Neon Genesis Evangelion: La Que Yo Amo Es...
Capítulo 6 - Amigos
Escrito por: Alain Gravel
Asistido por: Darren Demaine
Traducido por: beamknight87
Historia basada en los personajes creados y con Copyright de Gainax.
¡Advertencia! Este capítulo contiene elementos con esencia de lime.
Parte 1: El viaje
Ha pasado un mes desde el ataque del Doceavo Ángel. Las cosas han vuelto de nuevo a la normalidad. Bueno, tan cercanas a lo normal como puede ser mi vida, después de todo. Tras algunos difíciles momentos, Asuka y Rei pudieron "resolver" sus diferencias de manera civilizada. Asuka ahora podía hacer conmigo lo que quisiera los martes, jueves y sábados, mientras que era de Rei los lunes, miércoles y viernes. Intenté oponerme ante la idea de que mi vida funcionara por un horario en el que no tenía ningún papel para determinarlo, especialmente dado que la única posibilidad de libertad era tan sólo un día a la semana, domingo. No había forma de que pudiera soportar por mucho tiempo la presión de las dos, así que simplemente decidí aceptar su acuerdo. Además, no era tan malo. De hecho, muchos chicos en la escuela envidiaban mi situación.
Aún así, hubo algunos cambios. Asuka definitivamente era más buena conmigo. Aún me llamaba 'baka' casi cien veces al día, pero rara vez gritaba. Por lo menos, la mayor parte del tiempo. Por su parte, Rei había cambiado considerablemente. Ella era ahora definitivamente más abierta con los demás y, aunque no era precisamente del tipo extrovertida, mostraba un poco más cómo se sentía con las personas a su alrededor. Su mayor logro era el hecho de que ahora tenía una amiga fuera de NERV, una de nuestras compañeras de clase, una chica de nombre Hotaru. Aún con los recientes cambios, esa chica parecía ser la única estudiante de nuestra clase quien no se sentía incómoda ante la presencia de Rei. Bueno, además de mi y de Asuka hasta cierto punto. Hasta Touji y Kensuke todavía no se sentían relajados cerca de ella. Tal vez la cercanía entre las dos nuevas amigas se debía a que eran muy parecidas. Hotaru era una chica tímida que claramente no tenía amigos, como Rei hace unos cuantos meses. Debido a su frágil complexión, su piel tenía las mismas propiedades como de porcelana de Rei. Si su corto cabello hubiera sido azul en vez de negro, las dos podrían haber pasado como hermanas (1).
Mientras las miraba comiendo juntas el almuerzo felizmente, no pude evitar estar orgulloso de Rei. Había hecho muchos progresos en las últimas semanas.
"¡Shin-chan!. ¡Tenemos que hacer algo!"
Este súbito arranque de mi compañera pelirroja me sacó de mis pensamientos.
"¿Uh?. ¿Qué quieres decir?"
"¡Míralos!" casi gritó, señalando a Touji en una esquina de la cafetería, y luego a Hikari unos cuantos asientos después. "¡La manera en que tratan de ignorarse el uno al otro, aún cuando están locamente atraídos entre sí, me está volviendo loca!. ¡Debemos ayudarlos!. ¡Ellos también merecen conocer la felicidad y el amor que compartimos!"
Estas últimas palabras atrajeron la atención de todos los estudiantes. No es que hubiera muchos en la escuela estos días. Aún así, no pude evitar sonrojarme bajo todas esas miradas. Casi me arrastré debajo de la mesa cuando noté la mirada la mirada quemante de Rei. Ella de verdad podía ser temible cuando te miraba así.
"¿Qué están mirando?" gritó una súbitamente enfadada Asuka.
Asustados por la furia de la pelirroja, todos decidieron regresar a lo que estaban haciendo hacía unos cuantos momentos.
"¿De verdad estás segura que él le gusta a ella?" pregunté, tratando de calmarla.
"¡Claro! Le pregunté. No sé por qué, pero tiene un gusto enorme por ese baka. Personalmente, creo que se merece algo mejor, pero si lo quiere así de tanto..."
"¡Hey!. ¡Touji es un buen tipo!" objeté, queriendo defender a mi amigo.
"¡Sólo es un pervertido como tú!"
Una gran abertura aquí...
"No sabía que te gustaran los pervertidos..."
"¡No me gustan!"
"¿Entonces no salimos esta noche como lo tenías planeado? Me acabas de llamar pervertido hace unos segundos..."
Por unos momentos, Asuka no sabía qué decir.
"Está bien, tú no eres un pervertido. Pero él si".
Bueno, no había razón para empezar de nuevo el argumento, así que me quedé callado. Además, sabía que en el fondo, Asuka probablemente no pensaba que Touji fuera un pervertido. Ella sólo necesitaba quejarse.
"Bueno, él le gusta a ella y sé que Touji también siente algo por ella. ¿Entonces?"
"¿Entonces?. ¡Tenemos que ayudarlos a que se junten, por supuesto!"
"¿Nosotros?. ¿Por qué nosotros?"
"Por que tengo un plan. Y necesito que me ayudes".
"¿Yo?. ¡Si ni siquiera puedo solucionar los problemas de mi propia vida amorosa!"
"¡Eso es porque eres demasiado estúpido como para darte cuenta de que la Niña Modelo no es rival para mí!"
Traté de ignorar su último comentario. Ahora no era el momento para esa pelea. De nuevo.
"¿Entonces, qué tienes en mente?" pregunté, tratando de cambiar el tema.
Asuka tomó tiempo para mirar alrededor. Fuera lo que fuera que estaba buscando, realmente no se vio satisfecha por lo que vio. En unos pocos segundos, terminó su almuerzo, me agarró y me arrastró a un salón desierto.
"Menos oídos que puedan espiar", explicó, al ver mi mirada de confusión.
¿A qué venía toda esa paranoia de repente?
"Un viaje de campamento", luego dijo llanamente.
"¿Uh?"
"Un viaje de campamento. Todos iremos en un viaje de campamento".
"¿Un viaje de campamento?"
¿Cómo se suponía que eso juntaría a Touji y Hikari?
