HOla! aqui les traigo otro cap, sorry por no actualizar, pero el cole no me ha dejado tiempo, por fortuna podré actualizar seguido durante las vacaciones nn espero les guste este capi y dejen sus comentarios nn
Ahora, contesto Reviews D
Seyruu: Hola! que bien que te haya gustado, ya pronto veras lo de la maquina del tiempo je je, sigue leiendo, y muchas gracias por leer nn espero no decepcionarte D
Elena¡No te angusties! es parte de la trama que al principio no hay atraccion entre eios (xke hay gato encerrado xDDDDDDDDDD) ia veras lo que viene te va a gustar, espero este capitulo te haiga gustado
A los ke me leen: Gracias por leer, dejenme reviews xDDDDDD
A los ke me dejan reviews ¡gracias! seguiré escribiendo na mas porke ustedes me dejan reviews
Hasta el proximo Capitulo nn
IV
Draco sigue siendo el mismo
Ron y Hermione estaban cenando en un lujoso restaurante londinense y hablaban animadamente, interrumpiendo sus relatos con uno que otro beso, sus manos se encontraban agarradas encima de la mesa y una botella de Champaña y dos copas mitad llenas estaban sobre la mesa, habían terminado de cenar ya hace un rato, solo tomaban champaña y escuchaban la alegre música del lugar, Ron tenía un aire de nerviosismo que Hermione no explicaba, todo estaba bien¿o es que acaso le ocultaba algo? Un tipo con un violín se acercó a su mesa y sin previo aviso y sin dar tiempo siquiera para que la pareja protestara empezó a tocar, Ron sonrió levemente mientras que Hermione estaba inexpresiva, el pelirrojo se levantó y Hermione hizo lo propio, ya que Ron la tenía tomada de la mano, dieron un par de pasos y Ron le dio un tierno beso, así pudo sacar una pequeña cajita del bolsillo de su fina chaqueta negra sin que la castaña se diera cuenta, cuando se separaron Ron miró a Hermione, que por alguna razón sonreía, Ron no se detuvo a pensar en ello, tomó su mano izquierda y apoyó una rodilla en el piso, sin dejar de mirarla, Hermione sonrió aun más, el tipo del violín seguía tocando y las miradas de todo el restaurante se posaban en ellos, Ron sin muchos rodeos abrió la cajita con una mano, la que tenía libre y se la mostró a Hermione, la cual abrió los ojos ante la joya que tenía enfrente.
-Hermione Granger ¿Quieres ser mi esposa?- Ron sonrió y las miradas se intensificaron esperando una respuesta, y el tipo del violín había dejado de tocar.
-Ron…yo… no se que decir- Dijo hermione perpleja.
Una anciana que estaba detrás de ella le jaló la falda suavemente y le susurró: Di que si querida.
Hermione sonrió ante ese gesto al mismo tiempo que caía en cuenta de lo que Ron acababa de pedirle, lo miró y sonrió.
-Ronald Weasley, yo quiero ser tu esposa- Contestó al fin sonriente.
Todo el restaurante estalló en aplausos y el músico del violín reanudó su melodía, alegre y llena de felicidad, Ron se levantó y besó a Hermione para luego sacar el anillo de la cajita y ponérselo a Hermione que tenía los ojos vidriosos a causa de la felicidad, se volvieron a besar, mientras la gente del restaurante seguía aplaudiendo, todos, todos menos un rubio de tez blanca que se encontraba solo en una mesa del restaurante, de hecho la mas alejada, brindó solo, a la salud de los novios y se bebió su trago a fondo blanco, dejó el dinero sobre su mesa y se levantó, dirigiéndose a su objetivo, tenía una mano metida en el bolsillo de su pantalón de vestir, y la otra iba suelta al compás de su caminar, llegó hasta los novios que ya se habían sentado y sonreían y se hablaban al oído.
-Vaya, vaya… el pobre Weasley y la muggle, sabelotodo Granger… que bonita pareja- Dijo Draco arrastrando las palabras y su habitual tono de malicia.
-Malfoy…-Dijo Ron desafiante
-Pero si ya se veía venir, me pregunto si sus hijos usarán ropa de segunda… a lo mejor también vivarán en un sitio como la casa de tu madre ¿Sabes Granger? No estas nada mal ¿eh? Si fueras mi novia estarías mucho mejor… pero eres una simple muggle sangre sucia que no me merece… la vida que les espera… ojala y sean felices…
-Lárgate de aquí Malfoy- Dijo Ron apretando los puños
-Déjalo Ron, el debe recordar que trabaja con nosotros y que su jefe inmediato soy yo, después viene la señorita Kings, también debe saber que el escritorio donde se sienta es el mío y que sino quiere trabajar en el suelo debe portarse bien… además, una falta como esta en el trabajo y se va volando del ministerio.- Dijo Hermione mirando a Draco inexpresiva, pero una sonrisa asomó a su rostro y Draco quedó paralizado, aquella sonrisa era hermosa ¿Cómo no lo había notado antes?
