Akane y Nodoka llegaron al dojo Tendo, la casa parecía tranquila y de inmediato fueron bien recibidas por Kasumi - ¡Que bueno que ya llegaron!, ¿como les fu... Ahhhh Akane, porque estas así, que te paso? - por más que lo habían intentado esconder y apesar de la eficaz medicina del maestro, el moretón en el ojo de la peliazul causado por un golpe del maleante que rapto a Nodoka aún no había desaparecido - ¡No es nada hermana!, lo que pasó es que en casa de los familiares de la tía Nodoka conocí a algunas personas que practican artes marciales, me invitaron a unirme a ellos en varios entrenamientos, en uno de ellos mi oponente fue muy veloz, no pude esquivarlo y terminó golpeandome el ojo, pero no necesitas alterarte, la tía ya me llamó la atención por no haber tenido precaución - la chica de cabellera zafiro inventa una explicación muy convincente apoyada por Nodoka - ¡así es, linda!, ya conoces a tu hermana, se emociona con algo y no mide el peligro, no paso a mayores pero aun asi debo hablar con tu padre y disculparme por lo ocurrido -.

En cuanto Nabiky escucho el grito de Kasumi corrió para ver que ocurría - ¡Vaya que te han dado un buen golpe hermanita!, deberías ponerte hielo antes de que se ponga negro - aconsejo la Tendo mediana, - ¡Si, pontelo de una vez y ve a descansar, te notas extenuada, parece ser que te divertiste mucho en compañía de la tía, ¿verdad Akane? - decía la hermana mayor mientras estiraba una bolsa con cubos congelados y una pequeña sonrisa se dibujaba en su faz, la chica de ojos chocolates tomó la bolsa y agradeció la acción, después se dirigió a las escaleras para subir a su alcoba y descansar un poco.

A la hora de la comida todos se reunieron a la mesa, el pescado que Kasumi había preparado se veía apetitoso y todos lo deglutieron con gusto, uno a uno los miembros de la familia se fueron levantando hasta que solo quedó Soun leyendo un periódico hasta tarde, sin la presencia de su amigo no tenía mucho que hacer. La peliazul bajó a la cocina por un poco de agua y al pasar cerca del comedor su padre la interrogó - ¡Akane!, ¿cómo dices que te pasó eso en el ojo? - la chica sabía que era cuestión de tiempo para que su padre le hiciera esa pregunta, - en casa de los parientes de la tía Nodoka hay un pequeño dojo, muchos de ellos practican Kendo y algunas otras disciplinas, son gente muy linda que en cuanto notaron mi interés al ir a ver sus entrenamientos, y tras lo dicho por la tía cuando me presento, de inmediato me invitaron a practicar con ellos, pero en uno de los combates calculé mal la distancia y mi oponente me golpeó, todos se preocuparon, ¡definitivamente debo tener más cuidado!, al final yo les agradecí por tan hospitalaria atención - la ojicafe narró su historia ficticia con tal ahínco que su padre dio fin a la conversación, - ¡muy bien Akane, me alegra que nunca te olvides de enttenar, pero debes ser mas cuidadosa, la señora Saotome estaba muy alterada pensando que tal vez me enojaria!, pero conociendo lo atrabancada que eres, creo que te cuido muy bien, ve a descansar, tu ojo ya se ve mucho mejor de como estaba esta mañana. - La joven habia logrado engañar a todos con su ficción, para hacer todo más creíble el maestro Happosai acordó llegar al Dojo Tendo unos días después para no generar sospecha, todo iba saliendo con forme lo planeado, Ranma llegaria pasado mañana y gracias al magistral remedio medicinal del maestro, lo morado del ojo de Akane prácticamente había desaparecido, así que su prometido tampoco tendría mucha oportunidad para enterarse de lo que pasó, o al menos eso esperaba.

