Primero que nada, mil disculpas por la tardanza, la cual creo que fue demasiado larga y lo admito pero fue por circunstancias de fuerza mayor. Como siempre les recuerdo que esta historia es cien por ciento mía pero que los Jóvenes Titanes no lo son, son propiedad de DC comics y si fueran míos seria muy rico y podría conocer a Wolfman y Johns. Como siempre espero que les guste esta historia…aunque creo que seguramente no me perdonaran por este capitulo.
Una cruel propuesta
Redrum andaba sola, caminando por ese lugar tan oscuro. Es curioso, todavía recordaba cuando era una niña y le tenia miedo a la oscuridad, paradójicamente ahora le servia con total fidelidad. El lugar donde iba no le fue tan fácil de encontrar como hubiera deseado, pero llego a el a tiempo. El camino era algo peligroso, especialmente para aquel que nunca hubiera estado en ese lugar y caminaba completamente a ciegas. Tenia que andar con cuidado, pues la experiencia le había enseñado en incluso en lugares nunca pensados podría haber oculta una trampa.
Sus ojos ya estaban completamente acostumbrados a la oscuridad, sin embargo no se fiaba nunca en ellos, por lo menos no es su totalidad. Donde se encontraba era un sitio de malos recuerdos, llenos de sufrimiento, angustia y sacrificio. El mal estado del lugar solo podía indicar que lo que ocurrió ahí fue algo sumamente interesante. Se encuentra en su camino con unos cables, que casi la hacen tropezar. En su momento le ofrecieron una lámpara y no la acepto porque no la considero necesaria, aunque había momentos como ese en que la hubiera aceptado con gusto.
Luego de un rato encuentra lo que buscaba. Lo observa por un rato y se pregunta un rato como lo va a transportar a su destino. Debajo de su mascara se dibuja una sonrisa. Lo que estaba por venir sin duda seria sumamente divertido.
……………………………………………………………………………………………
Star Fire miraba por la ventana. No importaba cuanto miraba, las nubes no se iban. Sin embargo parecía que ella era la única que lo notaba.
En los últimamente Star habia logrado sobrellevar mejor lo que estaba ocurriendo, gracias a los ratos que había pasado con Jessica, una chica que había conocido en un parque. Sus amigos ya habían llegado a conocerla y por alguna razón les cayo bien en cuanto la vieron. Incluso Raven, que aun actuaba un poco extraña, la había conocido, aunque solo comento que habían encontrado la versión humana de Star. El tiempo con su amiga hubiera sido mas placentero si no fuera por una noticia que les había llegado poco antes y que ahora causaba que los titanes no dejasen de pensar en lo que estaba pasando.
Todos se impresionaron con la noticia de hace un par de días, cuando se anuncio que Puppet Master había sido encontrado muerto y que llevaba semanas así y luego la confirmación de que Gun Shoot debía estar muerto, sin embargo Raven y Robin fueron los que se sorprendieron mas con la noticia. A pesar de que trataron de demostrar lo contraria, en el caso de Puppet Master era algo casi inobjetable. Hicieron sus propias pruebas y el resultado fue confirmado varias veces. Robin no habia dejado de poner ese gesto pensativo desde hace días, pero esta vez no pareció dejarse dominar por sus impulsos, Raven sin embargo no estaba tan bien. Hacia días que no se le veía meditar y parece que desde esa noche en que cayo dormida, no había vuelto a cerrar los parpados.
Star Fire se mantenía a lado de Robin. Con todo, se estaba controlando muy bien y parecía mantenerse enfocado, tratando de averiguar como habían hecho eso. Cyborg y el Chico Bestia en ese momento estaban jugando un videojuego, pero incluso lo hacían con menos entusiasmo.
- Deben de haber falsificado el cuerpo…pero aun así no entiendo como pudieron falsificar también el cuerpo – dijo en voz alta Robin
- Debe haber sido alguna falsificación muy buena – dijo Cyborg – todos los aparatos están de acuerdo que el cuerpo es el suyo
- Pero eso no es posible – le contesto el Chico Bestia – si lo vimos con la tal Redrum. Lo creería de Gun Shoot, no vimos su rostro la ultima vez y ni siquiera dijo pío cuando lo vimos, pero Puppet Master… simplemente no puede ser. Deberíamos decirlo…
- Buena idea Chico Bestia, demos aviso que están equivocados – Raven se mantuvo inexpresiva mientras decía esto, solo que con sus ojos de cansancio daba cierto miedo – digamos a todo el mundo que Puppet Master esta vivo y que no fue Slade con el que peleamos. Presentémonos sin ninguna prueba contundente mientras ellos tienen el cuerpo. Tal vez podamos mostrar la memoria de Cyborg pero de seguro se encargaran de demostrar que estamos fingiendo
- ¿Estas diciendo que no hagamos nada?
- Al contrario, debemos hacer algo pero con mucha cautela. Me temo que la policía no es confiable ahora.
Todos en la habitación asintieron menos el Chico Bestia.
- ¿Qué quieren decir con eso?
- Es fácil Bestita. Piénsalo, existe un cuerpo que a pesar de su aspecto se confirma como el de Puppet master, tienen tejido y sangre de cuando peleamos contra ellos en las calles y esas muestras dieron como positivas y luego están detalles como el cabello, los dientes, cosas por el estilo. A pesar de que ellos son desconocidos, se logro obtener mucha información de la nada. No es fácil falsificar ni obtener información como esa…
- A menos que tenga alguien dentro – termino de decir Star Fire.
Chico Bestia se dio cuenta de lo grave del asunto. Parecía que no era posible confiar en nadie en ese momento. De repente sonó la alarma. Todos vieron la pantalla, pero en ella solo había el anuncio de un correo.
- ¿Todo eso por un correo? – exclamo Chico Bestia – ¿Tiene un virus o que?
- Ni el virus mas poderoso puede hacer que la alarma se active de esa manera. En cuanto la abrió no había mas que un breve mensaje:
"Vean el juego"
De inmediato a todos les dio un escalofrío muy intenso.
Cyborg se punto frente a la pantalla y examino la computadora de los titanes. Por alguna razón, la computadora reacciono de esta manera al llegar este mensaje y debían tomarlo muy enserio, así que de inmediato sintonizaron el juego.
Luego de varios eventos catastróficos, muchos dentro del gobierno pensaron que con un juego de Futbol americano se podría llegar a levantar la moral. Por supuesto al principio la idea estuvo a punto de fracasar, pues a pesar de tratarse de un juego de las eliminatorias, pocos tenían deseos de ir a Jump City, mientras que sus propios habitantes no querían salir de sus casas. Pero el anuncio de la muerte de Puppet Master hizo que las ventas se dispararan y que el estadio al final se llenase. En ese momento estaban en medio tiempo, con el espectáculo de las porristas en pleno apogeo. Nada parecía extraño por el momento.
