La oscuridad se disipó permitiendo una tenue entrada de luz. El sol se ocultaba y el alumbrado de las calles comenzaba a hacer presencia, las cenizas que una vez los rodearon ahora se arrastraban dentro de las mangas del vestido de la joven inconsciente en los brazos del rubio.
Debía actuar rápido o la chica no sobreviviría, volteó a su alrededor buscando al capitán para que le brindara ayuda, pero notó el completo cambio en su entorno siendo rodeado por 2 grandes edificios en lo que parecía ser el último sitio que pisó antes de desaparecer de Nueva York.
Ahora era capaz de apreciar a detalle los elementos del callejón, la zona de descargas, señalamientos, botes de basura y escaleras de emergencia… objetos que habían sido cubiertos en su totalidad por ese manto oscuro. El héroe estaba consciente que había regresado a su hogar, pero no podía sentirse aliviado sosteniendo un cuerpo que parecía no poseer vida.
—OKA-SAMA —La llamó desesperado por su alias posando sus dedos sobre la yugular para revisar su pulso percatándose que no había rastro de él.
Una sensación de escalofrió lo invadió más no permitió que le detuviera, dejando el cuerpo en el suelo para confirmar sus sospechas, posicionó su oreja sobre el pecho de la joven para escuchar sus débiles latidos, su corazón parecía tener dificultades para seguir, más aún no se detenía por completo.
Por la cantidad de sangre que había perdido no creía lo lograría, levantó sus manos para revisar ambas heridas que se ocasionó dejando que resbalaran las mangas, revelando sus brazos cubiertos de cicatrices con 2 grandes cortes recientes en ambos antebrazos, el héroe miraba extrañado la bizarra escena, ambas heridas estaban completamente limpias sin rastro alguno de sangre notando como una sombra negra se movía dentro de ambos cortes.
Debía llevarla al hospital más cercano, levantó el cuerpo y trató de recordar cual podría ser una opción saltando a lo alto de un edificio ya que sin su celular que dejó junto con su traje en la casa del anciano solo dependía de su memoria.
La ausencia de sol y exceso de luces no le permitían ubicarse en la zona, haciéndolo entrar en crisis.
_LO LAMENTO_ Apretó dientes, apresurándose sentenciando su destino pensando era demasiado tarde.
El cuerpo de la chica comenzó a aumentar su peso provocando que los brazos del héroe casi golpearan el suelo.
_¿QUE ESTÁ SUCEDIENDO?_
—¿SEÑORITA? —El repentino cambio de peso logró sacarlo de su bloqueo, no debía dudar y detenerse.
No tenía idea que sucedía, en desesperación comenzó a darle compresiones de pecho sintiendo como el corazón comenzaba a imitar el ritmo que llevaba el héroe. All Might se detuvo tomando una de sus muñecas apreciando el rastro de pulso.
_ESTO NO TIENE SENTIDO ¿ESTÁ SANANDO POR SU CUENTA?_
—SEÑORITA OKA-SAMA —Llamó preocupado tratando de levantarla, seguía demasiado pesada, incluso con su fuerza le era molesto mas no difícil.
La peliblanco luchó para abrir los ojos, mientras su cuerpo se aligeraba gradualmente, siendo cargada por el héroe con gran facilidad que aprovechó para desplazarse.
—SEÑORITA ¡SIGUE AQUÍ!
—Gracias… —Susurró aliviado.
—RESISTA UN POCO MAS… PRONTO RECIBIRÁ AYUDA
La chica se encontraba débil teniendo problemas para moverse, intentando levantar su mano sin éxito.
—NO SE MUEVA
—No… hospital no… —Solicitó débilmente llevando sus brazos al torso.
—LAMENTO NO PODER CORRESPONDER A SU DECISION, PERO NECESITA AYUDA Y ES MI DEBER LLEVARLE A ELLA. —Continuó saltando entre azoteas.
—BASTA… —Trató de alzar la voz
—¡DEBE BAJARME, AHORA! —Gritó molesta cubriendo con sus manos los ojos del héroe que no podía avanzar pues la podía poner en peligro si seguía trasladándose a ciegas.
—SEÑORITA DETENGASE, SE ESTÁ EXPONIENDO A PELIGRO. —Solicitó aterrizando en una azotea.
—DEBE PERMITIR QUE SIGA CON MI DEBER.
El héroe se puso de pie mientras la joven tercamente trataba de bajar de sus brazos.
—NO TIENE FUERZA PARA PONERSE DE PIE, NESECITO LLEVARLA A QUE LA ASISTAN.