"Sí. Tú vas con Touji. Yo voy con Hikari. Entonces, por alguna razón del destino, todos nos vemos en el lago que me mostraste en nuestra primera cita. Cuando sea de noche, tú y yo tomamos la tienda que se suponía ibas a usar con Touji, por lo que él y Hikari no tendrán más opción que dormir juntos en la otra tienda. Si Touji es como cualquier otro varón, aprovechará la oportunidad para llegar a algo con ella. El plan perfecto".
No estaba seguro de que me gustara como se oía su plan. Parecía... diabólico.
"¿Y qué si él no hace nada con ella?"
"¿Bromeas?. ¡Ella sólo está esperando eso!"
"¿Ella te dijo eso?"
De repente, Asuka se puso bastante avergonzada.
"Bueno... no..."
"¡Entonces, no lo sabes!"
"¡Por supuesto que lo sé!. ¿Recuerdas que pasé unos días en su casa? Deberías haberla oído dormida, gimiendo el nombre de ese baka y..."
Ahora ya estaba color carmesí.
"¿Y qué?"
"Realmente no te lo puedo decir. Te sangraría la nariz..."
Siendo un muchacho, me imaginé unos cuantos escenarios. Todos ellos con el potencial de ser golpeado por Asuka y ser llamado pervertido si los expresaba. Dado que mis propias mejillas se habían puesto de repente rojas, Asuka pareció adivinar lo que tenía en la cabeza.
"¡Pervertido!"
"¡Ouch!" me quejé, tras ser golpeado otra vez en la cabeza.
Antes de siquiera darme cuenta, había metido la pata. De nuevo.
"¡Como si estuviera seguro que no hiciste nada cuando la viste!"
"¿Qué!"
Esta vez fui abofeteado.
"¡De verdad eres peor que Touji!"
Antes de que pudiera pensar en una respuesta, ella salió corriendo del salón. Luego, su cabeza reapareció.
"Vendrás conmigo al centro comercial después de la escuela, tenemos equipo de campamento que comprar. Trata de controlar tus hormonas mientras tanto".
Dicho esto, volvió a salir.
"Esa chica es un dolor de cabeza. No puedo esperar a mañana. Es más seguro con Rei".
"¿Un viaje de campamento?" preguntó un Touji sin inmutarse. "¿Me estás pidiendo que vaya de campamento contigo?"
"Bueno... sí".
Oh, viejo... esto no iba bien. Simplemente lo sabía, esto era una mala idea. ¿Por qué algo tan complicado?. ¿Por qué Asuka no pudo pensar en algo más simple como ir al cine y hacer que se sentaran juntos?
"No sé. Parece más algo para Kensuke..."
Lo sabía. Estaba tratando de encontrar un modo de zafarse de esto.
"Le pregunté, pero dijo que no podía. Algo acerca de un proyecto militar Ultra Secreto. Vamos, será divertido. ¿No estás cansado de Tokyo-3? Yo te puedo decir que sí".
"Bueno..."
Hora de rogar, supongo.
"¡Todo está listo! No quiero ir solo..."
"¿Misato te está dejando ir?. ¿Así como así?"
"Me dio un localizador para que lo lleve. NERV sabrá exactamente dónde estaré y pueden llevarme los cuarteles en unos diez minutos. Además, sólo estaremos fuera desde el sábado por la tarde hasta el domingo por la tarde. Realmente dudo que un Ángel elija ese momento para atacar..."
Bueno, al menos eso esperaba.
"¿Y que hay de tus novias?. ¿No le perteneces a Asuka los sábados? Seguramente no te dejará ir tan fácilmente..."
"¡Hey!. ¡No le pertenezco!. ¡Y no son mis novias!"
"Sí claro..." dijo Touji, suprimiendo apenas una risa ahogada.
Maldición, en verdad odiaba que me recordaran mis problemas con las chicas...
"A Asuka en verdad no le importa".
Si supiera que de hecho era idea de ella... quizás Touji tenía razón. Necesitaba oponerme un poco más a Asuka...
"Oh, de acuerdo... ¡Iré contigo!"
"¡Genial! Confía en mi... ¡No te arrepentirás!"
En silencio, esperaba que eso fuera verdad...
Una vez que salimos de Tokyo-3, Touji pareció relajarse un poco. Una vez que llegamos al lago, de hecho parecía estar alegrado de haber aceptado venir conmigo..
"¿Sabes, Shinji?... esto no fue tan mala idea después de todo", dijo Touji, perdido en contemplación del lago.
Sólo lo estaba escuchando a medias. Sin darme cuenta, caminé hacia el lago y me detuve a pocos metros de él. Me agaché, y toqué el césped verde. No había nada en específico en ese particular punto del césped, pero las memorias que despertó me hizo pasar por una gran variedad de emociones. Aquí era donde había compartido mi primer beso con Asuka...
"¿Así que, ese es lugar?"
Alarmado, levanté mi cabeza para ver a Touji a mi lado, con una gran mueca en su rostro.
"¿Qué quieres decir?"
"Vamos, Shinji. Escuché la historia. Aquí es donde besaste por primera vez a Asuka. ¿No es verdad?"
"¿Qué?. ¿Cómo lo sabes?"
"Hikari".
"Ya veo... supongo que las chicas hablarían sobre ese tipo de cosas..."
"Entonces. ¿Ese es lugar?"
Asentí. La sonrisa de Touji si hizo aún más amplia. Estaba a punto de decirle que dejara de mirarme de esa manera cuando alguien dijo nuestros nombres.
"¿Suzuhara-kun?. ¿Ikari-kun?"
Aunque esperaba este evento, aún así estaba sorprendido. Sin embargo, no tanto como Touji.
"¿In... Inchou?"
Ambas chicas aparecieron detrás de nosotros, cargando mochilas similares a las que Touji y yo habíamos traído. Mientras que Asuka parecía no notar el peso sobre sus hombros, Hikari se veía casi exhausta. Sólo me sorprendí un poco cuando Touji corrió hacia ella para quitar la carga sobre sus hombros. Hikari se lo agradeció y ambos se sonrojaron.
Cuando quité mis ojos de la escena, me di cuenta de que Asuka me estaba viendo. Entendí el por qué ya que me di cuenta de que aún estaba arrodillado sobre el punto del césped que previamente había tocado. En silencio, caminó hacia mí. Me levanté. Nos miramos el uno al otro otros pocos segundos, luego Asuka me sorprendió con un beso profundo. Sabía que Touji y Hikari estaban observando, así que al principio me congelé. Era la primera vez que nos besábamos en público. Pero tras un breve momento, me olvidé de nuestros amigos.