Los Saotome llegaron el sábado por la tarde a casa de Soun, su aspecto era harapiento en la ropa y cansado en las facciones, pero también se veían felices y satisfechos, - ¡Ranma!, ¡qué bueno que llegan, ya nos estábamos preocupando por ustedes!, ¡me da gusto que ya estén en casa!, imagino que tendrán mucha hambre y sueño, pasen a cenar con nosotros mientras se calienta el baño, - El patriarca Tendo los recibió con gran entusiasmo, era notoria la alegría que le causaba tener a su compañero de juegos de vuelta y a un yerno listo para defender su compromiso con su hija menor. - ¡Gracias, señor!, efectivamente tenemos mucho apetito y ganas de ducharnos, pero primero saludare a todos - el azabache entró e hizo una cara de extrañesa cuando vio en la cocina a su amiga de la infancia, pero por ningún lugar veía a la persona a quien más deseaba ver, - ¡Ukyo, hola!, ¡que te trajo por aquí!, ¿como has estado? - pregunto dudoso el joven, - ¡Hola, Rancha!, ¡me da mucho gusto verte!, vine a ver a Akane porque está enferma y como estuve todo el día acompañándola Nabiky me pidió que me quedara a cenar, - ¡te ves cansado Ranma, pero también te vez más fuerte, - la chica de largo cabello marrón explicó el motivo de su presencia pero el ajiazul solo prestó atención a una cosa - ¿Akane está enferma?, ¿que le pasó? - el chico preguntó con preocupación, eso explicaba porque no había visto a su prometida en todo ese tiempo - ¡no te preocupes, hijo, no es nada grave, está agripada y ha tenido un poco de fiebre, por eso está en su habitación descansando, ¡me da gusto que te preocupes por ella! - el señor Tendo lo abrazo con lágrimas en los ojos mientras Nabiki aprovechaba la ocasión para burlarse del chico, - ¡así es, cuñadito!, ¡tu novia está bien, no tienes de que alterarte, pero si tanto te aflije puedes subir a verla! - la castaña rio mordaz - ¡de que estás hablando, no estoy preocupado por ese marimacho!, ¡solo fue extraño no verla aquí viniendo a recibirnos con gritos y golpes!, además no es mi novia, ¡deja de molestarme! - el chico de trenza se volteo indignado por la actud de su cuñada, pero en el fondo solo trataba de aparentar su aflicción, - ¡voy a bañarme, enseguida bajó a cenar! - informó el chico que busco el pretexto perfecto para ir a ver a su amada mientras Nabiki río divertidamente al saber las verdaderas intenciones del joven.

Ukyo por su parte vio a Ranma con nostalgia y gracia, se veía a leguas cuán enamorado estaba de Akane, la castaña tenía bien claro que no tenía ninguna oportunidad de quedarse con el azabache y aceptarlo le había traído pesar pero también tranquilidad, era tiempo de comenzar a buscar a un chico que la viera con el mismo amor con el que esos dos se miraban, pero en el fondo también sentía molestia porque su amigo fuera tan tonto y no aceptará su sentir respecto a la peliazul, - ¡ese bobo!, si supiera todo lo que Akane hace por el no sería tan atolondrado, - sus pensamientos eran crudos pero sinceros, solo ella y Nodoka sabían que la enfermedad de la menor de las Tendo se debia a la extremas condiciones que vivió durante su entrenamiento en las montañas, y que todo eso lo hizo solo para ganar confianza en ella misma, para no perder a su amado ante Shampoo, para cobrar valor y declararle su amor, así como para evitarle una pelea innecesaria a su prometido solo por ser incapaz de resolver su rivalidad con la pelimorado.

Ir a bañarse fue la mejor idea que se le ocurrió a Ranma para poder ver de inmediato a su prometida, lo primero que hizo al subir fue dirigirse al cuarto de la ojicafe para saber cómo estaba, tocó la puerta pero nadie respondió, con cautela la empujó y se dispuso a entrar esperando no causar enfado en la chica, al pasar para serciorarse de que todo estuviera en orden se topo con una escena que lo dejó sin aliento, Akane dormía pesadamante pero con tranquilidad, sus mejillas enrojecidas por la temperatura le daban una apariencia como de modelo de pintura barroca, su pequeña boca estaba ligeramente abierta para respirar y su sedoso cabello azulado adornaba con gracias su rostro, a pasar de lucir un semblante enfermo a Ranma le parecía estar ante un ser casi angelical, la apariencia de la chica embelezo la mente y el corazón del azabache quien se agachó para besar la frente de la chica y susurrarle con ternura - ¡recuperate pronto! - después acarició su mejilla y salió de la alcoba para dejarla descansar, el artemarcialista no pudo sacarse esa imagen de la cabeza y durmio recordando tan bello cuadro, Akane escucho lo que su prometido le dijo mientras dormía y aunque no supo que el chico en verdad estuvo junto a ella, todo lo recordó como un sueño que al día siguiente pensó fue obra de su propio malestar.

