Bien, reconozco que he tardado más de lo que debia, ya podéis darle las gracias a MAEC por recordarme de forma tan efectiva que os debia a todos un capitulo, pero en mi defensa tengo que decir que este capitulo no me quedaba como queria que quedara y por eso he tardado más de la cuenta en darlo por terminado, y ahora a las dudas:
tercy-S-Scloe: tus sugerencias son muy buenas pero como tú misma dices no le pegan a Snape, por lo menos todavía nop. Ya tendrá tiempo más adelante para demostrarle a Hermione que tiene su corazoncito
Annie Ryddle: la parte del beso fue el sueño de Snape, el resto fue más o menos lo que pasó
Sailor Alluminem Siren: sip tienes razón, es un poco difícil imaginarse a esa pareja por la diferencia de edad, pero por eso puse también que los magos tenian una vida tan larga, en unos años apenas si habrá diferencia porque Hermione crecerá y él seguirá igual
Caro-Snape: acepto mi culpa y la maldición que me mandas, en idioma de Mordor para que haga más efecto
willow black: tu deducción con la madre de Miniver muy buena pero te ha fallado el tiempo, Draco vio a una muggle el verano pasado y por eso se hizo bueno, según tu teoria Eduard tendría como mucho dos años y no podria estar en Hogwarts
Y gracias a MarisolBlack, Malu Snape Rickman, supermama, Rocio, SraMalfoy, pupi-chan, amsp14, Azaleadm, HoneyBeeM, caricatura, D.N.Angel girl, MeilinSnape, lumarana, Nocrala, Elanor Black por acordarse de darle al botoncito y no mandarme ningún maleficio
7. Eligiendo entre lo malo y lo peor
"... un chico de su edad ...hombre demasiado mayor...una alumna ...pervertido..."
Hermione podía escuchar las voces de sus padres a lo lejos mientras ella se dedicaba a estudiar una vez más el conocido techo de la enfermería. No necesitaba escucharlos correctamente para seguir su razonamiento, era el único razonamiento lógico y correcto que cualquier persona en su sano juicio haría. Por un lado tenia a un chico apuesto, rico y de su edad, por el otro a un hombre demasiado mayor y demasiado amargado. Para sus padres no había duda: Draco Malfoy era la respuesta. Pero ella no lo tenia tan claro, todavía sentía aquella náusea en el estómago ante la sola idea de casarse con Draco y caer en las manos de su padre tan fácilmente. Pero ¿Snape¿era ese hombre capaz de querer a algo que no fuera una Orden de Merlín? Aunque lo que realmente tenia que preguntarse era ¿por qué querría Snape casarse con ella? El profesor y sus motivos seguían siendo un completo misterio para ella.
"Parece que ya te has despertado querida¿te encuentras mejor?"
"Si señora Pomfrey fue sólo un desmayo"
"Demasiadas emociones para tomarlas con el estómago vacío. Lo mejor será que bajes a desayunar" – la enfermera sonrió ante la cara de sorpresa de Hermione –"No pongas esa cara querida, ya sabes lo rápido que vuelan las noticias en esta Escuela y lo tuyo es lo mejor que he oído en años¿a quién vas a elegir?"
"¡Morgana santa¿Lo sabe todo el colegio?"
"Las buenas noticias vuelan rápido mi dulce ..eh...arbusto florido" – dijo Draco Malfoy en su tono más empalagoso caminando hacia ella seguido de sus padres. –"Ya he visto a tus padres, para ser muggles parecen que tienen educación quizás incluso los invitemos a casa alguna vez. No muy a menudo claro, los Malfoy no alternan con muggles"
Y antes de que Hermione pudiera lanzar una mirada de advertencia ante las ofensas que salían por esa boca viperina en presencia de sus padres, Draco se apoderó de su mano y girándola, le lamió seductoramente la muñeca. La sensación de náusea se incrementó tanto que Hermione tuvo que taparse la boca con la otra mano.
"Te ves pálida, mi ratoncito será mejor que descanses" – Y sin ni siquiera mirar a los padres de Hermione, Draco salió petulantemente de la habitación
"¿Quién...quién era ese ...ese...individuo?" – protestó encolerizado en señor Granger una vez que encontró las palabras
"Ese papá, es el mago con el que hace un momento querías que me casara"
Por una puerta oculta, Draco entró en las habitaciones de su mentor y fue directo hacia la botella de whiskey. Severus se limitó a sonreírle sentado a la mesa ante su desayuno. Siendo la nueva comidilla de todo Hogwarts no pensaba dejarse ver a menos que fuera indispensable. Todavía tenia que buscar una razón creíble para haber hecho semejante proposición sin descubrir ni su coartada ni la de Draco.