—Permítame bajar por favor Sr. All Might. —Dijo más tranquila sosteniéndose de su playera insistiendo en apoyar los pies en el piso.
Toshinori recordó las marcas de su cuerpo acompañado con las palabras del cirujano. _No confía en nadie_ Por lo que permitió la chica apoyara sus pies en el suelo, de igual manera no lograría moverla hasta calmarla.
La peliblanca se aferró a la playera negra del rubio negándose a caer, su cuerpo temblaba, sus manos sudaban, la respiración era pesada. Al encontrar su centro de equilibrio aflojó su corsé para tener mayor movilidad, dejándolo caer al suelo.
—Me siento pesada…ha… haa.. —Quejó sin soltarse del héroe que tratando de calmarla la tomo con delicadeza por las muñecas para que apoyara las manos en sus hombros y tuviera mayor estabilidad arrodillándose lentamente para tenerla frente.
—MAJESTAD, PODRÍA SEDERME EL HONOR DE LLEVARLE A QUE ESTE EN CONDI… —Se detuvo pues vio a la chica temblorosa dejar salir una leve risa.
—Pff… No, por favor, sin majestad… Mi cuerpo se está normalizando —Tomó la mano del héroe y la llevó hacia su pecho para que sintiera su corazón.
—NO ESPERE QUE ESTÁ HACIE… OI… —El héroe se sonrojó unos segundos notando la expresión disconforme de la chica indicando que lo había malinterpretado. Sintió su ritmo cardiaco lento y uniforme, parecía que su cuerpo estaba bien.
—Solo… Se siente muy pesado… No sé si sea la gravedad de aquí. —Dijo tratando de recuperar el aire.
—Solo debo descansar… estoy exhausta. —Levantó su palma frente la cara del héroe para detener cualquier comentario que fuera a realizar.
—Y SIN HOSPITALES.
—INSISTO QUE DEBERIA RECIBIR ATENCIÓN —Dijo serio con un tono calmado.
—Que insolencia la suya responder a un acto desinteresado de ayuda poniendo mi vida en juego a cambio de incumplimiento del único favor que solicito. —Protestó victimizándose.
_TERCOS, SIEMPRE SON TERCOS LAS PERSONAS DE PODER _¿Que será esa repulsión por los hospitales?
—¿ME PERMITE VERIFICAR SU ESTADO? EN CASA TENGO HERRAMIENTAS BASICAS PARA VER SU SALUD.
La chica dudó un poco, no parecía una jugada y no es como que tiene a donde ir.
—Confío en que no traicionará su palabra Sr. All Might.
La peliblanca dejó de apoyarse de los hombros del rubio, dando sus primeros pasos con un poco de dificultad y aún agitada se detuvo para apreciar su entorno… Una ciudad como nunca antes había visto. Grandes estructuras de acero y cristal predominaban en los alrededores siendo iluminadas por luces de diferentes colores, parecía un sueño, tenía tantas preguntas que no quería responder del todo, lo más importante era regresar, una lluvia de pensamientos provocó que su corazón se acelerara, ocasionando que la joven perdiera el conocimiento apenas siendo atrapada por el héroe que notó una vez más el inmenso aumento de peso.
_PARECE QUE AL DESMAYARSE SU CUERPO SE TORNA PESADO_ Revisó sus signos vitales siguieran presentes.
—Debe estar exhausta y alterada… —Pensó al ver su repentino desvanecimiento.
El Rubio la levantó de nuevo pensando en romper su promesa por un momento, más prefirió trabajar esa confianza que no suele otorgar.
Siguió su camino deteniéndose con frecuencia para reconocer la zona evitando ser visto para no meterse en problemas, con su repentina desaparición sería abordado por periodistas, civiles o la misma policía.
La joven comenzó a volverse ligera de nuevo, indicando que recuperaba la conciencia abriendo los ojos para quedar maravillada con la hermosa escena. El reflejo de las luces en las ventanas, luces blancas y rojas circulando por las calles, grandes pantallas con imágenes en movimiento. El sonido tan distinto y caótico al que está acostumbrada, pero sobre todo la ausencia de estrellas en el cielo por el exceso de iluminación. Sin aviso alguno, la chica tomó de nuevo la playera del rubio para cubrir su rostro.
—¿ESTA BIEN SEÑORITA? —Sintió humedad llegar a su pecho provocado por las lágrimas de la chica.
—Esto es increíble, señor All Might, pero… —Se detuvo a pensar sus palabras.
