dejen mensajes porfi

proximo capitulo: tiempo al tiempo


-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-. cambio de escena

ºººººººººººººººººººººººº inicio y fin de flash backs

"blablablablablablablabla" pensamientos

(...) comentarios tontos de la autora.

Ying-Yang: Por Misao de Shinamori

Capitulo siete: El desacuerdo, ruptura.

Los días fueron pasando y los meses también. Tanto Kaoru como Kenshin tuvieron que hacer frente a muchos problemas, el cambio en sus vidas fue muy grande con el nacimiento de su primer hijo varón: Kenji.

Aoshi y Misao por su parte vivían el día a día con intensidad y enamorándose de nuevo. Un día Aoshi le propuso que empezaran a buscar casa.

-¿Misao por que no?

-No es un no, no. Es que-.como decírselo. Lo miro a los ojos-. Bueno... esta bien... pero que conste que no significa que viviremos en la misma casa. Aunque encontremos una.

-Luego no podrás decir que no-. La sujeto por la cintura-. Ya veras-. Le dio un beso muy suave en los labios-. Te conozco.

Lo peor de aquella frase era que tenia razón. Cuando Misao veía una casa y la adquiría siempre deseaba vivir en ella. Y lo peor de todo era que si Aoshi la seguía tratandola tan dulcemente seria imposible huir de el. Aunque en realidad no deseara huir de el.

Los días pasaron y miraron varios apartamentos y chales. Aoshi quería una casa por todo lo grande, pero Misao no. A diferencia de antes, ahora tenia un empleo y ocuparse de una gran casa seria difícil.

Pero la muchacha cayo en la tentación, encontró la casa. Era una casa de dos pisos con un gran jardín trasero. En la primera planta se encontraban a mano derecha la cocina espaciosa y un baño completo. A la izquierda había tres habitaciones uno era el salón grande y espacioso, los otros dos podrían convertirlos en los despachos, uno para el y otro para ella. En la segunda planta había 4 habitaciones; dos con baño y un baño independiente. Apenas había unos cuantos muebles colocados, lo cual era perfecto para Misao, pues ella se encargaría de adornarlo.

-Bueno princesa por tu cara veo que te a gustado mucho.

-No... no, para nada-. Intento fingir-. Solo un poquito.

-Misao!

-¿De acuerdo, tu ganas me encanta pero no crees que es demasiado grande?

-Eso tiene solución-. La miro con picardía-. ¿Quieres que empecemos a solucionarlo?

-Ni se te ocurra-. Se acerco a su oído para susurrarle-. Talvez cuando nos mudemos

Aoshi gruño, por lo visto lo de aumentar la familia lo dejarían para otro momento. Lo cual significaba una cosa. Seguir disfrutando.

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Kenshin y Kaoru se encontraban placidamente dormidos tras haber conseguido que la fierecilla de 4 meses se durmiera. Según Megumi para ese tiempo ya debería dormir por lo menos gran parte de la noche de un tirón. Pero resulto que el hijo era tan cabezota como la madre y cada noche a las 3 y a las 5 se despertaba para poder poner en danza a sus padres.

Pero aquella noche parecía diferente, pues llegaron las 3 y el niño no lloro, ni reclamo la atención de los padres.

-No me lo puedo creer, lo oyes.

-Si-. Afirmo Ken-. El sonido del silencio. Por fin.

Kaoru se inclino sobre su marido y comenzó a trazar sutiles círculos sobre la camisa.

-Oye amor-. Dijo Kaoru en un modo muy sutil y le susurro-. Te hecho de menos.

-No me digas-. Dijo haciéndose el despistado

-¿Tu no?-. bajo su mano asta la entrepierna de el-. Yo diría que si.

-Ven aquí fierecilla.

Y de un golpe la atrapo entre el colchón y el. Era cierto desde hacia ya 6 meses o mas no tenían un momento de intimidad. Primero por el embarazo y luego por el cuidado del niño.

Kenshin la beso con pasión, una pasión oprimida. Sus manos bajaron asta el abdomen de la mujer, que poco a poco iba recobrando su tersura. La acaricio suavemente mientras comenzó a levantar la parte del pijama que le impedía saborear las cumbre gemelas. Que por cierto estaban mas rellenas que nunca por el hecho de que tenían que alimentar a pequeño.

Kaoru por su parte no tardo en poder tocar el abdomen de su marido, tan fuerte y musculoso como lo recordaba.

