Disclaimer: Ustedes saben bien que Slam Dunk no me pertenece. Ni sus personajes. Solo al gran Takehiko Inoue. Solo este fic es mío.
N/A: Antes que nada es mi primer fic yaoi de Slam Dunk uu ya que me encanta este género quise probar a ver como me va, espero sus comentarios.
Negro y rojo
Capítulo 4: El inicio.
El chico de lentes se sentía algo pesado. Mientras se dirigía a la universidad ya que necesitaba ir a su biblioteca –vale decir que ingresó en Shintai con excelentes notas, a estudiar medicina, para luego especializarse en Psiquiatría- recordaba todo lo ocurrido el día anterior.
El deseaba saber como se encontraban sus anteriores compañeros. Se había esforzado en adelantar sus trabajos y estudios para apartar un día. Y ese día solo deseaba pasarlo en Shohoku…
Vaya sensible que era. Ni dos meses y ya extrañaba a todos como si tuviera una eternidad sin hablarles.
Claro, no todo podía salirle a pedir de bocas. No a él. Apenas había llegado y ya veía una camilla que trasladaba a Mitsui…¡Su mejor amigo¡Solo tenía cinco minutos de llegar al colegio simplemente de visita y ya tenía que estar muriéndose de la angustia por alguien que quería!
Sin perder tiempo los siguió. Por sus pasadas alergias la enfermera le reconoció al instante. Ni recordó buscar a sus viejos amigos en el receso –solo tropezó con Ryota ya que Mitsui se había quedado dormido y ni queria molestarle de nuevo- su atención se concentró única y exclusivamente en Mitsui.
Su visita no fue tan mala. Se alegró un poco al ver a Sakuragi tan contentó, incluso le arrebató sus nuevos lentes y se puso a jugar con ellos. Imaginaba que la relación entre Ayako y Ryota era mejor, y en efectivo lo era, juzgando el hecho que los abanicazos hacia el defensa habían disminuido notablemente. Rukawa…igual que todas las veces que lo veía…
Mitsui estaba también allí –solo Dios sabría las insistentes súplicas que le hizo con tal que no fuera al entrenamiento ese día...- obviamente acabado. Solo le quedaba apretar con furia sus puños cada vez que veía el empañamiento de sus zafiros producto de la tan reciente y brutal tragedia que pocas horas antes había vivido.
- "Rukawa…¿En que piensas?" – su atención se desviaba con cierta constancia al super-rookie. No pudo pasar desapercibido ante sus ojos el simple hecho de no enfrentar a sus rivales a la cara.
En especial a Mitsui y a Sakuragi…
Decidió esperar a Ayako y a Haruko, ya que estas por ser las managers del equipo debían arreglar lo mejor posible el gimnasio para el próximo entrenamiento. Ya cuando Ayako echaba llave a las últimas puertas salía una Haruko algo preocupada.
- ¿Pasó algo? – preguntó la manager principal.
- Nada importante… solo que Rukawa dejo un pequeño bolso y quería devolvérselo, pero al parecer se fue… - dijo la chica con un dejo de decepción, dándoselo a Ayako. Le frustraba haber perdido tan crucial oportunidad de hacer algo por el chico de sus sueños.
- Todavía puedes alcanzarlo – dijo con ánimo un chico de lentes mientras se aproximaba a ellas – hace pocos segundos lo vi saliendo del colegio al igual que a Hanamichi.
- ¿De verdad? – Kogure le dijo la dirección que había seguido. La chica de la emoción corrió sin percatarse que no llevaba consigo la razón por la que perseguía a su amada estrella del Shohoku. Menos de un minuto había pasado y ya estaba junto con ellos de nuevo.
- Eres un caso perdido Haruko – bufó la de rizos - ¿Cómo se te pudo olvidar esto? – dijo casi tirándole el pequeño bulto.
- Dios…soy tan despistada – reconoció la chica casi al borde de las lágrimas.
- Tranquila, el lunes se lo regresas.
