Las horas transcurrían rápidamente hasta llegar el momento de la partida, notándose la figura de aquella damita corriendo de un lado a otro, buscando de manera desesperada y de un lado a otro algunas cosas que había olvidado empacar mientras que el joven de cabellos bicolor la esperaba con completa tranquilidad al lado del chofer, recargado en el auto con mirada asesina directamente dirigida a la puerta
Le había advertido a Ángel que se preparase desde que él estaba trabajando, que permitiese a los cocineros hacer su trabajo pero como siempre la chica hacía lo que su santa voluntad le dictase y ahora él también se veía pagando las consecuencias de los actos ajenos
Les quedaba tan sólo una hora para que el avión saliese. No sería un problema si fuese uno privado, ya que por ser su persona el heredero de la fortuna Hiwatari debían hacerlo…pero ésta vez, Gian Carlo mismo les había comprado los pases para que llegasen todos a la misma hora y esa niña…
Su paciencia estaba a punto de culminar y no se haría responsable de sus acciones si perdían el vuelo por culpa de la peliazul…Más, al momento en el que pensó que entraría para acabar con su existencia, ésta salió con todo y sonriendo arrepentida, abriéndole él la puerta y dejándola pasar mientras guardaban todo lo que restaba del equipaje, entrando posteriormente, reclamándole con la mirada lo que la chica ya sabía que iba con palabras
-Lo siento TT! En serio Kai! No quería que llegásemos tarde por mi causa ;;!-se disculpó al sentir la limosina comenzar a andar, escuchando como un suspiro de fastidio era liberado por los labios ajenos, observando como el fuego de sus amatistas le quemaba de manera recriminatoria; aunque ya estaba acostumbrada, sólo que ésta vez no creía que el ruso-japonés se lo pasaría
-Yuriy y Bryan nos esperan ya en el aeropuerto. Ángel, te lo repetí varias veces: 'Ten todo listo!' y nuevamente no me escuchaste
-Te escuché! Otra cosa es que te haga caso-corrigió ella tratando de tomar el son de broma, pero al parecer a su novio no le agradó nada aquel humor-sólo que yo quería prepararte el almuerzo! Ese eso algo tan malo? Soy pésima en la cocina ;;! Confiesa !-exclamó con su común melodrama, sintiendo que los brazos del mayor lo acercaban a sí por la cintura, besándola sorpresivamente mientras una mano se colaba por la parte trasera de su camisa, haciéndola enrojecer y pegarse más a la figura perfecta del peliazul
-Haces mucho escándalo…-susurró él sonriendo suavemente, dejando ver como todo rastro de enojo había abandonado sus facciones, haciendo que la 'niña' se sintiese bien nuevamente, cerrando sus ojos y apoyándose en el mayor, tomando con sus manos las ropas, sintiendo la mano ajena deslizarse por sus cabellos y su espalda, además de jugar con algunos de sus flequillos con cariño, sacándole varios suspiros y uno que otro ronroneo, no tardando en surcar por la mente del ojirrojo la figura sonriente de su felino amigo de ojos ámbares-…y aún así siempre termino sin enojarme grandemente contigo…
-Es que soy encantadora -dijo en son de broma mientras sentía nuevamente un beso en sus cabellos y posterior uno en su frente, para ver la sonrisa divertida y burlona de su novio sonreirle lascivamente
-No, es porque eres un completo dolor de cabeza, sigue en mi mente la pregunta de cómo te soporto-culminó a lo que vio como era ahora ella la que hacía coraje y le golpeaba el pecho infantilmente
-Kai! Eres un idiota! Idiota, invencible, pervertido, frío, malo y…y…!-decía tratando de ampliar su lista para sentir como aquella mano le levantaba el rostro