De repente se escucho un canto. No era ninguna canción de moda ni la artista estaba a la vista. No se sabia claramente de donde venia
Con te partirò
Paesi che non ho mai
veduto e vissuto con te
adesso sì li vivrò
Con te partirò
su navi per mari
che, io lo so
no, no, non esistono più
con te io li rivivrò
Con te partirò
su navi per mari
che, io lo so
no, no, non esistono più
con te io li rivivrò
Con te partirò
Io con te
Antes que se terminase el canto, algo apareció en el escenario. Se trataba de un auto que parecía decorado para un carnaval, lleno de flores y otros decorados. El auto llevaba consigo una plataforma, también decorada, pero su contenido causo un shock entre los que lo vieron. En la plataforma habían tres personas, dos es los extremos y una en medio. Uno de ellos estaba vestido con una gabardina oscura y vestía lentes oscuros, mientras que el otro estaba vestido de forma bastante elegante. Cada uno de ellos tenia a su lado una enorme caja. Los que llegaron a verlos los reconocieron al instante como Puppet Master y Gun Shoot, que apenas acababan de anunciar que estaban muertos. El tercero solo había sido visto por los titanes. Vestida completamente de negro y con una capa oscura que en ese momento cubría todo su cuerpo, sostenía un micrófono en su mano y al terminar la canción, se escucho su voz mecánica por todo el escenario.
- ¡Señoras y señores¡Niños, niñas y todos los Malditos vagos que miran esto! – Dijo Redrum con un tono que parecía ser el de un maestro de ceremonias - El juego ha sido interrumpido para dar paso a un evento nunca antes visto. ¡Una toma de rehenes en vivo!
La escena que siguió a continuación fue impresionante. Decenas de hombres, todos vestidos de negros y con cascos negros aparecieron de la nada y se apoderaron del estadio. Los titanes y todos los que vieron eso quedaron perplejos por la rapidez y disciplina con que se llevo a cabo, raptando cerca de veinte mil personas con un número completamente inferior de hombres. A primera vista, era obvio que estaban sumamente armados, todos con armas de alto calibre y automáticas. Las cámaras parecían haber sido capturados por ellos también, pues ahora tomaban acercamientos muy claros y explícitos de estos cometiendo toda clase de actos salvajes y atropellos. Golpeaban, amenazaban e incluso disparaban, todo de una manera que a pesar de su salvajismo, parecía estar sumamente sincronizado.
- ¡Esperen! – Grito nuevamente Redrum – Esto es solo el inicio. ¿Qué puede ser mejor que una toma de rehenes en vivo? Pues que les parece la explosión de una bomba en vivo.
Todos se quedaron congelados, observando la pantalla. Al principio no hubo más que unas ligeras protestas de su parte pero nada mas, con el grito de miles de personas que inundaban su sala. Veían a los soldados del caos y a Redrum, disfrutando lo que hacian como si fuese un carnaval.
- Todos hemos oído estas terribles noticias en la pantalla o en los periódicos – continuo – y seguramente alguna vez, en su lado más sórdido, se preguntaron como seria ver eso en vivo. No lo hagan mas, pues la gran caja que esta junto al buen Gun Shoot tiene nada mas y nada menos que los explosivos suficientes para que nada salga vivo de aquí. Por supuesto, esto no tendría emoción si simplemente lo hago explotar, así que haré lo siguiente: Si lo titanes logran derrotarme a mi y a los que colaboran conmigo, les perdonare a todos la vida, y si no lo hacen o no se presentan… Bueno, creo que no tengo que explicarlo.
Gun Shoot en ese momento disparo al aire. Todos los espectadores que se encontraban ahí gritaron aterrados, cuando varios de los hombres que estaban en las gradas siguieron su ejemplo.
- Estamos hablando muy en serio – Continuo esta – si la policía o cualquier otra fuerza trata de acercarse nos encargaremos de matarlos a todos. Así que escuchen bien titanes, ahora lo único que deben hacer es vencernos y se acabara todo. Solo que les advierto, aquí, en este mismo lugar, puedo asegurarles que la muerte hará acto de aparición.
Pero los titanes no escucharon esto último. Robin habia dado la orden unos momentos antes y todos se encontraban en camino, dispuestos a enfrentarse de nuevo a los soldados del caos.
……………………………………………………………………………………………
Como siempre, Gun Shoot no era un hombre bueno para usar su paciencia y se dedicaba a recorrer toda la cancha, mostrando su impaciencia a cualquiera que lo viese. Puppet Master en cambio prefería ver lo que tenia a su alrededor. Por primera vez en años, mas de doscientos soldados habían sido llamados y se encontraban como estatuas vigilando un escenario de rehenes. No se hubiera imaginado que Redrum haría algo parecido, después de todo no solía hacer esa clase de trabajos, se supone que esta era su área. Mientras escuchaba una melodía de violín, no podía menos que concluir que últimamente no todo salía como el hubiera creído apenas hace un año.
De los tres, Redrum era quien estaba mas tranquilo. Terminando de hablar, saco un violín que tenia guardado, se quito los guantes y se puso a tocar. Sus hermanos sabían muy bien de las habilidades de su hermana con el instrumento, pero las veces que la habían oído eran en realidad escasas. La melodía que tocaba era sumamente deprimente, con momentos de repentina energía. En realidad, fuera de Puppet Master, nadie estaba escuchando la canción. Los rehenes estaban aterrados para siquiera intentar oírla, los hombres que habían traído eran apenas capaces de entender algo de música y los que miraban la televisión de seguro no se tomaran la molestia de escucharla. Gun Shoot… El era todo un caso aparte, de lo único que podía estar seguro es que lo que oía no le interesaba en lo mas mínimo. No le importaba nada de esto, como siempre ella tocaba para si misma.
Un leve sonido la hace detenerse. Repentinamente se levanta de donde se encontraba y logra esquivar algo que pasó demasiado cerca de ella. Luego de asegurarse que su violín estaba intacto, voltea la vista para ver lo que tenia ante ella y no se sorprendió de ver que se trataba de uno de los Boomerangs de Robin.
- Este no es momento para que des un concierto.
Redrum solo lo miro un momento y comenzó a ponerse con calma sus guantes y prepararse a guardar su violín.
- Siempre es buen momento para algo de música. En especial esta pieza que compuse para ustedes. Esperaba que fuese su Réquiem.
Robin y el resto de los titanes habían entrado al centro del estadio, donde se encontraban casi todos secuestradores y los soldados del caos. Puppet Master y Gun Shoot estaban lado a lado de Redrum, quien a su vez parecía estarse preparando para dar inicio a una reunión formal.
- No tienes porque hacer esto, deja ir a todos. Esto es con nosotros.
- Te equivocas Robin, esto los involucra a ellos también. Ellos deben ver todo esto, ser testigos de que tan inútiles son los titanes.