- Pero…a lo mejor lo necesita este mismo fin de semana… - dijo haciendo un puchero señalando la pertenencia de Rukawa.
- Tengo una idea…Ayako ¿Tienes el teléfono de Rukawa? – preguntó Kogure con aire casual.
- ¡Buena idea! Haruko, llámalo y si necesita con urgencia el bolso le propones un encuentro y listo – dijo con una sonrisa algo pícara a la cual Haruko se ruborizó en el acto.
- Esto…bien…apenas llegue a mi casa le llamo… - decía mientras que a cada palabra su rubor aumentaba notablemente.
Y se despidieron hasta una próxima y pronta visita asegurada por el joven universitario. Ese mismo chico caminaba, a sabiendas que algo no estaba bien.
oooooooooooooooooooooooo
Rukawa por un momento sufrió un gran sobresalto, eran increíblemente extrañas las veces que sonaba su teléfono -es más, era tan poco su uso que en esos mismos días lo planeaba quitar- pero luego se relajó –y hasta podría decirse que sonrió levemente- al adivinar la identidad de quien le llamaba.
- Aló…¿Quién habla? – dijo secamente. Siempre contestaba sus llamadas así cuando no sabía quien se encontraba al otro lado. Y tampoco cambiaba mucho la sequedad de su voz al saber quien era.
- ¿Ru…Ru…Rukawa¿E…e..eres tú? – escuchó claramente la temblorosa y vacilante voz de la hermana menor del anterior capitán.
Cualquiera que lo conociera hubiera salido corriendo espantado, y con el mayor de los horrores al ver la amplia y notable sonrisa del pálido chico. Era la primera y más que segura última vez que se alegraría de escuchar la irritante voz de esa mocosa.
- ¿Qué quieres? – no dejó que la alegría se percibiera en su voz.
- Este…verás…tú…eehh…yo – estuvo tentado de tirar el teléfono del acceso de ira que le entró. No soportaba a las personas tan dubitativas. Siempre le gustaba que le hablaran con firmeza, y que en persona pudieran darle la cara.
Aunque no podía culpar a la pobre mocosa. A veces el mismo se sorprendía de la frialdad que destilaban sus ojos las ocasiones en que se veía al espejo. Pero ese no era el punto.
- ¿Qué quieres? – preguntó intentando mantener el mismo tono frío y neutro de su voz.
- Es que dejaste en la puerta de los vestidores un bolso, tiene tu nombre así que es tuyo ¿verdad? – "¡Por supuesto que es mío estúpida¿Acaso conoces a otro Kaede Rukawa que pertenece al equipo de basketball?" le provocó por un momento colgar, pero su inquebrantable racionalidad estaba por encima de todo.
- Si – no le era posible sostener una conversación con ella, simplemente no quería. Mañana a pesar de ese hecho no le quedaba otra alternativa.
- Entonces…veras…si…si..si tu….lo…
- ¿Si? – "Vamos, resiste no puedes cortar…"
- ¿Eh...necesitas el bolso este fin de semana? – la chica rogaba una respuesta afirmativa de su parte.
- Así es.
- Si es así… - Haruko no era tan fría como Rukawa, por lo que la excitación y felicidad se evidenciaron en su tono de voz - ….¿Te parece buena idea encontrarnos en alguna parte?
- Bien. Digo que nos veamos en…. – le dió una dirección, una muy clave para él - ¿sabes donde es?
- ¡Claro! Aunque…
- Te veo allí a las 11:30 AM. Hasta luego – y colgó sin dejar espacio a réplicas. No llamó. Por favor…esa chica estaba tan enamorada de él que jamás se atrevería a contradecirle algo. Ni protestó por el lugar –era una vieja y descuidada plaza que quedaba muy cerca de donde el practicaba- ni por la hora –la cual no era muy propicia para la cita que de seguro ella imaginaba- mejor para él.
La carnada estaba más que asegurada.
Todo se encontraba definido. Quedaba esperar al día siguiente.
Antes de dormir fue al baño. El espejo le mostró algo ineludible e inquietante. Una torva sonrisa presente en su rostro. Una muy demente sonrisa.
