Disclaimer: estos personajes pertenecen a J.K Rowling, hacemos esto por diversión y bla bla bla ...etc etc
"Sponge Harry Square Malfoy"
Vuelta al día 2
- Gracias. Muchas gracias, Pottah, por recordarme el horrible, horrible suceso - dijo un Draco todo desaliñado, con la corbata desatada – Te recuerdo que seguimos aquí… vivos… gracias a que recordé el hechizo de supervivencia para hacer aparecer agua y comida… - sus ojos comenzaron a brillar – como lo hacía en las noches que mi mami me ponía a dieta porque me estaba poniendo… - bajó la vista y se sonrojó – pachonchito…
Harry, quien lo observaba desde hacía rato, dijo:
- Créeme, Malfoy. No quería saber tanto, pero ahora por tu culpa estoy… ¡todo constipado! – Se agarró la panza, dejándose caer de lado - ¡NECESIITO IRRRR! – chilló lastimeramente.
- Yo estoy en la misma situación que tú – le reprochó Malfoy – ¡Pero lo tomo con dignidad, Pottah! Y si me permites… - se puso de pié, yendo hasta su polvorienta mochila y sacó el libro de encantamientos – Como siempre… yo soluciono… y tu miras… anonadado… mi brillantez – y diciendo esto, se internó en una lectura intensiva del libro.
- Yo también puedo ser útil si me lo propongo, pero aquí, encerrado contigo, y para colmo constipado, no se me hace fácil, Melfoy.
Draco lo vio y, levantando una ceja en una forma meramente sepsi dijo:
- ¿Haces el favor de callarte, Potter? Algunos aquí intentamos pensar.
- Bueno ya, te tardarás siglos. – dijo Harry sentándose al lado del rubio, y comenzó a leer el libro sin percatarse de su proximidad con Malfoy.
El aludido se dio cuenta de esta situación y no tardó en hablar.
- ¡Nooo, Potter¡No te sientes aquí¡Se me pegará lo mugroso!
Harry lo miró de pies a cabeza detenidamente y le dijo:
- Ya estás mugroso. Cállate y sigue leyendo.
Malfoy, tras mirarlo con cara de pocos amigos, se volvió a sumergir en la lectura.
Dos horas más tarde…
- ¡Lo tengo! – exclamó Malfoy
- ¡Si¡Estuvo en frente de nuestras narices todo el tiempo y no lo vimos! – añadió rápidamente Harry.
- Uhm… ¿Tú también te diste cuenta, Potter? – Preguntó Draco, incrédulo - ¿Qué es exactamente lo que encontramos¿Ah?
- Ehmm… eso… tu sabes qué, Melfoy, no te hagas el interesante – contestó inseguro.
- Lo sabía Potter. Tu única neurona se hiperventiló, no le da para tanto – sonrió, triunfante – A ver… te explicaré con palabras sencillas en qué consiste LO QUE YO SI ENCONTRE – se aclaró la garganta y optó una postura muy parecida a la de Snape, según recordaba Harry – Son dos simples encantamientos que nos haremos el uno al otro, utilizados por los ingeniosos magos de la Edad Media, que eran encarcelados por los asquerosos y temerosos muggles para no tener que convivir en sus celdas con sus… bueno, tu sabes. Se llaman "permanentconstipation" y "orinonumca".
Harry con los ojos como platos, no tardó en decir:
- Eh… volviendo al punto de hechizarnos mutuamente… ¡JAJAJAJA¡Graciosísimo! Ni pienses que te dejaré apuntarme con esa varita tuya, Melfoy. ¡Jamás¡Nunca jamás!
- Entoooonces… deberás buscar tu propia manera de no ahogarte en tus… cochinadas. ¡Pero no seas egoísta, Pottah, y hechízame a mí al menos¡Por el amor de Dios, algunos todavía conservamos nuestra dignidad!
Harry ante el repentino gesto de confianza de su Némesis, decidió poner la totalidad de su ser a merced de Malfoy, por única vez.
- Muy bien Malfoy, lo haremos.
Una hora más tarde…
- Debo felicitarme… ¡Soy genial! Cada día me sorprendo más a mi mismo con las cosas que puedo hacer. Este hechizo parece estar funcionando a la perfección. ¡Nunca me sentí tan liviano! – y diciendo esto, Draco se puso de puntas de pie y comenzó a bailar ballet.
Harry, mirándolo con cara de "este chico tiene todos los problemas", añadió:
- Estuve a esto – hizo un gesto con sus dedos – de lanzarte otro hechizo, Malfoy. Fuiste un objetivo realmente tentador cuando comenzaste a retorcerte si bien aún no había lanzado el conjuro.
