-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-. cambio de escena

ºººººººººººººººººººººººº inicio y fin de flash backs

"blablablablablablablabla" pensamientos

Ying-Yang: Por Misao de Shinamori

Capitulo tres: Se acabo I

-Ha donde la llevo señorita?-. dijo mirando a la mujer que acababa de subirse a su taxi. Pobre parecía destrozada.

-Por favor a la cuarta con Shira

-Enseguida.

Misao se sentía humillada, pero lo que más le entristecía era verse sola. Por el lo dejo todo, y ahora no tenia nada.

Hundida en sus pensamientos, miraba por la ventanilla del coche. Un edifico y después otro, una persona, luego otra y después otra. Una tienda, seguida de otra y mil mas por detrás.

¿Ese era acaso el destino de las personas? Pasar de unas a otras. En un circulo sin fin. ¿En un lugar donde no existía lo perfecto ni lo único?

Pero por que. ¿Por que había ocurrido todo aquello?

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7 meses antes:

-Veras, es que me han ofrecido una beca-. Dijo Misao.

-Una beca-. Contesto Aoshi-. Pero si no pediste ninguna. Además, no lo necesitas. Te dije que yo me aria cargo de todos los gastos.

-No es que...-. Misao se levanto y se dirigió a la ventana.

-Que ocurre. Que te preocupa?-. dijo Aoshi. Algo no parecía ir bien.

-La beca la suele otorgar el colegio San Andriu de New York-. Misao se volteo a verlo.

Aoshi se quedo pensativo. Un colegio estadounidense le otorgaba la beca a una chica japonesa. No tenia mucho sentido.

-Eso no tiene sentido. Ese premio, por decirlo de alguna manera se lo otorgan a personas de su propio entorno. Además, si eso es cierto y tu aceptaras deberías marcharte a estudiar allí.

-Si-. Fu la respuesta que obtuvo.

Levanto la mirada para verla a los ojos. Estos lo miraban con atención.

-Vas a marcharte ¿No es verdad?

Misao se acercó a el de nuevo-. Aoshi, antes si me lo hubieran ofrecido no lo hubiera pensado dos veces. El San Andriu, es una de las mejores universidades de marketing que hay-. Lo miro a los ojos y le sonrió-. Pero ahora no se trata de mi, si no de nosotros.

-Ya entiendo. Y que quieres que te diga-. La miro, se sentía algo herido-. Si te digo que no vayas por que deseo que te quedes me culparas de ello. Me lo echarás en cara.

-No digas eso, yo...

-Pero es la verdad.

-Aoshi te amo y decidí casarme contigo con todo lo que eso conlleva. Se que no podré hacer muchas cosas, pero podré hacer otras que me darán tanta felicidad; o incluso más.

Se acercó a la boca de su esposo y se apodero de ella. Era la sensación más agradable que jamás soñó sentir. Aoshi se dejo besar. Era tan suave y tierna, su esposa era increíble. Pero ¿debería dejarla ir?

Aoshi se separo de ella y la miro a los ojos. Era su futuro y cuando se casaron el le prometió ayudarla. Ayudarla a conseguir su meta.

-Cuanto.

-¿qué?

-Para cuanto tiempo te iras a Estados Unidos?

-Pues en el caso que aceptara unos 7 meses, talvez 8.

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-Señorita se encuentra usted bien-. El taxista la miraba por el retrovisor.

Cuando la vio subir al taxi se dio cuenta que no estaba bien. Era una lastima ver a una muchacha tan joven en ese estado. Misao solo pudo asentir con la cabeza.

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7 meses antes:

Se miraron por largo tiempo.

-Me amas?-. pregunto Aoshi.

-Claro que si tonto-. Misao lo abrazo-. Por que me lo preguntas?

-Para saber si me echarás de menos, tanto como te voy a echar se menos yo.

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Una sonrisa llena de ironía curvo los labios de Misao. Como pudo ser tan...?

-Ya hemos llegado-. Dijo el taxista-. Son 25.