Tanto que casi partía el espejo.
Vaya…al parecer era tiempo de un análisis introspectivo y uno muy bueno, ya que se había dado de golpe con dos sentimientos, formas de pensar muy distintas de la otra. Como en todos los seres humanos en el habían dos yo. El yo que era compasivo y el otro que era la inversa.
En una persona normal, ambos yo luchaban, e incluso en varios casos se mezclaban dando paso a personalidades únicas y consistentes, o también se presentaban personas que le daban más prioridad a uno de esos yo, ya sea el correcto o bondadoso, o el ambicioso y malicioso.
Las otras opciones que quedaban eran, quienes lograban mantener una posición neutral, o el más difícil de los casos.
Aquellas personas en donde esos dos lados eran muy distintos uno del otro y ninguno de los dos se podía ignorar. En donde en las situaciones más riesgosas estos se turnaban según el motivo, y el elegido dominaba la conciencia y los actos de la persona a plenitud.
Y esto le sucedía a aquel chico. Por un lado tenía ese lado compasivo que le hacía sentir mal por lo que tenía que hacer. Ese que no le permitía ver a la cara a quienes lastimaba –si es que conocía a los más cercanos a sus víctimas- y el que le hacía ver la grave situación en la que se encontraba. Sobre todo, el que le hacía dudar…
Y el que le confundía, o el culpable de que Hanamichi Sakuragi le confundiera.
Sin embargo no podía olvidarse del lado que más gobernaba su vida. Ese lado frío y perverso. Ese lado que utilizaba como herramienta eficaz para "ganarse" la vida. No obstante esa frialdad, y las tantas ocasiones en las que parecía carecer de toda clase de humanidad posible jamás le habían incomodado.
Jamás hasta ese instante, nunca había llegado a asustarse de si mismo.
Cuando confrontó su rostro, no se asustó, se espantó
No halló mejor opción que mojar cada una de sus facciones con agua fría. La paranoia le estaba sometiendo. Al parecer ese análisis introspectivo le confundió aún más –francamente no lo creyó posible- que antes.
En las sábanas, la suavidad de la almohada le permitió tomar una clara decisión sobre sus sentimientos.
oooooooooooooooo
- ¡Rukawa! – Corría una Haruko emocionada hacia el lugar de encuentro - ¿Cómo…? – al instante se calló ya que el nombrado no estaba allí.
Sintió como algo atravesaba su garganta. No lo veía, ella había cumplido con la hora.
- "No, son las 11:15, tu fuiste la que viniste temprano" – reaccionó al ver su reloj. Por tonta casi estuvo a punto de echarse a morir.
Buscó un lugar donde sentarse. Al ver mejor el lugar un pequeño se asombró. Era una cancha vieja, sucia, descuidada y con un ambiente muy pesado y solitario. Al segundo lo que más le dolió es que la explanada era de basketball, para una fanática como ella le pareció un certero golpe a sus compañeros del Shohoku, incluyéndose también.
- "11:20, ven por favor" – tal vez estaba muy ansiosa, todavía faltaban 10 minutos.- "¿Por qué Rukawa me habrá invitado a un lugar como este? Se que a ambos nos gusta el basketball" –posiblemente la única cosa que tenían en común- "Pero…me hubiera gustado…" – ella quería un lugar más…¿romántico? – "Aunque…en este lugar no hay nadie…¿será que…?" – pega un chillido de emoción – "¡Una declaración¡Siiii!...Haruko, no seas tan ilusa, el nunca te ha dirigido la palabra..." – se decepcionó de nuevo.
Ese lugar cada vez era más solitario…
- "11:25… ¿Por qué tanto tiempo?" - allí fue donde cayó en cuenta de un pequeño gran detalle... ¡No era una cita¡Solo quería el bolso que llevaba consigo! –como enamorada que era reviso lo que contenía, solo eran cuadernos.
Observaba un punto indefinido cuando sintió una voz que le llamaba.
