Cuando terminó la cena, Harry miró fijamente a Draco. Luego caminaron junto con sus casas y se desviaron a la mitad del camino, para encontrarse fuera del closet. Harry vio llegar a Draco e inmediatamente levantó el puño con intención de golpearlo.

"Calma Potter, no querrás que nos sermoneen de nuevo ¿verdad?" Draco tomó el puño cerrado de Harry que se encontraba en el aire y lo bajó.

"Vamos a investigar a la biblioteca." Harry lo miró furiosamente, pero se notó la resignación en su voz.

"Y ¿precisamente que estaremos buscando?" Draco sonreía furtivamente mientras caminaba por la parte más oscura del pasillo.

"¿Monstruos?" y por un instante les pareció oír una risa malvada que provenía de las paredes. Intercambiaron miradas y continuaron caminando.

"No tienes idea. ¿Verdad?" Draco miraba a Harry impaciente.

"¿Tú sí?"

"No, pero creo que tu tienes una amiguita que podría sernos de utilidad."

"No utilizaras a Hermione. Además no me creyó cuando le conté, no veo porque nos ayudaría."

"Uy, ni tus amigos te creen. Triste, muy triste." Draco negaba con la cabeza mirando el suelo. Cuando termino de pronunciar sus palabras se quedó completamente quieto y miro de reojo a Harry.

"Cállate Malfoy, tampoco veo a tus amigos aquí ayudando. ¿No te creyeron?" Harry trataba de igualar el tono desafiante de Draco.

"Me creerían si les dijera que eres mi mejor amigo, aun así se que no nos servirían de nada en estos momentos." Draco se frotaba la barbilla mientras meditaba.

Unos pasos comenzaron a sonar por el pasillo y se acercaban tímidamente desde la oscuridad. 'Un estudiante, no pueden verme con Potter así' Draco miró a Harry que no se había percatado de la otra presencia. Lo tomó del cuello del uniforme y lo estrelló contra una pared.

"¿Qué te pasa Malfoy?" Harry trataba de soltarse.

"Asustado Potter." Draco le guiño un ojo a Harry y le marco con la mirada al otro presente. Cuando ya estaba cerca el extraño, Draco soltó a Harry y se volteo contra el otro chico. "¿Y tu que haces aquí?" El chico comenzó a correr asustado. "Si corre mientras puedas y mas te vale que no le digas a nadie."

Harry seguía sacado de onda por la actuación de Draco.

Draco se volteo bruscamente hacia Harry "Ya se que le puedes decir…" Harry sobresaltado, brincó hacia atrás y levantó los puños para defenderse. "¿Y a ti que te pasa?" Draco miraba a Harry con la boca abierta.

Al día siguiente Harry corría alrededor de Hermione. Al final de cada clase, cuando estuviera hablando con algún amigo o amiga, desde que entraba al baño la esperaba a que saliera, y todo lo que decía es "Vamos ayúdame a demostrarte que no estoy loco. ¿Qué es un día en la biblioteca, si siempre lo haces?" y así pasó todo el día, hasta que Hermione ya no aguantó más.

"OK, OK. Después de clases."

Harry fue a buscar a Draco, para decirle que todo estaba listo. Pero no podía encontrarlo por ninguna parte, faltó a la clase de pociones, no entró a criaturas mágicas y hasta fue a buscarlo cuando tenía defensa contra las artes oscuras. Comenzó a preocuparse de que lo hubieran secuestrado de nuevo. Se sentó en la escalinata que daban hacia la casa de Hagrid y se quedó meditando mientras se sujetaba la cabeza. Al menos ya había podido hablar con Amaya y no se veía tan molesta como al principio, de echo se había visto muy emocionada.

Después de un rato apareció Draco, estaba extrañamente despeinado y su ropa totalmente desacomodada. Conforme se acercaba a Harry se iba abotonando la playera por debajo de la capa. Se paró delante de su compañero. "McGonagall quería vernos"

"¿Eso es todo? Te desapareces todo el día, me preocupas ¿y solo llegas a decirme eso? ¿Donde has estado todo el día? ¿Te secuestraron?" Harry se levantó

"¿Este? Si mamá, me secuestraron. Pero estoy bien" Draco siguió caminando dentro de la escuela, acomodándose el pelo.

"¿Qué? ¿Qué quieres decir con ese tono? ¿Y por que me llamas mamá?" Harry siguió a Draco en dirección al salón de la profesora.

Llegaron al salón y encontraron a McGonagall sentada en su escritorio esperándolos. Estaba ligeramente molesta e impaciente. "¿Dónde estaban?"

"Lamentamos la tardanza, pero díganos profesora. ¿Cuál es el problema?" Draco se mantenía totalmente erguido y utilizaba un tono muy serio.

"No se haga el tonto, señor Malfoy. Se me dice que ayer en la noche fue sorprendido usted agrediendo al señor Potter."

"Esto debe ser un mal entendido. Potter y yo no hemos vuelto a tener ningún problema." Draco no cambio su tono y tampoco tubo que mirar a Harry para que este lo apoyara.

"Es verdad, este debe ser un malentendido."

"Me gustaría creerles, pero mi fuente es muy confiable."

"¿Más que el acusado y la victima contando la misma versión?" Harry se acerco a la profesora y le sonrió.

"Tienen razón. Les daré una oportunidad, serán compañeros de estudio durante un mes, si no hay ningún problema les daré setenta puntos a cada uno."

Ambos estudiantes asintieron con la cabeza y luego se retiraron. "Eso es oportuno. ¿No lo crees Potter?"

"¿Qué quieres decir?"

"Ya tenemos una razón para estar juntos." Draco comenzó a caminar.

"Siempre tienes que sacarle el provecho a las circunstancias ¿verdad?" Harry alcanzó a Draco.

"No tienes una idea de cuanto" susurro Draco

"¿Qué dijiste?"

"Vamos Potter, no me digas que tienes problemas en el oído. Te pregunte que si convenciste a Hermione."

"Ahhh. Claro, vamos a verla después de clases."