"Deduzco que ya hiciste tu presentación a la familia"
"He insultado a sus padres varias veces por minuto y casi consigo que vomite. Creo que he hecho una primera impresión inmejorable"
"¿No has sido demasiado obvio? No deben sospechar nada"
"Tranquilo, he actuado como todo un Malfoy. Si mi padre hubiera estado presente estaría orgulloso de mi" – dijo Draco mirando con pesar la botella ahora vacía –"Pero sigo sin ver por qué tomarnos tantas molestias por Granger. Que se case con Potter, Fudge no pondrá ningún impedimento a la boda del chico maravilla con su amiguita del alma. Incluso lo declararía fiesta nacional"
"No"- Draco se volvió para mirar a Snape, algo no encajaba en esa historia. ¿qué tenia de malo su idea? Se ahorrarían un montón de molestias, además por qué tenia que ser precisamente él la alternativa de Granger. Ahora que había tenido tiempo para pensar en el plan sin las prisas de la última noche, algo no le encajaba del todo...¿seria posible?
"¿Por qué quieres casarte con ella?" – la pregunta salió como un disparo a bocajarro
"Porque no debe casarse contigo. Tu mismo dijiste lo que le haría tu padre"
"Si, ya se todo eso. Pero nosotros somos Slytherin no Griffindors, no actuamos de forma heroica ni altruista"
"Que tu conciencia descanse en paz Draco, no eres ni un héroe ni una hermanita de la Caridad" – Draco sonrió ante el extraño cumplido, viendo cómo Snape esquivaba tener que dar una respuesta con tanta maestría
"Yo no, pero y tú¿por qué quieres ser un héroe?"
Esta vez Severus se levantó y Draco dio un paso atrás asustado. Había cruzado una de las muchas líneas que tenia Severus Snape de forma consciente y ahora lo iba a pagar dolorosamente. Para su sorpresa, Severus sólo encendió el fuego de la chimenea y se quedó un rato mirando las llamas en silencio. Estaba a punto de tomar ese silencio para huir como una buena serpiente cuando Severus habló, más para si mismo que para quien le escuchaba.
"Quizás porque ya estoy harto de ser el villano. Porque ya expié mis pecados y pagué con sangre mis errores. Quizás porque incluso yo tengo derecho a soñar con un futuro"
El profesor volvió a guardar silencio con la mirada perdida en las llamas y Draco abandonó la habitación sin un ruido
Por supuesto, Hermione no bajó al Gran Salón aunque realmente se estuviera muriendo de hambre, sino que se fue directamente a su habitación después de despedirse de sus padres. Volverían al día siguiente a primera hora, para estar presentes en la Ceremonia de Pedida, y ella tenia lo que quedaba del día para decirse entre sus dos pretendientes. La visita de Draco a la enfermería le había dado una idea clara de cómo seria su vida siendo la señora Malfoy y, dejando aparte los planes que el señor Malfoy tuviera o no para ella, no le había gustado nada. ¿Seria su vida como la señora Snape mejor?
"Hermione¿podemos pasar? Nos hemos enterado de todo, a decir verdad no se habla de otra cosa en todo el Colegio" – se oyó la voz de Harry desde el otro lado de la puerta
"Si claro pasad" – dijo sentándose en la cama. Ginny entró corriendo para abrazarla mientras Harry se sentaba en una silla y Ron se quedaba apoyado en la pared –"un momento¿cómo podéis estar en el dormitorio de las chicas"
"¿eh? Ah, eso, McGonagall ha cambiado el hechizo sólo por hoy dadas las circunstancias" – comentó Harry –"¿es cierto verdad? Tienes que casarte"
"Mañana es la Petición oficial y tengo que dar una respuesta"
"Draco o Snape, no me gustaría estar en tu lugar por nada del mundo"
"Gracias por los ánimos Ron, como siempre sabes qué decir" – riñó Ginny –"Veamos por un lado tienes a Draco que es ...Draco y por el otro tienes a Snape que es ...Snape"
"Tú tampoco eres de mucha utilidad hermanita"
"Bien, vale dadas las circunstancias yo elegiría... "- Ginny se mordisqueó un mechón de pelo mientras pensaba –"a Draco"
"¿Malfoy?" – protestó Harry
"Ginny!" –protestó Ron
"Dejadla hablar, necesito ayuda ¿recordáis?"
"Draco es joven y guapo en eso gana a Snape por goleada"
"No quiero elegir a un marido por el físico, seria algo muy superficial"
"Si claro, te vas a casar porque te enamoraste de golpe de uno de ellos"
"El sarcasmo no es lo tuyo Ronald" – Ron cerró la boca, cuando Hermione lo llamaba así significaba que estaba a punto de meterse en un lío muy gordo –"Además el padre de Draco es un mortifago, lo mas probable es que me entregue a Voldemort después de la boda"
"¿Y Snape no lo haría también?"