"Esta vez, lo hicimos correctamente", susurró Asuka, luego de que rompió el beso.
Cuando llevé mi atención de vuelta a nuestros amigos, noté que Hikari tenía una mirada estupefacta en su rostro mientras que Touji mostraba de nuevo esa maldita sonrisa bufona.
"¡Qué están haciendo aquí!" de repente gritó Asuka, sobresaltándome. Sabía que parte de su plan era convencer tanto a Hikari y a Touji que esto no era un plan, pero aún así no esperaba que gritara tras haberme besado.
"¡De campamento por supuesto!" replicó Touji, señalando nuestras pertenencias, a unos cuantos metros.
"¡Qué coincidencia!" exclamó Hikari. "Nosotras vinimos a hacer lo mismo..."
Eso era simplemente perfecto. Que ella sacara la hipótesis de la coincidencia era lo mejor que podía haber pasado. Sin embargo, aún sin que él lo mencionara, podía sentir que Touji se sentía muy escéptico respecto a esto.
"Entonces. ¿Ahora qué hacemos?" pregunté.
Asuka había previsto que Hikari le sacara ventaja a la situación. Y lo hizo.
"Bueno, nosotras habíamos planeado un viaje de chicas, pero ahora que estamos todos juntos. ¿Por qué no quedarnos todos aquí?. ¡Será divertido!. ¡Entre más mejor!"
Noté que Asuka tenía problemas para esconder una sonrisa maliciosa. Al darme cuenta, tomó su rol de siempre, el cual era gritar y hacer un montón de ruido por nada.
"¿Qué?. ¿Quieres que acampemos aquí?. ¿Con estos pervertidos!"
"¡No somos pervertidos!" objeté.
Desde ese punto, las cosas escalaron en el tipo de argumento que usualmente teníamos.
"¡Lo son!. ¡Estoy segura que escucharon que iba a venir aquí y ustedes vinieron para aprovecharse de la situación! Sin Misato cerca... admítanlo, tú y el otro baka planearon todo esto para que pudieran hacernos todo tipo de cosas pervertidas a nosotras, unas chicas indefensas!"
"¡Qué!" gritó Touji.
"Oh, Dios..." dijo una anonada Hikari.
El argumentó continúo por un rato, hasta que nos cansamos de él y todos decidimos quedarnos, exactamente como Asuka lo había planeado, por supuesto. Dado que la hora de la comida se acercaba rápidamente, nadie tuvo el tiempo para encontrar otro lugar donde se pudiera acampar. Pronto, Touji y yo tuvimos la tarea de colocar las tiendas, mientras Asuka y Hikari se habían ido al bosque para ponerse sus trajes de baño.
"¿Por qué terminamos con todo el trabajo?" se quejó Touji, mientras trataba de figurarme cómo levantar la tienda de Asuka.
"¿Porque somos chicos? Además, estoy seguro de que estás feliz de echarle una mano a Hikari..."
"Sí, pero aún así esta es la tienda de la Demonio..."
"¡Hey!. ¡Asuka-chan no es tan mala!"
"Oh. ¿Así que ahora es Asuka-chan? Ese beso debió ser algo..."
¡Rayos! Había dejado que ese "chan" se me escapara... Oh, bueno, después de lo que él había visto hace rato...
"Nah... eso no fue nada. Deberías vernos cuando estamos juntos en la cama..."
"¡Qué!"
Touji se sorprendió tanto que dejó de sostener la tienda. Todo se vino abajo. Sonreí. Tenía mi venganza.
"¡Oh, viejo!" ¡Tengo que empezar otra vez!"
No pude evitar empezar a reírme. Touji pronto me siguió. Hasta ahora, todo parecía indicar que sería un día agradable.
El día había pasado siendo bastante agradable. Dado que las chicas habían decidido tomar el sol por un rato mientras nosotros nos encargábamos de las tiendas, parecía que la tarea de recolectar madera para el fuego y preparar la comida caería sobre nosotros los caballeros. Dado que las habilidades de cocinero de Touji estaban limitadas al uso del microondas para alimentos instantáneos, él decidió encargarse de la madera. Cuando había juntado una razonable pila de ramas y leños, empecé a hacer una pequeña fogata. Para cuando las chicas se habían cansado de estar recostadas, nuestra comida ya se estaba preparando y el sol lentamente nos estaba dejando.
Comimos, luego platicamos por un rato hasta que Asuka fue a nuestra tienda y regresó con una botella de sake y un paquete de seis cervezas Yebisu en cada mano.
"¡Ahora que empiece la verdadera fiesta!"
Estaba, para decir lo mínimo, más que sorprendido.
"¡De dónde diablos sacaste eso, Asuka!"
"¿De dónde crees? Del mismo lugar del que Misato compra su dotación semanal de alcohol. El dueño no sospechó nada cuando cargué esto a su cuenta."
"¡Hiciste qué!"
"Relájate Shin-chan... no es como si ella llevara las cuentas de cuánta cerveza compra..."
Sacudí mi cabeza con incredulidad. A veces, Asuka simplemente iba demasiado lejos...
"No deberíamos beber... somos demasiado jóvenes..."
"Oh... ¿El pequeño Shinji está asustado?"
"¡No estoy asustado!"
"Pruébalo".
Me tendió una cerveza, con una sonrisa tonta en el rostro.
"No va a funcionar Asuka. No voy a beber eso".
"Justo como pensé. Eres un cobarde. ¿Dime, Touji, eres más hombre que Shin-chan?"
"No tengo nada que probarte".
Esperaba que Asuka se rindiera, pero en vez de eso, una enorme mueca apareció en su cara mientras miraba a Hikari.
"Entonces supongo que eres la única que queda, Hikari. ¿Debemos mostrarles a estos chicos que tenemos más agallas que ellos?"
"No sé Asuka..."
"¿No quieres que estos muchachos crean que eres una chica tímida, verdad, Hikari-chan?"
Sabía que cuando ella dijo 'muchachos', Asuka quiso decir 'Touji'. Y por la manera en que Hikari veía a mi amigo, sabía que Asuka había dado en el blanco.