-AH! KEN!-. gimió cuando sintió la lengua de este en su pezón.

Kenshin lo succiono y lamió asta que se puso duro como la piedra, del mismo modo en el que se encontraba su pene erecto. Pero cuando se dirigió al segundo pecho...

Buaaaaaaaaaaaaaaaa, buaaaaaaaaaaaaaaa

-No por favor ahora no-. Dijo ken desesperado.

-Quita-. Le regaño Kaoru cuando vio que no se movía.

De un salto se levanto y se vistió para ir ver que le pasaba a su rayito de sol. Le niño la miro con esos ojitos azules como el cielo. El parecido físico no dejaba duda, era hijo de su padre. Kaoru lo acuno hasta que se calmo.

-Ya amor. Estoy aquí. Mami te cuidara.

-"¿Y yo que hago en esta situación? También necesito que me cuiden"-. Se alarmo keshin-. "Un baño frío, no, mejor, helado.

El niño se las arreglo para fastidiar el momento a sus padres. Pero estaba claro que no se lo fastidiaría a sus tíos.

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-Ah! Dios ...mío! ah!

-Misao... no...no te pares.

Misao tenia las manos sobre el pecho de su novio mientras se movía sobre el. La tensión en su cuerpo era fuerte al igual que la inmensa pasión que sentían ambos. No se paro en ningún instante mientras rozaba sus caderas con las de el. Mientras mantenía caliente el miembro que se encontraba dentro de ella.

Aoshi no era un hombre pasivo en la cama. Pero admitía que Misao era una gran amazona. Y dios santo se lo estaba demostrando.

-AH-. Un gemido de placer absoluto salió de la garganta de este.

Aoshi jadeaba desesperado mientras sentía aquella explosión. Por una parte ella ardía y por otro lado el se había derramado en ella. Dios podría haber mayor gloria que aquello. No, el lo dudaba.

Misao con la respiración agitada se tumbo al lado del que un día fue su esposo.

-Pequeña eso a sido grandioso.

-¿Si, verdad?

-Dime lo vamos a repetir-. Le dijo mientras la besaba apasionadamente.

-Mi amor mañana tengo que trabajar y son las cuatro. Déjame dormir un poco. Te prometo que el viernes te compensare por todo.

El acepto regañadientes. Aoshi tenia un horario muy flexible pues era el jefe, pero ella en cambio no. Y pese a insistir para que trabajaran juntos ella dijo que no. Que seria mejor tener una parte de sus vidas separadas. Para no caer en la monotonía. Lo más raro de ello era que en todo el tiempo que estuvieron junto nunca cayeron en la monotonía. Pero bueno quien era el para decirle que no, solo un hombre que la amaba con pasión y que daría la vida por ella.

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-Bueno, pues las habitaciones ya están listas-. Comento el oji azul.

-Eh... ah si.

-¿Pequeña te ocurre algo?-. se acercó a Misao y la abrazo.

-No es que últimamente me siento muy cansada.

-¿Has ido al medico?

-No. Pero la última vez que fui...

-Cuando...-. la corto muy serio.

-Pues poco antes de nacer Kenji.

-¿Y por que no me lo dijiste?-. parecía estar furioso.

-Tranquilo amor no es nada, me sentía cansada, nada más. No tienes que ponerte así-. Le acaricio la mejilla-. Además solo fue falta de hierro, sabes que en mi familia somos propensos a ser de metal-. Rió.

-Pero deseo saberlo todo, incluso eso. ¿No ves que me preocupo por ti?-. la abrazo-. No se que aria si algo te llegara a suceder.

-Deja los dramatismo para otro momento. Pero prometo decírtelo la próxima vez.

-Bien ¿iras al medico?

-Me he comprado las vitaminas que me dio la ultima vez. Seguro que es por eso, además en el trabajo estamos con un proyecto muy importante. Pero si en unos días veo que no se me pasa iré.

-Como quieras-. Le dijo no muy convencido. Mira que la chica podía ser cabezota.

-Por cierto quiero pedirte un favor. Mañana vendrás a casa a cenar.

-Eso no es un favor, pues lo ago con gran placer.

-Bien entonces ven a eso de las 8. Y no te retrases-. Grito mientras se alejaba.