—… Comprendo como debió sentirse. —Cambió de tema exhalando preocupada.
—PERO SABE REGRESAR —Trató de animarle con su distintiva sonrisa.
La joven solo guardó silencio, dejando fluir sus lágrimas perdiéndose en sus pensamientos y con ello la conciencia nuevamente.
Toshinori continuó su camino aterrizando en el balcón más alto de una torre de departamentos, la bajó delicadamente sobre una silla que rompió por su peso azotando contra el suelo quedando en una pose torcida. El rubio gritó internamente saltando en su mismo sitio al ver lo que ocasionó.
—AAAH LO SIENTO. —Expresó en voz alta, pensando que cualquier lugar donde la acomodara terminaría siendo destruido.
El rubio optó por dejar a la joven acostada en el piso en lo que entraba en buscar el equipo adecuado para revisar su condición y atender sus heridas, aprovechando también para prepararle alimento y un espacio.
La peliblanca se puso de pie después de un rato teniendo problemas para controlar su cuerpo, volteó a ver el interior de la casa esperando la invitación para pasar, mas al no encontrar a su anfitrión se enfocó en los alrededores. La decoración minimalista era algo que nunca había visto, la madera casi no hacía presencia, predominaba los materiales reflejantes similar al cristal, los colores eran neutros y apreciaba elementos desconocidos para ella.
All Might notó a la chica de pie en el balcón con la mirada perdida, no parecía ser la misma persona altanera que conoció en Gaia, su apariencia era desordenada, su peinado había caído, su elegante vestido lucia como un camisón, su actitud orgullosa y pose perfecta habían desaparecido. Tenía frente a él una mujer confundida e intranquila, recordándole su primer día en Pars, percatándose de cómo la incertidumbre puede cambiar a uno por completo, por lo decidió hacerle sentir bienvenida como el viejo Keto le recibió en su morada.
—SIENTETE COMO EN CASA… NO ES UN PALACIO, PERO TIENE LO NECESARIO.
La chica se acercó a la acogedora sala, sentándose sobre un sofá muy cómodo de tela gris frente a un mueble con una caja oscura y delgada encima.
—¿PODRÍA PRESTARME SUS MANOS? —Pidió amablemente Yagi.
Dudosa y un poco apenada arremangó sus mangas mostrando con mayor claridad las cicatrices. Sin contar las nuevas heridas ninguna de las demás parecía ser auto infligidas, en su mayoría eran marcas rodeando sus brazos, presentando rastros de haber sido cautiva. _¿QUE CLASE DE VIDA HA TENIDO?_ El mundo de donde venían era muy injusto, parecía que todos cargaban con un oscuro pasado.
El héroe estaba consciente de que las personas eligen como llevar su vida. El capitán que lo perdió todo se volvió un pirata vengativo, el ex-capitán retirado que experimentó el lado cruel de la marina terminó siendo una persona miserable, y ahora frente a él tenía una refinada joven cuyo pasado la guió a ocultarse de todos, pero de igual manera decidió ayudar a los demás… Toshinori no hacía más que respetar las decisiones de vida de los 3 casos.
La joven al ver como se perdió el rubio en sus pensamientos cubrió avergonzada las heridas que revisaba sacando de su trance a Toshinori.
—No debería mostrar las imperfecciones, que autoridad tendría alguien que porta en su cuerpo el historial de sus errores.
—NADIE ES PERFECTO, SON LOS ERRORES LOS QUE FORJAN NUESTRA PERSONA. SON NECESARIOS PARA CRECER. —Dijo orgulloso tomando de nuevo la mano de la dama para limpiar su herida mirando extrañado como a pesar de que podía abrir con sus dedos el corte, la sangre simplemente no brotaba, como si estuviera sellada por dentro.
Continuó con el otro brazo, de igual manera era imposible no pasar sus dedos sobre alguna cicatriz mas no decía nada.
—GRACIAS… —Expresó desanimado limpiando el segundo corte
—Creo que yo debería agradecer Sr. All Might.
—USTED ARRIESGÓ SU VIDA Y TERMINÓ EN ESTE LIO POR AYUDARME…
La chica lo observó de manera inexpresiva generando un silencio incomodo entre ambos en lo que el rubio terminaba de vendar los brazos.
—No es como que tuviera otra opción... —Mencionó viendo ambos vendajes.
—¿A QUE SE REFIERE?
—Por el momento Sr. All Might… no sé nada. Si sucedió de esta manera es porque así estaba destinado… solo el tiempo dirá el por qué.
