Los personajes utilizados en esta historia no son mios, son propiedad de Rumiko Takahashi, los uso a manera de entretenimiento sin fines de lucro y con el único fin de narrarles este fic que participa en el #GranConcursoFanficsIyR.

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El radiante sol que brilla en el despejado cielo de Nerima ilumina las calles mientras las personas transitan presurosas por los alrededores, los preparatorianos lucen más ajetreados que de costumbre, los exámenes de ingreso a la universidad estan apuntó de comenzar y eso tiene locos a los estudiantes que comienzan a mandar solicitudes de ingreso a las diferentes instituciones superiores a fin de encontrar un lugar en alguna de ellas.

Akane y sus amigas no se quedan atrás, ya han realizado los trámites correspondientes y dedican gran parte del día a estudiar para la difícil prueba, Tendo siempre se caracterizó por ser buena estudiante pero desde hace unos días su atención se ha visto diezmada y sus compañeras lo notan.

— ¿Te ocurre algo, Akane?, te ves preocupada y no estás poniendo atención — interrogó una de las chicas.

— ¡Estoy bien, Yuka! Solo me distraje un poco, nada de que preocuparse — intento justificarse la peliazul con abrumadora pena.

— ¡No puedes engañarnos¡, te conocemos, estás preocupada porque Ranma no ha mostrado ningún interés en la universidad, ¿verdad? — Sayuri arremetió y Akane sonrojó al instante, era embarazoso que sus amigas se percataran de su decaído ánimo.

Para la peliazul el hecho de que su prometido no se ha dignado a solicitar aplicar para alguna escuela la tiene molesta, no porque intente controlar su vida sino porque le inquieta que el cabeza dura esté planeando usar su "no ingreso" a la facultad como el pretexto perfecto para romper el compromiso pero sin pensar en las consecuencias de semejante decisión; si él quiere romper el convenio no necesita hacer más que pedirlo, dolería mucho, pero ella lo aceptaría sin cuestionar, lo último que desea es que el ojiazul no estudie por su causa.

La pequeña jovencita esta hecha a la idea de que Ranma nunca ha estado feliz con la decisión que sus padres tomaron de unirlos contra su voluntad, no podría culparlo por eso, después de todo ella tampoco lo estaba, eso de arreglar un matrimonio sin el consentimiento de los implicados no solo es pasado de moda, también es arbitrario y brutal, en un inicio lo aceptó solo para evitar una pelea innecesaria con su progenitor, además estaba segura de que en un plazo no muy largo todos se convencerian de que aquello era una locura y darian por terminado el arreglo al notar que la relación no llegaría a ningun lugar porque no se puede forzar el amor entre desconocidos, la menor de las Tendo tenia razón en ese punto, pero jamás consideró lo que ocurre cuando el tiempo vuelve cercanas a esas personas.

Apesar de que la de ojos avellana estaba convencida que no se puede amar a alguien impuesto y menos cuando los novios tienen el peor carácter del mundo como en su caso, en el fondo sabía que el asunto no marchó como ella lo había planeado, no solo ya ha pasado más tiempo del que consideró duraría la broma, ahora para pesar suyo tenía que aceptar que se había equivocado rotundamente, ella si se enamoró de ese majadero y altanero muchacho con el que la comprometieron, si hoy tuviera que casarse con él aceptaría gustosa aparentando lo contrario, pero con dolo reconoce que en el otro punto si había acertado, estaba claro que el de trenza no sentía lo mismo y por esa sencilla razón si Ranma pidiera dar por terminada aquella relación ella aceptaría su petición, después de todo lo ama tanto que si ya una vez sacrifico su vida para salvarlo en la pelea contra Saffron, con mayor razón no podría obligarlo a vivir con alguien que no ama.

Por la tarde de regreso a casa la ojicafe finalmente decide tomar al toro por los cuernos y contra todo pronóstico encara al azabache para cuestionarle la razón de su nulo interés por estudiar el siguiente grado.

— ¡El viernes es el último día para aplicar a alguna universidad! — comentó la peliazul con seriedad.

—¡Si, lo sé! — respondió el de ojos zafiro con extrema tranquilidad irritando a la muchacha.

— ¿Como puedes estar tan calmado?, ¿acaso no quieres entrar a alguna carrera? — gritó enfadada la joven.

— ¡Asi es!, no tengo interés en estudiar mas — aseguró el de trenza mirandola fijamente con una mueca de hastío.

— ¿Estás loco?, estudiar es muy importante para tu futuro - agregó enérgica.

— No sé porque te importa tanto lo que haga con mi vida, tu si aplicarás, eso es lo que importa — las facciones del chico se endurecieron.