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Al día siguiente Misao decidió ir a ver a los Himura. El niño era monisimo, y tenia ganas de coger lo. Además hacia tiempo que no hablaba con Kaoru. Seria un buen momento para relajarse y disfrutar en buena compañía.

DIN-DON

-Sorpresa¿Como esta mi sobrinito?.

-Misao. ¿Que haces aquí?

-De visita-. Sonrió-. Pero tu deberías irte de vacaciones. Menuda cara.

-No te creas. Iría con sumo placer. Y es la cara de una madre.

-¿Vamos un bebe tan pequeño no puede dar tantos problemas?

-Eso mismo pensaba yo antes. Pero resulta que en mi caso, el hijo es digno de su padre, no da paz.

-Vaya hombre. Seguro que se le pasara.

-Si, últimamente estamos mejor. Pero esta hecho todo un guerrero.

-Si pero seguro que luego será tan tierno y cariñoso como su padre.

-Esperemos-. Sonrió-. Te traeré un poco de te, así charlaremos más a gusto. Hasta que el niño despierte.

Misao vio salir a su amiga mientras veía a Ken entrar.

-Cuanto tiempo sin verte hermanita.

-Lo mismo digo¿como estas?.

-Bien, bastante bien. Aunque Kenji en igual que su madre, un cabezota.

-Vaya hombre-. Estaba claro que era digno hijo de sus padres.

-De verdad, no para asta conseguir lo que quiere y eso que apenas tiene 5 meses.

-Bueno pero de mayor será tan bueno y bondadoso como su madre.

-Eso espero-. La abrazo-. Bueno voy a la ducha. Te quedaras a cenar.

-Hoy no puedo tengo una cena con Aoshi.

-Si tienes razón suena mejor.

Kenshin salió y vio a Kaoru.

-Me voy a la ducha Koi.

-Bien-.Entró en el salón.

-Y dime Mi-chan ¿a que viene tu visita?

-¿Otra vez? Kaoru te lo he dicho dos veces ya. Vengo a ver a mi sobrinito. Deberías cuidarte la cabeza.

-Oye mi cabeza esta de maravilla-. Le dijo mientras le daba un coscorrón.

-Ai..-. se cejo la joven.

-Lo que yo quiero oír es el además...

-Y además venia a contarte...

-Sabia que había algo más-. Sonrió victoriosa.

-Bueno me lo he estado pensando bien y esta noche le diré a Aoshi que deseo volver con el. A vivir con el.

-¿Sin casaros antes?

-Lo amo. Además eso vendrá con el tiempo. Y como hoy en día no esta mal visto que una pareja viva junta. Pues a intentarlo.

-¿Es lo que desea?

-Si.

Kaoru salto de alegría y abrazo a Misao deseándole suerte. En ese momento kenji despertó y Misao pudo darle su dosis de abrazos y achuchones. Y pese a que normalmente el niño se quejaría, esta vez sonrió.

Estaba claro que los ojos esmeralda de la joven lo habían cautivado.

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-¿Bueno Aoshi ya te vas?-. pregunto Hannya.

-Si. Misao me espera.

-Me alegro que todo vaya bien.

-Y yo.

Hannya salió mientras Aoshi recogía unos documentos. Tenia una corazonada. Y sabia que algo bueno pasaría esa noche.

-Señor!-. Entro acalorada la mujer.

-Cara. ¿Sucede algo?

-Si. Alec Kindkaid. En la línea 3.

-¿Qué¿ahora?

Alec era el empresario estadounidense mediante el cual consiguieron llegar al mercado. Y además su contacto en aquel país.

-¿No puede esperar?

-No. Dijo que era urgente.

Aoshi se resigno y cogió el teléfono. Si era urgente seria algo muy serio y algo muy largo. Adiós a la cena.

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-Perfecto.

Misao había terminado de preparar los detalles de la magnifica cena. Era una velada muy especial, y intentaría que todo aquello fuera un hermoso recuerdo; sin fallos. Llevaba puesto un vestido palabra de honor blanco, ceñido asta medio muslo donde comenzaba la cola, una pequeña cola. En verdad parecía un vestido de novia. Pero le encantaba el corte que tenia, y se enamoro de el la primera vez que lo vio.

En los pies llevaba unas sandalias blancas, que tenían un ribete de brillantes chispas. El pelo se lo recogió en una coleta alta, mientras que unos rizos caían sobre su espalda y hombros. Misao no era dada al maquillaje, por eso opto por un estilo natural y fresco.