Sin haber sido llamados, cerca de diez de los hombres que vinieron con ellos se pusieron detrás de los titanes. Ahora que los tenían se podía ver que el casco que tenían puesto era completamente de color negro y parecía haber sido diseñado con la forma de un animal salvaje. Su raje era de una sola pieza y era perceptible el hecho que estaban completamente armados.
- Robin, debemos tener cuidados con ellos – Dijo Raven – Estos no son muñecos. Son humanos, hombres de carne y hueso.
- ¿Estas segura? – En la voz de Robin había dudas – Pueden que sean mejor elaborados.
- No, son humanos. Puedo percibir sus pensamientos, los muñecos no piensan por su cuenta, y estos tienen pensamientos propios
- Las reglas son sencillas – continuo Redrum – Solo debes derrotarnos. Si lo logran, personalmente nos entregaremos, pero si nosotros ganamos, entonces no podré irme sin cobrarme algunas victimas. No se preocupen por el numero de contrincantes, solo los que estamos en la cancha vamos a pelear.
Ninguno entre los titanes podía evitar sentirse sumamente incómodos. Miraban alrededor y era imposible no ver a los miles de rehenes y a sus captores apuntándoles con un arma.
- Empecemos
Esa fue la señal de inicio. Apenas hubieron escuchado esto, los diez hombres se lanzaron contra los titanes, primero lanzando una ráfaga de disparos con armas que tenían ocultas, las cuales fueron esquivadas sin dificultad, para luego lanzarse con sus puños, dos por cada titán. Era cierto, no se comparaban para nada con los otros, pero si eran demasiado buenos. Robin fue el primero en percatarse de lo bien entrenados que estos estaban, ya que los dos con los que se enfrento le pusieron en jaque en muchas ocasiones. Chico Bestia y Cyborg tuvieron que pelear juntos, esquivando los ataques que estos daban, combinando ataques con sus puños y piernas con repentinas ráfagas de disparos y en donde fue necesario actuar con rudeza para poder calmarlos. La misma Star Fire se dio cuenta que incluso volando, estos podían alcanzar una gran altura saltando y en un momento de desesperación golpeo a uno de ellos y rompió en pedazos su casco. Estando en el suelo pudo ver el rostro y confirmo que eran humanos, puesto que se encontraban inconciente y tenia un fuerte moretón en el rostro. Raven fue quien tuvo menos dificultad, ya que en la primera oportunidad que tuvo, los paralizo con sus poderes y logro hacer que sus cabezas se estrellasen entre ellos con la fuerza suficiente para dejarlos inconscientes.
Mientras eso ocurría, Redrum simplemente no se movía. Ahí se encontraba ella de pie, mirando con atención como sus hombres eran derrotados por los titanes pero no le importo en lo mas mínimo. Si los titanes hubieran visto su rostro, se habrían percatado que detrás de su mascara, ella estaba sonriendo, incluso cuando cayo el ultimo de sus hombres.
- Si creías que nos derrotarías tan fácil, entonces nos estas subestimando.
- Robin, Robin, Robin… Por supuesto que esperaba los derrotaras. De hecho esto es algo muy especial para mí, pues quiero que me conozcan mejor y no solo como una asesina. A quienes derrotaron se les conoce simplemente como "soldados" y lleva años entrenar uno solo. Ese fue el primer paso que yo di, inicie como una simple soldado. Cuando un soldado demuestra mucho potencial, se le separa del resto y tiene un entrenamiento muy especial. Así nace un soldado del caos.
Robin no se percato el momento en que Gun Shoot se puso a su lado para encestarle un golpe en el rostro. Este retrocedió unos pasos, pero recupero su guardia. Al lado de Gun Shoot aparecieron tres figuras mas que eran su firme retrato y tras ellos estaba Puppet Master, vistiendo su armadura. Detrás de Robin, los titanes se pusieron en guardia y estaban listo para luchar.
El que parecía ser el Gun Shoot original esbozo una sonrisa y saco una Uzi que tenia oculta en su abrigo. Los titanes creyeron que este iba atacarlos pero en lugar de esto apunto hacia el público. Una mirada llena de horror apareció en sus rostros y esta se agrando cuando jalo el gatillo. Raven logro crear un muro para detener la mayoría de los disparos, pero no pudo evitar que algunas balas se impactasen demasiado cerca de algunos espectadores. Raven fue golpeada en ese momento con lo que parecía ser guijarros que eran lanzados por Puppet Master, seguramente solo para molestarle.
Gun Shoot y los muñecos con su forma se lanzaron al ataque al mismo tiempo. Desde un principio se pudo percibir que trataban de no acercarse a Raven, y que sus movimientos eran menos rápidos y precisos. De hecho ni siquiera parecía ser capaz de disfrutar la pelea como solía hacerlo antes. Sus movimientos parecían seguir una lógica, al igual que el de los muñecos.
En algún momento de la pelea, Cyborg golpeo directamente en el rostro a Gun Shoot y cuando cayó al suelo todos los muñecos se detuvieron poniéndose en posición de guardia.
- Ya no eres la sombra de lo que eras – Cyborg no podía evitar sentir cierta lastima al ver el cuerpo lastimado de Gun Shoot, que ahora parecía incapaz de recibir golpes como antes.
- Tal vez – Le respondio Gun Shoot – Pero mi hermano esta mejor que nunca.
Cyborg sintió entonces que algo agarraba su pierna y de forma muy violenta lo hizo caer al suelo. Al voltear la mirada pudo ver que de la tierra se había formado un brazo. Antes de que pudiese reaccionar, algo volvió a agarrarlo y lo arrastro un par de metros antes de lanzarlo por los aires. Al caer al suelo, sintió que nuevamente que era atrapado de nuevo y se percato que en esta ocasión se trataban de varias manos que lo estaban sosteniendo. Se percato que podía destruirla, pero de inmediato volvía otra a ocupar su lugar. Lo peor eran sin embargo los muñecos que de nuevo estaban peleando y estos si llegaban a dar golpes que realmente doliesen. Mientras trataba de evitar ambas distracciones se percato que todos estaban en la misma situación. El Chico Bestia había logrado evitar las manos al trasformarse en un elefante, pero estas se volvieron mas grandes y ahora podían mantenerlo cautivo, mientras que Star Fire trato de destruirlo desde el aire, pero entonces desde la tierra salían piedras que eran lanzadas con gran fuerza y que iban directamente hasta ella, en tanto que Robin ahora tenia a dos muñecos como adversarios y a las manos estorbándole en la pelea.
En tanto, Puppet Master se mantenía concentrado. Ya se le había dicho que el era mejor si no se entrometía en las peleas y dejaba que sus poderes se encargaran de todo el meollo. Se mantenía hincado y con una de sus manos en el suelo, manteniendo los ojos completamente abiertos en donde se encontraban, sin perder el mas mínimo detalle de lo que estaba ocurriendo, siguiendo las ordenes que le habían dado. Fue entonces que se dio cuenta que faltaba alguien.
