Aclaración: Los Teen Titans no me pertenecen y para ser honestos si me perteneciera no habrían llegado al capitulo tres. Esto es solo un Fic sin ánimos de lucro, nunca pensé en ganar algo por escribir esto y así se mantendrá hasta que la historia termine o me caiga una roca encima.
Redrum
- Responde Aqualad¿en donde estas? – Decía Speedy mientras le hablaba por el intercomunicador.
Ya llevaba mas de media hora desaparecido y estaba preocupándose por el. Se suponía que estaba de patrullaje pero de repente la transmisión cayó muerta y el desapareció de todo radar.
- ¿No has encontrado nada Bumblebee?
- Nada, esto ya me esta preocupando muchísimo.
Speedy se quedo viendo la pantalla una vez más. No había ni una señal de su amigo, casi como si hubiera desaparecido de la misma faz de la tierra. Simplemente no se podia quedar así.
- Llama a los gemelos, vamos a ir en su búsqueda.
Como si hubiese activado una clave, todos los sistemas empezaron a fallar masivamente. En la pantalla la imagen del radar fue cambiada por la de un ojo de color rojo antes de que esta desapareciera. Las luces dejaron de funcionar y todo quedo a oscuras. Ni un solo aparato funcionaba, ni siquiera los transmisores.
- ¡Demonios! – Dijo Speedy furioso - ¿Qué paso aquí?
- ¡Yo tampoco entiendo, de repente todo dejo de funcionar! – Dijo Bumblebee mientras trataba de hacer que las maquinas funcionasen de nuevo – Parece que hemos sido saboteados desde adentro pero no se…
Fue interrumpida repentinamente, cuando sintió que algo pasaba demasiada cerca de ella. Al verlo se dio cuenta que se trataba de un cuchillo sumamente delgado y de metal negro en cuyo mango se podía ver el dibujo de un ojo rojo. Entonces escucho pasos detrás de ella. No podía entender como alguien había entrado pero para ahí estaba aunque no era capaz de verlo bien a causa de la oscuridad. No parecía ser una figura muy alta, y parecía cargar algo en sus manos. Speedy le apunto con su arco pero rápidamente lanzo contra el los bultos que tenia en sus manos. Speedy los esquivo pero luego se dio cuenta que no los arrojo para golpearlo, sino que solo quería entregárselos. Al estrellarse contra la computadora, los bultos se abrieron y su contenido salio. En ellos se encontraban Mas y Menos, con muchísimas heridas e inconscientes.
Speedy y Bumblebee miraron con horror y luego con furia contra el que estaba frente a ellos, que ahora estaba mas cerca. De el salio una risa mecanizada, completamente burlona, en la que parecía disfrutar su odio. Speedy lanzo una de sus flechas pero fue esquivada si ninguna dificultad, al igual que los ataques de Bumblebee. Mientras lo hacia se reía con mas y mas fuerza y en tono mas burlón. Entonces este se levanto como si nada y miro el desastre que los ataques fallidos causaron en la base de los Titanes del este.
- Desastroso, completamente desastroso – dijo con una voz mecánica – No creo que sean una amenaza, pero ordenes son ordenes, y las cumpliré con gusto.
Hizo un rápido movimiento y de repente Bumblebee cayo al piso. Speedy no tuvo tiempo de reaccionar cuando frente a sus ojos su arco se rompió y recibía un puñetazo en el rostro. Cayo en el suelo y desde ahí pudo ver la figura que los atacaba. Fue un vistazo muy rápido pero claro. Fue lo ultimo que vio antes de caer inconsciente, y lo ultimo que escucho fue su horrible riza antes de que este le atacase nuevamente.
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Han pasado casi dos semanas desde su último enfrentamiento con los soldados del caos y Robin debía admitir que se sentía muchísimo mejor. El resultado no fue como el hubiera querido pero la autodestrucción de Gun Shoot debió calmar de cierta manera al hermano de este, siempre que continuase con vida. Sabía que la amenaza no había desaparecido pero por lo menos podía relajarse lo suficiente para disfrutar de un juego con sus amigos.
- ¡Te patee el trasero de nuevo Cyborg!
- No es cierto – le reclamo su amigo – Fue pura suerte.
- Para ser pura suerte te derrote en menos de dos minutos.
- Pura suerte, ya se te acabara en el próximo juego.
- Llevas diciendo eso mas de media hora, acéptalo no es suerte, simplemente soy mejor que tu.
- Oigan¿No creen que ya es mi turno? – Pregunto el Chico Bestia que estaba en el sillón esperando su turno - ¡Se suponía que ya debería estar jugando!
- Toma mi lugar – Dijo Robin mientras le lanzaba el control a su amigo – de todas maneras ya me canse de derrotar a Cyborg. Luego de un rato se vuelve aburrido.
- ¿A dónde vas cobarde? Tenemos algo pendiente.
- ¿Que te pasa Cyborg? – Le dijo el Chico Bestia en tono burlon - ¿Temes que te sigan dando una paliza?
- ¿Una paliza tu? Ya quisieras.
Robin decidió alejarse de la pelea que tenían en ese momento y decidió ir a la cocina. En ese momento Star Fire estaba cocinando otro de sus platillos originarios de Tamaran. Ya no tenia rastros en su rostro de la pelea con Gun Shoot y volvía a transmitir ese optimismo que el estaba acostumbrado a ver en ella. Se sentía tan bien por ello que había aceptado probar uno de sus postres, a sabiendas que tarde o temprano se iba a arrepentir.
En otro lado de la sala, Raven se encontraba leyendo como siempre un libro. Fue en ella quien se preocupó más, debido a que no tuvieron una verdadera idea de que tan lastimada estaba hasta que llegaron. Se fue directo a su habitación y no salio de ahí. Sus amigos se preocuparon y en cuanto entraron a riesgo de que se pusiera furiosa, encontraron una mancha de sangre en el piso y a ella en trance en su cama. Lo había estado ocultando y les era difícil de creer como, ya que debió tratarse de una herida interna muy grave. Estuvo en trance dos días más. Esta vez estuvo con sus amigos viendo que se recuperara. Por suerte no hubo nada importante ese día y no la abandonaron ni un instante, pero se sentía mal porque de nuevo ella había sido gravemente herida. El se encontraba ahí cuando finalmente ella se despertó y aunque sus palabras le molestaron un poco pero le alegro que recuperase su sentido del humor.
