¿Se acuerdan de este fic? Volvió, en forma de fichas

Bueno… acá esta la continuación… falta el tercer capitulo que planeo hacerlo más como un epilogo contando cosas que, quizás, no pude resolver en este.

ACLARACIONES MUY IMPORTANTES DE LEER: EN ESTE MUNDO, EN ESTE FICCCCC… EL MUNDO DE LOS NEGOCIOS FUNCIONA DE ESTA MANERAAAAAA, NO TENGO NI PUÑETERA IDEA DE COMO FUNCIONAN EN LA VIDA REAL Y ME DIO MUCHAAAA, MUCHISIMAAAA, PEREZA INVESTIGAR (NO ME MATEN POR ESO)

NO PRETENDO BURLARME DE LAS PERSONAS QUE EN SU VIDA HAN SUFRIDO VIOLENCIA FISICA/PSICOLOGICA, NI DE LAS PERSONAS QUE PRESENTAN DIFICULTADES A LA HORA DE HABLAR Y/O ESCUCHAR. ESTE FIC ES UNICAMENTE PARA ENTRETENER, NO BUSCO GENERAR POLEMICAS NI MUCHO MENOS FALTARLES AL RESPETO.

LOS PERSONAJES NO ME PERTENECEN, SON PROPIEDAD DE MASASHI KISHIMOTO, YO SOLO LOS USO COMO INSPIRACION.

AHORA SI…

Capítulo 2

Hinata despertó tras escuchar como una puerta se cerraba a sus espaldas. Tardo varios segundos en recordar todo y se sonrojo furiosamente. Nunca lo hicieron al aire libre y la experiencia fue asombrosa.

- ¿estas bien? – Ella asintió, ignorando como debía comportarse con él ahora que sabia su secreto – Te preparare un baño caliente – Naruto la deposito suavemente en la cama y en seguida desapareció de su vista. Hinata aprovecho esto para estirarse en la cama y relajar los músculos de su cuerpo. Se giro de medio lado, acomodando su enorme panza, y entrecerró los ojos. Sentía un enorme peso fuera de sus hombros ahora que el rubio sabia la verdad. Hinata no creía que su tartamudeo fuera motivo de vergüenza, solo actuaba con cautela ya que su padre se encargó de hacer un infierno todos los días de su infancia. Hiashi la castigaba y humillaba constantemente por algo que ella no podía controlar. Todavía sentía nauseas al recordarlo. Pasó varios minutos en silencio absoluto, lo único que se escuchaba era el leve "Tic Tac" del fino reloj colgado en una de las paredes de la habitación. Estaba empezando a dormitar cuando la voz de Naruto la trajo de regreso a la realidad – El agua esta tibia, te deje toallas limpias cerca de la bañera ¿Puedes bañarte tu sola? – Asintió silenciosamente, pero no se movió ni un centímetro. Podía sentir la intensa mirada de Naruto en su espalda. Hinata sabía que él estaba preocupado, pero era poco lo que podía decir cuando su boca se negaba a funcionar correctamente. Intento pensar en ellos como otro negocio a finiquitar y ni así logro abrir la boca para pronunciar algo – Te daré un masaje – Soltó un sonoro gemido cuando las fuertes manos del rubio empezaron a masajearle la espalda – Necesito entenderte – Hinata cerro los ojos con fuerza – Pero sé que esto está siendo más difícil para ti que para mí –

-l-l-l-lo s-s-sie-ento – Soltó un suspiro –

- Tu eres la menos culpable – Hinata sintió los hábiles dedos de su ex en su espalda, bajando lentamente la cremallera antes de sentarla frente a él y sacarle la prenda sobre su cabeza – Toma el baño primero y yo iré después –

-B-B-Bien –

Naruto suspiro mientras veía a su mujer desaparecer de su vista. Quizás fue muy optimista cuando pensó en que las cosas irían de color de rosas entre ellos. Hinata no dijo prácticamente nada después de despertar y su silencio lo estaba matando. Odiaba ser el único miembro activo en una conversación y no sabía hasta qué punto podría llegar su paciencia.

"Brrr"

Su ceño se frunció cuando una leve vibración sonó entre las ropas olvidadas de Hinata. Rebusco entre sus pertenencias hasta dar con el celular de su esposa. Era un aparato nada ostentoso y, aunque era táctil, era de esos móviles a los que todavía se les podía quitar la batería. Encendió la pantalla cuando un segundo "Brrr" hizo acto de presencia. Hiashi Hyūga fue el nombre que apareció en la notificación de WhatsApp, eso lo extraño bastante porque era poco común que alguien llamara por el nombre a uno de sus padres. Dejo el teléfono de lado, convencido de que lo mejor era no violar la privacidad de su esposa. Peroooo, su segundo apellido era curiosidad y aquel aparato había vibrado dos veces más después de haberlo dejado sobre el colchón.

- Una miradita dattebayo – Decidió de que aquello no lastimaría a nadie y casi dio un brinco cuando la pantalla de desbloqueo cedió dándole paso a una foto de ambos en su luna de miel – Hermosa – Susurro encantado, medio empalmado, degustándose con la visión de su mujer en un lindo bikini blanco. Sin embargo, el encanto le duró nada cuando llego otra notificación – ¿Pero que mierda? –

1:05 a.m. Hiashi Hyūga: "Responde imbécil ¿Acaso también tienes problemas para escribir? ¿Tienes el mismo retraso en tus manos?"

1:05 a.m. Hiashi Hyūga: "Puedo estar así toda la noche, ¡Responde!"

Naruto vio todo rojo de ira, deslizo la pantalla a la bandeja de notificaciones y lo que encontró casi lo hace arrojar violentamente el teléfono contra la pared.

1:00 a.m. Hiashi Hyūga: Hola, necesito saber que ese orangután de Naruto no le hizo nada malo a mi heredero, el muy imbécil me ha roto la nariz y me han programado la cirugía para mañana porque la estúpida de tu hermana no pudo elegir un hospital con personal más ineficiente. Responde.

1:01 a.m. Hiashi Hyūga: ¿Acaso estas durmiendo? Se que no es así, vi a Hanabi escribiéndote hace rato. Responde.

1:02 a.m. Hiashi Hyūga: Hinata no tengo paciencia en estos momentos, tengo dolor y unas ganas terribles de asesinar a alguien. Responde.

1:03 a.m. Hiashi Hyūga: Te molere a golpes la cara si no me respondes en el siguiente minuto. Quiero que te alejes de ese patán para que cuando lo demande no tenga nada con que defenderse. Responde.

1:03 a.m. Hiashi Hyūga: ¿El retraso mental que tienes también te está afectando a la hora de responderle a tu padre? Te partiré los dedos en cuanto te vea ¡Responde!

1:04 a.m. Hiashi Hyūga: Imbécil, retrasada, estúpida, incapaz, inútil, hija de p…

Naruto no pudo seguir leyendo, todo a su alrededor se sentía borroso. Sus ojos intentaron enfocar cualquier cosa sin éxito alguno, tuvo que dejarse caer estrepitosamente sobre el colchón. ¿Todo eso…? ¿Desde cuándo Hinata llevaba soportándolo? Desbloqueo rápidamente el celular y se dirigió al numero de que tenía como registrado como Hiashi Hyūga, todavía no podía creer todo lo que acababa de leer, quizás fuera una broma de mal gusto.

El otro número contesto en el primer timbre.

- ¡Ya era hora pequeña retrasada! – Naruto apretó tanto sus dientes que estos rechinaron en protesta. Era la voz inconfundible de su… de ese bastardo – ¿Dime en donde estas? Enviare un coche por ti, demandare a Naruto y estoy seguro de que lo dejare en ruinas, lo único que necesito es que desaparezcas de su lado, no quiero que el juez que lleve el caso ponga alguna resistencia en fallar a mi favor solo porque la retrasada de la familia se fue con ese imbécil, justo después de que me mandara al hospital. Así que dime ¿En dónde carajos estas? – Hiashi lo interrumpió antes de que pudiera responderle – Y sin tartamudear, te juro por dios que si lo haces te romperé la boca – Naruto respiro varias veces, en un intento de tranquilizarse –

- Y yo te juro que, si te acercas a ella, si respiras su mismo aire, te cortare la polla y hare que te la tragues – Naruto oyó un leve grito al otro lado –

- ¿Cómo te atreves? ¿En dónde está mi hija? – El castaño ignoro su amenaza, pero para el rubio no pasó desapercibido el leve temblor en su tono de voz – Ella ya no tiene nada que ver contigo –

- Hinata es mi mujer y seguirá siéndolo para siempre – Naruto suspiro, dejando salir parte de su enojo – La niña que lleva en su vientre también es mía – Apretó sus puños – Y si crees que permitiré a un bastardo loco como tú en sus vidas estas muy equivocado porque, si intentas acercarte una vez más a nosotros, será lo último que hagas en tu patética vida. Yo mismo me encargare de borrar tu insignificante existencia de la faz de la tierra – Colgó sin dejarlo responder. Se levanto de un salto y corrió hasta la habitación donde su esposa tarareaba dulcemente una nana. Necesitaba verla y consolarla, ahora las cosas estaban un poco más claras para él, ahora entendía porque Hinata se negaba a hablar. Hiashi era un monstro, uno terrible – ¿Nena? – Pregunto nervioso, de repente la imperiosa necesidad de saber que Hinata estaba bien se apodero de su cuerpo –

-D-Dime…- Naruto suspiro, bastante aliviado de oír su voz –

- ¿Puedo pasar? –

- Adelante… - Hinata estaba sentada en el enorme Yacusi, rodeada de un sinfín de burbujas. Tenía el semblante relajado, se veía menos tensa. Naruto decidió que no perturbaría su paz, de ahora en adelante él se encargaría de mantener a raya al imbécil de su padre. Había ido allí con toda la intensión de contarle la discusión que mantuvo con Hiashi, pero, al ver su rostro resolvió dejarlo para después –

- ¿Tienes hambre? – Miro el celular en su mano, esa era la excusa perfecta de porque había ido allí – Conozco un restaurante que está abierto y no les molestará traernos la comida hasta aquí –

- ¿E-Estas seguro? – Parecía sorprendida y él no podía culparla, eran cerca de la una de la mañana –

- Claro – Sonrió, brindándole confianza. Desbloqueo y marco el número que se sabía de memoria – ¡Hola Ayame! – Saludo alegremente a la mujer a otro lado de la línea - Me gustaría ordenar un ramen miso con una porción extra de "Naruto" y… – Bajo el celular a la altura del pecho para preguntar – ¿Qué tipo de ramen te apetece cariño? –