-Gracias por advertirme Granger, eres muy amable, seguro que no ocurrirá de nuevo.-Dijo Draco haciendo una leve reverencia y siguiendo su camino hacía la salida.
-Ese maldito no ha cambiado en todo este tiempo
-Pero si solo han pasado dos años desde que salimos de Hogwarts ¿Cómo puedes esperar algo así, Ron?
-Es verdad Herms, pero sabes que no lo soporto y quien sabe cuanto tiempo tengamos que aguantarlo.
-No por mucho Ron, eso es seguro, no nos soportará, todos lo odiamos…bueno eso creo-Habló Hermione mas para si misma que para Ron.
0o0o0o0o0o0o0o
Draco Llegó a su casa más borracho que alcohólico necesitado de un trago, se encerró en su habitación y en medio de una rabia que, según él, era injustificada se quedó dormido, sin escuchar los golpes que su amigo Blaise, le daba a la puerta.
-Ese chico es raro- Dijo Blaise y se retiró a su habitación, luego sabría como le había ido.
0o0o0o0o0o0o
-… ¡Herms! Eso fue hermoso supongo que dirías que si al instante- Decía Ginny eufórica ante lo contado por su amiga
-De hecho me costó un poco asimilarlo, fue gracias a una anciana que estaba detrás que dije que si- contestó Hermione sonrojada
Luna abrió sus ojos cuan grandes eran, como si le costara entender. –Si hubiera sido tú ni lo hubiera pensado
-Comparto tu opinión Luna, pero lo importante es que dijo que si-afirmó Ginny
-Pero como nada es perfecto… Draco apareció y casi nos arruina la noche haciéndonos pasar un mal rato.-Dijo Hermione enojándose al recordar ese momento.
-Si, es cierto pero lo bueno es que ya pasó, no le deben hacer caso a ese insignificante gusano. –Dijo entre risas Ginny mientras Luna y Hermione también reían.
-Habrá que ver como se comporta mañana, no estoy dispuesta a soportarlo en nuestro escritorio, por mucho tiempo, Herms.
-Ni yo.
Las tres chicas rieron y después de un rato de charla se retiraron a dormir, al parecer estaban ansiosas por ver como se desenvolvía el día de mañana, Draco, al parecer, no aguantaría mucho ese ambiente.
0o0o0o0o0o0o0o
-Draco…Draquito… ¡Draco!- Pansy Parkinson tocaba con fuerza la puerta del dormitorio del exSlytherin mientras Bleise la miraba ya rendido, le había dicho que estaba muy borracho y que por más que gritara y golpeara la puerta no iba a abrir pero Pansy no le había hecho caso y tocaba la puerta cada vez mas fuerte. -¡DRACO MALFOY ABRE LA MALDITA PUERTA!- La puerta del dormitorio de Draco se abrió, una mano fue lo único que Bleise pudo ver antes de que agarrara por el cuello a Pansy y esta desapareciera y la puerta volviera a cerrarse, Bleise no quiso imaginar que le haría Draco a Pansy, sabía que era capaz de cualquier cosa menos de pegarle, él nunca le pegaría a una mujer. Bleise se alejó de allí tomó su chaqueta y salió de casa, dejando solo a su amigo y a la fastidiosa de Pansy.
0o0o0o0o0o0o
-Es inaudito… su segundo día de trabajo y no ha llegado ¡y ni siquiera una lechuza envía para avisar!-Hermione se paseaba de un lado a otro furiosa, no toleraba las irresponsabilidades ni los incumplimientos, ya tenía la primer excusa para sacarlo del departamento oscuro, Luna consiguió calmarla después de un rato, le susurró al oído que mejor dijera algo alegre, como su compromiso con Ron, fue lo único que la hizo sonreír, miró al pelirrojo y su sonrisa se hizo gigante, se acercó a él y le dijo que se levantara, Ron lo hizo y así, los dos, pidieron la atención de sus amigos.
-Este…Ron y yo… Ron me pidió que me casara con él- Dijo Hermione nerviosa, todos se mostraron sorprendidos, pero luego una avalancha de abrazos y de felicitaciones se cernieron sobre ellos y en medio de aquella celebración Draco llegó y viendo aquello se propuso dañar el momento.