"¿Por qué esa cara¿Star Fire rompió contigo?"
Al despertar pareció que ya no se sentía mal por la muerte de Gun Shoot, o de hecho que le interesase esto todavía. Tal vez era mejor así.
- Ya casi esta listo – dijo Star Fire – Espero que te quede espacio en el estomago para mi postre.
- Seguramente tendrá muchísimo espacio después de que la pruebe – respondió por lo bajo Raven.
Robin estaba comenzando a resignarse a la idea cuando sonó la alarma. Todos los titanes fueron a verificar y el resultado fue completamente desagradable.
- ¡Slade!
No se había sabido nada de Slade en varias semanas. Lo ultimo que se había sabido de el es que se había ido de la ciudad para reorganizarse y que había sido responsable de varios robos de tecnología, sobre todo armamentística. Lo que este haciendo, debe ser parte de un nuevo plan maquiavélico suyo.
- La señal viene del Teatro de la ciudad y todo indica que efectivamente se trata de Slade, esos robots suyos han repelido a la policía y según los primeros reportes tiene su toque.
- Al parecer había un evento de caridad esta noche – Dijo Robin – Pero no entiendo realmente que espera ganar con esto. No creo que el se rebaje tanto para robar joyas y tomar rehenes. Es obvio que se trata de una trampa.
- Una en la que entraremos gustosos seguramente – Se dijo el Chico Bestia en voz alta y sabia lo que decía. En ese momento Robin dio la orden a su equipo para dirigirse al teatro. Tenía pensado tratar de detener a Slade y evitar que siga aterrorizando la ciudad, pero a la vez tenia que ser precavido, ya que al final de cuentas no sabia lo que estaba este planeando.
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Titus miraba la televisión. Vestía su Smoking favorito y miraba con atención los reportes que indicaban de una nueva toma de rehenes, esta vez en el teatro de la ciudad y que al parecer eran obra de un misterioso y muy peligroso criminal llamado Slade. Para el era una horrible decepción ya que esa gala tal vez seria la última en la que participaría.
En las últimas dos semanas se había transformado en el hombre más horrible de la historia a causa de sus tratos con los soldados del caos. Los noticieros lo hicieron pedazos, las agencias de investigación tanto del departamento del tesoro como de todos los departamentos federales estaban enfocándose en darle un castigo ejemplar al que era uno de los hombres más ricos del mundo. Oficialmente, "Fénix", la compañía que el creo de la nada estaba muerta, y sus divisiones en casi todo el mundo habían sido decomisadas, excepto la de videojuegos que todavía la mantenía por un error de papeleo. Muchos consideraban que el sus cuentas no fuesen congeladas y que no pisase la prisión era un error inaceptable, pero el sabia que no era un error.
Aprovechando todo el tiempo libre que ahora tenia entre reuniones con sus abogados, el se había encargado de verificar que los titanes habían modificado su sistema de seguridad según el aparato que el les había entregado. Como efectivamente había prometido este impedía que cualquiera que los aparatos y llaves creados por el proyecto "Llave Maestra" o cualquier otro aparato creado en su antigua compañía les afectase, pero también les permitía espiar dentro de la torre. Un efecto secundario que se encargo de ocultar con mucho cuidado para que Cyborg no lo notase.
Después de un vistazo concluyo que los titanes ya se habían ido y siguió viendo las noticias. Efectivamente todo estaba saliendo como el Concilio lo había planeado. Apago la pantalla y comenzó a revisar unos papeles que le habían llegado. Desde su estudio podía escuchar el horrible ruido que sus guardaespaldas estaban haciendo. Para el, era un precio bastante aceptable con tal de tener la seguridad de que se burlaran mas de el, y aunque algo costosos su sola fama bastaba para que estuviese tranquilo.
Dio un vistazo hacia la ciudad. Contra lo que se puede pensar, el saber lo que ocurrirá no le daba mucho alivio que digamos.
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La calle frente al teatro parecía un campo de batalla. Habían autos quemándose y rastros de sangre de los policías y guardaespaldas que trataron de evitar los secuestros, la calles estaban llenas de cráteres y la misma entrada del edificio estaba casi destruido. Sin embargo no había ningún rastro de los robots de Slade, por lo menos no afuera.
Entraron por enfrente y aparte de algunos daños no encontraron nada. Siguieron caminando y entraron al vestíbulo, en donde las paredes habían sido horriblemente dañadas con lo que parecían cuchillos y había sido dibujada una flecha que apuntaba hacia el techo. Cuando miraron hacia arriba, había, entre otras cosas, palabras escritas.
- "Lasciate ogne speranza, volch'intrate" – leyó en voz alta Star Fire
- ¿QUÉ? – Fue la respuesta del Chico Bestia – ¿Acaso es una clase de dialecto extraterrestre?
- Es parte de la Divina Comedia, de Dante Alighieri – le respondió Raven –Se trata de parte de la inscripción de las puertas del infierno: "Abandonad toda esperanza, los que entráis".
Robin se quedo observando lo que había en el techo. Había una serie de garabatos y líneas que parecían haberse dado al azar con la pintura roja mas apestosa que pudieron encontrar. Pero entre los garabatos algo destacaba de una manera desagradable y se trataba del dibujo de un ojo completamente abierto.
- Algo anda Mal…Esto no puede ser…
- No puede ser Slade – concluyo Star Fire.
Cyborg hizo una señal. Usando su oído electrónico escucho algo que le pareció importante. Corrieron hasta las butacas, pero no encontraron nada. Quien fuera, se trataba de una persona extraña, pues se había dedicado a destruir los asientos. Miraron por todos lados en búsqueda del responsable, y en todos lados se encontraban rastros de cortes con algo afilado. Un escalofrío recorrió su cuerpo, nada de esto pintaba para nada bien.
Las luces se apagaron de pronto, dejando únicamente las del reflector encendido e iluminando al escenario, pero tampoco había nadie, en su lugar iluminaba bolsas, lentes, chaquetas, diversos objetos que debían pertenecer a los secuestrados. Entonces la oyeron, una hermosa voz que cubría todo el lugar. Era una de las mas bellas voces que habían escuchado en su vida y hacía que esta les llegase hasta el pecho mientras cantaba una extraña canción
Os iusti meditabitur sapientiam
Et lingua eius loquetur iudicium
Beatus vir qui suffert tentationem
Quoniam cum probatus fuerit
Accipiet coronam vitae
Kirie, Ignis divine, Eleison
O quam sancta Quam serena
Quam benigna Quam amoena
Oh, Castitatis lilium.