"No... claro que no..."
De mala gana, Hikari tomó la lata de Yebisu que Asuka le tendió, antes de que ella tomara una. Ambas chicas abrieron sus latas. Hikari tomó un pequeño sorbo.
"No sabe tan mal..."
"¡Vamos, Hikari, así no es como se bebe!"
Me quedé paralizado de ver a Asuka levantar su lata y hacer una imitación muy buena de Misato. Estaba impresionado. Se bebió la lata entera de golpe. No pude evitar preguntarme seriamente si ésta era la primera vez que Asuka bebía cerveza.
"¡Sí!. ¡Misato tiene razón, así es como se bebe!"
"¿Quieres que haga eso?" gritó una aún paralizada Hikari.
Asuka asintió.
Por un momento, Hikari observó su lata... luego intentó copiar lo que Asuka acababa de hacer. Realmente no lo logró, pero aún así se bebió casi toda la lata antes de casi ahogarse y salpicar parte del contenido sobre ella. Luego empezó a soltar risitas, seguida de Asuka. Touji y yo nos miramos el uno al otro. Ambos asentimos y tomamos una cerveza cada uno...
No me da pena admitirlo. No puedo manejar el alcohol. Ese fue el caso en ese entonces y todavía lo es hoy en día.
Tras la primera alta de Yebisu, sentí sus efectos. Tenía la cabeza un poco más despejada y me di cuenta de que me reía más de lo usual. Después de la segunda lata, tenía problemas para caminar derecho, lo cual me di cuenta de que era molesto cuando tenías que caminar una distancia significativa para tener algo de privacidad al pagar por uno de los efectos secundarios de la cerveza. Tras la tercera lata y un par de tragos de la botella de sake de Asuka, me di cuenta de que cualquier intento de mover una de mis extremidades de forma coordinada era casi en vano. Mientras que mi mente estaba más o menos clara, mi cuerpo estaba totalmente fuera de sí. Conforme el tiempo pasaba, estaba lenta, pero seguramente, deslizándome al sueño.
Al menos, no fui el primero en ponerse ebrio. Hikari estaba totalmente fuera de control antes de que me terminara mi segunda lata. Debo decir que fue... una vista interesante. No sé si uso el pretexto de estar ebria como excusa, o si de verdad estaba borracha, pero muy pronto, estaba sobre Touji. Al principio, esto asustó en extremo al chico, pero tras un rato, pareció relajarse y de hecho, disfrutar la situación. Tal vez la cerveza estaba ayudando.
Asuka rápidamente siguió el ejemplo de Hikari y muy pronto estaba toda sobre mí. Como a Hikari, los efectos del alcohol rápidamente se mostraron en su actitud, pues se mantenía cambiando de un humor extremadamente feliz a una actitud tímida y silenciosa.
Touji realmente no parecía verse afectado por el alcohol, si no tomábamos en cuenta el hecho de que se puso rápidamente muy confortable con la atención que Hikari le estaba dando.
Seguro, nos divertimos mucho, algo que rara vez experimentaba. Cantamos canciones, contamos bromas con las que normalmente no nos habríamos reído de haber estado sobrios, e incluso llegamos tan lejos como para nadar a medianoche en el lago. Por fortuna, ninguno de nosotros era lo suficientemente estúpido como para nadar muy lejos, por lo que no ocurrió ningún incidente desafortunado.
Creo que la fiesta se acabó cuando Asuka se dio cuenta de que en verdad estaba dormitando.
"Si me disculpan, voy a llevar a mi querido Shin-chan a la cama antes de que se duerma y logre prenderse fuego a sí mismo, o algo así de estúpido".
Touji, por supuesto, soltó una buena carcajada.
Sentí que alguien me agarraba y me arrastraba a algún lado. Debió ser duro para la pobre Asuka, porque de verdad tenía problemas para caminar. No es que realmente no tratara de ayudarla...
Eventualmente, escuché el sonido de un cierre siendo abierto y fui arrojado dentro de mi tienda.
"Oh, si..." dijo Asuka a Touji antes de seguirme, "Hace rato, moví mis cosas aquí y puse las tuyas en mi tienda. De seguro comprenderás que quiero pasar la noche con mi querido Shin-chan..."
"¡Qué!" gritó lo que sonaba como un obviamente Touji en shock.
Discutieron por un rato, pero no presté atención. Perezosamente, me quité los zapatos usando sólo mis pies y me arrastré a mi saco de dormir. Bueno, supuse que era el mío ya que era el único en la tienda y estaba en donde lo había dejado. Lentamente, le quité el cierre, luego me metí dentro, aunque sin cerrarlo. Me sentía muy cansado como para quitarme la ropa, así que sólo me quedé ahí, listo para darle la bienvenida a una buena noche de sueño. Por supuesto, fui despertado por Asuka unos cuantos minutos después. Supongo que eso significaba que ella había ganado el argumento.
"¡Vamos, todavía no te quedes dormido, baka! Vaya, y hablando de baja tolerancia al alcohol. De verdad eres patético..."
Esas palabras me parecieron raras. Ésta no era la chica ebria que había estado sobre mí hace un rato. Ese pensamiento fue suficiente para mantenerme despierto por un rato. Conforme abrí los ojos, me di cuenta de que Asuka definitivamente no se veía como la de siempre.
"Bueno, eso está mejor. Si estamos juntos, por lo menos puedes guardarme compañía".
"Lo haces sonar como si fuera algo malo. ¿Sabes?. ¡Tú eres la que siempre se está escabullendo a mi cama!"
"Pues claro... tu cama es más cómoda que la mía".
Por unos segundos, en verdad me pregunté si ella estaba hablando o no en serio.
"Hablando de camas. ¿Dónde está tu saco de dormir?" pregunté, tratando de cambiar de tema.
"Lo dejé en el departamento, tenía que hacer algo de espacio para la cerveza y el sake".
"¿Qué vas a hacer?"
"¿Pues tú que crees?. ¡Usar el tuyo claro!"
"¿Qué?. ¡Es mío!"
Para afirmar mi reclamo, lo agarré con toda la fuerza que pude reunir. Asuka solamente se encogió de hombros.
"¿Y? Hay suficiente espacio para dos..."