- Lo hacías y esa cicatriz tuya iba a tener múltiples hermanitas en todo tu cuerpo.
- ¡Claro, te haces el malito ahora que ya te hechicé¿Verdad? – Dijo Harry – Hace una hora me hubieras tratado como a un príncipe ¿Verdad? Con tal de que te quitara tus... cositas.
Haciendo caso omiso a sus palabras, Draco miró a través del ventaluz que daba al ras del césped de los terrenos.
- Me pregunto... si alguien pensará en mí. Seguro que sí lo hacen... – suspiró el Rubio – Pero en el último lugar donde me buscarían es en el armario de las escobas. Deben estar buscándome en lugares dignos de mí. En la sala de menesteres... Hogsmeade... La cámara Secreta... los vestuarios de las chicas.
- Bien... Si ya terminaste de llorar, pienso irme a dormir – Harry bostezó de manera poco elegante, desacomodándose más los cabellos.
- Acaso tu madre no te enseñó modales? – interrumpió Draco, sin pensar.
Harry lo miró sin expresión alguna, se fue a su rincón preferido, si se lo pudiera llamar así, y haciéndose un ovillo, cerró los ojos.
- ¿Qué¿Qué¿Qué dije? ... Uy... – Draco guardó silencio, sintiéndose algo extraño, de una manera que no se había sentido jamás, algo a lo que usualmente solemos llamar... sentimiento de culpa. Se fue al rincón opuesto, y abrazando sus rodillas, observó a Harry dormir hasta que, finalmente, él también se durmió.
Día 3
Potter se despertó sintiendo un terrible dolor en su espalda.
- ¡Mierda! – murmuró, levantándose.
Se estiró viendo delante de él la figura del Rubio, quien aún dormía plácidamente. No pudo evitar quedarse mirándolo fijo, pensando lo calmo e inocente que se veía en ese momento, con su cabello desacomodado sobre sus ojos. Harry, inconscientemente, esbozó una leve sonrisa.
Lentamente, Malfoy, comenzó a abrir sus grises ojos, manteniéndose aún en la misma postura con la cual dormía. Al abrirlos, se quedó mirando fijamente a Harry.
- ¿Si, Pottah? – Dijo arqueando una ceja – A ver... Querido Harry. Dos puntos. Tu mirada me incomoda. Punto. ¿Harías el favor de mirar tus sucios pies, y quitar de una maldita vez... TUS OJOS DE ENCIMA MIO? Punto. Gracias, Pottah. Punto. Atentamente. Dos puntos. Dreiko Melfoy. Punto. Y cierro.
- No se si reírme de ti... golpearte... tenerte lástima... o golpearte, nuevamente. - dijo un atónito Harry, desconcertado al escuchar la carta hablada de Malfoy – Tienes todos los problemas, hombre – Tras decir esto, Harry recordó el comentario dicho por Draco la noche anterior, y cuan disgustado se había dormido. – Haré aparecer el desayuno – dijo en un tono monótono, y se volteó a buscar su varita. Se sentó en el piso y cerrando fuertemente los ojos, intentó recordar el hechizo.
Draco lo miró fijamente, expectante, sin decir nada.
Harry, tras pronunciar unas palabras, hizo aparecer un plato con migajas, no muy nutritivas.
- ¡Demonios¡Estúpido hechizo! – Lanzó el plato contra una de las paredes, y éste se hizo añicos. Y volviéndose a Malfoy dijo – Y tú... – Se acercó amenazadoramente – Deja de mirarme de esa manera – Le gritó rojo de la furia contenida.
Sin ningún atisbo de ironía en su voz, Malfoy contestó.
- Déjame, Potter, yo lo haré.
- ¿Te crees mejor que yo, verdad? – Le contestó totalmente fuera de sí.- Crees que soy un bueno para nada. Que tu todo lo puedes, porque tienes un hogar y una insulsa familia que te proteja.- Se acercó otro poco, apuntándole con el dedo.- Pero déjame decirte algo, Malfoy... Y escúchame bien. Si para tener todo eso hay que ser como tú, prefiero ser huérfano.- dijo todo esto con una mirada y voz que se debatían entre el dolor y el enojo.
Harry se dio vuelta e hizo aparecer el desayuno para ambos. Tomando su plato, se fue a su rincón, sin mirar a Draco.
Éste se quedó en silencio unos minutos, totalmente desconcertado, y reflexionando, para luego decir:
- Escucha Potter... - Dijo pasándose una mano por el pelo inconscientemente – Ehm, yo... No quise decir lo que dije. – Se acercó a Harry y lo miró a los ojos – Lo siento... - dijo siendo sincero, por primera vez en su vida.
