Hehehe… después de milenios aquí esta el tercer capítulo ♥ ♥ ♥ Disculpen la demora pero la verdad es que he tenido varios problemas como la falta de computadora y luego de dispositivo usb y ahora con mi trabajo… no los aburro con mis problemas así que mejor vamos con la historia…
Read and review!
Manners
Capítulo 3: No Luck
No tenía por cuanto tiempo había estado persiguiendo a ese carro con la bicicleta, lo único que sabía era que mis piernas ya no podían más. Por momentos el carro me sacaba una gran ventaja pero me recuperaba con los cambios de luz y lograba volver a ubicarlos. Cuando no venía la luz roja tenía problemas por que me era difícil seguir el rastro de la tiza.
Seguramente este no era mi día. Seguía peleado con mi mejor amigo, alguien se lo estaba llevando lejos de mi y ni siquiera les podía seguir la pista, me moría de hambre y para remate la llanta se desinflo por completo… ahora si nunca sabría a donde se lo habían llevado… lo único que me quedaba era seguir el camino a pie y a ver si por ahí tenía la suerte de encontrarlo.
Mi bicicleta justo ahora se le había ocurrido fallar… la tome y la puse a un lado. La amarré a un poste pero antes de dejarla ahí pensé que también sería bueno dejar mi maleta… solo llevaría lo esencial, como mi celular por si tengo alguna noticia de algo, mis zapatillas que ya las tenía puestas, mi raqueta por si necesitaba defenderme de alguien y unos caramelos que me encontré en la maleta.
SI me acordaba de los caramelos… yo le había entregado una de mis cajas a Ryoma ayer mientras estábamos castigados en el pasillo. Esos caramelos me gustaban mucho pero a él le gustaban más por que según el no se los acababa tan rápido como cualquier otra golosina.
Armado con estas cuatro cosas traté de seguirle el rastro a la ya gastada tiza… esto sería más difícil que encontrar la aguja en un pajar…
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Estaba tan aburrido dentro del carro que no me di cuenta en que momento me dormí. Después que el carro dejo la gasolinera tuve la impresión que alguien había estado por ahí pero seguro era impresión mía. No había nadie que se hubiera dado cuenta de algo en medio de la autopista, tampoco en la gasolinera, mis gritos habían sido en vano.
Pero había algo que si me había dado cuenta y era que el carro daba demasiadas vueltas… sería para intentar marearme? Si era por eso ya lo habían logrado por que no tenía idea donde podíamos estar en estos momentos y más aún después de haberme quedado dormido.
Al parecer Tsuhiko también se había quedado dormido de hambre durante el camino, por mi parte lo acompañaba en ese sufrimiento por que desde hacía un buen rato que mi estómago hacía sonidos bastante sonoros… sería por que no había comido casi nada durante el día? Sería talvez por que mi hora de comer ya había acabado?
El carro estaba en silencio por que en medio de todo todos estábamos aburridos de estar en el carro. Mis dedos poco a poco dejaban de estar adormecidos y se iban moviendo con cierta dificultad por que sobre ellos estaba todo el peso de mi cuerpo. Había algo debajo de mi espalda que no me dejaba estar cómodo… parecía ser un cubo por que sentía una arista hincarme cada cierto tiempo que el carro frenaba por la velocidad.
Cada vez mi cuerpo recobraba un poco más de movilidad. Por una parte era bueno por que podría intentar algún tipo de escape apenas me soltaran… lo malo era que las piernas se me comenzaban a adormecer y las sogas estaban tan apretadas que me cortaban la circulación además de producirme un gran dolor.
-"Ya se despertó el enano Kentaro… ten cuidado que no haga nada que lo pueda perjudicar… detestaría tener que cerrarle el pico!"
-"No creo que haga nada… apenas se puede mover"
-"No te confíes de todas maneras… uno nunca sabe que se le pasa por la cabeza al mocoso. Cuanto falta para llegar?" – el anciano volvió a hablar después de mucho. Por lo general el no hacía muchos comentarios y más se la pasaba con el celular en la mano esperando algún tipo de llamada… tenía algún tipo de aparato auditivo en la oreja derecha… al parecer no podía oír bien y dependía completamente del aparato.
