Todos los personajes de esta historia pertenecen a J.K. Rowling
CAPITULO 6 EL PERRO DEL HORTELANO
-y por eso tengo que viajar mucho – Ginny ya tenía media hora escuchando a Michael hablar sobre su trabajo y se había enterado de que trabajaba en una empresa que vendía escobas por todo el mundo, Nimbus, saetas, barredoras, etc.
-La verdad no recuerdo que te gustara mucho el Quidicht – como le iba a gustar al pobre, si Ravenclaw siempre había sido la peor de todas las casas en el deporte de los brujos, como con la pésima buscadora que tenían, aun recordaba las dos veces que le había tocado jugar contra Cho y como las dos veces le había ganado.
-Pues el Quidicht sigue sin gustarme, pero acá entre nos soy un excelente vendedor y créelo soy en vendedor numero 1 de escobas en todo el mundo – hay que tipo tan engreído, pero sinceramente era muy guapo, y aparte vestía muy bien ese traje que traía le sentaba de maravilla, solo tenía un defecto… no era Harry Potter – y dime Ginny que ha sido de tu vida en estos años
-Pues, estoy trabajando en el Ministerio con mi papa, en el departamento de Uso Indebido de Objetos Muggles, y la verdad es muy interesante, te encuentras cada cosa
-Y novio no tienes – pregunto muy interesado Corner
-Pues no la verdad, he tenido muy mala suerte con los hombres – inmediatamente vino a su mente una imagen de Harry, pero la desecho rápidamente – de hecho ya perdí las esperanzas de encontrar a mi príncipe azul
-No deberías hablar así, eres muy hermosa y aun eres joven, cualquier hombre estaría feliz de que tan solo le dedicaras una mirada – que comentario tan galante si solo así me hablara Harry… ya de una maldita vez deja de pensar en el maldito Potter, pero no podía desde la semana pasada que habían hecho el amor no podía sacárselo de la mente, de hecho no podía ni dormir en su recamara, porque era una tortura recordar lo que había pasado, aun estaba impregnado el olor de Harry por toda su habitación, había llorado tanto recostada en su cama, abrazada a la almohada, no podía creer que Harry fuera tan frío y tan maldito, que la dejo despertar sola y solo con una maldita nota, pero tenía que seguir con su vida no podía dejar que algo así la derrumbara, ya había sobrevivido al abandono de Harry una vez y lo haría de nuevo.
-Oh Michael, gracias la verdad que me hacia falta escuchar algo así – bueno era hora de poner manos a la obra- pero como te comentaba ya no quiero seguir besando sapos – si sapos con lentes y una rara cicatriz en forma de rayo – aunque, no pierdo las esperanzas de ser madre
-Te felicito Ginny, la verdad la maternidad es algo muy hermoso, pero disculpa mi curiosidad, … si no te piensas casar entonces como vas a tener un hijo
-Pues – Ginny se estaba sonrojando, era muy difícil preguntarle a un hombre si se quería acostar contigo para tener un bebe – precisamente ahí es donde entras tu – el la miro con cara de interrogación – quería saber si tu estarías dispuesto a ayudarme
-Y de que manera quieres que te ayude – el seguía sin entender nada, pero en un instante su expresión cambio y lo comprendió todo, hasta se puso rojo jajaja, no todos los días te hacen esa proposición – veras Ginny …pues … la verdad me encantaría ayudarte pero….
-Buenas Noches, que casualidad encontrarnos aquí no…- Ginny casi se desmaya su peor pesadilla estaba parado justo en frente de ella
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Cuando Harry llego al Bar, inmediatamente vio a Ginny estaba sentada en una mesita de casi el fondo del lugar y parecía muy entretenida platicando con el Corner, la muy #$&/ como se atrevía, pero esto no iba a quedar así, se acerco rápidamente a la mesa y sin mas saludo.
-Buenas Noches, que casualidad encontrarnos aquí no… - solo pudo notar como Ginny palidecía, el la miro furioso
-Pero si es Harry Potter – de inmediato Michael se levanto para saludarlo, que efusivo si bien recordaba siempre estaba hablando pestes de Harry cuando salieron juntos – que gusto verte por aquí, la verdad que tu eres uno de los principales motivos de mi éxito – Harry lo miro con cara de interrogación
-A si y porque lo dices
-A pues te acuerdas de la saeta de fuego edición limitada en la que aparecía tu autógrafo – Harry solo asintió – pues fue idea mía y gracias a eso me ascendieron
-Enhorabuena entonces
-Gracias, lo único malo es que gracias a ese puesto me la paso casi todo el año viajando.
Harry creía que le iba a dar una úlcera, estaba deseando meterle un puñetazo al tipo, pero antes tenía que explicarle a Ginny porque.