Por la mañana todos se reunieron para desayunar menos la peliazul que aún no despertaba - ¡Ranma!, ¿podrías acompañar a Akane donde el doctor Tofu, por favor?, aún la veo débil para ir ella sola pero a mi no va a darme tiempo, si pudieras ir te lo agradecería mucho, - la chica rogó a su futuro cuñado, - ¡ahhh, pues qué le vamos a hacer, no te acongojes, yo la llevaré!, por cierto, ¿desde cuando se enfermó? - el azabache cuestionó, - ayer por la tarde comenzó la fiebre y los escalofríos, aunque los estornudos comenzaron desde antier que regresó de su viaje con la tía Nodoka - la hermana mayor comunicó inocentemente - ¿de su viaje con mi madre?, ¿cuál viaje? - el chico estaba confundido y deseaba saber de lo que hablaban - la semana pasada me llegó una carta de un pariente en la que me solicitaban ir por un asunto personal, yo tenía que asistir pero el viaje era largo así que le pregunté a Akane si le gustaría ir con migo, ella aceptó gustosa pero él día que veniamos de regreso no pudimos escapar de la lluvia, creo que fue a causa de eso que mi niña enfermó - Nodoka intervino calmando las dudas de su hijo, pero Nabiki lo complicó de nuevo solo para hacer sufrir al azabache - ¡si, mi hermana es bastante buena para meterse en problemas¡, ¡primero llega con un ojo morado y después se enferma, se ve que la pasó muy bien durante el viaje! - Nodoka y Kasumi hicieron una mueca de muina ante su hermana, solo a ella le gustaba ver arder el mundo, - ¿cómo que llegó con un ojo morado, de que estás hablando Nabiki?, ¡habla de una buena vez!, - el colérico joven no podía creer lo que decían, ¡alguien se atrevió a tocar a su prometida! y no estaba dispuesto a perdonarlo.

, - ¡esa información te va a costar 1000 yens¡ - rio triunfante la castaña pero Nodoka intervino para poner fin a esa situación que podía echar toda su mentira abajo, y por fortuna para ella, Akane acababa de bajar a almorzar, - ¡calmate ya, Ranma!, no dijiste ayer que no te interesaba lo que le pasara a ese marimacho?, o acaso mentiste y si estas preocupado por ella - la mujer acababa de poner a su hijo contra la pered y este no sabía cómo salir del embrollo, - ¡no, claro que no me importa, es solo que... Bueno veras... Es que no me agrada que se meta en problemas que después yo deba resolver, - se defendió el azabache, - ¡no hay nada que debas resolver!, simplemente fue un accidente, estuve practicando con una sobrina de la tía pero calculé mal la distancia y no pude esquivar su golpe, eso es todo, no sé porque a Nabiki le gusta hacer más grandes las cosas - la peliazul llegó para aclarar el malentendido y matar cualquier incertidumbre del chico - ¡vaya, si que eres lenta y tonta Akane!, ¿para qué te pones a pelear con alguien si sabes que no podrás ganar? - la chica ardió en rabia por el comentario del muchacho, evidentemente el recuerdo de la noche anterior había sido solo un sueño, el verdadero Ranma jamás hubiera hecho y dicho algo tan tierno, - ¡deja de molestarme, no eres nadie para decirme lo que puedo hacer o no!, además ¿no me pediste que me mantuviera alejada de Shampoo?, por eso fui y ya se que soy débil pero en cuanto el compromiso se rompa tu podrás casarte con una chica fuerte como Shampoo o Kodashi para que estés a gusto, - la chica dio media vuelta para dirigirse a la mesa, Ranma velozmente trató de corregir lo que dijo - ¡no Akane, espera, yo no quise decir eso! - y cuando tomo a la joven por el brazo P chan lo mordió con odio, - ¡maldito cerdo!, ¿tu porque te metes? - grito con fastidio el ojiazal mientras golpeaba al animal y la ojicafe lo regañaba, - ¡dejalo en paz, eres un bruto, ya vete a otra parte! -. De nueva cuenta la familia Tendo era testigo de otra pelea entre Ranma y Akane, es la primera vez que se veían en más de tres semanas y ya se estaban matando, Kasumi tuvo que intervenir de nueva cuenta para apagar el lío, - ¡Ranma¡, disculpala, esta cansada y se irrita con facilidad, dime ¿si podrás acompañarla como te pedí? - el chico suspiró y asintió con la cabeza, después se fue a duchar para ir con ella.

