Neon Genesis Evangelion: La Que Yo Amo Es...
Capítulo 5 – Entre más cambian las cosas, más se quedan igual
Escrito por: Alain Gravel
Traducido por: beamknight87
Historia basada en los personajes creados y con Copyright de Gainax.
Parte 1: Cambios
Proyecto E
Reporte de Observación del Tercer Elegido
26 de Febrero del 2016
Shinji no ha dejado su cuarto durante cuatro días, saliendo solamente para las pruebas harmónicas y de sincronización, no ha dicho una palabra, desde esa noche en la que estuvo perdido fuera de Tokyo-3 con Asuka. Estoy empezando a preocuparme, tanto como su tutora como oficial de NERV. Sólo come de noche cuando cree que los demás están dormidos. Su actitud parece más oscura de lo habitual y su radio de sincronización ha bajado en casi un veinte por ciento. Aún con el aumento de vigilancia alrededor del departamento, temo que intente huir de nuevo.
Traté de preguntarle a Asuka qué sucede, pero se negó a responder. Aunque se veía tan perturbada como Shinji cuando Kaji los trajo a casa esa noche, ha resumido más o menos su vida normal, aunque también ella está aparentemente preocupada por Shinji. También he notado que ahora es más agresiva que nunca hacia Rei. Puedo suponer el por qué, pero sin saber qué pasó entre ella y Shinji, no puedo estar segura. El chequeo médico que le pedí a Ritsuko que hiciera no reveló nada inusual, a excepción obviamente de las heridas en sus pies, y éstas están sanando bien. Pudo ir hoy a la escuela. No sé por qué pedí ese chequeo. ¿De verdad pensé que Shinji había hecho algo para lastimar a Asuka?
Estoy muy apenada de mí misma. Debí haber confiado más en Shinji. Pero es mi trabajo. Debo tomar precauciones contra cualquier amenaza potencial a mi equipo.
Desperté esa mañana con una firme resolución. Hora de enfrentar de nuevo a la realidad.
Desde esa noche en el bosque, me había retirado de los demás. Con todo lo que había sucedido, no podía ver a la cara a Asuka y a Rei. Amaba a ambas. Había besado a ambas.
Esto era una locura. ¿De verdad era posible amar a dos chicas al mismo tiempo?
No lo sabía. Había pasado muchas horas pensando acerca de ello. Sin poder encontrar ninguna respuesta, otra además del hecho de que mis sentimientos por las dos eran genuinos.
Amaba a Rei. Amaba a Asuka. Y las necesitaba a ambas.
Pero no era un tonto. Sabía que era injusto para ambas. Necesitaba elegir a una de ellas. Pero no podía decidirme a hacerlo. Todavía no. Sin embargo, sabía que no podía esperar para siempre. Por que si lo hacía, todos los involucrados terminarían lastimados, sobre todo yo.
Lo que podía hacer ahora era asegurarme que nadie interfiriera. Había pasado los últimos cuatro días pensando sobre ello. Las palabras de Kaji aún estaban frescas en mi mente.
"Si te enamoras de Asuka, entonces perderías tu interés en Rei. De esa manera, tu padre tendría control completo sobre ella como solía tenerlo".
Padre... ¡No! Comandante Ikari.
Podía aceptar la idea de que él me usara. Pero no a Rei y Asuka.
Tomé unas cuantas prendas que estaban en el suelo, me vestí y luego salí de mi cuarto para entrar al mundo real.
Mientras me dirigía a la oficina del Comandante, recibí bastantes miradas extrañas. El que alguien fuera a la oficina del Comandante sin anunciarse probablemente era algo bastante irregular. No estaba sorprendido de ser observado durante todo el trayecto. Todos en NERV parecían tenerle miedo a Ikari Gendo. Yo, sobre todo. Pero pude hacer ese miedo a un lado. Había pasado muchas horas preparándome para lo que iba a hacer. No dejaría que un pequeño detalle como el miedo destruyera todos mis planes. Si lo necesitaba, siempre podía comportarme como el hombre que más despreciaba. Así que, cuando entré a su oficina, mi rostro llevaba la misma máscara sin expresión que solía ser tan distintiva de Rei.
Si mi visita era altamente irregular, al Comandante no pareció importarle, mientras esperaba a que llegara a su escritorio antes de hablar.
"¿Qué estás haciendo aquí?"
Tenía su usual comportamiento helado. Debido a la falta de luz en el cuarto, apenas y podía ver sus ojos detrás de sus lentes teñidos. Por una vez, era algo bueno.
Traté de responder, pero fui casi abrumado por el miedo que siempre sentía cuando lo veía. Me tomó unos cuantos segundo eternos para juntar el poco coraje que aún tenía y poner mis pensamientos en palabras.
"No quiero que interfieras con nuestras vidas nunca más".
El Comandante alzó una ceja, Vaya, vaya, a juzgar por su reacción, probablemente estaba bastante sorprendido. Era, después de todo, la primera vez que podía ver otra expresión en su cara que no fuera esa maldita sonrisa. Esta reacción ahuyentó parte del miedo que amenazaba con nublar mi mente en cualquier momento.
"¿Es esto una amenaza?" preguntó.
"Puede volverse una".
De nuevo, el Comandante alzó una ceja. Por alguna razón, pensé en un juego de póquer. Ambos manteníamos una cara neutral, tratando de esconder qué clase de cartas teníamos, tratando de ver si el otro estaba fanfarroneando. Me di cuenta de que no era tan difícil, sólo tenía que evitar que el enojo y mis miedos me dominaran. Porque si lo hacían, entonces él tendría el control.
"¿Crees que puedes amenazarme?"
"Por supuesto que puedo. Soy el único piloto de la Unidad-01. Me necesitas para salvar tu vida. Sabes tan bien como yo que no tienes pilotos de repuesto. Y también sabes que Rei y Asuka no serán capaces de pelear solas por mucho tiempo. Eso es, si no las convenzo de dejar de pelar por ti del todo. En todo este escenario... tú eres el único inútil".
El Comandante parpadeó, obviamente sorprendido. También yo lo estaba. Había pensado en decir esas palabras por un largo tiempo, pero jamás imaginé que las podría decir con tal convicción.