Los movimientos que usó eran sensuales, tranquilos, dulces…una mirada tan hermosa e inquisidora estaba posada en sus ojos en aquel momento, haciendo sonrojar irremediablemente a su acompañante, aún mas sal sentir el apretón del abrazo y sus pechos chocar contra el cuerpo ajeno…con ella casi subida en las piernas del otro y sus labios quedasen peligrosamente juntos
-Y aún así me amas tal como yo lo hago contigo…con una niña caprichuda, impuntual, melodramática, infantil…quien se podría creer una combinación como ésta?-cuestionó a lo que la chica se relajó, mas el agarre continuaba tan firme como cuando había comenzado
-Me extraña que no nos hallamos intentado matar…aún-susurró esta con gracia a lo que sacó una pequeña risita del otro y suya misma, sintiendo los brazos ajenos aflojarse un poco y ella quedando acomodada en su lugar con toda tranquilidad, haciendo circulitos sobre la camisa pegada del otro…
-Espera y verás…no tardará-completó él mientras miraba por la ventana perdidamente
Sabía que se había quedado dormida…nunca dormía cuando él no la acompañaba a la cama y aquella noche no lo había hecho a causa del trabajo a última hora que Voltaire le había mandado…bastante curiosa la niña, pero era lindo…
Sin embargo…siempre, a pesar del gran amor que ésta le tenía y que él correspondía…había algo que simplemente no cuadraba…como si un fragmento de su corazón le indicase que ella no era precisamente la persona de la que verdaderamente estaba enamorado…
Normalmente los temas que involucraban al corazón hubiesen sido a lo que menos atención les pondría pero, raramente desde la desfragmentación de los Blade Breakers G-Revolution…algo le había estado faltando…
Poco a poco, la frialdad fue cediendo. Un poco por sus amigos, otro poco por Ángel, pero aún quedaba algo que no encontraba y que estaba dispuesto a encontrar; por esa razón principalmente había aceptado la invitación además de que quería saber de los demás y más de Rei…
Ese gato le preocupaba bastante…anteriormente le escribía seguido junto con cartas que llegaban a Takao y Max; pero hacía casi dos años esas dejaron de llegarle…tal vez porque jamás las contestaba…?
No podía ser sólo eso. Los otros dos siempre le contestaban, incluso comenzaron a tratar de localizarlo pero nada, todas contestaciones de la asquerosa gata rosa y nada más…una que desde que la conoció aprendió a detestar…no sabía como y porque se había dado primeramente la repulsión, pero le era suficiente saber que la odiaba…
El tiempo transcurrió en un corto lapso al verse hundido en sus recuerdos y pensamientos, encontrándose rápidamente a entradas del aeropuerto, despertando a Ángel y ambos saliendo del auto, mandando a sus sirvientes el llevar el equipaje y entrar, encontrándose no muy lejos, recargados en un pilar al lobo blanco y a su terca y molesta águila al lado, sonriendo al ver el gesto molesto de ambos al verlos pasar por la entrada
-Tardaron-dijo cortantemente Yuriy cruzándose de brazos, a lo que miró a Ángel al igual que Bryan. Sabían bien que era por su causa más que nada
-Lo siento TTTT! Mátenme ¬¬!-reclamó mientras se cruzaba de brazos y los miraba retadoramente, mas a los ojos zafiros del lobo
-Suena tentadora la invitación, pero no tenemos tiempo. Ya será cuando lleguemos a París-culminó el pelilila con las manos en sus cadera, a lo que ambos se levantaron de hombros y caminaron en frente de los otros dos, conversando cual si nada hubiese ocurrido-Hay veces en las que creo que se matarán y en éstas…me dan miedo oô-murmuró por lo bajo a lo que una risa tranquila brotó de los labios de Hiwatari
-Te escuchamos-dijeron ambos al unísono, sin tener que voltear, haciendo que la sonrisa de Kai aumentase
-Bien. Cada vez que te veo así, no creería que fuese real, Kai. Desde que llegaste a la abadía tu existencia se te amargo y ahora…sin duda nos cambiaron al modelo!