Exclamó por la sorpresa, pero después lo volvió a hacer, y esta vez con alegría al ver que Kaede Rukawa le llamaba.
- "Akagi" – ese apellido, con una voz llena de indiferencia y frialdad fue lo más hermoso para la soñadora Haruko.
- ¡Rukawa¿Cómo…como..como amaneciste? – logró a duras penas estructurar la pregunta.
- bien
- Su…supongo…que…que bien...espero.
- ¿Y tu? – estas dos cortas palabras fueron tan difíciles para el chico ya que no le importaba como ella estuviera.
- ¿Yo? "¡Se interesa por mi!" ¡Muy bien!
- Veo que lo trajiste… - dijo señalando sus brazos.
- ¿Eh¿Traer que? ah si el bolso…jejeje
- …….. – la chica se lo tendió mientras el se aproximaba a tomarlo.
- Este….me gusta tu bolso – le dijo como para iniciar una conversación - ¿Dónde lo conseguiste?
- regalo.
- Ya veo…
- …...
- ………. "¡Haruko tienes que decir algo¡Apresúrate!"
- Ya vengo. Sostenlo – se lo regresó de nuevo.
- ¿A dónde vas?
- A comprar comida cerca – le dijo casi con fastidio, pero se estaba dominando mejor de lo que pensaba - ¿Quieres algo en especial?
- ¡No para nada¡Lo que tú quieras! – soltó casi de un golpe, que afortunada se sintió, justo cuando creía que la cita no podía tocar más fondo, resulta ser que el chico en cuestión era amable.
Y con esta respuesta el chico se dio la vuelta y se marchó.
Y ella le esperaba con incluso más ansias que la primera vez. Su sueño estaba dejando de serlo para transformarse en una bella realidad.
En una cancha sepulcral y lúgubre.
Sacó de su cartera un poco de maquillaje, debía de verse hermosa si es que deseaba lograr algo –raras veces lo usaba, pero esa era una ocasión que lo ameritaba- con él. Ni se sentó ni nada, solo permaneció allí esperándolo a él, esperando el mejor momento de su vida, sin ninguna duda.
Muy distraída se veía en sus ensoñaciones, tanto que no se dio cuenta de que alguien muy sigilosamente estaba detrás suyo.
Se dio cuenta muy tarde, sin poder evitarlo tenía un objeto filoso amenazando su costado.
- Quédate tranquila – la voz era muy grave, y extraña al mismo tiempo. No era una voz muy común.
No necesitaba pedírselo, la chica había quedado rígida ante el impacto y el horror.
- Sssh no hables - ¿Qué no hablara? Ni siquiera podía tomar aliento – escúchame, ve a donde te indique y no te haré daño.
El hombre casi le empujaba, no lograba moverse bien. Lo único que evidenciaba su pánico eran sus ojos muy abiertos. La condujo a unos arbustos fingiendo que le hablaba tranquilamente. La chica no pudo identificar ninguna de sus facciones, ya que llevaba una mascarilla y unos lentes de sol.
- ¿Qué me va a hacer? – soltó la pregunta en un muy débil murmullo al detenerse.
La persona se situó a su espalda –sin descuidar apuntarla con su arma filosa- sin mediar palabras. A los pocos segundos ya la chica era desmayada por un fuerte olor de un sorpresivo pañuelo en la cara.
oooooooooooooooooo
La luz del mediodía entraba por la ventana de una apacible casa donde una mujer se arreglaba para ir al trabajo. Se vio interrumpida por el repique de un teléfono. En vista que nadie atendía fue ella misma a contestar.
- ¿Aló?
- Buenas… ¿señora Sakuragi?
- Si, habla con ella ¿Quién eres? – dijo un poco confundida, no reconocía el tono de voz.
- Soy Haruko Akagi, amiga del colegio de su hijo ¿me lo podría pasar?
- Con que Haruko…ten paciencia niña, todavía sigue dormido. Si quieres lo llamas más tarde…
- Señora…no quiero sonar grosera pero…es urgente… - la mujer se asustó, la voz de la chica se escuchaba empañada.