- ¿Les gusto la canción?
Todos voltearon hacia uno de los balcones que se encontraban encima de ellos y ahí se encontraban. Uno de ellos estaba cubierto completamente por una capa y apenas se podía ver que usaba una inexpresiva mascara de metal que dibujaba la expresión de un hombre furioso y que los ojos que se apreciaban a través de esta mostraban una cólera contenida, pero el segundo era fácilmente reconocible. Unos lentes oscuros que cubrían sus ojos y usaba un traje de etiqueta, sin embargo su brazo derecho estaba visiblemente vendado en la derecha portaba un bastón.
- ¿Sorprendidos de vernos a ambos? – dijo Puppet Master con su acostumbrada sonrisa
- Lo que nos sorprende es que caigan tan bajo para hacerse pasar por alguien mas – les respondió Cyborg, aunque como todos le sorprendía ver al que parecía ser Gun Shoot con el – y por lo que podemos ver, están para trabajar de monstruos en una película de terror.
Gun Shoot dio un paso al frente, aunque la torpeza con que lo dio fue prueba que a pesar de estar vivo, su estado era lamentable, por no decir patético.
- Disculpen a mi hermano. Esta así por culpa de Raven. Honestamente dudo que se sienta mal por eso, después de todo lo único que hizo fue humillarme mientras dejo a mi hermano moribundo, calcinándose y suplicando porque lo mataran…si es que pudiera, la verdad apenas y puede hablar y moverse.
- ¿Acaso vinieron a dar lastima? – le contesto Raven fríamente.
- Oh no, por supuesto que no. Honestamente queríamos darles una sorpresa. No se preocupen por Slade, el no podrá entrar a la ciudad por ahora, no aunque quisiera. Todo esto lo hicimos porque queríamos presentarles a alguien muy especial.
- ¿Con que era eso? – Dijo Robin – por fin se revelara otro de ustedes.
- Bueno…para ser honestos…digamos que ella esta en otra liga.
En ese momento se escucho un extraño sonido. Los titanes reaccionaron a tiempo para ver como cinco cuchillos caían muy cerca de ellos. Puppet Master chasqueo sus dedos y casi todas las luces se encendieron. En el escenario ahora había alguien. Estaba vestido completamente con un traje negro ajustado. Usaba unos zapatos de tela con suela delgada que reconocieron como los que se que se usan para no hacer ruido. Una mascara ajustada de tela cubría completamente su cabeza y los orificios de los ojos eran sumamente pequeños y tenia pintada en la frente un dibujo de un ojo y usaba una especie de tapaboca metálico. Portaba una capa, tan oscura como su uniforme, que cubría la mitad de su cuerpo mientras la otra mitad la tenia en su espalda. Quien fuera, se trataba de una chica, tal vez de su edad. A pesar de la distancia, calcularon que tenía la misma estatura de Star Fire y pudieron ver que estaba completamente vestida con su traje negro, incluso sus manos tenían guantes del mismo color y no tenia dejaba una sola parte de su cuerpo al descubierto.
- Realmente esta ansiosa – dijo burlonamente – por lo general es más paciente. Verán, ella le fascina cantar, es su pasión. Si escucha una canción que le guste, la cantara las veces que quiera, en especial antes de empezar a trabajar. La canción que acaba de oír la escucho por la televisión y la canto por tres horas seguidas antes de que se durmiera…
- ¡CALLAD!
Puppet Master cambió en un instante todo su comportamiento. Su sonrisa burlona fue cambiada por una expresión de absoluto terror y su mano que sostenía el bastón tembló tanto que perdió el equilibrio. Gun Shoot temblaba de miedo a través de su capa y se alejo lo más que pudo de su hermano, esperando lo peor. A diferencia de la voz que canto, la que ahora había escuchado no se le parecía en nada, era ronca y muy grave con un fuerte tono metálico, como si viniera de un robot.
- Me disculpo de parte de mi patético hermano – dijo – puede ser realmente molesto. Hasta a mi me causa dolor de cabeza y me dan ganas de castigarlo, pero después de todo es mi hermano y no me atrevo a hacerle daño.
Como si nada hizo un rápido movimiento con su mano y Puppet Master grito lleno de dolor. En su brazo vendado ahora había lo que parecía un cuchillo que acababa de ser arrojado contra el.
- Oh…se me salio.
Este comenzó a avanzar hasta donde se encontraban los titanes. Sin dificultad salto el foso de la orquesta y comenzó avanzar lentamente hasta donde se encontraban los titanes. Estos se pusieron en guardia al verla acercarse lentamente.
- ¿Eres su líder? – Pregunto Robin mientras se acercaba - ¿Para que planearon esta farsa?
Quien se encontraba frente a ellos simplemente soltó una par de carcajadas.
- Lo admito, fue mi idea – dijo con su voz mecánica – Es que tenía tantas ganas de conocerlos y no podía simplemente visitarlos, y no podía usar a mis hermanitos que ustedes se encargaron de dejar destrozados de forma demasiado activa. Así que me pregunte ¿A quien odiarían más que a ellos? La respuesta no fue muy difícil de elegir mi estimado Robin
Lo ultimo lo dijo mientras tocaba su mascara y su voz se escucho exactamente igual a la de Slade. Sin duda lo que tenía en su boca era un modulador de voz y muy bueno.
- Tal vez fue innecesario lo admito, pero es que me gustan los juegos y no me gusta la idea que mis hermanos estén sin hacer nada.
- ¿Llamas a esto un juego! – Grito Robin Furioso - ¿Tomar rehenes y herir a gente inocente es un juego para ti?
- Por supuesto que no, eso es trabajo. El juego apenas va a empezar.
La chica dio un salto y desde el aire lanzo varios cuchillos que los titanes eludieron sin demasiada dificultad. Todos levantaron la vista pero parecía haber desaparecido. Estaba cerca, no tenían duda de eso y planeaba atacarles.