-Gracias-. Dijo Misao.

-Señorita-. Misao se volteo antes de salir del auto-. Incluso la mayor tempestad desaparece para dejar paso al sol.

Tempestad, jala aquello fuera una tempestad. Misao le sonrió con sinceridad. El hombre la quiso animar, y talvez tuviera razón pero por el momento la tempestad lo pintaba todo de color negro.

Cuando el taxi desapareció. Se giro a ver la casa que tenia a sus espaldas. En apariencia era mas pequeña que la suya, pero era tan hermosa como la mejor de las mansiones.

En la puerta un cartel: "Casa Himura"

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Aoshi entro en casa. Estaba enfadado, pero lo peor era que estaba enfadado consigo mismo. Maldita sea. ¿Como pudo ocurrir? Y además con una de sus empleadas... ¿Es que había perdido la razón?

Mientras se dirigía a las escaleras para subir al segundo piso. Recordaba todo lo sucedido, la mirada, la voz, toda las reacciones de Misao. Y se reprochaba una y otra vez ser el, el causante de todo.

Y Cara...

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Aoshi continuaba sin moverse quieto. Tenia que pensar en recuperarla, tenia que hacerlo. Sintió unos brazos en su hombro.

-Querido tranquilo-. Lo abrazo-. Ya paso todo.

Los ojos de Aoshi se abrieron de golpe y se aparto con brusquedad de ella. Como si fuera la propia peste.

-Cara te ruego que te marches de aquí-. Ella intento acercarse-. No te acerques. Oye se lo que a ocurrido. Y talvez esto suene muy fuerte e insensible por mi parte, pero...-. tomo aire-. Lo que a ocurrido hoy a sido un error.

-¿Es por ella?-. lo miro-. ¿Tanto la amas?

-Con toda mi alma-. Fue sincero.

-Yo te quiero mucho-. Lo agarro de la mano-. Se que no puedo cambiar tus sentimientos-. Bajo la mirada-. No te obligare a nada que no quieras. Pero por favor, recuerda que siempre estaré a tu lado.

-Gracias-. Se dirigió a la casa-. Y... lo siento de veras.

Cara se dio media vuelta y comenzó a andar en dirección a su casa. El hacerse la dolida y la demacrada seria un error. Si insistía demasiado, lo ahogaría y se alejaría de ella.

Además, después de lo vio esa mocosa no lo perdonaría. Y ella pensaba consolarlo. De eso no tenia ni la más remota duda.

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Tenia que disculparse con Cara. El tenia que haber detenido aquello. No tuvo que dejar que ocurriera. Ella le dijo que le quería y el que lo ocurrido era un error. Es que se avía convertido en un cretino de tal calibre que no podía hacer más que dañar a las personas?

Se detuvo en el marco de la puerta de su habitación. Miro hacia dentro.

-Dios mío, como te abras sentido.

La cama estaba desecha y minutos antes el se encontraba en ella. Con una mujer desnuda a su lado, abrazados. Y ella lo vio. Solo el imaginarse la situación con ella en la cama y otro tío a su lado le hacia hervir en ira.

-¿Ha donde abra ido?.- se recostó en el marco de la puerta. Y poco a poco se sentó en el suelo.

Y como no lo había hecho en años dejo que sus emociones se mostraran en su rostro. Lloro, con el sabor amargo del dolor que le causo a su mujer.

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DIN – DON

Misao tocó la puerta de la casa. Y en menos de un segundo la puerta se abrió de par en par. Delante de ella había una joven morena. Era muy hermosa y ahora que esperaba su segundo hijo todavía lo era mas. Aquel embarazo le estaba sentando de maravilla. Y su barriguita de 5 meses ya se notaba.

-Misao?-. pregunto Kaoru-. Eres tu?. As vuelto

Grito de felicidad. Misao intento sonreír.

-Kaoru... yo me alegro de...-. no pudo seguir. El cansancio se hico presente y cayo desmayada.

-MISAO...-. Kaoru se acercó ella y intento despertarla-. Despierta. ¿qué a ocurrido? Dios mío.

