny al ver la velocidad con que Hermione desaparecía.
- Hermione –dijo Harry entrando unos segundos después bastante agitado, como si hubiera corrido una carrera.
- ¿Qué sucedió Harry? –Pregunto Sirius mirando a su ahijado.
- No nos fue muy bien con los padres de Hermione –dijo el chicos cerrando la puerta tras él.
- Yo voy a hablar con ella –dijo Annia mientras corría escaleras arriba tras su sobrina.
Hermione entro corriendo a su habitación y se echo sobre la cama a llorar desconsoladamente.
- Hermione... –dijo Annia entrando despacio al lugar.
- Me dijeron que no... no me van a ayudar... jamás los voy a encontrar –dijo Hermione mientras lloraba desconsoladamente.
- Mi niña, eso no es cierto –dijo Annia sentándose en la cama para acaricien su cabello –Nosotros estamos contigo y te vamos a ayudar a encontrarlos.
- Ustedes ya tienen suficiente con su hija para ocuparse de esta abandonada.
- Hermione, ya basta –dijo Annia haciendo que Hermione se sentara en la cama –Para nosotros no eres ninguna abandonada ¿Esta clero?
Hermione la miraba a los ojos mientras de los de ella seguían brotando lágrimas.
- Te vamos a ayudar a encontrar a tus padres cueste lo que cueste –dijo Annia tomando el rostro de Hermione entre sus manos.
- Gracias –dijo Hermione dándole un gran abrazo.
- Creo que ya estas mejor –dijo Sirius parado en la puerta junto a Harry quienes las miraban con una sonrisa en el rostro.
- Lo lamento –dijo Hermione apenada.
- No te preocupes. Todos tenemos momentos malos –dijo Sirius sentándose al otro lado de la cama.
- Lo importante es que puedas superarlos –dijo Harry mirándola apoyando al final de la cama.
Hermione se limito a mirarlo a los ojos y con ese gesto Harry supo que le estaba dando las gracias.
- Bueno... aprovechando que están los dos aquí, tenemos que darles una noticia importante –dijo Sirius llamando a Harry para que se les uniera.
- ¿Qué sucede? –Pregunto Harry.
- Pues... –dijo Sirius mirando a Annia para que ella diera la noticia.
- Sirius y yo vamos a casarnos –dijo Annia con una sonrisa de felicidad.
- Felicidades –dijo Hermione antes de saltar a los brazos de Sirius y Harry de Annia.
- Que buena noticia –dijo Harry a Annia mientras la abrazaba.
- Muchísimas felicidades –dijo Hermione haciendo que Sirius cayera de espaldas a la cama con Hermione en el cuello.
- Que felicidad –dijo Annia cuando Hermione se soltó del cuello de Sirius y fue a abrazarla a ella, del mismo modo en que Harry abrazo a Sirius con bastante emoción.
- Te deseo lo mejor del mundo Sirius –dijo Harry abrazando a Sirius con fuerza.
- Gracias Harry... no sabes lo que significa para mi que me des tu apoyo –dijo Sirius.
- Como no voy a apoyarte si eres como mi padre y quiero lo mejor para ti –dijo Harry haciendo que a Sirius se le llenaran los ojos de lágrimas.
- Mi Annia –dijo Hermione aferrando con fuerza a Annia a ella mientras unas lágrimas brotaban de sus ojos.
- Mi niña, no sabes lo feliz que me hace que estés conmigo en este momento –dijo Annia separándose de ella para verla a la cara.
- Juramos que estaríamos juntos en los momentos más importantes para nosotras –dijo Hermione besando la frente de Annia –y yo pienso cumplir esa promesa.
- Gracia mi niña –dijo Annia.
- Pero aun nos queda algo –dijo Annia.
- ¿Qué cosa? –Pregunto Harry.
- Dumbledor nos propuso junto a Remus que tomáramos algunos puestos en Hogwarts –dijo Sirius.
- Eso es genial... así pasaremos mas tiempo juntos –dijo Hermione.
- ¿A ustedes les gustaría que nosotros fuéramos para allá? –Pregunto Sirius.
- Claro que sí –dijeron los dos al unísono.
- Pues asunto arreglado –dijo Annia mirando a Sirius –Cuando venga Dumbledor le diremos la decisión.
- Genial –dijo Hermione bastante contenta por las noticias.
- Oye lo había olvidado. Ron mandó una lechuza pidiendo que lo fueran a ver y que fueran desconsiderados –dijo Annia.