Yo por mi parte trate de hacerme el que con las justas podía moverme, algo que era casi cierto por que estando bien atado no podía hacer gran cosa y continué mirando hacia el piso del carro tratando de no captar los ojos del conductor que me daban miedo.
Después de esto no pasaron más de veinte minutos y por fin el carro se estaciono.
El lugar no era ciertamente la guarida de algún ladrón de la tele o de las películas. Como esos lugares que están escondidos o en algún tipo de callejón por el que nadie transitaba. Lo que si era cierto era que no había ningún alma por ahí y el olor era fuerte a mar. No era una fábrica ni un depósito, era una casa grande y normal… parecía una casa familiar.
Todos bajaron del carro, por un momento pensé que se habían olvidado de mí por que entraron a la casa y no regresaron hasta después de un rato. Kentaro venía de mala gana con rastros de salsa de tomate en la cara y maldiciendo en voz alta. Abrió la puerta y me jalo hacia fuera por las sogas de mis muñecas. Me estrelle contra el suelo lleno de esas piedritas de construcción que uno siempre encuentra en la mayoría de estacionamientos.
-"Párate de una vez!"
-"Si lo hubiera podido hacer lo hubiera hecho no?" – lo miré con algo de dolor… el olía como a comida italiana… - 'Tengo las piernas atadas… no me puedo parar…" – Kentaro se dio cuenta de su error y se agacho para levantarme y desatarme las piernas que las sentía como gelatina aguada.
-"No vayas a intentar correr… por aquí no hay muchos lugares donde esconderse así que sería en vano… además por que si te llego a atrapar te sacaría la…"
-"Ya vas a venir? Apúrate o sino Tsuhiko se va a acabar tu porción!" – el anciano lo corto en plena amenaza… no culpaba a Kentaro si me pateaba para que caminara más rápido, yo también me moría de hambre… ojala y me dieran algo de comer…
El camino desde el carro hasta la puerta principal de la casa era largo… además de encontrarse como en una cima. Mientras que la puerta se abriera regrese mi vista hacia el carro… se veía oscuro desde donde estaba… me picaba la pierna… hice un pequeño movimiento como para rascarme con los brazos y una caja se cayo de mi bolsillo izquierdo de mi pantalón… era la caja de caramelos que me había dado Momo que ahora rodaban en miles de direcciones… y una de ellas era cuesta abajo directo al carro… fantástico… ahora si no tenía nada para comer si es que ellos no me alimentaban.
Un empujón me volvió a traer a la realidad… pase de la oscuridad de la entrada a percibir algo de luz al cruzar la puerta. La casa que por fuera se veía bonita y espaciosa término siendo un espacio copado por cajas y suciedad. Predominaban algunos olores como el de mar, el de polvo, el de comida italiana y al de algo podrido.
-"Llévalo al segundo piso y déjalo en el cuarto que esta al final a mano izquierda… luego baja a comer… ahorita mando a Tsuhiko para que lo vigile" – Kentaro hizo lo que le mandaron y me llevo hasta el segundo piso sin prender las luces. Me estaba usando como un bastón en la oscuridad chocándome contra todas las cajas y los muebles con los que nos topábamos en el camino.
Cuando entramos me dejo en la puerta y entro a prender un miserable foco en medio de la habitación y cerrar las ventanas. Luego me hizo pasar y me dejo a un costado… antes de salir y cerrar la puerta me volvió a apagar la luz… la habitación estaba completamente oscura.
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La ciudad se había vuelto oscura y ya no veía ni un pedacito de la tiza. Mis pies me dolían ya no podía ni caminar. Había llegado a cierta parte en la cual jamás había estado y por la escasez de casa y lugares me di cuenta que había salido de la ciudad. No sabía si había llegado a otra pero ya no estaba en la que conocía. Mi celular también había perdido señal.