Pero al final... era la verdad.
"¿Estás diciendo que te negarás a pilotear?"
"Sí".
"¿Qué te hace pensar que cederé antes tus demandas?"
"No tienes opción, amenos que quieras ser reducido a una plasta sangrienta en las manos de un EVA".
Esperaba que el Comandante reaccionara a esas últimas palabras. Que su rostro mostrara sorpresa o incluso enojo. No sucedió. En vez de ello, se veía divertido, mientras esa maldita sonrisa aparecía en su cara.
"¿Crees que puedes amenazar con matarme?"
"¿Qué puedes hacer para detenerme? Me necesitas. Pero no te preocupes, no tengo intención de convertirme en un desgraciado como tú. Deberías de estar a salvo".
Simplemente lo ignoré y le di la espalda. Aunque francamente, estaba empezando a desmoronarme. No podía mantener este acto sin emoción por tanto tiempo.
"Si no piloteas, condenarás a la humanidad a su muerte".
Esperaba eso.
"¿Crees que eso me importa?" le respondí. Y no lo hacía. ¿Qué había hecho la humanidad por mí?
"Si no piloteas, condenarás a Rei y a Sohryu a sus muertes".
¡Diablos!. ¡Eso dolió! Lo estaba esperando y me di cuenta de que era algo que muy probablemente diría, pero aún así me dolió el haberlo oído. Me mantuve bajo control, excepto por una pequeña contracción en mi mejilla. Esperaba que él estuviera demasiado lejos como para haberla visto.
"Mejor morir todos viviendo nuestras propias vidas que vivir siendo tus peones o los de alguien más", respondí. Y de verdad creía en esas palabras.
El Comandante se quedó callado. Bueno, si él no tenía anda que decir, yo sí.
"Algo más: las condiciones de vivienda asignadas a Rei-chan son despreciables. Espero que ella se mude al departamento al lado nuestro".
"Rei se quedará donde está".
Me volteé y lo vi a los ojos, luego sonreí.
"O se convierte en mi vecina o ella vendrá a vivir conmigo. Claro, estamos un poco cortos en cuanto a espacio y camas, por lo que tendrá que dormir conmigo. Sé que no le importaría, dado que fue ella a la que se le ocurrió esa idea en primer lugar..."
Me di la vuelta antes de que él tuviera tiempo de reaccionar.
"De cualquier modo, tú pierdes. Depende de ti decidir cual será tu pérdida. Pero entiende esto: ninguno de nosotros seguimos siendo tus títeres, incluyendo a Rei".
"Deberías olvidarte de esa idea de tener una relación con Rei. Jamás funcionará".
Me congelé justo ahí.
"¿Tú qué sabes? Deberías de saber que va bastante bien".
"¿En serio?. ¿Acaso Rei te dijo su secreto?"
De nuevo, me di la vuelta para encararlo. El Comandante estaba sonriendo.
"¿Secreto?"
"Eso quiere decir que no lo sabes. Tal y como pensé".
"¿Saber sobre qué?"
El Comandante ignoró mi pregunta.
"Olvídate de Rei. Esa relación está condenada a fallar".
"¡Cállate!"
"Sólo estás huyendo de nuevo de la realidad".
"¿Cuál realidad?. ¿La tuya?"
"Sí".
¡Maldito viejo desgraciado!
"¡Basta de tonterías! Te dije lo que quería y sabes las consecuencias de rechazarlo. Eso es todo lo que importa".
Diciendo esto, me fui.
Casi me colapsé una vez que salí por la puerta. Mi corazón estaba latiendo a un ritmo peligrosamente alto y tenía problemas para respirar. Lo había hecho. Me había enfrentado al hombre que solía ser mi padre, y gané. Casi no podía creerlo, pero estaba seguro de ello.
"Rei... Asuka... gracias..." susurré.
Sin ellas, esta confrontación no habría sido posible. Si pensaban que era digno de ser amado, entonces tal vez valía más de lo que yo creía...
Sin embargo, ni pude evitar pensar en lo que el Comandante había dicho. ¿Estaba Rei realmente escondiéndome algo?. ¿Por qué Rei parecía tan importante para él?
Traté de hacer a un lado estas idea. Sólo eran el resultado de los esfuerzos del Comandante para manipularme de nuevo. No caería ante ellos.
Cuando finalmente llegué a casa, tenía una ancha sonrisa en mi rostro.
Aún faltaban varias horas para que Asuka y Misato regresaran de la escuela y el trabajo, así que tenía el departamento para mí solo durante un rato. Bueno, casi. Pen-Pen estaba aquí para hacerme compañía, me di cuenta, mientras se colocaba enfrente de mí, con una mirada hambrienta en los ojos. Pobre Pen-Pen. ¿Quién sabe con lo que Misato había tratado de alimentarlo?
"Lo lamento, Pen-Pen". Le dije mientras le daba un almuerzo rápido, pero comestible.
Viendo al pingüino obviamente complacido, decidí tomar un baño. Me ayudaría a pensar sobre qué hacer cuando mis compañeras de cuarto regresaran... especialmente Asuka.
No había sido realmente muy bueno con ellas estos últimos días.
Necesitaba encontrar una forma de disculparme.
Me sobresalté por el sonido de alguien entrando al departamento. No me había dado cuenta de que el tiempo había pasado tan rápido. Salí de la cocina, aún usando el delantal, para ver a Asuka parada en la entrada. Cuando me vio, pareció congelarse en su lugar.
Por un largo tiempo, nos miramos a los ojos el uno al otro. Además de sorpresa, tenía problemas para decir qué estaba pensando.
Sonreí.
"Bienvenida a casa, Asuka-chan".
Se sentía como lo correcto a decir. Verla me hacía sentir tan bien. Aún cuando había estado con ella y Rei para las pruebas harmónicas, no se sentía igual que antes. No intercambiamos palabras. Perdido en pensamientos, apenas y noté la presencia de ellas. No quería. Pero ahora podía. Mis problemas no estaban solucionados, pero había entendido que esconderlos jamás solucionaría anda. Era un gran paso hacia una respuesta.
"Shin... Shinji... ¡Shinji!"