— ¡Ya sé que no estás feliz con nuestro compromiso pero no necesitas hacer esto para romperlo!, basta con que lo pidas y yo aceptaría, no tienes porque sacrificar tus estudio — arremetió la ojimarron y dió media vuelta para marcharse.

— ¡Eso ya lo sé! — soltó de golpe el azabache consternando a la chica.

— ¿Entonces porque lo haces? — duvitativa preguntó Akane.

— ¡Porque quiero dedicar mi vida a las Artes Marciales!, No tengo tiempo para la universidad, ya he perdido bastantes horas de entrenamiento con todo esto de Jusenkyo, la boda, la preparatoria, si no puedo curarme de mi maldición espero al menos ser el mejor en mi disciplina — la respuesta parecía buena pero había logrado romper el corazón de la pelizarco.

— ¡Perdon por ser una carga! Por mi culpa perdiste tu última oportunidad de ser normal! — los ojos avellana se cristalinizaron.

— ¡Prometo no volver a retrasarte!, yo se que esa boda fue un fastidio, nadie pensó en lo mal que te sentías por la destrucción de los estanques y encima te querían unir con migo, ¡que tontería¡, ¿quién podría fijarse en alguien como yo?, no te preocupes, yo me encargaré de que nunca vuelvan a molestarte con eso — Tendo rió sincera forzando las lágrimas a quedarse en su lugar.

— ¿Qué?, Akane espera, yo no... — balbuceo Saotome pero su acompañante se marcho lo mas rápido que pudo.

Ranma intentó alcanzar a su prometida pero no lo logró, ella no había entendido nada, quería explicarle que él estaba harto de la situación pero no de su compañía, lo que deseaba era nunca mas verla en riesgo a causa su debilidad, por eso estaba decidido a dedicar su vida a volverse más fuerte para así protegerla, aunque fuera siempre a su sombra pues lo que ella dijo de que rompería el compromiso si se lo pedía reflejaba lo mucho que Tendo quería librarse de aquel peso, no era para menos, por su causa casi pierde la vida y un grupo de locas la persigue todos los días para retarla, todo por no tener el valor de alejarlas de ella.

Para el azabache todo lo que Akane dijo era entendible excepto una cosa, eso de "quien podría fijarse en ella" era una tontería, ¿acaso le estaba tomando el pelo o algo semejante?, pensó, él esta completamente enamorado de ella, como no estarlo, su cercanía, su terquedad combinada con dulzura, su valor y sobretodo su belleza, es más, desde que la conoció toda la escuela la perseguía y luego aparecieron un montón de pretendientes contra los que tuvo que pelear, Kuno, Ryoga, Sentaro, Gosunkugi, el descarado de Shinnosuke y la lista sigue, pero se sabía culpable de la percepción de la chica, siempre tratandola mal para encubrir sus sentimientos, como desearia poder decirle que cuando llego al dojo Tendo a causa del mandato impositivo de su padre estaba que ardía de furia por semejante osadía, pero cuando la vió por primeta vez no pudo evitar sentir atracción por ella, su carácter era espantoso pero irradiaba algo único que le hizo tomar todo con calma, esperar a ver que ocurría ya no parecía tan mala idea.

Los días pasaron, Ranma no aplicó para ninguna universidad y su relación con Akane era cortante, la muchacha estaba molesta y a la vez desepcionada, mitad por la terrible decisión que a su juicio había tomado el de trenza y mitad porque estaba segura que aquello representaba su ruptura definitiva, los resultados de los exámenes de admisión pronto llegarían y tendría que tomar la decisión de irse a estudiar a otro lado o quedarse en la escuela local, la primera opción significa terminar con el compromiso, la segunda implica quedarse por él, pero eso último

ocurriría sólo si su prometido muestra algo de interés en ella, pero por como avanza todo esta más segura de que marcharse es la mejor decisión aunque se le destroce el alma.

Falta una semana para la graduación, al regresar de la escuela Kasumi recibe con alegría a la pareja.

— Pasen a comer, la mesa esta servida — indicó la hermana mayor.

— ¡Qué bien, muero de hambre! — espetó Ranma y la castaña rió divertida.

— ¡Akane!, llegó este para ti — la mujer le entregó un par de sobres.

La peliazul tomó las cartas, eran los resultados de los examenes, había sido aceptada tanto en la Universidad de Tokyo como en la de Kyoto, tras unos minutos de mirar los papeles los guardo sigilosamente y su mirada se torno triste, el momento de la separación cada vez estaba mas cerca y eso la compunje; a la distancia el de trenza mira todo con discreción consciente de lo que ocurre.