Entonces un fuerte golpe lo desconcentro completamente. Un poco mas de fuerza y de seguro lo hubiera dejado inconsciente. Apenas pudo enfocar su vista lo suficiente para ver como era golpeado de nuevo en la cabeza con el mismo objeto. Seguramente los muñecos estaban debilitando y su hermano tendría que enfocarse con la distracción. Enfoca finalmente su mirada y ante el estaba levitado Raven, manipulando un tubo.
- Como siempre, tú eres la cabeza en el ataque – Le dijo Raven – Tu caes y tu hermano quedara solo.
- Me temo que eso es verdad, pero hay algo que no debes olvidar: Cuando alguien destinado a ser soldado del caos demuestra un poder mas allá del que se espera entonces se le arrebata el titulo de soldado y se le da uno mayor. Se transforma en aquel que esta por encima de todos nosotros, se transforma en juez y verdugo, en una de las bases de nuestra organización. Quien ocupa ese puesto ahora se encuentra a tu lado y no se contenta.
Una patada derribo a Raven y se dio cuenta que efectivamente se trataba de Redrum. Con todas sus fuerzas lanzo el tubo que tenia a la mano en ese momento, directamente al rostro que tenia enfrente, pero para su horror se detuvo a mitad del camino. Por debajo de la mascara se podía transmitir la sonrisa de Redrum cuando el pedazo de metal se detuvo en el aire y quedo suspendido por el aire antes de caer por el suelo.
- No pierdas el tiempo hermano. Ve y sigue entreteniendo a los titanes mientras me encargo de nuestra amiguita.
Puppet Master no necesito que le repitieran esto, puesto que de inmediato se puso de pie y ocupo su lugar de nuevo, logrando que los muñecos volviesen a cobrar fuerza. Raven se quedo mirando un momento a Redrum. No portaba sus espadas pero en cambio ahora estaba mas fuertemente equipada con cuchillos que se encontraban en todo su cuerpo. En su manos también se dio cuenta que ahora parecía haber puesto una especie de mecanismo. Se daba una idea de que era, pero no tenia intención de averiguarlo. Con sus poderes hizo que la tierra cercana a ella se formase como un bloque y se estrellase contra ella. El bloque se deshizo sin siquiera tocarle. Ni siquiera tuvo tiempo para poder reaccionar por lo que veía, puesto que comenzó a atacar con sus poderes a diestra y siniestra.
En tanto, Redrum solo reflejaba esa sonrisa debajo de su mascara. No trataba de esquivar los ataques, simplemente se quedaba quieta y viendo como estos se deshacían antes de acercarse.
- Ya me aburriste
Redrum entonces comenzó su contraataque. Raven intento crear una protección o de transportarse a otro lugar, pero sus poderes no funcionaron y en ese lapso tan corto de tiempo se tuvo que dar cuenta que no contaba con ellos ahora. Esta recibió un puñetazo en el estomago, un golpe que sin duda no se acercaba en fuerza al que llego a recibir de Gun Shoot, pero tenia una diferencia fundamental, y era que su golpe ardía, como si lo hubiera hecho con algún objeto que ardiese a un punto que debía causar que este debiese estar humeando. Esta cayo de rodillas a causa del golpe para luego recibir un rodillazo en el rostro, igual de ardiente que el puño.
Este golpe la hizo caer al suelo pero llego a reaccionar, puesto que antes de caer tuvo trato de golpear la rodilla y lo logro. De no ser porque el estomago y el rostro le estaban ardiendo, entonces podría haber intentado un segundo y tercer golpe pero no pudo por mas que lo intentase. Esto no alegro para nada a Redrum quien de inmediato dio una nueva patada a Redrum si ninguna clase de piedad.
- Que decepción – En el tono de Redrum, a pesar del modulador de voz, se percibía ahora enojo, un gran enojo – no sabes cuanto me has decepcionado… ¡Ni cuanto te odio!
Redrum la golpeo de nuevo, ahora con más rudeza que nunca
- No tienes ni idea de la clase de poder que tienes, no tienes ni una maldita idea. Eres hija de Trigon, un poderoso demonio y ni siquiera eres capas de golpearme.
Raven apenas pudo esquivar una nueva patada, pero debido al dolor no logro moverse demasiado.
- En este momento te debes hacer muchas preguntas. ¿Por qué no puedo recuperarme¿Por qué sus golpes tienen este efecto en mí¿Por qué no puedo golpearle ni usar mis poderes en su presencia? Te responderé a tu duda con gusto: Porque yo soy superior a ti.
Tus poderes como sabrán vienen de Trigon, un gran demonio que hasta que tu llegaste merecía todo el respeto del mundo. Tu condición del semidemonio te pone en una alta jerarquía, o así debe ser. Yo en cambio soy de origen totalmente mortal, no tuve acceso a tus poderes como tu lo hiciste y mis poderes fueron totalmente adquiridos. ¿Qué nos diferencia? Que tu los desaprovechaste, todo ese poder se quedo desperdiciado, mientras que yo, tuve que entrenar para estar donde estoy. Claro admito, que mi poder vienen de un ser superior a tu padre.
Raven por un momento se quedo helada. Creía haber escuchado mal, pero luego se dio cuenta que efectivamente estaba hablando muy en serio.
- No sabes cuanto me esforcé – Continuo Redrum – pero al final lo logre. Tuve que desarrollar y visitar desagradable lugares para acercarme a lo que tú tienes de forma natural. Fue difícil, pero ahora estoy en una jerarquía mucho más alta que la tuya. Tus poderes no pueden tocarme ahora, no a menos que me superes y así como lo veo no hay oportunidad que eso ocurra. Ah, cuanta lastima me da esto, un ser mitad demonio que desaprovecha su potencial. No sabes cuanto hubiera dado por nacer con tus poderes.
Raven fue poniéndose de pie. En su expresión ahora había furia ante las palabras que acababa de escuchar.
- No tienes una maldita idea de lo que estas hablando… ¡Acaso quieres vivir sin la capacidad de expresar emociones¡¡ Acaso quieres renunciar a lo que te hace humana¡¡¡NO ERES MAS QUE UNA ESTUPIDA QUE NO SABE DE LO QUE HABLA!
Raven ahora había incrementado su tamaño de forma repentina, en cara ahora habían al cuatro ojos completamente rojos y su voz ahora parecía ser de un verdadero demonio. Su capa ahora rodeaba todo su cuerpo y debajo de esta salían una infinidad de tentáculos. Por todo el estadio se escucharon gritos de horror de los espectadores que estaban viendo esto y Raven creyó escuchar el grito de alguno de sus amigos diciéndole que se detuviera, pero para ese momento ya no tenia cabida en su cabeza para nada y en ese momento se lanzo contra Redrum.