- Quiero una hamburguesa, si no es mucha m-molestia– Naruto asintió, considerando que una hamburguesa era inofensiva – ¿N-Naruto? –

- Esta bien nena – Se llevo el aparato de regreso al oído – Ayame, sé que no es tu especialidad, pero te estaría eternamente agradecido si de camino pudieras conseguir un par de hamburguesas – Espero unos segundos en silencio –

- Padre dice que estaría encantado de prepararle cualquier cosa que desee al héroe que salvo su restaurante de la quiebra – Las mejillas de Naruto se sonrojaron por el cumplido; invertir en ese humilde restaurante se estaba convirtiendo en el mejor negocio de su vida – Entonces serian dos platos de ramen miso, con una orden extra de "Naruto", y dos hamburguesas…-

- ¡Cortesías de la casa! – Se escucho a lo lejos –

-Padre dice que…-

- Lo se Ayame, el viejo es el mejor – Dio detalles de la dirección del hotel antes de colgar –

- ¿Compraste un restaurante? – El tono de voz que utilizo Hinata logro sorprenderlo. Sus ojos se abrieron enormemente mientras detallaba el rostro de su esposa. El miedo había desaparecido dándole paso a una resolución absoluta – ¿En dónde está ubicado? ¿Quién era su dueño? ¿Quién está llevando la contabilidad? – Naruto abrió la boca, indignado de que los negocios eran de lo único de lo que siempre hablaban cuando mantenían una conversación, sin embargo, algo hizo "clic" en su cabeza–

-Es un viejo restaurante, ubicado en una zona popular del centro de Tokio – El ceño de su esposa se frunció – Luego de que rompieras mi corazón en mil pedazos tras firmar los papeles del divorcio, camine bajo la lluvia durante horas y horas, esperando que alguien o algo acabara con mi sufrimiento – Eso era una vil mentira, en realidad se le había ponchado una llanta justo en frente de un viejo local de ramen que únicamente resaltaba en la zona comercial porque parecía que su estructura colapsaría en cualquier momento. Solo quería añadirle un toque de dramatismo y… ocultar el hecho de que él ignoraba como cambiar una llanta – Entre a cenar algo porque, por algún extraño motivo, luego de tu partida la comida de la casa me parecía insípida – Las mejillas pálidas de su esposa se tornaron de un rojo furioso. ¡Bingo! Sus sospechas se confirmaron en ese mismo instante. Hinata cocinaba para él. Toda esa comida deliciosa que llenaba sus entrañas era producida por las benditas manos de su mujer. Naruto la amo más–

- Q-Que r-raro- Murmuro desviando la mirada. Naruto sonrió enormemente, era adorable –

- Muy raro dattebayo – El rubio decidió seguirle la corriente – Juraría que teníamos los mismos cocineros de siempre – Hinata jugó con la superficie de la bañera – En fin, ese día encontré un modesto restaurante rodeador por edificaciones modernas. Me moría de hambre y te juro que probe el único ramen capaz de igualar en sabor al que preparaba el cocinero antes de que te fueras'tebayo – Hinata se mordió el labio e hizo un puchero que se le antojo adorable – Se me hizo curioso porque el lugar estaba en mal estado, cumplía las normas de sanidad apenas. Así que me pregunte ¿Cómo algo tan delicioso estaba oculto en esas viejas paredes que prácticamente se caían a pedazos? Hable con el dueño, un viejo muy amable, y con su hija, una jovencita encantadora – Un chispazo de celos se asomaron en los ojos de su esposa – Aunque claro, no tan adorable como mi mujer– Se agacho apoderándose de sus labios en un beso que los hizo temblar a ambos – ¿En que estábamos? – Susurro con voz ronca – ¡Ah si! – Le acaricio las mejillas, deleitándose con la suavidad de su piel – Hable con ellos y me explicaron que en un comienzo se negaron a vender cuando los grandes edificios se apoderaron del barrio, confiaron en que su deliciosa comida sería suficiente para mantenerse a flote –

- No fue así – Naruto asintió, dándole la razón –

- Es triste, pero el "progreso" termino absorbiéndolos. Cuando decidieron ceder ya era muy tarde porque los dueños de los nuevos edificios decidieron que no necesitaban un espacio tan reducido –

- Debieron ceder desde el comienzo – Murmuro ella – En un principio es difícil porque sientes que pierdes tu identidad, pero, al final, "adaptarse" a la situación resulta lo mejor – El tono de voz de Hinata se volvió melancólico. Naruto supo que eso era lo que ella tuvo que hacer para sobrevivir – ¿Entonces decidiste comprar un restaurante que se caía a pedazos solo porque su ramen es un poco mejor al que yo… al que el chef de nuestra casa cocinaba? – El asintió, pareciéndole encantador como se corrigió casi de inmediato –

- Compre ese restaurante porque el ramen que hacían allí era lo más parecido que había probado desde que te marchaste de nuestra casa – Sumergió una de sus manos entre las burbujas, confirmando que la temperatura del agua seguía estando lo suficientemente caliente – El sabor del ramen me recordaba tanto a ti, a nuestro hogar, que no iba a permitir que algo tan tonto como el dinero fuera impedimento para seguir deleitándome con sus recetas –

- Naruto – Las manos femeninas le tomaron el rostro –

- Iré a preparar todo para cuando llegue la comida – El rubio le beso la palma antes de inclinarse para besarle la frente – Trata de no quedarte adentro hasta que se enfríe el agua, odiaría que te resfriaras por mi culpa –

Salió del baño antes de que Hinata pudiera responder algo. Estiro sus músculos y posteriormente se acostó en la enorme cama. Todo iba fluyendo lentamente entre ellos. Él poco a poco iba entendiendo el comportamiento de Hinata y le sorprendía que ella tan siquiera hubiera podido salir adelante con el pedazo de mierda que tenía como padre. De solo imaginársela sola, siendo una niña, en manos de ese hombre… de solo imaginársela se le revolvía el estómago. Hinata era una persona maravillosa y él había tardado un montón en entenderlo. Ella era incapaz de expresar muchas cosas hablando, la razón era simple: tenía miedo y todo porque creció con miedo a las repercusiones que podrían acarrear su condición. Naruto tenía la sospecha de que el maltrato que sufrió no solo se había limitado a lo verbal. En ese momento la imagen de Hinata encogiéndose en su sitio luego de algún movimiento inesperado a su alrededor cobro sentido de repente. Hiashi le había golpeado. Estaba seguro de eso. Tan seguro como que su esposa le había sido fiel hasta el final.

– ¿Es mi bebe? – Pregunto al aire, decidido a dejar de lado los oscuros pensamientos del pasado de Hinata y cubriéndose los ojos con su antebrazo. La duda lo consumía a medida que pasaba tiempo a solas. Era en serio cuando decía que se convertiría en su hija. independientemente de que no llevara su sangre. Hanabi le había asegurado que Hinata no sería capaz de acostarse con ningún otro hombre y ellos habían compartido sexo unas semanas antes del divorcio, tal vez uno de sus "nadadores" consiguió colarse entre el régimen estricto de anticonceptivos que Hinata manejaba; después de todo ningún método era considerado cien por ciento seguro –

- No lleva tu sangre, Naruto – La voz de Hinata lo sobresalto. Se sentó rápidamente en la cama para encontrarse con la imagen de una diosa; Hinata estaba de pie enfrente de él y solo llevaba una de sus camisas puesta. La piel todavía estaba sonrojada y el cabello lo tenía sujeto sobre su cabeza con una toalla. Las gotas de agua lentamente volvían trasparentes la prenda de algodón dándole una gloriosa vista de su delantera y, tal como supuso, sus senos se veían más grandes, jugosos, apetecibles. Trago saliva al notar los pezones rosados un poco más regordetes. Siguió bajando la mirada solo para encontrarse con una tripa que, sin tanta ropa de por medio, se veía exquisita. Sintió un tirón en sus pantalones y empezaron a estorbarle. Visualizo el reloj en la pared y vio que solo habían pasado cinco minutos desde la llamada. Todavía tenía veinticinco minutos antes de que llegara su pedido, veinticinco minutos que él pensaba aprovechar muy bien – ¿N-Naruto? –

- Hum… - Contesto distraídamente, empezando a desabrocharse los primeros botones de la camisa –

- ¿S-Si me e-escuchaste? – Desato su corbata y la arrojo a cualquier sitio; se sentía caliente de la nada, muy caliente. Dejaría de lado sus problemas de momento y se concentraría en el cuerpo de su mujer –

- Sip – Era una mentira blanca, se había quedado sordo tras darle el primer vistazo a Hinata. Lentamente se deshizo de sus prendas superiores, quedándose únicamente con sus pantalones e interiores –

- ¿P-Porque te e-estas d-desvistiendo? –

- Porque te voy a hacer el amor – Contesto con simpleza, saliendo, por fin, de su estorboso pantalón. Su polla se lo agradeció un poco, ahora solo era retenida por unos finos interiores de color blanco. No le sorprendió para nada encontrar una mancha de líquido precum; el cuerpo de Hinata lo ponía a mil, embarazada o no, él la encontraba perfecta – Mira cómo me pones, nena – Se recostó en la cama y empezó a acariciarse a sí mismo, primero paso sus manos por su pecho y abdomen antes de posarlas sobre el bulto que sobresalía entre sus piernas; todo esto bajo la hambrienta mirada de su futura esposa – ¿Te importaría ayudarme con esto? – Sin preámbulos se la saco – Ven mi amor…- Palmeo su pecho, seguro de que ella captaría exactamente en donde la quería y no se equivocó; Hinata se posó sobre su pecho, dándole, de paso, una majestuosa imagen de su espalda ya desnuda. Hizo de lado su cabello azulado antes de acariciar toda su extensión de arriba hacia abajo. En respuesta unas delicadas manos agarraron con firmeza su polla antes de iniciar un vaivén lento y duro, justo como le gustaba – Joder… que rico – Hinata respondió moviendo su culo un poco hacia atrás y Naruto lo entendió de inmediato; alzo las caderas ansioso por lo que venía – ¡M-Mierda! – La boca de Hinata se sentía caliente y húmeda, su pequeña lengua lo estaba enloqueciendo mientras se arremolinaba en la punta de su polla para después bajar tanto como su hermosa tripita se lo permitía. Sus ojos se pusieron en blanco al sentir toda la punta adentro de su cavidad y como sus manos trabajaban lo que no podía llevar a su boca – ¡H-Hinata! – Iba a terminar antes de tiempo, sus bolas empezaron a cosquillear en señal de que pronto sucedería, y él no lo permitiría, el único lugar en el que su semilla iba a ir de ahora en adelante sería el prieto y delicioso coño de su mujer -