- Cyborg…
- Ya me adelante…
Cyborg activo su visión calorifica y empezó a registrar el lugar. De esa manera se dio cuenta que los rehenes estaban atrapados detrás del escenario y estaban amarrados de pies a cabezas. Cyborg comenzó a revisar por los alrededores y entonces se dio cuenta que una silueta se encontraba sobre el candelabro del techo. Estuvo a punto de señalarla y disparar su rayo sónico, pero la silueta se abalanzo sobre el y le dio una patada que lo tumbo al suelo. No había terminado de caer cuando dio una patada en el rostro del Chico Bestia. Antes de que le atacasen lanzo una esfera de cristal a suelo y desapareció en una nube de humo.
Robin y Star Fire ayudaron a sus amigos a levantarse y buscaron a su atacante. Ahora se encontraba de nuevo en el escenario, sentada y con gestos de estar aburrida.
- ¿Ya podemos empezar? – Dijo de una manera que irrito a los Titanes.
- ¡Titanes, al ataque!
El equipo se lanzo en contra de ella. Star Fire lanzo su Star bolts pero eran esquivados con sin la mas mínima dificultad. Raven uso sus poderes para lanzarle los asientos en su contra, solo para que fueran igualmente esquivados sin dificultad. La chica parecía burlarse de ellos fingiendo bostezos mientras esquivaba los ataques. Robin dirigió una patada contra ella, pero ella lo esquivo con un giro y le propino a el la patada. Este al caer se dio cuenta que esta parecía portar algo en el cinturón.
- ¡Toma esto!
Cyborg disparo su cañón sónico y le dio de lleno. El golpe la hizo volar al menos un par de metros pero se levanto sin dificultad. Esta comenzó a acariciar algo oculto en su capa y de repente todos sintieron una sensación de peligro.
- Ya era hora, esto me parecía demasiado aburrido.
Raven no espero a saber lo que deseaba decir y trato de detenerla creando una mano que la atrapase, pero esta se disolvió antes de atrapar su objetivo, para sorpresa de una ya estupefacta. Esta comenzó a correr en dirección a Cyborg; este se defendió atacando con sus rayos sónicos, pero esta lo esquivaba saltando de un lado a otro. Finalmente esta estuvo a menos de un metro de donde este se encontraba, pero el ya se estaba preparando para cuando llegara. Su patada no fue muy fuerte, nada comparado con Gun Shoot y solo cayo por el factor sorpresa, ahora seguramente ella se habría dado cuenta de es y seguramente tendría un arma oculta o lo atacaría con una maniobra de Judo o Karate. Lo que sea estaba listo. Pero no para eso.
Cyborg no sintió nada en un principio. Solo se dio cuenta que su velocidad se incremento en unos segundos y que ella ahora parecía que solo salto girando sobre el. El volteo para no perderla de vista y ahora veía que en su mano derecha sostenía algo. Era largo y a pesar de ser oscuro se notaba que era metálico. Ella volteo y se puso en guardia frente a el mostrando su arma oculta, una espada larga de al menos un metro de largo.
- ¡Cyborg! – Grito Star Fire asustada.
El no entendió porque ella grito de esa manera hasta que vio el suelo. Ahí se encontraba su brazo derecho, tirado como si se hubiera caído solo. No entendía cuando había hecho eso, mucho menos el porque no había sido capaz de sentirlo cuando se la corto. Solo alcanzo a maldecir por lo bajo a su adversaria.
Esta rió al ver que Cyborg se percataba de su brazo cortado. Entonces se quito su capa, revelando la funda de la espada que este escondía. También se mostró ante ellos que en sus piernas tenia escondidos cuchillos de gran tamaño, sujetos por las fundas que tenia sujetas a sus piernas. En su brazos también parecía tener algo metálico oculto debajo de sus guantes, pero no podía verlo claramente.
El Chico Bestia fue el primero en reaccionar furioso, transformándose en la criatura que aprendió a transformase a raíz de un accidente en una planta química. Este golpeo con furia pero solo dejo una agujero en el piso. Mientras la atacaba iba destruyendo las butacas pero no lograba gran cosa. Star Fire y Raven fueron a apoyarle, la primera usando sus puños y la segunda lanzando rayos oscuros con sus poderes. Esto sin embargo no pareció mas que causarle gracia a ella mientras esquivaba uno tras otro los ataques. Robin no pudo quedarse sentado mientras todos peleaban y lanzo sus boomerangs contra ella, los cuales partió en dos con su espada. Al ver esto, le pareció mas obvia las verdaderas capacidades que ella tenia, siendo que rechazaba los ataque de cuatro personas al mismo tiempo mientras portaba una espada en la mano.
Esta guardo entonces su espada y rápidamente salto por encima del Chico Bestia. Eran incapaces de detenerla mientras esta corría directamente contra su amigo. Cyborg, quien se había mantenido quieto en ese momento, vio como ella se acercaba y volvía a poner su mano en su espada. Se alisto para defenderse con la mano izquierda pero ahora esta se agacho y lanzo su ataque. Mientras caía se dio cuenta que había sido por encima de las rodillas. El golpe contra el suelo causo un fuerte ruido y lo último que este pudo ver fue como esta se lanzaba con su espada contra su pecho.
Todos los titanes no pudieron menos que ver como esta enterraba su espada en el pecho de Cyborg y la sacaba sin a menor dificultad. Se dio la vuelta e hizo señas para que todos le atacasen. Robin fue el primero en saltar sobre ella, sacando su Bara bo y dando un golpe con furia con ella, uno inútil porque ella simplemente lo partió en dos antes de golpearlo con es espada y lo alejo de ella en una patada. Raven uso una vez mas sus poderes y trato de atacar junto con Star Fire, atacando una con sus rayos en sus ojos y la otra lanzando rayos oscuros, todas esquivadas con gran habilidad mientras todo los alrededores eran destruidos. Chico Bestia en su forma de animal salto y pudo darle una patada que la derribo por unos momentos antes que se levantase con rapidez. Raven se dio cuenta que parecía tener intenciones de tomar su espada nuevamente e intento quitársela pero no pudo. Por alguna razón no podía usar sus poderes para quitarle su espada.
