Disclaimer.- Y adivinen en qué me gasté dinero que no debía de mi sueldo... ¡¡¡¡HP5 azulito de bolsillo! ¿Estaría preocupada por tener que pagar el mínimo de tickets de bus si fuera millonaria? ¡IRIA EN AUTO, BABY! así que no, no me pagan por hacer esto cuando debería estar preparando mi clase de la noche.

"The thing about growing up with Fred and George is that you sort of start thinking anything's possible if you've got enough nerve."

Ginny Weasley

Harry Potter and the order of the Phoenix - Chapter 29, page 655, American Paperback Edition, 2004

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Fic: El viaje de los Horcruxes

Capítulo 14: Las caras de la guerra. Parte II.

Por: Lunis

¿Por qué Ron y otros miembros de la Orden del Fénix y el ED habían terminado en la enfermería? Esa respuesta tomará unos tres capítulos, así que espero que tengas tiempo. Si deseas puedes ir al baño antes, pasar por la cocina y traer algunos bocadillos, y te recomiendo que busques una silla más cómoda, experiencia personal. Por cierto, gente morirá.

- Pettigrew confesó -dijo Stan Shunpike por el que habían señalado como medio de comunicación desde Azkaban- dice que hoy iban a atacar, pero se ha demorado, que protejan Hogwarts.

- Gracias, Stan, -respondió la Profesora McGonagall, desde su despacho en Hogwarts- de inmediato nos prepararemos.

Voldemort se les iba a caer encima y lo sabían con quizás sólo minutos de anticipación. ¿El plan? El de siempre, poner cara frente a la situación y defenderse. Minerva convocó de inmediato a todos los miembros de la Orden del Fénix y los puso en los flancos de los terrenos del castillo. A los ED los puso en el centro, después de todo, la mayoría eran menores de edad, pero entusiastas, harían buena resistencia. Cuando Hagrid subió a decirle que "su gente" estaba lista, sin embargo, le sorprendió verlo lleno de plumas en la cabeza y con algunas ramas atrapadas entre el grueso pelaje de su abrigo preguntó.

- ¿Tu gente? -después de todo, veinticinco gigantes eran gran ayuda, pero no alcanzaban a ser lo que uno llamaría un ejército.

- Si, ves, las criaturas del bosque han decidido ayudar... tengo unicornios, ves, y sirenas que han prometido ayudar desde el agua, y a los Threstals... los centauros también quieren ayudar, y algunos duendes han venido, ves, Voldemort les arruinó los negocios, y... pues... mejoré a los escregutos de cola explosiva, ¿ves?...

- ¿Son seguros, Hagrid? Sabes que el ministerio...

- Er... si... pero ahora tienen también características de unicornios, y un poquito de centauros, ¿ves? logré incorporar algunos elementos en el cruce y ahora son dóciles y sólo atacarán a quien yo les diga...

- Irán adelante -dijo Minerva de inmediato- ustedes serán nuestra ofensiva.

En momentos como aquel, le hubiera gustado tener a algún estratega a su lado, un líder, alguien que supiera exactamente qué hacer, pero nadie ocuparía el lugar de albus, pero había que seguir adelante. Entonces recordó... el problema iba a ser llamarlos, Ginny Weasley dijo que no los perderían de vista... Tomó una de las monedas que le habían dejado y los llamó.

Voldemort atacará. Hogwarts peligra. Vengan ahora.

En menos de lo que esperaba, Minerva vio en las rejas de la escuela a un pequeño grupo de personas, y sabía que eran ellos pues las puertas se abrieron... Hermione Granger se había superado con aquel encantamiento para reconocer las intenciones de las personas que daban contraseñas. Y ahí también estaría Ron Weasley, después de todo, ella se había encargado de que el juego de ajedrez fuera el más difícil de imaginar y él lo había vencido cuando fueron a salvar la piedra filosofal, además fue con él con quien armó el plan que ya había puesto en marcha. Neville Longbottom y Luna Lovegood estaban encargados de la defensa interna, bueno, no habían sido muy brillantes en la escuela, pero eran serios y dedicados y ella no tenía queja, hasta ahora. Aquellos muchachos habían ayudado más de lo que cualquier otro adulto esperaba, pensó la directora mientras los esperaba, mucho más de lo que se imaginaran los demás y se merecían pelear, pues habían sido atacados de distintas formas por el lado oscuro.