- ¡Naruto! – Hinata se quejó en el instante en que él decidió que era suficiente. Le halo delicadamente la cabellera antes de posar su culo en la cama, sintió como su polla lloriqueo un poco por eso, pero lo dejo pasar, era el momento de su festín. Sin perder mucho tiempo la recostó de forma delicada sobra la cama; se posó sobre ella, cuidando siempre de no presionar de más el abultado vientre de Hinata, y salivo antes de besarla con toda la pasión que tenía retenida. Sus labios se movieron casi que con salvajismo. Hinata respondió de la misma manera, sorprendiéndolo gratamente al iniciar ella el encuentro de sus lenguas – Te amo – La oyó susurrar entre besos y eso lo prendió aún más. Se sostuvo con uno de sus brazos mientras apartaba con la otra unas hebras traviesas que se colaban en su camino-

- También te amo – Le sonrió antes de bajar, rápidamente se llevó un polvoriento pezón a la boca; lo chupo y saboreo hasta que la oyó lloriquear de placer, solo entonces le dio la misma atención al otro. Hinata se retorcía de placer, arañándole un poco el cuello en el proceso. Naruto ignoro el leve escozor soltando su pecho con un sonoro "Plop" iniciando un camino de besos húmedos hacia abajo, solo deteniéndose en la punta de su tripita – Lo siento Shion, papá te sacudirá un poco – Le dio un beso justo en el lugar en el que su hija se desarrollaba con normalidad y, sin mucha ceremonia, le abrió las piernas para posar su boca justo sobre aquel apretado agujero que solo le pertenecía a él – Mi dulce coño, no sabes cuánto te extrañe –

- ¡Naruto! – La boca de Naruto se prendió de su clítoris y Hinata se perdió en una nube de placer. Desde ese ángulo no lo podía ver, pero si sentía todo lo que le hacía. Por algún motivo eso la excito más. Gimió descontroladamente al sentir como era penetrada por uno de los traviesos dedos de Naruto, se sentía tan cerca, tan pero tan cerca, que grito frustrada cuando Naruto se separó–

- De medio lado mujer – Naruto sonrió complacido; Hinata hizo un adorable puchero antes de obedecerlo rápidamente; igual o incluso podía decir que más impaciente que él – Eres preciosa – Susurro en su oído, acomodándose detrás de ella, elevando una de sus piernas y acomodándose en la entrada femenina – Tu coño sigue igual de dulce y jugoso como siempre – La tentó un par de veces, metiéndole solo la punta antes de volverla a sacar. Recibió como recompensa unos deliciosos gemidos de la boca de su esposa – Estaba prácticamente llorando por mi polla ¿Verdad? – Hinata asintió con los ojos cerrados, perdida en una nube de placer – Joder, te amo tanto – Se hundió en ella con un suave, pero firme, enviste. A partir de ahí la habitación se vio inundada por gritos y gemidos que culminaron al unísono varios minutos después –

O-O-O-O

- ¿Qué acabo de escuchar? – La garganta de Hinata se cerró como otras tantas veces. La imponente figura de su padre sentado detrás del escritorio la hizo temblar- Repite el último párrafo – Sus manos temblaron mientras levantaban la última hoja arrugada. Ignoro olímpicamente los hilos de sangre que salían de sus palmas reventadas, estaba segura que su espalda se encontraba en peores condiciones y sentía su rostro inflamado debido a la última bofetada – ¡LEE! – Hinata brinco ante la rudeza utilizada por su padre. Trato de enfocar su visión, pero era en vano porque sus ojos estaban llenos de lágrimas. Retrocedió unos pasos en cuanto el cuerpo de Hiashi se puso de pie, caminando lentamente hacia ella – Ahora resulta que, además de ser una retrasada, eres muda– Hinata tuvo que morderse la lengua para evitar soltar una silaba entrecortada – Te enseñare que cuando yo te de una orden, debes obedecer –

- ¿Estas bien? – La voz de Naruto la sobresalto. Miro a su lado y se encontró con unos ojos azules llenos de preocupación– Lamento despertarte, pero parecía que estabas teniendo una pesadilla –

-Y-Yo… - Respiro intentando regular su respiración – Estoy b-bien – Trago saliva, desviando la mirada – Solo e-e-era un m-m-mal recuerdo…- Los dedos de Naruto se posaron en su mentón obligándola, suavemente, a verle a los ojos –

- ¿Te arrepientes? – Ladeo la cabeza sin entender. Para sorpresa suya, las mejillas de su exesposo se colorearon de un fuerte tono carmín – ¿De haber hecho el amor conmigo? – Fue su turno de sonrojarse – Dos veces-

- ¡N-No! – Negó con la cabeza fuertemente – ¡N-Nunca! – Naruto se recostó sobre la almohada, puso uno de sus brazos por debajo del cuello femenino impulsándola a pegarse más a su cuerpo. Hinata lo hizo sin dudarlo dos veces, acomodándose de medio lado mientras posaba una de sus piernas sobre los muslos de el– D-De verdad, t-también lo desea-aba – Naruto enredo una de sus manos en el sedoso cabello azabache, ahora un poco más revuelto. Hinata cerro los ojos, disfrutando de la caricia intima. El rubio sonrió de medio lado –

- Te gusta mucho, cuando te masajeo cualquier parte del cuerpo – Murmuró con ese tono de voz que la invitaba a pecar – Estaba preocupado, hicimos el amor y te dormiste antes de una segunda ronda– Su rostro se terminó de colorear – Siempre lo hacíamos dos o tres veces en una noche ¿Segura de que estas bien? ¿Quieres que llame a Shizune para confirmar que todo sigue en orden? –

- C-Claro que n-no – Busco en el rostro de Naruto algún signo de molestia o enfado, pero lo único que había allí era una mezcla de preocupación y… ¿Deseo? Su corazón latió alocadamente con esto último, todavía le resultaba un poco increíble que Naruto la siguiera deseando con tantos kilos encima – T-Te amo tanto– Se tapo la boca tan pronto lo dijo. Una cosa era decírselo en medio de gemidos de placer y otra muy diferente era mirándolo directamente a los ojos. Inconscientemente dejo escapar lo que llevaba sintiendo desde el primer instante en que lo conoció, cuando la ayudo desinteresadamente sin saber quién era ella. Hinata cubrió su rostro bastante a penada, quería salir de allí y esconderse debajo de una roca ¡Y Naruto no decía nada! El silencio se hizo incomodo al poco tiempo y solo era interrumpido por unos ¿sollozos? – ¿E-Estas bien? – El rubio lloraba dramáticamente sobre la almohada con el rostro semi oculto con una de sus manos. Hinata miro hacia todas las direcciones sin saber que hacer, ella no sabía nada de emociones, de hecho, se le daban fatal. De todas formas ¿Era tan malo que ella lo amara? ¿Acaso no se merecía sentir eso por nadie? Rápidamente la preocupación dio paso a la ira, con el embarazo los cambios de humor ya no le sorprendían, podía pasar de sentirse plenamente consigo misma a ser una mierda total. Lo sacudió levemente y, cuando este no paro de llorar, empezó a golpearle el pecho con un poco más de fuerza de la que se requería para consolar a una persona -

- ¡Duele mujer! – Naruto se levantó rápidamente, mirándola con reproche mientras se sobaba la zona afectada - ¿Qué un hombre no puede llorar tranquilamente de felicidad porque su amor es correspondido? – Se acostó otra vez, recostándola sobre su pecho –

- ¿Felicidad? – El rubio asintió, tomándola de los mofletes con la mano que tenía libre – ¿Sh-horabas de felishidad? –

- Claro que si…- La beso lentamente– Me hiciste el hombre más feliz del universo – Soltó su rostro para sobarle la tripa. Sonrió con satisfacción al sentir un leve movimiento de la beba – Shion también está feliz –

- ¿N-No te molesta? ¿Q-Que yo t-t-te ame? – Aclaro –

- Claro que no – Se apresuro a responder - ¿Por qué habría de…? – De repente el rostro del rubio cambio, todo rastro de felicidad desapareció – Se lo dijiste a Hiashi y se molestó ¿Verdad? – Hinata abrió los ojos sorprendida de que hubiera adivinado– Matare a ese bastardo – Juro entre dientes –

-Solo se lo dije una vez – Agacho la mirada, el sonido del golpe que recibió después aun resonaba en su cabeza – S-Se puso furioso – Sin querer una de sus manos viajo hasta su mejilla derecha, repasando el contorno de una pequeña cicatriz que le quedo en consecuencia del choque de la mano derecha de Hiashi contra su rostro. Naruto tomo su mano, inspeccionándola de cerca –

- ¿Hiashi te hizo esto? – Hinata asintió, sintiéndose avergonzada –Buscaremos una casa lejos de la de él– La abrazo contra su cuerpo, intentándole trasmitir seguridad. Hinata solo se dejó hacer – Si lo veo cerca de ti o de Shion lo matare – El rubio la sintió sollozar entre sus brazos. Naruto noto un escozor en la boca y era porque la única forma que encontró, para no estallar en maldiciones, fue morderse la lengua – Nadie te volverá a lastimar, te lo prometo – Hinata se pegó aún más a su cuerpo, dejando escapar, seguramente, parte del miedo que había sentido durante toda su vida – Y te juro por nuestra hija en camino y por todos los que vendrán, que jamás, oye bien, jamás te tocare con ira, ni me dirigiré a ti, o a ellos, con violencia – Hinata soltó un suspiro y termino asintiendo sin despegarse de él – Tenemos muchas cosas que aclarar, pero lo último que quiero es que hablemos sobre cosas que son difíciles para ti. Iremos paso a paso hasta que todo tu cuerpo entienda que nunca te lastimare –

- Q-Quiero contártelo t-t-todo – Aquello logro asombrarlo, Hinata dejo de esconder el rostro par mirarlo directamente a los ojos – Siempre he querido hacerlo –

- Lo harás – La beso lentamente – Comeremos primero ¿Estás de acuerdo con eso? – Un rato más tarde Naruto adormitaba sobre uno de sus costados mientras veía a Hinata comer. Hinata estaba radiante luego de hacer el amor, cubierta, únicamente, por un buso de algodón. Después del segundo orgasmo juntos, porque al final no pudo resistirse a tomarla otra vez, la puerta empezó a sonar insistentemente anunciando la llegada de la cena improvisada que iban a tener. Tan concentrado estaba en darle placer a su esposa, bueno futura esposa, que poco y nada le falto para salir desnudo a despachar al mensajero del Restaurante de Ramen Ichiraku y volver a la vigorosa labor carnal que estaba llevando a cabo. De mil amores hubiera seguido, porque para él no existía algo más placentero que sentirla corriéndose en su polla y bañándolo en sus jugos, pero el estómago de Hinata escogió ese preciso instante para resonar en la habitación. Hinata soltó una risa tímida, que lo contagio a él, y ambos terminaron riéndose, olvidándose, por un momento, de la tensión que aun parecía rodearlos.