El Chico Bestia logro golpearle nuevamente en el rostro. Esta contraataco tomándole del brazo y lo lanzo al piso sin mucha dificultad. Robin salto contra ella acompañado de Star Fire y juntos pelearon en su contra a mano limpia sin ninguna dificultad para su adversario. Esta salto por encima de ambos titanes y golpeo nuevamente al Chico Bestia antes que se levantase. Este furioso la tomo de la pierna y la estrello de nuevo contra el piso. Este se levanto y se dispuso a seguirla golpeando cuando una horrible sensación en el brazo lo hizo que se transformara de nuevo a la normalidad. Al verlo se dio cuenta que tenia en el un cuchillo enterrado, y en este parecía haber una extraña sustancia que era lo que causaba que su brazo le doliera. Se saco el cuchillo pero la sustancia le estaba causando somnolencia apenas pude ver a la chica ponerse de pie y dar un salto muy alto, y luego todo se puso oscuro.
- ¡Chico Bestia! – gritaron los titanes que quedaban al unísono. Los tres le rodearon y empezaron a revisarlo. Ardía en fiebre y su mano se estaba poniendo sumamente morada. Raven comenzó a concentrarse y puso sus manos sobre la herida para tratar de hacer algo contra el veneno. Nada ocurrió. No importaba cuanto se concentrase ni cuantas veces dijera sus palabras, parecía que hubiese una barrera en la misma herida que no le dejaba curarlo.
- ¡Maldición! – Grito esta finalmente – No puedo hacer nada. Algo impide que mis poderes funcionen.
- Si no puedes ayudarle entonces déjalo de una vez – Dijo la voz mecánica cuyo dueño ahora estaba frente a ellos, portando en su cintura una segunda espada – no puedes abandonar una pelea por un moribundo.
Todos se estaban poniendo furiosos pero trataron de controlarse. No quedaba otra mas que succionar el veneno pero no era seguro que les de oportunidad con Gun Shoot y Puppet Master observando y el tercero atacando continuamente. Había que haber alguna manera para salvar a su amigo y debían pensarla rápido.
- Ah cielos, que estupidez he cometido – dijo mientras se daba una palmada en la frente – No me he presentado. Una mala costumbre que de seguro mis hermanos me contagiaron. Llámenme Redrum, la Capitana de los soldados del caos. Siempre he considerado como una falta de educación que el verdugo no le revele el nombre a su victima.
Sin ningún aviso se lanzo en contra de Raven. Esta voló para evitar el golpe que lanzo contra ella y le dio una patada al rostro. Redrum se levanto sin que pareciese haber sido golpeado en algún momento y esquivo dos golpes que Star Fire y Robin dieron de forma conjunta. Raven comenzó a preparar un hechizo contra ella cuando un cuchillo de esta le hizo que perdiera la concentración. Paso demasiado cerca su rostro, casi pudo sentir como el filo le rosaza su mejilla. Comenzó a concentrarse de nuevo, pero Redrum la derribo. Fue una patada muy alta, ella estaba volando por los aires y aun así esta logro patearle. O era capaz de volar o era demasiado hábil.
Cayo sobre unas butacas y la sensación en la espalda fue demasiado desagradable. Se levanto poco a poco y vio como se acercaba Redrum hacia ella y sus amigos trataban de darle alcance. Era distinto a lo que le pasó al principio con Puppet Master; con este los ataques no le lastimaban o usaba sus poderes para formar barreras. Con ella no era ni capaz de usarlos. No demostraba tener poderes, no como lo hacen sus hermanos, pero algo la defendía contra sus ataques.
Mientras ella se acercaba pudo ver como ponía su mano sobre una de sus espadas y Raven intento transportarse a otro lugar. No pudo, algo la detenía. Decidió crear un barrera de protección para evitar el golpe. Mientras Redrum se acercaba podía ver como Star Fire le atacaba con sus rayos y Robin lanzaba algunos de sus explosivos, pero los esquivaba sin dificultad y seguía su ruta contra ella. Raven decidió concentrarse con todas su fuerzas a fortalecer lo que pudiera su escudo.
Redrum dio el primer golpe. Se trato de una estocada directa hacia su hombro. El escudo no sirvió de nada y a causa de esto, no pudo mas que dar apenas unos pasos hacia atrás después de sentir el golpe. Casi al instante dio un segundo y un tercero, ambos apenas cortaron ligeramente su piel y rompieron su ropa. Eran golpes rápidos, mas de lo que había visto hace apenas unos momentos. Dio un cuarto, un quinto, sexto y séptimo golpe, después de eso dejo de contarlos por la velocidad con que los hacia. No veía sus heridas, pero por la sensación que sintió supo que le ataco en los brazos, piernas, pecho y estomago.
Escucho gritar a sus amigos y Redrum salto arrojo algo contra ellos que los cu brió en una cortina de un humo verdoso. Raven miro su cuerpo y se dio cuenta que su ropa estaba echa jirones y las heridas le hacían sangrar profundamente. Era extraño ya que no eran demasiado profundas y aun así todo su cuerpo estaba cubierto de sangre. Podía sentir como líneas delgadas de sangre recorrían su rostro. En el suelo estaba su capa y su cinturón, ambos destrozados sin que se diera cuenta cuando. No soportaba la sensación que sentía en todo el cuerpo y sus rodillas comenzaron a temblar y termino arrodillada en el piso, causándole esto muchísimo dolor. No podía evitar sentirse avergonzada, ser herida de esa manera y que sus poderes terminaran siendo completamente inútiles. Alzo su vista y miro a lo lejos a una extraña figura casi oculta. Estaba parada y apoyada sobre una guadaña con un diseño extraño, vestía de negro y no parecía tener rostro, solamente dos ojos completamente rojos que se podían ver perfectamente a lo lejos. Fue entonces que sintió el golpe sobre su nuca y perdió el sentido.
Star Fire y Robin se alejaron de ese horrible humo y lo que vieron les horrorizo. Redrum estaba de pie, sosteniendo su espada guardada todavía en su funda. Miraba hacia abajo, hacia Raven, que yacía en el piso sin reaccionar y cubierta de sangre. Volteo a verlos lentamente y saco su espada. Todavía mirándolos, de forma lenta, apunto con su espada a Raven y lanzo un golpe contra ella, en dirección directa contra el cuello.
- ¡BASTA! – Grito Star Fire con todas sus fuerzas y mando a volar a Redrum con sus rayos. Redrum se puso de pie casi al instante y recibió un puñetazo en su estomago, que la hizo arrodillarse y casi al mismo tiempo recibió uno mas en el rostro. Redrum ,sin embargo, se ponía de pie nuevamente sin aparentar demasiado esfuerzo. Star Fire estaba furiosa y lo sabia bien, por eso debía tener cuidado con sus ataques. Star ataco de nuevo y Redrum la esquivo y dio uno de sus codos le propino un golpe directo en la nariz, que la hizo caer al suelo.
