CAPITULO 7

Inuyasha, se encontró con Kikyo, casi en el centro del bosque, ahí estaba ella igual q

hace 50 años.

-Sabia que andabas cerca Inuyasha, por fin te has decido, vendras conmigo?

-No he venido por eso- Aunque dijo estas palabras, estaba muy tentado de acompañarla,

Recordó como eran hace 50 años, como llego a enamorarse de ella, como por ella iba a

cambiar, si la había querido mucho, y la tentación de irse con ella era muy grande.

Kikyo se acerco a el lentamente, acaricio su mejilla dejando q su mano se posara en el

hombro de el.

-Dime Inuyasha que es lo q te retiene aquí, hace 50 años no habrías dudado en venir

conmigo, hace 50 años no habrías dudado en morir por mí, hace 50 años habrías muerto

conmigo para estar juntos siempre. Dime Inyasha ¿Q es lo que ha pasado?- Le decía

esto susurrándole al oído, Inuyasha la sentía cerca, Se sentía muy tentado, quería

recuperar eso, ese sentimiento que le llenaba, q le hacia feliz como nunca había sido, si

sentía muy tentado.

"¿En q estoy pensando?¿q es lo q echo de menos?" pensaba Inuyasha como despertando

de un sueño "Cuando estoy con Kagome siento la misma felicidad si no más., cuando

estoy con Kagome, me siento lleno, y seguro, y quiero q ella se sienta segura, he estado

muy ciego, he estado persiguiendo un recuerdo. La verdadera Kikyo no esta viva, si lo

estuviera, no hablaría así, hablaría mas como Kagome, Kagome tiene la esencia de la

persona que me enamore hace 50 años, de la verdadera Kikyo,"

-Kikyo, sabes que paso? Lo que ha pasado son 50 años, 50 años clavado en un árbol

hasta que fui liberado, tú que de verdad pensabas que me querías, te tragaste el cuento

de Naraku, si de verdad me habrías querido, hubieras confiado en mi, hubieras sabido q

yo seria incapaz de atacarte, hubieras sospechado algo, yo habría dado mi vida por ti

Kikyo, habría cambiado por ti, pq te quería, dime Kikyo, alguna vez confiaste en mi?

Sabes Kikyo, se que jure protegerte, y cumplire esa promesa, protegere a kagome, q

lleva tu esencia, la verdadera esencia de Kikyo, su alma.

También jure vengar nuestra traicion y también cumpliré esa promesa, pq se q tarde o

temprano encontrare a Naraku y le venceré, entonces serás libre, y podrás descansar.

-Inu ya sha , vamos Kagome no soy yo, de verdad quieres eso? Esa niñata te ha lavado el

cerebro, tu me quieres a mi- Kikyo hacia un ultimo intento de atraerle

-Esa niñata confía en mi, aun cuando la he rechazado a permanecido a mi lado, daría su

vida por mi- Inuyasha recordó aquella ve en la q Kagome se interpuso entre una flecha y

el , y si no hubiera sido por la prenda de las plumas celestiales seguramente habría

muerto.- y sobre todo eso me acepta tal como soy. así q déjalo Kikyo, no eres más que

un recuerdo, es hora de que descanses en paz.

Al terminar esta frase, Kikyo un tanto sorprendida dio un paso hacia atrás, la tierra

tembló un poco y ahí donde se encontraba ella se abrió un agujero por donde sin poder

evitarlo, cayo sin remedio.

"Parece que el conjuro se rompió, por fin tu alma quedara libre Kikyo, estoy seguro de q

si habrías sido la misma persona de hace 50 años, así lo hubieras querido eso espero"

Inuyasha observo como las serpientes de la miko se pegaban a al suelo por donde ella

había desaparecido, no le dio importancia, se dio media vuelta y se dirigió al

campamento, ya era tarde, los demás estarían preocupados.

Llego al pequeño riachuelo por donde había pasado al ir al encuentro de Kikyo, un olor

familiar flotaba en el aire, había sangre cerca de la orilla, se acerco, tenia que

comprobarlo, unto su garra con la sangre que había encontrado y la volvió a olfatear.

"Es de Kagome, mierda, apuesto a que esa tonta me siguió, tengo que llegar al

campamento y averiguar que a pasado, no parece gran cantidad, espero q este bien, pero

hay otro olor familiar en el ambiente, aun no se de quien es, Sango, Sango también

estuvo aquí, seguramente este con ella en el campamento, tengo q apresurarme"

En sus prisas, y preocupación, Inuyasha paso por alto otro tipo de olor, el olor de

Naraku.

Llego donde estaban los demás, l recibimiento no fue el que esperaba.

-Ahí esta, mira lo q te dije Miroku.

Miroku observo las garras de Inuyasha, y efectivamente había sangre en una de ellas,

dirigió una mirada a Shippo, que comprendió y olfateo enseguida.

-Si es la sangre de Kagome, como dijo Sango

Inuyasha no entendia nada, se acerco a ellos, con prisa por saber de Kagome, estos lo

tomaron como un acto de ataque, y se pusieron en guardia.

-Dinos Inuyasha, pq, pq has traicionado a Kagome.

-Sango si te refieres a pq fui a ver a Kikyo no es algo q deba explicarte a ti.-

Sango le lanzo su hueso volador, si había elegido, le parecía bien, pero no explicaba su

traición, Kagome era su amiga y no se lo perdonaría.

Inuyasha, no estaba dispuesto a pelear con ellos, y aunq nunca se retiraba de una pelea,

decidió, que esta seria la primera vez. Por lo menos hasta q se aclararan las cosas, y

Encontrara a Kagome, tenia q encontrarla ese seria su principal objetivo, así q se volvió

a introducir en el bosque.

-Se escapa Sango- señalo el pequeño shippo- y no nos ha dicho q ha hecho con Kagome.

-Le seguiremos- Opino Miroku "esto me huele mal, le seguiremos hasta q se aclare este

asunto, o encontremos a Kagome, no creo q Inuyasha nos haya traicionado, no parecía

venir con ganas de pelea, y no creo q haya atacado a Kagome pese a la sangre de su

garra, me huele a Naraku" pensó el monje

-Si sigámosle, Pq si Kagome a muerto, lo pagara- Sango estaba muy enfadada, aunq

con algunas dudas no podía quitarse de la cabeza a su amiga atacada por Inuyasha,

había visto las pruebas, había visto la sangre, si se lo hubieran contado seguramente no

lo habría creído, pero ella lo había visto.

Shippo q de normal le tenía algo de temor a Inuyasha, era el que mas convencido estaba

de q era un traidor, y no pudo evitar echarse a llorar al pensar en Kagome que había sido

como una madre para el.

Entonces todos deacuerdo fueron a la caza de Inuyasha.