El olor a mar me recordaba muchas cosas pero sobretodo cuando iba con mi familia a una casa de playa. No todo el día la pasábamos cerca al mar… también practicábamos otro tipo de deportes además de salir a pasear caminando o montando bicicleta… Una vez mi familia había alquilado bicicletas para el verano… quizás también alquilaban bicicletas por aquí…
Mis pies caminaban por inercia hasta que llegue a una casa pequeña… yo conocía esta casa… o al menos tenía la impresión de haberla visto antes. Llame a la puerta y me encontré con una pareja de señores que vivían ahí. Al parecer esa zona había sido u lugar muy visitado durante las vacaciones pero en época en la que todos tenían que trabajar y estudiar pues se convertía en tierra de nadie.
Les pregunte si habían visto algo sospechoso o algún carro pasar por aquí pero ellos me dijeron que por aquí pasaban carros de vez en cuando para llegar a la siguiente ciudad pero hacía menos de una hora había pasado el último carro por ahí… seguro ese era el carro en el que iba Ryoma…
-"A donde vas?" – me pregunto la anciana
-"Pues estoy siguiendo a ese carro…"
-"Es algún nuevo pasatiempo de ustedes los jóvenes?" – el anciano estaba poniendo algo de café a su taza mientras hablaba conmigo.
-"No exactamente… lo que pasa es que en ese carro va mi amigo y necesito encontrarlo…"
-"En ese caso seguro esta yendo a alguna de las casas de por aquí cerca… si quieres puedes llevarte una de nuestras bicicletas y nos la devuelves mañana… te parece?"
-"En serio!" – pero después me acorde de algo… - 'Pero no he traído plata para pagar el alquiler…"
-"Bueno… llévatela sin problema…. Después nos traes la plata…. Solo dame tu nombre para saber quien se la ha llevado" – los ancianos siempre eran muy amables, al menos ahora si había tenido algo de suerte.
Agarre una de las bicicletas que tenían guardadas en la parte de atrás de la casa y salí de ahí a buscar el carro…. Si seguía teniendo suerte capaz estaban en alguna de estas casas sino ya debían estar más lejos que nunca.
En el caso que estuvieran aquí cerca debía de buscar casas con las luces prendidas… si los ancianos decían la verdad y las casas por aquí solo están ocupadas durante la época de verano entonces la mayoría debería estar vacía. Las casa por la zona estaban distanciadas la una de la otra, algunas tenían piscinas y otras vista al mar… unas más pegadas al mar que otras, unas en las rocas, encima de pequeñas colinas y otras en la parte más elevada de los acantilados.
Primero me pasee por la playa y las casas de por ahí… solo una tenía las luces prendidas pero no parecía tener a Ryoma en ella por que no tenían ningún carro a la vista parqueado por ahí. Las casas de un poco más lejos lucían más desérticas que todo ese lugar… ya solo faltaba echarle un vistazo a las que estaban en la parte alta.
Subir hasta ahí con la bicicleta me salió más sencillo que subir a pie por que el trecho entre una y otra era largo. En toda la subida no encontré ninguna casa con gente… todas tenían las luces apagas… o al menos las que daban para la calle. Lo mejor era buscar los carros pero para el momento en el que estaba era imposible por que todo estaba oscuro… tendría que esperar a la mañana para buscar bien el carro con la luz del día. Por el momento me fui de regreso a la casa de los ancianos para ver si podía pasar la noche por ahí… además de llamar a mis papas para evitar preocupaciones.
Lo único que no sabía era que excusa iba a dar… si les decía la verdad era probable que se enojaran… no era conveniente que me encontrara en una situación peligrosa. Reportar algo así a la policía era la mejor opción pero primero tendría que averiguar donde estaba para decirles que vengan… pero también no tenía la certeza que estuvieran aquí… lo mejor era llamar… llamaría apenas estuviera con los señores y me prestaran el teléfono.
Volví a tocarles la puerta a los señores pero parecía que no hubieran escuchado nada por que no me habrían la puerta… seguro estaban durmiendo… mis abuelitos también dormían temprano pero esto era una emergencia! Pero por más que tocaba nadie me abría… mi única opción para pasar la noche era la puerta de su casa… ya mañana temprano llamaría a mi casa y reportaría lo que sucedió.