Dos hamburguesas después, Hinata fue a por su segundo plato de ramen, que inicialmente era para él. Naruto decidió cedérselo y ahora lo devoraba lentamente haciendo pequeños ruidos de satisfacción.

-El viejo Teuchi le puso una porción extra de cerdo…- Ella asintió complacida, sorbiendo unos fideos de manera ruidosa – ¿Quieres un poco de agua? –

- Si, por favor – Naruto se levantó de la cama y casi que corrió hasta la pequeña nevera con la que venía la habitación –

– ¿Con gas o sin gas? –

-Con gas, si no te molesta – El rubio negó con la cabeza, había olvidado el nivel de cortesía que manejaba Hinata –

-No es ninguna molestia – Tomo la botella más grande que encontró; decidido a seguir con las recomendaciones de Shizune desde ya – Ten – Se la dio ya destapada antes de ponerse a su altura y darle un beso en la frente, logrando un sonrojo instantáneo en el rostro de Hinata – Debes beber un poco más de agua –

- T-Tienes razón – Murmuro dando un par de sorbos –

- Hablare con Chōji mañana, estoy seguro que te dará una cita y estará feliz de vernos juntos–

-Tal vez de verte a ti…- Murmuró para ella misma, pero Naruto la alcanzo a oír–

- ¿Quieres que hablemos sobre eso primero? –

- ¿Eh? – Se hizo la desentendida, sorbiendo unos de fideos – Que delicioso esta esto –

- Oí lo que dijiste, nena – Se sentó en la cama, frente a ella – También sé qué crees que no le agradas a mis amigos-

- No creo eso – Hinata se estiro todo lo que le era posible para depositar el cuenco vacío en una de las mesitas que adornaban la habitación. Naruto la ayudo con eso ultimo y ella se lo agradeció con la mirada – Estoy segura de que n-no les agrado – Se sobo la tripa – Ni a tu madre, he tratado con tu padre solo asuntos relacionados con tu empresa, así que no se si mi compañía es de su agrado – Naruto hizo una mueca al oír a Minato, no obstante, se abstuvo de decir algo sobre él. Ya llegaría el momento –

- Tal vez mis conocidos sienten cierta reserva hacia ti – Reconoció – Pero te hiciste amiga de la mayoría, por ejemplo – Añadió al notar el ceño fruncido en el rostro de Hinata – Solías ir de compras con Ino y Sakura, también te ejercitabas con el Cejotas, incluso promoviste la excavación arqueológica de Gaara –

- B-Bueno – Hinata desvió la mirada – Q-Quizás te mentí un poco con e-eso de ir de compras –

- ¿Me mentiste? – Pregunto sorprendido –

- ¡N-No parabas de insistir en que debería ir con ese par! Y la verdad es que… - Trago saliva – Una vez acepté ir y de lo u-único que h-hablaron mientras estuve con e-ellas fu-fue de t-t-todas las n-novias que t-t-tuviste en t-tu adolescencia – Naruto las maldijo internamente – Y de lo feliz que fuiste con cada una de ellas – Dijo eso último en voz baja, agachando la mirada – C-Con respecto a lo de Gaara l-lo hice porque la arqueología se puso de moda y empezó a generar mucho dinero, c-casi ni hablamos – Naruto negó con la cabeza, incluso Gaara le había mentido. No del todo, pero para él las mentiras a medias eran mentiras, al fin y al cabo –

- ¿Y el Cejotas? –

- A-Aunque Lee-san es muy amable, nunca hicimos deporte, de hecho, de las pocas veces que salimos, fuimos a beber porque estaba despechado debido a todo el asunto con la m-madre de Metal-kun–

- ¿Tu? ¿Bebiendo con el Cejotas? ¿Acaso querías morir? –

-B-Bueno é-é-él me acompañaba a b-beber, s-siempre fue m-mi conductor elegido – Naruto se preguntó internamente ¿Por qué carajos Hinata había salido a beber? ¿Era su culpa? Una breve mirada a su rostro le dio a entender que si –

- ¿Y qué hay de Toneri? – Hinata elevo una de sus cejas, ya se habían salido de su íntimo círculo de amigos –

- H-Hiashi quería que me casara con él – Naruto tosió ante la repentina e inesperada respuesta – Él sabía que n-n-nuestro matrimonio i-iba de m-mal a peor, p-por lo que me h-h-hizo v-varias c-citas a c-ciegas con Toneri –

- ¿Y tú aceptaste? – Reprocho –

- Más o menos, H-Hiashi me dijo que solo se trataban de algunos negocios, quería que evaluara la hipotética unión entre la compañía de Toneri y Hyūga Corp. –

- ¿No te diste cuenta de sus intenciones? – Vale, estaba celoso. Que Hiashi hubiera intentado interponerse entre ellos fue un golpe bajo y rastrero hasta para una cucaracha inmunda como él–

- Soy pésima analizando situaciones que no estén relacionadas con los negocios. Creí, hasta el último minuto, que la "Unión" entre las empresas se limitaba solo al ámbito laboral. Descubrí sus intenciones cuando me pregunto por nuestro d-d-divorcio – La última palabra salió como un susurro – E-En ese entonces creía q-q-que teníamos u-una oportunidad, así que lo rechace y-y le d-deje en c-claro a mi padre que n-no v-volvería a c-caer en su j-juego –

- ¿Volver? – Hinata suspiro de nuevo – ¿Cómo que volver? –

- N-Naruto debes entender algo – Hinata se acercó hasta quedar frente a él – J-Jamás p-pretendí otra c-cosa que a-ayudarle a tu padre a salir del mal momento en el que estaban, mis intensiones eran buenas, pero H-Hiashi logro manipularlo todo a su favor y a-al final f-fue demasiado lejos – El rubio la miro sin entender y Hinata utilizo todo su autocontrol para hablar lo más claramente posible – Tu padre sufrió un desfalco económico gigantesco por parte de uno de sus socios – Naruto abrió la boca pero ella le impidió hablar adquiriendo ese semblante frio que utilizaba para manejar todos sus negocios – Y, cuando digo gigantesco no me refiero a unos cuantos millones, me refiero casi al setenta por ciento de toda su capital. Era un amigo cercano, además de ser el contador de la empresa, y Minato-san nunca sospecho nada, cuando se dio cuenta de todo ya era demasiado tarde; ese hombre se fugó con una gran fortuna. Tu padre estaba desesperado, prácticamente la empresa que tanto amaba, se hundía como una roca en el mar, busco muchas salidas sin éxito; todos le dieron la espalda. Como era de esperarse, ningún banco se arriesgó en prestarle dinero, o bueno, la cantidad desorbitada que el señor Minato pedía– Hizo una pausa evitando a toda costa mirar el rostro de Naruto– Y-Yo me entere de todo en una cumbre de banqueros, quiero decir, me entere que tu padre estaba buscando una mega inversión para su próxima línea de microprocesadores.

-¿No te pareció extraño? –

-Mucho- Acepto ella – Fue un poco difícil averiguar toda la verdad, a pesar de que la noticia estaba a punto de estallar en los medios, tu padre logro manejarlo todo con perfecto hermetismo. Muchos empleados amenazaron con renunciar porque tu padre simplemente era incapaz de pagar sus nóminas –

- ¿Qué hiciste? – Hinata se encogió un poco por el tono frio que utilizo Naruto, continúo hablando y explicándole todos los detalles de la situación en la que encontró la empresa. El rostro de Naruto se descomponía a medida que las palabras iban saliendo de la boca de Hinata, todo aquello le parecía una cruel broma, pero el rostro carente de expresión de su esposa le dio a entender que era verdad. Algunas cosas empezaron a tomar sentido, el cierre temporal de sus cuentas de ahorros, la repentina venta de las propiedades que tenían en Estados Unidos, incluso la venta de un restaurante que tenían ubicado en las mejores calles de New York. Minato le había mentido diciéndole que todo se debía a una futura negociación con una empresa que le exigía capitales iguales, nunca había dudado de la palabra de su padre, actuó sin cuestionarlo ni una sola vez ¡Que ingenuo fue! – ¿Hiashi te obligo a casarte conmigo para inyectarle dinero a NamikazeCorp? –

- ¡N-No! – Eso lo sorprendió, Hinata desvió la mirada y trago saliva sonoramente. Naruto sabía que le costaba hablar de eso, pero el necesitaba la verdad – H-Hiashi jamás quiso intervenir ni ayudar a tu padre. H-Hiashi quería comprar lo que quedaba de NamikazeCorp para venderlo a un bajo precio y sacar del juego a un rival directo. Sabes que soy dueña de un banco, en esa época no era tan importante como ahora, pero quería arriesgarme ofreciéndole un préstamo lo suficientemente grande como para pagarle a sus empleados y para que se mantuviera a flote mientras la siguiente línea de microprocesadores salía a la venta. Sabía que si lograba mantenerla se recobraría por completo porque marcas muy reconocidas de china, Japón y Estados Unidos estaban detrás de ello. Nos reunimos varias veces antes de cerrar el trato; el préstamo iba a ser por dos años con unos intereses bajos. Todo iba de maravillas hasta que H-Hiashi se enteró, toda la situación lo enfureció e hizo lo imposible para deshacer nuestro trato –

- No lo termino de entender dattebayo – Se rasco la cabellera confundido y un poco molesto; sentía que Minato le había visto la cara todo ese tiempo –

- H-Hiashi se encargó de conseguir información confidencial de NamikazeCorp– Los ojos azules de Naruto se abrieron sorprendidos – La información resulto ser toda la contabilidad de tu empresa, Minato era consciente del robo, pero desconocía si la empresa se había visto envuelta en algo ilegal. H-Hiashi realizo su jugada un día antes de que tu padre y yo firmáramos el préstamo y nos juró que filtraría todos los documentos a los medios de comunicación si no actuábamos como él quería –

