Capitulo 21:Buscando fragmentos del un alma maldita

A la semana siguiente todos se reencontraron para visitar Little Hangleton decididos a todo con tal de encontrar esos trozos malditos, esos fragmentos de algo que no podía ser llamado alma, ya que un ser como Voldemort no tiene alma, es como un ente que se alimenta del odio, peor que un dementor. La peor creación que haya existido sobre la faz de la tierra

- ¡¡Súbanse pues! ¿Que rayos esperan? – Dijo Hermione – estamos a más de medio día de camino y no hay modo de ir a lo mágico sin que seamos detectados, por lo que nos toca rodar

- Si Hermione, no hace falta que nos lo recuerdes tanto – se quejó Draco subiendo al vehiculo, Hermione encendió la camioneta y se pusieron rumbo a Cornwall

El camino fue largo, casi nadie estaba con disposición de hablar, como si de veras el silencio fuese necesario para centrarse y recobrar la tranquilidad, todos miraban por la ventanilla, como quien ve pasar su vida a través de un cristal... la guerra se notaba hasta en el mundo muggle, la gente se veía mas miserable que nunca antes, los dementores hacían estragos entre la población no-mágica ya que estos carecían de la facultad de verlos

- lo siento, pero necesito decirles algo – el pensamiento que rondaba por la cabeza de Claudia pugno por salir sin remedio

- ¿sucede algo? – preguntó Harry algo preocupado al notar el tono de voz de la chica

- Creo que tenemos que hacer el ritual de unión de sangres – dijo Claudia

- ¿QUEE? – chillaron Hermione y Draco, los demás manifestaron no entender nada

- Pienso que debemos hacerlo, tenemos que proteger a Harry, yo estoy dispuesta a dar mi parte – dijo Claudia

- ¿sabes lo que nos estarías pidiendo? – dijo Hermione

- Claro que lo sé, pero solo quiero hacer lo que este a nuestro alcance para fortalecerá la persona que es nuestra única esperanza – dijo Claudia – Y entre nosotros están los cuatro tipos necesarios

- Eso es evidente – dijo Draco – pero...

- Yo no he obligado a nadie Draco, solo digo lo que he estado pensando hace muchos días... es algo voluntario del que esté dispuesto – dijo Claudia

- ¿de que se trata? – preguntó Ron

- es un pacto que se hace con cuatro personas, de las cuales uno de ellos es el beneficiario del pacto, consiste en tomar un poco de la sangre de cada uno de los pactantes, tienen que ser de tipos diferentes, los cuatro tipos de sangre son muggle, sangresucia, mediasangre y sangrepura – dijo Hermione – Los tres que apoyan al beneficiario se comprometen a dar su sangre, su fuerza y su vida si el beneficiario lo requiere, es un antiguo ritual de magia negra, es como una promesa irrompible, al dar tu sangre, esa persona pasa a poseer parte de los poderes, fuerza y vida de los donantes

- Esto suena a cruce entre horcrux y promesa inquebrable – dijo Ginny

- De hecho, es muy semejante, con ese rito se da todos esos dones a alguien que lo requiera, en este caso, Harry – dijo Hermione

- ¿como averiguaste la existencia de algo así? – preguntó Ron algo aturdido

- Viviendo en la sección de magia oscura de la sección prohibida de la biblioteca – contestó Claudia saliendo del mutis

- Pero para ello se requiere que sea oficiado por alguien cuya alma esté dividida, no necesariamente que posea un horcrux no – se apresuró a decir Draco al notar las caras de sus amigos – pero si debe haber asesinado a alguien, ello es para asegurar que no le importa dar la vida o quitarla

- Ese seria mi papel – dijo Claudia – Yo soy la sangre muggle y la que ha quebrado su alma por un asesinato

- Pero ¿para ello no se requiere que haya sido a conciencia... o sea... sin remordimientos? – preguntó Hermione recordando

- En efecto – confirmo Draco dándose cuenta y abrió los ojos desmesuradamente - ¿TU...?