- Bien. Pues tendremos que ir a verlo o nos odiara –dijo Hermione levantándose seguido de Harry -¿Ustedes vienen con nosotros?
- No. Tenemos cosas que hacer –dijo Sirius mirando a Annia.
- Ah –dijo Hermione mirando pícaramente a los dos.
- Bueno, bueno... Basta de miraditas y váyanse de una buena vez –dijo Annia antes de darle tiempo a Hermione que hiciera un comentario.
- PÓRTENSE BIEN –grito Hermione mientras bajaba las escaleras.
- Esta niña no cambia –dijo Annia mirando a Sirius.
- ¿Nos vamos? –Pregunto Sirius.
- Claro –dijo Annia acercándose a él.
- Nos aparecemos en el callejón contiguo al restaurante –dijo Sirius acomodándose la túnica.
- Ok –dijo Annia desapareciendo al mismo tiempo que Sirius con un fuerte "crac"
Aparecieron en un callejón deshabitado y de encaminaron hasta un restaurante que estaba a su lado. Entraron tranquilamente y se fueron a la parte de atrás donde los esperaba un hombre cubierto por la oscuridad impidiéndoles a los demás ocupantes del lugar identificarlo.
- Buenos días señor Black –dijo el hombre levantándose de la silla para saludar a Sirius y después besar la mano de Annia.
- Buenos días señorita... –dijo el hombre esperando dijera su nombre.
- Annia Truddo –dijo Annia con una sonrisa un poco fingida.
- Sentémonos por favor –dijo en hombre tomando su lugar al igual que Sirius y Annia.
- Señor Holkins le pedí esta reunión porque necesito de sus servicios como investigador –dijo Sirius mirando los ojos negros del hombre, que brillaban como los de los gatos.
- Usted me dirá –dijo Holkins con respeto.
- lo que vamos a revelarle es de completa confidencialidad por lo que me gustaría que no se comentara a nadie –dijo Sirius.
- Eso téngalo por seguro señor Black –dijo tomando atención a las palabras de Sirius.
- Necesito encontrar a los padres de mi sobrina –dijo Sirius cosa que sorprendió a Annia ya que no esperaba esa presentación de Hermione –y además necesito encontrar a mí... mi hija.
El hombre prestaba total atención a las palabras dichas por Sirius pero en especial a la parte en que habla de su hija.
- Dígame señor Black. Con respecto a los padres de su sobrina ¿Tiene alguna información acerca de la procedencia de ella? –Pregunto Holkins sacando una libreta y una pluma para anotar.
- Pues... la verdad –dijo Sirius mirando a Annia.
- La trajeron cuando regresaron de su luna de miel pero no se nada más –dijo Annia –Sus padres no nos quisieron dar ningún tipo de información.
- ¿Sus padres son magos o muggles? –Pregunto el hombre.
- Son muggles pero tienes conocimiento de la magia por mi sobrina –dijo Annia.
- ¿Cuales son los nombres de los padres y de su sobrina? –Pregunto Holkins levantando la cabeza para ver a Annia.
- Sus nombres son John y Rachell Granger y mi sobrina se llama Hermione Granger –dijo Annia un poco sorprendida de la actitud del hombre.
- La amiga de Harry Potter –dijo el hombre sorprendiendo a los dos quienes se miraron las caras –No se miren así. Los amigos de Harry Potter se han encargado de hacerse un nombre entre los aurors desde que entraron al ministerio y capturaron a tantos mortifgos, además esa chica es muy inteligente.
- Ahora dígame algo sobre su hija –dijo Holkins a Sirius.
- Es "Nuestra" hija –dijo Sirius señalando a Annia.
- Pues bien ¿Qué saben de su hija? –Dijo mirándolos a ambos.
Annia miro a Sirius y luego le contó toda la historia a Holkins quien no paraba de tomar nota.
- Entonces lo ultimo que sabes es que la dejaron en algún orfanato de Francia –dijo Holkins terminando de anotar –Pues bien, con los nombres que me has dado podré comenzar a investigar un poco más sobre tu hija pero lo de su sobrina va a estar un poco más complicado porque no es mucha la información la que me dan.
- Los papeles de adopción deben tenerlos sus padres pero se negaron a cooperar –dijo Annia.
- Dígame ¿A que lugares fueron de luna de miel? –Pregunto el hombre.