-Y de postre fresas.

Cuando todo estaba listo miro al reloj y se dio cuenta que faltaban 10 minutos para la hora. Así que decidió sentarse en el sillón y esperarlo tranquilamente. Tomo su libro de lectura "No debo amarte" y se puso a leer.

El tiempo paso, pero estaba tan inmersa en la lectura que no lo noto. Cuando miro la hora ya eran las 9:00.

-"Que extraño, Aoshi nunca se retrasa tanto. ¿Abra ocurrido algo?"

El medio la inundo, talvez tubo algún accidente y ella no se entero. Alarmada llamo a su celular, pero el no respondió. Llamo a su despacho y le dio comunicando una serie de preguntas surgieron en su mente¿Por qué no la llamo¿Por qué no tenia el celular encendido? Y lo más importante ¿Por qué?

Decidió esperar un poco más. Talvez se había retrasado por el trabajo, no seria la primera vez. Siempre que tenia algo importante entre manos ocurría lo mismo. Era un adicto al trabajo, sobre todo a los trabajos que le suponían un reto. Era su modo de sentirse vivo.

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-Bien señor Kinkaid así se ara... si... por supuesto, ningún problema. Buenas tardes.

-Se acabo-. Afirmo Cara-. Dios estoy agotada.

-Si ese hombre sabe lo que se hace y lo peor es que es un gran jugador. Tenemos que estar muy atentos.

-No se preocupe jefe, todo saldrá bien.

-Si-. Aoshi miro al reloj; las doce de la noche-. Mierda.

Se levanto y comenzó a recoger sus cosas.

-¿Ocurre algo?

-Si quede con Misao, y se me fue.

-Bueno hoy ya es tarde.-. se acercó a el-. Que le parece si tomamos un trago.

Ella le sonreía sensualmente. El lo noto, y aunque era una mujer muy tentativa el ya había aprendido la lección. Y no merecía la pena.

-Cara no puedo le prometí que iría.

-Le recuerdo que están separados, y dudo que le abra la puerta ha estas horas-. Sonrió maliciosamente "Antes le daría con la puerta en las narices si supiera que has estado conmigo todo el tiempo. Y que por ello has llegado tarde. Pobrecita."

-Ese no es el problema-. Le enseño las llaves de la casa-. No será la primera vez que llego cuando ella duerme.

Aoshi no supo porque pero se sintió de maravilla cuando le hecho en cara que dormía con ella siempre que se le antojara. Lo cual dicho de otro modo seria siempre.

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Pese a conducir al limite de velocidad, no pudo llegar antes de la una. Cuando llego un puñal atravesó su corazón. "Mi gran noche" se dijo. A un lado estaba la mesa, colocado de un modo sublime, con velas incluidas. Velas que ya se habían consumido.

Y al otro extremo, ella. Misao estaba bellísima, y tiernamente dormida sobre el brazo del sofá. Aoshi se acerco sin emitir ningún sonido y se agacho frente a ella. Que linda era, como siempre.

Le acaricio la mejilla.

-Llegas tarde-. Dijo despertando.

-Lo lamento mucho, el señor Kinkaid llamo a ultima hora y... de verdad perdóname. No era mi intención.

-Como digas. Tienes la comida en la nevera. Si quieres puedes calentártela y marcharte o marcharte directamente.

-No te pongas así.

-ME PONGO COMO ME DA LA REAL GANA-. Exclamo.

-...

-Es que no te das cuenta...-. dijo intentando contener el enfado que sentía. ¿Podía ser en realidad más ciego de lo que parecía?

-¿Se puede saber que te pasa? Estaba trabajando.

-Pues yo no lo sabia. ¿Con quien estabas?.

-Con... con Cara... ¿Por que?-.

-...-. Misao giró sobre sus alones.

-No pensaras que te he engañado. Yo te amo a ti. Cometí un error pero no podremos seguir adelante si no estas dispuesta darme, sinceramente una nueva oportunidad para redimirme-. Esa era la ultima baza que tenia, si no la convencía se acabaría.

-Cuando me has dicho le nombre de esa mujer se me a pasado por la cabeza-. Admitió-. Pero eso no es lo que me ha alterado. Aoshi, lo que pasa es que no sabia si estabas bien o si habías tenido algún accidente. Mi problema al igual que tu me dijiste el otro día era el no saber si estas bien o mal. Si te pasó algo o no. Por que¿porque no me llamaste¿Es que te parece mucho pedir? Con un simple: Misao me ha llamado tal persona y tendremos que retrasar la cena; no te preocupes. Con eso hubiera bastado.