- y dime Nodoka, ¿con qué familiar fuiste?, ¡yo pensé que ya no tenías parientes vivos! - La mujer agachó la cabeza en señal de hastío, como si las preguntas de su hijo no hubieran sido suficientes para poner su teatro en riesgo ahora el zopenco de su marido volvía a complicar el asunto, por suerte para ella una persona llegó a calmar las aguas haciendo que olvidarán el tema, - !Ranma!, mira lo que te traje, ¡es un hermoso sostén para que lo modeles! - el maestro Happosai iba corriendo tras una pelirroja que desesperada huía de él, - ¡aléjese de mi viejo asqueroso, yo nunca me pondré eso! - y cuando el hombrecito se disponía a seguir molestándola un golpe sorpresa de Genma lo dejó fuera de combate por un rato - ¡gracias, papá, ese anciano mañoso se metió al baño y me arrojó agua fría para molestarme!, voy a terminar de bañarme antes de que recupere el sentido - ese alboroto fue la distracción perfecta, Nodoka agradecida ayudó al maestro a levantarse - ¡pobre hombre!, ¿está bien? - y el viejo respondió con su doloso tono - ¡porque siempre tratan mal a este pobre que lo único que quiere es dar un regalito? - el dramatismo del maestro era asombroso y tras su mejor acto guiño el ojo a Nodoka para hacerle saber que la situación ya estaba controlada sin que nadie sospechara de él.

- ¿porqué vienes?, ¡no es necesario que lo hicieras, yo podía venir por mi cuenta! - la de cabellera azulada preguntaba inconforme, - ¡vine porque Kasumi me lo pidió!, no creas que yo estoy muy feliz! y ya sé que si quiero puedo regresar a la casa pero antes de que me lo digas te aviso que tu hermana no solo me pidió acompañarte, también me encargo entregarle este postre el doctor, así que aunque quieras no me iré - la chica volteo con enojo, esta vez el azabache había ganado y no podía hacer nada, simplemente siguió caminando ignorando al muchacho hasta llegar al consultorio. - ¡Hola, doctor Tofu!, ¿cómo ha estado? - la peliazul saludo, - ¡ahhh Akane, Ranma, estoy muy bien, que gusto verlos!, ¿que los trae por aquí? - amablemente saludo el médico, - Akane está enferma, parece que está resfriada o con gripa, ayer tuvo fiebre toda la noche - explicó el azabache - ¡ya veo!, ¡ven Akane, pasa para que te revise! - después de una buena exploración y valoración médica el galeno dio el diagnóstico y el tratamiento a seguir, - tienes una infección en las amígdalas, lo mejor será que guardes reposo y sigas lo indicado en la receta, aun estás débil así que no hagas muchos esfuerzos - la piliazul tomó el papel y agradeció la atención, - ¡si, doctor, así lo haré, muchas gracias!, - antes de irse el joven habló - ¡casi lo olvidaba!, doctor, Kasumi le manda esto! - el hombre tomó el recipiente y como por arte de magia cambió de semblante y de tono de voz - ¿que Kasumi me lo envia?, ¡ahhhh! ¿no les parece maravilloso, verdad que es fabuloso?, - el médico se diridia a los prometidos pero en realidad hablaba con una osamenta de plástico con la que luego comenzó a bailar tirando todo a su paso, - ¡Akane, lo mejor será que nos vayamos! - comentó el chico y la joven concordo, - ¡si, vámonos ya! -.