El día de la graduación llegó, sorpresivamente Saotome accedió a ir con Akane al baile de graduación sin que nadie tuviera que amenazarlo, hasta Nodoka quedó perpleja cuando su hijo acepto sin peros la petición de ir al evento como pareja de su prometida, todos celebraron con emoción pensando que la relación entre ambos ha mejorado. Por la tarde Nabiky llegó de visita, por ser la noche de graduación de su hermana decidió faltar ese viernes a la Univerdidad para verificar si el rumor que llegó a sus oídos de que su cuñado sería pareja de Akane por voluntad propia era verdad.

Todos en el dojo están contentos con la gala, Ranma porta un smoking negro que su madre compró gustosa para él, con su atlético cuerpo y buena estatura luce apuesto y gallardo para la noche, la señora Saotome felicita a su hijo por graduarse y mientras le da consejos de como comportarse la menor de las Tendo bajo radiante sorprendiendo a todos con su porte, sobretodo al chico que la esperaba en la sala.

— ¡Akane, te ves hermosa!, como me gustaría tener 300 años menos para ir con tigo — exclamó el viejo Happosai ante la mirada afilada de Soun.

— ¡Te ves muy bien, hermanita¡ — decían Nabiky y Kasumi.

— ¡Mi bebé ya es toda una mujer! — sollozaba el señor Tendo.

— ¡Ranma, cuida muy bien a tu prometida, mira que linda esta hoy! — ordenó Genma abrazando a su esposa.

— ¡Si, papá, como digas!, el chico contestó con su habitual desgano y cara de pocos amigos.

— ¿Nos vamos ya, Akane? — exigió el joven.

— ¡Si, voy! — la pareja partió dejando a la familia llena de júbilo.

La arte marcialista porta un vestido negro corte sirena con un cinturón de pedrería, tirantes delgados y una pequeña abertura en el costado de la pierna izquierda, un discreto maquillaje resalta su rostro mientras una diadema con diseño floral rojo adorna su cabello, su imagen es exquisita y el azabache no puede evitar mirarla de una manera poco respetuosa aunque claro está que jamás le faltaría.

— ¡Te ves muy bonita hoy! — con extremo nerviosismo el de ojos zafiros logró expresar.

— ¡Tu también te vez muy bien! — sonrió feliz la de cabello índigo al recibir el cumplido.

Todo iba marchando muy bien, mejor de lo esperado, en la escuela todos los aclamaron como la mejor pareja, después de tres años los curiosos estudiantes finalmente pudieron ver a Tendo y Saotome tratarse de una forma más parecida a como lo harian unos novios, eso emocionaba a todos, no había peleas entre ellos ni pretextos para justuficar su cercanía pero la esperadisima escena terminó cuando Ukyo llegó.

— ¡Ramcha, al fin llegas!, uyyy luces muy guapo —.

La castaña robo al chico y Akane quedo sola en compañía de sus amigas que enojadas recriminaban el proceder de la cocinera y del artemarcialista que simplemente se marchó como si su acompañante no existiera, después de pasar un rato junto a la ojicafe Yuka y Sayuri la dejaron sola para ir junto a Hiroshi y Daisuke pues llegaron con ellos, Gosunkugi que se percató de la acción no dudo en acercarse a Akane con intensiones de bailar aprovechando la desaparición de Saotome, pero para desgracia suya Ranma retorno para alejarlo de su prometida.

La ojimarron mostró su descontento y se alejó de su prometido cuando este se acercó nuevamente a ella, el azabache sabía perfectamente la causa del enojo de la chica y actuando como rara vez lo hacía se disculpó.

— ¡Siento haberme ido!, Ukyo es una gran amiga desde la infancia — trato de explicar el de cabello carbón pero la peliañil seguía sin mirarle.

— ¿Sabias que se irá a estudiar alta cocina a USA? — :narró el de trenza.

— ¿Qué?, no lo sabía, ¿cuando lo decidió? — la chiquilla lo miro con duda.

— Parece ser que la familia de Konatsu es de buena posición, apesar de que su madrastra no es muy amigable vieron en Ukyo una gran prospecto para ser algo así como una kunoichi de la comida, le ofrecieron pagar sus estudios si ella accede a darle una oportunidad al chico - relató el azabache.

— ¿y ella aceptó?, eso es raro, siempre ha estado loca por ti — la peliazul pregunto sorprendida.

— Hasta donde sé, Konatsu ha pasado todo este tiempo cortejandola y por lo visto la atención exclusiva ha sido del agrado de Ukyo — concluyó el artemarcialista.

— ¡Como entenderás no la volveré a ver en mucho tiempo, por eso necesitaba despedirme de ella, el lunes ira al dojo, quiere despedirse de tí y de tu familia — el confundido rostro de Tendo cambió a uno mas amigable.

