CAPITULO 5

"Eminente derrota"

La cena había transcurrido casi en absoluto silencio por parte de Willy y Gabby, Galad y Wallace se habían dado cuenta, pero no dijeron nada, el único que parecía estar absorto era Wesley.

Gabrielle se había dado un baño para relajarse, el juego con Willy le había dejado los músculos completamente contracturados, aunque el dolor estaba presente como pequeños alfileres que se clavaban en su cuello, la confesión que había logrado por parte de el solo le confirmaba lo que ella ya sospechaba pero se negaba a aceptar.

Cuando salio del baño se encontró a Willy ya sentado en la cama leyendo un libro. Al verla salir lo dejo a un lado y retiro las sabanas del lado de ella para permitirle que se acostara con facilidad. Ella agradeció el gesto, sabia que en ese momento se sentía culpable pues el no quería lastimarla, simplemente el juego se salio de control.

-¿como estas? – le pregunto el cuando ella estuvo sentada a su lado.

-me duele un poco

-permíteme… - el se acerco a ella y comenzó a darle un suave masaje en el cuello y espalda – perdona… no fue mi intención.

-lo se – contesto rápidamente ella, volteo un poco la cabeza y le sonrió. Willy sintió quitarse un gran peso de encima - ¿Por qué no me dijiste nada desde el principio? – pregunto ella.

-pues… no lo creí necesario… eso paso hace mucho, mucho tiempo.

-no iba a pasar nada con decírmelo – ella agarro su mano que estaba masajeando su hombro y deposito un pequeño beso – gracias ya me siento mejor.

Willy dejo de dar el masaje y ambos se acostaron a dormir, el apago la luz y todo quedo en silencio.

-entonces no sientes ya nada por ella verdad? – le pregunto a Willy una disminuida voz en medio de la oscuridad.

-porque lo preguntas?

-tan solo dime que no quedo nada entre ustedes, dime que no quedaron cenizas.

Willy se quedo callado, pues no sabia que contestar, no quería mentirle a Gabby, pero tampoco podía decirle que no sentía nada por Gwyn, pues entonces se estaría mintiendo a el mismo, la cuestión era que no solo quedaron cenizas… sino que el sentía que aun había brazas ardiendo.

-cenizas no hay… - le dijo el… una verdad a medias que al final resulta lo mismo que una mentira completa.

-no quiero perderte… - dijo ella ya casi completamente dormida.

-… y yo tampoco quiero perderla… - dijo el en voz baja sabiendo que Gabby ya se había quedado dormida.

Willy se acerco a ella y la abrazo… el jamás había escuchado ese tono de voz en ella, la inseguridad estaba presente esa noche y lo podía percibir. Esa noche Willy no pudo dormir las preguntas asaltaban su mente, ¿Qué era lo que en verdad estaba pasando entre el y Gwyn?

La mujer que tenia entre sus brazos le había dado tanto, lo había ayudado a salir de la depresión que estaba, justamente por el malentendido de Gwyn, habían pasado un par de años y el aun sufría por la partida de ella, el obviamente trato de aislar ese hecho y con la llegada de Gabrielle fue el momento mas oportuno, pues ella le ofreció su amor y por eso el pudo salir adelante.

Ahora que Gwyn estaba de nuevo bajo el mismo techo que el, se dio cuenta que sus sentimientos por ella seguían presentes, sentía esa atracción intelectual que nunca tuvo con Gabrielle, pues ella era su polo opuesto. Claro que amaba a Gabrielle, pero había un punto que su esposa no tenia… la conexión que tenia con Gwyn, el perfecto leguaje que hablaban cuando estaban creando un nuevo dulce.

El creyó que todo seguiría igual entre ellos, pero en el fondo sabia que era una mentira, las semanas siguientes lo único que hicieron fue separarlos mas con cada día que pasaba. Willy pasaba todo el día con Gwyn, en ocasiones trabajando, unas cuantas mas simplemente platicando y bromeando, ninguno de los dos se había dado cuenta pero estaba ocurriendo lo mismo que hacia años, Willy en su momento descuido su relación con Carrie, ahora lo hacia con Gabrielle, solo que había una gran diferencia, Carrie era solo su novia, en este caso, Gabrielle era su esposa.

-toma… - le dijo Willy enseñándole una pequeña píldora partida por la mitad que brincaba agitada en su palma.

-que es? – pregunto Gwyn con una sonrisa.

-tómatelo y veras…

-no será uno de esos dulces que me diste para besarme hace años verdad?

-ha-ha! … claro que no… - dijo el muy serio al final recordando ese incidente, tan solo hacerlo un escalofrió recorrió su piel.

Gwyn lo hizo la paso con un poco de agua cambiante que tenia a un lado. Ella sintió algo extraño en su interior, pero no sabia que era.

-que fue eso?