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No se cuanto tiempo estuve solo en ese cuarto oscuro, no debió ser más de diez minutos… diez largos minutos. Me daba miedo sentarme por que no tenía mucha memoria de lo que había en este cuarto. Intenté dar unos cuantos pasos… caminé sin levantar los pies del piso para evitar pisar cualquier cosa extraña… al parecer no había nada en este cuarto por que no me choque con nada… me acerque un poco a la ventana que estaba sucia, no se podía ver nada de afuera… todo estaba oscuro y no había ningún tipo de luz… este lugar parecía desierto.
Me recosté contra la ventana y deje deslizar mi cuerpo hasta que toque suelo… me dolían los brazos de tanto tenerlos atrás amarrados… tenía hambre, tenía frió, me dolía la cabeza aunque no tanto como en la mañana. Mis papas seguro estarían preocupados por que no estaba en casa… seguro estarían llamando a todo el mundo preguntando por mi… al menos mi mamá por que por lo general oyaji no se daba cuenta de mi presencia salvo que el quisiera jugar… me habrían llamado al celular? Quizás lo hicieron y no me di cuenta… estaba en vibrador en medio de todo y no hacía ruido… ese sería mi boleto fuera de aquí.
Me estaba quedando dormido cuando la puerta se abrió… alguien entró y comenzó a buscar algo… seguro me buscaban a mi… con la luz apagada no me podrían ver… si pudiera llegar a la puerta podría salir y de ahí me podría esconder en alguna parte… buscaría la manera de salir de este lugar y buscar ayuda…
-"Enano… estas ahí?" – por la voz era Tsuhiko… - 'Enano? Estas aquí?" – pero no le iba a contestar… lo iba a dejar hablando solo mientras cruzaba la puerta… sentía que la salida estaba cerca pero debía ser cuidadoso…
Salí del cuarto pero el pasadizo también estaba a oscuras… tanteando con los pies logre entrar a un cuarto en el cual tampoco podía ver nada… con cuidado cerré la puerta y de espaldas traté de ponerle seguro… aquí estaría a salvo hasta que despejaran el pasadizo… luego buscaría la manera de salir de aquí…
Pegue mi oreja a la puerta para escuchar lo que pasaba afuera… Tsuhiko les había pasado la voz a los demás y les había dicho que me había escapado. Hasta ahora el plan estaba dando resultado…
-"Enano… sal de donde quiera que estés… no querrás que te llevemos con tu mamá cortado en pedacitos… sal de ahí… no nos hagas ir a buscarte… no te conviene…" - el conductor estaba gritando por todo la casa esperando a que saliera… - "Tu te lo buscaste… el que lo encuentre primero tiene permiso para todo y eso incluye desde apretar su cuellecito hasta cortarlo en pedacitos… la cosa es que no tiene permiso de huir de aquí… Lo escuchaste? Jugaremos un poco… el juego se llama 'escondidas'… lo has jugado antes? … escóndete donde quieras pequeño ratón… por que en este laberinto no iras muy lejos! Vamos a contar hasta diez… a la de diez te comenzamos a buscar… uno… dos…" – detestaba jugar a las escondidas…. Me ponía nervioso escuchar a la gente contar el tiempo… me tenía que esconder muy bien dentro de este cuarto sino me iban a atrapar… el problema era que no sabía donde estaba la luz… y si la prendía sabrían que estaba aquí – "… tres… cuatro… cinco… seis… siete…ocho…" – estaba intentando tantear todo a mi alrededor tratando de identificar la forma de algo y ver si me podía esconder de alguna manera…
Por ahí encontré una puerta… no estaba seguro a donde me llevaría pero apenas la toque con mis pies sentí una textura diferente… como más lisa… sería un baño? Intente apoyar mi cara contra alguna de la paredes… por el frío eran mayólicas… era un baño! Camine hasta que me tope con algo grande… eso debía ser una ducha… una tina quizás… sentí las cortinas y ese fue el único lugar decente que encontré para esconderme. – "nueve… y diez! Quieras o no allá vamos!"