—¿ASÍ DEBIA SUCEDER? CIERTO USTED ES UN ORACULO, ¡PUEDE VER COMO REGRESAR!
—¡Espere! ¿Un qué? ¿Eso le dijeron? No, no, no, no… Escuche… Lo mío es infiltración y conseguir información, cuando logras aprender a conectar todos los puntos, no es complicado obtener nuevas respuestas… Solo debo investigar que puedo conectar con lo que tengo… —Expresó apresurada cambiando a un tono desanimado.
—El problema es que tener todo ese conocimiento no es más que problemas, tanto la fuerza como el conocimiento puede ser peligroso en las manos equivocadas, así que será un poco más problemático investigar en mi condición.
—COMPRENDO… INTERNET ES BUENA FUENTE, PUEDE COMENZAR POR AHÍ, PERO POR AHORA NECESITO TOMAR SU PRESIÓN… —Comentó sacando el esfigmomanómetro que colocó en su muñeca procediendo con un oxímetro y termómetro.
Su ritmo cardiaco era bajo pero uniforme al igual que su presión sanguínea, la temperatura se mostraba normal
—ESTÁ UN POCO BAJA, PERO SE MANTIENE. —Concluyó guardando todo el equipo en su caja, dirigiéndose a la cocina por una sopa instantánea que había preparado con anterioridad.
—ESPERO QUE NO TENGA PROBLEMA CON COMER ALGO DE BAJA CALIDAD… —Mencionó dejando la sopa y un vaso con agua en la mesa.
—OKA-SAMA… ESE NO ES UN NOMBRE… ¿CÓMO LA LLAMO?
—Como guste.
—NO PUEDE ESPERAR QUE ELIJA SU NOMBRE
—No tengo un nombre propio Sr. All Might. —Sopló su sopa.
—Cada apodo y nombre que me es otorgado representa una etapa y un recuerdo especial. Me ayuda a mantenerme en anonimato y al mismo tiempo compartir experiencias únicas con las personas.
—…BIEN SEÑORITA YUE, PUEDE TOMAR LA HABITACION AL FONDO. —Dijo el rubio retirándose a darse un baño.
—No se vale repetir nombres. —Bufó disconforme.
All Might salió de la ducha quitándose esa sensación pegajosa del agua salada, el jabón ni el champú le hacían espuma, necesitó de toda la botella para desenmarañar su cabellera y ni con todas sus cremas lograba hidratar su piel reseca. Lo único que agradecía era que las diferentes tonalidades en su piel no estaban tan marcadas debido a que la mayoría del viaje, el Polar Tang navegó bajo el agua… ahora que lo pensaba, con el uniforme su piel no hubiera quedado tonalidad de helado napolitano.
El rubio se preparó para marcharse, necesitaba un nuevo teléfono para comunicarse con David y contarle lo sucedido.
—SEÑORITA YUE, YA REGRESO NO TARDARÉ MUCHO. —Salió apresurado en su ropa de civil, luciendo una chamarra bicolor blanco y rojo con unos pantalones cargo negros que combinaban con sus tenis.
Pasando por la sala se percató de la joven tomando de su vaso mientras hojeaba unas revistas sobre héroes y libros de viajes que eran meramente decorativos, preocupándose por su reacción ya que era consciente que sus mundos eran completamente diferentes. La joven notó era observada divisando a su salvador en su apariencia de civil escupiendo su bebida en el acto.
—Lo siento, el peinado me tomó por sorpresa. —Dijo mientras ejercía presión sobre su pecho con su mano, concentrándose en calmarse viendo la nada.
—¿SE ENCUENTRA BIEN?
—Si…creo… falsa alarma. —Suspiró aliviada.
Toshinori no podía evitar preocuparse, pero quedó de no llevarle al hospital y parecía que solo era temporal sus desmayos tranquilizándolo un poco.
—Tengo que aprender a calmarme para no desmayarme de nuevo o se va a quedar sin muebles… será algo complicado con… todo esto. —Dijo sonriendo nerviosa apuntando los libros y revistas. El héroe notaba como la chica no perdía el tiempo en investigar su mundo, por lo que tomó una laptop prendiéndola antes de entregársela.
—PUEDE BUSCAR LA INFORMACION QUE DESEE CON INTERNET.
— Perfecto, si Internet-san nos puede dar información o acompañar será de gran ayuda. —Celebró alegre.
— NO ES UN ALGUIEN… ES UN ALGO, PERO CREO QUE SERÁ DIFÍCIL DE EXPLICAR.