- Por lo que me dijeron a Italia, Francia y España –dijo Annia –pero perfectamente podrían haber ido a otro país a buscarla.
- Puede ser pero tengo ciertos medios para averiguar en concreto a que países fueron –dijo Holkins –Con respecto a su hija solo tengo que conversar con la mujer que usted me dijo y seguramente tendremos el nombre del orfanato.
- Pero no me ah querido decir nada en todos estos años –dijo Annia.
- Créame señorita Truddo, lo que ella hizo es penado por la justicia muggle por lo que un par de amenazas y soltara la legua rápidamente –dijo Holkins mostrando sus dientes blancos.
- Pues bien, quiero que me mantengas informado de todos los pasos y que me avises si necesitas o encuentras algo –dijo Sirius tendiéndole la mano.
- No se preocupe Señor Black, lo mantendré informado de todo –dijo Holkins levantándose y despidiéndose de Annia también. Cuando salió de la oscuridad Annia pudo ver que era un hombre de color y con el cabello rapado. Vestía una camisa negra igual que sus pantalones y antes de salir del lugar se coloco unos anteojos que impedían ver la totalidad de su rostro.
- Ese tipo es muy raro –dijo Annia después de verlo salir.
- Puede ser pero es un experto y nos ayudara a encontrar a nuestra hija y a los padres de Hermione –dijo Sirius levantándose también del lugar para salir e ir a la madriguera donde los esperaban los chicos.
Se aparecieron unos metros de la madriguera y vieron como los chicos jugaban quiddich en sus escobas y a las chicas tiradas en el césped bajo un árbol muertas de la risa.
- Vaya, creo que se la están pasando en grande –dijo Sirius al llegar donde estaban las chicas.
- La verdad es que sí –dijo Ginny.
- ¿No tuviste problemas con tu madre? –Pregunto Annia a la pelirroja.
- La verdad es que mi hermano se quedo calladito y no tuve ningún problema –dijo Ginny con una gran sonrisa –A todo esto, mi madre quiere conocerte.
- Pues vamos y aprovechas de darme un vaso de agua –dijo Annia caminando hasta la madriguera.
- ¿Dónde fueron Sirius? –Pregunto Annia como que no quiere la cosa.
- Eres muy curiosa –dijo Sirius con una sonrisa.
- Es que quiero saber –dijo Hermione haciendo pucheros.
- Fuimos a hablar con un investigador para poder encontrar a tus padres y a mi hija –dijo Sirius viendo como los ojos de Hermione se abrían como plato.
- ¿Estas… estas hablando en serio? –Pregunto Hermione apoyada en sus rodillas frente a Sirius que estaba sentado apoyado en el árbol.
- Claro que sí Hermione –dijo Sirius antes de que Hermione saltara a su cuello y lo dejara rumbado en el césped, muertos de la risa.
- Oigan, oigan no sean tan cariñosos –dijo Harry parado al lado de los dos que seguir muertos de la risa pero ahora sentados el uno al lado del otro.
- No seas celoso mi niño –dijo Hermione colgándose del cuello de Harry para luego besarlo y quitar cualquier vestigio de enojo.
- Ustedes dos van a terminar cansándome –dijo Ron mientras los miraba resignados.
- Ron no seas así, cuando llegue Luna dejaras de alegar –dijo Hermione besando a Harry nuevamente.
- Hola Sirius –dijo la señora Weasley mientras llegaba donde estaban ellos con una bandeja llena de vasos con jugo de calabaza.
- Hola Molly –dijo Sirius levantándose para saludar.
- Annia es una chica muy simpática –dijo la mujer mirándolo significativamente.
- Sí, la verdad es que mi futura esposa es bastante simpática –dijo Sirius como si nada.
- ¿Futura esposa? –Pregunto Molly muy sorprendida.
- Sí, Annia va a ser mi esposa –dijo Sirius mientras la chica se les acercaba seguida de Ginny.
- Por dios déjenme felicitarlos –dijo Molly abrazando a los novios.
- Gracias Molly –dijo Annia un poco colorada.
- Y ¿Para cuando es la boda? –Pregunto la mujer entregándoles la bandeja a los chicos para que sacaran los vasos.
- La verdad aun no teneos fecha pero debe ser estas vacaciones porque vamos a trabajar en Hogwarts como profesores junto con Remus –dijo Sirius.
- ¿Remus volverá a dar clases? –Pregunto Ron bastante emocionado.