El gryffindor, que estaba devorando de manera brusca su desayuno, tragó con dificultad, limpiándose la boca con el dorso de la mano.
- Glup... Ya estuvo, Malfoy. – Contestó evitando, deliberadamente, establecer contacto visual con el otro muchacho.
Malfoy, sintiéndose más liviano, y sin ese sentimiento extraño que lo agobiaba desde la noche anterior, se dispuso a desayunar.
Luego de unos hechizos para limpiar sus platos, Harry finalmente rompió el silencio, adquiriendo su tonalidad normal de voz.
- Debemos hacer algo con respecto a las noches, esto no puede seguir así.
- ¿Disculpa? – Dijo Draco, abriendo desmesuradamente los ojos - ¿Qué insinúas, libidinoso Potter? Claro está que soy irresistible, pero piensa... todas las consecuencias, el qué dirán... Además yo no soy tan fácil, Potter... Espera al menos... no se... unas horas... quizás... depende mi humor... No me he depilado la espalda... y creo que me esta por venir... habrá que posponerlo... lo siento, Pottah.
- Ooooooooook... ahora si me quiero ir. Mira Malfoy, te haré una serie de preguntas, y debes contestar con lo primero que se te venga a la mente. Primero... ¿Cuando eras niño, escuchabas a las Spice Girls o a Blink 182?
- Eh... ¿Qué demonios es eso? Y... sean lo que sean... estaba bromeando, Potter. ¿No entiendes el humor inglés? Además no me metería contigo... ni aunque de nosotros dependiera la continuidad de la raza humana.
- Eh... ¿Sos boludo? (N/AS: nos salió la argentina del alma) – Deja ya de decir estupideces – dijo levantando la vista y vislumbró algo que llamó su atención. – ¡Lo tengo! – Y sin más comenzó a trepar por los estantes del armario.
- Cuidado, Potter... No quisiera tener que convivir con tu cadáver miope y maloliente en pleno estado de putrefa... - se escuchó un ruido seco y Harry cayó al suelo... encima de Draco ( N/AS:'D )
Se miraron serios por unos instantes, estando sus caras a escasos centímetros una de la otra. Harry no pudo evitar echarse a reír a carcajadas. Malfoy, por su parte, tenía una lucha interna, por un lado quería reírse de la situación, y por otro quería golpearlo incansablemente. Optó sin embargo, por sorprenderse.
-¿Qué es lo gracioso, Pottah? – susurró.
El aludido, no se dio por aludido y continuó riendo.
- ¡ME ENEEEEEEEEEERVAS POTTAH! – Dijo Draco, montado en cólera – ¡PARA TÍ TODO ES FACIL! PORQUE ME UTILIZASTE DE AMORTIGUADOR DE TU CAIDA Y AHORA ESTÁS RIENDOTE, PLÁCIDO, SOBRE MI INERTE CUERPECITO, MIENTRAS YO… - intentó tomar aire, pero con Harry encima, riéndose en su hombro, no era tarea fácil – DRACO LUCIUS MALFOY, CORRO EL PELIGROSO PELIGRO DE HABER QUEDADO CUADRIPLÉJICO DE POR VIDA - y en un susurro desaireado añadió... – Cararrajada... Po...ttah... – y con una voz un tanto afeminada... y con su último aliento dijo – Ay, no doy más – y murió.
(N/AS: AAJAJAJAJAJJAA MENNNTIRA NO MURIO!)
REWINNNND
Y en un susurro desaireado añadió... – Cararrajada...Po... ttah...
Harry intentó calmarse, en vano, ya que siguió riéndose, aun más fuerte tras oír las sandeces de Malfoy.
En un tono calmado y cordial, tras inhalar una gran bocanada de aire, Draco dijo:
- Y ahora... queridísimo Pottah... si no es molestia... – respiró profundo – ¡MUEVETEEEEEEEE, MORRRRRRSA CON ANTEOJOS DE CULO DE BOTELLAAAAAAA!
La morsa, digo, Harry, rodó y rodó... Hiper Rodó ( XDD N/AS: solo para entendidos) por el suelo, aun riéndose.
- Jajaja No... puedo respirar... me duele mucho... jajaja la panza- decía con los ojos cerrados respirando agitadamente boca arriba.
- Siempre tratando de mostrar tu agilidad... tu heroísmo… tu intrepidez… Y claro, tenias que escalar, cual monte Himalaya los condenados estantes, para llegar a… – dijo Draco incorporándose y viendo lo que Harry tenia en la mano - ¿Una cochina esponja¿Eres imbécil? – Miró a Harry- ¡ERES IMBECIL?- soltó de nuevo – ¿Las palabras: "Somos unos putos magos", no te dicen nada?