Su mochila cayó al suelo. Lo siguiente que supe, fue ser exprimido en un fuerte abrazo.
"Shinji..."
"Asuka..."
Se sentía raro tener su cabeza contra mi hombro. Realmente no lo había notado esa noche, cuando se quedó dormida en mis brazos, debido a la situación tan inusual en la que habíamos estado. Pero ahora... estando así, en nuestro hogar, en un día como cualquier otro... en verdad se sentía bien.
Me sorprendí a mí mismo al regresarle el abrazo lo mejor que pude, ya que mis brazos estaba pegados a mi cuerpo por su poderoso asir.
"Por un momento, pensé que no querías hablarme, que querías evitarme..."
Casi sonaba como si estuviese a punto de llorar. Me sentí realmente mal por ello. No debí haberlas sacado de mi vida como había hecho.
"Lo lamento. Sólo necesitaba algo de tiempo para pensar. Pero no lo hice deliberadamente para evitarte..."
"Shinji..."
Entonces por segunda vez, la puerta se abrió.
"Ya lleg..."
Las palabras murieron en la boca de la Mayor en el instante que nos vio... y la manera en que nos estábamos abrazando. Por instinto, liberé de mi poco agarre a Asuka. La pelirroja pareció tener el mismo reflejo que yo.
"Misato-san, no es lo que tu..."
Mi excusa fue truncada por una bofeteada
"¡Pervertido!. ¡No te atrevas a abrazarme así de nuevo!"
Dicho esto, Asuka marchó a su cuarto. Me quedé ahí, confundido. Un instante, ella me abrazaba y en el otro me llamaba pervertido. ¿Por qué las chicas eran tan difíciles de entender?
"Así que... has vuelto. Ya veo". Misato dijo, recuperándose de su asombro inicial.
"Eso parece. Tú llegaste temprano".
"Bueno, quería ver si los rumores eran ciertos. Algo acerca del piloto del Evangelion Unidad-01 visitando al Comandante sin anunciarse..."
"Oh..."
Misato me dio una mirada de curiosidad.
"Ya veo. ¿De qué hablaron ustedes dos?"
"Le dije que no interfiriera con mi vida, con la de Asuka o la de Rei".
De nuevo, Misato parecía sorprendida.
"¿Le... le dijiste eso... a él?"
Asentí.
"Si no te importa, preferiría no hablar más de ello ahora mismo".
"Entiendo, Shinji-kun".
"Bien. ¿Sabes? Misato-san, para compensar mi rudo comportamiento de estos últimos días, preparé la cena. Nada de cosas instantáneas, sólo una buena comida hecha en casa".
La puerta de Asuka se abrió súbitamente para revelar a la Segunda Elegida, con una mirada hambrienta en el rostro.
"¿Cocinaste?. ¡Gott sei Dank!. ¡Comida!. ¡Comida de verdad! Honestamente pensé que moriría de inanición si continuabas escondido en tu caparazón".
Asentí. Un segundo después, Asuka ya estaba en la cocina.
"Humph... si a ella no le gusta mi comida, siempre puede cocinar la próxima vez que tú no lo hagas..."
Súbitamente me di cuenta de que Misato se veía un poco deprimida.
"Ella solamente no sabe cómo apreciar tu cocinar..." le dije, tratando de alegrarla.
El rostro de Misato ahora mostraba una gran sonrisa.
"Sí... probablemente tienes razón... ¡Ahora, vamos!. ¡Comamos! Ha pasado un tiempo desde la última vez que esta familia ha comido junta."
Me quedé estupefacto ante esas palabras. Familia. Si, Asuka y Misato eran mi familia. Rei, también... y ahora, estábamos juntos otra vez... ésta era mi familia. Éste era mi hogar.
Acabábamos de comer cuando nuestra conversación fue interrumpida por un llamado a la puerta.
"¿Quién podrá ser?. ¿Acaso alguno de ustedes invitó a alguien?" preguntó la Mayor.
Tanto Asuka como yo sacudimos nuestras cabezas.
Viendo que ninguna de las miembros femeninas de nuestro grupo parecía querer abrir la puerta, me levanté y fui a ver quién había tocado. Me sorprendí un poco cuando el abrir la puerta reveló a Rei. La chica de cabello azul parecía igualmente sorprendida. Por un corto tiempo, nos quedamos ahí, viéndonos a los ojos, nuestras mejillas poniéndose más rojas a cada momento que pasaba.
"Rei-chan..."
"Shinji-kun..."
No sé realmente qué me pasó, pero la tomé en mis brazos, como Asuka había hecho conmigo hace rato.
"Es bueno verte, Rei-chan..."
"Es bueno ver que te sientes mejor, Shinji-kun..."
Entonces, desde la cocina, escuchamos la voz de Misato.
"Entonces. ¿Quién es Shinji?"
Temiendo que la Mayor, o peor aún, Asuka, viniera a ver por sí misma, solté a Rei.
"Es Rei-chan, Misato-san".
"¿QUIÉN?"
En tan sólo un instante, Asuka estaba parada justo detrás de mí, con una mirada asesina en el rostro.
"¿Qué haces TÚ AQUÍ?"
Rei se quedó indiferente ante el tono de voz obviamente preocupado de Asuka. De hecho, parecía apenas notar a Asuka.
"Estoy aquí para ver a la Mayor Katsuragi".
Dicha Mayor apareció, probablemente habiendo concluido que los riesgos de daños a la propiedad no eran muy altos por ahora. Pero sí estaba sosteniendo una nueva lata de cerveza... probablemente casi vacía en estos momentos.
"¿Qué puedo hacer por ti, Rei?"
"Debo informarle que mi vivienda ha sido reubicada".
Apenas y pude evitar no estar sorprendido. Había sido más rápido de lo que esperaba.
"¡Qué bien! Ya era hora de que salieras de ese basurero. Entonces. ¿Dónde vivirás ahora?"
"En el departamento al lado de éste. El Comandante evalúo que sería más conveniente de esta manera".
Qué típico del Comandante de tratar de darse el crédito por la idea.
"¡QUÉ!" gritó Asuka. "¿No has invadido mi vida lo suficiente? Te veo en la escuela, te veo en el trabajo... ¿No me digas que también te veré aquí?"