Probablemente era inútil tratar de discutir, así que mantuve la boca cerrada. Sería un poco apretado, pero creo que podíamos arreglárnoslas para caber dentro de una único saco. De verdad me preguntaba... cuando fuimos de compras, ella había insistido en que me llevara el saco más grande, diciendo que estaría más cómodo. ¿De verdad ella había planeado dejar su saco desde entonces? Pero si lo hizo. ¿Por qué compró uno en primer lugar?. ¿Sólo para que yo no sospechara? Parecía demasiado, incluso para alguien como Asuka.
Oh, bueno... de todas formas no era como si fuera la primera vez que compartíamos el espacio para dormir...
"¿Shinji?. ¿Crees que soy bonita?"
Fui tomado por sorpresa por la pregunta, pero la respondí siquiera antes de pensar. No era como si realmente pudiera pensar mucho esa pregunta.
"¡Por supuesto que creo que eres bonita, Asuka-chan!. ¿Quién no te encontraría bonita...?"
Esperaba que fuera toda sonrisas tras semejante respuesta, pero su rostro estaba muy serio. No recordaba haberla visto así de seria antes. Se sentía... casi como si estuviera viendo a la Rei que conocía hace dos meses.
"¿Crees que soy más bonita que Rei?"
Me encogí ante esa pregunta. La verdad no sabía qué responder, Si decía que no, probablemente la lastimaría. Si decía que sí, Asuka seguramente se lo diría a Rei. ¿Por qué tenía que hacer esa pregunta...?
"¡Ustedes dos son las chicas más bonitas que conozco!"
Sabía que esto no la iba a satisfacer, pero por lo menos me daría algo de tiempo. No es que realmente me ayudara...
"Oh... ¿Entonces, soy tan bonita como ella, no?"
Sólo asentí nerviosamente. Parte de mí, sin embargo, estaba muy preocupada por ella. La manera en que había hecho esa pregunta, con una voz tan monótona similar a la de Rei...
"Ya veo..."
Temerosamente, aguardé su cólera. Nunca hubiera anticipado lo que hizo a continuación.
Se levantó, luego, antes de que mi cerebro registrara lo que estaba haciendo, dejó caer a sus pies la parte superior de su traje de baño. Estaba sorprendido más allá de toda creencia. Sin mencionar un poco asustado.
Aún así, no pude evitar mirar fijamente a sus senos expuestos. Después de todo, eran, una vista adorable... sin embargo, me sentí levemente perturbado por la expresión sin emociones de su rostro. Era como si lo que acababa de hacer no significara nada para ella.
"¿Entonces, es Rei todavía tan bonita como yo?"
Traté de darle algún tipo de respuesta, pero ninguna palabra podía salir de mi boca.
"Veo que aún necesitas algo de convencimiento".
No puedo creer que no me haya desmayado o sufrido una hemorragia nasal de gravedad cuando me di cuenta de que el "convencimiento" consistía en quitarse la parte inferior de su bikini. Parte de mi mente me comandó a cerrar a los ojos y huir, pero otra parte estaba simplemente demasiado fascinado para hacer nada más que observar. Así que eso fue lo que hice.
"¿Entonces, soy más bonita que ella?"
Sólo asentí como un idiota. Si eso era lo que quería oír, eso es lo que yo diría. Francamente, realmente no pensé mucho en la pregunta, Y no me importaba mucho de momento.
Apenas reaccioné mientras Asuka lentamente se colocaba encima de mí, sus rodillas a cada lado de mi cuerpo. Probablemente era demasiado para mi cerebro... se inclinó, de manera que sus pechos estaban a sólo centímetros enfrente de mis ojos.
"¿Quieres esto?"
"Asuka, deberías detenerte..."
No me escuchó. En vez de eso, tomó cada una de mis muñecas y simplemente puso mis manos sobre sus senos. Jadeé ante el tacto. Eran muy suaves, pero firmes, tibios, y encantadores. Me di cuenta de que se sentía un poco familiar al seno de Rei que había agarrado hacía ya meses. Aunque, a diferencia de esa vez, podía tomar el tiempo para disfrutar la sensación.
De nuevo, sentí una punzada de preocupación cuando el rostro de Asuka parecía fijo en una máscara de indiferencia. Algo estaba mal...
"Asuka... nosotros... nosotros no deberíamos estar haciendo esto..."
Había dicho las palabras, pero parte de mí no las creía. Estaba en extremo nervioso, pero sabía que esa no era la razón por la que trataba de resistirme a esta diosa pelirroja. La única cosa que evitaba que me rindiera a ella era el miedo. Miedo de lastimar a Rei, y miedo de lastimarla a ella también...
Solté un suspiro de alivio cuando Asuka removió mis manos de su pecho, pero me congelé cuando ella empezó a deshacer la hebilla de mi cinturón. La chica no había escuchado una palabra de lo que dije. No podía culparla realmente, ya que yo no estaba oponiendo mucha resistencia. Sin mencionar que cierta parte de mi anatomía claramente mostraba que no creía mucho en mis propias palabras. Tampoco ayudó que dejara escapar un leve gemido cuando su mano "accidentalmente" la tocó. Finalmente, algo de expresión apareció en su rostro. Una pequeña, pero clara sonrisa maliciosa.
"Esta noche, eres mío".
"Asuka, por favor..."
No pude decir más mientras ella me bajaba los pantalones.
"Seré tu primera. Esta vez, venceré a Rei..."
Esas palabras tuvieron tanto impacto en mí como la explosión de una mina N2. Mis pensamientos se volvieron tan claros como el cristal mientras entendía una simple realidad. Con esas palabras, todas las piezas del rompecabezas cayeron en su lugar. El viaje de campamento. Poniéndonos ebrios. Que compartiéramos la misma tienda. Hasta la expresión de Asuka. El propósito de Asuka jamás había sido ayudar a que Touji y Hikari admitieran sus sentimientos. Desde el inicio, la única intención de Asuka había sido lograr lo que Rei había fallado en hacer: tener sexo conmigo. Ni siquiera era algo que ella quisiera hacer, su actitud tan fría era prueba de ello. Sin siquiera pensarlo, mi mano salió disparada. Asuka cayó, sus ojos abriéndose de sorpresa. Alzó sus dedos temblorosos a la mejilla que yo acababa de abofetear.