Una vez fuera del consultorio los prometidos se encaminaron al dojo - ¿cómo te sientes?, ¡te vez pálida! - el joven de trenza interrogó, - ¡estoy bien, solo me siento algo cansada pero mañana estaré mejor!, los antibióticos me ayudarán, por cierto ¡gracias por venir!, - la peliazul sonrió y siguió su paso, - ¡no hay de que¡, aunque siento que aún estas afiebrada, - agrega el joven mientras toca la frente de la ojicafe, - ¡ni hablar!, por hoy lo mejor será que no camines - Ranma toma entre sus brazos a Akane y se va saltando entre los tejados para hacer más rápido su camino, Tendo no puede creer lo que su prometido esta haciendo, sus mejillas se encienden y al quedarse sin palabras por la acción, se abraza del cuello del azabache y guarda todas sus palabras, el artemarcialista agradece a la chica con una sonrisa el no golpearlo por su atrevimiento, si por el fuera haría esas acciones todo el tiempo para protegerla, pero es tan difícil actuar de una manera más tierna y menos infantil, ella nuca lo permite, sin embargo cuando Akane le agradeció por ir con ella hizo que las cosas fueran más simples, aveces desearia que así de fácil fuera siempre y que tanto ella como él fueran más accesibles al tratar con el otro.

En casa todos los están esperando, los muchachos explican lo que el galeno les dijo y comienzan a cenar, al final Ranma y Akane suben juntos para ir cada uno a su habitación, - ¡oye, marimacho!, ¡que tengas buena noche, espero que te mejores! - el ojiazul sonrrie y la ojicafe contesta, - ¡tu también descansa afeminado!, mañana tienes clases, pero no te preocupes, aunque yo no vaya te haré el favor de despertarte para que no se te haga tarde - feliz de oír eso Saotome agrega, - ¡te lo agradeceré mucho!, ¡hasta mañana! - ambos se despiden y se van a dormir.

Al despertar Akane se dirige al cuarto de su prometido para cumplir su promesa de levantarlo, al entrar a la pieza encuentra a Shampoo en paños menores metida en la cama y abrazando a Ranma - ¿que significa esto?, ¿qué haces tú aquí, eres una descarada? Y tú bobo, ¿porque no haces nada?, ¡te odio!, - los gritos de la chica despiertan al ojiazul que al ver a Shampoo a su lado tiembla de miedo y de un salto se hace a un lado, pero la china lo atrapa y le alcanza a besar en la mejilla, aunque la intención era alcanzar su boca - ¡Ranma, que bueno que has vuelto, te extrañe mucho!, ¡te amo!, - desesperado el artemarcialista intenta quitárse de encima a la pegostiosa mujer mientras le grita a Akane que no malinterprete las cosas, pero esta azota la puerta tras de sí y se va echando fuego por los ojos y las orejas. En su alcoba, la peliazul hiperventila por el mal momento que le han hecho pasar, la enfermedad y el golpe animico la desmoronan, ayer su estado de salud había mejorado consideradamente, la fiebre había sedido y pudo dormir animosamente, pero tras el shock de hace unos momentos la fiebre la invade de nuevo haciéndola caer en un breve desmayo. Minutos después la menor de las Tendo despierta en su cama y Kasumi está a su lado - ¡Akane, que bueno que despiertas, nos preocupaste mucho!, Ranma te encontró en el piso y te acomodo en la cama, esta afuera esperando poder pasar a verte, esta muy apenado por lo que Shampoo hizo - la hermana mayor trataba de abogar por el chico, pero la testaruda chica no cooperó - ¡no quiero verlo, dile que se vaya! -, con tristeza la castaña suplicó - ¡pero Akane, al menos deberias escucharlo! - con cara de capricho la peliazul se voltea y se tapa la cara - ¡no quiero! - sabiendo que no ganara, Kasumi se retira y al salir le explica a Ranma que su hermana no quiere verlo y que por ahora es mejor dejar las cosas así, colérico el joven se va gritando - ¡niña boba!.