— ¡Ven, bailemos! — era extraño escuchar a Ranma pedir semejante cosa, pero sin cuestionar pasaron a la pista.

La velada fue agradable, como si un milagro hubiera ocurrido los chicos se abrazaron para la ultima canción, nadie sabe de quien fue idea cerrar el evento con una vieja pieza americana titulada Only You pero el resultado fue memorable, el ritmo lento y la romántica letra crearon una atmosfera perfecta al rededor de los prometidos, la fiesta terminó y los estudiantes regresaron a casa, la pareja se miró agradecida de que ningún desastrozo ocurriera como siempre sucedía en situaciones parecidas.

Aquel día quedara guardado en el recuerdo de los chicos, de eso no hay duda, pero todo llega a su fin y la realidad regresa a su privilegiada posición, Tendo tenía muchas dudas y aquel parecía el momento idoneo para aclararlo todo, rompiendo el encanto decidió preguntar algo que la inquietaba y necesitaba saber.

— ¡Ranma!, la proxima semana debo inscribirme en la universidad a la que iré y yo... — la de ojos zarco intentaba saber si a su prometido le importaba donde estudiaría pero una rara respuesta la hizo callar.

— ¡Hoy no quiero hablar de eso, Akane!, ve a la escuela que quieras, es decisión tuya — interrumpió el joven acabando con las intenciones de la chica.

El lunes pasó tal como el azabache narró, la cocinera se presentó a la casa de los Tendo para despedirse, después de tanta complicación Akane y Ukyo terminaron con su vieja rivalidad y quedándose con los buenos recuerdos sellaron su eterna amistad, el jueves llegó pronto y la castaña partió a la lejana nación en compañía de Konatsu, su semblante era de felicidad y esperanza.

Esa misma tarde la de ojos avellana tomaría la decisión final acerca de la escuela a la que asistiría, tenía planeado hablar con Ranma y se dirigió al cuarto donde su prometido duerme desde que Nodoka vive con ellos, atenta toco la puerta pero al no recibir respuesta ingresó esperando no causar molestia.

— ¡Ranma!, necesito preguntarte algo impor... — calló de golpe al percatarse que Kodachi estaba sentada sobre la cama del azabache con una alfombra de petalos negros a sus pies.

— ¡Qué decepción!, eres tú — cínica reprochó la gimnasta.

— ¿Qué haces tú aquí?, eres una atrevida — Akane sentenció iracunda.

Una estridente carcajada fue la respuesta a la queja — ¡Vine a buscar a mi querido Ranma!, así que vete —.

— ¿Como puedes ser tan descarada? — Tendo cuestionó.

Sin imaginar lo que ocurría Ranma subió a su alcoba por algo de ropa limpia para cambiarse después del baño, su sorpresa fue grande cuando comenzó a escuchar conocidas voces femeninas discutir en su cuarto, rápido se acercó para verificar que todo estuviera bien, le preocupaba que la rosa negra pudiera herir a su prometida, pero al llegar sin camiseta mostrando su bien delineado cuerpo la paciencia de Akane explotó, primero porque ella misma quedó atonita al contemplar semejante físico que desde hacia tiempo le causaba estremecimiento y después porque supuso que el chico se presentaba así para atender los deseos de la azabache.

Cuando Kodachi vio al joven entrar de esa forma tan provocativa se lanzó de inmediato a los brazos del muchacho pero antes de que pudiera acercarcele la ojicafe intervino tajante y violenta.

— ¡Eres un desvergonzado!, Ranma Saotome! — sin dar tiempo a nada la peliazul tomo por sorpresa al de trenza y de un buen derechazo lo saco volando por la ventana aterrizando en el estanque del patio conviertiendose en la vuluptuosa peliroja.

La gimnasta corrió en su ayuda pero al ver salir del agua a la chica que tanto detesta su somblante se tornó sombrío y atenta escuchó los reclamos que se dirigían los prometidos.

— ¿Qué te pasa, Akane, porqué siempre me atacas sin escuchar mis explicaciones? — gritó enfurecida la de cabellera escarlata.

— ¿Y todavía preguntas porqué?, ¡eres un mal agradecido! — la de ojos avellana le miró con desdén.

La azabache contempló todo con horror — ¿de donde saliste tú, que le hiciste a mi amado? —.

Tendo que estaba hecha una furia respondió sin miramientos, — ¡despues de todo este tiempo sigues sin entender que ella y Ranma son el mismo! —

Kodachi incrédula atacó — ¡Callate!, deja de decir tonterías —.