- Mierda – Hinata estuvo de acuerdo –

- Amenazo a tu padre con contarlo todo a la prensa. Él estaba furioso con todos porque, según su manera de pesar, le estábamos jugando sucio directamente a él – Naruto trago saliva imaginando todo el desastre que eso hubiera significado para su familia- Fue imposible para Minato revisar con antelación si su contador los había involucrado en negocios turbios, pero no se podía arriesgar. H-Hiashi lo dejo sin opciones –

-Ese maldito infeliz – El rubio respiro varias veces, intentando calmarse – ¿Cómo entras tú en todo esto? – Hinata no se veía como la pieza para encajar todo el rompecabezas que habían armado entre sus padres –

- Él estaba muy resentido, furioso porque iba a ser yo, precisamente, quien sacaría de un apuro a un rival directo –

-Debió estar furioso – Comento con una sonrisa sarcástica – Tu y mi padre pretendían salvar a la competencia con el capital de Hiashi –Naruto sabia lo mucho que significaba el dinero para un hombre como Hiashi Hyūga, en ocasiones llego a pensar que ese sujeto vendería a su familia entera si eso significaba conseguir una fortuna mayor a la que ya poseía. Si todo lo que Hinata le decía era cierto, la cantidad de dinero que tendría que salir de las arcas de Hiashi era exorbitante –

- ¿Quién hablo del dinero de ese hombre? – Hinata se levantó de la cama furiosa. Empezó a caminar por toda la habitación bajo la atenta mirada de Naruto – Hiashi solo estaba dispuesto a comprar la empresa y lo que le ofrecía a Minato no era ni siquiera era la mitad de lo que mi Banco estaba dispuesto a prestar – Recordarlo todavía la ponía de mal humor – ¿Estas oyendo todo lo que te estoy diciendo? –

- Aunque hayas comprado la cadena Bancaria con el dinero de tu herencia, al final de cuentas termina siendo dinero de tu padre – Hinata se detuvo de repente para arrojarle una almohada a la cara – Auch ¿Eso porque fue? –

- ¡Era mi patrimonio! – Naruto la miro sin entender –

- Tal vez lo sea ahora – Dijo utilizando un tono de voz mediador– Pero tú le pediste la parte de tu herencia tu padre ¿Me equivoco? –

- ¡Si! – Le arrojo una segunda almohada con un poco más de fuerza antes de sentarse en el borde de la cama – ¿Eso les dijo ese hombre? – Hinata se llevó una mano a la frente y la masajeo tratando de disipar el repentino dolor de cabeza que había empezado a sentir –N-Naruto, H-Hiashi j-jamás me ha dado dinero, n-ni un centavo. T-Todo lo que tengo, todo lo que ves e-es fruto de mi esfuerzo – Naruto se recostó de medio lado, empezando un leve masaje en la parte baja de su espalda tratando de disipar la tensión que se acumulaba en su cuerpo –

- ¿Hasta qué punto? – Hinata suspiro, evitando su mirada y concentrándose en la suave brisa del aire acondicionado – Nena necesito saberlo, porque lo último que deseo es deberle algo a ese bastardo infeliz –

- ¿D-Deseas saberlo todo? –

-Si – Hinata suspiró, sintiendo como un nudo se formaba en su boca –

- Te lo diré, s-solo déjame hablar s-s-sin interrupciones – El rubio le dio un firme asentimiento presintiendo que lo que le iba a contar era difícil para ella –Yo me e-escape de casa l-luego d-de terminar l-la secundaria – Los ojos de Naruto se abrieron tanto que Hinata pensó que se le iba a salir. Frustrada se dejó caer suavemente en la cama, teniendo cuidado con la enorme panza que limitaba sus movimientos – V-Viví u-un infierno con mi p-padre m-mientras c-crecía – Oculto su rostro con sus manos, intentando controlar los temblores que le producían los recuerdos de su oscura infancia – H-Hiashi me aisló del m-mundo desde que supo que era una t-tartamuda porque t-temía que lo a-avergonzara en frente de s-sus conocidos. C-Cuando por fin me dejo asistir a la escuela, como una persona n-normal, trabaje a escondidas en una cafetería c-cerca de donde estudiábamos, t-todos los días hasta el cansancio – Incluidos los fines de semana, pero no lo menciono – Hui el día siguiente después de nuestra graduación. Tome mis ahorros y deje todo a-a-atrás – Sintió las manos de Naruto sobre su cuerpo en un intento de reconfortarla – Jamás asistí a la universidad, me dedique única y exclusivamente a trabajar – Las manos del rubio se detuvieron abruptamente luego de la confesión, definitivamente lo pillo con la guardia baja –Trabajaba en muchas cosas, como mesera, cajera, incluso de ayudante de cocina. El primer año f-f-fue e-el peor porque ignoraba muchas cosas sobre cómo funcionaba realmente el mundo, pero, en medio de todo, m-me di c-c-cuenta que m-m-mi c-condición n-no era u-una enfermedad c-como Hiashi me h-hizo creer desde q-que era una n-niña. A-Aprendí a c-controlarla un poco y s-solamente h-hablaba lo necesario. presente el examen para poder dedicarme a la venta de bienes raíces. En ese entonces la compra y venta de propiedades estaban en el punto más alto. Pude hacer una pequeña fortuna gracias a eso, pero jamás me detuve ahí. Quería mucho más, en el fondo creo que intentaba demostrarle a mi padre que todo aquello que él me decía mientras me g-g-golpeaba era falso – Apretó sus puños contándole absolutamente todo–

Le conto desde el inicio, cuando descubrió que era diferente al resto. Hinata recordaba cada golpe, cada insulto.

Le contó sobre cómo se dio cuenta rápidamente que a su padre le gustaba la perfección. Todo lo que fuera perfecto le resultaba extrañamente satisfactorio al joven castaño de pelo largo, fue por eso que ella, a una tierna edad, comprendió que algo menos que la perfección estaba prohibida.

Hinata aprendió a valerse por sí misma a pesar de estar rodeada de sirvientes que le cumplirían hasta el mínimo capricho. Incluso todavía llegaban a su memoria leves destellos de una mirada masculina llena de satisfacción cada vez que ella le mostraba algo nuevo que había aprendido. Todo fue de maravilla en sus primeros cuatro años, Hiashi estaba encantado de presumir las habilidades de su hija a cuanto socio llegaba a la mansión. Sin embargo, la situación cambio en el instante en el que una de sus tantas visitas menciono la falta de palabras en ella. A Hinata la podían calificar de todo menos de estúpida, de eso no tenía ni un pelo. Ella supo, de inmediato, que tenía un serio problema al momento de hablar, cuando fue su quinto cumpleaños y descubrió que la mayoría de niños, por no decir todos, hablaban torpemente, pero de forma fluida, algo que Hinata era incapaz de hacer. Por eso practicaba todas las noches frente a un espejo y procuraba solo decir un par de palabras en presencia de su padre.

Su joven mente jamás imagino que Hiashi reaccionaria con tanta violencia la primera vez que la hizo leer una página de un libro en frente suyo. No fue una sola bofetada, de hecho, ni siquiera fueron bofetadas. Fueron tres puños en su boca que le derribaron dos dientes flojos y uno que todavía estaba duro. Hiashi no se disculpó, solo le ordeno que recogiera el desastre que había ocasionado y desapareciera de su vista. Hinata lloro toda la noche, su llanto solo se incrementó con el pasar de las horas.

-A-Así fue como e-empezó – Hinata alzo una mano y la puso en frente del rostro de Naruto – T-Todos los días me hacía leer en frente suyo un artículo nuevo del periódico. C-Cada vez que me e-e-enredaba me golpeaba la palma de la mano con una r-r-regla de madera q-que guardaba en su escritorio. A-Al final de cada sesión de aprendizaje, como H-Hiashi las llamaba, c-contaba t-todos los e-errores que, según él, había cometido. El total seria l-la cantidad equivalente al n-n-número de azotes que r-recibiría en la e-espalda. E-Eran muchos errores – El rubio soltó un suspiro entre cortado. Hinata no se atrevió a mirarlo a los ojos – T-Tenia t-tantas cicatrices e-en la e-espalda al crecer q-que cuando decidí removerlas, el cirujano plástico c-creyó que y-y-yo h-h-había sido la esclava d-de algún millonario p-p-pervertido – Soltó una risa vacía ante su intento de broma – Todos los días fueron una pesadilla, h-habían ocasiones en l-las que ni siquiera po-podia hablar, eso l-lo enfurecía mucho m-más, se v-volvía m-más violento, p-pero al menos e-e-evitaba la tor-tortura psicológica, que significaba para m-mí, estar parada delante de H-Hiashi por h-horas leyendo–

-Hinata – Ella negó con la cabeza, quería decírselo todo, necesitaba hacerlo –

-Entonces nació Hanabi – Los ojos de su mujer se iluminaron. Naruto guardaba silencio manteniendo sus manos convertidas en puños, de lo contrario, estaba seguro de que buscaría a Hiashi y le partiría cada hueso de su asqueroso cuerpo – L-La relación con mi m-madre e-era inexistente, yo ni siquiera sabía que estaba embarazada hasta que un empleado me felicito por el nacimiento de mi h-hermanita – No menciono que su padre despidió al pobre hombre solo por eso. Hinata nunca lo volvió a ver – Luego del nacimiento de Hanabi, mi madre se marchó – Hinata se giró del lado contrario de Naruto, buscando comodidad – Una vez oí a unas empleadas hablar de como el matrimonio de mis padres era un negocio, que prácticamente Hiashi había "alquilado" dos veces el vientre de mi madre y que ella se largó cuando considero que su parte del trato ya estaba hecha. Jamás me atreví a preguntarle que fue de ella, tampoco era como si me interesara – Un brazo de Naruto se pasó por debajo de su cuello mientras se acomodaba de "cucharita" a sus espaldas – H-Hiashi n-no deseaba que conociera a Hanabi, creía que si la bebe me escuchaba "balbucear" seguramente se le pegaría y saldría igual de retrasa- Antes de que pudiera continuar Naruto la giro hacia él besándola con posesividad –

- Nunca vuelvas a repetir sus insultos – Le beso los labios con vehemencia – Quisiera borrar cada mal recuerdo de tu mente – Hinata estuvo de acuerdo –