Cuando la ojicafe se sentía liberada de la presión de hablar con su prometido, una vocesilla la cuestiona - ¿porque no lo escuchas? - asustada la chiquilla voltea para toparse con Happosai, - !recuerdas que a cambio de entrenarte me prometiste hacer las pases con Ranma? - unos ojos penetrantes y acusantes la miran fijamente, - ¡maestro, ¿cómo entró? - la sorpresa era palpable, - ¡por la ventana!, ¿por dónde más?, ¿crees que solo Ranma sabe hacer eso?, - el rostro femenino se pinto de un carmín intenso - me enteré de tu enfermedad y por el alboroto de hace rato supe lo de Shampoo, por eso vine a verte, ¡pensé que habías ido a entrenar para enfrentarla!, ¡no entiendo porqué tu estas aquí encerrada en tu alcoba sufriendo ansiedad mientras ella está allá abajo acosando a tu prometido!, dijiste que ya no permitirías que estas cosas pasarán, ¿es acaso que tienes miedo de pelar con la amazona? - un grito lleno de irritación resonó, - ¡claro que no le tengo miedo a esa mujer!, estoy segura de ganarle!, es solo que me siento un poco cansada aun por mi afección - los ojos inquisidores del anciano se clavaba como agujas, - ¡eso puedo entenderlo!, prefieres dejar su pelea para cuando estés más recuperada, ¡lo que no puedo entender es que permitas que Shampoo te siga afectando, te enojaste con Ranma en lugar de tratar de poner las cosas claras, mi alumno es medio retardado pero ha pasado toda la mañana tratando de quitárse a esa mujer de encima, no es como que se vea feliz de que ella esté presente, ¿porque simplemente no le dices a Saotome lo que sientes para que reaccione y pueda poner un límite a sus otras novias? - Akane miró al maestro con el mismo miedo con que vería a un fantasma, - ¡decirle a Ranma lo que siento?, ¿hacer publicos mis sentimientos?, ¿eso es lo que esta insinuando?, ¡ahhhhhh no quiero, mas bien no puedo! - el nerviosismo de la peliazul se respiraba en la habitación - ¿y porque no puedes? - el maestro no se iría de ahí sin respuesta - ¿porque no quiero escuchar a Ranma burlarse de mi al saber que estoy enamorada de él, puedo entender que no sienta lo mismo que yo, nadie está obligado a amar a alguien, pero sería muy doloroso sincerarme con el y que solo se ría o sienta lástima? - una sonrisa pícara creció en el hombrecito, - entonces sí es miedo, pero de otro tipo, ¿y que te hace estar tan segura de que tus sentimientos no serán correspondidos o se reirá de ellos? - atacó el viejo - ¡bueno, pues porque Ranma siempre se la pasa ofendiendome y molestandome! - el rostro de la chica ensombrecio - ¡si, es verdad que el cabeza dura siempre hace eso!, ¿pero acaso no haces tu lo mismo? - esas palabras pusieron en jaque a la ojicafe que quedó muda ante tal aseveración, - ¡me doy cuenta que mi entrenamiento sirvió muy bien para ayudarte a vencer en los combates, pero no sirvió para darte confianza en asuntos del corazón, en vista de que ahora eres mi alumna más querida te ayudaré una vez más, pero ¡no olvides tu promesa de lo que harás si le ganas a Shampoo - la mujer de cabellera zafiro trago saliva y asintió con la cabeza, - te voy a dar un elixir que aprendí a hacer durante mi estancia en China, es un brevaje especial que sirve para dar confianza a las personas y también te ayudará a reponerte de tu afección, es una bebida muy difícil de hacer, por eso lo cuido como oro, pero te daré en poco de el, ¡esperame, Akanita, no tardó! - el maestro se fue a toda velocidad a buscar el famoso elixir y al regresar encontró a una peliazul muerta de miedo, no sabía cómo resolver todo ese embrollo pero confiaba en el maestro y estaba dispuesta a beber su supuesto remedio, ¡ya que más podía pasar!, - Akanita, ya volví, este es el elixir, ¡tomalo sin miedo! - la joven obedeció las indicaciones del maestro y sorbio hasta la última gota de ese extraño líquido, afortunadamente no sabía mal, al contrario, era dulce y sus aspecto agradable, - ¡bien, ahora es cuestión de esperar a que el brevaje haga su efecto!, tu decide si te quedas aquí o bajas a desayunar con los demás, todos están reunidos, Ranma no pudo ir a la escuela porque Shampoo nunca lo dejó de azorar y Nabiki se quedó para tomar fotos comprometedoras que después pretende vender, - el anciano insitaba a su alumna a salir de ese encierro - ¡bueno, Akane, yo me retiro, nos vemos después! - de un salto el maestro salió por la ventana dejando a una chica pensativa que de inmediato se arreglo y bajó a ver a su familia, al llegar al comedor corroboró que lo dicho por el anciano era verdad, todos estaban en casa y la odiosa de Shampoo no dejaba a Ranma en paz, al verla llegar todos se sorprendieron y pensaban que era cuestión de minutos para que la ojicafe golpeara a su prometido y lo mandara a volar por los aires, pero en lugar de eso la muchacha se sentó en campañia de su cerdo y pidió su almuerzo - ¡claro, Akane, en un momento te lo traigo, que bueno que ya te sientes mejor! - exclamó la mayor de las Tendo Mientras atendía a su hermana.