-mírate al espejo… - Gwyn corrió al sanitario que estaba a unos cuantos metros de ahí y se sorprendió cuando vio su reflejo.

-OH POR DIOS! WILLY!

Ella regreso a la oficina corriendo donde se encontró a Willy esperándola de pie. Gwyn corrió hasta el y paso sus brazos alrededor de su cuello abrazándolo.

-gracias Willy! No se que me hayas dado pero muchas gracias.

Gwyn se despego un poco y quedo muy cerca de Willy, el observo el magnifico resultado, del Vita-Wonka su rostro estaba bien cuidado, pero ahora no solo parecía que había rejuvenecido diez años sino mas.

-te ves hermosa… - le dijo el en voz baja.

-gracias – Ella observo los rosados labios de Willy y tuvo la irresistible tentación de besarlos, pero Willy rompió el abrazo.

-… tenemos que seguir trabajando… - dijo Willy viendo hacia otro lado.

-claro…

Gwyn lo soltó y regreso a sentarse en su lugar tomo el lápiz y siguió con su trabajo, Willy hizo lo mismo, en el momento que se sentó en su silla Gabby apareció por la puerta, un poco mas y los hubiera encontrado en una situación comprometedora.

-vendrás a comer con nosotros o de nuevo te quedaras aquí… - le dijo fríamente Gabrielle.

-no lo se … tenemos mucho que hacer… - dijo Willy golpeando el escritorio con un lápiz.

-perfecto… quédate con tu trabajo – ella dio media vuelta y salio de la oficina.

Los últimos días las cosas entre ellos habían cambiado, Willy pasaba todo el día en la oficina con Gwyn, ya no comía ni cenaba con su familia, no era ningún secreto que ellos tenían problemas.

Por la noche Willy llego a su habitación y encontró todo en casi completa oscuridad. Sin hacer ruido se puso su ropa de dormir y se acostó al lado de Gabby. El creyó que ella estaba dormida pero no era así.

-Willy?

-si? – ella se incorporo sobre la cama y lo miro en medio de la oscuridad.

-que es lo que sucede?

-sucede? Sucede de que? Ha-ha, no se de que estés hablando… - Gabrielle sabia que algo estaba pasando entre el y Gwyn, no tenia la certeza que era exactamente, pero ella tenia la horrible sensación de estarlo perdiendo poco a poco.

Hacia días que no le daba un beso o le decía alguna palabra cariñosa, ni un abrazo, menos una caricia. ¿Acaso estaba teniendo un romance con Gwyn? Además ese día Willy le había dado la píldora reductora de edad, eso no podía ser bueno.

-ya nada Willy… debes estar cansado, duérmete – ella regreso a su posición en la cama dándole la espalda a el.

Gabby estaba viendo hacia la ventana y unas lagrimas cayeron por su rostro hasta la almohada, una mujer le estaba quitando a Willy y ella lo estaba permitiendo. Lo peor es que ella no sentía que tuviera el derecho de reclamarle algo a el, como lo haría si ella misma hacia años había tenido una aventura con un marinero mercante, Un aventurero de los mares? Simplemente no podría hacerlo. Cerro los ojos tratando de apartar esos pensamientos y tratar de dormir, algo que no hacia muy bien desde hacia días.

Después de tres horas sin poder conciliar el sueño, Gabby se sentó sobre la cama y recargo en la cabecera, volteo a su lado donde estaba Willy durmiendo placidamente, ¿Cómo era posible que después de tantos años de estar juntos y ser felices, se podría decir que una pareja perfecta, ahora su relación se estaba cayendo a pedazos? A Gabrielle le dolía el corazón el solo pensar que un día despertara a media noche y no viera a Willy acostado junto a ella, y es que habían sido tantos años, tantos altibajos, tantas cosas que compartieron los dos que simplemente ella no podía concebir el futuro sin el.

Ella acerco su mano a el y acaricio el pálido rostro de el esperando que sintiera su suave contacto, pero no fue así, dándose por vencida regreso a la cama, solo que esta vez se recostó sobre su pecho, necesitaba sentirlo cerca, con su oído justo sobre su corazón pudo escuchar sus latidos, tan solo quisiera saber si esos latidos aun eran para ella o para alguien mas. Su mano libre la pozo sobre su pecho, pudo sentir el tibio calor corporal que su cuerpo emanaba, fue entonces cuando creyó escuchar lo que Gabrielle había estado temiendo por todos esos días.

-… Gwyn… - dijo Willy entre sueños en medio de un suspiro.

Gabrielle cerro los ojos con fuerza y comenzó a llorar, no era posible lo que le estaba pasando ¿porque salvar a la fabrica significaba perder al hombre que amaba?

Esa noche Willy soñaba la vez que había estado bailando con Gwyn en un precioso restaurante con adornos medieval, donde le había dicho acerca de su noche perfecta.