-Yo...-. era un inútil, tenia razón, tuvo que llamarla-. Lo siento no volverá a ocurrir.

Misao estaba fuera de sus casillas y quería descansar un poco.

-Aoshi perdona me he pasado un poco. No debí gritarte-. Le dio un besito-. No pasa nada, pero me voy a dormir.

-...

-Cierra la puerta tras de ti.

Un modo muy sutil para despacharlo. Pero totalmente comprensible. Había sido un bruto y se lo merecía. Afligido, salió del apartamento. Cogió su coche y se fue a su casa.

Cuando llego y entro su móvil sonó. Era un mensaje.

"Llámame loca, pero me da igual. Lo que quería decirte era que te quiero y quiero vivir contigo. Tendré preparadas mis cosas para mañana por la tarde. So idiota."

Aoshi se quedo plantado como un arbusto. ¿Pero no estaba enfadada?

-"Que importa volveremos a estar juntos"

No pudo reprimir un grito de victoria. Ahora a moverse con pies de plomo.

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-Kaoru gracias por tu ayuda.

-Gracias a ti me he distraída organizando las cosas de la casa.

-Parece mentira pero en una semana no hice nada. No aguantaba una semana más sin ponerlo todo en orden.

-Bueno es normal. Por cierto como va la campaña de pintalabios "Pasión"

-Genial, ya lo tenemos organizado. Te digo yo que va a ser un éxito.

-Yo quiero uno.

Entre risas, cuentos y anécdotas pasaron la tarde poniéndolo todo a punto.

-Buenas noche.

-Adios.

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La felicidad de aquella arde duro apenas una hora.

-Como que te vas!

-Veras, Kindkaid nos a conseguido un magnifico contrato, pero este solo se llevara a cabo si yo me reúno con el director de la empresa Sonit.

-¿Y cuando te vas?

-Mañana por la mañana.

-MAÑANA

-Si. Quería decírtelo antes, pero estaba tan feliz de que estuviéramos juntos. No quería arruinarlo-. Se excuso.

Misao lo pensó unos instantes.

-"Tendre que decírselo cuando vuelva" De acuerdo. ¿Y Hannya va contigo?

-Pues no-. Dijo mientras se dirigía a su mesa de trabajo.

-Pero si el siempre de ayuda con estos negocios.

-Si pero Kenshin lo necesita.

-Y entonces...-. Misao lo miro a los ojos-. Oh no, no, no, no...

-Yo no puedo hacer nada.

-Con Cara! Por dios santo Aoshi ¿estas loco?

-Misao de juro que no pasara nada.

-Y debo creerte-. Se fue a la cocina. Aoshi la siguió-. Aoshi te vas de viaje...

-A trabajar.

-DE viaje con la mujer que me engañaste.

-...-. era imposible negar lo obvio-. Por favor confía en mi.

-Hagamos algo, yo te engaño con otro y luego me voy a trabajar con el al extranjero.

-...-. el sintió el dolor en el pecho; celos, ira todo en uno. Se le reflejo en la cara.

-Si. Así me siento yo-. Tomo aire-. Solo diré una cosa. Haz lo que te plazca y lo que creas que es mejor. Pero te aseguro una cosa. Si por alguna razón, yo desconfió, o simplemente sufro, claro esta más de lo que lo estoy haciendo ahora... atente a las consecuencias.

Aquel día y aquella noche se encerró en la habitación de invitados. Cuando se despertó y bajo a desayunar se encontró la nota.

"Te amo mi amor. Eres mi vida, mi luz y esperanza. Se que desconfías y tienes razón, soy un canalla. Pero no deseo volver a sentirme como lo hice cuando te perdí. Sentirme muerto. Por favor confía en mi, no te defraudare lo juro.

Siempre tuyo Aoshi"

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Los días fueron pasando con bastante tranquilidad. Aoshi la llamaba todos los días y pasaban un buen rato hablando. En verdad lo extrañaba y dudaba. Pero no podía acusarle de algo que no sabia. Además se propuso creerle, y lo aria.

Un día antes de su regreso, Aoshi no la llamo. Y decidió llamarlo ella.

-Hola Misao-chan.