Redrum estaba tomando parecía que estaba a punto de atacar de nuevo pero de repente cambio de opinión y lanzo una patada a sus espaldas, dando de lleno en el estomago de Robin que había ido a ayudarla. Star Fire se levanto, casi sin percatarse de que su nariz estaba sangrando profundamente, dispuesta a seguir peleando, cosa que no impresiono a la que tenia enfrente, que la recibió con una patada. Sus golpes no parecían tener la misma fuerza que los de Gun Shoot, pero causaban un dolor muy parecido. Al verla caer, Redrum corrió en dirección a Robin. Este la recibió con una barrera, pero ella la salto y con la funda golpeo a Robin en el rostro. Star Fire miro como Redrum golpeaba una y otra vez a Robin, y su rostro se contorsiono de ira al ver que esta comenzaba a sacar su espada. Puso su pie sobre su cuello y comenzó a aplastarlo hasta que no podía respirar, a pesar de su resistencia, que realmente era muy grande.
- Una pregunta Star Fire – dijo Redrum - ¿Debo matarlo o quieres que sufra un rato?
- ¡No te atrevas! – Dijo decidida Star Fire - ¡No dejare que lo lastimes!
- ¿Por qué? – Respondió extrañada – después de todo lo merece. ¿No ha intentado que hagas cosas horribles¿Acaso no dice cosa que te lastiman?
- ¡Te dije que no te atrevas!
- ¿Cómo puedes quererlo? Míralo nada mas, pone a su equipo en peligro sin dudarlo, casi como si le importase un comino su seguridad, y eso te incluye a ti.
- ¡Todo lo que dices es mentira!
- Se nota que lo quieres, tanto para ignorar las palabras de alguien que quiere ayudarte. Tal vez no le creas, pero no soy de los que les gusta el sufrimiento…Por eso me encargare de que ya no sufras mas.
En cuanto termino de hablar, saco de un golpe su espada y se lanzo a darle una estocada. Star Fire, llena de ira, ataco con sus Star bols y le dio justo en su rostro. Redrum retrocedió varios pasos, dejando libre a Robin, que aprovecho para respirar. Star Fire se lanzo en contra Redrum, dispuesta a acabar con ella. Esta se recupero casi al instante, al sentir que estaba a punto de golpearla. Hizo un movimiento con el que saco de golpe la espada que tenia guardada y lanzo su ataque. Su cuerpo voló cerca de tres metros hasta que finalmente cayó al suelo.
Robin observo como Star se dio contra el suelo. Fue algo que duro solo unos segundos, pero se dio cuenta que Star no se movía. Estaba boca abajo y no podía ver ninguna clase de herida, pero vio unas manchas de sangre cerca de donde estaba y de ella había un rastro de sangre que salía de su rostro.
- Que lastima me da – Dijo Redrum con tono represivo – fue mas fácil de lo que yo me imagine. Admito que esperaba un poco mas de pelea, por lo menos que se defendiera. Un ataque frontal, frente a un enemigo con armas y habilidades que apenas esta conociendo…grave error, debo decir que fue un grave error causado por la falta de juicio que se puede esperar de alguien como ella. ¿No crees que deberías reprenderla un rato? Por lo menos si es que esta viva.
Robin lanzo dos boomerangs contra ella, los cuales atrapo en el aire. Guardo la espada que tenia en su mano y saco la otra. Robin se puso de pie, en posición de ataque.
- ¡Te acabare aquí mismo!
- No deberías ponerte tan enojado, cuando no te concentras es imposible que puedas dar todo de ti.
Robin lanzo una patada que le arrebato su espada a su adversaria, seguidamente le propino un golpe en el rostro y luego la derribo al piso, pero nuevamente se levanto del piso con gran velocidad. Este le siguió contraatacando con varias patadas y golpes, todos sin embargo esquivados con demasiada facilidad para su gusto.
- Buenos golpes. Como me contaron eres muy bueno. Lastima que no tengo tiempo de seguir con esto.
El movimiento fue rápido, primero esquivo una patada y dio un contraataque. Primero le golpeo el hígado con sus dedos. Esto causo que el reaccionara vomitando y terminara en el suelo. Redrum lo miro por unos momentos mientras recogía su espada. Esta suspiro un rato y luego le propino una nueva patada en su estomago.
- Puppet Master, Gun Shoot – Dijo finalmente – Traigan mi capa, es hora de irnos.
¿A dónde crees que vas? – Dijo Robin furioso – No hemos acabado.
Esta simplemente lo siguió mirando, mientras Puppet Master con un miedo que no podía ocultar, le ponía su capa de forma muy ceremoniosa a Redrum. Este era de una tamaño superior al de ella, pero no podía ocultar el miedo que sentía, por lo que salto cuando Redrum hablo.
- ¿Para que sigues peleando? Acepta mejor tu derrota y terminemos con esto por hoy.
- ¿Estas loca? No me detendré hasta que…
- ¿Caigas muerto? Si quieres te cumplo con eso. Hoy no hemos dado más que un calentamiento y me vendría bien matar un necio, Pero yo que tu mejor me preocupo por tus amigos. No creo que estén muy bien.
Robin se puso de pie con cierta dificultad, pero en su rostro se veía que estaba decidido a seguir peleando.
- Observen bien hermanos míos – Dijo ella mirando a los soldados del caos – como pueden ver, ha decidido que es mas importante derrotarme que verificar la salud de su compañeros. Personalmente, lo veo como una mala decisión, considerando que uno de ellos esta envenenado y ni siquiera sabe como están los demás. Pero si lo desea, podemos seguir peleando, por lo que les pediré de favor que no estorben y que vayan a comprarme unas cuerdas de piano mientras tanto.
Robin lanzo una de sus bombas que hizo caer a Puppet Master y Gun Shoot en medio de un agudo grito. En cuanto el humo se disipo, vio a ambos tirados en el suelo, ambos con el rostro lleno de ira pero no parecían capaces ni de ponerse de pie. Busco en todas partes y ni siquiera parecía haber rastro alguno de Redrum. Un golpe por la espalda, justamente en el hombro, lo hizo arrodillarse, y luego uno mas en el codo lo hizo caer. Redrum estaba parada junto a el, sosteniendo su espada. La hizo girar un par de veces y lo observo atentamente un momento.