- Por lo de putos... habla por ti mismo... Taxiboy Melfoy – lo miró sonriendo - Ay… Melfoy, Melfoy... Melfoy, Melfoy, Melfoy... – siguió riéndose y diciendo - Melfoy, Melfoy, Melfoy…
- ¡ES MALFOY¡MALFOY, MALFOY, MALFOY! – Dijo Draco – ¡MALFOY¡Y BASTA! Por Merlín... El encierro nos afecta lentamente... – dijo desesperado – Y volviendo al tema... las palabras...
- Ahí va otra vez... la histérica... - susurró Harry divertido todavía mirando desde el suelo a Draco, con los brazos detrás de su cabeza haciendo las veces de almohada.
- ¡EJEM¿Las palabras "accio… cochina esponja" no resuenan en algún recóndito recoveco de tu cabeza... y claman "uusaamee Pottahh... úsame... para llegar a la cochina esponja…"? – dijo en ese tono que solo las telefonistas poseen.
- Nop. ¡Piensa rápido Melfoy! – y sin más le arrojó la esponja a Draco, quien sin pensarlo la tomo entre sus manos. La contempló unos segundos, atónito, y la dejó caer al suelo, asqueado de la situación.
- ¡IUUUCCCC¡¡MALDIITAAA¡Maldita seas TÚ, entre todos los artículos de limpieza! – le gritó a la esponja, que yacía inerte y abiótica en el suelo.
- Creo que... no puede entenderte… - dijo Harry quien había recuperado la cordura, dándole unas palmadas al rubio en el hombro.
Malfoy miro a Harry y en un susurro le dijo:
- No me caes bien...
El pelinegro apunto con su varita a la esponja y dijo
- ¡Engorgio!
La esponja tomó el tamaño de un colchón medianamente decente.
- ¡Guau Potter! Así que tu cerebro trabaja bajo stress ¿eh? Muy interesante... lo tendré en cuenta para más adelante.
- ¿Piensas quedarte aquí mucho tiempo más Malfoy?
Poniendo los ojos en blanco contestó:
- Bueeeno… ahora solo queda buscar una para mi... higienizarla... ¡Y listo!
Harry, quien se había adelantado a las pretensiones del rubio, miraba los estantes.
- Lamento desilusionarte, Melfoy. Pero creo que es la única esponja. Eso me lleva a la conclusión lógica de que...
- ¡No lo diiigasssss¡No te atrevas a pronunciarlo, siquiera¡No pienso compartir esa mugrosa esponja gigante contigo¡MMMMMIA! - dijo aferrándose a la esponja, como si su vida dependiera de ello.
Esa misma noche, el silencio invadía el armario y la platinada luz de la luna traspasaba el ventiluz, como una intrusa en la oscuridad. Draco, con voz solemne y seria rompió el silencio:
- Esta de mas decir Pottah... que si quieres conservar tu integridad física y mental, más te vale no decir ni una palabra al respecto de este bochornoso acontecimiento, que nos incumbe a ambos y a una… esponja gigante- terminó Draco acostado boca arriba observando el techo con los brazos cruzados sobre el pecho.
- Como si esta fuera una experiencia agradable para relatarle a mis nietecitos mal peinados... – suspiró y se acostó en dirección contraria a Malfoy, chocándolo con los pies.
Draco contó hasta diez, como le había recomendado su terapeuta, y dijo en el tono más calmado del que fue capaz:
- Tu pie vuelve a hacer contacto con alguna parte de mi perfecta anatomía... y no sabrás como terminaste en el suelo... con múltiples traumatismos… ¿Oíste, Pottah?... ¿Pottah?
Harry roncó haciendo un escandaloso ruido.
- Mátame ahora Merlín… No lo dudes… Mátame ahora, por favor...- suplicaba Draco intentando encontrar una posición cómoda. Finalmente, se acurrucó en posición fetal y se durmió profundamente.
Continuará... viteh
¡Amigos¡No se pueden quejar… la larga espera valió la pena¿o no? ¬¬
Esta vez nos re esmeramos y escribimos un capítulo medianamente largo... Y también nos reímos mucho haciéndolo jajaja.
Ahora… no esperen mucas actualizaciones, al menos por los próximos 15 días porqueeeee… ¡NOS VAMOS DE VIAJE DE EGRESADOS, SI QUE SII!
Así que amiguillos esperamos que les haya gustado este capítulo, y como siempre esperamos de todo corazón reviews con sus opiniones :)
¡THAT'S ALL FOLKS!
Besotones y abracines del amor.
Harriet y Dracine.