El rubio le prestó el dispositivo explicándole el funcionamiento básico, y escribiendo una serie de notas e instrucciones para poder hacer uso del buscador.
—CON ESTO PUEDE BUSCAR LA INFORMACION QUE NECESITE. —Dijo levantándose de su lado para seguir su camino.
—BUENO, NO TARDO, SI NO SE SIENTE SEGURA DE LA COMPUTADORA SOLO BAJE LA TAPA. TOME LO QUE GUSTE DEL REFRIGERADOR. POR SU SEGURIDAD NO USE EL RESTO DE LOS APARATOS. —La peliblanca solo asintió con la cabeza y el héroe se retiró.
Habían pasado un par de horas desde que se ocultó el sol, las tiendas seguían abiertas por lo que se apresuró para comprar un equipo celular. Toshinori recorría alerta los pasillos del centro comercial previendo que sería abordado por civiles curiosos por su desaparición, más solo era apuntado por una u otra persona como si no se hubieran enterado, dejándolo extrañado.
La compra y configuración fue rápida al ser asistido por los trabajadores, la calidad de servicio era optima… ventajas de ser un héroe famoso al ser despachado. Aprovechando así el tiempo sobrante para comprarle un cambio de ropa a su invitada tomando lo más similar a lo que llevaba puesto.
Apenas terminó de actualizarse el dispositivo comenzó a vibrar sin descanso, por lo que Toshinori optó en revisar su bandeja en su camino de regreso. Extrañamente todos pertenecían a David minutos después de su desaparición, pero solo se registraron notificaciones de hasta hace una hora: Dos docenas de llamadas perdidas y varios mensajes preguntando sobre su paradero.
Al héroe le pareció extraño que solo lo buscara una persona por lo que revisó la fecha, quedando atónito al descubrir que su aventura en altamar recorriendo la gran línea, solo habían durado unos minutos en su mundo. Percatándose que su amigo seguiría angustiado por su repentina falta de contacto, marcando de inmediato al americano.
—¡ALL MIGHT! ¿ESTAS BIEN? HERMANO, ¿QUE SUCEDIÓ? COLGASTE REPENTINAMENTE, ME DEJASTE MUY PREOCUPADO.
—DAVID-SAN, TRANQUILO… ESTOY BIEN… HAN OCURRIDO MUCHAS COSAS DIFICILES DE EXPLICAR, POR EL MOMENTO ME QUERIA REPORTAR, TENGO UN PENDIENTE, PERO MAÑANA NOS VEMOS EN LAS OFICINAS PARA PONERTE AL TANTO.
—Demonios Toshinori, avisa si te vas a desaparecer de esa manera… De acuerdo, mañana lo hablamos… Me tranquiliza saber que estas bien, gracias.
—NO HAY DE QUE. —El rubio colgó la llamada. Llegando más calmado a su hogar entrando esta vez por la puerta principal como una persona civilizada.
Dentro del departamento no se percibía sonido alguno preocupándolo un poco, abrió la puerta para encontrarse con la luz tenue de la computadora iluminando el rostro angustiado de la chica sentada frente al dispositivo.
—SEÑORITA YUE… ¿ESTÁ TODO BIEN?
La peliblanca volteó con los ojos hinchados por sus lágrimas.
—¿QUE SUCEDE? ¿QUE ENCONTRÓ? —Preguntó alarmado temiendo a la respuesta.
—Yo… ¡No se! —Apuntó con ambas manos a la computadora como si el aparato tuviera la culpa.
—Primero quería empezar buscando algo simple… Escribí "Gol D. Roger" y nada. Así que opté por algo más amplio… la "Piratería" … Cuando de repente gané algo por ser la visita número 1 millón y no podía dejar pasar esta oportunidad, pero creo más personas se dieron cuenta que gané porque a los segundos ya había chichas cachonas buscándome… Es muy triste que vayan solo tras el dinero… Pero igual les escribí que luego lo consultaría con usted porque serán fáciles, pero si eran muy sexys… Después me di cuenta tu putadora estaba enferma… Ni siquiera sabía que se podía enfermar.
_OI OI… FUE DEMASIADO EN TAN POCO TIEMPO_
—FUE MI ERROR… OLVIDÉ ADVERTIRLE DE ESAS PAGINAS —Dijo con varias gotas recorriendo su cabeza.
_DEBÍ PONERLE ALGUN CONTROL PARENTAL_
—DEJE REVISAR LA COMPUTADORA UN MOME… ¡AH! —All Might vio la pantalla con un centenar de Pop-Ups invadiendo el escritorio.