"Todo el tiempo, me estuviste manipulando... ¿Alguna vez siquiera te importé¿O sólo era una competencia con Rei, conmigo como el trofeo?"
"Shinji... yo..."
"Cállate".
Había hablado en una voz apenas más fuerte que un susurro. Pero tuvo más efecto que si hubiera gritado, pues las palabras cargaban todo el dolor que sentía. Me puse los pantalones, tomé mis cosas, a excepción del saco de dormir, y salí de la tienda. Ya no sentía más los efectos del alcohol.
"¡Shinji!"
Gritó mi nombre unas cuantas veces. Mientras caminaba hacia la fogata, ignoré sus llamadas.
Finalmente, mis piernas se rindieron y me colapsé. No intenté levantarme. No tenía la fuerza. Si la muerte hubiera venido hacia mí, no me habría movido.
"¿Por qué?" grité, golpeando el pasto con un puño.
¿Por qué?. ¿Cómo pudo hacer esto?. ¿Acaso siquiera me amó en primer lugar?
"No deberías preocuparte por ella. Si ella ni siquiera puede decirte que te ama, entonces no puede ser más que una amiga".
Quizás Rei tenía razón. Asuka realmente nunca me había dicho que me amaba. Sólo que le gustaba. Podía significar cualquier cosa.
Claro, yo era culpable del mismo crimen. Jamás había encontrado el valor para decirle a alguna de ellas que las amaba. Sin embargo, sabía que lo hacía. Pero nunca se los había dicho, temiendo que esas palabras eventualmente lastimaran a alguna de ellas si elegía a la otra.
¿Podía ser esto un malentendido...?
"Esta vez, venceré a Rei..."
No, no había otra manera de interpretar esas palabras. Asuka solo había estado... jugando conmigo. Como siempre lo hizo.
Sentí que quería llorar, pero me decidí a no hacerlo. Ya había sufrido bastante por culpa de mi padre. No lloraría por otro titiritero.
"¡Maldita seas, Asuka!. ¡Maldita seas!. ¡Maldita seas! Maldita seas..."
"Hombre, te ves terrible..."
Levanté mi cabeza, sólo lo suficiente para ver que Touji se había reunido conmigo cerca del fuego.
"Deberías estar en los brazos de Hikari ahora mismo, no aquí tratando de alegrarme..." le dije, tratando de hacer que se fuera. No quería recibir la lástima de nadie.
"Sí... pero parece que Hikari no puede manejar el alcohol. Se durmió en el instante en que se acostó en su saco de dormir".
"Es una pena".
"No es tan malo. Ahora sé como se siente. Gracias Shinji".
Le dirigí una mirada desconcertada.
"¡Hey!. ¡No soy un idiota!" dijo Touji. "Sé que no fue una coincidencia que todos nos encontráramos aquí".
"Todo fue obra de Asuka. Ella sólo quería arrastrarme lejos de Misato y Rei para que pudiera usarme como el idiota que soy".
"Tal vez... pero tú... ¿Tú hiciste esto por nosotros, verdad? Entonces, de nuevo, gracias, Shinji".
Me tomó algo de tiempo analizar lo que Touji acababa de decir. Luego sonreí.
"Hey, si este lío puede hacer feliz a mi mejor amigo, creo que lo vale".
Touji sonrió en respuesta. Luego, me dio una mirada muy seria, la que sólo aparecía en su cara cuando estaba él preocupado.
"¿Entonces, qué sucedió?"
Se lo expliqué todo. Hasta los más íntimos detalles. De todas maneras no era como si hubiese significado nada.
"Si no fuera por el hecho de que también yo estaría enojado si fuera tú, te diría estúpido. Un montón de tipos matarían por una oportunidad con esa chica".
"Puede joder a quien quiera, no me importa..."
Sin ninguna advertencia, Touji me golpeó fuerte en la cabeza.
"¡Hey!"
"¡Baka!. ¡No quieres decir eso y lo sabes! De lo contrario, no te sentirías tan miserable por esto".
Por mucho que odiaba admitirlo, él tenía razón.
"Supongo que tienes razón. Tal vez por eso duele tanto. ¿Sabes?. Te envidio Touji. Hikari es una buena chica. Es linda, honesta y de verdad le importas. No querrías una vida amorosa tan complicada como la mía".
"Quizás deberías dejar a Asuka explicarse..."
"¿Para que puede tratar de manipularme otra vez? No".
Por un rato, ambos nos mantuvimos en silencio, sin saber qué decir.
"Por lo menos, aún tienes a Rei. No hay duda de que ella te ama".
"Rei".
Con la mención de su nombre, mi corazón pareció sentirse más ligero.
"Tal vez deberías estar feliz por esto. Esto soluciona tu problema. Ahora que las cosas se acabaron con Asuka, puedes seguir adelante con Rei. Dijiste que las amabas a ambas lo mismo. Una o la otra... ¿Cuál es la diferencia?"
Esas palabras me perturbaron. ¿De verdad... de verdad se había acabado?. ¿Así? Pero Touji tenía razón. Esto solucionaba mis problemas. ¿No es así?. Ya no estaba seguro de ello. Solía pensar que las amaba a ambas de misma manera. ¿Pero era ese realmente el caso?. ¿Y si... y si amaba más a Asuka que a Rei?
"Dime. ¿No vas a dormir afuera , verdad? Puedes dormir en nuestra tienda si quieres".
"No, no quiero imponerme".
"En serio, Shinji..."
"Me quedaré aquí, Touji".
Dándose cuenta de que no iba a cambiar de opinión, Touji se fue. Regresó rápido de su tienda, sosteniendo un saco de dormir.
"Ten. Al menos no pescarás un resfriado".
"¿Y tú?. ¿Qué vas a hacer?" pregunté, preocupado.
"Me las arreglaré, no te preocupes. Por lo menos no me tengo que preocupar de la lluvia o el viento".
"Gracias, Touji".
Touji me dio una sonrisa orgullosa.
"¡Hey!. ¿Para qué son los amigos?"
Luego una seria expresión se mostró de nuevo en su rostro.
"Shinji... vivimos en un mundo de locura. Tú deberías saberlo mejor que nadie. Sea cual se la decisión que tomes, no esperes demasiado. Porque si lo haces, algo tal vez pase y podrías arrepentirte de ello. Piénsalo. Es lo que he estado haciendo las últimas horas..."