- Tranquilo, esta espada no tiene filo – Dijo mientras tiraba la espada al suelo – Nadie ha muerto el día de hoy. Te aconsejo que te encargues de tus amigos.
Chasqueo los dedos y Puppet Master se apresuro en levantarse. Torpemente corría hasta la parte trasera del escenario y regreso cargando dos cajas, una pequeña y la otra de un tamaño en la que cabria un televisor. Coloco ambas en frente a Redrum y se alejo.
- La pequeña es el antídoto del veneno que le puse al chico verde, no te preocupes, atonta pero no mata a nadie hasta una hora y media después. La otra caja es un mensaje que debo darte. El robot esta bien, solo le corte un par de cables que le impiden moverse. Yo que tu me preocuparía por Raven, creo que me pase la mano con ella con la espada con filo, aunque se supone que puede curarse sola y Star Fire…bueno en realidad no se que tal este, con ella fue pura improvisación y admito que no se como la golpee, creo que le revente el hígado. Ahora si me disculpas, tengo una cita y no puedo faltar.
- No dejare que te vayas…Voy a…
- ¿Cometer una estupidez? No vale la pena – La voz de Redrum era distinta. La voz mecánica se había aligerado y en ella ahora se podía escuchar los rastros de una voz femenina en medio del fondo metalico – Ayuda a tus amigos. Ya pelearemos otro día. Pero recuerda que la próxima vez, no me contendré como lo hice hoy.
Avanzo hasta donde se encontraban sus hermanos, que todavía parecían mostrar desconfianza. Mientas caminaba, comenzaba a cantar una nueva canción que se escucho de forma maravillosa, pero nadie pareció entenderla. Redrum saco una capsula de una de sus bolsas y la arrojo al piso. Una nube de humo los cubrió a los tres y cuando esta se disipo, los tres se habían esfumado.
Por un momento Robin se quedo viendo el lugar vacío con una combinación de ira y vergüenza. Entonces reacciono de forma violenta y volteo hacia Star Fire. Se levanto con cierta dificultad y se fue directo hacia ella. La sangre que estaba a su alrededor no era tan abundante como esperaba pero eso no lo tranquilizo. La tomo entre sus brazos y comenzó a examinarla. Un enorme moretón se extendía por todo su estomago y este se encontraba sumamente hinchado, su rostro estaba manchado de sangre y de su boca salía un hilo de sangre. No se veía bien, para nada bien.
Robin comenzó a agitar su cuerpo, deseoso de que reaccionase. Decía su nombre varias veces, primero casi como un susurro y luego de una forma desesperada. Comenzó a apretarla con más fuerza, quería que reaccionase. Hubo un momento en que estuvo a punto de gritar desesperado. Si el golpe fue tan fuerte como el creyó verlo, entonces ella estaba muy mal. Sus manos comenzaban a temblar, no parecía que ella respirase. Tomo su pulso, estaba muy débil. Hubo un momento en que parecía que finalmente se rendiría y caería en la desesperación.
- Por favor, despierta – dijo casi sollozando.
Star movió uno de sus dedos. El dolor que sentía causaba que apenas y pudiese moverse. El dolor le causaba que casi no pudiese respirar y la sangre que tenia en el rostro le causaba malestar. Tosió un poco antes de poder hablar.
- Estoy bien…Solo algo adolorida.
Fueron pocas palabras, pero para el fue suficiente. Se dedico a consolarla un rato, desahogándose un poco del susto que acababa de pasar. La tomo entre sus brazos y se la llevo a un lugar más cómodo para ella. Rompió como pudo su capa y la uso para hacer vendajes para su estomago. Luego escucho algo y al voltear se dio cuenta que Cyborg estaba tratando de moverse y hablaba con dificultad.
- ¿Alguien podría darme una mano, de preferencia la mía.
Robin corrió para ver a su amigo, quien parecía que estaba mucho mejor de lo que se veía hace unos momentos.
- Creí que estabas mucho peor.
- Por suerte no es así – Dijo mientras tomaba su brazo y lo colocaba en su lugar – Yo también creí por un momento pero al parecer nunca trato de cortarme realmente. Tiene un excelente pulso y puntería, pues logro prácticamente quitarme pedazos lastimándome lo menos posible. Pero no entiendo como lo hizo y cuando me atravesó con su espada sentí una especie de energía extraña que me dejo atontado un momento. Realmente no entiendo que ha pasado.
- Dime si te estas completamente bien.
- En unos cinco minutos lo estaré.
- Que sea en dos, estamos en un terrible aprieto. Toma la caja pequeña que esta ahí e inyéctale con la jeringa que encontraras al Chico Bestia. Tenemos que ir a la torre o a cualquier centro de ayuda lo mas pronto posible.
Cyborg se reparo lo más rápido que pudo e inyecto a su compañero. No puedo evitar expresar su terror al ver como habían quedado sus amigos y preparo todo para sacarlos a todos lo más rápido posible. La segunda caja quedo olvidada por unas horas, hasta que todos estaban bajo observación y seguros que se encontraban bien. El Chico Bestia fue el que se recupero mas rápido y se encontraba despierto cuando abrieron la caja, por lo que también pudo ver el contenido de esta. En ella había un arco hecho pedazos y restos de alas que parecían de insecto.
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En una habitación amplia y muy oscura, iluminada por varias velas en el piso, habían personas de pie. Las velas que les rodeaban formaban un circulo partido en dos. En un extremo había nueve personas, siete de ellas portando mantos oscuros y yelmos de metal oscuro que tenían la forma de lobos salvajes en plena furia, sosteniendo una espada con la mano derecha y un báculo de madera. Frente a ellos, se encontraban dos figuras arrodilladas, sumamente maltrechas, que estaban vendadas y en el caso de uno de ellos, una capa y su capucha ocultaba numerosas quemaduras todavía no sanaban, además de una incomoda mascara de metal.