—¿COMO LOGRÓ ESTO? —Preguntó Yagi a la joven que solo lo miraba confundida con ojos llorosos.
—Ya me quiero ir Señor All Might. —Dijo al héroe que solo suspiró y cerró todo mostrando de nuevo su sonrisa para aliviarle el mal rato.
—POR QUE NO DEJAMOS ESTO, FUE UN DIA LARGO SERÁ MEJOR DESCANSAR.
Yue se tranquilizó al ver que su anfitrión tenía todo bajo control aceptando así su sugerencia.
—PERO PRIMERO NECESITO QUE ME PRESTE SU MANO UNA VEZ MAS. —Dijo All Might buscando algo en sus bolsillos.
La peliblanca prestó su mano siendo tomada con gentileza por el hombre que estaba por ponerle un reloj inteligente en la muñeca, de manera inesperada la acción del héroe fue detenida súbitamente por la joven que le tomaba con fuerza del brazo incrustando sus uñas, dedicándole una amenazante mirada con pupilas encogidas.
El héroe no se mostraba sorprendido por la reacción ya que sostenía la marcada muñeca de la joven evidenciando su turbio pasado.
—NECESITO COLOCARLE ESTE RELOJ PARA RASTREAR SU PRESIÓN ARTERIAL Y FRECUENCIA CARDIACA, SI NO SE SIENTE SEGURA SE LO PUEDE QUITAR CUANDO DESEE… PERO POR SU CONDICION… SERÁ MEJOR QUE LO LLEVE CONSIGO. —Dijo sereno esperando que comprendiera la asustada invitada.
A Yue no parecía agradarle la idea del todo, se veía desconfiada y confundida, comenzando a sudar en frustración, no parecía tener malas intenciones por lo que cerró sus ojos empuñando su mano dejando que se lo colocara.
—ABRA SUS OJOS… OBSERVE, PARA QUITARLO SOLO DEBE DESABROCHAR DE AQUÍ… —Apuntó a los orificios de la parte posterior del reloj, ocasionando que la chica soltara aire aliviada.
Yagi no podía evitar pensar afligido que experiencia detonó su reacción.
—ANTES DE QUE SE VAYA… LE TRAJE ESTO. —Dijo dándole una bolsa con prendas siendo agradecido por la avergonzada joven.
Toshinori se sentó en el sillón de la sala, no quería incomodarla confesando que su departamento solo contaba con una habitación. Conmocionado por todo lo que sucedía sabía que necesitaba un merecido descanso, tenía más de una semana sin uno decente y esta noche no sería la excepción. Estaba preocupado por la chica en su cuarto, ahora constaba de él regresarla a su hogar… pero al menos él ya se encontraba en el suyo.
La noche parecía larga y no lograba conciliar el sueño, por lo que optó por limpiar la computadora aprovechando para revisar el historial de búsqueda que mostraba varías palabras que le parecían conocidas como lo eran Gol D. Roger, Shichibukai Yonko y Garp que había escuchado con anterioridad en su viaje, sin embargo, aparecían otras con las que no estaba familiarizado.
_SENGOKU, PONEGLYPH, TENRYUUBITO, GOROSEI_ Suspiró no reconociendo ninguno de ellos, revisó los resultados de la APP vinculada con el reloj para monitorear su estado, todos se mantenía bajo sin cambiar en lo absoluto alguno de los parámetros, extrañando al hombre.
El desayuno era un simple cereal con leche, el héroe no solía tener tiempo de cocinar por lo que solía hacer compra de comida antes de ir a las oficinas.
—No entiendo más de la mitad de los ingredientes que lleva esto… —Comentó curiosa al leer la caja.
—DISCULPE QUE NO TENGA NADA MEJOR QUE OFRECERLE.
—No hay drama. —Dijo sonriente claramente más tranquila.
El ambiente se sentía amigable, sin tensión ni tristeza, por lo que Yagi aprovechó para poder sacarse de dudas.
—SEÑORITA YUE… ESPERABA A QUE SE TRANQUILIZARA PARA PREGUNTAR… ¿CÓMO FUE QUE LLEGUÉ ALLÁ Y POR QUÉ?
—El por qué lo desconozco. Es extraño, pero no fue una equivocación, nada lo ha sido. —Dijo sin dar más detalle de modo calmado no dándole mucha importancia.
—¿A QUE SE REFIERE?
—Aún no lo sé, el tiempo lo dirá. —Contestó encogiéndose de hombros.