-Ya veo que todos se acaban de enterar de la mala noticia y que están perdiendo el tiempo en tontas felicitaciones- Dijo Draco arrastrando las palabras, nadie le hizo caso. –Imagino que la pequeña Weasley y todas las tontas aquí presentes serán las damas de honor y que Potter será el padrino, así todo queda en familia ¿no?
-Así es Draco, no comprendo como lo supiste siendo tan corto de mente como eres- Contestó Ron
-Ron…calla, no te rebajes- Dijo Hermione. –Además el señor aquí presente no está en posición de hacer burlas ni de resaltar nada indebido ya que está colgando de la cuerda floja ¡y en su segundo día de trabajo! Vaya… si que eres especial Malfoy, quisiera saber el motivo de su retraso, si es que hay un a excusa válida
-Se me antojó un polvo matutino nada más- Contestó Draco con descaro.
Todos se quedaron perplejos ante esa respuesta, solo parpadeaban esperando que Hermione dijera algo.
-Vaya… que cosas…- Hermione miraba a Draco, el cual sonreía sin abandonar su gesto de descaro. –Pero ¿sabes? Eso no te disculpa, haz el favor de ir a la oficina de la señorita Kings, para reportar tu retraso.
Draco volvió a sonreír y sin decir nada se retiró
-Este tipo es cada vez peor- Dijo Ginny mirando el umbral de la puerta.
-¡ES UN IDIOTA¡LO ODIO¡OJALÁ LE DEN HASTA POR EL…!
-¡Hermione! Cálmate- Dijo Parvarti al tiempo que se acercaba y le palmeaba un hombro.
-Ya quisiéramos todos que sucediera eso que dices Herms-Habló luna pasándole un brazo por los hombros y dirigiéndola hacia su escritorio. –Pero eso seria de muy mala suerte, porque yo creo que fastidiaría mas siendo gay.
Todos rieron, hasta Hermione que aparentemente estaba muy enojada.
-Yo lo único que sé es que quiero que se vaya ¡no le necesitamos¿Verdad Hermy?-Sentenció Ginny
-Ay yo no quiero ser el abogado del Diablo, pero…-empezó a decir lavander con tono meloso. –ay que ver que está como quiere. –Terminó la frase recostándose en el espaldar se su asiento y haciéndolo girar.
-Pero no por eso querrás que se quede. –afirmó Harry mirando a Ron y luego a Hermione que miraba a Lavander con expresión de "voy a matarte si dices algo más".
-Si tan solo fuera un muñequito que se quedara quistecito sin hablar ni nada, tal vez yo también lo querría aquí- Suspiro Ginny sentándose en su escritorio y agarrando una pluma.
Hermione dejó de mirar a lavander, para muy lentamente y con ojos desorbitados ante lo que oía mirar a una de sus mejores amigas. –Te mataré- Susurró y empezó a levantarse.
-No seas tonta Hermione, es solo que… hay que aceptarlo, el chico es lindo y mucho más desde que dejó de ser flacuchento ¡solo míralo!-Contestó Ginny viendo como su amiga volvía a sentarse y colocaba sus manos sobre su cabeza mientras negaba.
-¡Oye! yo estoy aquí¿me recuerdas?-Dijo Harry celoso
-Yo se eso Harry, pero no por eso voy a negar lo innegable, pero ¿sabes? Para mí el más lindo y el mejor eres tú. –con esas palabras hizo que Harry sonriera y el besó que le mandó lo dejó radiante.
-¡acaso soy la única que se da cuenta de que es horrible! Todo blanco, paliducho y ese cabello amarillo casi blanco que parecen canas.
-Y así le gusto a muchas… todas caen alguna vez. –interrumpió draco parado en el umbral de la puerta con los brazos cruzados viendo a Hermione con una ceja alzada y sonriendo, tras él estaba Alexis que se esforzaba por no reír.
Draco entró y se sentó en el escritorio de Hermione, Luna se levantó miró a Hermione y se fue a sentar con Ginny y Neville "traidora" susurró Hermione, mientras veía como Draco ocupaba el asiento frente a ella con una esplendida sonrisa plasmada en la cara. La señorita Kings entró tras Draco, se detuvo en el centro de la oficina y lo que dijo puso a todos los nervios de punta.
-Hay nuevas misiones, pues he detectado nuevos objetos.-Todos tragaron saliva y miraron a Draco, el cual no había dejado de sonreír.