Desde la ducha sentí los pasos que los llevaban por diferentes direcciones pero a Dios gracias ninguno se acercaba a mí… Los escuché maldecir y refunfuñar intentando encontrarme pero por más que gritaran jamás saldría de donde estaba. Todos parecían estar buscándome en la calle ahora por que ya no los escuchaba en la casa… sería este un buen momento para salir de aquí?
Pero salir con las manos atadas tampoco era muy alentador… necesitaba mis manos para salir de aquí… Ya que no había nadie en casa podría intentar prender la luz del baño de esta habitación… quizás podía encontrar algo que me ayudara a salir del aprieto… Me apoye en una de las paredes y comencé a pasar mi cabeza por toda la pared… deslizándola para encontrar el interruptor… felizmente lo encontré rápido…
La luz me cegó un poco al principio… por lo mismo que hacía tiempo no sentía la luz, poco a poco me acostumbre al brillo. El baño era grande… no estaba muy limpio por que estaba lleno de polvo pero eso era lo único, por lo demás estaba bastante bien. Con mis ojos comencé a buscar algo para sacarme las soguillas… no tenían nada que me pudiera ayudar… no había nada roto… tampoco podía romper las cosas por que haría mucho ruido… tendría que salir así nomás…
Volví a apagar la luz… la casa se oía tan desierta como hacía un rato… con temor abrí la puerta… el camino estaba vacío… no habían moros en la costa… salí despacio tratando de percibir el ruido de alguien pero no paso nada… recordé como era el camino por el que había subido… pude bajar sin problemas y llegar hasta la puerta. Me asustaba la suerte que estaba teniendo hasta el momento…
La bajada hasta el carro era algo que me preocupaba mucho… si perdía el equilibrio me podía caer… pero era mejor eso a quedarme ahí… o habría otra salida? Otra manera de bajar sin tanto sufrimiento y preocupación? Había aprendido algo en mi vida que me ayudara a salir airoso de esta situación?... Si la había!
Algo que había aprendido hacer era echarme en el pasto y rodar como una pelota… solo tenía que echarme he intentar llegar a un suelo plano y sin declives… la gravedad me ayudaría a hacerlo más rápido!
-"Debe estar adentro… no puede haber ido muy lejos!" – el anciano se estaba acercando a la casa otra vez… venía de la parte posterior de la casa… si me quedaba aquí me iba a ver… era ahora o nunca! Me lance con todo y no pare de rodar hasta que me choque contra algo duro… contra la llanta del carro. No me importo el dolor, ni las piedritas que se me hubieran podido meter en los brazos y el estado de mi uniforme… me arrastre como pude y me escondí detrás del carro. Me quedaría ahí un rato hasta que el terreno estuviera despejado… o hasta que me sintiera seguro de abandonar este lugar.
Lo único bueno de la caída era que ahora las soguillas se habían aflojado lo suficiente como para poder forzarlas un poco fuera de mis muñecas. Pase mi dedo por el surco que me habían dejado… no lo podía ver por falta de luz pero me ardía… seguro se me había irritado… Escuché la puerta cerrarse… este era el momento de salir de ahí antes que volvieran a salir… tendría que buscar un buen escondite lejos de este lugar…
Salí de la propiedad a gatas… si seguía destrozándome los brazos de esa manera no podría jugar por lo menos en un par de semanas… Apenas me aleje lo suficiente agarre mi celular… no se veía muy bien por la caída pero con suerte y funcionaba…
Marca, marca…. Pero no había salida… no había señal… maldición!
No tenía idea de donde estaba… lo único que sabía era que estaba cerca al mar… lo podía oír… desde donde estaba podía ver luces… sería un carro? Intenté caminar hacia allá pero algo me jalo hacia atrás…
-"Te atrape! Te gusto el juego? Quieres jugarlo otra vez?" – una mano me cubrió la boca mientras su brazo me rodeaba por completo y me escondía de la luz momentánea que paso por la pista. Yo sabía quien era… – "Espero que no hayas estado planeando alejarte mucho de nosotros… tantas diversiones que tenemos planeadas para ti y tu nos abandonas? Si que eres un chico muy malo… y mírate nomás… estas todo sucio… creo que necesitas un baño…" - era mi peor pesadilla…
-"Te voy a soltar la boca y espero tengas la prudencia de permanecer calladito… y ni se te ocurra correr…" – lentamente me soltó, yo le hice caso en la parte de permanecer en silencio pero en la parte de correr no perdí tiempo y saque fuerzas de donde pude… me eche a correr sin un rumbo, algo muy malo por que puedes parar en cualquier parte pero a estas alturas daba lo mismo arriesgarme. – "Ven acá mocoso!"