- Yo maté a Lucius con plena conciencia y premeditación – dijo Claudia impasible – Juré vengarme del él luego de todo lo que pase por su culpa, estuvo en el ministerio y casi acaba conmigo allí, luego nos secuestra a Hermione y a mi, nos torturaba a diario, llegue a odiarlo como a nadie en mi vida ¿Eso es lo que querían saber? Ya lo saben

Todos se quedaron momentáneamente horrorizados ¿Que clase de monstruo era?

- Deben estar pensando lo peor de mi, lo sé, Draco; quizá a partir de esto me odies como a nadie pero al menos ya saben todo – dijo Claudia – Si algún día pasan por ello, quiero que se analicen y sean sinceros consigo mismos ¿No sentirían deseos de matarlo? Yo no me voy a dar baños de pureza con ustedes negándolo

Draco tenía esa sospecha pero no lo había confirmado hasta ese momento ¿La odiaba? Siendo sincero consigo mismo... NO ¿por qué? – Se preguntó – Por que me libró de la obligación de seguir sus pasos, si Lucius estuviese vivo no habría podido desertar del bando Tenebroso jamás, primero le hubiese matado...si importar que fuese su propio hijo... No la odiaba

- Mejor olvidemos el tema – dijo Hermione tratando de disipar el ambiente tenso que reinaba

- Yo preferiría que me dijesen en mi cara que opinan hoy de mí – dijo Claudia contradiciéndola – Prefiero saber que imagen tienen

- Yo te entiendo – dijo Harry – Yo no quiero matar a Voldemort por una profecía, es por que se que es lo mejor, estoy plenamente conciente de ello ahora

- Yo preferiría limitarme a decirte que no ha cambiado nada de lo que pienso de ti, espero que lo sepas – dijo Draco recobrando la serenidad

- Yo no puedo negar que aprendí a odiar a Lucius pero... no creo que haya tenido el valor de matarle – dijo Hermione – pero no pienso juzgarte... solo te pido que pienses que no es bueno dejarse arrastrar por el odio y la sed de venganza

Claudia sonrió, ella quería decirle que temía que quisiese matar a Bella también, movió la cabeza negativamente

- Gracias, de veras me alegra que al menos no me vean con malos ojos luego de todo – contestó y miró a los hermanos Weasleys, los cuales aun no salían de su estupefacción

- No pienso preguntarles su opinión ahora, piénsenlo y luego dirán, pero si quiero saber y esto va con todos, saber si me apoyaran a hacer el ritual de sangre para Harry

- No creo que haga falta – dijo Harry apresuradamente

- Voldemort tiene 3 horcruxes aun y está vivo ¿crees que no necesitamos darte armas para acabarle? Eres aun muy ingenuo amor, pero en la guerra, no hay que hacerle las cosas fáciles al enemigo, recuérdalo Harry – dijo Claudia

- Yo acepto – Dijo Hermione – ya tienen la siguiente sangre

- A los demás no se sientan presionados, el que este dispuesto lo hará – dijo Claudia

- Yo lo haré – dijo Draco – Quizá sea una de las pocas cosas verdaderamente útiles en contra de Voldemort que podría hacer en mi vida

Ron se molestó: ¿qué? ¿Ahora pretendía robarle su puesto de mejor amigo de Harry, de apoyo incondicional? ¿No le era suficiente con su hermanita? ¿No era suficiente?

- Bueno hemos llegado a Gran Hangleton – dijo Hermione que era la que conducía – Estamos a 4 millas de Little Hangleton

- Yo creo que mejor dejamos nuestras cosas en alguna posada u hotel, lo que sea, y nos vamos al pueblo mas entrada la noche – propuso Draco

- Tienes razón – dijo Harry – No queremos llamar la atención

- Menos cuando tenemos que buscar esos trozos de un alma maldita – dijo Ginny

Luego de 15 minutos dieron con un pequeño hotel, allí se registraron y dejaron sus maletas

- Vamos a comer algo antes – propuso Ron – Tengo hambre y si he de entrar furtivamente en algún sitio, bueno...ya saben...

- Si Ron – dijo Harry – hay que echarte combustible

- ¿por que será que esa frase me suena mía? – dijo Claudia

- Por que tus mañas se me pegan – dijo Harry con una risa

- Soy contaminante de malas mañas ¡Que horror! – Dijo Claudia – ¡Sálvese quien pueda! ¡Mujeres y niños primero!