Soun y Genma ya se habían levantado para ir a jugar a otra pieza de la casa, en la mesa ya solo se encontraba la peliazul disfrutando sus alimentos, Nabiki y Kasumi estaban a un lado cuchicheando sobre cuanto más soportaría su hermana antes de destruirlo todo, recargado en la pared estaba Ranma siendo fastidiado por Shampoo y Nodoka contemplando todo desde la cocina, a ella no le agradaba para nada la china, pero prefería que Akane fuera quien se deshiciera de ella cuando llegara el momento. - Ranma, ¡te amo!, no huyas de mi, dentro de poco seremos esposos! - la encimosa peli morado no dejaba de decir esas letanías mientras se abrazaba del chico e intentaba besarlo, - ¡ni lo sueñes!, ¡ya dejame en paz, por tu culpa no pude ir a la escuela!, ¿no tienes algo que hacer como atender el Nekohanten? - el azabache buscaba algún pretexto para que la chica se fuera, ya estaba cansado de huir de ella, - ¡no, para nada!, mi abuela y Mousse se están haciendo cargo de todo, al contrario, ella me dijo que debía pasar mas tiempo con tigo porque cuando nos casemos debo atenderte muy bien! - la china sonreía sinica y con expresión sensual, - ¿y de donde sacas que me voy a casar con tigo?, ¡yo no he aceptado nada! - reacciona colérico el azabache, - ¡no por ahora, pero lo harás en cuanto venza a Akane y las amazonas lleguen!, no te resistas airen, ¡seremos muy felices, ya no tendrás porque soportar a esa chica violenta y poco femenina, solo es cuestión de días para que ocurra, ella no tiene el valor para enfrentarme porque sabe que perderá pero en algún momento tendrá que dar la cara! - Shampoo presumia con petulancia y presunción mientras una aura de ira crecía en la menor de los Tendo antes los ojos expectantes que se encontraban en el lugar, - ¡eso no ocurrirá, Akane no peleará con tigo para arreglar un asunto tan tonto, nosotros no somos de tu tribu! - al oír esto la peli morada reaccionó con enojo por el desprecio y en un desplante de celos utilizó como arma la debilidad de chico de trenza, - ¡ah no!, ¿y porqué no ocurrirá?, ¿acaso amas a esa chica agresiva?, ¡si es así yo me iré! - de nuevo la vieja artimaña hacia caer en la trampa al orgulloso joven, - ¿como se te ocurre que yo puedo amar a esa niña tan fea?, ¡lo que pasa es que... - de nueva cuenta el oji azul se quedó callado al darse cuenta de lo que decía, - ¡lo sabía¡, Akane es la última mujer que podrías amar, pero eres tan cortes que te preocupas por ella debido al compromiso que te impusieron, ¡pero descuida, eso pronto acabará!, ¡tu y yo seremos muy felices, Airen! - tal parece que se repite la escena que hace tiempo tuvo lugar en la clase de literatura que dio origen a todo este drama, otra vez Ranma trataba de enmendar sus palabras, ya solo faltaba la peliazul gritándole lo mucho que lo odia y mandando a visitar la luna y por la energía que la ojicafe desprendía no faltaba mucho para eso, hasta p chan estaba preocupado por lo que ocurriría, - Shampoo, ¡aguarda, yo no me refería a eso, no mal intérpretes, Akane es... - las palabras no pudieron terminar de salir del azabache porque un golpe en la mesa y la imagen de esa chica dirigiéndose hacia el le helaron la sangre mientras los espectadores observaban con cautela - ¡Akane!, espera yo no pienso eso de ti, solo es una brom... - Shampoo se sentía complacida por lo que creí pasaría y Ranma se en concho con un rostro de terror esperando el golpe de su prometida, la chica de ojos almendra llegó hasta el azabache y en un acto que jamás nadie pudo imaginar se abrazó del cuello del artemarcialista y lo beso en la boca tendida y despreocupadamente para asombro de propios y extraños. Ranma se volvió de piedraante la inesperada acción de su prometida, P chan sacó los ojos mientras ríos de lágrimas lo recorrían, Kasumi espetó - ¡vaya! -, Nabiki no dejaba de grabar un material que valdría su peso en oro, Nodoka de un salto de felicidad llegó hasta el lugar y Shampoo después de quedar perpleja y boquiabierta comenzó a echar fuego - ¡Akane!, ¿qué crees que haces?, ¿porque siempre nos interrumpe?, ¡sueltalo! - en tono burlon y con ironía Tendo respondió - ¿qué clase de pregunta es esa, acaso no ves lo que estoy haciendo? - la rabia podía verse en la mirada de la china que de inmediato se lanzó al ataque contra la peliazul, pero Ranma que acababa se regresar en sí por el shock de hace unos momentos retrocedió con su prometida en brazos para esquivar los ataques de la peli morado mientras Akane cómodamente se mantenía abrazada al chico y con sorna recargaba su cabeza en el pecho del azabache como diciendole a su oponente "es mío y solo yo puedo disfrutar de este privilegio" y para hacer enfurecer más a su contrincante, la peliazul vuelve a besar con pasión a su prometido, quien nuevamente se petrifica y consternado cae al piso casi desmayado, Akane solo ríe y se disculpa con el chico abrazándolo y una pelea guardada por mucho tiempo comienza — ¡Akane!, ¿que te has creído, porque besaste a mi Ranma?, — ¿porque quise, algún problema? — ¡eres una tramposa! — ¡ayy mira quien lo dice! — ¡no puedes besarlo, el es solo mío¡ — ¡ah si!, ¿donde lo dice?, ¿y cual es tu queja, crees que solo tu puedes jugar sucio? — ¡Akane!, ¡eres una cobarde!, besas a Ranma pero no te atreves a enfrentarme, ¡besarlo no evitará que lo pierdas ante mi en combate — ¡no lo bese por eso, lo hice porque me gusta y no perderé nada ante ti! — ¡claro que lo harás y lo sabes, por eso temes enfrentarme! — ¡Yo no te temo en lo más mínimo Shampoo!, ¡si tanto te interesa ese combate hagamoslo de una vez! — ¡eso me parece perfecto, hasta que te decides! — ¡ven, Shampoo, sígueme, pelearemos en otra parte, no quiero que destruyas mi casa! — ¡como quieras! —.