-discúlpame Ginny, podría hablar contigo un segundo – la miro directo a los ojos y si se pudiera lanzar hechizos con los ojos pues el ya estaría muerto
-Harry, por si no te has dado cuenta estoy en medió de una cita
-Vamos Ginny solo será un segundo – y empezó a tirar de su brazo para que se levantara – tengo algo que decirte
-Pues estoy segura que cualquier cosa que me tengas que decir no me importa, así que te pido que te vayas - pero Harry en lugar de irse empezó a hablar con Michael
-Oye Corner, de seguro alguien que viaja tanto como tu, ha de ser como los marineros, ya sabes una novia en cada puerto
-Pues no, de hecho yo… - pero Harry no lo dejo continuar
-Que piensas de la idea de Ginny de quedarse embarazada? – ataco Harry
-Harry no creo que eso te importe y ya lárgate de una vez
-No Ginny tengo mucha curiosidad por saber que opina el señor Corner – Michael estaba muy confundido esos dos si que estaban locos, toda la gente del bar estaba atenta a su conversación y el quería que se lo tragara la tierra.
-Pues veras Harry… al principio me sorprendió mucho … pero no deje de sentirme alagado de que pensara en mi pero …
-Entonces estas dispuesto a dejarla embarazada
-Harry basta – Ginny estaba furiosa, lo quería matar como se le ocurría hacerle esas preguntas
-No Harry deja que me explique la verdad es que yo …- pero una vez mas Harry no lo dejo hablar
-Pero no la dejaras embarazada verdad Corner – Harry se acerco a el y lo tomo por las solapas del traje – sabes que es imposible embarazarla, claro que a ti no te importa mentirle con tal de meterte en su cama no
-Basta Harry, suéltalo
-Yo no tengo intenciones de nada – dijo Michael ya un poco molesto – déjenme hablar de un maldita vez y suéltame Potter – cuando lo soltó Michael se dirigió solo a Ginny – Ginny, antes que nada me halaga que hayas pensado en mi para algo tan importante, pero la verdad no te puedo ayudar, Ginny yo soy un hombre felizmente casado y por nada del mundo engañaría a mi esposa – a Ginny se le caía la cara de vergüenza, casado hay pero que estupida, miro a Harry que tenía la cara llena de satisfacción, claro el lo sabia y no le había dicho nada, de seguro había seguido con las investigaciones por su cuenta y no le había advertido nada – y ahora si me disculpan me tengo que ir, hasta luego Ginny y que encuentres pronto un padre para tu hijo.
-Gracias Michael y disculpa todo esto, pero hay hombres que son unos verdaderos animales – cuando dijo esto vió directamente a Harry, le dio un abrazo y un beso en la mejilla a Michael a modo de despedida – que seas muy feliz – Michael se dirigió a la salida pensando como lo que era tan evidente para algunos era invisible para otros pues no cabía duda de que Ginny Weasley y Harry Potter estaban enamorados.
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-Te lo dije Ginny, tu idea es estupida
-Cállate Potter – Ginny vio salir a Michael y se disponía a salir cuando la mando de Harry la detuvo – suéltame ya pase muchas vergüenzas por el día de hoy – de un tirón se soltó de Harry
-No Ginny tenemos que Hablar, pero ya no quiero dar mas espectáculo, vamos a mi casa –
-Estas loco si piensas que me voy a ir a tu casa…- pero antes de que Ginny terminara de hablar Harry se la Había echado al hombro y en un instante desaparecieron del bar y aparecieron en la casa de Harry, - quien te crees tu Potter, que puedes disponer así del tiempo de la gente y ya – dijo Ginny ya en el suelo, se levanto para Salir pero le resulto imposible abrir la puerta, trato de desaparecer pero por mas que lo intento nada resulto
-Ya no gastes tu energías, nada va a funcionar… y ahora me puedes decir que demonios estabas haciendo con Corner
-Pues muy fácil, lo iba a convencer de que se acostara conmigo esa noche
-Pero si serás idiota, como te citaste con el antes de que yo te dijera los resultados de la investigación
-No te importa, yo puedo hacer de mi vida y de mi cuerpo lo que yo quiera y si me quiero acostar con medio Londres es mi problema
-Y que no piensas en las consecuencias que esto te puede traer, no claro que no piensas, si tu única neurona esta muerta – ya se estaban gritando frente a frente
-Mira el señor precaución, déjame te recuerdo que no usaste protección el día que hicimos el amor
-Por Merlin Ginny, lo de la otra noche no fue hacer el amor fue solo sexo, puro y vil sexo – al escuchar esto Ginny se hizo para atrás como si la hubiera golpeado, así que para el solo había sido sexo, la noche mas maravillosa de su vida no había significado mas que un simple acostón para el, los ojos de Ginny se inundaron de lagrimas no quería llorar enfrente de el pero cada segundo se le hacía mas difícil contener las lagrimas, hasta que fue simplemente imposible