-Deja tus bromas de lado. Sólo cambié un poco-comentó con un tono frío, aunque no tanto como era ya acostumbrado en antaño-ahora vamos, se nos va el tiempo
No discutieron más hasta haber abordado el avión, acomodándose Kai y Ángel frente a Yuriy y Bryan, conversando gran parte del camino, aunque fuesen sólo el pelilila y la peliazul los que hablasen y los otros dos se dedicaran a escuchar sin mucho interés…
Pronto llegarían a su destino y nuevas memorias se crearían…viejas caras se enfrentarían…sentimientos anteriormente creados volverían a renacer…aunque…no estaba seguro de que las personas pudiesen hacerlo tan fácilmente…al menos eso pensaba el pelirrojo, quien estaba pendiente de lo que realmente le ocurría al gatito negro desde la separación que habían sufrido desde años anteriores…
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Varios estruendos se escuchaban en el aeropuerto de Hong Kong, la gente iba y venía.
Risas, regaños, prisas por parte de los padres para que los pequeños se apurasen a abordar, pero unos jóvenes de rasgos felinos estaban tranquilamente acomodados en la sala de espera desde hacía ya más de media hora, aguardando a que su vuelo no tardase demasiado en llegar
Las pláticas incluso abundaban entre ellos, todos distraídos en algo mientras hacían la espera, encontrándose sentados, mas un gatito en especial perdía su mirada por el ventanal…con sus manos colocadas sobre éste, observando como aquellas enormes máquinas iban y venían…
A su lado, dos pequeños niños se hallaban en la misma posición…el menor con ambas manitas apoyadas y el otro observando a ambos de sus hermanos…permitiendo que su mechón rojo disimulase bien que los estaba mirando tan inquisitivamente, largando un pequeño suspiro antes de girarse hacia los demás
Ya era costumbre la mirada de la chica de cabellos rosas cuidándoles…o mejor dicho a Rei. La tristeza no la abandonaba en momento alguno, tal como si fuese una de sus hermanas; Lee también observaba mucho hacia ellos, mas a Mao tampoco la podía dejar de ver y abrazar, susurrando palabras reconfortantes
No era una ciencia saber que él estaba enamorado de la chica, pero se había resignado a que fuese la novia de su mejor amigo
Los demás de los White Tiger X conversaban de manera amena más, aunque pareciese que les importaba poco el estado del sub-líder, no dejaban de ver hacia su dirección.
Prácticamente la viva llama de ese equipo parecía haberse extinguido por completo. Ahora era calculador en su juego, la pasión aún la conservaba en la competencia, sin embargo no parecía divertido o alegre ante aquello…sólo mostraba en sus acciones obligación
Pasos se escucharon en su dirección, causando que los chicos se giraran y varios sonrieran ampliamente, mas guardando sepulcral silencio al saber lo que aquella persona tenía planeado hacer
Rei, aunque perceptivo estaba ido, con una mirada tan sólo fija en los aviones…mas sus hermanitos se giraron, sonriendo y alejándose un paso, cosa que sacó al neko de sus pensamientos, pensando que por fin partirían; claro, hasta percibir como algo se trepó a su espalda y lo estampó sonoramente contra el vidrio, sintiendo un bulto en la parte del pecho…los cabellos ébanos tales cual los suyos acariciar sus piernas, unos brazos casi asfixiándole por la presión ejercida a su cuello y un beso depositado animosamente en su mejilla, algo que sin duda le sacaba una simple pero sincera sonrisa que sólo a sus hermanos mostraba
-Rei!-dijo la joven encima suyo, bajándose y corriendo frente al gato, agrazándolo animosamente para luego besarle todo el rostro menos los labios-chico! Anímate mas que pareces muerto!