Se dirigió dentro de la casa.

-Kenshin!-. grito con su voz temblorosa.

Un hombre pelirrojo y de buen aspecto físico se precipito por las escaleras. Por que gritaría su rayito de sol de esa manera. ¿Le pasaría algo al bebe?

-Que pasa cariño?-. La agarro entre sus brazos-. Estas mal? Te a pasado algo? Es el bebe?

-Kenshin-. Lo interrumpió-. Ayúdame-. Empezó a llorar y señalo a la puerta. Este vio a Misao tendida en el suelo-. Llego y se desmayo. Ken no tenia buena cara. Algo a sucedido.

Este sin perder tiempo cogió a Misao y la llevo a una de las habitaciones para invitados. Allí la dejo sobre una mullida cama, era una habitación pequeña, pero muy reconfortante y cálida.

-Voy a por un poco de alcohol para despertarla.

Kaoru se sentó en el borde de la cama y cogió la mano de su amiga, su mejor amiga; como su hermana. Después, le aparto lo cabellos del rostro. Pudo notar el dolor en sus facciones.

"Que te a ocurrido amiga mía? Se supone que hoy era un día feliz. Pero mírate. Por Dios despierta, no soporto verte así"

Un par de lagrimas se escaparon de sus ojos. Nunca voy a Misao en un estado semejante. La ultima vez que perdió la conciencia y se había derrumbado fue el día en el que le anunciaron el fallecimiento de sus padres.

Hacia ya cuatro años de eso. Fue un día horrible. Tormentoso. Ellos tenían una cena muy importante con unos inversionistas. Al volver, un conductor perdió el control del vehículo y se los levo por delante. La desgracia fue que ninguno sobrevivió.

-Ya estoy aquí-. Entro Kenshin con un algodón y alcohol-. Espero que funcione.

Le puso el algodón en la nariz. Misao sintió el fuerte olor y comenzó reaccionar. Poco a poco abrió sus ojos y se encontró con unas imágenes borrosas.

-Donde...-. por fin enfoco la imagen-. Kenshin, kaoru.

-Menos mal-. Dijo ken-. Estábamos preocupados pequeña.

Kenshin era un hombre amable y cariñoso. Desde pequeño tuvo gran afinidad con los padres de Misao. Y desde que estos fallecieron siempre la cuido. Eso siempre que Aoshi se lo permitía, por que el era todavía más sobre protector que el.

-Misao, querida¿que te a ocurrido?

Misao miro a kenshin y le pidió que las dejaran a solas. Este simplemente asintió y salió de la habitación. Fuera lo que fuere, necesitaba halar con una mujer. "No importa, se que después me lo contara-. Suspiro-. Será mejor que llame a Aoshi debe de estar muy preocupado".

Mientras ambas mujeres hablaban dentro de la habitación de todo lo sucedido. A lo cual kaoru respondió con incredulidad. Kenshin tomo el teléfono y marco el numero de la casa de Aoshi. Tras varios segundo, colgó. Al parecer no había nadie en casa. Volvió a coger el teléfono, pero esta vez para llamar al móvil.

-Kenshin?

-Aoshi, hola amigo ¿que tal?

-Oye no estoy de humor-. Dijo seco y cortante-. Que pasa?

-Veras-. Kenshin noto el estado de su amigó. Lo conocía como la palma de su mano-. Misao acaba de aparecer en nuestra casa y no parece estar bien.

-Misao esta ahí?

-Si-. Hizo una pausa-. Pensé que irías a buscarla al aeropuerto.

-Por favor ken me dirijo hacia allí. Pase lo que pase no dejes que ella se marche.

Y sin darle tiempo a contestar colgó. Menuda reacción que había tenido. Kenshin sabia que algo ocurría. Y temió haber metido la pata. Pero ahora solo podía esperar.

Cuando dirigió su mirada violeta a las escaleras se dio cuenta de que su mujer bajaba. Tenia la cara hecho una furia. ¿qué estaba pasando?