- H-Hiashi hizo hasta lo imposible para evitar que Hanabi y yo fuéramos cercanas. La primera vez que la pude ver de cerca fue cuando ella ya tenía un año – Naruto tenía miedo de formular la siguiente pregunta, pero aun así lo hizo. Necesitaba saber la magnitud de los actos de Hiashi y de qué manera tomaría venganza… oh si… él le iba a hacer pagar con creces cada uno de los malos tratos –

- ¿Cómo consiguió manteros alejadas? – Se arrepintió inmediatamente después. Hinata oculto la mirada tras el flequillo y apretó los labios en una línea firme –

- É-Él me encerró en u-una p-parte de la mansión y-y-y solo los empleados t-tenían a-acceso a e-ella. Me prohibió asistir a las escuelas normales, m-mi infancia fueron un sinfín de profesores privados a los que Hiashi l-les había autorizado cualquier "método" de aprendizaje –

- Me imagino que eso significó más golpes para ti –

- No eran nada comparados con los de mi padre – Hinata le acaricio el rostro, hipnotizada con el azul intenso de sus ojos – A pesar de todo lograba escabullirme al cuarto de Hanabi, la mayoría de veces dormía, pero eso era como un bálsamo para mi corazón – Delineo los gruesos labios de su esposo, su único amante – Mientras iba creciendo pude enseñarle muchas cosas, lo último que deseaba era que ella pasara por algo parecido. Fue u-un verdadero alivio c-cuando empezó a hablar fluidamente, s-sin trabarse – Naruto le acaricio el vientre con una mano y con la otra empezó a masajearle la cabeza – H-Hana c-creció como una niña segura y l-las palizas d-disminuyeron un p-poco. H-Hiashi hubiera seguido, n-no sé hasta qué punto, si ella no hubiera intervenido –

- ¿Tu hermana? – Hinata asintió –

- Hanabi siempre fue muy perspicaz. Una tarde, al llegar del colegio, me encontró ensangrentada e inconsciente en mi cuarto. S-Siendo sincera; olvide lo que paso ese día, pero, por lo que me conto un mayordomo que sirvió en esa mansión durante décadas, Hanabi peleo por mi causa y confronto a mi padre con argumentos que ni siquiera él pudo r-refutar – Hinata podía imaginar a su pequeña hermana de ocho años enfrentándose a ese hombre. La imagen mental que tenia de ese día la llenaba de amor– Al día siguiente me comunicaron que empezaría a asistir a un colegio privado. I-Iba a ser la primera vez que e-estaría rodeada de gente, m-me daba mucho pánico y emoción al mismo tiempo –

- Tenias catorce – Naruto la recordó, totalmente cubierta por el saco del colegio y tan rígida que parecía que se rompería en cualquier instante – No hablabas mucho, de hecho, nunca te oí hablar –

- N-No todo fue color de rosas – Apunto – H-Hiashi se encargó de atemorizarme todas las noches con darme una paliza si me atrevía a avergonzarlo –

- ¿Dejo de golpearte? –

- S-Si, creo que al final tenía miedo de que en la escuela se dieran cuenta de la clase de persona que era. Yo ignoraba que todo lo que me hacía era ilegal y por eso nunca le dije a nadie, pensé que él, siendo mi padre, tenía el derecho y deber de "corregirme" de la manera que fuera –

- Se que mi pregunta sonara estúpida, pero ¿Qué te motivo a escapar? – Hinata suspiro, no era para nada una pregunta estúpida –

- A-Accidentalmente lo o-oí hablando por teléfono con un hombre mayor, h-hablaba de c-como podría ser "suya" t-tan pronto me graduara. Planeaba o-ofrecerme de esposa a u-uno de sus socios como parte de pago en una alianza empresarial – Las caricias del rubio se detuvieron de repente – N-Ni siquiera e-esperaría a que c-cumpliera l-los dieciocho, p-planeaba d-deshacerse de m-mi –

- Lo voy a matar – Prometió mentalmente, no quería imaginarse en manos de que degenerado hubiera podido terminar la hermosa mujer que reposaba entre sus brazos –

- El resto ya lo sabes, hui lejos, muy lejos, donde él no pudiera encontrarme –

- Y volviste solo por mi – Hinata asintió – ¿Por qué? No me mal entiendas, te amo con cada fibra de mi cuerpo, pero es algo que no logro entender –

- Yo te he amado desde siempre – Confeso sin titubear, si de algo había estado segura siempre era de haber amado al rubio desde el comienzo – Al comienzo sentía mucha admiración de como podías hablar por horas y horas sin trabarte ni una sola vez, además eras muy bondadoso y desinteresado con los demás. Ayudabas a todo el mundo sin esperar nada a cambio. T-Tal vez no lo recuerdes, pero en una ocasión, inconscientemente, m-me salvaste d-de una paliza de H-Hiashi – Por mucho que Naruto intento recordarlo ningún nada llegaba a su memoria –

- Me rindo – Refunfuño como un niño pequeño. Hinata rio, besándolo en los labios y borrando el tierno puchero –

- U-Una vez nos asignaron una exposición juntos, tu p-protestaste porque querías ser la p-pareja de Sakura-san – Naruto maldijo a su yo de quince años – A pesar de eso, asististe a todas las citas que te puse en la biblioteca – Una imagen de ellos dos sentados en el amplio y aburrido recinto llego a la cabeza del rubio – Trate de enseñarte la mayor parte de la exposición porque quería que tuviésemos una buena nota, tú la necesitabas – Entonces Naruto lo recordó. Esa maldita exposición de historia solo fue una ayuda extra de Asuma-sensei para que él pudiera pasar y no se quedara ese verano estudiando –

- Ya lo recuerdo. Tú te sabias todo, pero al final… – Hinata rio divertida –

- Ni siquiera pude empezar – Naruto la recordó temblando como una hoja y más pálida que una nube blanca. Su tentadora boca abriéndose y cerrándose sin lograr hilar ninguna palabra coherente – Por suerte te aprendiste todo y obtuvimos la mejor calificación. Eso me ayudo a subir el promedio y fue lo suficientemente aceptable para que H-Hiashi no se enfadara –

- Y yo feliz como un idiota porque no tendría que quedarme estudiando ese verano, mientras tu sentías alivio porque te habías librado de una golpiza–

- Jamás te sientas culpable por eso – Reprendió ella tomándolo suavemente del rostro – con el tiempo comprendí que él único culpable es H-Hiashi, nadie más – Naruto lo medito unos segundos, pero al final decidió darle la razón; ese bastardo era el único culpable – Como t-te decía, e-escape, m-me convertí en agente de bienes raíces, realicé algunos estudios y empecé a invertir en acciones que luego de unos meses se valorizaron –

- ¿Las compraste con el dinero que ganaste vendiendo propiedades? –

-Si, resumiendo, gané mucho dinero – El pecho de Naruto se llenó de orgullo – Paso un tiempo y a mis oídos llegó la historia de un hombre anciano que se quería retirar del mundo de los negocios e irse a disfrutar el poco tiempo que le quedaba, entre sus propiedades estaba un Banco que había visto mejores años. Quería un nuevo reto, una nueva inversión. Aproveche que quería deshacerse rápido de todo y logre comprarlo a un buen precio.

- Y te volviste en el tiburón blanco de Tokio –

- Creía que entre la alta sociedadme conocían como "La dama de hielo" – Naruto abrió los ojos, sorprendido –

- ¡Leíste el articulo! – Acuso divertido –

- Claro que leí el artículo soltero-divorciado número uno de Konoha, adoro leer historias de la alta sociedad – Las mejillas de Naruto se tiñeron de un rojo intenso – Aunque tengo que admitir que me moría de celos cuando te veía del brazo con una modelo diferente – Confeso inflando los mofletes –

- Entonces todo el escaparate que monte funciono – Naruto la tomo de las mejillas con una mano – No deseaba a ninguna, de hecho y si te fijas bien, todas eran morenas que me recordaban a ti–

- ¿Me lo j-jurash? – Como respuesta recibió un beso que la dejo deseosa de mucho más –

- Te dije que me habías atado la polla con tu correa – Ahora fue el turno de ella de sonrojarse- Volviendo un poco al asunto de mi padre y ese bastardo, ¿Cómo consiguió meterte en todo este lio? Quiero decir, si ese imbécil filtraba la información y resultaba que algo ilegal había allí ¿Cómo te perjudicaba a ti? –

- En nada – Contesto con simpleza, poniéndose boca arriba. Cada día le costaba un poco más permanecer en la misma posición por varios minutos – Se podría decir que yo me involucre en todo esto – Naruto la miro confuso – Lo último que deseaba H-Hiashi era que NamikazeCorp se fortaleciera, quería verlos hundidos, quería comprar tu empresa y liquidarla. Nuestro reencuentro f-fue… crudo, por decirlo de alguna manera. Creo que él esperaba encontrarse con su saco de boxeo personal – El rubio gruñó, odiando la forma en como ella se estaba describiendo – Se llevo una sorpresa amarga cuando descubrió que había cambiado tanto –

- ¿Jamás lo volviste a ver? –

- Nunca. Solo pude contactar con Hanabi cuando fue mayor de edad, temí que m-me odiara por haberla a-abandonado, pero se sentía feliz de poder hablar conmigo o-otra vez –

- ¿Hiashi se opuso? –

- Hanabi nunca me lo conto, imagino que lo hizo, pero ella es capaz de tomar sus propias decisiones desde pequeña – Hinata sonrió – En fin, Minato estaba asustado, Hiashi se sentía ganador, pero lo que nadie sabía era que yo tenía un "as" bajo la manga –

- ¿Y que era eso? – Pregunto Naruto con la voz ronca –

- La prensa se empezó a interesar en mi cuando el Banco se "internacionalizo", evité todas las entrevistas porque no eran mi estilo, pero en algún punto, conocí a una periodista que no estaba interesada en cómo me había convertido en millonaria, sino en cómo había sobrevivido al maltrato físico durante años –

- ¿Ella lo sabía? – Hinata asintió – ¿Cómo? -

- Sabía todo de mí. Su investigación era impresionante, aunque se basaba solo en rumores del círculo cercano de Hiashi, buscaba mi testimonio para darle veracidad. Quería convertirme en ejemplo de superación para todas las personas que sufrían algún tipo de abuso –

- ¿Y qué hiciste? –

- Le conté todo, dejé que fotografiara lo que quedaba de mis cicatrices, era la primera vez que hablaba con alguien, que no era psicólogo, sobre mi pasado. Lo hice con la única condición de que sería yo quien decidiera la fecha de estreno. Estaba esperando el momento indicado para hacerlo, debes saber que para Hiashi no hay nada más valioso que su reputación, quería que saliera al aire en el momento preciso para hacerle daño –

- Querías venganza, pero en lugar de eso decidiste salvar a mi padre y, de paso, a mi – Hinata asintió –

- Les enseñe el video; Minato estaba horrorizado, pero Hiashi estaba furioso. Por suerte, decidí hacerlo en presencia de ambos porque estoy segura de que Hiashi hubiera arremetido contra mi – Hinata recordó cómo su padre había roto un vaso con una de sus manos a medida que el video era proyectado – Amenacé con liberar todo el material a la prensa si él no nos dejaba el camino libre y le juré que me encargaría de que publicaran el reportaje en todos y cada uno de los medios masivos que a él se le pudieran ocurrir. Eso lo enfureció más, sin embargo, no dio su brazo a torcer. Discutimos durante horas hasta que a tu padre se le ocurrió una solución – Naruto soltó un gemido lastimero; no sabía porque, pero algo en su interior le decía que solo su padre, un romántico empedernido, había sido el de la idea – Le propuso a Hiashi que, si él no se interponía con lo del préstamo y le entregaba toda la documentación que poseía, le diríamos a la prensa que fue la empresa de Hiashi quien, en un acto de total generosidad, salvo a su amigo de la bancarrota –

- ¿Acepto?