—En cambio el cómo… es lo que me tiene confundida. —Cambió a un tono más serio.
—PERO SABÍA COMO REGRESAR. —Confirmó el rubio viendo como la chica se congeló por unos segundos posando sus manos sobre su rostro.
—¡Pero salió mal! —Quejó cortante moviendo solo sus manos apuntando hacia delante en lo que parecía una leve rabieta.
—Traerlo de regreso funcionó… Pero se suponía que sería muy, MUY diferente… Ahora que lo pienso con claridad, fue un riesgo estúpido… Solo lo hice porque Trafalgar Law estaba ahí. Si algo salía mal, era la persona más capacitada por su conocimiento y habilidad para salvar mi vida… Por primera vez en mucho tiempo, no sé qué está sucediendo. —Confesó quejándose con muchos ademanes.
—¿QUE HAY DE LAS CENIZAS? —Preguntó recordando como captó su interés al mencionarlas.
—Hay límite en lo que puedo y no decir Sr. All Might, ¡No me presione! —Lo apuntó con la cuchara ensuciando la mesa.
—Le agradezco su preocupación y cuidado, pero esa información aún no sé si se la pueda confiar. Lo que si le puedo compartir es que el poder que lo llevó y nos trajo es exactamente el mismo, ¿Qué hace en su mundo y en el mío? Lo desconozco… Eso me preocupa y también molesta.
—Pero bueno… usted debe ir a trabajar y yo debo recolectar información… ¿No habrá un museo en esta ciudad?
—EL MUSEO AMERICANO DE HISTORIA NATURAL, LA PUEDO LLEVAR ANTES DE REUNIRME CON MI COMPAÑERO.
—Historia natural… Eso debe servir, hay algo que no me termina de hacer sentido…
Ambos procedieron a sus respectivos espacios para prepararse a salir, el héroe sacó lo que necesitaba de la habitación para arreglarse en el baño, mientras la joven revisaba la bolsa de ropa que le consiguió el rubio sonriendo al notar lo observador y perspicaz del rubio, el conjunto era perfecto para ocultar todas las cicatrices de su cuerpo.
Toshinori esperaba pacientemente luciendo su imponente figura con su traje de héroe terminando de doblar las frazadas que había usado, a la par de su cuarto salió la joven luciendo un vestido holgado blanco de cuello alto y mangas largas amponas decorado con pequeños moños rosas que combinaban con sus calcetas altas y tenis. Su cabello azul estaba atado en 2 largas trenzas que daban vueltas para no ser un estorbo.
—¿AZUL? —Preguntó extrañado.
—Una pastilla que estaba en el inodoro.
—¡SEÑORITA YUE SE LE VA A CAER EL CABELLO, SON PUROS QUIMICOS!
—Que se caiga… lo hago peluca si es necesario. —Siguió sin darle importancia a su comentario avanzando hasta la puerta del balcón.
—¡ESPERE! ¿SUMERGÍO SU CABEZA EN EL INODORO? —Preguntó perturbado dirigiéndose al balcón escuchando como la chica se reía para después presionar su pecho mortificada en una pose nada refinada para mantener su equilibrio.
_No confía en nadie, no posee una identidad ni un nombre, siempre encuentra la manera para cambiar su apariencia_ Toshinori no pudo evitar recordar las palabras del pirata. "Yue" era una mujer enigmática _¿POR QUE NECESITARÍA ESCONDERSE AQUÍ TAMBIEN?_ No sabía cómo hacerle entender que no era necesario aislarse en este mundo.
—SEÑORITA, PODEMOS SALIR POR LA PUERTA PRINCIPAL. —Dijo señalando la puerta ya que la chica estaba esperándolo recargada en el barandal del balcón.
—Sr. All Might, con todo respeto, con su popularidad y peligroso trabajo, es sencillo deducir que es objetivo de varios villanos, si me llegan a ver con usted, estaré en riesgo constante… Además, quiero ver como luce la ciudad de día.
La joven tenía un punto por lo que accedió sin chistar, llevándole de la misma manera evitado la atención de los civiles que ya estaban acostumbrados a la manera en la que los héroes se desplazan.
La dejó frente al museo ocultándose ambos en Central Park para que no les tomaran fotografías respetando las inseguridades de la joven. Terminó por explicarle como comunicarse con el mediante el reloj para poder retirarse tranquilamente con su amigo David y narrarle la increíble experiencia que había vivido.
En la oficina de la agencia americana de héroes se encontraba esperándolo impaciente su amigo para llenar el papeleo sobre incidente del día anterior.