-"Ni loco!" – corrí lo más que pude… salté, me deslice y caí un poco más allá… pero el anciano tenía razón… en este lugar era muy difícil esconderse…
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Yo siempre había creído que el clima de la playa siempre era caluroso y que la brisa marina era lo mejor para alejar las preocupaciones de la mente. Siempre me había gustado ir a la playa para veranear con mi familia, para nadar, para comer la comida que ofrecían por ahí, alguno que otro deporte acuático o un buen juego de voley en la playa… siempre era bueno hacer deporte… pero no recordaba nada de esto…
Si, siempre había pasado las noches de verano metido en una casa para dormir, nunca en la puerta de la casa o a la intemperie como estaba ahora.
No tenía idea que la temperatura bajara tanto por las noches y que la brisa marina me diera tales escalofríos. Esto no era divertido y mucho menos bueno para mi salud. Intenté dos veces más tocando la puerta de los ancianos que me habían atendido antes pero no contestaban… no los culpaba yo tampoco hubiera contestado la puerta tan tarde, era obvio que no lo hacían por su seguridad… pero tenía yo alguna opción?
Si me quedaba ahí esperando a que me abrieran moriría de frío y debajo de mi saco de colegio ya tenía la piel de gallina… hubiera traído mi casaca también… pero jamás se me ocurrió esto… debería aprender a ponerme en todos los casos o a aprender a pensar como Inui.
Pero nada ganaba quejándome y hablando solo como si fuera un loco, yo era alguien más de acción. Me pare de la pequeña e insignificante protección que me daba el pequeño voladizo de la puerta de entrada de la casa y comencé a caminar sin un rumbo fijo.
Lo único bueno de caminar en estos casos era que ayudaba a entrar en calor… lo malo era que quemaba las únicas energías que tenía y después terminaría cansado y con sueño.
Mientras caminaba se me ocurrían miles de cosas para dar una excusa en mi casa pero ninguna funcionaría con el genio de mi madre. Si me veía enfermo me gritaría igual? Quizá sería mejor probarlo en vez de no tener nada no? Y que mejor manera de enfermarme que en el agua helada… a estas horas de la noche o la madrugada debería estar congelada… quizás sería mejor esperar un poco más a que calentara... pero un paseo nunca estaría de más.
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Ya me había cansado de correr… hasta estaba pensando en entregarme voluntariamente para evitar la persecución estúpida. Mis piernas y todo mi cuerpo ya no daba más… quería estar en mi camita calentita durmiendo… quería estar bien lejos de esta playa…
-"Oye mocoso… ya deje de correr detrás de tuyo… solo estoy caminando… te das por vencido?"
-"Ni loco…" – tenía razón pero jamás me daría por vencido… tenía que salir de esta situación…
-"Ya me aburriste!" – el tipo se lanzo encima mío y me aplastó con el peso de un elefante de mil toneladas… o al menos así lo sintió mi pobre cuerpo… yo no tenía la fuerza para huir… pero si tenía u cerebro que funcionaba mejor… y en la primera oportunidad que tuve agarre arena y se la tire a la cara… - "Mocoso! Me las vas a pagar maldito!" – mientras el se frotaba los ojos yo trataba de volver a ponerme de pie y seguir corriendo…
-"No vale la pena correr… ya llegamos!" – Tsuhiko se paro delante mío bloqueándome el paso… mi cerebro no necesitaba funcionar mas para decirme que estaba acorralado.
Tsuhiko me rodeo con sus brazos para evitar moverme mientras que el conductor, aquel al que le había tirado la arena a la cara se acerco a los dos y me dio un puñetazo en la boca del estómago que creí me partiría en dos.