Las dos chicas salen del dojo Tendo y llegan hasta un parque cercano para iniciar su combate, - ¡hasta que por fin tienes el valor para encarar esta pelea, Akane, aunque no te servirá de mucho, de todas formas perderás! - la china trataba de intimidar a su oponente, pero esas palabras ya no surten efecto en ella, - ¡si, como tu digas!, ¡ahora a pelear! - la de ojos zafiro contesta y espera el primer ataque. Ranma que acaba de recobrar la conciencia pregunta a los demás donde está su prometida, al recibir la explicación sale corriendo de la casa como alma que lleva el diablo al igual que Ryoga en forma de cerdo, intentan llegar para evitar ese inminente combate.

!Más aventuras los esperan en el siguiente avance!

Es todo por ahora, espero les haya agradado, la verdad es que es bastante complicado plasmar las ideas de mi cabeza en un texto pero seguiré intentándolo, la imagen de portada surgió pensando en la escena donde Akane besa a Ranma tomándolo por sorpresa, más o menos imagino así se vería.

Gracias por sus comentarios y estrellas, eso me anima para terminar este fic, yo dije que la historia solo contaría con dos o tres capítulos como máximo pero como verán no será así, tampoco esperen muchas partes pero si tendrá unas cuantas más.

De verdad espero que les esté gustando o por lo menos entreteniendo esta trama, agradezco que sigan mi historia y nos vemos en la siguiente entrega, ya saben que leo sus comentarios y sugetencias, ¡los quiero!.

#seduccionensanvalentin

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