Misato puso su mano sobre uno de los hombros de Asuka.
"Ella no vivirá aquí, Asuka. Sólo al lado..."
"¡Sé que pasará su tiempo aquí, tratando de seducir a mi Shinji!"
"Ya, ya..."
Esto era malo. Mejor tratar de cambiar el tema.
"¿Te importaría enseñarnos tu nuevo departamento, Rei-chan?" pregunté.
"¡Sí!. ¡Gran idea Shinji!. ¡Vayamos a echar una ojeada!"
No me gustó el súbito arrebato de entusiasmo de Misato. Estaba escondiendo algo. Podía decir que su cerebro estaba trabajando en alguna clase de esquema.
"Síganme". Dijo Rei simplemente, mientras nos invitaba a ir con ella.
"¡Este lugar es más grande que el nuestro!. ¿Cómo es posible?" preguntó una Asuka sorprendida.
"De hecho, creo que es del mismo tamaño que el nuestro", la corregí, "excepto que está menos atascado de gente y cosas".
El departamento de Rei se veía como el nuestro. Pero éste estaba casi vacío, y la densa capa de polvo indicaba que nadie lo había ocupado en mucho tiempo. De hecho, hasta donde podía recordar, nadie había vivido aquí jamás.
"Creo que nuestro departamento se veía así cuando llegué aquí por primera vez. Recuerdo que tuve que comprar unos muebles extras. Ahora se siente como si hubiera sido hace años", explicó Misato.
Ciertamente había pocos muebles. Una mesa bajita y un único asiento en la sala. Dos sillas y una mesa en la cocina con el refrigerador y la estufa. Si Rei no hubiese estado sola, esto apenas habría sido suficiente.
"¡No es justo!. ¡Nosotros tenemos que pelear por el baño y la Niña Modelo aquí tiene uno enorme todo para ella sola!"
"Podría arreglar las cosas para que compartas este departamento con Rei, si quieres", sugirió Misato, con una sonrisa malévola en su cara.
¡Así que ése era su plan! Ella quería que Asuka viniera a vivir con Rei. Era una idea tentadora. Después de todo, nuestro propio departamento era un poco chico para nosotros tres. Cuatro, si contábamos a Pen-Pen. Sin embargo, dudaba que Asuka siquiera estuviese de acuerdo con ello. Además, aún cuando viviera al lado, estaba seguro de que extrañaría su molesta presencia.
"¿Qué?. ¡De ninguna manera compartiré un departamento con ella!"
"Shinji-kun podría compartir este departamento conmigo", propuso Rei.
Por unos segundos, un silencio mortal llenó el lugar, sin embargo, una explosión rápidamente le siguió.
"¿QUÉ?. ¿Qué fue lo que dijiste?"
"Shinji-kun podría compartir este departamento conmigo".
"¡De ninguna manera!. ¡Nunca!. ¡Sobre mi cadáver!. ¡Preferiría vivir aquí que dejarlo dormir bajo el mismo techo que tú!"
"¡Entonces es un trato!" concluyó Misato.
"¿Qué?" gritó la pelirroja.
Obviamente ella estaba más sorprendida que yo. Rei se quedó indiferente. Misato tenía una gran sonrisa tonta en su cara.
"¿No hablas en serio, verdad?"
"Sería una gran oportunidad para que ustedes dos aprendan a trabajar en equipo. Como lo hiciste con Shinji".
Yo, personalmente, no estaba seguro sobre si sería buena idea. Mientras recordaba nuestro entrenamiento inicial de sincronización, también pude recordar lo cerca que estuvo esa primera semana de ser un desastre. Y si consideraba los sentimientos de Asuka por Rei... todas las probabilidades estaban en su contra. Ellas jamás podrían ser buenas compañeras de cuarto.
"¡Pero... pero... de ninguna manera me quedaré con ella¡. ¡Y no te atrevas a ordenarme que viva con ella!"
"No haría eso. Que mal. Ésta habría sido una excelente oportunidad..."
"¡Para que me echaras fuera! Sólo admítelo, no quieres que viva contigo".
"No, no, Asuka", dijo Misato con una sonrisa tranquilizadora. "Tú eres la que siempre se queja de lo pequeño que es nuestro departamento. Sólo te ofrecía la oportunidad de vivir en un... lugar... más espacioso, eso es todo. Nunca te echaría fuera. Me importas mucho como para hacer eso".
"¿De verdad?" preguntó Asuka, con una combinación de sorpresa y alegría.
"De verdad".
La Mayor entonces pasó su atención a Rei.
"Dime, Rei. ¿Necesitarás alguna ayuda para mover tus pertenencias aquí?"
"No. Todo ya está aquí".
"¿Ya está aquí?"
Rei señaló dos cajas en una esquina, un pequeña caja blanca y otro café más grande. Podía suponer lo que había en ellas. La más grande seguramente contenía sus ropas: calcetines, panties, sostenes, un traje de baño, y cinco uniformes de escuela, todos iguales. Quizás también un par de tacones altos. La otra caja probablemente contenía el vestido que le compré. No pude evitar sonreír al darme cuenta de lo mucho que ella parecía valorarlo, dado que lo tenía en una caja diferente.
"¿Eso es todo lo que tienes?"
"Sí".
Confirmé esto al asentir.
"Hum... ¿Sabes, Rei? Ahora tienes un salario. Quizás te gustaría gastarlo un poco..."
Rei parecía un poco confundida.
"¿Gastarlo?"
"Ya sabes... ir de compras... comprar una o dos cosas... tal vez algo más para usar además de esos uniformes de escuela. ¡Ya sé!. ¡Mañana es sábado y me toca el turno nocturno!. ¡Vayamos juntas de compras!"
Rei me miró. Asentí en señal de aprobación a la idea. Aunque la encontraba un poco asustadiza. Misato ayudando a Rei a escoger qué vestir... sin embargo, ella había hecho un buen trabajo con su vestido de noche.
"Muy bien entonces, podemos ir".
"¡Genial!. ¡No he tenido la oportunidad para hacer unas buenas compras en siglos! Aunque claro, no seré yo la que esté comprando..."