-Tienes razón Harry – dijo Ginny entre lagrimas – fue solo sexo, porque tu eres una persona tan ruin y tan despreciable que no conoces el significado de la palabra amor y eres incapaz de amar, ya entiendo porque despues de todo estas solo, sin familia y sin nada y todas las mujeres que se te acercan solo lo hacen para hacerse famosas, tu eres como un trofeo para ellas, eres como un pedazo de carne, como un animal al que usan para satisfacerse, porque como persona no vales nada, te odio, te odio como nunca creí odiar a alguien - sabia que sus palabras le hacian daño a Harry pero se lo merecía, se lo merecía por ensuciar así su entrega, porque para ella habían hecho el amor, ya que ella a pesar de todo lo amaba y lo iba a amar siempre
-Lárgate Ginny, lárgate de mi casa – dijo Harry muy furioso
-La verdad a veces duele no Harry, me das tanta lastima – ya había empezado a decir lo que sentía y ahora no podía parar tenia que desquitarse de todos los años que le debía – eres la persona mas egoísta que conozco, eres el vivo ejemplo del perro del Hortelano, vez el manjar y no comes pero tampoco quieres que otros coman no es así
-Lárgate de una maldita vez o te vas a arrepentir – dijo tomándola por los hombros para zarandearla
-No me toques que me das asco
-Eres una bruja mentirosa, si se nota que aun así me deseas
-Suéltame, te lo advier…- Ginny no dijo nada mas porque en ese momento Harry la tiro al suelo y se puso encima de ella – suéltame – Harry en lugar de eso tomo las manos de Ginny y las coloco por encima de su cabeza
-No te voy a demostrar que no te doy asco pequeña embustera – y la empezó a besar a la fuerza, muy a su pesar la respuesta de Ginny fue inmediata le regreso los besos con la misma intensidad y hasta emitió pequeños gemidos de placer cuando las manos de Harry empezaron a acariciarla – y ahora quieres que pare
-No, por favor, no pares – dijo Ginny ya perdida en las sensaciones que le provocaba Harry, pero Harry paro, Ginny abrió los ojos y solo se encontró con la mirada penetrante de el
-Ya vez mi querida Ginny, no eres mejor que todas las golfas que me persiguen y ahora lárgate de aquí antes de que te eche a la fuerza – Ginny se quería morir, había caído en su maldito juego como lo que era una simple y estupida principiante, se levanto y corrió a la puerta la cual ahora se abrió sin ningún esfuerzo salió de la casa sin notar que de unos bellos ojos esmeraldas derramaban lagrimas, lagrimas que le quemaban lentamente el corazón
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-Eso me gano yo por estupida – se recriminaba Ginny entre lagrimas, se sentía tan mal, si muriera en ese mismo instante sería lo mejor, lo amaba tanto que le dolía, pero el no se merecía su amor nunca lo había hecho, todo era un juego para el, a veces cuando lo veía le costaba recordar al pequeño niño tímido e inseguro que conoció un 1 de septiembre en la estación del tren, no de ese niño ya no quedaba nada, se había convertido en un hombre cínico y cruel, estaba caminando por la calle vacía y obscura, pero no tenía miedo, tenía que volver a su casa, pero ahí solo crecía su dolor al recordar, a si que sin pensarlo se dirigió a un a casa en donde sabía que sin importar la hora que fuera sería bien recibida, llego a la entrada y toco el timbre, solo unos segundos después la puerta se abrió dejando ver a un hombre rubio de grises ojos
-Draco…- y sin mas se echo a sus brazos llorando, llorando como cuando era niña y la consolaba su papa, sollozaba y se abrazaba cada vez mas fuerte al el
-Pero…ahora que demonios te hizo Potter – y la abrazo porque sabía que en esos momentos su amiga necesitaba consuelo, consuelo que el estaba dispuesto a dar.
Ay como que me quedo medio dramático este capitulo, me arrepiento de que estos dos se causen tanto daño, aunque Harry se merecia todo lo que Ginny le dijo, a y no piensen mal de Ginny solo fue a buscar a un amigo, jajaja, bueno con el asunto de las consecuencias pues les informo que van ganando aquellas personas que quieren consecuencias, jajaja y al cliente lo que pida, no se preocupen para el proximo capi abra menos drama. Quiero agradecer a Klass2008, Anni-bella3, Saria Black, jamesandmolly, PoTTeRciTa, Medea Circe, Anelis Evans, MaryL Potter, Ley-Ara, Eri Mond Licht, Vivi-G Weasley, gracias por todos sus cometarios. Y a ti que te gusta mi historia y no me has enviado reviews te invito a que lo hagas, para asi saber cual es tu opinión.