-Nihao onee-san n.n!-saludaron ambos niños pequeños mientras abrían sus brazos a la chica de ojos ámbares, aunque mas oscuros que los del mayor, sólo que difería en que su piel era mas blanca, raro en alguien como ellos
-Chibis w! Dios! Miren como están! Reight! Samael! Rei w!-decía mientras cargaba a ambos niños y abrazaba a todos al punto de asfixiarlos
-Hika nee-san…el aire…-susurró Rei ya que los dos pequeños no pudieron ante el impedimento de aire xD
-Ay ooU… lo siento!-dice soltándolos y quedándose con Samael mientras que Reight estaba con el otro, los cuatro sonriendo…aunque Hikari sabía que sólo era momentáneo, ya que pronto, aquella alegría abandonó el rostro de su hermano…agradeciendo que aunque sea la sonrisa sincera prevaleciera…-En serio lo siento, hace meses no los veo
-No hay problema…llegaste a tiempo-comentó el tigrecito mientras se abrazaba a ella mas suavemente-gracias por venir…
-Que bueno Quiero conocer a tus amigos y agradecerle que te cuidaran tan bien-comentó mientras acariciaba el rostro ajeno mientras éste cerraba sus ojos
-Nosotros también!-dijeron ambos gemelitos al unísono, sacando sonrisas de los mayores
El sonido del altavoz mandando el aviso de abordaje llamó la atención de todos, girándose velozmente a éstos para escuchar como les indicaba el lugar donde debían abordar, levantándose todos y dirigiéndose al lugar nombrado, mas Lee y Mao fueron donde los cuatro hermanos Kon, sonriéndole a Hikaru antes de hacer una reverencia correspondida por la mayor
-Cuanto tiempo, Hikari-san-saludó Lee dándole la mano, la cual la mayor la tomó soltando momentáneamente la de Rei
-Un gusto ver tu cara de nuevo, Lee; también la tuya Mao, gracias por cuidar a Rei por los meses que me fui de viaje y a ustedes dos también-habló antes de que los gemelos repelasen, sacando una risa grupal, mas sólo una suave sonrisa por parte de Rei-Bien, que hacemos! Perdemos el tiempo y no servirá de nada el que hayan llegado temprano! Vamos vamos!-apresuró tomando a Rei de la mano jalándolo con ambos cargando a los menores, conversando ella y la pelirrosa durante el transcurso al avión
No tardaron demasiado en arribar a éste, sentándose Lee y Mao juntos, ya que Hikaru quería sentarse con Rei y los pequeños se sentaron delante para asegurarse de que nadie más escuchase la plática de aquellos dos
Pronto, la sonrisa en los labios de Rei se marchitó, recargándose sobre su hermana mientras que cerraba los ojos, sintiendo como ésta le acariciaba sus cabellos regados por el asiento por la coleta baja, respirando lento y pausado cual si estuviese durmiendo, sintiendo varios besos en su rostro…no retirándose a pesar del despegue
-Nee-san…me duele…cada vez es mayor el vacío…-susurró sabiendo que su hermana sabía de lo que hablaba…ella, Samael y Reight eran los únicos que sabían con exactitud todo su sentir…y que raramente también tenían en cuenta lo único que podía curarlo…mas aún así, sin decirle nada a quien sufría el problema…
-Shhh…Daijobu ka Rei…de una manera u otra estarás bien…te lo prometo…palabra de hermana mayor…ahora sólo duerme…son varias horas de travesía…-susurró a lo que aquellos lindos y muertos ojitos le vieron, asintiendo ante el hecho y acomodándose en su regazo, quedando en brazos de Morfeo en pocos minutos
Hasta aquel momento, aquellos gemelos pudieron pararse en sus asientos y girarlos a ver, observando a Rei acomodado en piernas de su hermana mayor…dormido tranquilo con la chica viéndole con mirada triste. Ellos la correspondieron, colocándose de pie y llegando donde ellos, buscando donde acomodarse antes de quedarse los cuatro ahí
El silencio no se hizo esperar…los cuatro se quedaron dormidos…uno sumido en sus fantasias, una cuidándole cual si fuese una madre y los otros dos acompañándole para no dejarle en soledad…
Cada segundo el destino era mas cercano…mas por alguna razón, Hikari rezaba por no hacerlo…ella estaba al pendiente de lo que ocurría con el fénix por medio de un lobo mensajero tal y como ella lo hacía para reportar lo que a su hermano le ocurría…
¿Quién pensaría que los papeles de sus vidas se invertirían de aquella manera tan radical…?