"¡Tú nunca me has pedido que vaya de compras contigo!" dijo Asuka, obviamente sintiéndose descuidada.
"No me necesitas para ello".
La iluminación pareció golpear a la pelirroja.
"¡Sí... sí!. ¡Tienes razón!. ¡Soy la suficientemente madura como para ir de compras sin niñera!"
Esto no pareció molestar a Rei en lo absoluto.
"Siéntete libre de acompañarnos, si lo deseas".
"¿Yo?. ¿Ir de compras con ella? De ninguna manera. Me quedaré aquí con mi querido Shinji".
De alguna manera, el pensamiento de pasar la tarde entera solo con Asuka de repente se sintió asustadizo. Además, ya tenía planes.
"De hecho, se suponía que iría con Touji..."
"¡Dije que te quedarías conmigo, Tercer Elegido! No te olvides de que todavía me debes ese 'día perfecto' del que hablaste".
No me atreví a replicar. Aún me sentía culpable por la forma en que nuestra cita había terminado.
"Está bien... llamaré a Touji..."
"Entonces está decidido", concluyó Misato. "Mañana, te recogeré después de la escuela (1). ¿Está bien, Rei?"
"Está bien".
"Misato-san, tú... tú no vas a manejar... ¿Verdad?" pregunté, temiendo lo peor.
"Claro que sí. ¿Por qué?"
Temblé ante el pensamiento.
"Rei, quizás deberías reconsiderarlo... no quiero que te enfermes... o algo peor... ya sabes cómo maneja..."
"¡Cállate, Shinji!"
Misato me dio la Mirada. Rápidamente, traté de encontrar algo que decir que distrajera su atención.
"Dime, Rei. ¿Aún no has comido nada, verdad?"
"No. No he tenido tiempo de comer nada todavía".
"Aún tengo algunos fideos y algo de pastel de arroz".
"Está bien. Gracias, Shinji-kun".
Por supuesto, Asuka no perdió esta oportunidad para expresar de nuevo su opinión ante la nueva situación de Rei.
"¿Ves?. ¿Ves?. ¡Te dije que se impondría sobre nosotros!. ¡Ahora tenemos que alimentarla!"
Le di a Asuka una mirada desconcertada.
"Yo pagué por esa comida. ¿Recuerdas? Y yo soy el que la invitó. Además, sabes que haría lo mismo por ti".
"¿Lo harías?"
Asentí.
"Entonces, supongo, que está bien... pero después de eso, te vas a casa. ¡Niña Modelo!"
"Muy bien".
"¡Bien!" dijo Asuka, con una mirada triunfante en el rostro.
Tal y como ella dijo, Rei regresó a su departamento una vez que terminó de comer. Teniendo nada mejor que hacer, trabajé en algo de mi tarea la mayor parte de la noche, hasta que finalmente estaba demasiado cansado y me fui a la cama. Rápidamente me dormí.
Esa noche, algo me despertó. Mis ojos se abrieron como platos y mi corazón latía como loco. ¿Era una pesadilla? No lo creía. Algo estaba mal. Podía sentirlo. Entonces me di cuenta de que algo en mi espalda se estaba moviendo. Estaba a punto de darme la vuelta, cuando súbitamente fui envuelto por un brazo. Alarmado, me volteé y empujé al intruso fuera de mi cama.
Luego, el intruso de levantó. Estaba sorprendido de darme cuenta de que estaba viendo a Rei.
Una muy desnuda Rei. Quien había estado en mi cama hacía tan sólo unos segundos...
"Rei... Rei-chan..."
Traté de no mirar fijamente, pero mis ojos siempre se las arreglaban para ver a su cuerpo. Una parte de mi mente de hecho tomó nota de que el color natural del cabello de Rei era azul, un hecho del que no me había dado cuenta la primera vez que había estado en una situación similar...
Mis mejillas probablemente ya estaba carmesíes para ese momento.
"¿Esto te avergüenza?"
Traté de responder, pero viendo que mi boca no parecía funcionar bien, asentí violentamente.
Ella levantó una camisa que había tirado sin cuidado al piso, ya que la iba a lavar de todas formas, y rápidamente se la puso.
"¿Así está mejor?"
Mientras que sus lindas piernas aún se mostraban, cubría las partes más sensitivas de su cuerpo. Sin embargo, por la manera en que se la había puesto, algo de piel aún se asomaba. No pude evitar mirar un punto justo debajo de sus pechos donde le había faltado un botón y donde podía ver algo de pálida piel.
"Ciertamente se te ve mejor que a mí..."
Me sorprendí de verla sonrojarse. Eso era extraño considerando que ella no tenía problema alguno para entrar desnuda al dormitorio de un chico.
"¿Qué... qué quieres?"
"Quiero dormir contigo".
Tragué saliva. Fuerte.
Viendo mi reacción. Rei soltó una risita. Aún no estaba acostumbrado a verla tener semejantes reacciones.
"Eres un muchacho travieso, Shinji-kun. Dije 'dormir', no 'tener sexo'. A menos que quieras..."
"Bueno..."
Rei me silenció con un dedo.
"Lo sé..."
No pude evitar sentirme bastante tranquilizado.
"¿Por qué?"
"No podía dormir", Rei respondió simplemente.
"¿No podías dormir?"
Sacudió su cabeza.
"Es extraño vivir aquí. Me siento fuera de lugar... y sola".
Podía entender cómo se sentía. Solía sentirme así la primera vez que dormí bajo este techo. Pero ya no era desconocido. Se sentía como un hogar. Y de hecho ahora disfrutaba de su vista. Y esperaba que Rei se sintiera así pasado algún tiempo.
"Un techo desconocido. Pero estás mal Rei-chan. Tú no estás sola..." dije mientras le hacía sitio de un lado de mi cama, y la invité a subir.
No sabía si era buena idea o no, pero sabía que no podía rechazarla. Cualquier temor que haya sentido fue barrido por la mirada suplicante de su rostro.
Fueran cual fueran las consecuencias, las enfrentaría después.