- Claro que no. Dijo que además de eso, quería todo el material de la entrevista. Me negué rotundamente, en este punto era personal, todo indicaba que nos quedaríamos en esa habitación para siempre y sin llegar a ningún acuerdo–

- ¿Entonces el milagroso casamentero de Minato Namikaze intervino? – Hinata paso por alto su comentario sarcástico mientras regresaba a su posición anterior–

- No lo sé… - Respondió sinceramente – Tu padre, al ver que no llegábamos a ningún acuerdo, me pidió amablemente que saliera de la sala de reuniones mientras discutía, según él, de "hombre a hombre" con Hiashi – Naruto empezó a sobarle la tripa y Hinata cerro los ojos, disfrutando de la agradable sensación que le producían las manos del rubio – En ese punto era lo mejor; salí de allí, pedí un par de hamburguesas y las comí en la sala de espera mientras los "hombres hablaban" –

- ¿Y entonces que paso? – pregunto cuando ella se quedó en silencio –

-No tengo ni la más mínima idea – dijo con sinceridad – Hiashi salió hecho una furia, solo me miro y antes de que las puertas del elevador se cerraran me dijo: "te vas a casar con ese pedazo de mierda o toda la mierda golpeara el ventilador" Fue gracioso, me reí en voz alta porque nunca lo había oído maldecir en público, pero la sonrisa solo me duró hasta que sus palabras cobraron sentido ¿con que pedazo de mierda me iba a casar? Entre de inmediato para pedirle una explicación a tu padre y el pobre hombre ni siquiera podía verme a los ojos – Naruto gimió – Dijo que no podía decir ni una sola palabra sobre lo que habían hablado en la oficina, solo me aseguro que la alianza ahora era real, la fusión entre las empresas se iba a concretar, solo había un pequeño detalle pendiente: Debía casarme contigo –

- ¿Y tu aceptaste? –

-Estaba mas preocupada por no permitir que Hiashi ganara – Hinata suspiro – Y, sinceramente, creí que sería solo un matrimonio sobre el papel –

- Yo también – Admitió el rubio – Pero, al verte en ese espectacular vestido de novia, todo el plan de mantener mis manos alejadas de tu cuerpo se fue al carajo – Hinata lo miró con los ojos bien abiertos – No me mires asi'tebayo, eres la tentación hecha mujer. Los recuerdos de nuestra boda son borrosos, porque, sinceramente, en lo único en lo que pensaba era en mantener oculto el empalme total en el que me tenías – El rostro de Hinata se puso rojo – Después de el "acepto" empecé a maquinar un plan muy largo y extenso para llevarte a mi cama –

-N-No necesitaste mucha ayuda – Hinata le acaricio el rostro – Estabas muy guapo en ese traje negro, a-a-aunque te veías un poco incomodo –

- Eso pasa cuando estas mas preocupado por ocultar la erección que por cualquier otra cosa – Hinata soltó una leve risita – ¿Por qué me pediste el divorcio Hinata? – Ella se sobresaltó por el cambio repentino de tema. La mirada rota de Naruto le partió el corazón – Me sentí como si lo nuestro no hubiera significado nada para ti ¿Acaso era más importante para ti tener un bebe que nuestro matrimonio? –

- ¡T-Te equivocas! – Shion, como había decidido que se llamaría, pateo en protesta – ¡Soy tartamuda, p-pero no estúpida! ¡Sabia que ibas a dejarme! –

- ¿¡De que estas hablando!? –

- ¡Yo te oí hablando con Sasuke! – El rostro de Naruto palideció considerablemente cuando cayó en cuenta – Escuche contándole lo infeliz que eras en nuestro matrimonio, lo mucho que te costaba seguir a mi lado, lo amargado que te estabas volviendo con cada día que pasabas viviendo conmigo – Hinata hipo a la vez que lagrimas salían desbordadas de sus ojos – S-Sasuke te sugirió que intentáramos tener un h-hijo, pero tu d-d-dijiste q-q-que… -

"Primero muerto antes de tener un hijo con esa bruja"

La voz de Naruto diciendo esa frase resonó en la cabeza de Hinata como si fuera un tambor de guerra. Su cuerpo todavía temblaba de dolor cada vez que recordaba ese momento.

- T-También le dijiste que no sabias c-como pedirme el divorcio, que lo u-ultimo que querías era perjudicar a la empresa – Hinata oculto su rostro con ambas manos –

- Estaba ebrio – Balbuceo Naruto en un murmullo, cuando destellos de ese día llegaron a su mente –

- Yo solo te facilite las cosas –

- Pero Hanabi me dijo que… -

- Antes de oírte hablando con Sasuke estaba i-intentando arreglar l-l-las cosas. E-Es verdad que a-acudí a un psicólogo en cuanto tuve oportunidad, p-pero j-jamás me atreví a t-tratar mi tartamudeo porque me d-daba v-vergüenza y c-cuando me d-decidí… -

-Tuviste un accidente – Hinata asintió –

-U-Un vehículo golpeo la p-parte trasera de mi c-coche – Hinata tembló al recordarlo. Luego de años de continuos maltratos físicos y psicológicos, pasar por una situación medianamente violenta le provocaba un terror profundo. El golpe había sido algo leve, pero ella tuvo que permanecer en su cuarto, encerrada, intentando recuperar un poco la compostura – L-Lo tome como una señal de que fracasaría – Hinata suspiro – Eras infeliz, cada día pasabas menos tiempo en la casa. I-Incluso Kurama te extrañaba y lloriqueaba cada vez que alguien se acercaba a la puerta y n-no eras tu. T-Te pedí que tuviéramos u-un hijo, lo hice s-sabiendo tu respuesta – Naruto maldijo por lo bajo – Por eso te p-pedí el divorcio – Hinata suspiro masajeándose frente – M-Me cuesta m-mucho hablar s-sobre c-cosas que n-no tienen n-nada en común con los n-negocios, p-por eso cuando nos reuníamos para arreglar todo lo relacionado con el d-divorcio me imaginaba que l-la unión entre nuestras empresas se estaba terminando –

- ¿por eso te mostraste tan fría? – Hinata asintió –

- Jamás hubiera podido hacerlo de otra forma –

- Entiendo –

- Entonces, cuando la casa estuvo vacía, me d-di cuenta de que no quería estar s-sola otra vez. Kurama m-me acompañaba –

- y yo te lo quite –

- J-Jamás en la vida me lo hubieras podido quitar, l-legalmente era su única dueña, p-pero temía que lo que dijiste fuera verdad –

- Lo lamento – Hinata acepto sus disculpas con un leve asentimiento – Estaba muy enojado porque terminaste con lo nuestro como si no hubiera significado nada para ti… dije lo primero que se me vino a la mente – Naruto suspiro – ¡Y solo le dije a Sasuke porque estaba tan desdichado! Te encogías y te quedabas muda en cada oportunidad – Naruto le tomo el rostro con ambas manos, antes de que ella pudiera mal interpretar sus palabras – P-Pensé que no te importaba en lo más mínimo salvar nuestra relación, no tenia idea de nada… perdóname por eso también –

-No es tu c-culpa –

- ¡Claro que lo es! Debi… –

- Nada – Hinata negó con la cabeza – H-He superado mucho de lo que sufrí con Hiashi, pero si hay algo que se ha quedado conmigo es que mi garganta se cierra totalmente cuando n-no tengo el control de mis emociones… eso – Trago saliva sonoramente – eso lo v-volvía más violento, jamás pude deshacerme de esa sensación de terror – Susurro en un hilo de voz – l-lo primero que hice al reunir u-una buena cantidad de dinero fue a-acudir al mejor c-cirujano plástico para que me quitara todas las cicatrices, incluso acudí a un psicólogo y a un psiquiatra, porque los r-recuerdos me atormentaban constantemente. Pude dejar todo atrás excepto… eso – Hinata se acarició las cienes, sintiendo una leve punzada de dolor – M-Mi punto es… no había nada que pudieras hacer para… "hacerme hablar" –

- Hinata – Naruto la beso tiernamente en las mejillas – Si hubiera sido un buen marido… - Ella negó, haciéndolo sentir impotente –

-N-Ni siquiera Hanabi ha podido. Fue por eso que intente acudir a terapias del lenguaje –

- ¿Por qué no me dijiste que habías sufrido un accidente? Te llame esa semana –

- Porque s-sabia que… estabas intentando permanecer alejado de m-mí. Quería h-hablar contigo cuando regresaras y e-expresarte todo lo que sentía… – Hinata apretó los puños, sintiéndose impotente también– L-Lo tome como un fracaso s-sin ni siquiera i-intentarlo –

-Mi amor – Naruto la acuno en su pecho, tratando de reconfortarla – Lamento no haber podido actuar de una manera mejor, pero no tenia ni idea, solo te oía levantar la voz cuando estaba enterrado hasta las bolas en ti. Lo malinterprete todo, perdóname por eso – Hinata se sonrojo violentamente, amaba en secreto cuando Naruto le hablaba de esa manera – Cuéntame lo del bebe, no miento ni una línea cuando te digo que la amo como si fuera mía, pero necesito saber la verdad – Ella suspiro –