Misao se quedo de piedra. ¿Que hacia esa mujer con el celular de Aoshi?

-¿Sigues hay Mi-chan?

-Para usted señora Shinomori.

-Querida, tienes tanto de señora Shinomori como yo.

-...

-El sueño de serlo y... la cama.

-Como te atreves.

-¿Es que he dicho alguna mentira?

-...

-Lo ves, ves como no miento.

-Dile a Aoshi que se ponga.

-No puede, el pobre esta rendido. Ya sabes de trabajar tanto-. Dijo con retintín.

-Zorra.

-No te equivocas, yo lo amo y luchare por el. Además no tengo que darle explicaciones a nadie de lo que ago. Ahora te dejo. Yo también estoy agotada.

Y colgó. Cara volvió a la mesa. Aoshi llego del baño.

-¿Ocurre algo?-. pregunto.

-No nada-. El metre apareció-. Señores que les parece si pedimos.

-Excelente idea señorita-. Anuncio Kinkaid.

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Misao salió corriendo de casa. Cogió el coche y condujo como loca. Para ella no existían las normas de circulación ni las leyes. Solo el dolor.

Toco la puerta de la casa.

-Misao¿que ocurre¿Que haces aquí?

-Kyo... no... no aguanto más-. Y se abrazo a el mientras gruesas lagrimas caían por sus blancas mejillas-. Se acabo para siempre.

Continuara...


Bueno díganme ¿que les pareció? He intentado hacerlo más largo de lo normal, por que hoy es un día muy especial.

Hoy mi amiga Alis-chan celebra sus cumpleaños, y quería hacerle un regalito. Pues es una persona que me ayudo mucho al principio y que sigue dándome buenos consejos. Gracias. Por eso amiga, esto es para ti. Espero que lo disfrutes de la lecura. FELIZ CUMPLEAÑOS / ZORIONAK.

Y que todos los demás, espero que hayáis disfrutado también con la lectura, tanto como yo e disfrutado escribiendo este capítulo; y este fic. De verdad que agradezco el apoyo que me han ofrecido todo este tiempo.

Alis-chan: tus fics son maravillosos. Disfruta este capitulo y este día.

Gabyhyatt: lo del machismo a mi tampoco me agrada. Pero si es para poner a las arpías en su lugar voto a favor. Como ves Kenji esta dando guerra y la perra digo Cara también. Al fin a conseguido su objetivo.(oye me envías el video clip)

Luna Sol Nocturno: Enviar la a la antártica seria un buen plan uajajajaja, pero que me dices si mandáramos a Cara al sol. Se convertiría en una estrella, aunque se chamuscaría jujujuju. Bueno por ahora ves que a ganado. La vida no es siempre color de rosas. Cuídate y besos. Animo con tus fics.

Silvia-chan: Como ves Cara a usado su carta y ahora Misao esta dolida. Sobre la antorcha, tendrás que pasarte por una más grande, porque la tía me salió más víbora de lo que creía. Tendré que llamar a Luck Skaiwalker para que me lleve a la luz. Jejejeje. Besos.

Ali-chan6: Bueno y que te pareció? Mi musa regreso y la verdad es que me he quedado bastante satisfecha con este capitulo. Ah y como le he dicho a Silvia-chan hay que hacer antorchas tamaño XXXXXXLLLL. Jajaja. Haber si tu también actualizas que ya tengo ganas. Por cierto te deje algún reviews? Bueno ahora mirare. Cuídate compañera y jefa.

Lady ai Shinomori: como ves lo de ser meloso se fini. Y la alegría y la felicidad. Dios todo lo que hice en el anterior capitulo a la basura. Es que esta Aoshi no escarmienta¿será cegato?. Me alegro de que te aya gustado Megumi, todavía pienso que saldrá un poquito más. No se, lo pensare. Y si te digo la verdad a mi también me suele traer sin cuidado. Es muy difícil que me caiga bien. Peor el que lo consigue, tiene una lectora fiel. Bueno eso si es que me pongo a leer algún fic en el que ella sea protagonista. Besos.

Milk chan: la tormenta ya esta aquí. Y a desatado fuentes rachas de vientos y marejadas. Se acabo para siempre como bien a dicho Misao. Cuídate mucho.

Y como ya me es costumbre pido a todos los lectores de Yin Yang su apoyo mediante los reviews. Incluso tomatazos.

Cuídense mucho.

Misao de Shinamori