En ese momento Genma convertido en panda corrió en dirección de su hijo que ya había salido del estanque y le roció agua caliente convirtiéndose en varón ante los atonitos ojos aceituna de la gimnasta y después mostró un letrero que decía "ella dice la verdad", artero como siempre empujó a su vástago para que cayera de nuevo al estanque y emergiera la sensual cabellos de fuego.

—¡Papá!, porqué hiciste eso, vas a pagarmelas — Ranko corrió tras su aprovechado progenitor.

Kodachi consternada se negaba a aceptar la verdad — ¡Tú no puedes ser mi adorado Ranma!, tú eres un fenómeno, ¡no quiero volver a verte! — las lágrimas empaparon la cara de la jovencita que se marchó presurosa saltando por los tejados sin mirar atrás.

El artemarcialista quedó impávido por las palabras de la mujer, no le importaba que se alejara de el, eso lo hacia feliz, lo que alteró su paz y aplastó su orgullo fue escuchar la palabra "fenómeno" eso contra lo que siempre luchaba la de ojos aceituna se lo dijo sin consideración pese a siempre decir que lo amaba, Akane que presenció todo y observó la desolada reacción de su prometido se acerco a él en una intención completamente contraria a la de du rival.

— ¡Ranma, tu no eres nada de eso que ella dijo! — luego le miro con ternura y le sonrió con la misma sinceridad y simpatía con que lo hizo el día que la conoció.

— ¡Me gustaría estar solo un rato¡ — pidió devastado.

— ¡Si, entiendo! — Tendo movió su cabeza en señal de aceptación y con mirada gacha se alejó.

— ¡Akane! — Le llamo el azabache y ella le miró con atención.

— ¡Gracias! — Saotome rió y de un salto se marcho, la ojimarron quedo mas tranquila y no se dijo nada hasta el día siguiente.

En el fondo el de trenza se sentía mal por la forma cruda con la que fue llamado pero aquel hecho le hizo estar más seguro de las decisiones que tomaría y para las que no habrá vuelta de hoja.

Por la mañana Kasumi encargó a su hermana despertar a su prometido para ir a desayunar, ella lo hizo gustosa pero su alegría se ve frustrada de nueva cuenta, esta vez gracias a Shampoo que como de costumbre estaba cómodamente metida en la cama del de trenza, sin pensar e irritada por esas molestas acciones vacío la acostumbrada agua fría sobre el chico que dormía plácidamente sin saber nada.

Como era de esperarse Ranma se levantó convertido en Ranko echando fuego por la deleznable acción, al cobrar sentido de lo que ocurría su mal humor aumentó, no solo tenía que lidiar con las precipitadas actitudes de su prometida, sino tenía debía soportar a esa horripilante cruatura peluda en que la pelimorado se convertía al tocar el agua fría.

— ¡No, aléjate, déjame en paz!, ¿porqué me tiene que ocurrir esto? — se cuestionaba el muchacho con notoria molestia.

— ¡Ya me tienen harto!, ¿porqué demonios me arrojaste agua fría —se dirigió a Akene

— Y tú ¿qué no entiendes que odio a los gatos?, con esto lo único que consigues es que te deteste — sus palabras hacia Shampoo nunca habian sido más duras y sinceras.

— ¡Yo sólo vine a decirte que ya esta el desayuno! — increpó molesta la peliazul.

— ¡No tienes que hacerlo!, para qué entras, "entran" (enfatizó) en mi alcoba, estoy cansado de que nadie respete mi privacidad — Ranma se quebró y soltó lo que no dijo en mucho tiempo.

— ¡Yo sólo...! eres un idiota, yo sólo quería platicar con tigo, ¡nunca más me vuelvo a preocupar por ti! — el rostro de Akane se descompuso en matices de tristeza y enfadado.

— ¿Qué diantres era tan importante que no podías esperar a más tarde? — retobó hastiado el de ojos de mar.

— Mañana es mi inscripción, simplemente quería preguntar que opinas... — una tajante voz le cortó.

— ¡Otra vez con eso!, porque no entiendes que esa decisión es sólo tuya, vete a estudiar a donde quieras, no me importa — Akane se hizo añicos pero la desfortuna continuó.

— ¡Así que chica violenta al fin se va!, ya era tiempo, ¡Shampoo es la ganadora! — la peli morado aprovechó la pelea de ellos para transformarce.

Ranma solo hace un gesto de desaprobación pero permanece estoico a las provocaciones de la china, sin embargo Akane se marcha lo más rápido que puede, lo que tanto había temido al fin sucedió, el azabache ha dejado claro que no le interesa lo que ella haga de ahora en adelante, lo que significa que su compromiso ha terminado y debido a la partida de Ukyo y el desprecio de Kodachi el camino queda libre para la vencedora que imagina es Shampoo.