—Oh All Might, llegas tarde. —Dijo impaciente el castaño.
—LO SIENTO, TENÍA UN PENDIENTE.
—¿Otro crimen en el camino?
—MAS COMPLICADO… —David reaccionó serio ante sus palabras
—¿Tiene que ver con tu ausencia de ayer?
—… TE CONTARÉ EN EL CAMINO, TENEMOS UNA EMERGENCIA EN TIMES SQUARE.
Ambos recorrían la ciudad encargándose de los crímenes que surgían en los alrededores, aprovechando los descansos entre las batallas para narrarle su experiencia en ese mundo desconocido.
Su amigo se mostraba incrédulo ante su relato, analizando a detalle de inicio a fin su historia, sobre todo el desarrollo del mundo y relaciones… Debía realizar su propia investigación y hacer unas cuantas llamadas para ayudar a su amigo antes que fuera demasiado tarde.
Una alarma comenzó a sonar en el celular del héroe extrañándole ya que recién lo acababa de adquirir y no había configurado alarmas. Desconcertado revisó su dispositivo notando que la aplicación vinculada con el reloj mostraba una anomalía mostrando el pulso en ceros haciéndole sentir un escalofrío invadir su cuerpo.
—DAVID SAN, ME DEBO RETIRAR ES UNA EMERGENICIA —Dijo el héroe pálido saliendo del auto de su compañero.
—¿Qué sucede?
—ENCARGATE DEL PAPELEO —Ordenó retirándose lejos de la escena.
All Might se desplazaba lo más rápido que podía, escuchando su alarma de nuevo.
Parecía que sus niveles se habían normalizado en algún momento para volver a desaparecer… no sabía si era un error de la aplicación, se había retirado el reloj o algo malo le había sucedido, pero no tardaría mucho en averiguarlo.
El viento que dejaba a su paso movía violentamente las copas de los árboles de Central Park, avisando su llegada próxima al museo.
Encontrarla no fue complicado, con el GPS pudo localizar su ubicación dentro de una sala siendo rodeada de una multitud de personas, ninguna de ellas siendo capaz de levantarla.
—ALL MIGHT
—¡All Might está aquí!
—Increíble
—¡Es enorme!
—¡All Might! Necesitamos ayuda para llevarla al hospital, ha perdido el conocimiento en 2 ocasiones y se niega a recibir ayuda de profesionales. Es demasiado pesada, no podemos cargarla.
—NO SE PREOCUPEN QUE YA ESTOY AQUÍ. —Anunció orgulloso con sus manos en la cintura.
—YO ME ENCARGO, SOLO LES PIDO ESPACIO.
Los visitantes se alejaron de ellos sacando sus celulares para grabar al sobresaliente Héroe Japonés que residía temporalmente en su País.
—LES PIDO NO GRABEN, ES UN PROBLEMA MEDICO NO UN ESPECTACULO, SALGAN DE LA SALA POR FAVOR. —Pidió a los presentes trataba de proteger la identidad de la joven.
El respeto que le tenían al héroe era inmensurable, por lo que no dudaron en hacerle caso y dejarles solo con el encargado de seguridad de la sala.
Yue comenzó abrir sus ojos brotando de ellos unas lágrimas, difícilmente logrando identificar al rubio.
—¿YA PUEDO LLEVARLE CON UN ESPECIALISTA? —Preguntó siendo inmediatamente juzgado por su mirada.
—Valía volver a intentar… Encontró algo ¿cierto? —Moduló su tono de voz para que fuera una conversación de dos solamente.
La joven trató de sentarse, presionando su pecho cerró sus ojos y comenzó a hacer respiraciones para calmarse, dirigiendo toda su atención frente a ella para perder de nuevo el control de sus emociones.
—Lo… Lo volvieron a hacer. —Dijo con la voz quebrada rechinando los dientes en cólera, apretó sus puños en el vestido humedecido por las lágrimas que caían de su rostro, su cuerpo dejó de responder casi golpeando de cara en el piso siendo atrapada por el rubio que solo observó interesado frente a él una gran estela azul oscuro con grabados desconocidos.
El eco de la alarma del celular sonaba por toda la sala, confirmando nuevamente su repentina ausencia de latidos.
SUNDANCER AQUÍ n.n
Este capi y el prox. son informativos y necesarios para el desarrollo de la historia, Resistaaan.
~Todo va de la mano y tiene su por que~
~Y por si tenían duda, aun no termina el crossover ^o^~