- Idiota
Los tentáculos lograron atrapar su pierna, pero algo entonces fue invadida por un horrible dolor. El dolor que sentía le parecía que solo podría existir si hubiera tomado un pedazo de hierro ardiendo y no se detuvo ahí, puesto que la sensación subió todo su cuerpo. Todo su cuerpo fue rodeado por esa terrible sensación, ese terrible dolor que parecía quemar todo su cuerpo, antes de caer al suelo, de nuevo en su estado normal pero tan débil que parecía que apenas podía mantenerse conciente. Redrum se rodillo frente a ella, moviendo su cabeza de forma desaprobatoria.
- Deberías saber que un demonio de baja categoría no puede tocar a sus superiores. Es cierto, admito que soy humana pero estoy por encima de ti, todo gracias a un ser superior que me preparo.
Redrum saco uno de sus cuchillos y comenzó a moverlo sobre el rostro de Raven.
- Creo que tendré que obligarte a recordar esto por las malas.
Por un momento estuvo demasiado cerca de usar su cuchillo, pero entonces escucho un extraño sonido. En medio de todos los gritos que se podían escuchar por las gradas, uno de ellos parecía ser demasiado extraño. Luego lo reconoció como el tipo de sonido que hace un rinoceronte.
El golpe fue directamente sobre su contrincante y la lanzo varios metros. El Chico Bestia fue entonces a ver como se encontraba Raven y se dio cuenta que todavía estaba conciente pero no podía moverse.
- ¿Estas bien? – Toco su rostro y se dio cuenta que estaba ardiendo terriblemente aunque no parecía tener ninguna clase de herida - ¿Qué demonios te hizo?
- Solo le enseñe que no puede luchar contra mi – Redrum nuevamente estaba de pie, sin ninguna señal que indicase que fue golpeada – y creo que tu también necesitas aprender esa lección tan importante para la vida.
De forma apenas perceptibles saco un de sus cuchillos y lo avento directamente donde estaba el Chico Bestia. Este llego a transformarse en un Chita y esquivo el cuchillo para luego lanzarse sobre Redrum. Esta se dedico a esquivar los ataques que le lanzaba sin demasiada dificultad y por momentos podía escuchar las burlas de esta mientras lo hacia.
- He de admitir que tienes bríos, lastima que no te servirá de nada…
Fue interrumpida por un fuerte golpe en el estomago que la dejo en el suelo. Pudo recuperarse a tiempo, y como solía hacerlo, lo hizo entre burlas.
- Buen golpe, buen golpe. ¿De donde sacaste tanta energía¿Será que te irrita la idea de que sufra otra conocida tuya¿Te culpas de lo que le paso a la otra chica?
- ¡No se de lo que hablas! – El Chico Bestia estaba impactado pero no lo demostraba.
- Vamos, a nadie le es un secreto lo que paso con la chica rubia, ya ni me acuerdo su nombre. Trágico, debo admitir que es trágico, se unió a ustedes para que fueran servidos en bandeja de plata pero se arrepintió a ultima hora e incluso se transformo en piedra para salvar esta ciudad y sus alrededores. Triste, triste, casi como sacado de la televisión. Aquí entre no, me contarías porque nunca la han regresado a la normalidad.
- ¡CALLATE!
- No logro comprender porque no la han regresado a la normalidad. Debería ser sencillo para ustedes, pueden llamar alguien con la tecnología o con la magia pero la han dejado ahí, como una estatua. ¿Será para recordarla tal y como esta? Personalmente creo que están convencidos de que ella los traicionara de nuevo y prefieren verla de manera idealizada…
- ¡TE DIJE QUE TE CALLARAS!
El Chico Bestia se lanzo transformado en un gorila y dispuesto a hacerla callar. Se lanzo de frente, preparándose para el golpe mas fuerte que jamás hubiera dado en toda su vida. Lanzo su golpe y fallo, solamente por muy poco pero fallo al final de cuentas y fue entonces que un fuerte ardor se dio en su pecho.
Dio dos pasos y se percato que Redrum estaba frente a el y de su brazo sobresalía algo. No tardo en darse cuenta que lo tenia escondido debajo de su traje y que lo había usado contra el. La pequeña espada que tenia escondida debajo del brazo era sumamente afilada y se percato de ello al ver la profunda herida en su pecho y que ahora le estaba causando tanto dolor que regreso a la normalidad sin desearlo. Redrum en tanto solo reía, moviendo su brazo armado de forma que parecía ser juguetona.
- No deberías enojarte tanto, solo estaba jugando contigo, ya sabes, un pequeño comentario de esos que la gente simplemente se avienta al azar para romper el hielo. Es obvio que esa chica te gustaba. Y que no le harías cosas horribles como golpearla en el estomago, la cara y en el estomago de nuevo para hacerle ver su propia sangre.
Mientras decía esto último golpeaba en varias partes de su cuerpo y luego le abrió una segunda herida, creando una equis en su pecho. Ahora estaba tirado en el piso y el dolor que la herida le provoco no le dejaba moverse.
- De hecho, creo que la querías tanto que me parece justo que tengas un tatuaje de ella. Deja que yo te lo haga, soy muy buena para ello – Redrum fue acercando su espada del brazo hacia su rostro – No te muevas
Aunque parecía que estaba por cortar su rostro, esta se detuvo y dejo su brazo suspendido en el aire. De repente se hizo a un lado y dejo al Chico Bestia en el suelo. En ese momento, Star Fire había logrado librarse de los Puppet Master y los muñecos y había ido en ayuda de sus amigos. Redrum se percato de esto y fue a recibirla.
Star Fire comenzó lanzando sus Star Bolts y lanzando rayos por los ojos, los cuales fueron esquivados por su contrincante. Cuando esto fracaso, ella bajo para pelear cuerpo a cuerpo. Entre ambas se dio un intercambio de ataques, todos estos esquivados por su contraria con dificultad. Por un momento Redrum parecía haber puesto en jaque a Star cuando saco su segunda espada oculta de su otro brazo y la obligo a usar sus manos para detener su ataque. Entonces fue que vio los ojos de Star iluminarse con gran intensidad.
El ataque dio en el rostro de forma directa y dejo a Redrum por el suelo dado la fuerza con que fue efectuado. Redrum no grito ni expreso ninguna emoción, solo se levanto y cubriéndose uno de sus ojos. Star Fire Se lanzo de nuevo contra ella, pero esta todavía podía pelear y consiguió contraatacar. Star pudo ver los efectos de su ataque, que habían quemado su mascara y ahora podía ver muy ligeramente parte de su cabeza, específicamente su cabellera, la cual identifico como castaño.
- Me has dado un buen golpe – La voz de Redrum era distinta, causada por un ligero desperfecto en su aparato y que ahora le daba un tono femenino a la voz mecánica – Lastima que no puedo dejar que disfrutes esto.