-Koi, he llamado a Aoshi. Enseguida viene. Parecía muy preocupado.

-Preocupado?-. cogió aire-. IDIOTA

-oro?

-Ese maldito desgraciado, es... es... un...-. no pudo encontrar la palabra que lo describiera.

-Kaoru por favor no te alteres. Sabes que no le hace bien al pequeño-. Dijo mientras le acariciaba la pancita.

-Que no me altere? Kenshin sabes lo que a pasado?

-Obviamente no. Pero la persona que lo aya hecho lo pagara. Aoshi lo destrozara-. Dijo con total confianza.

-Pues explícame como se destrozara a si mismo-. Ken la miro sorprendido-. Resulta que tu querido amigo, tu queridísimo compañero y el que a tu parecer es como tu hermano... la ha engañado.

-Que quieres decir con engañado?

-Pues que Misao al llegarse a su casa lo encontró con otra.

-No me lo creo. Estarían charlando.

-Te digo enserio que a veces eres más ingenuo de lo que pareces-. Suspiro y lo miro a los ojos-. Se encontraban desnudos en la cama. Te parece eso hablar.

Kenshin no podía creérselo. Aoshi podía pecar de trabajador y de poco tacto. Pero de eso ha ponerle los cuernos a Misao, había un abismo.

-Y tu vas y lo llamas. Misao no esta en condiciones de hablar y mucho menos con el.

-Yo no...

Antes de que pudiera terminar de hablar alguien toco la puerta. Kenshin se dirigió hacia ella. Era obvio quien era, acababa de llamarlo.

-Donde esta?-. pregunto un hombre acalorado por las prisas.

-Pasa-. Dijo cortésmente Kenshin.

-Gacias-. Miro a Kaoru. Estaba claro que ya lo sabia.

Kenshin se dirigió al salón, seguido por Aoshi y kaoru. Si lo que ella le había contado era cierto. Seria mejor aclarar las cosas. Se sentaron y se miraron mutuamente.

-Aoshi mira-. Comenzó kenshin-. Misao nos ha...

-Es cierto-. Contesto.

Se quedaron en silencio asimilando los datos. Kaoru perdió la paciencia, la poca que le quedaba.

-GRANDISIMO BAKA. COMO PUDISTE, COMO TE ATREVISTE A SEMEJANTE BAJEZA?

-Yo no tengo excusa-. Miro al suelo-. Se que he sido un cretino, el más grande de todos, pero...-. su voz se quebró.

-Amigo-. Kenshin intento tranquilizarlo.

-Os aseguro que si pudiera cambiar el pasado lo aria pero no puedo. Tendré que vivir con lo que hice toda mi vida. Pero por favor, necesito hablar con ella. No puedo perderla-. Su voz se hizo casi inaudible-. La necesito.

El matrimonio Himura se miro a los ojos. Era obvio que estaba arrepentido. Pero ¿podría el arrepentimiento borrar el dolor?

-Aoshi, veras-. Intervino kaoru-. Misao no se encuentra bien. Y dudo que ahora quiera hablar contigo.

-...

-Déjala para que se calme, ven mañana a comer y intenta hablar con ella. Pero no ahora. Los dos estáis demasiado alterados. No sacarías nada en claro.

Aoshi sabia que decía la verdad. A su pesar se resigno y se dispuso a marcharse.

-Por favor decidle que la quiero.

Ellos afirmaron con la cabeza y lo vieron marcharse. Kaoru se dirigió al segundo piso donde encontró Misao sentada en el suelo.

-Misao.

-No quiero verlo nunca más. Ni hoy, ni mañana, ni nunca.

Se levanto y se dirigió a la habitación donde se encerró para llorar.

"Me temo que esto no tendrá un final feliz" pensó kaoru. Para dirigirse a su habitación y descansar un rato. En su estado no podía hacer nada más.

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A la mañana siguiente Aoshi se preparo para ir a comer a la casa de los Himura. Tenia que hablar con ella, y convencerla de que regresara con el. Entonces sonó el teléfono.