- Sí –dijo Annia divertida al ver la cara del pelirrojo.
- Eso es estupendo –dijo Molly mirando a los novios como estaban tomados de las manos.
- Ustedes lo sabían ¿verdad? –Pregunto Ron a Hermione, Harry y Ginny.
- Sí –dijo Hermione respondiendo por los tres.
- Esto no es justo –dijo Ron levantándose enfadado –ustedes se enteran de las cosas y ni siquiera me cuentan, además de que me tienen aquí abandonado.
- Ron, deja de quejarte, te dije si querías venirte a casa pero no quisiste –dijo Harry.
- Charlie me invito a vero esos dragones en Rumania, no podía decirle que no –dijo Ron excusándose.
- Bien, pues si quieres te vienes ahora con nosotros –dijo Harry.
- Genial –dijo el pelirrojo saliendo hasta la casa –pero tengo que avisarle a Luna para que sepa.
- Pues ve antes que venga por ti hasta acá –dijo Hermione divertida al ver salir a su amigo a toda velocidad.
Ron arregló sus cosas en cosa de minutos para luego salir en dirección a la casa de Sirius donde se quedaron todos.
Las semanas pasaron bastante rápido y luego de darle a Dumbledor la respuesta de que aceptarían los puestos Annia y Sirius se dedicaron a preparar la boda que se llevaría a cabo unos días antes de que volvieran a clases.
Como lo habían planeado los días pasaron volando y en un abrir y cerrar de ojos el día de la boda llego.
La ceremonia se hizo en la casa de Sirius y fueron muy cosas personas las invitadas, solo los más cercanos.
Los padrinos fueron Remus y su novia Tonks, quienes estuvieron encantados con la idea.
Dumbledor oficio la ceremonia que fue bastante linda, para luego pasar a una cena preparada especialmente por Molly quien estaba encantada con que Sirius sentara cabeza, como decía ella.
No tuvieron luna de miel y que no querían dejar solos a Hermione y Harry más por el asunto de su noviazgo que por el miedo a que les sucediera algo.
Los días volvieron a pasar rápido y ahora el matrimonio Black, Remus y los chicos se preparaban para el que sería su año escolar tanto como docentes para algunos como para estudiantes para otros.
- Desayunes rápido que estamos atrasados –grito Annia a los chicos quienes aun estaban un poco dormidos.
- Aun tenemos tiempo –dijo Ron.
- Si siguen así no lo tendremos así que apresurence –dijo Annia subiendo hasta su habitación para apurar también a Sirius.
Entro a la habitación y vio que Sirius estaba parado frente a una lechuza que ahora emprendía el vuelo y leía una carta.
- ¿De quien es? –Pregunto Annia cerrando la puerta.
- Del Holkins –dijo Sirius girándose.
- ¿Qué dice? –Pregunto Annia con emoción.
- Que tiene información sobre nuestra hija –dijo Sirius mostrando una enorme sonrisa en e rostro –y quiere que nos juntemos cuando nos hayamos instalado en Hogwarts.
- Eso es genial –dijo Annia pero al ver la cara de Sirius cambio un poco de opinión –parece que no estas contento.
- No es eso, pero me dice que sabe quienes la adoptaron y que las cosas se complicaron un poco –dijo Sirius viendo a Annia.
- Esperemos a juntarnos y luego nos deprimimos –dijo Annia acercándose a él –aun no sabemos que tan complejas son las cosas así que no debemos apresurarnos.
- Tienes razón –dijo Sirius abrazando a su esposa pero aun con esa sensación entre angustia y emoción al saber cosas mas concretas sobre su hija, su única hija... hasta ahora...
Continuara...
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Bueno aqui esta, ojala que les haya gustado y si es asi haganmelo saber y si no tambien ya que si no quieres que lo sig escribiendo solo deben decirlo... lo estoy diciendo de corazon, todos podemos tener fracasos pero me gustaria saber si no les gusta...
Ojala me puedan dejar sus opiniones y nos leemos , espero, en el otro capi que debera sali luego de la otra semana porque me voy una semanita fuera de la ciudad asi que... seria para la proxia pero de verdad quiero saber su opinion porque me esoy intentando cabecear para sacar algo de inspiracion para este ff y si no les gusta preferiria saber para ya no hacerlo mas...
Bueno, me despido ya que no tengo reviews que responder asi que...
Besos a todos, cuidense mucho
Se despide su humilde servidara
.:Konnyta-granger:.