Esta lanzo su ataque y dio una patada al rostro de Star, quien recupero rápidamente pero su adversaria no estaba a la vista. Fue algo sumamente rápido, ni siquiera ella pudo reaccionar a tiempo. Lo último que sintió fue el golpe en el cuello.
Star Fire cayo de frente al suelo. Redrum se quedo mirándola, con una expresión en sus ojos que parecían expresar lastima. En su mano sostenía uno de sus cuchillos, el cual había usado para golpear con el pomo de esta la parte de atrás de su cabeza y dejarla inconciente. Fue necesario un golpe muy fuerte pero a la vez lo suficientemente cuidadoso para no terminar abriendo su cabeza. Dejo de verla por un rato y fue caminando hasta donde había dejado al Chico Bestia, quien trato de transformarse en una pulga para escapar, pero fue atrapado sin problema.
- Que bueno que podemos seguir conversando, y como veras ya no debes temer por otra innecesaria y molesta interrupción – Ella lo hizo ver hasta donde estaban Robin y Cyborg y se dio cuenta que estos estaban en serios problemas. Los muñecos y Gun Shoot no solo atacaban con demasiada fiereza sino que en la mínima sensación de desventaja estos atacaban a los rehenes – Ahora, transfórmate de nuevo para charlas con mas comodidad.
Sin estar seguro porque, este obedeció. El dolor le causaba una horrible molestia y al transformase las heridas le hicieron sentir un horrible escalofrío que recorrió su cuerpo. Volteo donde estaba Raven y se dio cuenta que todavía estaba conciente, pero esta estaba tirada y se retorcía constantemente a causa del dolor.
- Espero que entiendas esta situación: veras, se que no quieres que muera nadie y me temo que como va las cosas, tendré que hacer accionar la bomba y me temo que muchos morirán horriblemente. Nadie con tan buenos deseos como tu ha de querer tener eso en la conciencia, no a menos que quieras enloquecer y créeme que la conciencia es muy buena para causar la locura. Así que déjame proponerte un pequeño trato.
El Chico Bestia no estaba tan seguro de cómo habrá contestado por medio de su cuerpo pero seguramente y sin desearlo debió dar a entender alguna clase de interés puesto que esta continuo.
- Esto es todo lo que deseo: Sangre, un poco de miserable sangre. Solo necesito que me permitas derramar un poco de sangre, una pequeña herida, no más de cuatro centímetros y que la sangre que provoque toque mi rostro. Tal vez se oiga un poco extraño pero te garantizo que si me dejas derramar un poco se sangre, no accionare ninguna bomba. Te lo prometo.
No estaba seguro porque, pero parte de lo que le decía le parecía sumamente razonable. Tal vez era por la forma como lo decía o incluso porque realmente el estaba conciente de lo que esta le estaba diciendo. Hizo un movimiento con su cabeza de aceptación, al que Redrum reacciono con gran entusiasmo.
- Maravilloso, simplemente maravilloso. Será una verdadera lastima que tenga que pasar todo esto.
Sin ninguna clase de aviso Redrum comenzó a golpear con terrible maldad al Chico Bestia, todos estos parecían dirigidos al pecho y su estomago.
- Por cierto, me temo que olvide decirte una cosa. En efecto la herida que quiero hacer es pequeña, solo que quiero hacerla en un lugar especifico. Aquel que señala la equis que tienes en el pecho.
No tuvo tiempo de reaccionar cuando fue golpeado nuevamente. Redrum lo tomo de una pierna y comenzó a arrastrarlo hasta donde estaban la plataforma con la que esta habia entrado al campo y lo arrojo frente a una de las cajas. Trataba de transformarse pero no podía lograrlo, seguramente esas espadas que tenia en el brazo tenían otra sustancia en ellas. Esta se acerco a el y ahora tenia una de sus espadas en su mano y parecía lista para usarla.
- Sangre por sangre, diez mil vidas a cambio de una, un trato que sin duda aceptaras es fabuloso.
Redrum tomo su espada y con todas sus fuerzas atravesó su objetivo. El Chico Bestia había cerrado sus ojos y al no sentir nada los abrió de nuevo. Redrum estaba frente a el, sosteniendo su espada, la cual atravesó la caja que estaba frente a el. Cuando la saco, se dio cuenta que esta tenia rastros de sangre.
- Cuando te pregunte porque no habían logrado recuperar a Terra lo pregunte en serio – Mientras hablaba, Redrum acercaba la punta de su espada a su rostro – Si hubieran enfocado sus esfuerzos a esto lo habrían logrado. Realmente lo habrían logrado…
- ¿Qué…fue… lo que hiciste? – El Chico Bestia estaba agotado y el dolor del pecho se hacia cada vez mas fuerte. Redrum tomo un aparato que tenia en su cinturón y dio unas ordenes antes de contestarle.
- Lo que pactamos, un poco de sangre y dejar con vida a miles. Nunca dije en el cuerpo de quien y donde seria la herida – En ese momento el Chico Bestia sintió un dolor en el pecho aun mas fuete – Tal vez te sientas mal después y admito que suelo causar que la gente no piense cuidadosamente lo que elige, sobre todo cuando esta bajo el efecto de un ligero veneno, pero créeme hiciste lo correcto.
Redrum se alejo y dejo solo al Chico Bestia. Al verse solo decidió abrir la caja y con lo que tenia de fuerza en ese momento logro hacerlo. Robin y Cyborg apenas pudieron mantener controlada la situación, todo por los constantes golpes bajos de los soldados del caos, quienes atacaban a los espectadores y estos debían tratar de evitar que esto se transformase en una tragedia. Los mas de doscientos hombres que secuestraron el estadio se desvanecieron, exceptuando a los que quedaron inconcientes en el estadio.
Primero fueron a ver a Star Fire Y Raven. La primera seguía inconciente pero la segunda estuvo despierta toda la pelea, tumbada en el suelo. Fue Cyborg el primero en ver al Chico Bestia echado de rodillas mirando la caja frente a el. En cuanto se acerco suficiente para ver su contenido quedo completamente mudo, al igual que el resto de sus compañeros. Primero fue el dolor y luego la rabia, pero todos fueron afectados. Antes de eso, el Chico Bestia se quedo observando y comenzó a llorar impotente frente al cuerpo de Terra.
……………………………………………………………………………………………
- Fuiste demasiado severa
- No, solo he cumplido con lo que se me ha pedido
- Se perfectamente lo que te he pedido, pero no me sirve de nada si terminas dejando inútiles a los titanes. Por mas terribles o espectaculares que decidas hacer tus ataques, deber recordar que los quiero intactos físicamente y no quiero que los trates de hacer sufrir de esa manera tan innecesaria a menos que yo te lo ordene.