Después de la bella noche del baile de graduación que compartió con Ranma, la peliazul albergaba la esperanza de que ser la menos talentosa de todas las prometidas no era impedimento para que el de trenza la viera con el mismo amor con que ella lo hace, pero aquel tonto sueño ha sido enterrado por el mismo chico que quiere, sin más que hacer ha tomado la decisión que deseaba no escoger, mañana se inscribirá a la Universidad de Kyoto, hablará con Nabiky para que le alquile un cuarto compartido con algunos otros estudiantes, ella tiene tantos amigos que no le será difícil hacerlo en cuatro días y finalmente el lunes partirá rumbo a su nuevo destino dejando atrás los recuerdos amargos y a su gran amor.

Por la tarde la oji café al fin vuelve a casa, ya ha llorado lo suficiente, al llegar nota que el azabache no esta presente pero tras el incidente de la mañana opta por no buscarlo corriendo el riesgo de irritarlo más, desconsolada apenas logra consiliar el sueño esperando sentirse mejor al despertar.

Con la llegada del alba Akane se levanta desganada, baja a desayunar y se percata que aún no hay rastros del muchacho, fingiendo indiferencia continua su rutina ante los afligidos ojos de Soun, Genma, Nodoka y Kasumi, ellos presenciaron todo y saben lo que representa, sin embargo prefieren no emitir comentario alguno para no azorar a la pobre chica. Al terminar el almuerzo envía por correo electrónico los papeles que requiere para la escuela, tras ser aprobados recibe cita para concluir la inscripción de forma presencial, serena comienza a empacar todo lo que necesitará llevar y aunque faltan 10 días para empezar con las clases ella quiere partir lo antes posible, cree que eso le ayudará a mitigar la tristeza; decidida llama a Nabiky para que arregle lo de su hospedaje sabe que extrañará su casa pero necesita un poco de espacio para replantear cosas.

El tiempo corrió veloz, el momento de partir ha llegado, la hermana mediana ya tiene todo listo para la llegada de Akane, pese a no estudiar en la misma Universidad su noviazgo con un chico influyente como lo es Tatewaki le permite encontrar lo que necesita en el momento que quiera, la artemarcialista se despide de todos mientras su padre sube su equipaje al taxi que la llevará hasta la estación del tren.

— ¡Tía, tío, voy a extrañarlos, espero verlos pronto! — Nodoka y Genma le abrazan con pesar. .

— ¡Hija, estoy muy apenada, Ranma no se comportó como debía, nisiquiera se digno venir a despedirse de ti — relató con dolo la mujer.

— ¡Si, mi hijo es un tonto!, espero algún día puedas perdonarlo — aladió el hombre calvo.

— ¡No se preocupen!, nada de esto es su culpa, simplemente él y yo no estabamos preparados ni somos compatibles — les dijo con dulzura la de ojos avellana.

— ¡Hermana, cuidate mucho!, cualquier cosa no dudes en llamar — amorosa la castaña le abrazó.

— ¡Si, Gracias¡ — la futura universitaria recalcó.

— ¡Ah, y otra cosa!, no seas tan dura con él, Akane, recuerda lo que a tí te costó despedirte cuando el fue a Jusenkyo — Kasumi trato de apasiguar la mente de la osca chica.

— ¡Lo sé, no te preocupes!, no lo odio, con que el este bien y sea feliz con Shampoo es suficiente — contestó resignada la peliañil.

La dulce ama de casa intento explicar más sobre eso pero la ansiosa chica no se lo permitió y sin mas se fue con su padre a abordar su tren, en la estación Soun no pudo evitar derramar un mar de lágrimas por la partida de su hija más pequeña pero debía cumplir con la promesa que le hizo de no hacer pesada su despedida temporal, asombrosamente el patriarca nunca tocó el tema de Ranma ni lo del compromiso, parece que al fin entiende que esta vez lo mejor es dejarla escoger su camino, una vez dadas las últimas recomendaciones el tren inició el viaje a Kyoto, durante el trayecto la de cabellos zafiro suspiro tratando de asimilar todo, realmente le dolio que el cabeza dura no estuviera para despedirla, después de todo lo que vivieton juntos suponía era lo mínimo, ella nunca le hubiera odiado por decidir acabar con el compromiso, pero tendrá que asimilar irse sin verlo.

— ¡Ya basta!, tengo que ser fuerte, estoy segura que en cuanto las clases comiencen todo mejorará —Se animaba la chica.

Por fin el viaje concluyó, antes de bajar la hermosa chica suspiro decidida a dejar en ese tren todo lo que le acongojaba y decidida inicio su marcha hacia la dirección que su hermana le mandó, distraída caminó un poco y fue cuando escuchó la voz que por tanto tiempo iluminó su vida.