- ¿Es muy grave?
- Por favor… - sin querer escapó de sus labios un sollozo. No pudo evitarlo, el tipo además de jalarle con brusquedad el cabello le había colocado el cañón de un revolver en la sien.
- Esta bien, en un momento – sin perder tiempo corrió al cuarto de su hijo. Intento abrirla de un portazo para despertarlo con el ruido pero no lo consiguió. Su pequeño de 1:90 de estatura roncaba en su futón y a la vez que murmuraba algo.
- Hana ¡levántate! – exclamaba mientras le zarandeaba lo más posible. Soltó un enorme ronquido para darle la espalda.
- mmm Haruko…¿Te acompaño…? – su madre estuvo tentada a quedarse allí a escuchar todas y cada una de las tonterías que decía su hijo mientras dormía, claro que al recordar el tono lleno de angustia de aquella chica –y "casualmente" tenía el mismo nombre- desistió de inmediato.
- ¡HARUKO ESTÁ EN EL TELEFONO! – le gritó en toda la oreja. Esta vez funcionó: el chico como si de un cohete se tratara salió disparado del futon.
- ¿Mamá? – Señala a su madre acusadoramente - ¿Qué haces en MI cuarto!
- Te recuerdo que esta es MI casa – le hizo ver con un tono muy "dulce" – y antes de que se me olvide, esa chica que quieres acompañar – Hanamichi se sonrojo con violencia – está en el teléfono.
- ¿Entonces no mentiste! – una sonrisa muy tonta se adueño de sus labios - ¡Harukooooo! – salió corriendo directo al teléfono con el gesto aún más amplio.
Sin saber que no volvería a sonreír de esa manera en mucho tiempo.
- ¿Alo¿Haruko?
- Sakuragi…¡Ayúdame! – los sollozos y gemidos de una inconfundible Haruko atravesaron sus oídos.
- ¡Haruko¿Qué te pasa? – bramó el chico ante el hecho que algo muy malo ocurría con ella.
- Hanamichi Sakuragi… antes de que hables escucha, o no respondo por lo que le haga a Haruko – la voz cambió radicalmente a la de un hombre.
Esa voz tenía una extraña facultad: Podía congelar sangre, venas y miembros del cuerpo. La primera fue Haruko.
El segundo era Hanamichi, quien palideció de inmediato.
ooooooooooooooo
Notas de la autora: Hello! No se asusten! Haruko es solo una carnada ne? xDD no piensen que es un brusco cambio de trama, todo tiene su por qué respectivamente, ya lo verán xD. Lo que si les digo es que habrá más sorpresas de las que yo pensaba jejeje. ¿No son felices? La tortura de Hana ha comenzado y prometo con solemnidad hacerle la carga más pesada P
Ahora a contestar los revis! (los del chap 2 y 3..)
Chap 2
Shadir: Si tan solo imaginartelo de da pavor, lo último que quisieras es estar en sus zapatos ¿o me equivoco? xDD. El zorrito…sabes, no he decidido si Hana le descubre o si de lo contrario logra salirse con la suya…¿Qué pasará? xD gracias por el revi nn y nos vemos en el siguiente chap!
Kitty Rukawa: Si si, ya vi el fanfic que tenía el mismo nombre que este…Juro que nunca lo leí hasta que me lo diste u.uUUU! como el fic de una gran escritora amiga son "Coincidencias" (me nace del alma hacerle propaganda a tu fic Paulyta espero que no te moleste P) Gracias por lo halagos n/n de verdad que moria por escribir un fic donde Rukie fuera asesino, espero no hacerlo taaaan mal o.o. A mi tambien me encanta Gundam Wing! (Just wild beat comunication ame ni utare nagara…ejem mejor no sigo cantando u.uUU) y ojala conversemos más a menudo a ver si te puedo ayudar (me gustan mucho los crossovers! nn) Mit y Kogure? Mmm no lo se, ya lo vere xD me agrado tu rr y ojala nos veamos en msn sayonara!