- ¿Dice eso por lo que hice con el Chico Bestia o es por Raven?
Hubo un momento de silencio entre ambo y los que estaban presentes no se atrevían a romperlo. Por un momento el de la mascara blanca observo cuidadosamente a Redrum quien mantenía la cabeza en posición cabizbaja.
- No debe preocuparse – Continúo Redrum – Nadie fue herido realmente de forma seria y estoy seguro que todos estarán listos a tiempo para continuar. La chica fue sacrificada como usted lo deseaba, además el despliegue de nuestras fuerzas, aunque algo excesivo tuvo los efectos deseados.
- Debo decir que ella tiene razón mi señor – Confirmo el Uroloki – nuestras fuentes confirman que hay una gran inquietud no solo en Jump City sino en todo el país. Al aparecer dos hombres en extremo peligrosos que se daban por muertos se ha perdido mucha fe por las autoridades, el despliegue de doscientos hombres ha demostrado que nuestras fuerzas son un ejército y ha activado la alarma en todo el país, pues creen que estos ataques se libraran en todo el país y posiblemente el mundo. Ni que decir de la derrota de los titanes en televisión nacional, no solo los han humillado sino que estan perdiendo la confianza de toda la ciudad a causa del miedo. Tal vez fue extremo pero el resultado fue completamente positivo para nosotros, puesto que el miedo ha rodeado toda la ciudad. Si no fuera porque lo tenemos a usted nos preocuparía que personas ajenas del escenario entraran pero gracias a…
El Uroloki callo al ver al de la mascara blanca. Nunca expresaba sentimiento alguno y cuando lo hacia era de forma imperceptible, ni siquiera su mascara llegaba a mostrar algo que se le pueda llamar sentimiento, pero no era necesario pues es fácil sentir cuando su señor se pone furioso y cuando es aconsejable cerrar la boca. Fue necesario un simple movimiento en sus manos para saber que la conversación había terminado y todos los presentes, incluyendo el mismo Uroloki se retiro de la habitación, todos menos Redrum que se quedo quieta y volviendo a mirar de forma firme a su líder como solía hacerlo.
El Uroloki fue el ultimo en salir y quien cerro la puerta. No se fue hasta que comenzó a escuchar sonidos detrás de esta. Le hubiera gustado saber de que estaban hablando, pues ser uno de los hombres mas poderosos del concilio nunca significo que conociese todos los secretos y en ese momento se desarrollaba uno mas. Cuando escucho música de violín detrás de la puerta se dio cuenta que no valía la pena seguir escuchando. Se dio la vuelta y se alejo, meditando un poco sobre las cosas que sabia que estaban muy cerca de ocurrir.
El palabrerio de Ulick
Después de terminar este episodio no me siento con ánimos de hacer muchos comentarios. Este fue un capitulo muy difícil de escribir por las cosas que ocurren aquí. Lo de Terra no fue para nada agradable, de hecho me desanimo mucho, pero aunque lo intente no pude evitarlo. Solo espero que esto no termine causando que me quede sin lectores.
Espero que la historia siga siendo de su agrado y que todavía estén dispuestos a seguir con la historia. Por ahora les dejo con la historia extra y agradezco a todo el que me esta leyendo. Recuerden, cualquier recomendación o comentario que me quieran dar, incluyendo quejas y comentarios de enojo o tal vez alguna felicitación, pueden mandarme un Review.
Hasta el próximo capitulo.
Antes que se me olvide, la canción es un fragmento de la canción de Andre Bocelli "Con te Partiro"
Historia Extra
Arthur Collins no dejaba de maldecir para sus adentros mientras subía las escaleras. Ese día el ascensor estaba descompuesto y tenía que subir los nueve malditos pisos de ese maldito hotel de mala muerte. Ese maldito de Laurence, con todo el dinero del mundo, se le ocurre hospedarse en el hotel más viejo que podía existir. Estupido Laurence, estoy harto de que hagas esto, eso era lo que se decía mientras descansaba entre piso y piso.
Laurence Manning, un fotógrafo excepcional y un viejo amigo. Ambos se conocían desde su infancia, y aunque no tenían mucho en común, siempre han sido casi inseparables. Laurence siempre fue un artista, ya sea con la pintura o con la fotografía, la cual fue la que le dio la fama. Arthur también era un visionario, no como artista sino para reconocer a quienes serian grandes artistas, por lo que en su momento hipoteco su casa para ayudar a su amigo en su carrera. A la larga, ambos se volverían ricos y afamados, uno como un artista respetado por su retrato del ser humano, mientras que el otro lo haría como un agente artístico.
Sin embargo, con el tiempo las cosas se pusieron frías entre ambos. Manning, como casi todo el mundo sabia, era un amante del ocultismo y de los viajes a lugares exóticos. En ocasiones se iba sin dar aviso y no regresaba hasta incluso pasado un año. No le gustaba dar cuentas de su trabajo y se metía en múltiples problemas que Collins debía reparar. Y luego vinieron las fotografías Oscuras, como algunos las llamaban, aunque Collins las consideraba mas bien Grotescas. Era cierto, eran muy buenas fotografías, pero causaban que el estomago se revolviera al verlas y solo causaban problemas, como las constantes amenazas de países cuyos nombres ni siquiera podía pronuncias y los juicios internacionales en donde las usaban de pruebas para crímenes de guerra, y que por cierto tanto el como Manning debía asistir por ser los que las dieron a conocer. Lo peor no era eso, sino lo que el público desconocía por pura suerte: Manning estaba volviéndose loco.
Solo el se dio cuenta en su momento. Su comportamiento se hacia mas y mas erratico y se encerraba por varios días. Luego vinieron las alucinaciones y el comportamiento violento. Solo Collins podía acercársele, de hecho Manning ahora solo hablaba con el. Luego de desaparecer una semana, Laurence lo llamo a su casa suplicándole ayuda. Ahora ahí estaba, subiendo las escaleras de ese hotel lleno de cucarachas y pensando como ayudarle.
Se tomo un rato para encontrar su habitación, la cual curiosamente era la que tenia la puerta mas repugnante. Le basto un empujón para abrirla, no sabia si porque estaba abierta o porque el picaporte ya no servia. Un olor repugnante llego directamente a su nariz e incluso sus ojos lloraron por el hedor. Este maldito edificio debería ser derribado ya mismo. Asomo su mirada y se dio cuenta que sin duda su amigo había estado ahí dentro. No había pared en todo el cuarto que no hubiera sido pintado con un montón de dibujos y garabatos, todos cortesía de sus constantes viajes por el mundo. Se adentro de la habitación y escucho un grito de un hombre desesperado gritando incoherencias
- ¡HUSHASTAS MAZERTATUS MAHYARYA¡YAMERLATUS MAZERTATUS LEGIUS ERTAS PRABINTACULASH NATIR!