— ¿Porqué tardaste tanto, Akane?, ¿acaso te perdiste? — el azabache estaba a unos cuantos pasos de ella con esa cara pícara de siempre y una maleta.

— ¡Ranma!, ¿qué haces aquí? — interrogó Tendo completamente sorprendida.

— ¡Esperándote claro está! — Saotome contestó con seriedad.

La ojimarron no entendía nada y el de trenza dandose cuanta de eso procedió a explicarle, el se sentía harto del estancado estado de su relación, la falta de privacidad, las constantes intromisiones de las otras prometidas, la presión familiar entre muchas otros factores habian acabado con su paciencia, estaba cansado de todo eso pero no de ella, eso jamás, para él era impensable amar a otra mujer después de todo lo que habían compartido, sin embargo estaba seguro de que en Nerima jamás podrían estar en paz, el mejor ejemplo fue la boda fallida, todos estaban anciosos por verlos casados pero jamás le permitieron sopesar la destrucción de los estanques y el miedo que sintió al casi perderla, antes de unirse en matrimonio por obligación él quería declararle su amor por convicción, no como la última vez cuando lo hizo al creerla muerta, si tan solo le hubieran dado tiempo para eso las cosas hubieran sido más sencillas.

Lo primero que Ranma necesitaba era saber que Akane nunca más estaría en riesgo por su debilidad, por eso decidió dedicar toda su atención a su disciplina marcial, alejarla no era una opción, la ultima vez lo hizo y el ejercito de Saffron se encargó de llevarla, además no era eso lo que deseaba, al fin entendió que en ningún lugar estaría mejor protegida que con él, también necesitaba disolver el grupo de pretendientes que constantemente les acosaban, Ukyo fue la primera, por servsu mejor amiga le resulto cruel decirle que jamás podría amarla pero ya no estaba para miramientos, al principio la chica lloró desconsolada y reacia intentó contradecirlo hasta que el azabache le hizo la pregunta que cambió todo.

— ¿Acaso no tienes sueños? ¡Realmente estás dispuesta a sacrificarlo todo por alguien que no te ama!, ¿que harás cuando veas atrás y no tengas nada? —.

Aquello hizo reflexionar a la chica, ella siempre soñó con ser la mejor en lo que hacia y por enfrascarse en su pelea por Ranma habia dejado de cumplir sus metas, includo se conformo con las migajas de una amistad que jamás llegaría a más, en ese momento Konatsu apareció con su gran esfuerzo por conquistarla y todo lo demás ya es bien sabido.

La noche del baile fue clave porque entendió que necesitaba estar con Akane pero lejos del dojo, el estaba dispuesto a decirle que optara por ir a Kyoto y que podía acompañarla, pero recordó que Soun no lo permitiría si no se casaban primero, eso lo estresó y a la par se presentó Kodachi con su habitual talento para desesperar, nunca imagino que verlo convertirse en mujer fuera la clave para deshacerse de ella, pero lo sucedido no solo alejó a la rosa negra, también le confirmo que solo Akane podía amarle tal como era, para ella no habia un fenómeno, lo unico que existía era él en cualquier faceta y eso lo alegro porque comprendió que debía reparar el daño que le causo a su prometida durante todos esos años en que se la pasó insultandola.

Por ultimo Shampoo fue la que mejor logró complicarle la existencia al grado de sentir miedo de que dañara a la menor de las Tendo, sus locas acciones de chantaje ya lo tenían cansado pero el sentimiento de amistad que guardaba por ella le hacían contenerse, pero aquel día en que Akane la encontró metida nuevamente en su cama provocando otra confrontación fue la gota que derramó el vaso, de forma poco común Saotome utilizó el cerebro para idear un plan usando su enfado a su favor y aunque sabía que dañaría a la peliazul al gritarle que se fuera a estudiar a donde quisiera porque no le importaba lo hizo para orillarla a marcharse de Nerima, lo siguiente era enfrentar a la amazona.

— ¡Por mucho tiempo he soportado tus arrebatos, tus atentados contra Akane, tus trampas de magia e incontables hechizos, todo por el gran aprecio que guardo por ti y tu abuela, pero no más! — la actitud del chico asustó a la china.

Para cerrar ese capítulo Ranma encaró a Cologne, le expuso lo mismo que a Shampoo y por fin declaró sin tapujos su amor por la de ojos avellana, nunca la dejaría y les quedaban dos opciones, preservar la inmensa amistad que los unía o aguantarse a las consecuencias, la primera reacción de la pelimorado fue convertirse en gata para atacarla pero su bisabuela la detuvo.