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La hora de llegada ya estaba próxima, Takao y Max se encontraban en el comedor del aeropuerto de París junto con Gian Carlo y Oliver.
Johnny y Robert se encontraban junto con ellos. En realidad, tanto Zeo como Gordon; los Kein y Salima, los miembros del Batallón Bartés, los PPB All Starz y los Bega's también se hallaban ahí para recibir a sus amigos de otros equipos
Todos estaban preparados, agradeciendo que las puertas del vuelo Moscú-París y Hong Kong-París estuvieran continuas, levantándose de sus lugares emocionados al escuchar como el anuncio de su llegada hacía sido dado
Max y Takao fueron los primeros en correr a donde estaban, observando ambos de manera impacientemente y tomados de la mano ambas puertas…
Pronto la gente arremolinada se vio desabordando por ambos sitios de manera unánime, revelando ambas figuras casi al mismo tiempo, mas antes de que ellos pudiese correr a saludar primeramente al gatito, dos sorpresas les llegaron: Una fue el ver a Rei multiplicado en diferentes tamaños y sexos y la otra…la menos increíble era…que la vida del chico se había escapado de su cuerpo dejando sólo un recipiente vacío…
-Ya no saludan?-cuestionó Bryan burlonamente mientras llegaba hasta ellos, tomando a Takao del cuello y sacándolos de su sorpresa, casi con la quijada en el piso todos al ver a la chica sonriente que veía al lado de Kai
-O por Dios oo…el Apocalipsis!-gritó Takao con las manos en su cabeza y cayendo de rodillas, siendo raramente observado por todos, menos por sus amigos que estaban casi al borde de la muerte en carcajadas xD
-Vaya recibimiento…-se quejó el bicolor con una ceja levantada y sintiendo como Max se acercaba a abrazralo animosamente, notándose un sobresalto pequeño en el ojirrojo, mas correspondiéndolo
-Que gusto en verte, Kai…-murmuró en el oído de éste, sintiendo un beso en la mejilla que jamás pensó que se lo daría Hiwatari, sonrojándose y no notando la sonrisa triunfal del ruso ante la mirada celosa de Takao
-Cuanto tiempo, Max-fue todo lo que dijo antes de separarse
-Se olvidaron de mí?-cuestionó una voz casi a su lado, haciendo que todos se giraran, mas era una sorpresa que los atacó a todos, pero a Kai le hizo sentir su corazón partirse de alguna manera
Aquella suave voz prevalecía, pero era mas fría, la mirada ambarina muerta, mas con su sonrisa…mas chica, menos acoplada a su dueño…
-Rei…-susurró el rubio cachorro, acercándose a éste y corriendo hasta el chico quien había leído toda carta sin quererlo creer-Rei…
-Lamento preocuparte, Maxie…-susurró correspondiendo el abrazo mientras que los dos niños a su lado se alejaban corriendo animosos hacia Kai, levantando su carita para verlo y luego a la chica a su lado
-Objetivo Localizado! Punto a Eliminar!-exclamaron señalando a Ángel, la cual no entendía al igual que Kai, mas cuando éstos se les iban a lanzar encima a la chica, un par de manos se vieron deteniéndolos, los otros dos hermanos mayores, quedando cuatro frente a frente con Kai…mas Rei quien, al verlo sintió su rostro recobrar algo de color y sus ojos un brillo casi imperceptible, cosa que hizo sonreir a los gemelos y chocar las manos
Primera Fase: completada
Ángel no comprendía, ninguno mas casi nadie les ponía atención, sólo los hermanos de Rei y los amigos de Kai…quienes no separaban sus vistas de ellos…
Dicho encuentro dictaba una nueva historia…una que hablaría de dos…si es que el destino mismo quería conservar aquella unión…