La puerta se abrió y los cuatro entraron, habían corrido por los atajos que conocían, seguramente.

- ¿Y dónde están Potter y Ginny Weasley? -preguntó, reparando en su ausencia.

- Aquí -dijo Harry, quien entraba apurado, con Ginny detrás de él estábamos cubriendo la retaguardia. ¿Ya llegó?

- Aún no.

- ¿Quién dio la alarma?

- Pettigrew, parece que algo retuvo a Voldemort porque no los llegó a liberar a la hora acordada...

- ¿Y tiene a todos aquí?

- Bueno, ¿qué podíamos hacer? aún estamos vigilando algunos de los lugares más vulnerables, incluyendo Ottery Saint Catchpole, por si fuera una trampa, pero no podemos permitirnos bajas...

- ¿Hagrid trajo a sus bichos? -dijo Ron- genial, que los gigantes vayan delante, los centauros detrás de la segunda línea y los threstals y unicornios delante de los ED, no queremos agotar recursos, -era sorprendente como el chico que podía pensar tan rápido era Ronald Weasley- los duendes pueden ir donde quieran, y los sirenios atacarán desde el agua. El ministerio podrá avanzar desde afuera hacia adentro.

- ¿Y ustedes? -los seis se miraron.

- Como lo habíamos planeado, dos adelante, dos en medio y dos atrás -contestó Harry- ¿Viene Voldemort?

- Todo parece indicar que sí, -dijo McGonagall mientras salía a comunicar los cambios.

- Genial, mientras más temprano, mejor que tarde.

Abajo, todos se reacomodaron rápidamente; los gemelos Weasley repartían complementos y accesorios para los bolsos que habían inventado, los duendes intentaban convencer a Bill Weasley de traer a sus troles y este se negaba argumentando que eran demasiado brutos, Remus Lupin terminaba de convencer a un grupo de magos con su mismo aspecto aunque más salvajes, evidentemente se habían escapado de Greyback, los centauros se negaban a decir recibir orden alguna, pero dejaban que los demás se acomodaran a su alrededor, Hagrid hablaba con los unicornios y threstals en una especie de chillidos que causaban hilaridad a los gigantes que Grawp y Madame Maxime intentaban ordenar. De pronto, cuando ya estaban listos, llegaron los del Ministerio gritando que venía Voldemort y se callaron al ver que ya estaban formaditos todos y que incluso les tenían una ubicación.

Se escuchó una explosión, al parecer en la estación de Hogsmeade, otra más desde la avenida central, otra desde la cabaña de los gritos... pronto, supusieron que los terrenos del castillo estaban cercados.

¡BUM! ¡BUM! ¡BUM! ¡BUM! ¡BUM!

Las barreras estaban siendo rotas por los gigantes de Voldemort. Todos adentro ya estaban listos.

¡BUM! ¡BUM! ¡BUM! ¡BUM! ¡BUM!

Los muros estaban siendo derrumbados, los árboles se agitaban, las aguas del lago temblaban, el viento soplaba ligeramente.

¡BUM! ¡BUM! ¡BUM! ¡BUM! ¡BUM!

Comenzaron a aparecer, deslizándose lentamente sobre el gras verde y crecido, dementores. Casi al unísono, todos los magos allí presentes gritaron ¡Expelliarmus! y un sinnúmero de patronus llenaron el aire antes que los dementores se acercaran lo suficiente para atacar. La primera tropa de dementores huyó apresuradamente y dio pie a la segunda, que fue eliminada de la misma forma. Un primer grupo de Mortífagos, jóvenes todos y de menor rango entraron gritando, seguidos de los demás vasallos y criaturas de Lord Voldemort. La batalla había comenzado.

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¡AHHHH! ¡Una batalla más! ¡Sigan leyendo! ¿Cómo escapará Harry de esta?