— ¡Es todo Shampoo!, te dije que siempre te apoyaría en tu lucha por Ranma siempre y cuando el no mostrará voluntad por ninguna pretendiente, pero también te advertí que si el se decidía por otra tu pelea terminaba ahí, siempre guarde la esperanza de que el sentimiento que escondía por esa chica Tendo se quedara asi, pero como no ocurrió, jamás permitiré que te cases con alguien que no te ama, eso arruinar tu vida — evidentemente Shampoo se negó a obedecer pero Ranma estaba libre de cualquier obligación con ella y se lo dejo claro.

— ¡Solo te pido que nunca nos retires tu amistad! — el de ojos zafiro y Cologne se abrazaron fuerte y la promesa quedó sellada.

Despues de contar la impresionante historia la piliañil quedo boquiabierta intentando hilar una frase.

— ¡Solo un detalle me faltaba arreglar, el más importante de todos, tú! — le comentó.

—¡Yo! — interrogó temerosa.

Ranma le narró como después de arreglar todo con Shampoo aprovechó para hablar con Soun una noche mientras todos dormían, el hombre que se veía seriamente preocupado, con el reciente altercado entre el y Akane, la abrupta decisión ella irse a Tokyo asi como la dura facción en el rostro del chico le hacían esperar lo peor.

— La idea de comprometernos fue cosa suya y de mi padre, nunca nos tomaron en cuanta y aunque siempre han soñado con vernos juntos pareciera que hacen todo lo posible para que eso no ocurra — arremetió con crudeza el de ojos azules.

— Ranma, yo... — buscaba escudarse el de bigote.

— Debe saber que amo a su hija como a nadie pero si nos quedamos aquí ustedes jamas dejaran de entrometerse, por eso debo arriesgarme por la ultima opción que queda para salvar esta relación — increpó el azabache.

— Me iré a vivir con Akane a Kyoto, solo ella y yo, gracias a Nabiky y Kuno ya tengo un lugar como instructor en la mejor escuela de Artes Marciales de esa ciudad, podré pagar cuentas y tendrá la tranquilidad de que su hija estará segura — concluyó el joven.

— ¡No puedo permitir que vivan juntos sin estar casados!, estaría mal visto — recriminó Soun.

— ¡Peor es comprometer a las personas sin su consentimiento!, hagamos un trato, si usted acepta yo firmaré mi promesa de casarme con ella en cuanto termine la universidad sin lugar a cambio de parecer — la idea era bastante buena.

— ¡Siendo de ese modo no puedo negarme, eres un Saotome y faltar a tu palabra seria una deshonra! — el hombre rió lleno de felicidad y accedió a la petición.

Akane quedó perpleja, aquello era un sueño, resulta que todo fue planeado por el, se sentía emocionada, confundida, incredula y feliz al mismo tiempo.

— ¿Y bien, aceptas vivir con migo, ser mi novia y prometida oficialmente? — preguntó el Ranma

— ¿Porqué me elijirias si soy tan poco femenina y nada virtuosa?, ¿Esta es una de tus bromas? —contestó con molestia la jovencita.

— Eso lo dices por mi culpa pero no es verdad, para mi siempre fuiste tú pero me costaba reconocerlo — increpó

— Solo tú eres tan leal para dar tu vida por mi, solo tú me amas con o sin maldición, solo tú diste tu mayor esfuerzo para ayudarme a encontrar la cura, solo tú me brindó una sonrisa al llegar a Nerima y ha soportado mis defectos, diste luz a mi mundo acabando con la soledad, solo tú lograste cambiar algo en mi y hoy se que conocernos no fue una casualidad, tu eres mi destino y te amaré siempre — Ranma la miró fijamente y estiró su mano para saber si ella aceptaba su proposición.

— ¡Para mi también has sido siempre tú! — Akane correspondió el gesto y lo besó.

Por fin después de tanto tiempo ambos chicos marcharon juntos hacia un nuevo comienzo lleno de aventuras, amor, pasión y muchas esperanzas en el futuro.

FIN

Me da mucho gusto terminar esta historia justo a tiempo para celebrar el #GranConcursoMundoFanficsIyR, sinceramente cuando me invitaron a participar no tenía ni la mas remota idea de que escribir porque he estado corta de tiempo y con muchas ocupaciones, fue escuchando música mientras realizaba unas actividades que la idea surgió al escuchar Only You de los Platters (¡bendita sea la música!), espeto que les guste esta historia escrita de último momento pero hecha con mucho cariño y dedicación, les mando un abrazo y prometo tratar de es ribir una historia para la temática de este mes. Cuídense mucho, no olviden apoyar mi pagina de facebook Sasil Yagami dejando un bonito like.