"Harry, sabes tan bien como yo que el profesor Snape ya no es un mortifago, es de la Orden"
"Oh vamos Herm, no creerás que Snape está haciendo todo esto para protegerte de Lucius Malfoy"
"Reconozco que suena algo extraño pero ¿por qué no? Estoy segura de que hay algo bueno escondido en él" – siguió Hermione terca
"¿Desde cuando se ha convertido en tu héroe?" – protestó Ron
"Seamos prácticos"- intercedió Ginny –"Aceptemos que Snape quiere protegerla¿no lo haría también Draco¿no protegería a su esposa?"
"¿Y a ti qué te ha dado hoy con Malfoy?" – protestó Ron mientras Ginny se sonrojaba
Después de toda la mañana discutiendo los pocos puntos buenos y los infinitos malos de cada candidato sin llegar a ninguna parte, Hermione volvió a quedarse sola mientras sus amigos iban a almorzar. Le dolía la cabeza de tanto pensar y se estaba empezando a desesperar. Quizás lo mejor seria tirar una moneda al aire y que la suerte decidiera su destino.
"Em...¿hola?...¿Granger?...digo ¿Hermione? ...digo"
Curiosa por tanto titubeo, Hermione abrió la puerta para encontrarse con el aquel chico rubio que había visto castigado con Snape unas semanas atrás
"¿Si¿te conozco¿querías algo?"
"¿Eres tú la que va a casarse?"
"Mira, no tengo tiempo para cotilleos, no sé cómo has conseguido entrar en la Torre siendo de otra Casa y no me importa. Mi vida es mía y no tiene por qué interesarle a nadie más, así que déjame en paz"
"No, espera por favor"- suplicó Miniver temiendo que le cerrara la puerta en las narices –"Tengo algo que decirte, algo sobre Snape"
"¿De Snape?" – Hermione miró al chico y recordó su extraño comportamiento de aquella tarde –"Esta bien, pasa"
"Soy Eduard Miniver, de Huffelpuf, 2º año" – se presentó rápidamente –"y sobre cómo he entrado. Escuché a McGonagall decir que había quitado las guardas en tu cuarto, así que les seguí hasta la Torre, cambié mi insignia de Huffelpuff a Griffindor y entré un rato después tras un grupo de primer año. El cuadro me miró raro, pero al ver mi insignia no dijo nada"
"Vaya, eso es...muy inteligente"
"¿Para un Hufflepuf?" – sonrió Miniver y Hermione le devolvió la sonrisa, le estaba empezando a caer bien aquel chico
"Pero ¿para qué has venido, Eduard¿Qué sabes tú de Snape?"
"Es que se me había ocurrido que... ya sabes Draco Malfoy es muy popular entre las chicas... y Snape es siempre tan...tan... sólo quería que supieses que no es una mala persona"
"¿Has venido a decirme que según tú Snape no es una mala persona?"
"Será mejor que te lo cuente todo. Yo he vivido siempre como un muggle, en Chelsea con mi madre"- bajó un poco la cabeza triste –"ahora sé que mi padre no murió en un accidente de coche, lo mataron los mortifagos antes de que yo naciera. Por eso mi madre nos escondió todo este tiempo, incluso ahora sigue en Chelsea como una muggle. Quería decirte que Snape venia a veces a hablar con mi madre, a contarle cosas sobre este Mundo supongo, no sé de qué hablaban sólo que cuando él se iba mi madre sonreía. Creo que Snape la salvó, nos salvó, de que nos mataran como mataron a mi padre" – Hermione se había quedado sin palabras ante la confesión de Miniver – "Cuando vine a Hogwarts y le conocí, no me dio miedo como a los demás porque yo conozco al verdadero Snape. Debajo de tantas capas de mal genio hay cosas buenas. Es fácil amargarse y enfadarse con el mundo cuando estás solo, cuando crees que nadie te quiere, que no le importas a nadie. Quería que lo supieras antes de que tomaras una decisión"
Miniver se levantó, volvió a sonreír a una Hermione que seguía sentada en la cama procesando la información y la dejó de nuevo sola con sus pensamientos. Quizás Miniver tuviera razón, recordó su primer año. Si no hubiera sido por su amistad con Harry y Ron hubiera terminado amargada y sola. Es muy fácil enfadarse con el mundo cuando te sientes solo.
Hermione suspiró, añadió las palabras de Miniver a la lista de cosas buenas de Snape y se dejó caer en la cama con un súbito sentimiento de alivio.
Dudas, sugerencias y maleficios por no actualizar al botoncito de siempre