De nuevo, Rei yacía justo a mi lado. Con el tamaño de la cama, no teníamos otra opción más que estar bastante cerca el uno del otro. Compartíamos la misma almohada, nuestras caras a centímetros la una de la otra. No era realmente sorprendente que eventualmente estábamos enlazados en una cálido abrazo, intercambiando besos profundos. No pasó nada más. Ni siquiera lo pensé. Se sentía tan bien estar en los brazos de Rei, tan tibios, tan confortables. No necesitaba nada más. Rápidamente me quedé dormido en un sueño profundo y pacífico...
"¡Baka!. ¡Despierta!. ¡Tengo hambre!"
Lentamente, los golpes en mi puerta me sacaron de mi pacífico sueño. Uno por uno, mis sentidos se reactivaron. Mientras los segundos pasaban, me di cuenta de varias cosas. Mi brazo derecho estaba completamente dormido y bajo algo pesado. Mi brazo izquierdo estaba sosteniendo algo. Algo grande. De hecho, parecía que estaba sosteniendo a alguien. Fuertemente. Esto fue confirmado cuando me di cuenta de que podía sentir el cosquilleo de la respiración de alguien en mi piel, así como algo tibio y húmedo en mi cuello. Desde ese punto, mis ojos estaba completamente abiertos. Una vez que pude enfocarlos, me di cuenta de que estaba viendo a una chica de cabello azul.
¿Rei?
Por unos segundos, me entró el pánico. Luego recordé lo que pasó la noche anterior. Rei había dormido conmigo, Y aparentemente, seguía dormida. Era increíble que todo el ruido que Asuka estaba haciendo no la había despertado. Pero recordándolo, su viejo departamento había sido muy ruidoso, así que...
Esperen. Asuka. Golpeando a mi puerta.
"¡Vamos!. ¡Quiero el desayuno!. ¡AHORA!"
De nuevo, me entró el pánico, pero esta vez, estaba justificado. Asuka estaba a punto de entrar a mi cuarto, sólo lo sabía. Y si nos encontraba así...
"Estoy muerto", pensé.
Mi suposición probó ser correcta, pues Asuka finalmente se cansó de esperar y abrió mi puerta. Sabía que era demasiado tarde, pero traté de esconder a Rei debajo de una sábana. Sin embargo, por la expresión de aturdimiento en la cara de Asuka, era claro que había visto más de lo que ella esperaba.
Sorprendentemente, pasaron unos cuantos segundos y aún seguía con vida. Asuka no se había movido ni un milímetro. Si tenía suerte, las cosas tal vez no hubieran sido tan malas. Éste no fue el caso, ya que Rei escogió ese momento para finalmente despertar.
"Buenos días, Shinji".
Los ojos de Asuka se abrieron aún más. Yo también estaba sorprendido. Era la primera vez que Rei me había llamado sólo Shinji...
Luego fui estrujado en un firme abrazo de la chica de cabellos azules y antes de me diera cuenta, me estaba dando un beso muy profundo. De no haber estado congelado por el miedo, seguramente lo habría disfrutado. Pero mis ojos estaban clavados en Asuka quien ahora parecía lista para matar. Rei rápidamente sintió que algo estaba mal. Ella ni siquiera pareció perturbada ante la vista de Asuka.
"Tú. Deberías irte. Obviamente estás molestando a Shinji".
En ese momento, Asuka perdió cualquier control que tenía.
"¡Qué hace ELLA AQUÍ en tu CAMA!"
"¡No es... no es lo que piensas!"
Me asombré de ver que Asuka se lanzaba sobre Rei. Con rencor tomó a Rei de su cabello y la sacó fuera de la cama, para tirarla al piso, completamente indiferente ante los gritos de dolor de Rei. Traté de decir algo, pero simplemente no podía hablar.
"¿No es lo que parece?. ¡Mira a esta zorra!. ¡Está desnuda debajo de esa camisa!. ¡UNA de TUS camisas!"
"Ella no podía dormir. Se sentía perdida y sola... ¡Ella sólo durmió aquí, nada más!" Finalmente pude decir mientras trataba de pararme.
Asuka respondió abofeteándome. De nuevo.
"¡No te atrevas a mentirme!. ¡No soy estúpida!. ¡Maldito desgraciado! Dijiste..."
Asuka no tuvo oportunidad de terminar lo que estaba diciendo. Cayó fuertemente al piso, literalmente le habían sacado el aire. Observé con incredulidad. Rei acababa de golpear a Asuka fuertemente en el estómago. La muchacha de cabello azul la miró, el enojo claramente visible en su rostro.
"¡No me lastimarás a mí, o a Shinji, nunca más! No deseo pelear contigo. Pero si me veo forzada a hacerlo, lo lamentarás".
Abajo en el piso, Asuka murmuró algo totalmente incoherente. Rei no lo prestó atención. Sus ojos estaba enfocados en la herida de mi mejilla. Muy gentilmente, la tocó.
"¿Duele?"
"Está bien", mentí. Mi reacción a su tacto la convenció de lo contrario.
Lentamente, Rei se inclinó sobre mí y besó mi mejilla herida.
"Pronto estará mejor. Ahora vayamos a comer".
No pude evitar mirar a Asuka en el piso. Rei lo notó.
"No hay daño permanente. Pronto se recuperará. La podemos dejar aquí".
Confiando en Rei, la seguí a la cocina. Misato estaba esperando ahí, la mirada de preocupación en su rostro cambió a una de sorpresa cuando vio a Rei. La Mayor examinó a Rei de pies a cabeza, luego decidió que necesitaba otra cerveza.
"Así que, eso es el por qué había tanto ruido hace unos minutos", dijo mientras sacaba otra lata del refrigerador.
"Perdón", me disculpé.
"¿Puedo preguntar, por qué estás vestida así?" preguntó la Mayor.
"Shinji no se sentía cómodo conmigo durmiendo desnuda".
Misato parecía aún más sorprendida de lo que estaba hacía sólo unos minutos. Pero recuperó su feliz conducta.
"No es una maravilla, si consideramos que él solía quejarse sobre la forma en que me vestía en el departamento. Tú definitivamente eres más indecente de lo que yo jamás he sido", dijo con una sonrisa.
"Ya veo", simplemente dijo Rei, aparentemente si importarle su estado sin ropas.
Personalmente, me estaba sintiendo muy avergonzado y sentí la necesidad de darle a Misato unas cuantas explicaciones.