Frente a ellos, dándoles la espalda en el otro extremo del círculo, había solo dos pero eran los que tenían el aspecto más orgulloso. Ambos portaban grandes capas negras y su rostros estaban cubiertos. Uno de ellos portaba un báculo de metal plateado. Su yelmo era rojo intenso y tenía la imagen de un dragón con grandes cuernos. El segundo portaba una mascara de tela con cubría completamente su cabeza, a excepción de sus ojos y una especie de bozal, portando en sus manos dos espadas. Todos miraban a la misma dirección.
Eran tres tronos los que estaban ahí. Uno era de Metal y era el mas grande de todos, con imágenes de horribles monstruos a su lado y diversas imágenes grabadas, sobre todo la de un gran ojo y para llegar a el se tenia que subir por unas escaleras. Antes de el, había un segundo, también de metal, pintado completamente de rojo, con imágenes de cabezas de personas suplicantes y varias espadas y cuchillos alrededor. Pero el primero de todos, al nivel del suelo, había un trono pequeño a comparado de los otros, en el había estaba la imagen de una pluma y un agujero a un lado donde se podía colocar una guadaña. Era eso lo que tenía, y en el se encontraba sentada la figura vestida completamente de negro y una mascara blanca, mirando de forma aterradora a todos los presentes.
- Que avancen mi mano derecha y mi mano izquierda – dijo con gran serenidad, a lo que Redrum y el Uroloki avanzaron sin chistar y se arrodillaron ante su señor.
- ¿El concilio esta de acuerdo con regresar a la Legión?
- Si maestro
- ¡Estamos de acuerdo! – Respondieron los presentes al unísono
El de la mascara fijo entonces su atención a Redrum, quien se encontraba mirándolo fijamente. No lo asombro, después de todo era la única que se atrevía a hacerlo.
- ¿Ha juzgado el Capitán y juez oscuro a los elegidos para el escenario?
- He juzgado, mi señor - Respondió con su voz grave y mecánica
- ¡Ha juzgado! – se volvió a repetir en coro.
- ¿Cuál fue el veredicto?
- No están listos, todavía no, pero ya podemos comenzar a trabajar.
- ¡Ya podemos empezar el despertar!
El enmascarado se puso de pie y tomo la guadaña. Con todas sus fuerzas dio un golpe y el filo golpeo el piso. De este salio una especie de vapor luz blanca que desapareció en pocos segundos.
- La barrera ha comenzado a nacer. Muy pronto los que traten de entrar a estorbar el escenario no podrán avanzar ni un paso sin importar su fuerza física o mental. Váyanse ahora y sigan sus labores. Excepto tu Redrum, que tengo que hablar contigo.
Todos se fueron rápidamente, sin siquiera darle un momento la espalda. Al quedarse sola, Redrum avanzo ante su señor y se paro a su lado.
- ¿Por qué no mataste a los que te ordene matar?
- No eran un estorbo – dijo despreocupadamente – además no podrán ni moverse hasta que sea muy tarde.
- Bueno, admito que es verdad, nunca fueron una amenaza real para mí.
- Si no es molestia, más bien debería ser yo quien preguntase la razón porque la pelea que tuve fue bastante decepcionante y si tuviste que ver algo en ella.
- La razón es simple, todavía no te conocían muy bien, la próxima vez será mejor, mas agresivos y con suerte tal vez te golpeen realmente duro… y no, mi influencia fue más pequeña de lo que crees, pero creo que de todas maneras si tengo algo de culpa. Ninguno de ellos esta acostumbrado a mi presencia y tu tienes mucha de ella impregnada a tu alrededor.
Redrum lo miro un momento y luego se puso a reír de una manera que si no hubiera sido por el modulador seria bastante agradable.
- Te creeré como siempre mi señor – Respondió sarcástica - ¿Desea escuchar algo?
- Que sea de tu elección.
Redrum se quito los guantes que tenia y saco un violín de la parte trasera del trono. Hacia un año que no tocaba para el, y aunque sus ojos no lo demostrasen, ambos estaban ansiosos, uno por empezar, otro por escuchar. Ella era la única que podía estar cerca de el, que sabia la necesidad que tenia de escuchar música, y para ella era un placer calmar su necesidad. Ella comenzó a tocar el Quinto capricho de Paganini, algo breve pero esta se trataba de una secion breve. El no parecía moverse, pero ella sabia que disfrutaba lo que oía. Aunque parezca extraño, ella es quien conoce mejor a su señor y sabia que este era uno de los momentos en donde el encontraba mas placer. Si por el fuera escucharía música por horas, pero eso no ocurría. No es tiempo de pensar en banalidades, hay trabajo que hacer.
El Palabrerío de Ulick: Puppet Master
Finalmente apareció la temida Redrum, la capitana oscura. Este es un personaje que llevo rato queriendo que aparezca y de la que ya llevo rato haciendo referencias. Ya hablare después de ella. Por ahora quisiera hablar de Puppet Master, tal y como había dicho que lo haría.
La apariencia y nombre de Puppet Master variaron muy poco, excepto en lo que se refiere a los poderes. Originalmente se supone que tendría la capacidad de controlar el cuerpo de otras personas, pero cuando escribía, por alguna razón me moría de la risa, cosa que todavía no entiendo porque. Finalmente decidí cortar por lo sano y lo cambie para que controlara cadáveres, pero no me gusto la idea, además, ahora que lo pienso y después de que leo algunos borradores, estoy convencido que plagie a un personaje de Inuyasha. Este personaje me causo problemas sin tener que cambiarle gran cosa, porque el vestuario y la imagen en general fue casi siempre la misma. Fue en el mismo día en que me decidí en la imagen definitiva de Gun Shoot que hice los detalles necesarios para darle su forma actual, aunque tuve que modificar ligeramente la historia.
Espero que les haya gustado y que sigan disfrutando esta historia. Rechiflas, felicitaciones, porras y preguntas sobre esta historia las pueden hacer si gustan.
Pds: la melodía la saque del anime Elfen Lied. En realidad nunca la he visto completa y para ser honestos es una serie que a pesar de parecerme interesante, es muy violenta y sangrienta al punto que prefiero tomarme mi tiempo con ella, pero si algo me gusta es la música, una de mis aficiones favoritas. Las citas de Dante no la saque de su libro, sino de la novela El club Dante, bastante bueno, sobre todo por los datos de la Divina Comedia y su autor.
Pds2: Aunque me voy a tomar un poco de tiempo para actualizar la próxima vez, pero si no recibo al menos un Review, entonces me voy a tardar aun más.