Cuando Touji se fue, ciertamente tenía mucho en qué pensar.
Deseaba haber traído mi SDAT. Siempre me ayudaba a sacar cualquier pensamiento fuera de mi mente.
Maldición...
Desperté, arrepintiéndome de haberlo hecho. No sabía si era el resultado del alcohol, o el hecho de de que había dormido bajo las estrellas, pero me sentía miserable. Bueno, más que la noche anterior. Me sentía mareado, sentía que me dolían todos los músculos. Mi boca se sentía seca y arenosa, como si en verdad hubiera estado comiendo arena. Mientras que anoche el alcohol había afectado mis extremidades pero dejado mi mente libre, los efectos posteriores de hoy eran todo lo contrario. Tenía el perfecto control de mi cuerpo. Demasiado perfecto. Parecía como si fuera hipersensitivo a todo. Cualquier movimiento mandaba una ventisca de señales que se estrellaban en mi cerebro. No perdía nada, ninguna sensación era demasiado pequeña para sobrecargar mi mente con su zumbido.
Esa tormenta de sensaciones se añadieron a mi sentimiento general de podredumbre. Había sido traicionado. De nuevo. Traicionado por alguien que pensé que amaba. No. No que pensé que amaba. Que amaba. Eso es lo que lo hacía tan doloroso. No me quedaba nada aquí. La euforia que había experimentado ayer se había vuelto cenizas, ahogándome con sus restos. Debí haber recordado lo que aprendí antes de venir a Tokyo-3: nunca abrir tu corazón. No podían lastimarte si no los dejabas entrar. Dejé entrar a Asuka, pensé que podía confiar en ella. En vez de eso ella rasgó algo de mí. Casi podía oír su risa burlona. Peor, casi podía ver esa sonrisa maliciosa que debía estar en su cara. Había visto esa sonrisa en mis pesadillas. Era igual a la de mi padre. Eso era lo que más me dolía.
Dolorosamente, me levanté y miré el cielo. Acababa de amanecer. Despierto, pero con la mente sin realmente estar enfocada en lo que estaba haciendo, me arrastré al lago y, usando mis manos como un cuenco, tomé unos pocos sorbos de agua, luego salpiqué mi cara. Por ahora, traté de enterrar mi dolor lo más profundo posible, como siempre lo hacía. Lo encontré más difícil de hacer que lo usual.
En el proceso de tratar de enfocar qué estaba pasando fuera de mi mente, noté un detalle muy importante que me había negado a ver hacía unos pocos segundos. En el suelo estaba una toalla y unas cuantas prendas. Eso quería decir... ¡Que alguien se estaba bañando en el lago! Y dado que dudaba que Touji usara panties, ese alguien muy probablemente era mujer.
Bien, no era un problema... sólo tenía que darme la vuelta, regresar al saco de dormir de Touji y fingir que estaba dormido.
Pero parte de mi mente no dejaba ir un único pensamiento... que podía ser Asuka.
Qué patético. Con todo lo que ella había hecho, aquí estaba, casi babeando ante la idea de verla...
Parcialmente asqueado conmigo mismo, levanté mi cabeza. Como sospeché, alguien estaba en el lago. Una chica de cabello café. Hikari supuse, ya que era la única chica de cabello café por aquí.
No sabía si sentirme aliviado o decepcionado.
Dado que la muchacha no me estaba viendo, aún no había notado que estaba observando su espalda desnuda. Por supuesto, con la suerte que había tenido estas últimas semanas, tenía que voltearse antes de que yo decidiera hacer lo mismo e irme. Así que, cuando ella lo hizo, no sólo confirmó que la chica ciertamente era Hikari, sino que también me dio una vista perfecta de sus senos. Mientras que la vista era linda, no puede evitar sentirme abrumado por el temor. Estaba muerto. Si Hikari no me mataba, Touji lo haría. Y estaba seguro que esa tonta sonrisa que tenía en mi cara no ayudaba para nada...
¡Qué estúpido!
"¡Lo lamento!" pude murmurar mientras rápidamente me daba la vuelta y regresé a donde ahora el fuego extinto donde esperé mi sentencia de muerte.
Sólo tomó un minuto antes de que sintiera una presencia a mi espalda.
"Ikari-kun".
"Horaki-inchou... yo... yo..."
Mientras me volteaba, olvidé cualquier excusa que estaba tratando de decir. Hikari estaba parada justo frente a mí, vistiendo solamente sus panties y la chaqueta de deportes de Touji. Ese último hecho atrajo mi atención. ¿Acaso ellos...? Mientras notaba la expresión excesivamente feliz en su rostro, concluí que ciertamente estos dos habían... pasado un buen rato. Asuka había tenido razón después de todo. Por lo menos todo este viaje no había sido un desperdicio.
Asuka...
¿No podía ella simplemente dejarme solo?. ¿Por qué no podía sacarla de mis pensamientos?
Con mi mente ausente otra vez, no reaccioné al principio cuando Hikari se inclinó sobre mí y plantó sus labios sobre los míos. Pero cuando me di cuenta de lo que había pasado... sólo había sido un beso muy ligero, pero aún así me dejó en estado shock.
"Gracias, Playboy-kun..." (2)
La observé mientras se iba a su tienda, tarareando una tonada feliz, y me quedé mirando por un minuto entero después de que se había metido dentro, mi cerebro incapaz de funcionar correctamente. Traté de analizar los últimos eventos. Touji y Hikari aparentemente habían dormido juntos. Luego, había visto a Hikari desnuda, pero seguía vivo. No sólo eso, sino que también me había besado en vez de romperme cada hueso del cuerpo. Seguramente esa chica no era la usualmente tímida, a veces mandona Hikari que yo conocía. Tal vez aún seguía borracha. Sí, eso debía ser. Satisfecho con esta conclusión, decidí olvidarme por completo de los últimos minutos e ir a juntar algo de leña para hacer una nueva fogata. Pronto sería hora del desayuno.
Por lo menos, lo que acababa de pasarme tuvo algunos efectos positivos. Por unos pocos momentos, dejé de pensar en Asuka. Y ahora que volvía a pensar en lo que vi hacía unos minutos, no pude evitar sonreír. Una sonrisa muy pequeña, pero sin duda una.