"Rei no podía dormir en su nuevo departamento. Sólo dormimos en el mismo cuarto. Nada más".
En silencio, rezaba porque Rei no mencionara que de hecho, compartimos mi cama. Y con mucha suerte, Asuka tampoco hablaría de ello.
"Umm... bueno, supongo que tendremos que incluir en la lista de compras una pijama o algo más que puedas usar cuando duermas aquí. Aunque, sería preferible que trates de acostumbrarte a tu nuevo departamento. Ya ha habido suficientes problemas por ahora".
"Estoy de acuerdo".
"¡Genial! Ahora que esto está arreglado... ¿Shinji?. ¿Dónde está mi desayuno?"
Misato me dio la Mirada. Tragué saliva. Unos segundos después, tenía mi delantal puesto y estaba trabajando en un almuerzo rápido. Eventualmente, Asuka se mostró. Claramente seguía enojada, pero no dijo una palabra. No pude evitar estar asustado. Si mantenía la calma ahora, eso quería decir que me empezaría a gritar en el instante en que Rei y Misato se fueran.
Qué día... y apenas acababa de empezar...
Sorprendentemente, el día no fue tan malo como esperaba. Asuka pudo calmarse aún más una vez que Rei salió de nuestro departamento para prepararse para su día. Para cuando ambos estábamos listos para ir a las clases del sábado por la mañana (1), Asuka estaba más o menos de regreso a la misma de siempre, aunque no parecía interesada en hablarme por un rato. Por fortuna, Misato decidió ir a ver a Rei así que los dos pudimos tener una pequeña discusión, sobre todo por lo que pasó anoche, así que caminamos hacia la escuela sin nuestra nueva vecina. Íbamos a mitad del camino cuando finalmente decidí aclarar las cosas.
"¿Sabes?... no estaba mintiendo... no pasó nada..."
Asuka se detuvo. Dándome cuenta de que ya no estaba a mi lado, me volteé para mirarla. Esperaba que otra vez estuviese enojada pero no lo estaba. De hecho, se le veía extrañamente calmada.
"Lo sé. Escuché lo que le dijiste a Misato. Supongo que debí confiar más en ti".
"Bueno, las apariencias no ayudaban..."
"Eso es verdad. Pero aún así... lo lamento".
No pude evitar mirarla con incredulidad. Asuka Sohryu Langley. ¿Disculpándose?
"Está bien..." fue lo único que dije.
Eso fue suficiente para hacerla sonreír. Miró su reloj y dándose cuenta que podíamos llegar tarde, tomó mi brazo y me arrastró corriendo todo el trayecto a la escuela.
Comimos solos el almuerzo, ya que Misato había recogido a Rei justo después de la escuela. Tras comer, Asuka me arrastró enfrente de la TV, donde me introdujo a un nuevo sistema de juegos de video que al parecer había comprado durante mi periodo recluido. Sin tener nada mejor que hacer, me entregó un control y precedió a virtualmente hacerme trizas a través de un juego de peleas. Supuse que probablemente seguía un poco enfadada sobre lo de anoche, porque estuvo matándome de maneras muy sangrientas y dolorosas. Una vez que se aburrió de asesinarme, salimos un poco, tomamos una caminata a un parque cercano, sin tener realmente nada que hacer. Regresamos a eso de las dos treinta de la tarde para darnos cuenta de que Misato aún no había regresado, lo cual no era ninguna sorpresa, ya que eso no le había dado mucho tiempo a Misato y a Rei para ir de compras. Después de todo, parece que las chicas siempre necesitan muchas horas para ese tipo de cosas. Sin más opciones, de mala gana procedimos a hacer algo de nuestra tarea. Una hora después, le estaba enseñando kanji a Asuka. Habíamos estado trabajando por un rato cuando nuestra sesión fue súbitamente interrumpida por la entrada de Misato. Tenía esa tonta sonrisa en su cara. Solo sabía que estaba a punto de pedir mi ayuda.
"Hola a los dos. ¿Tuvieron un buen día?"
"¡Oh sí!. ¡Un gran día!"
Asuka sonaba un poco demasiado entusiasta. Probablemente no quería admitir que le habría gustado ir con Misato de compras. Lo había mencionado unas cuantas veces. Bueno, era su culpa, Misato le había, después de todo, preguntado si quería ir con ellas.
"Dime Shinji. ¿Puedes hacernos a Rei y a mí un favor? Dejamos algunos de los paquetes en el carro. ¿Puedes traerlos al departamento de Rei? Estaré ahí para desempacar sus cosas..."
Aún si me hubiese gustado decir no, no habría sido capaz de ello. Así que simplemente asentí y tomé las llaves de su carro que me entregó. Pronto, estábamos todos fuera del departamento, Misato yendo al de Rei y Asuka extrañamente siguiéndome.
"¿Por qué me estás siguiendo?"
"¡Bueno, para ayudarte claro está!"
Eso era raro. ¿Asuka, queriendo ayudarme? Ella nunca ayudaba en la casa. Sólo se ofrecía a ayudarme de vez en cuando con física y matemáticas porque necesitaba que le enseñara el kanji que no conocía.
"¿Te... te sientes bien?"
"¡Claro que sí!. ¿Por qué lo preguntas?"
"Bueno, de repente eres tan linda y ayudante..."
"¿Qué?. ¡Te dejaré saber que puedo ser buena a veces, Tercer Elegido!. ¡Soy una persona muy linda y provechosa! Pero si no quieres mi ayuda..."
Estaba a punto de irse cuando la sujeté por la muñeca.
"Gracias, Asuka".
Su temperamento súbitamente se calmó y ahora se estaba sonrojando ligeramente.
Cuando llegamos al carro, me di cuenta de que era una bendición el que Asuka hubiese decidido a ayudarme. No podía creer cuántas cajas y bolsas Misato había podido meter a su auto. Solo, jamás habría podido cargar todo esto.
"¡Mein Gott!. ¿Compraron todo el centro comercial?"
Exactamente lo que pensé. Había temido esto. Misato probablemente había gastado la paga entera de Rei. Y nuestro siguiente día de pago ni siquiera estaba cerca... iba a necesitar tener una pequeña charla con Rei acerca del dinero y cómo usarlo más sabiamente.
