"¡Pasa ya o no entras!" dijo Snape viéndolo mal.
"Ok ok ¡paso! Ojalá que tengas algo de tomar para ofrecerme ¡me muero de sed!" dijo Alcides, entrando con elegancia aprendida.
"¿Ahora me dirás que quieres?" Pregunto Snape de mal modo.
Alcides lo ignoro y se dirigió adentro de la casa. Se sentó en un mueble no sin antes quitarle un poco el polvo.
"¿Me ofreces algo de tomar?" pregunto Alcides, disfrutando al ver que el señor estaba molesto.
Snape al ver la osadía de ese niñato solo le dirigió una mirada venenosa y dijo " No, no tengo nada que ofrecerle a un niñato como tu"
"¡Oh! Entonces yo te ofreceré algo" dijo Alcides mientras sacaba su varita y aparecía una jarra de jugo de calabaza. "¿Quieres? Lo hizo mi madre Bella" dijo mientras servia un poco a dos vasos recién aparecido " no es muy común que mi madre Bella cocine... ¡pero! Siempre lo hace cuando yo lo quiero"
"¿Bellatrix cocina? ¿En verdad eres su hijo? ¿Por qué tienes una varita?" Pregunto Snape simulando su curiosidad pues era imposible que este niño fuera hijo de Bellatrix ya que él debía tener unos 7 años y recordaba que Bellatrix no estado embarazada; pero lo que más le hacia tener curiosidad era que el niño tuviera una varita como eso podía ser.
" Ya se lo dije, mama Bella solo cocina cuando yo lo deseo y... Aunque preparar jugo no es cocinar ¡es un gran avance! La otra pregunta... ¡ah sí! Claro que soy su hijo ¿qué creías? Oh... ¿la varita? Pues... digamos que fue un préstamo" dijo Alcides respondiendo las tres preguntas mientras que bebía su jugo despreocupado.
" ¿Para que me quiere tu madre?" Pregunto Snape " ¿algo sobre...? ¿Sobre el señor oscuro?
" No debería hablar eso con un niño ¿no crees?" Dijo Alcides molesto, odiaba cuando le decían señor oscuro a su padre. " mi mama Bella desea que me enseñes pociones"
" ¿Pociones?" pregunto Snape sorprendido
" Eso he dicho, ¿es que acaso tiene un problema con el oído?" Pregunto Alcides de mal humor.
" No, niñato" dijo Snape dándose cuenta que había regresado al mismo comienzo " Mi respuesta es no, no pienso gastar mi tiempo en un niño mal educado como tu"
" Oh... ¡ya veo!" Dijo Alcides con un gesto autosuficiente " no eres lo demasiado bueno para enseñarme y no quieres pasar vergüenzas... ¡me lo esperaba!"
" ¿De que hablas, niñato? No ves que te estoy rechazando por no ser demasiado bueno" dijo Snape molesto, ¡él era el mejor maestro de pociones! Que se creía ese niñato.
" ¿Y usted como sabe si no soy bueno?" pregunto Alcides ocultando su molestia "no debería decir cosas que no sabe,... si no es lo suficiente bueno pues que importa puede mejorar"
" Yo... ¡claro que soy bueno, muy bueno!" dijo Snape " Acepto, seré su profesor"
" ¡Perfecto!" dijo Alcides por primera vez sonriendo "Será un honor tener a usted como profesor"
Snape se salto de la sorpresa ¿qué le pasaba a este niño? Primero lo insultaba y después le decía eso.
Alcides solo tomo un pergamino con una pluma y, después de empaparla en tinta, escribió una dirección en el pergamino.
" Tiene que ir a esa dirección, todos los días cuando sea más cómodo para usted" dijo Alcides entregándole el pergamino " oh, nunca entre sin avisar por que no nos gustaría que halla un accidente."
" ¿Eso es una amenaza?" pregunto Snape
" No lo sé" Alcides miro a su nuevo profesor, sus ojos verdes brillaron y sonrío otra vez " todo puede ser ¿no?"
Sin decir nada mas, Alcides se levanto de su asiento y aliso su túnica. Miro a su profesor y se fue de la casa.
"Ese niño es muy raro..." dijo Snape antes de negar con la cabeza e irse a ver sus pociones. Pero se detuvo en las escaleras al recordar algo ¿ojos verdes? O mejor dicho unos ojos esmeraldas ¿donde había visto unos ojos así?
"Estoy paranoico, haber donde están las pociones que necesito" dijo Snape bajando a la mazmorra y empezando a hacer sus pociones.
" ¿Padre? ¿Estas ahí?" Llamo Alcides a su padre sin ninguna contestación. Se quedo parado esperando que su padre aparezca cuando vio a un hombre muy viejo, que vestía de forma my rara.
Se quedo observándolo como se dirigía hacia él, pero parecía muy pensativo. El señor levanto el rostro al sentirse observado y de allí todo paso muy rápido. Ojos verdes y ojos azules se mezclaron, una cierta conexión los unió en ese momento.
Esos ojos... son los ojos de Lily esto seguro... pero ¿como? Harry Potter esta muerto ¿o no?- pensaba Dumbledore sin alejar la mirada de esos ojos verdes.
¿Que pasa acá? ¿Por qué miro esos ojos tan insistentemente? Ya los he visto... lo recuerdo... pero... ¿cómo? Yo nunca he salido de mi casa.- penso Alcides viendo que el señor corría hacia él se asusto y se alejo dos pasos.
"Harry, no te alejes... no te haré daño" dijo Dumbledore mirándolo.
" Yo... ¡yo no soy Harry!" dijo Alcides retrocediendo mas "aléjese..."
" Harry... soy yo..." susurro Dumbledore
" ¡Yo no soy Harry!" grito Alcides sacando la varita " expelliarmus"
Dumbledore se sorprendió pero logro evitar el golpe del hechizo y dijo " ¿qué haces, Harry? No juegues así"
" ¿quien ... quien eres? ¿Por que me dices Harry? ¡Yo no soy Harry!" dijo Alcides nervioso, los ojos del señor lo ponían nervioso como si... le estibaren haciendo un examen de rayos X.
"Harry... yo estaré ahí... soy Dumbledore, Albus Dumbledore" dijo Dumbledore acercándose a Alcides.
" ¡No!" Grito Alcides para luego salir huyendo.
" Harry, ¡Harry! Tus padres son Lily y james Potter ¿verdad?" Dijo Dumbledore mientras que seguía a Alcides " ¿por qué huyes de... mi?" Grito Dumbledore al ver que ya no estaba, había fallado... no había podido proteger a Harry " ¡NO PUDE!"