El que gritaba tenía la apariencia de estar muy enfermo. Estaba muy pálido, su cabello se había caído y tenía una mala imitación de barba. Al principio grito completamente decidido pero al ver a Collins, su expresión cambio al de un hombre derrotado, cansado, con los ojos llenos de lagrimas. Cayó a los pies de su amigo y comenzó a llorar.
- Gracias a dios, viniste a buscarme.
- ¿Acaso dudaste que lo haría? – le respondió con tono paternal, completamente asombrado del horrible estado de su amigo - ¿Qué te paso?
- Lo lamento, lamento haberme ido… pero debía esconderme. Creí que aquí estaría a salvo. Pero ya se que no es cierto, no estoy a salvo en ninguna parte. Me persiguen, me persiguen y quieren que haga algo horrible….terriblemente horrible.
- Por favor, tranquilízate y explícame que ocurre.
- Son las fotos… las fotos. Se cuanto las odiabas pero debía tomarlas. Por años busque, por todo el mundo busque y dios es mi testigo, un lugar donde pudiera encontrar conocimiento realmente antiguo… y lo hice… ¡lo hice!... fue en Asia, aunque no era un conocimiento oriental, sino que esta en todo el mundo… ¡Están en todas partes!... pero no me importaba eso entonces, solo quería conocimiento.
Laurence estaba poniendose errático. Cada vez balbuceaba mas, y su manos y piernas temblaban.
- Me pusieron condiciones… esas fotos… ellos querían que tomara fotografías, todas las que pudiera… pero las temas… Si a ti te molestaban… ¡Las odiaba¡Odio esas malditas fotos, pero era tan buena la recompensa. Solo que ahora… me piden que tome unas ultimas fotos, el tema… dios, es horrible. Solo tome unas cuantas y las tire a la basura… ¡Y ese maldito llego!
- Cálmate por favor, solo explícame que fotos y de quien hablas.
- ¡El de la mascara blanca¡De el hablo! Vino acompañado, El, su hija y el que esta a su derecha… Me amenazaron con represalias si no las tomaba todas y si no las exhibía pero no puedo… son tan horribles. Desde hace una semana que huyo de ellos, estudiando lo poco que se de su lengua, llenando de amuletos el lugar, pero se que estoy perdido…no logro aprender la lengua, estoy perdido… me va a matar. Por favor, necesito que me lleves a un lugar donde pueda estar a salvo.
Mientras que escuchaba eso, a Collins le era obvio lo que ocurría. Finalmente se había vuelto un esquizofrénico y necesitaba de ayuda urgente. Sabia que debía de hacer. Pero era tan difícil de hacer.
- Te ayudare, como siempre te ayudare. Solo necesito que me dejes inyectarte algo. Algo me dice que con esta porquería de lugar, la posibilidad de que te hayas enterrado con un clavo o algo es muy alta. No te preocupes, se de un lugar remoto donde te puedes ocultar. Luego de unos meses se que te dejaran en paz y podrás volver a casa para que cenes con mi familia. ¿Recuerdas eso¿el estofado que prepara Joan?
- S-si… Lo recuerdo
- Pues muy pronto volverá a ocurrir, solo debes dejar de ver a tipos con mascaras blancas.
- ¡CREES QUE ESTO ES UNA MALDITA BROMA! – Grito enloquecido - ¡ESTAN LISTOS PARA DESTRUINOS A TODOS¡YA HAN LO ENCONTRADO, LA LLAVE HA SIDO ENCONTRADA Y MUY PRONTO LA USARAN¡HA LLEGADO NUESTRO FIN, NO NOS QUEDA MAS QUE UNO O DOS AÑOS! NOS ACABARAN A TODOS!
-¡CALMATE MALDICION! – Al gritar esto le enterró la aguja en el brazo – ¡es una maldita alucinación¿No será que consumes drogas¡porque es lo único que falta! Me estas arruinando la vida, para tu información, de no ser por mi familia me habrías arrastrado a tu maldita locura.
Manning no contesto. Con todo, era sumamente dócil e inyectarle no causo ninguna dificultad, lo que realmente fue difícil fue llevarlo a la limosina. Se dio cuenta lo realmente mal que estaba Manning pero no podía llevarlo al hospital, por lo menos no todavía. Se vería muy mal, la última vez que paso eso fue por un actor con sobredosis de drogas. Debían hacer que se disimulara lo más posible. Como sea, decidió regresarlo a su casa y regresaría en la mañana. De seguro ya habría pasado el efecto del calmante pero con lo débil que se veía no saldría huyendo. Meterlo a casa fue igual de difícil que bajarlo por el hotel pero logro llevarlo a la habitación con ayuda de su chofer. Al día siguiente volvería y se encargaría de el. De una u otra manera se encargaría de que se recuperase lo más pronto posible.
Arthur Collins, agente de arte, viejo amigo de Laurence Manning, el fotógrafo del horror, yacía sentado en un sillón llorando. Había ido en la mañana con el propósito de llevar a su amigo a un centro que le garantizo confidencialidad y cuando entro a su habitación, encontró una escena tan horrible como las fotografías de su amigo.
Por casi tres horas tuvo que contestar una infinidad de interrogatorios y ver que el cuerpo de su querido amigo fuese retirado. De no ser por su reputación habría sido llevado a la estación pero le tomaron la palabra. De todas maneras no había mucho que investigar, sin duda esto se trataba de un suicidio, el más horrible suicidio que haya visto.
Collins no podía evitar recordar el horrible rostro lleno de dolor que encontró, el escenario que le rodeaba, todo lo que vio y que casi lo hizo vomitar. Estaba sentado en una de las sillas cuando encontró una vieja caja de zapatos. Le llamo la atención que nadie se tomase la molestia de investigarla por lo que concluyo que no debía ser nada importante. La tomo entre sus manos y al abrirla su corazón casi se paralizo. En ella se encontraban tres de las fotografías mas horribles que haya visto en toda su vida y una nota que tenia escrita una dirección y debajo de esta la palabra Infierno.
Reconoció el lugar como una bodega, por lo que se imagino que debían haber mas imágenes en ella. Toda la semana que siguió se dedico a reflexionar sobre lo que había ocurrido. Unos meses atrás había sido constantemente presionado para saber si Manning estaba preparando una nueva exposición y ahora que estaba muerto, el mismo hombre se dedico a llamar de forma mas seguida que nunca. Al principio no quería pensar en ello, pero las constantes presiones lo hicieron considerar rescatar las últimas obras que este llego a tomar. La idea era desagradable, puesto que se trataban de las fotografías mas repugnantes que hubiese visto en su vida. Luego estuvo la cuestión de si venderlas al hombre al hombre que le llamaba todos los días.
- Al diablo – Dijo finalmente después de casi tres semanas de la muerte de su amigo – Las pondré en subasta. Si el imbécil de Titus quiere esas fotografías que las compre como todos los demás.