-¿Diga?

-¿El señor Aoshi Shinomori?-. era la voz de una mujer. Pero no la de Cara.

-Si soy yo. ¿Quien es usted?

-Soy Omasu Tachika-. Contesto.

-¿Disculpe, pero la conozco?-. pregunto

-No. Pero me temo, que lo hará muy pronto.

-A que se refiere-. Todo aquello era demasiado confuso. Y no sonaba bien.

-Vera señor Shinormori, soy amiga de su esposa Misao-. Dijo con tranquilidad-. Y también soy abogada.

-¿Su abogada? Perdone que le diga pero nosotros ya tenemos un abogado.

-Es posible, pero su esposa me llamo esta misma mañana-. Hubo una pequeña pausa-. Y me pidió que llevara a cabo su petición de divorcio.

-Como?-. no era posible-. Debe haber algún error.

-Me temo que no ahí ningún error. Lo lamento, pero me pidió que empezáramos con el tramite lo antes posible. Por ello me gustaría concertar una cita con usted y con su abogado lo antes posible. Para tramitar el divorcio inmediatamente.

Espero a que alguien le contestara. Silencio.

-Señor Shinomori?-. pregunto alarmada-. Esta hay?

Aoshi soltó el teléfono que se estrello contra el suelo.

-El divorcio?

Continuara...


Perdón por la tardanza, que se prometí actualizarlo cuando consiguiera 6 reviews, pero es que llegaron tan rápido. No me lo podía creer. Batí mi propio record jeje. esta claro que los desengaños amorosos venden jajaja.

Bueno espero que este capitulo también os aya gustado. Y espero conseguir esta vez 7 rewievs. Igual que la ultima vez. Vamos animaros.

Quiero agradecer a las personas que me mostraron su apoyo:

Gabyhyatt: me gusto lo de Victoria, pero la verdad es que un Beckham no lo piya cualquiera. Y si lo haces es mejor no dejarlo solo (porsiaca). No te preocupes, a este fic todavía le queda y Aoshi tendrá lo merecido. Por que no hay nada peor que perder a la persona que amas. Bueno pero ya veremos que tortura le podemos aplicar. Gracias por tu apoyo.

Misao-89: Bueno en este caso no creo que Cara tenga mucha culpa. Al fin y al cabo el voto de fidelidad lo hizo Aoshi, y ella no le debía ninguna explicación a nadie. Aunque podría haberse tragado su pasión (pero yo con el no podría). Démosle un voto de confianza; o no. Besos.

Alis-chan: Tienes toda la razón, seria horrible dejarlo con una arpía (pero el no se daría cuenta jejeje). Y ahora que esta en forma mucho menos. De todos modos yo no se que aria en un caso de esos. Conozco algún que otro suceso por el estilo y la verdad es que no son situaciones agradables (de ahí la idea del fic). Pero creo que a mi se me aria difícil perdonarlo. No se. Yo solo espero no tener que vivir algo similar nunca. Ni nadie que conozca. Gracias y muchos besos.

Silvia-chan: Bueno he intentado plasmar lo mejor que he podido la situación. Puf no sabia si o conseguiría. Pero parece que a ti te gusto. Eso me puso feliz. Cuídate. Espero que este capitulo también te guste.

Luna sol nocturno: Ya ves. Al fin resulta que yo soy mas mala que tu. Tendrás que darme la medalla de oro jeje. cuídate.

Alis-chan6: mi rewiev numero 6. enhorabuena te as ganado el tercer capitulo. Jaja. Espero que te aya gustado el regalo. Lo he hecho lo mejor que he podido. Por cierto me apunto al linchamiento, podría ser la vicepresidenta? Juajajajajajaja. Espero que tu también actualices pronto. Besos.

Lady Ai Shinomori: Tu reviews aunque corto me gusto. Espero que tu fe para con los fics de misao y aoshi se mantenga. Besos y cuidate.

Besos a todos.

Misao de Shinamori.