Toxic Angel: Te has ganado el Globo de Oro (nyaaa estoy harta de los Oscars xD) a los rr que mas me han hecho sonrojar o/o. Y de paso me dices que soy cruel o que Lucifer te lo devuelva con creces (en el mejor sentido de la frase xDD) y nyaaa no te molestes, mis intestinos tal vez sirvan como collares para un profanador de tumbas…tantas posibilidades o. Mi fan…tengo fans? Por qué nadie me aviso que el Apocalipsis viene? xDDD (io y mi bella autoestima xDU) No, como dije tu rr esta muy bueno para borrarlo (por ci como se hace eso? O.oU) si la del paréntesis esta interesada en decirme con mucho gusto la escucho xDDD, espero verte por msn amiga! n.n
Paulyta: Y el proximo Oscar (¿o Globo de Oro? xDD) te lo llevas tú por los rr mas asfixiantes que he recibido! xDDD ¿James Bond? No he terminado nunca de ver ni una sola película aunque no lo creas xDD….esperen…lei lo que lei? Hana de Chica Bond? xDDDDDDDDD jajajaja me gusto me gusto xDDDD es que me la imagino con la faldita de cuero y todo xDDD. Me alegro que hayan almas tan caritativas que se ofrezcan para ayudar a Mitchi (espero que tengas las misma disposición para otra personita…jijiji)
Que Ru le apunte con otra arma que no sea una pistola? Eh espera…oh xDDDDDDDDDDDDDDDDDDDD ya ya cai, no quiero ni imaginar que dices si llegas a consumir alcohol o.oUUU xDDD nyaaa nos vemos en msn xD.
Nian: Al contrario! Mientras más críticas y bien planteadas mejor! nn este tipo de revi es muy instructivo (se me noto esa pequeña mania perfeccionista ne? Jejeje) okas wapa, prestare atención a las conjugaciones en los tiempos n.n y muchas gracias por leer este pequeñin fic, nos vemos! n.n
Capi 3:
Paulyta: Y ahora es que empiezo con las cosas perturbadoras, espero no acabar con tu inocencia y castidad (por Dios…ni he escrito un lemon y tengo quince, y hasta me dio vergüenza escribir esa parte, me falta por aprender…o.o) Bueno si bebes y fumas dirias cosas mas incoherentes, pero asi estas bien xD no cambies jejeje. Pero tu, si sigues mandandome revis con tantos mensajes subliminales vas a hacer añicos lo que me quede en pureza de pensamiento xD (no me hagas caso, sigue con esos mensajes me dan ideas xDDD) Vamos vamos ¿quieres que Hana se entere que Ru no es quien dice ser? Eso ya lo veremos…
Celine: estaré actualizando lo más pronto que pueda, no soy tan mala para dejar infartos por todos lados xDD asi que aquí esta el chap! n.n
Shadir: Nya quieres unirte para entre nosotras darle el tratamiento psicologico que Mitchi necesita xD…el es fuerte, lo superara pero necesita tiempo…y unos buenos somníferos porque yo asi no vuelvo a dormir en muucho tiempo. Las sorpresas que tenga Hana? Mmm no lo se, pero si hay alguien que les dará un buen infarto a todos jajajaja hasta el siguiente chap n.n
Toxic Angel: Creo que ese pervertido lo llevamos todo en nuestros tiernos corazones, solo que unos más escondidos que otros xDDD, si, no quiero sonar cruel pero tal vez lo de Mitchi era necesario para atormentarlo simplemente…o para algo mas…mmm jajajaja si las esposas tienen más de un uso…o ese mismo uso pero en diferentes circunstancias…ahora que lo pienso son muy prácticas o todo un accesorio! ( y no precisamente de moda xD) nyaaa gracias por los animos n.n
Nian: Aqui he dado indicios de como sera jujujuju que bueno que te haya pegado curiosidad n.n, no sabes cuanto me alegro, no creo que tengas que esperar tanto n.n ojala te guste el siguiente chap! nn
Espero sus revis n.n
Sayonara!