-"Ya deja de pegarle… estamos haciendo demasiado ruido aquí afuera… el enano no debió salir de la casa, fue un descuido de todos pero no lo volverá a hacer… ahora vámonos de aquí!" – el anciano había vuelto a salvarme de una situación de alto riesgo al menos esa fue mi primera impresión.
-"Eso no me interesa… me las va a pagar!" – empujo a Tsuhiko que por parar la caída me soltó. Para botar a Tsuhiko él debía tener bastante fuerza escondida debajo de la polera… me levanto en peso como quien levanta a un gato y me arrojo… pensé que acería en la arena y después me seguiría golpeando pero cuando sentí ese sonido de las olas me di cuenta que me había tirado al agua… si no me mataban los golpes me mataría el mar… debí escuchar a mi mamá y tomar lecciones de natación.
No recuerdo mucho que paso después de eso… solo recuerdo que de alguna manera llegue a salir del mar… me llevaron arrastrando por la arena… una de mis zapatillas se quedo solitaría en la arena… alguien agarraba mi zapatilla a lo lejos… no… no podía ser él… era imposible…. Ya debía de estar soñando… ya debía estar muerto…
TBC…
Lo dejo ahí o pongo un poquito más? Bueno pondré un poquito mas de todas maneras por que me prometí a mi misma que no sería menos de 10 hojas de Word las que pondría ara esta entrega XD
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Pasear por la playa me dio más frío, tanto que con frotarme los brazos me pasaba. También se me había acabado el aliento como para seguir soplándome las manos. Era gracioso hasta cierto punto pensar que todo este problema se había ocasionado por una simple pelea… por un mal entendido.
Todo estaba silencioso en la playa pero a lo lejos podía escuchar cierto griterío… sería una pelea en la playa? Una fiesta? No, no había música como para ser una fiesta, además a mitad de semana es una locura… debía ser una pelea de amigos o algún borracho loco que hacía escándalo… eso era más cuerdo de pensar.
Seguí caminando pero con la promesa de mirar de lejos solo para estar seguro que no fuera nada malo, Era una pelea fuerte por que uno de ellos se la estaba pasando mal… estaban tan borrachos que lo tiraron al agua… por un momento pensé que se había ahogado pero otro de los que estaba por ahí logro sacarlo.
Poco después de un rato se lo llevaron… tan borrachos debían de estar todos que no se molestaron en cargarlo a ayudarlo a caminar. No sabía por que la gente se empeñaba a beber si no podían manejar sus vicios…
Continué caminando por la playa, ya no me importaba mantener la distancia por que como se habían alejado no significaba ningún peligro. Pase por donde había sido la pelea y me encontré con una zapatilla… como podían perder sus zapatillas?
Me detuve a pensar un rato… esa zapatilla me parecía familiar de alguna manera… yo conocía esa zapatilla… Solo para cerciorarme le busque la marca… ese niño tenía la manía de marcar sus cosas… pero no tenía marcas… necesitaba luz… pero si me acercaba a algún farol seguro les perdía la pista… no podía perderles la pista… sería mejor seguirles… solo por si las dudas…
TBC…
Hehehehe… Si, Momo es demasiado despistado pero es lindo XD En verdad todos los personajes de la serie me encantan XD pero a Momo le tengo un cariño especial por que me da risa lo tonto que puede llegar a ser la manera a la que tiende a exagerar las cosas XD.
Que les pareció? Lo he hecho en tiempo record la verdad… con interrupciones y todo me he demorado un poco más de un día, casi dos XD. Me duelen los dedos de tanto teclear a pesar que no he escrito lo que usualmente suelo hacer… Espero sus opiniones y sugerencias…. Cualquier crítica siempre es bien recibida.
Gracias también a los que me dejaron reviews en el capitulo anterior y han tenido la paciencia de esperarme… que tal paciencia! Gracias!
A todos los demás los invito a visitar Sweet Sweet Ponta… la dirección de la pagina esta en mi profile pero si les da flojera por aquí se las pongoh t t p / w w w . g e o c i t i e s .c o m / l a e t i t i a m b/ P o n t a / i n d e x . h t m l
See ya!☺