Traté de darle lo que parecían los paquetes más livianos a Asuka, luego cogí el resto. Fue una tarea muy difícil cargar todo de regreso al departamento de Rei. Por suerte, la mayoría de las cosas parecían ser ropas, así que tirar una probablemente no sería mucho problema. Por lo menos, eso esperaba. Pero eventualmente logré llevar todo arriba sin incidentes.
Al entrar al departamento de Rei, noté que Asuka al parecer estaba en estado de shock. Luego tiré todo cuando vi lo que le había causado tal reacción.
Rei estaba parada en la sala, con una expresión de intriga en su rostro, probablemente preguntándose cuál era el problema de Asuka. Estaba vestida en una simple combinación de unos ceñidos pantalones negros y un suéter también negro. También llevaba alrededor de su cuello una larga cadena que le llegaba casi hasta la cintura donde había una cruz plateada, muy probablemente inspirada por la que Misato siempre llevaba. En resumen, teníamos a una Rei imponente vestida en unas simples ropas casuales.
Habiendo visto ya a Rei vestida de forma aún más inusual, al menos para ella, no me tomó mucho tiempo para sobreponerme al shock inicial. Además, ya me estaba acostumbrando a ser sorprendido por Rei. Asuka por otra parte, seguía fuera de este mundo.
"Eso te ve muy bien, Rei-chan. Me gusta mucho", la elogié.
Rei se sonrojó, mientras que Misato brillaba de alegría y orgullo.
"¡Ves Rei!. ¡Te dije que le gustaría!. ¡De verdad te ves linda vestida así!".
"Muy linda", añadí.
Esto probó ser un error pues fue justo lo Asuka necesitaba para regresar a sus sentidos.
"¿Linda?. ¿La encuentras linda?"
Me congelé bajo su mirada tan enojada. Sólo pude asentir.
"¡Misato!. ¿Cómo pudiste?. ¿Estás tratando de hacer mi vida más difícil?"
Misato quería responder, pero fue interrumpida por las palabras de Rei.
"¿Por qué estás celosa?"
"¿Celosa?. ¡Yo jamás estaría celosa de ti!"
"Pero lo estás. Estás celosa de mi relación con Shinji".
"¡Claro que no estoy celosa!. ¿Por qué habría de importarme este imbécil?"
No pude evitar sentirme dolido por esas palabras. Todo el tiempo, Asuka me había dado la impresión de que le importaba. ¿Era sólo mi imaginación, algo de optimismo?
"Entonces no tienes ninguna razón para objetar sobre nuestra relación. No hay razón por la que él no sea mi novio".
"¡Nunca!. ¡Estaré muerta cuando él se convierta en tu novio!"
"Entonces te importa".
"¡Que no!"
Asuka miró a Rei, luego a mí, con una expresión confundida en su rostro.
"Si no puedes ser honesta con él o incluso contigo misma, no mereces más atención que la que él le daría a un amigo. Lo amo, y se lo he dicho. ¿Has hecho lo mismo?"
"¡Claro que no!"
"Entonces no tienes ningún reclamo. Estoy segura de que Shinji apreciará que no interfieras más con nosotros".
Asuka simplemente se quedó ahí, sin palabras. Me miró. Sus ojos parecían torturados, como si una gran batalla se estuviera librando dentro de ella. Parecía que iba a decir algo, pero sus labios simplemente se detuvieron y lo siguiente que supe, fue que salió corriendo de la casa de Rei. Aún estaba viendo la puerta cuando Rei se acercó y me abrazó por detrás. Su barbilla descansando en mi hombro.
"No deberías preocuparte por ella. Si ella ni siquiera puede decirte que te ama, entonces no puede ser más que una amiga".
Lo que Rei dijo tenía sentido. Y solucionaría mis problemas. ¿Pero por qué no podía estar feliz por ello?. ¿Por qué me dolía?. ¿Acaso las palabras de amor de Rei no eran suficientes para mí?
Como si me hubiera leído la mente, Rei me sujetó más fuerte en un tibio y confortable abrazo.
Tal vez era mejor simplemente no pensar sobre ello ahora mismo.
"Creo que deberíamos ordenar algo de comida. No sería buena idea ir a comer al lado", dije.
"Entonces eso quiere decir que tengo que cocinar esta noche..." se quejó Misato mientras salía del departamento.
Pobre Asuka. Parecía que las cosas sólo se ponían peores para ella.
Traducido al español el 21 de Junio del 2006
Notas del traductor: bueno FeroAng, como dice el mismo Alain Gravel al final del Capítulo 1, el Shinji que se desarrolla en esta historia es el Shinji que vemos en el manga, el cual (te lo puedo comprobar, ya que tengo dicho manga) es un millón de veces superior en cuanto actitud al Shinji de la serie animada, vamos, no se muestra tan cobarde ni por asomo (lo que sí hace constantemente son su chaquetas y debrayes mentales tal y como se ve en este fic). Por otra parte, quizás los errores ortográficos que mencionas son casi seguramente culpa mía, ya que el procesador de texto de ffnet no te deja poner signos de admiración o exclamación juntos separados por un espacio, por eso los puntos entre los signos (lo cual es una lata, ya si hay algo más, la culpa la tiene Theblacksun). Sobre otras posibles traducciones, es casi seguro que al finalizar LQYAE me ponga a trabajar en "An Unwilling Angel" del gran Ryan Xavier (para todos lo fanáticos de historias de Shinji/Rei) y quizás muy a futuro (debido a su monstruosa extensión: el doble de LQYAE), "Higher Learning" de Strike Fiss (la única historia realmente... épica de NGE, no hay más palabras para describirla).
En fin, aquí está la primera parte del Capítulo 5, donde podemos ver a un Shinji a mi parecer, más agradable que el clásico perdedor sin autoestima. Si has tenido la oportunidad de ver la serie pero no has leído este gran fic en su idioma original debido a la barrera que puede representar el lenguaje, les aseguro que dentro de poco (en lo que traduzco) se irán llevando una que otra sorpresita debido a los giros que hay en esta historia... hasta la próxima parte.