- Q-Quería un bebe – Respondió ella, sobándose la tripa – J-Jamás me plantee la posibilidad antes, p-porque creía que Hiashi me h-había dejado atrofiada e-emocionalmente, creía que en mi corazón no quedaba mucho especio para a-amar a nadie más, sin embargo y de r-repente, te tuve en mi vida y m-me di cuenta de lo mucho que p-podía llegar a amar a otra persona q-que no e-era de mi s-sangre– Naruto guardo silencio – A-Amé cada cosa de ti, incluso l-lo malo, c-creo que c-con cada instante que p-pasaba t-te amaba más y más … y… u-un día… a-abrí los o-ojos y ya te habías i-ido – Hinata se estremeció – K-Kurama, e-es un poco torpe y-y desobediente- El rubio carraspeo- Esta bien, no creo que exista un perro con menos modales que Kurama, p-pero c-cuando lo rescate, creía q-que estaría conmigo para siempre y… - Hinata suspiro – M-Mi punto es que, luego de d-divorciarnos, m-me di cuenta de cuan acostumbrada estaba a la compañía, a… tener un s-soporte en los momentos difíciles. Me sentía s-sola sin ti, abrumada y o-odiaba sentirme a-asi p-porque me recordaba… todo – Shion escogió ese momento para hacerse notar, dándole una leve patadita que hizo estragos en el corazón de Hinata – No pensé en otro animal, porque, si Kurama me visitaba, se iba a sentir celoso y eso le provocaría gases y… -

- Todo le provoca gases a Kurama, mi vida – Naruto le beso la frente, le parecía muy tierno como anteponía los sentimientos de Kurama por sobre otras cosas – ¿Por qué escogiste un perro tan grande? –

- ¡Pensé que era un chiguagua! - Se defendió- Cuando lo adopte tenía unos pocos días de haber nacido, estaba enfermo, pequeño y tembloroso – Hinata sonrió al recordar cuando le entregaron una bola de pelos pequeñita y envuelta en una sábana blanca – Era el ultimo de la camada, su madre era una perra rescatada de un criadero clandestino, Kurama nació sin respirar, por suerte el encargado del refugio pudo reanimarlo. Pero su madre no lo quiso, lo aparto del resto. Tal vez parezca u-un poco tonto, pero me sentí identificada con eso. Mi madre tampoco me quiso – Comento como si nada y a Naruto le sorprendió la naturalidad con la que lo dijo – Kiba pensó que no lo recibiría por su tamaño y me mintió –

- ¿Y tú le creíste? – Hinata se encogió de hombros –

- Mira – Naruto se tensó cuando Hinata se levantó para entrar al cuarto de baño y volvió con el celular en sus manos – Tengo unas fotos de cuando era pequeño –

-Permíteme – Trato de evitarle un mal trago, seguramente el maldito de Hiashi le había escrito muchas otras cosas insultantes –

-Hiashi me escribió – Naruto sudo frio, hizo el amago de quitarle el aparato, pero sorprendentemente ella fue más rápida – Estos mensajes… Hanabi debe tener más cuidado con su medicación –

- ¿Medicación? –

- Si, tiene demencia senil y algunos brotes psicóticos. Por eso estoy al frente de las operaciones financieras de la empresa –

- ¿Hiashi? –

- Yep –

- ¿Tu padre? –

- Por desgracia –

- ¿El mismo hombre que tuve que golpear porque no me permitía hablar contigo? –

- Estaba rodeado de personal médico, sin embargo, no duraron mucho debido a que toda la vida ha sido un hombre violento, médicos y enfermeros renunciaban antes de completar el primer mes. Al final, Hanabi y Neji llegaron a un acuerdo de NO más médicos y Hanabi le permite deambular libremente por la mansión. Eso lo mantiene calmado la mayoría de veces. Existen veces que se pone bastante agresivo, pero eso es porque ha logrado engañar a Hanabi a la hora de tomar su medicación –

- ¿Golpee a un enfermo mental? –

- No te sientas mal por eso, yo también le devolvería unos golpes si tuviera la oportunidad –

- Eso no me hace sentir mejor – Hinata se encogió de hombros, restándole importancia –

- ¡Mira! – Naruto observo la pantalla, en ella aparecía una Hinata mas joven con un cachorro, que claramente no era un jodido chiguagua, y que, a duras penas, podía sostener en sus delgados brazos – ¿No es hermoso? –

- Es gigante – Naruto miro con cierta incredulidad a su mujer – ¿Cómo pudiste confundirlo con un chiguagua? ¡Es enorme! –

- Sinceramente, no tenia ni idea de que era un chiguagua, Kiba llamo y me dijo; "Oye, tengo un chiguagua para ti, no te arrepentirás, es de tamaño pequeño, estos perros prácticamente se mantienen solos"

- Ese imbécil te engaño –

- Creo que tenía miedo de que lo rechazara, pero me lo hubiera llevado de cualquier forma –

- Entonces adoptaste al Can más desastroso de Japón –

- Y luego tú te divorciaste de mi y te lo llevaste –

- Perdóname amor, en ese momento sentí que debía aferrarme a algo tuyo y el gran danés baboso fue lo único que encontré –

- T-Te perdono – Hinata apago el celular dejándolo caer de cualquier forma en la cama – En fin, al verme sola, de nuevo, pensé que necesitaba una compañía permanente. Alguien a quien pudiera amar y que me amara i-incondicionalmente; tenía la capacidad económica para hacerlo y… – Naruto la miro un poco impaciente – a-acudí a un banco de esperma – El rubio soltó el aire que, inconscientemente, estaba reteniendo en sus pulmones. Esa confesión le quito un enorme peso de encima… Hasta que las palabras que ella pronuncio cobraron sentido en su cabeza –

- ¡¿Estas embarazada de un desconocido?! –-

¿Fin?

Kioh: HOLA, gracias por leer y comentar. Estoy intentando terminarlos. Espero que la continuación sea de tu agrado.

Lais: HOLA, gracias por leer y comentar. Espero que la continuación sea de tu agrado. Lamento mucho la tardanza uwu

Bruxi: HOLA, gracias por leer y comentar. Awww sorpresas que dan gusto, a mí también me encanta cuando comentas mis historias, significa mucho para mi porque amo la manera en como escribes. Jajaja esa era la intención, odiar a Naruto y luego volverlo a amar con locura. Espero que la continuación sea de tu agrado y lamento mucho la tardanza, estoy un poco oxidada con la escritura, pero ahí vamos XD

Elena: HOLA, gracias por leer y comentar. Espero que la continuación sea de tu agrado. Lamento mucho la tardanza uwu

Guest: HOLA, gracias por leer y comentar. Sera niña, asi que Boruto nacerá en la siguiente tanda xD Naruto no uso preservativo porque bueh, le encanta que Shizune lo golpee. Kurama esta al cuidado de Karin (pobrecitos los dos jajaja) Y bueno… la escritora chismosa es quien menos creen jijijija planeaba subir la continuación hace mucho, pero surgieron cosas y bueh… lamento la tardanza, espero que el capitulo te haya gustado.

Susuna: ¿Susuna me escribió un review? ¿A mi? ¿Sabes lo mucho que adore tus historias mientras crecía? ¡ESTOY EN EL CIELO! Tus historias las leí una y otra vez… No tengo mas que agradecimientos por ti, gracias por tus palabras y lamento mucho la tardanza, eres como una eminencia. Ojalá puedas continuar tus historias pronto, son muy bellas. Leí incluso la de Dragon Ball cuando no soy muy fan de la saga ¡Estuvo genial! Pude imaginarme todo el escenario, gracias por leer a este humilde intento de escritora, espero que te haya gustado la continuación.

Criiisi: ¡Hola! ¡Gracias por leer y comentar! Tus palabras son muy lindas, me alegro mucho que te haya gustado la historia uwu Planeo subir una tercera parte, donde conoceremos a todos los posibles "donantes", ojalá te guste la continuación, gracias por el apoyo.

Vanebaby: ¡Hola! ¡Gracias por leer y comentar! Lamento mucho la tardanza, espero que te haya gustado la continuación. Subiré un pequeño epilogo mas adelante.

Cristal311: ¡Hola! ¡Gracias por leer y comentar! Me alegro que te gustara de principio a fin, lamento haber tardado tanto en publicar el segundo capítulo. Espero que este también te haya gustado. ¡tu fuiste la primera que adivino el origen del embarazo de Hinata! Nos leeremos pronto uwu

Daiu Naruhina: ¡Gracias linda! ¡Espero que te recuperes pronto y puedas seguir escribiendo! ¡Amo todo lo que publicas! ¡Te envió un abrazo enorme!

Miriam PC: Gracias por todos tus buenos deseos, lamento mucho la tardanza. ¡Te envío bendiciones para ti y toda tu familia también!

Zurihaizarra: ¡Hola! ¡Gracias por leer y comentar! ¡Sii! También le atinaste, aunque fue un poco obvio, algunas personas no lo descubrieron jajaja. Te envió un abrazo y espero que la continuación sea de tu agrado owo

Gab: ¡Hola! ¡Gracias por leer y comentar! lamento la tardanza, espero que el capítulo te haya gustado.

Akime Maxwell: ¡Hola! ¡Gracias por leer y comentar! Eso lo sabemos todos; Hinata te ama Nabruto XD lamento la tardanza, espero que el capítulo te haya gustado.

nyo-mila: ¡Hola! ¡Gracias por leer y comentar! Gracias por tus palabras, lamento mucho la tardanza.

Usagi Hina: Hola, me alegro que te hubiera gustado, acá esta la continuación, espero que te guste.

megu86: Hola, Lamento mucho la tardanza, gracias por leer y comentar, espero que la continuación sea de tu agrado.

eliuska20: Hola, Lamento mucho la tardanza, gracias por leer y comentar. Ojalá te guste la continuación uwu.

Hina002: gracias por tus palabras ¿Creo? Jajaja esta historia la tenia en mi mente desde hacia mucho, no iba a ser muy profunda y se supone que publicaría la publicación esa misma semana, pero buehh no se pudo. Gracias por leer y comentar.

SalomeKassandra: acá esta. Lamento mucho la tardanza. Gracias por leer y comentar.

Guest: Lamento mucho la tardanza. Gracias por leer y comentar.

Creo que son todos, muchas gracias por llegar hasta aquí. Fanfiction por estos lados anda medio muerto, pero prometo que publicare todas mis historias por aquí, así no comenten demasiado XD

Los quiero mucho, Desde ya les deseo ¡Feliz navidad y próspero año nuevo!

¡Nos estaremos leyendo!