"Te envidio Touji. Ella es una chica buena, linda, normal..."
El desayuno estaba casi listo cuando Touji y Hikari se me unieron. Noté que estaban agarrados de las manos. Por primera vez, ninguno de ellos estaba tratando de ocultar sus sentimientos mutuos. De hecho, con las grandes sonrisas en sus rostros, estos parecían estar en una especie de paraíso privado.
Otro hecho que me sorprendió fue que Hikari no llevaba el cabello como siempre. En vez de ello, su cabello café caía libremente sobre sus hombros. Era un pensamiento que usualmente trataba de evitar, pero esta vez, no podía. Hikari era una linda chica.
No pude evitar temblar una vez que Hikari finalmente me notó. Sin embargo, se quedó callada sobre el incidente previo. De hecho, ella fue extremadamente buena conmigo. Tal vez sólo estaba tan feliz que no se sentía enojada conmigo. Me relajé cuando me de cuenta de que debíamos simplemente compartir una comida agradable. Y debo admitir, que aún cuando me sentía un poco deprimido, me divertí mucho viendo como Hikari le daba de comer a un Touji avergonzado. Pronto, todos estábamos riendo. Pero las risas murieron en cuanto Asuka salió de su tienda.
Hikari se disculpó, murmurando algo acerca de lavar los platos. Touji se ofreció a buscar algo de madera para el fuego, aún cuando había suficiente todavía en la pila. Ahora estaba completamente solo con Asuka. Vaya amigos tenía, dejándome como ratas abandonando un barco que se hunde.
Asuka se paró frente a mí. Vestía esa cara neutral, sin emociones. Sabía que probablemente yo tenía esa misma expresión.
"Shinji, yo..."
"Detente". Le ordené. "Ni una palabra. No quiero oír una palabra. Nada de excusas, nada de explicaciones, nada de insultos, nada".
Pude ver claramente la sorpresa en su cara. Y, en algún grado, el dolor.
"Ahora mismo, no estoy seguro de poder confiar en ninguna de tus palabras".
No le di oportunidad de responder. Me fui. Ella no tenía nada para retenerme. Bien.
Si ella quería el desayuno, iba a tener que cocinarlo ella misma. Yo no lo haría.
Una hora después, Hikari sugirió que debíamos regresar a Tokyo-3. Todos coincidimos en silencio. La diversión se había terminado. Recogimos nuestro equipaje, y nos fuimos. Asuka, Hikari y Touji si fueron directamente a casa. Sin embargo, los rumores dijeron que después en ese día, Touji y la delegada de la clase habían sido vistos juntos en el parque, en una posición muy acogedora. Ellos no negaron los rumores, sino que más bien los confirmaron con un beso justo en medio de una clase llena de estudiantes asombrados.
Vagué por un rato antes de regresar al departamento. Con todo mi equipo de acampar, atraía muchas miradas curiosas, pero apenas y las noté. Tenía mucho sobre qué pensar. Dejé a mis pensamientos vagar.
Mamá. Ella me había dejado. A veces todo lo que podía recordar de ella era cómo había dolido cuando supe que ella no iba a volver.
Padre. El también, me había abandonado, pero siempre esperé en secreto que pudiéramos tener otra oportunidad. Bueno, esa esperanza había muerto recientemente, y si no tuviera dos chicas sobre quienes pensar, no sé lo que habría hecho.
Y ahora Asuka también me había dejado. No en un sentido físico, sino emocional. Me dejó haciéndome sentir usado, como un juguete, controlado. Como siempre. Soy tan patético...
Gente que amaba moría.
Gente que amaba me abandonaba.
Gente que amaba me usaba.
¿Acaso todos a lo que amaba me iban a abandonar?
No. Rei no lo haría, Rei no moriría como mi mamá. Tenía la habilidad para protegerla. Nada le pasaría a ella, no lo permitiría. Ella no me abandonaría como mi padre. Cada uno de nosotros no tenía a dónde más ir. Ella se quedaría conmigo. Y ella no me usaría, como... como...
¡Maldita!
Rei era todo lo que me quedaba, y todo con lo que podía contar. Aún si no había nadie más, siempre podía creer por completo en ella.
"¿Acaso Rei te dijo su secreto?"
Desvanecí las palabras de mi padre con enojo. Yo podía confiar en Rei. ¡Yo podía! Ella nunca me escondería nada. Ella era mi última esperanza, y ella no me defraudaría.
Ella no lo haría.
Ella no lo haría...
Si lo hacía...
Cuando finalmente regresé al departamento, me alegré de que Misato me dijera que Asuka estaba en su cuarto. Me dirigí al mío, vacié mi maleta de casi todo su contenido, luego guardé en ella casi toda mi ropa. Agarré mi mochila, mi SDAT y salí de la habitación.
"Shin... ¿Shinji?. ¿A... a dónde vas así?" preguntó Misato, visiblemente sorprendida y preocupada.
"Con Rei, Misato-san. No estoy seguro de poder vivir aquí ahora mismo".
Aún cuando todavía se le veía preocupada, podía decir que Misato se sentía aliviada. Probablemente había pensado que planeaba huir de nuevo.
Di una última mirada alrededor. Y pensar que había empezado a considerar este departamento como mi hogar. Ahora que sentía paz aquí, tenía que irme. ¿Era este algún tipo de destino torcido? Primero, mi Padre me había arrastrado fuera de mi aburrida pero tranquila vida de la casa de mi tío. Ahora, tenía que dejar este lugar, echado por Asuka...
Odiaba mi vida.
"¿Cuándo volverás?"
"No lo sé. Quizás no vuelva".
Traducido al español el 23 de Junio del 2006
Notas del traductor: ok, aquí la primera parte del Capítulo 6, seguimos con esta gran historia , aunque es probable que dentro de poco ya le baje un poco el ritmo, ya que sólo he llegado hasta el final de este Capítulo en traducir, pero haré lo posible por continuar.
Clow Riusaky: vaya, hehe, no sé si sentirme halagado o amenazado pero aprecio tus comentarios, pero como bien dije, clasificación "M" en defintiva me parece adecuada (rayos, esta Parte 1 es digna de ello ¿no?), en fin, de vuelta al trabajo.
